N O V E N A

A N U E S T R A S E Ñ O R A D E L

CAMINO..C O N U N A B llE V E N O T IC IA

d e \ i A parición d e a q u e fb i

D ev o ta , y M ihgroiÀ I m a g e n » ^

D I S P U E S T APor d P. Fr. Francisco d“ Jf-

sm Aduria, Trinita.no Descalzo.

P an in lon a : Ìln la Iìn p jcf;ta d e lü5 Hcrcdci Oj de Mai lii.ci.

1 / l lu s tr ts im s S eñ o r D o n G d sp 4r d e M tra n d Á y A rg a iz . , O b ispo d t T a m p lo n a , con ced e 4 0 . d i4s d e lu d u lg e n c ta 4 to d a s la s p r > o n a s ^ u e h ic ieren e s ta TÑovena d e la n te d e a lg u n a im a g ín d e n u e str a S e - ¿ o r a d e l C A M IL O *

P jg . 5

§ > < ) W ( > < S

B R E V E N O T I C I A de aqucfta devota y M i­

lagrosa Imagen.

N ’O hay d u d a ,q u e à h sT ra d íc - _ cioiK'S se k s ha de dar credito ,

corno decia San Pdbio escribiendo à los Thssaloniccnscs: f r a t r t i , ten ete J r a d if l io n e s , quando no las hace sos­pechosas la conjetura de inpj»ina- rias. Por eso afirmò S. J iu n C h ry - sostom o , explicando 1.« r c i i i i a s palabras del Apostol : E.>i J iM d ià io ; n ib ii (¡UXTAS m ^ itH s ; porque do tiene

A 2, quc

que bruxulear el discurso (dÍcc-cl Santo ) quando Ja T radiccÍcn nos-Io asegura. Confieso , que mucÍias ve­ces se suele alim iar por T radiccion una cosa , que solo se fundam enta en la quiircrica loquaddad del vu l­g o novelero ; y esto no es T ra d ic - c io n , s’no s jó cry fá voluntaria his­toria de la í^itástica idèa del popu­lacho. M udias de estas inconside­radas vagatebs se han experimenta­do en la Aparición de N u estr a Se - ■ñóRA DiL C a m in o ; y n o q u c tic n - d o yo delinquir en la aborrecible Dota de a p ü c .y fo , pasaré en silen­cio las indiscretas fandeces,que al- j^unos han public. do de esta p rcd i- j;iosa In iJ^en , fingiendo Ja H isto - jia à medida de su genio , y no co- m o debiera ser escrita. D tsprícian- ^ o p u c s cthm ddadcs£ábulo^as, y no

que-

tqueriendo privar ì los fieles devotosc e esta Soberana R eyna de ac uelloc u e m e parece ser T radición de Pa- dres à h ijo s , referiré la Aparición <ie esta portentosa Im a g e n , con íó r- m e i la narrativa q4.ie de ella hacc el dotìisim o P. Juaii de Villafañe, quien con nimia proligidad , y estu­d ioso cuidado sabe investi.a r , y es­cribir estas m aterias, aunque con ra­zón se queja de la c<>nci‘ion en n o ­ticias , po r carencia de inílrum entos.

R efitre eílc D odisim o Padre, que aquesta devota Imagen se veneraba en una Erm ita de la C iudad de A l- f í r o , y que el llamarse N u fst r a S íñoRA DEL C am ino cs , porque la t a l . rmica està à la marj^tn de un C am ino que guia à la C iudad. I g ­norase m antigncdod ; no se sabe •quiui I«i hizo jH! c o n o vino à A i-

A I f i -

faro. E l año cíe 1478 fiie aparecida en la Parroquia de San Saturnino de la Ciudad de Pamplona , sirviéndole de T ro n o una Viga , que hoy dta se registra pioxim a al A ltar m ayor de d id ia Iglesia. M irase estampado ccmí L etras de oro en la supra escrita V i­ga el ya referido a ñ o , en que m e­reció Pamplona u n favor tan apre- ciable. N o sabemos tampoco, quien fue el prim ero que m ereció ver tan lleno de gloria el T em plo de San Sa­turnino. C orrió la voz por Pam plo­na , y vinicion sus Ciudadanos à ve­nerar el prodigio. Súpose despues, que esta Divina Señora se desapare­ció de su Erm ita de A lfaro, y am a­neció Sol herm oso en Pam plona, es­cogiendo por cuna oriental de sus luces la Parroquia de San Saturnino, donde desabrochaudo el pecho de

sus

sus soberanas influencias, enciende sin consumirla à aquelU Ciudad d i­chosa. Deleytasc afortunada Pam ­plona con las luces de aqueíte Sol M ariano ; y vive guftosa en la fogo- Sfl esfera cíe tan soberanos incen­dios : Luce d eU ñ o r : m e terret fulgor^ que dixo el S^'mbólico del Aguila,

' quando buela a la Solar flamante P y - ra , para beberle i el Sol el raudal lum ino‘0 de sus Rayos*

Divulgóse en Alfaro 'a auíéncia de esta prodigiosa Imagen , y viéndose desheredados los Alfjrenses de la Perla, no i c contentaron con la con­cha. A las vivas, y exquisitas diligen­cias , que hicieron , para saber do n ­de se les ocultaba aquel inestimable T h c ío io , supieron com o aquel Sol M ariano , que se h vii puesto cii A ltaro, rayaba P h tb o lucido en Paai-

" i P 'o-

piona , do n J? c o to c ío en e í Ccnrc <lc su carrcra , era la admiración paf- niosa de U Noble Pompelona. Vinie­ro n gozosos los de A !b ro á U C o rte de N avarra , y apenas vieron la Lnagen , la confesaron por suya. Probaron la iden.idad ; y no pu- d icndo los de Pamplona con tra ítir- l o s , se lallevaion á AlKuo. Pero; O á lú tu d o d í v i i u r u m , q-iam m cow pre- h tn [ ib t iu j u u t in d i í u c) s ! M as, que fuerza, d i¿o , tiene lo hum ano, cuan­do es dispo.'iciün de io Divino ? N o bien havia tom ado tierra ( permíta­seme decirlo asi) aquesta Peregrina Im agen en Aifaro , quando levan­tando velas su cariño , y poniendo la proa en Pamplona , arribó segun­da vez cargada N ^ve, de ío n g t por^ t.v:s p M tm !u:im , á aquesta C iudad dichoia. BoAiosc á aparecer en U

mii»

. 9IBÌ ma Iglesia y Viga , que havia an­tes cscogido pata T ro n o » y por Pa- Jacio c'^ia Soberana K t> na. K econo- cicion los de Alíáro el pio<fjj;ic repe­tid o , y deiiitieron trisies d é la em ­presa, M uy gozoios y a leg tcsq u c- <iaron lüs de Pamplona con ia pací- -fica posesion de aqccl inestimable T esoro , cantando en la venida de lan soberana Princesa el m agnihco biason de poseerla : t t \ e n i e n t t ,

que dice G am betto , explican­do Jos Pompclonenses con las voces, com o las Aves con sus p 'cos, su re­conocida gr. titud à tan D ivina Se­ñ o ra ; y volando aligeres coiazones à el T(.mpJo de Saturnino, obsequia­ban admirack'S al Ave Níaria del Sol mas soberiuo con itvercnciales tos : C i r t ñ e , q 'u v o lu tr e s , u t S o ln ir.i- tcn íu r A x e m , { x u lta u t is o u u T iu n t .que ¿dui Pizinclo, P rc-

IOPreciso se me hacia el referir Ics

milagros de esia Soberana Rcynaj pe­ro siendo voz co m ú n , que es mi­lag ro sa , no he encontrado libro en que se mire estampado algún p ro ­digio : culpabili^imo descuido en co­sa que excita tanto i la m ayor de­voción de qualquiera Imagen : R e­feriré d o s , à los quales no es mi in­ten to se les dé mas fe , que la piado­sa creencia de los heles. Confian de­votos los vecinos de aquesta Im pe­rial C iudad en una C ru z de plata, con la q u a l, es tradiccion , fue apa­recida Nuestra Señora del Cam ino: Llevase esta C ruz por las casas de los enferm os, y alentándoles la de­voción que tienen Ì esta piadosisi- ma V irgen, esperan de su am paro, y fivor t i alivio de sus enfcTmeda- des. E íle es une. E l o tio e s , que

ios

las Coronas que adornan las C ab e- 23S de esta soberana R eyna , y de su preciosisimo H i jo , que en m s brazos se oftenta N iño tie rn o , las cm bio defde Indias un devoto de esta portentosa Im agen. Sucedió, que alterándose el Elemento de! M a r , y viendo , que flu<ftuaba entre m onta­ñas de espumas el Navio que condu- cia estas preciosas alajas, pareció pre­ciso el aliviarle la c a i^ a , para que no pereciera en el G olíti. Arrojóse al M ar m ucho de su transporte , y en ­tre las otras riquezas que padecie­ro n la desdicha, le cupo esta des- ’nxia à una cax ita , en que venian as referidas Coronas. T ra ía un so­

brescrito la caja , que deci^ : P ^ rd tiu esiT Á SeñoTá d el Car,:ixo , v e m r jd d en U P A iroq u ta l de S a n S aíurnino de f a m f h n d j pero no permitiendo U

Vír-

l ìV irgen , pcrecîcse la dadiva q ae c o » tan to afetìo le ofrecía su devoto, con un portentoso m ilagro conduxo el M ar ]a caxa à las coscas de Canta­b ria, Sacaionla dç las aguas ios mo« radoresdel P u e r to , en cuyas ame­nas riberas tom ó fondo aquel Baxel deleznable: notaron lo que decia el referido sobrescrito , y la rem itieron aP am p lo n a , dando aviso de lo q u e havia sucedido. Por lo que tiene da adm irable el prodigio , era merece­do r de que se huviera auteníicado, o à lo menos en algún rollo ò pro ­tocolo apuntado , para que no lo fepultára en su tyrano panfheon el olvido : pero la incuria ò descuido d e aquellos perezosos tiempos nos cjuiso privar de este beneficio. Mas ] j gravedad , cordura , ciencia, y p;udenci.I juicio de algunas conde*

CO'

.Mcoradas personas, 3 quicücj havien- dosclo p reg u n tad o , á mas de refe­rirlo e! UocÜisimo Villafañe, que pa­ra mí bascaba, m e lo lu n asegurado de cal m odo , que me dan cci tc ra mora! de fer veridico el portenru. N o quiero pasar en silencio o tro prodigioso M iU gro , que he o ído referirá ios ancianos de aq u e íb Im ­perial C iudad. Dicen , que no ha n iueho tiem po que su ced ió , que quando (acaban cu Procesioii à esta D c\o fiiÍm a Im agen , salía una Es­trella en ei C ie lo , la qtie todos ad ­m iraban , y veían: g y rjb a lum inoía por el Pavcllon^ C eleste , en lo que rodeaba benehca Maria por la T ie r­ra. E'^to es lo mas ciei co , que de I a H i í l o i i a ,y M ilagros de esta Sa- b e ran i Em peratriz he podido ave­riguar«

Per-

Permítaseme añadir i efla narrati­va las rvfiexiones, que he form ado sobre otra trad icc ion , que leo en t i Com pendio de los Annales d s Navarra.

A el Glorioriosisimo M arty r d e C hiirto San Saturnii.o , pri­m er O b ííp o He T olosa , debe Pam ­plona la Catlìòlica Fè de que blaso­na , y gloriase con razón m adre de su prim er O bispo , è hijo San Fer- fn n , aquel gloriosifsim o M arty r del Señor , que conhrm ò con su sangre la Càtfiolicidad de su Patria«

- Obsconada vivia Pamplona con la* opacas tinieblas de los G entílicos ri­to s O írccia innanes, y obscenos ía - crilicio^ à los demonios tn los men­tidos Dioses que adoraba ; lastim ado Dios ( no eltrañen el te rm in o , por­que ú sjbe la Deidad arrepcpnrsdí

far-

Voenitet m e fe c ijfe h o m in e m , que di­ce c lG en esis , cambien podiá h sti- inarse de vèr caminar por las caligi­nosas íom brasde la Id o la trij á una C iudad , que havia de serlum inoià A ntorcha de I» F è ) diipuso su culta providencia , que viniera Saturnino ( s iy à antes '^an Pablo no Ics havii predicado la Fc dei C rucificado , co ­m o piadosamente conjciuran las H iílo rias) para que con bU piedica- cion Apostòlica conviniera los G en ­tiles de Pamplona. L n tió el Sjbco O bispo en tila Imperial Ciudad , y halló ocupados à iodos sus Coite«' sanos en celebrar obsequiosos gen- tilicas fiestas à Diana ; tenia esta fin­gida Deidad erigido su T em plo en m edio de la C iu d id . Es tradiccion recibida , com o lo dicen Jos Annalcs de Cile R c y n o , ser eJ mismo q .’c

hoy

fcoy registramos dcdicado á 5an tuim ni) M artyr, A ndábanlos Pom - pcloncnscs Gesuilcs celebrando las Fiestas ele la Diosa por un bolque dcC yprtses . que- hdcian un anivela­

d o , y frcMKitiso cordón por la ex­terior cireiir.ícrcncia d tl T em plo , siivieiidolc com o pages d t ai;tC'alj» D e 'cc llab j jun to al T em plo i in l l>c- re b y n io : a este AiLol elc( gio Sa- tu.iiiiU) pata pteclicarles la Fe i aquellos Idólatias c itp o '. Desde aoüi enipezó a disparar de su ApoG- tó .c a aijaba Catholicak flachas Sa» ti:i'n?no, A rJía en e l pecho del S in- to el d< seo de ver cov.vcitida a Pani- plcna á la Fe de Jcsu C h t i i to , y re­bosaba centellas el fuego que le abrasaba íu pecho : Jj^ms A-:ií^rn/ A t€ uíí¡t.nr, que dice A g u s tiro ; por- <5’je quam o era m ayoí la agitación

de

d e su voluntad inflamada, se aum en­taba mas la llama de aquel amoroso E tn a v D u m a ^ it u r , au^retur^ que del am or cantò O vidio, Heridas de )os rayos de este Pyrausta a.noroso aquellas Gcniìlicas Alm.ìS , rindie­ron quarenta mil su cerviz à el sua­ve yugo de la Ley Oiviiia. L ogrò lan à su guilo el tiro Saturnino, quc correspo.KÜeron à U felicidad dv' los principios, el verse colm ar de copio- ibs frutos los fines ; porque à breve espacio de tiempo sem iiò la Impe­riai Pamplona tan Catholica corno ella m ism a, encendiendo de sus id o ­latras fombras U'v flaaìigcras luces de la Fè mas verdadera ; ub um brìs c U - H ijr ,q u e d ix o P izinelo; pudiendo decir con el Fenix: que si perccia vic­tim a desgraciada en las Gentílicas obfcuridadcs, era para vivir mas d i-

iá cho-

j Schcsa en la claridad verdadera de la Religión Chriüiana.

Vá tuiem os à Pamplona tan Cato* lica , c)ue ignora q u itn pueda exce­derla en la mas firme creencia de los Mysteriös Divinos. Paió à chrUHani- 2ar à honra y gloria de N uestra Se­ñora del Cam ino aquel magnifico T em p lo de Diana. Üs mi piincipal in ten to m aniícíbr los prtíagios fe­lices , qi:e aun entre las sombras del gen tilism o , indicialwn , havia de 1er venerada esra Soberana im agen en Pamplona. S>mboliza l iana en to ­d o à nuestra Señora del C am inr;por- qiie i i esta D tv d ad mcktid.. era hi­ja de Ju p ite r , Pudre de todos los D iolcs , com o íoñarcn los Poetjs; M aria Santií^ima por gracia se ape­llida Hija quei ida d tl E terno Padre. Fh)£ió k Eihiiicidad ^bulo^a dcDia-

na*

flíjhsver sido tan perreíftaraente cas­ta , que n o d ió m otivo su cauta vir­ginidad à el menor descuido de im ­pura. Fue tan virginalmente pura mi Señora , que coníesaudo la Iglelia à M aria por M adre verdadera del m e­jor H ijo que ha nacido de m uger, la a d o ra , y reverencia Virgen antes, y despues del p a r to , repugnando i su candida pureza el mas leve indicio de pecado, aunque sea original. Es Diana la Luna en el Cielo , y es mi- Dulciftima Señora Luna hermosa del Im pireo : pa ut U m .t. G loríase Diana íer herm ana del Planeta mas lucido,que alum bra en la tachonada E^f¿ra ; y es M aiia dignísima M adre de el mas eminente P h tb o , que ilu ­mina à los Cielos, y à la tierra. Aque­lla 1 eydad fingida , que en el C c- leíle cam p o d c E ltre l .a^ U lL m ib a a

Ü 1 ios *

los Gentiles L u n a , era en la tierraDian.i; porque creian los m oradores de T h e iaü i , que quando eclypsaba el iucido E iquadron de fus rayos, se daba à el ocio del paseo por las deli­cias de la cam paña, para favorecer à los mortales con sus benignos infiu- xos. Pero Nuettra Señora del C am i­n o , Luna hermosa de la G loria , y

, peregrina D iana de la tierra, íabe fa­vorecer à sus queridos devotos, re­creándose delicioiamente con ellos: 4 e lU 'u nte<t esse cum f il i i s hotnhum^ ^ n eclypsar el G lorioso Efquadron * e sus amoroías clemencias.

U n Borque de Cypreses guarnecía frondolam ente gallardo à el decan­tado T em plo de Diana. N o carece d eM y ste rio : voy à descubrirlo. A un copado Cypres com paró el Ecle- íiasticoá M alia : S U u t C jp r e fu s , Es

* es-

este árbol sym bolo de la conílancia. Asi Jo escribió Plinio. H aym o aña­dió , que era mas c o n ll nte y perenne que el bronce : pírew- titor. N o quiero metei me en pleytos, y dejo en su tradiccion ̂ cada uno; porque li Nueftra Señora del Cam ino vino de g racia , y fue de justicia, fu- po bolver á Pam plona á conftancias de su am or , acreditando con sus fivores fus h o n ra s , y haciendo eter­nas alabanzas de su nom bre á expen­sas de repetidos b e n e f i c i o s no- m n q u e tu u n ija u d e< q u e m a n tlu n ty que can tó O v id io , m ereciendo sus de­votos la inm ortalidad en Ja g lo rti por intercesión soberana : h ac im * fí orta les redere [o la p o te f i , que dijo A udeno. A quel herrrosoT erebyn to que dice la H illoria descollaba jum o ai T em plo , es sym bolo t¿mbicn de

M a-

M arta ; y hacie»do C athedra de èl Saturnino, les leyò cl prim er tra tado de Fc à los Gentiles de Pamplona:fuc m uy copioso t i f i u to , com o lo deja­m os referido ; pero no lo estraño, quando à la sonibra del A rbol M a­riano, les d itìò la primera lección de Fè el Apostol de Pamplona ; lueeo (]ueda evidenciado, que aun entre u$ gcnrilicas íbmbras rayaban presagió­las luces d e q u e seiía venerada en Pamplona esta soberana R eyna. Sea­m o s ', p u es , todos m uy devotos de Nuestra Señora del Camino- reveren- ciemosla, y adorémosla com o à M a­d re y Protectora nuestra , que aísi logiarem os cl amparo y íocorro en nuestras necesidades, y nos ferá feliz Cam ino para llegar à la G loria, i'elix , tjuégfncri hm xam fiib tártara

U f ! o . l i L celo sfticiu (s fc r S f T/4 , J’tfr- t 4 , R o ta i Wí*

M O D O D E H ^ C E R E 5 T 4 NoVfWii.

E l tiem po mas o p o rtu n a p.ira haccr està N o v e n a , fon los

nueve dias antes de la FcftiviJad de cfta gran R eyna , ó cii los d iis de su O i^ a v a rio , añadiendo uno , * para que feairnueve. T am bién sC' p o d rá hacer en qualqu iera t ie n i- ’ p o que fuere v c lu n tad dtí la p e rr sona que tenga devocion de h a ­cerla. P ero si p o r algun ac^dciw e, ò p o r e t r a c a u sa , no fueren Ì<>s d ias co n tin u ad o s , no por eso- se perder* cl m èrito de la Kovciw;

r

y para que se alíente mas la d e ­voción , fe adv ierte , que si U g ra c ia , ó favor que se ha de p e ­d ir á cfta Señora p o r m edio de esta N o v en a , im portare la b rev e­d ad , -como la íalud de un enfer­m o , el feliz fuceso de un p a rto , ó. el buen éx ito d e la lentencia de im p ley io , y o tra s cofas á cfte lu o d o , íe pod rá hacer la N ovena en nueve h o ras de el m ifm o día e n que u rg iere la b revedad , au n -

no vayan feguidas las horas.E l lugar en donde íé pod ra

l\ace»- efta N ovena , no es nece- ía rio que íea la Ig lesia , ó C api­lla de efta Soberana E m p era triz ; aunque lera lo m e jo r , í¡ no h ii-

YÍ€.

viere obílaculo para e llo ; y asi, bailará que la pcríbna que h ii- v iere de hacerla , la rece en su ca fa , ten iendo delante alguna E s­tam pa de N u e s t r a S f í o r a d e l C a m in o ; y para hacerla , p ro ­cu re ju n ta r la familia de fu Casa, si fer p u d ie re ; pues de efta ma* ncra fe le tributar*^ m a y o r cu lto á cfta piadosísim a M adre.

L a prim era diligencia q u e h l d e p ro cu ra r poner la perforia quo- hu v iere de haccr efta N ovena, fe-i rá lim piar fu conciencia p o r i m i confesion de fus culpas y j^c*¿ d o s , y rec ib ir la Sagrada C o m u ­nión ; lo q u e p odra hacer , s i fuere posible , en cl d ia p rim e -

ío

ro del N ovenario , 6 en o tro q u a l- qu icra de los n u e v e , p ro p o rc io ­nándolo to d o a m edida de fus obligaciones. Se p rocu rará cm* plear en estos dias en efp iritua- íes cxercicios , em pleándose en aquellos á que mas le inclinare, y m oviere íu dcvocion. Pero en lo que ha de poner mas cuida­d o sera en dirponerfc todos los d iis con a d o s de Fé, E fperanza, y C a r id a d , am ando de to d o co - razon a D ios fobre to d as las co­fas , & c. y tendrá grandifsim a contíanza en que p o r m edio de esta clem entifsim a M adre nueftra- le íera concedido el favor que desea alcAnz^r de la m ife rico rdu .

Di-

. ..D iv ina. A y u n a ra , SI pud iere , tres dias de la N o v en a , confultandolo to d o con su C o n firso r, y fc fu - getara á to d o lo que el le d ifp u - í i e r c , y m andare. P ro cu re pedir en efta N ovena p o r la paz, y con ­cord ia en tre los Principes C h ris - t ia n o s , p o r la íalud de*nueftro Santiísim o P ad re : p o r la del R ey ; p o r la del Señor O b iíp o , rogan* d o p o r el acierto en fus g o b ie r­nos. Pedirá tam bién p o r el aii?* m en tó de nueftra Santa F é , e x ­tirpac ión de las H e re g ía s , con- verfsion de los In fie les, y no íc o lv id a r i de las benditas A hÍ'- m as d d P u rg a to rio , n i .d e los C autivos C hriftianos , to d o a

ma-

t nm ay o r h o n ra , y g lo ria de- D ios,- y d e fu Saiuiisima M adre.

O ra c ív n e s q u e s e h a n d e d e d r tod o s ¡9S d ía s a n te s d e la p a r t ic u la r

d e fa d a m o ,

PU efta la perfona , q u e ha de hacer cfta N ovena de re d i­

mís , y hecha la feñal d e la C ru z , p o n d rá el co razón en D io s , y

a¿io de am or de D io s , que « ¿ 4 ^ t e o , p id iendo a su D iv ina M ageí^ad , le perdone sus culpas

p ecad o s; la qual diligencia ha d é l^ c c r todos los dias , y aca­bada-, d irá la& O raciones q u ^ ’SS ■siguén»

ÁC-

A C T O D i A M O H D E D IO ò ’fd Y 4 tsd o s lo s dÌ4S,

oSoberana Señora! P o ílrad i rni indignidad ante vueftro So­

berano aca tam ien to , confieso h u ­m ilde y rend ido to d is m is cu l­pas y p ecad o s , pelándom e /o b re m a n e ra d e haver ofendido á vwet-- t r o Santifsim o H i jo , y 4 ttíMU- ‘ finita B ondad , ' arrep in tiendoaíó de to d o c o ra z o n , p o r h i^q f '.T áh . ju iia d o à un tan fum ó BícnV ^<4̂ * •. p ro p o n g o firm em ente, :• •Ja -enmienda , y os ddj? V -‘̂ e Tpr m uy o tro en a d e i in tg , ': j j^ - • ’■cfpéro- en cl auxilio’ di .̂‘á h iiia s piedades havcis\fM ájí^ .< ,¿í

m i m terccío ra con vucftro Sa«- tifsim o H i jo , para que m e co n ­ceda el perdón de mis culpas y p e c a d o s , d an d o m e la períeveran- c ia de aqucfte am or haíla el fia d e m i v ida. A m en.

Ü R JC ÍO N SE IIA DE REZAR 'fo d o s lo s d ia s a m e s d e la p a rticu ^

la r q u e f e p on e p A ra ca d a uno,

O A uguftirsim a E m p e ra tiiz d c lós C ie lo s , y la tie r ra !Y o

•te ado ro p o r H ija de D ios Padre, Íc/Crcp por M adre de D ios H ijo ,

■'te to fttìcso E rp o fi del E fp iiitu á a n t-o , y te venero p o r T em plo y Sagrario de la T rin id a d l^ea-

liT'

tlfsíma ! en V os h* colocado el P adre fu soberano P o d er ; cl H i­jo un igén ito su Sabiduría ; el E l- p i i i tu Santo lo exim io de sH D iv in o A m or. Y o os defeo ala­b a r , íe rv ir , y a m a r , com o os am an , íjrven , y alaban to d o s los C ortefanos del Cielo ; Suplicó­t e , M adre n u e ftra , que p o r tan cfpeciales gracias , m e alcancéis •de el to d o P o d ero íb Padre E te r­no un eficaz poder con tra íLM un“- <lo , D e m o n io , y C a rn e .: id e c l

.H ijo fobcrano un per=fi^fto‘ co n o ­c im iento de mi nada , • y de c l E sp íritu D ivino un enccndida^.’y v e td ad ero am or dvl sum o IjÍíii, ^ p n cl qual abo riczca to;.to lo Qjr'f

‘Ü ® /’

3 ^ . , .n o es D io s , de D io s , p o r D ío f,y para D io s , y me configais de l i D iv in a NHÍéricordia el favor que dcfco alcanzar en efta N ovena,

'fi ha de íe r para m ayor h on ra , cy g loria de fu Santifsima Mageí^- •lAcl, y vucftra : m i l , y p ro v e -

para m i alma. A m en, f iT C^ntluidu e jia O ru c io n , rez^ark tr e r

A lf in de c a í a n n x d i r h G l o - ■VIA a Voc, H ija del P ad .e : G lo ria á V os , ”MAdre del H i jo : y G lo ria d

'V<5s-, n ^ b f a qu erid a del E fp iritu D iv in é y p o f los siglos de los si­glos» A¿mert. T p id a a q u i e l fA V sr qtte i e f t A a k 4H z.a r , h a d e itd j b ú f -

m d -d 'i lif ín X U todas i o s h , ú ̂4 ( a h r m O ratioru

D IA P R IM E R O .f.fti (ti4y h a v ie n d o fe p e r jíg n a d o d u

r a e l 4^0 d e A m r d e í) /w , < ¡a e em - f t e í . 4: O Soberana S eñora!, & c. D e sp tte s r e z ^ a rk U O r a á o n : OAu--- guftifsim a E m pera triz . & c, T efi§- m 'fjm o h 4 d e e x e i u t 4r t t d t s ¡os dÍ4i d n te s d e d e c ir la O ra ítQ » fa n u n U r ^ q n i^ '^ f e p o n e p 4rá lA d a día» .. ' V

O r 4('tort p 4rA e l / 'u P r im e r f f- . .: :

O M adre de D io s .d e l CSnuiioFr^^í V ucílra M .igcftad e? Ío-^1o Í r

ria de Jcruíálcn , la atcgi-ii'. lfl;atl, y la honorificenda V̂W.V?. «ícoi;4do,Pueblo, vueftio . ti:Ó am paro halla el c n fé r r - ^

ci iílie id o el confiaÍA -‘ '■

:*rst

J 4 .infeliz la felicidad perpetua , y el q u e navega p o r efte M ar de el M undo el p u e rto feg u ro de fu fuspirada efperanza: Y o os fuplico. M adre nueftra m e alcancéis de vueftro Santifsim o H ijo un ard ien te zelo de la h o n ra y g loria de D io s; u n a alegría cfp iritual de m i alm a, y una eficacilsíma gracia , con la qual pueda vencer m is indóm itas pafsiones, para íáber agradar en to d o la M ageftad Divina» Amen»

M a b A d a e fta O ra sio n rez,a ra tr e s éYt M a r ia s , y e fta m ism a d iü ¿ e n i 'u h a d e k á (e r to d o s U s dias»

oDIA SEGUNDO»

S oberana M aría ! V os íoís aquella prodig iofa Eícala,

Ò C am ino de Jacob p o r d o n d e íu - ben nueñras fuplicasá D ios, y nos fon com unicadas las gracias , y dones de el P ad re C eleftial. Y o 08 fuplico in tercedáis p o r jb í con el que es verdadera vida , v e rd a d y c a m in o ; y que no m e aparre nunca de los reales cam intís ^ a é nos dexó m oftrados en efta v íd i? y que fepa pedirle eftas, y o tras íbberanas gracias; para que m e pueda conform ar ca to d o con íu ’ Santifsima vo luntad . A m en .'

DIA. TERCERO,

O Piadosifsim a R cyna ! E n vucftros excelentes m éri­

to s venera nueftra dcvocion el eípecialifsim o favor de fer el m u n d o foco rrido , q u ando m as p e rd id o ib m iraba ; pues c o m a adm irado eUe Soberano Señor, q u e N iño tie rn o abrigais en . vueftro s P uríísim os brazos , d e el progreíTo, q u e en el cam ino de todas las v ir tu d es con tanta em ineucia m anifeftais, os eligió )or M adre fuya , haciendoíe lo m b re en vueftras pu riís im is

E n trañas, para red im ir á el M u n ­d o . Y o os su p lico . V irgen Ma- lirc , nac alcancéis de vueftro

Prc-

Prerío íjfstm o H ijo el favor d e q u e no íe aparte de m i la fe d e tan D iv ino M ifterio y que v i ­va reconocido à un tan fingular beneficio , para q u e m oftran- dom e agradecido à vueftro San­tifsim o H i jo , le fcpa ferv ir , y am ar co m o à m i Soberano R e - d e m p to r , y ad o ra r à Y* M* p o r M a d re fuya. A m eiu

D IA Q U A R T O ,

O B ienaventurada' V irg en ! Y o os ado ro com o à p r« -

cio ía M arg arita ; y o os venero c o m a L am para incftingúiblG» Co-rona de V irg in idad , y Ef^ cu d o de la Fe. SupIicoos, V írgctl

P u -

3* . . .P u r a , m e ènfencls à alabar a el to d o P oderoso p o r haveros cria­d o tnn peregrina, y graciofa, y de ba y o à el fav o r d e lu Santifsima g ra d a , que fea m i vida perfec • t a , y Tanta ; arda m i vo lun tad co n el oleo de todas las v irtudes; v iv a adornada m i alma de la C athclica , y C hriftiana Fc ; pa­ra que »rm ado m i corazon co» cfte efcudo fc conferve lim pio , y p a ro , fin m ancha de pecado jiiffa el fin de m i vida. A m en.

; D IA Q U IN T O .

O Bcnignifsim a Señora ! L ie- nos- cftàn los C ielos , y la

f ie rra de vueftras Soberanas ia -flucn-

fluencias , con las que influís en el m u n d o , para q u e la T rin id a d Beatifsim a íea Santificad* , y el M adero de la C ru z íea- a d o ­ra d o en to d o el O rb e . Sop licoo j C lem entífsim a M adre , que no ^ a r t e i s de m i alma vueftras D i ­vinas P ied ad es; para q u e y o con ­fiese , y crea en la Santifsima T rin id a d , q u e es un D ios en U EíTcncia , y T r in o en las p e ríb - ñas ; ado re , y reverencie a eí A rb o l Santo de la C ru z , co n - feíTando p o r H ijo de D io s v ivo á el que rind ió fu efpiritu en el a el E te rn o Padre , haciendo á el h o m b re de enem igo de D io s am igo fuyo; y que arm ado de tan

po-

p o d e ro fis a rm as,reb ab a los aíTaU to s de mi com ún enem igo , y íalga vencedor en la batalla . A m en .

D IA SH X T O .P urirsim a V irgen! H iim il- dem ciue rend ido , y de­

v o tam en te obfequioso os ofrez­co aquellas alabanzas , que os dan los Santos , y Santas , q u e en efte m undo m erecieron el p rec io so d< n de la v irg in idad , y íb ii cpro iiados en el C ielo con ia D iadem a de V írgenes, dcbien- d o lH c i V. M sgeftad U prim a­cía de cftado tan p c rfed o . Y o íup iico i vueftra Soberana C le- d c iic ia iac alcance de aquel

C o r-

C o rd e ro Im m n c u h J o , C c d igue dc concedorm e un enccad ido am or à h pureza, para que a d o r­nados mi cuerpo , y alm a, y to^ dos mis pcnfam icntos de u n í candidez caft.i' , y p u r a , g u a r­de una jo y a tan p re c io u , con la qual llegue á a laba 'le cterna- mcncü en G lo ria . A m en.

r '

D IA S E P T IM O .Peregrino R elicario de • ^ mas D iv ino , y hum ina-í

d o A gnus ! Fuente d ivinam ente fcllada , de donde m anan Ibs , C h riftilinos raudales de la vida! H u e rto V irginalm ente cerrado#Y o os fu plico iutcrccdais c o a '

vucs-

v u eftro Santlfsimo H ijo , hagai m i alma digna m o rad a suya , y que la facie con el verd ad ero pan de vida ; y pues fois H u e r ­to cerrad o , pedidle m e conce­da el favor de q u e eftcn c e rra ­dos m is sentidos , y potencias à todas las cofas del m undo ; pa­r a que pueda ofrecer a m i D ios olorofas flores de v ir tu d e s , si me am para con fu Saatifsima g ra ­nja. A m en.

D IA O C T A V O .

D ulcifiim a Señora ! V uef- t r a NJageítad es la B ien­

aven tu rada en tre todas las m u -

O

geres ; 1* que sin egem plar ag ra - dafteis à el to d o p o d e ro so , la que d ignam ente fe m ira exaltada fo*- b re fodos los C o ro s de las Ce« leftii'.les G era rq u ias . P o r V o s , ò piadosifsim a M a d re , conseguim os los pecadores el perdón de n u es­tras culpas. P o r ta n to , os supli­c o , m e alcancéis de aquel Señor q u e os ad o rn ó de privilegios tan g ra c io íb s , la eípecialisima gracia de faberle ag rad ar en to d o , y d a r ­le gusto ; y q^ue m e perdone p ia- d o lo las ofcnlas que ignorante* m ente he com etido , para q u e m ereciendo fer de los efcogidos^ íiiba à alabar à m i D ios y R e - d e m p to r , y á vueftra K eal M a-

ges-

^e ftaá en el Paraíso de la G loria . Amen*

D I A K O K O .

Podcrosifsim a M aría M adre, y Señora del C am ino ! Y o

o s ad o ro com o à p ro d ig io ía , y m yílica '. Zarza de M oysés , que a rd ien d o no se quem aba ; y os re - ■vei encio com o á aquella p o rte n ­to sa C olum na de fu e g o , y N uve, ^ u e de noche y dia le m oftraba

-e l caniino á aquel_ cfcogido Pue* •fclo , y le conducía à la tie rra de -P j’cnStísion : p o r tan efpcciales privilci^ios, y gracipfis prerroga* t iv a s , os fu p lic o , que p o r yuef. t r a iiiccfccl'iion a iísíice de la Di»

v i-

vina m ircrlcordia la gracia <íe que i r i alma y corazon le abrafen en el am orofo incendio de c lB iv in o E tn a , y q u e con el am or de m i D io s , y m i Señor , fea y o purifi­cad o de las m im danas cfcorias; p a ra q u e ilum inado con los cía* ro s rc í^ a n d o rc s dc la D iv ina C ra c ia , cam iüe aprefu rado p o r el exercicio de todas las v irtu d es, con una peifcvcrailcia conílante, y q u e tenga y o una firm e eípc* ra n z a d e q u e me haveis de alcan­za r dc la M agcftad D ivina cl fa­v o r qi:c os he pedido , y fupli- cad o en efta N ovena , (ji afsi m f . couvinici*c. A m en . ,

C O .

4 «

G O Z O SA N u e s t r a S f i ñ o R Á

DEL CAMINO.

Propiciatorio D ivino, R efugio de pecadores, Socorrednos con favores M adre de Dios del C a m in o «

CO n am ante devocion, y devotos regocijos,

h o y M iria vuestros hijos os rinden cl co razon :■Si en aquesta obligacida:

. les pone cl am or mas fino: socorrednos con favores M adre de Dios del Camino-

G ran dicha tuvo Pamplona,i el lograr de vu&stro am or

la eligieseis ( q u e fa v o r ! ) p o r T ro n o de tal P a trona ; pues vuestro amparo la abona, y mostráis lo que colivino: Socorrednos con fav o re s ,& c .

M ucho os, debe esta C iudad, m ucho mas sus Ciudadanos,

Ímes favores á dos manos. ogran de vuestra piedad; ̂

en qualquiera enferm edad 5ois cl remedio D ivino; Socürrcdr.os con favores,

Sois M adre , L u r , N o r te , y .Guía, Salud , C am ii'o , y Consuelo, A m paro, en miest o desvelo y de todos la a lcg iia ; ; pues nos prevenís, M aría, - uuetlio mas cat)al deílino-: • ’ Socorrednos con favo res, &CV ̂

£ l Padie cl ser Poderosa .os d ip , y el H ijo el Saber, l i l esp íritu cl querer.

4 «com o à ili querida E ^ n s a .Pues os crió tan graciola aquel que es DiOi U no , y T rin o s Socorrednos con f iv o re s , &C.

D e los tc-^oios del C iclo soii Tesorera üiv ina; y à Beldad tan peregrina conricia Reyna su aniielo^ pues de lii fino desvelo

:• sois oojeto peregrino:Socorrednos con fávores » S¿c,

D e t i m undo C orredem piora , i u i f t t i s j .y también del hom bre, ',pafd que mas nos asom are,

so ii la ‘divina T u io .a , piies nos libralteis Señora d c ¿1'. y u g o Lu Jfs^rino: Socorrednos con favores, & c.

%^r*í)i2i^corio ’ D ivino,. Rc-fu^io.de pecadores,

■ Socorrednos con fiv® rcs, S ¿c, G ii’. C. 5 . K, E. £ . M . t . i ' .

y . A. r,^

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Se j«e¿a un hermoso cuadro boidado de sedas y oro que representa el corazon de Jestjs al premio mayor de la Loleria 2.® del mes de Marzo de l ’um-pIoQa calle Tejerla núm. C.

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