NOVENA DE LA INMACULADA - Claretianas Norte · El misterio de la Inmaculada es para Claret y para...

Hoy quiero alojarme en tu CASAH

NOVENA DE LA INMACULADA

30 de noviembre – 7 de diciembre 2015

Quiero alojarme en tu CASAH

1.2

Hemos estado preparando una casa para María, como Religiosas de María Inmaculada que somos. Preparando hogares, comunidades misioneras donde ella esté presente, como en el cenáculo, acompañando y uniendo a los apóstoles, a nosotras que hemos querido comenzar un itinerario de renovación.

¿Por qué importa que María esté en nuestras comunidades? Porque Cristo quiso venir a la humanidad a través de ella (CC 62). Ella es nuestra fuerza y modelo en la evangelización. Si queremos llegar a ser copias vivas de Jesucristo, tenemos que acoger a María en nuestra “CASAH”, vivir con ella, aprender de sus virtudes y “copiarlas”. Ella es la gran señal en nuestro caminar y modelo para nosotras. La tenemos como Patrona en el misterio de su Inmaculada Concepción lo que nos impulsa a luchar contra el mal en cualquiera de sus formas (CC9).

En Adviento vivimos expectantes la venida, o las venidas de Cristo.

“En la primera el Señor vino revestido de la debilidad de la carne; en la venida intermedia viene espiritualmente, manifestando la fuerza de su gracia; en la última vendrá en el esplendor de su gloria. Esta venida intermedia es como un camino que conduce de la primera a la última. En la primera Cristo fue nuestra redención; en la última se manifestará como nuestra vida; en esta venida intermedia es nuestro descanso y nuestro consuelo.

Si guardas la palabra de Dios en el corazón es indudable que Dios te guardará a ti. Vendrá a ti el Hijo con el Padre, y él hará nuevas todas las cosas.”(San Bernardo; Sermón 5)

Novena de la Inmaculada 2015

1.3

María es modelo en esta práctica de guardar la Palabra en el corazón. De ella aprenderemos en este Adviento a preparar con ella otra casa para Jesús que viene, viene siempre.

María desde siempre, aún sin saberlo preparó su casa- su corazón- para en ella acoger y acompañar la vida de Jesús.

A todos los cristianos se nos invita a prepararle nuestra casa para acogerle. Nosotras como Claretianas durante el proceso del Itinerario Espiritual que ya hemos iniciado se nos invita de manera especialísima a preparar esta CASAH.

En aquellos tiempos “no hubo para ellos sitio en la posada”, pero en nuestra CASAH le hemos dado alojamiento. De manera particular está María entre nosotras.

En esta Novena de 2015, inserta dentro del itinerario de renovación “La Travesía”, contemplaremos a María, como:

ESTRELLA:

“Ella confortó a María Antonia para escribir los Apuntes de la fundación de la nueva Orden” (Aut. 20).

La Estrella que ilumina a Mª Antonia cuando descubre su misión de Fundadora (1842) y para escribir las Reglas del Instituto (1848), tiene relación con María (Aut. 45).

Esa misma Estrella aparece y desaparece a temporadas, pero se hace especialmente presente de nuevo cuando ha de escribir las Reglas de Reforma de la Iglesia (1855), que el Señor quiere que lleve a cabo Pío IX en premio de haber definido el dogma de la Inmaculada (Aut. 49).

María, será también para nosotras estrella polar, que guía, orienta, lleva a buen puerto, fortalece en los temporales…


1.4

SEÑAL EN LA LUCHA CONTRA TODO TIPO DE MAL:

El misterio de la Inmaculada es para Claret y para las misioneras Claretianas no sólo un misterio de belleza, sino de fuerza.

La Inmaculada es, a sus ojos, un signo, una señal, la mujer fuerte– por no haber sido nunca mordida por la serpiente– tiene toda la fuerza intacta para aplastarle la cabeza (Cf. Ap. 12 y Gén.3,15; Constituciones 9).

Como “el príncipe de las tinieblas” se vale de los impíos de cada momento histórico (él describe en la Pastoral de la Inmaculada las impiedades de su tiempo), la Virgen se sirve para darle batalla de apóstoles especialmente escogidos y formados por ella.

x Imágenes de diversas señales de dirección. (Flechas, indicadores de caminos…). Colocarlas en un sitio visible.

x Estrella. x Cartel: María es nuestra gran señal


1.5

Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer, vestida de sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su

cabeza. La Mujer está embarazada y grita de dolor porque le ha llegado

el tormento del parto. CANTO INICIAL: Ishah Betel (nº 183 cancionero nuevo) COMENTARIO:

Sin duda, nuestro mundo (como todos los mundos a lo largo de la historia), no es el mejor reflejo del Reino de Dios. Y sin embargo, es este el único sitio que tenemos para vivir nuestra vida, nuestra vocación, nuestros sueños. En lo cotidiano de

cada día es donde surgen SEÑALES: una MUJER llena de vida, EMBARAZADA, que grita porque le llega el parto. Es una mujer fecunda.

Contemplemos en esta Mujer a María, nuestra Madre; aquella que supo y quiso estar en medio del mundo y por eso pudo ser señal para cuantos quisieron creer. María es nuestra “gran señal” en el caminar, consagrada totalmente a la obra de su Hijo (Cf. Const 9). Como mujeres y como claretianas estamos llamadas a participar de su función maternal sobre el Pueblo de


1.6

Dios, sobre nuestros alumnos, nuestros amigos, nuestros compañeros de trabajo, nuestros vecinos, nuestros enfermos, nuestras hermanas, nuestras familias...

Mujeres y madres que saben dar a cada uno según su necesidad, que saben acompañar, que saben amar gratuitamente, que no ponen condiciones ni exigen cumplir nada para darse... Quizá así, también nosotras podamos ser SEÑALES DE DIOS en medio del mundo: con libertad, hagamos fácil a los demás este mismo camino.

SILENCIO

Preparemos nuestra CASAH, desde nuestro sentido de FAMILIA Y ANUNCIO DE LA BUENA NOTICIA, CON EL TESTIMONIO PERSONAL Y COMUNITARIO… (Se puede leer entre varias hermanas estos puntos de las Constituciones)

9 El Señor nos ha consagrado en el bautismo y nos ha concedido la gracia de seguir a Cristo, a imitación de los Apóstoles, para formar una sola familia y anunciar la Buena Nueva de su Reino. (Cf. Const. 11)

9 Como miembros de un mismo cuerpo, cada una debemos

poner al servicio de las demás los dones que hemos recibido, porque se nos ha otorgado el Espíritu para utilidad común. (Cf. Const.38)

9 Nuestro primer medio de evangelizar es el testimonio

personal y comunitario de fidelidad a Cristo, pobreza y desprendimiento de los bienes materiales, y de libertad frente a los poderes del mundo. (Cf. Const. 68)

SILENCIO


1.7

PENSAMOS…

¿De qué forma nosotras podemos ser o estamos siendo ya SEÑALES DE DIOS en todos los ámbitos en que cada una se mueve, o si por el contrario, en lugar de orientar, despistamos un poco?

COMPARTIMOS…

Elige una de estas señales y expresa brevemente por qué lo haces, qué dice de ti en este momento actual, qué señalas con tu vida, qué te están señalando a ti a raíz de todo, lo reflexionado...

CANTO: Imitándote María (nº235 cancionero nuevo)

ORACIÓN FINAL: Otra parábola les propuso: “el Reino de los Cielos es semejante a una misionera claretiana llena de vida, que cada día decide “perder el tiempo” en pequeños detalles de esos que no están programados, que no son funcionales, ni vistosos pero que salvan. Es ciertamente algo pequeño, semejante a un grano de mostaza, pero que cuando sale fuera es mayor, se hace SEÑAL DE DIOS PARA EL MUNDO, hasta el punto de que las aves del cielo vienen y se colocan bajo su sombra. Ayúdanos, María, para que la Palabra de Dios se haga realidad en nuestra vida.

Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor.


1.8

Y apareció otra señal en el cielo: un enorme Dragón rojo, con siete cabezas y diez cuernos,

y sobre sus cabezas siete diademas. Con su cola arrastra la tercera parte de las estrellas del cielo,

echándolas a tierra. El Dragón se detuvo delante de la Mujer que iba a dar a luz,

para devorar a su Hijo en cuanto naciera.

CANTO: Corazón de María (nº 229 cancionero nuevo)

COMENTARIO:

En el cielo apareció una gran señal de Dios, pero al lado, también hay otras señales: el Dragón, el Enemigo, el Mal, el Sinsentido, Satán...

Nuestra vida, nuestro mundo, nuestra vocación, nuestras comunidades, nuestra Iglesia... Todos, campos inmensos llenos de trigo y de cizaña, de signos del Reino y de todo lo contrario. En nosotras está la belleza y la ternura de la Mujer vestida de sol y también la violencia y la superficialidad de Dragones con diademas.

María también sabe de situaciones ambiguas, de cara y cruz, de vida y de muerte... Y frente a la lucha, la dispersión, los


1.9

miedos... sólo queda la esperanza de quien sabe que se le ha entregado un tesoro, un bien mucho mayor: un Hijo que va a nacer y vivirá, si los Dragones de nuestro entorno no llegan a devorarlo.

María acompañará, como ha hecho siempre, nuestras luchas, y también nos dará una mirada lúcida y evangélica para saber ver qué señales anuncian a Dios y cuáles buscan sólo la muerte.

SILENCIO

Preparemos nuestra CASAH, desde nuestra lucha contra el mal, dilatando nuestra capacidad de amar, en el mundo que deseamos salvar, cooperando a la redención de los hombres, pidiendo perdón. (Se puede leer entre dos hermanas estos puntos de las Constituciones)

9 “Tenemos como patrona a María en el misterio de su Inmaculada Concepción. Este misterio nos impulsa a luchar contra el mal en cualquiera de sus formas y nos abre al gozo y a la esperanza”. (Const. 9)

9 “A imitación de María Inmaculada, la vivencia de la castidad nos impulsa a luchar sin descanso contra el mal, cooperando activamente a la redención de los hombres”. (Const. 31)

9 “Dada nuestra dimensión de pecado, la vida en común puede proporcionar roces que desfiguran el verdadero rostro de Cristo en nosotras. Pidamos perdón y perdonemos. En la


1.10

reparación fraterna demos satisfacción pública de nuestras faltas externas”. (Const. 41)

SILENCIO

PIDAMOS AL SEÑOR (respondemos a cada petición con el estribillo del AVE MARÍA)

9 Por las diversas situaciones personales, comunitarias, sociales, políticas...

9 Por aquellas situaciones que percibimos con más ambigüedad, con mayor presencia de lucha, con mayor necesidad de ser discernidas a la luz del Evangelio…

9 Pongamos ahora en manos de Dios tantas formas de mal que retrasan y empequeñecen el Reino…

9 …

ORACIÓN

Ruega por nosotras, María, para que alabemos el Nombre de Dios en todas las cosas y situaciones;

Enséñanos a colaborar con Él dejando que su presencia en nosotras sea nuestro mejor saludo al mundo.

Santa María, danos cantar con júbilo el gozo de creer, de esperar y de amar nuestra debilidad y nuestra grandeza, nuestra bondad y nuestra miseria, nuestra valentía y nuestras cobardías.

Porque nuestro Dios ama todo lo creado y nada de cuanto existe queda fuera de su amor.

Madre de la mirada lúcida, Madre del equilibrio, líbranos de la ingenuidad que no sabe ver la cizaña y no nos dejes caer en la tentación de construir campos de trigo puros, que no tienen el


1.11

sabor del pan del Reino. Por Jesucristo, tu hijo, nuestro campo, nuestro trigo y nuestro sembrador. AMÉN

La Mujer dio a luz un Hijo varón, que ha de regir a todas las naciones con cetro de hierro.

Pero su hijo fue arrebatado y llevado hasta Dios y hasta su trono. Y la Mujer huyó al desierto,

donde Dios le tiene preparado un lugar de refugio. Allí será alimentada mil doscientos sesenta días.

CANTO INICIAL: Ave María

COMENTARIO:

Llegada la plenitud de los tiempos, Dios envió a su Hijo y, sometiéndose a la Ley, nació de una mujer y nos liberó, haciéndonos hijos adoptivos de Dios (cf Gal 4, 4). De esta forma tan poco aparente, tan poco funcional, es como nuestro Dios salva, como Él gusta de hacerse presente en medio de nosotros.

Y María fue, por su libre decisión, el medio humano (¡y bien humano!) que Dios tuvo para dar a luz a su Hijo, carne de su carne, carne de Dios. Es más fácil recitar el Ave María que entregar nuestra vida, en cuerpo y alma, a los planes de Dios. Es más fácil admirar a María, mujer de la Anunciación,


1.12

que pasar nosotras por el dolor del parto, por el dolor de dar a luz a Cristo en lugares donde las circunstancias o las personas no lo hacen agradable.

Peor aún es cuando sentimos que ese hijo, esa vida que hemos dado, nos es arrebatada sin más. Vacío, dolor, no entender nada, no ser reconocida, ir envejeciendo, estar sola... Y nos ronda la tentación de pedir cuentas, primeramente a Dios: ¿por qué?,.. ¿Hasta cuándo, Señor?...

Pero es Dios mismo, como siempre, quien nos dice: “no temáis... Yo os alimentaré y os cuidaré, porque quien bebe del agua que yo doy, no tendrá jamás más sed. ¿Queréis venir a mí?”

María aprendió a recibir el consuelo de Dios al pie de la Cruz; aprendió a beber de esa agua que no acaba nunca estando cerca del costado abierto de su hijo. También en la lucha y en el desierto, cuando todo parece indicar que nos han robado la vida.

SILENCIO

Preparemos nuestra CASAH respondiendo cada día a la vocación recibida, eligiendo al Señor en fidelidad… (Se puede leer entre dos hermanas estos puntos de las Constituciones)

9 “Nuestra vocación claretiana es un don al que debemos responder día a día, viviendo en una total disponibilidad a la voluntad del Padre, gozosamente entregadas a enseñar la Ley santa del Señor a toda criatura…” (Const. 71)

9 “La verdadera correspondencia a la vocación es tarea de cada día, porque cada día debemos elegir nuevamente al Señor con una fidelidad que, a veces, puede ser difícil, pero sabemos que


1.13

nada ni nadie puede separarnos del amor de Cristo”. (Const. 100)

CANTO ESCUCHADO: Madre de la vida (Amparo)

COMPARTIR

¿Qué suscita en nosotras esta canción?

¿Con qué dimensión de mi vocación consagrada asocio más ésta llamada a dar vida?

¿En qué situaciones me cuesta más vivir esto?

ORACIÓN

Dios Madre y Padre, te alabamos como creador y engendrador de vida.

Te bendecimos, Dios comunitario, porque te haces presente en todos los pueblos como Salvador nacido de una mujer.

Te damos gracias por tu llamada para proclamar, vivir y encarnar la Palabra que reconcilia y libera.

Concédenos la gracia de vivir tu Voluntad con alegría y esperanza entre el pueblo, tu pueblo.

Haznos creativas y fieles para hacerte sitio en nosotras.

Sólo así, estaremos preparadas para elegir siempre la vida, para recibir y dar tu Reino, tus siempre Buenas Noticias.

AMÉN.


1.14

Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles combatieron contra el Dragón.

También el Dragón y sus ángeles combatieron, pero no pudieron resistir

porque no hubo ya en el cielo lugar para ellos.

CANTO INICIAL: Surgirá un mundo nuevo (nº 29)

COMENTARIO:

Con María contemplamos hoy esta batalla, este enfrentamiento entre ambas fuerzas. Sin duda, María tuvo que presenciarlo muchas veces con su Hijo: cuando le hacían preguntas engañosas para poder acusarle, cuando Jesús es tentado y algunos lo aclaman como Mesías, cuando sus amigos y la gente de su pueblo le dejan completamente solo,... Más aún: ¿acaso José no tuvo que pasar por una terrible lucha ante un acontecimiento tan inesperado como incomprensible en la que iba a ser su esposa?

Y María supo esperar. Quizá supo recordar cómo Dios había actuado a favor de su pueblo tantas veces; cómo fue su brazo quien dio la victoria en tantas batallas; cómo se ven libres de todo mal los que se abandonan a Él. En Dios confío y nada temo; ¿qué podrá hacerme el hombre?, ¿qué podrá hacerme


1.15

cualquier contrariedad, si Tú, Señor, diriges cada uno de mis pasos y me llevas hacia valles tranquilos?

Recuérdanos, María, que ni la enfermedad, ni la falta de fuerzas, ni la desesperación, ni este mundo que pasa... ¡ni mi propio pecado! podrán apartarnos del amor de Cristo, tu Hijo y nuestro Señor.

SILENCIO

CANTO: Magníficat (Taizé)

Preparemos nuestra CASAH configurándonos con el Misterio de muerte y resurrección de Jesús, siendo conscientes de nuestra debilidad… (Se puede leer entre dos hermanas estos puntos de las Constituciones)

“En la consagración religiosa, por la fuerza del Espíritu, damos una respuesta de amor en oblación total de nuestro ser al Padre; nos configuramos con el misterio de muerte y de resurrección de Jesús, viviendo en pobreza, obediencia y castidad; y cumplimos en gozo comunitario la misión apostólica a que hemos sido enviadas.

El carácter de donación total que lleva consigo la consagración nos impulsa a una respuesta diaria que llegará a ser plena y definitiva cuando se realice en nosotras la Pascua del Señor”. (Const. 12)

“Debemos recibir el don de la castidad en actitud de pobreza, conscientes de nuestra debilidad, sin presumir de nuestras fuerzas, con fino instinto espiritual para preservarla. Respondamos a él con una generosa entrega de amor, confiadas en la fidelidad de Aquel que es origen de nuestra fidelidad”. (Const. 33)


1.16

SILENCIO

NOS PREGUNTAMOS y COMPARTIMOS:

9 ¿En qué circunstancias de tu vida y de la vida de tu comunidad experimentas que María se hace presente para recordarte que es Dios El que te da la victoria en las luchas, que es Él quien dirige tus pasos y no tus propias fuerzas?

9 Damos gracias a Dios recordando algunos momentos (personales, comunitarios, históricos...) en que después de ciertas luchas, la paz de Dios nos ha dado la victoria.

ORACIÓN

Señor Jesús, sé nuestro refugio y nuestra fuerza.

Que con María sigamos creyendo que nada podrá separarnos de tu amor.

Haznos entrar dentro de nosotras mismas. Estamos tentadas, solicitadas por el exterior.

Todo nos llama, nos invita a salir de casa y a vivir a la intemperie donde no hay calor de hogar ni palabras de profundidad.

También nos tienta quedarnos resguardadas en la engañosa paz que da cerrarse en los pequeños círculos de nuestras ideas, costumbres, hábitos.

Ven, Tú, Señor a habitar en nuestra casa y ayúdanos a vivir reconciliadas, en paz y en cercanía con nosotras y contigo.

Ven, Tú, Señor, y juntos comamos el pan que da fuerzas para caminar hacia la tierra de la Promesa, donde Tú nos has


1.17

convocado y donde el Padre, desde siempre, ha preparado para nosotras una mesa caliente, un vino generoso y unos amigos de corazón nuevo.

En definitiva, una verdadera victoria: la tuya, Señor. Amén.

Y fue expulsado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo o Satanás, el Seductor del mundo entero;

fue arrojado a la tierra y sus ángeles fueron arrojados con él.

CANTO INICIAL: Santa María de la Esperanza (nº 216)

COMENTARIO:

Si decíamos al principio que somos herederas de un carisma empeñado en amar a la Iglesia hasta el punto de ver su


1.18

infidelidad y querer renovarla, también podemos decir que pertenece a nuestra historia y a la vivencia profunda de nuestros fundadores, ser mujeres esperanzadas y esperanzadoras. Misioneras de esperanza.

Dice Pablo que entre la fe, el amor y la esperanza, la mayor virtud es el amor porque no pasará nunca. Cuanto todo acabe, podremos seguir amando y amando ya del todo, como Dios nos ama. Pero mientras llegue ese momento, ¿cómo podremos amar si hemos perdido la esperanza en nosotras mismas o en aquellos que queremos evangelizar? ¿cómo podrá crecer nuestra fe si no encontramos signos para seguir esperando en Dios contra toda esperanza?

Cada vez que entre nosotras hay tensiones, riñas, falta de amor... el Seductor del mundo entero se alegra; cada vez que una de nosotras se deja envolver por la tristeza, por el cansancio, por el malhumor, se alegra el príncipe del mal.

María nos recuerda que cuando todo parece perdido; cuando no hay comunidad de discípulos a la que mirar para decir “mirad cómo se aman”; cuando todos se esconden; cuando la noche parece ser más fuerte que la luz; entonces hay que aprender el arte de la esperanza: Ella supo convocar de nuevo y reunir a los de Jesús en torno a la Palabra y a la vida común.

María, alienta nuestra esperanza; fortalécenos; convócanos una vez más con alegría; fórmanos; envíanos, Madre y Maestra nuestra.

SILENCIO


1.19

Preparemos nuestra CASAH, dando razón de nuestro ser en la Iglesia, rezando por sus necesidades, contribuyendo a su renovación… (Se puede leer entre dos hermanas estos puntos de las Constituciones)

9 “Nuestra razón de ser en la Iglesia es que Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, sea conocido y amado por todos los hombres”. (Const. 10)

9 “Fieles a nuestro carisma, hemos de “ocuparnos en el silencio de la oración santa rogando a Dios por las necesidades de nuestra santa Madre Iglesia, a cuyo fin debemos dirigir todas nuestras oraciones y trabajos” (Const. 50)

9 “Con nuestra continua conversión contribuimos a la renovación de la Iglesia”. (Const 58)

SILENCIO

PEDIMOS PERDÓN

PIDAMOS PERDÓN a Dios porque con frecuencia no sabemos esperar, no vivimos activas, despiertas, no adivinamos la luz después de la noche.

Respondemos a cada petición con el canto:

Esperar contra toda esperanza (2)

1. Perdón, Señor, porque nuestras lámparas no siempre están encendidas; perdón por las veces en que hemos descuidado nuestro aceite. Esperar…

2. Perdón, Señor, porque como la novia del Cantar, hay momentos en que no queremos abrirte nuestra puerta. Puede más nuestro cansancio, nuestros temores, nuestros deseos, nuestra comodidad. Esperar…


1.20

3. Perdona, Señor, tantos gestos, palabras, reacciones que están negando una fraternidad real, una caridad sin farsa entre nosotras. Esperar…

4. Perdón, Señor, por las veces que no sé unir acción y contemplación; por las veces que separo mi entrega a Ti de mi vida con los hermanos. Esperar…

ORACIÓN

Quiero proclamar la grandeza del Señor, Acoger la grandeza de su amor, Alabar la inmensidad de su ternura Y la infinidad de su misericordia. Enséñame a esperar, Tú que plantaste tu casa entre nosotros, Tú, que con tu brazo envuelves todo el universo de generación en generación. Quiero aprender a creer Que la estrella de tu amor nunca se apaga, Ilumina a los que viven en la noche, Y alegra el corazón de los sencillos. Camina con tu Iglesia, que es tu cuerpo. Cuida de cada una de las hermanas que has puesto a mi lado para que los demás, al vernos crean en Ti. Yo sólo puedo balbucir: eres la luz que todo lo ilumina, eres la verdad, eres la vida, LO ERES TODO. Amén.


1.21

Oí entonces un griterío inmenso, una fuerte voz que decía en el cielo:

Ahora ya ha llegado la salvación, la liberación por el poder de Dios;

reina nuestro Dios y su Cristo manda, porque ha sido arrojado el que acusaba a nuestros hermanos,

el que los acusaba día y noche delante de nuestro Dios. Pero ellos le han vencido gracias a la sangre del Cordero

y a la palabra del testimonio que dieron, porque no amaron tanto su vida que no pudieran entregarla por él. Por eso, regocijaos, cielos y los que en ellos habitáis.

CANTO INICIAL: Magnificat (nº 248)

COMENTARIO:

¿Podrá creer la gente que nos rodea que es nuestro Dios quien nos hace libres, que su fuerza es mayor que todos los males del mundo? ¿Podrán nuestras hermanas regocijarse contagiadas por nuestra alegría? Y no una alegría cualquiera, sino la que da Aquel que vive para siempre, esa alegría que nadie nos podrá quitar.

¡Alégrate, María! Nuestra vocación, como la de María es una llamada a la alegría, nunca a la tristeza, nunca a lo que sobrepase nuestras fuerzas, nunca al sacrificio estéril sino a la


1.22

entrega gratuita de quien se pregunta: “¿Y a dónde iremos si no es contigo?... Sólo Tú tienes palabras de Vida...”

Todo tu ser, María, se alegra en Dios porque ha puesto sus ojos, su amor, su proyecto en ti y en cada una de nosotras,

generación tras generación. Y esto no por nuestros méritos, sino por la sangre del Cordero, por su vida y su muerte. Por pura gracia. Lo único que se nos pide es ser capaces de reconocerla y celebrarla.

Ojalá, María, hagamos de nuestro trabajo, de nuestra oración, de nuestras relaciones, de nuestra formación, de nuestro tiempo libre,... En definitiva, de nuestra vida, un magníficat. El Magníficat de los hijos de Dios.

SILENCIO REFLEXIVO

Preparemos la CASAH desde la vida en comunión que tiene como centro la Eucaristía, desde la oración como María:

9 “Nuestra vida en comunión se expresa y realiza plenamente en la Eucaristía, centro de unidad que nos obliga a una diaria conversión. Se fomenta también en la oración, trabajo común, reuniones comunitarias, tiempos de esparcimiento, relaciones de amistad y en nuestro estilo de vida familiar. (Const. 37)

9 “María, que ha creído en plenitud, es para nosotras modelo de oración confiada. Nos unimos a ella a través de la liturgia de la Iglesia, que incluye continuamente la memoria de la Madre en los misterios del Hijo”. (Const. 55)

SILENCIO


1.23

COMPARTIMOS: Aquellas actitudes o sentimientos, tanto en lo personal como en lo comunitario, que nos impulsan a vivir con gozo y serenidad nuestra consagración. (Intercalamos cada dos intervenciones el Magníficat (Taizé)

ORACIÓN

Alabo, Señor, tu grandeza, grandeza admirable de amor. Me siento ungida, inundada por el Espíritu delicado de tu amor.

Porque has mirado y enamorado a tu criatura más pequeña. Aunque quisiera resistirme, tu paciencia conmigo siempre es

mayor. Porque miras con predilección a los humildes y a los pobres, a

los excluidos, a las víctimas y a los vencidos. Tu amor, manifestado en el mundo, es fuerza esperanzadora

que trastoca los valores imperantes: Los grandes serán pequeños y los pequeños serán grandes.

Los ricos serán desgraciados y los pobres serán dichosos. Tu amor, sembrado en los corazones, es el que declara a los

humildes, protagonistas; aplaude los gestos altruistas de servicio y entrega; y condena las acciones insolidarias.

Canto, Señor, tus designios salvadores para con tu pueblo pobre y humilde,

Para con todos los pueblos, llamados a ser pobres y humildes. Canto tu fidelidad y tu paciencia, tu amor que no tiene fin. Quiero ser, Señor, cantora de tu amor, un canto vivo para

siempre, AMÉN.


1.24

Cuando el Dragón vio que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la Mujer que había dado a luz al Hijo varón.

Pero se le dieron a la Mujer las dos alas del águila grande para que volara al desierto, al lugar de refugio

donde, lejos del Dragón, tiene que ser alimentada un tiempo y tiempos y medio tiempo.

COMENTARIO:

Muchas veces nos gustaría que las cosas estuvieran hechas de una vez para siempre. Vamos superando o asumiendo ciertos comportamientos, ciertas situaciones, y cuando creemos haberlo dejado atrás, comprobamos llenas de estupor, que volvemos a tropezar en cosas muy parecidas. Lo fundamental de nuestra vida, lo que nos configura, lo que nos permite ser lo que somos, no acaba nunca. Vamos caminando, creciendo y decreciendo, acercándonos y alejándonos, pero “el Dragón”, los distintos “dragones” vuelven una y otra vez.

Quizá María ha sido la única persona que, por ser Inmaculada, no ha vivido en ella lo que Pablo describía tan claramente: no hago el bien que quiero y hago el mal que no quiero.... En María, podemos mirarnos todos nosotros porque creemos que la


1.25

gracia de Dios nos conducirá hasta donde ella ya ha llegado: que vuestro sí sea sí y vuestro no sea no, dejaos reconciliar con Dios, amarle por encima de todas las cosas con todo vuestro pensamiento, alma y cuerpo,...

María es la mejor testigo de lo que Dios puede llegar a hacer en un ser humano cuando se deja llenar, por su gracia: Él nos dará alas de águila y volaremos hacia lugares de descanso, donde ni nos cansaremos ni cansaremos a nadie. Enséñanos a descansar en Él, María.

SILENCIO

AUDICIÓN CANTO: Venid conmigo (nº 531)

Preparemos la CASAH, haciendo de nuestra vida un fiat, haciendo amar María (Se puede leer entre dos hermanas estos puntos de las Constituciones)

9 “A ejemplo de María queremos hacer nuestra vida un “fiat” constante y generoso a la voluntad del Padre”. (Const 21)

9 “La Inmaculada Virgen María, que hizo de su sí a Dios un

servicio a los hombres, debe ser nuestra fuerza y modelo en la evangelización de los pueblos, porque Cristo quiso venir a los hombres a través de Ella. Hemos de hacerla amar como a madre y señora que conduce a todos a su Hijo”. (Const. 62)

COMPARTIMOS

Podemos participar con letanías espontáneas, respondiendo todas: Ayúdanos a descansar sólo en él.

x Mujer de paz, ayúdanos… x Pilar de nuestra fe, ayúdanos...


1.26

x Tú que supiste encontrar en Dios tu fortaleza, Ayúdanos...

x …

OREMOS CONFIADAMENTE

Tú conoces, Señor mi sed de amor y de vida. Sabes de mi ilusión por abrirme a la vida, de mis deseos de Ti.

Sabes también de mis torpezas, de mis horas grises. Sabes de tantos silencios y tantos encuentros.

Sé que sólo cuando acepte que Tú me conoces y me quieres sin condiciones, podré ser del todo tuya.

Quiero avanzar por este camino, dar un paso más, sólo por HOY pero fiada en tu SIEMPRE, en tu Palabra.

Quiero decirte: TE PERTENEZCO. Quiero abrirme a tu Gracia y avanzar apoyada en Ti.

“Yo estaré contigo SIEMPRE”. AMÉN.

AMBIENTACIÓN:

9 Mapa del mundo o un periódico donde aparezcan conflictos.

9 Velas apagadas. 9 Copiada la oración de San Francisco “Hazme un

instrumento de tu paz” para cada hermana.


1.27

NUESTRA REALIDAD… EL MUNDO SUFRE LA VIOLENCIA

En general, ha sido un año desalentador. Los conflictos vuelven a aumentar después de un importante declive tras el final de la Guerra Fría. Las guerras actuales matan y desplazan a más personas y son más difíciles de terminar que en el pasado.

Por supuesto, hay elementos positivos. El proceso de paz en Colombia es prometedor. La última ronda de negociaciones nucleares con Irán tuvo más éxito del que creen muchos. Túnez, aunque todavía no está completamente a salvo, demostró el poder del diálogo sobre la violencia. Afganistán contradijo su historia y, a pesar de los numerosos obstáculos, cuenta con un gobierno de unidad nacional. El restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Cuba emprendido por el presidente Barack Obama no puede sino ser beneficioso.


1.28

El caos del mundo árabe se agravó: el Estado Islámico capturó grandes franjas de territorio en Irak y Siria, gran parte de Gaza volvió a quedar destruida, Egipto dio un giro hacia el autoritarismo y la represión, y Libia y Yemen se aproximaron a la guerra civil. En África, el mundo contempló cómo los líderes de Sudán del Sur hundían su nuevo país. El optimismo de 2013 respecto a la República Democrática del Congo (RDC) se desvaneció, el ébola asoló partes de África Occidental, y los insurgentes de Boko Haram intensificaron los ataques terroristas en el norte de Nigeria. El orden legal internacional sufrió la afrenta de que Rusia se anexionara Crimea, y la guerra ha vuelto a Europa con los combates que continúan en el este de Ucrania. Miles de inocentes mueren cada día en los conflictos armados.

Recordamos las palabras de Bertolt Bretch: “Hay hombres que luchan un día y son buenos; hay hombres que luchan muchos días y son muy buenos; hay hombres que luchan muchos años y son mejores. Pero hay los que luchan toda la vida: esos son los imprescindibles”.

Se necesitan hombres y mujeres libres, que con la edad que tengan y sea cual sea su situación vital, sean capaces de seguir luchando siempre, de seguir viviendo y trabajando por la paz.

Hablamos del riesgo y el gesto profético que ha caracterizado a la Vida Religiosa desde sus comienzos. También ahora debe ser un distintivo entre nosotras. Como Congregación, vivimos con memoria agradecida porque no son pocas las hermanas y las comunidades claretianas que a lo largo de la historia parecía que iban a ser arrastradas, como la Mujer del Apocalipsis, y sin embargo siguieron adelante con toda la fe que eran capaces.


1.29

ESCUCHAMOS: “Desaprender la guerra” (Luis Guitarra)

Desaprender la guerra, realimentar la risa, deshilachar los miedos, curarse las heridas.

Difuminar fronteras, rehuir de la codicia, anteponer lo ajeno, negarse a las consignas.

Desconvocar el odio, desestimar la ira, rehusar usar la fuerza, rodearse de caricias. Reabrir todas las puertas, sitiar cada mentira, pactar sin condiciones, rendirse a la Justicia.

Rehabilitar los sueños, penalizar las prisas, indemnizar al alma, sumarse a la alegría.

Humanizar los credos, purificar la brisa, adecentar la Tierra, reinaugurar la Vida.

Desconvocar el odio… Desaprender la guerra, curarse las heridas. Desaprender la guerra, negarse a las consignas. Desaprender la guerra, rodearse de caricias. Desaprender la guerra, rendirse a la Justicia. Desaprender la guerra, sumarse a la alegría. Desaprender la guerra, reinaugurar la Vida.

ESCUCHAMOS LA PALABRA: (Ap 12, 15-17)

Entonces el Dragón vomitó de sus fauces como un río de agua detrás de la Mujer, para arrastrarla con su corriente. Pero la tierra


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vino en auxilio de la Mujer: abrió la tierra su boca y tragó el río vomitado de las fauces del Dragón.

Entonces, despechado y enfurecido contra la Mujer, se fue a hacer la guerra al resto de sus hijos, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús.

REFLEXIÓN

Hablar de Evangelio, de Vida Religiosa, de seguimiento de Cristo, es hablar de futuro, pero no precisamente de éxito, de felicidad, de grandes números. Seguir a Jesús implica sufrir persecución por su causa; no por otros motivos, no por mi propia voluntad,.. Sino por su causa.

María también sabe de este futuro. Sabe de cenáculos, de pequeños grupos en torno al Pan y a la Palabra. Pero no sabe de seguridades ni de esquemas hechos de una vez para siempre.

María, asunta en cuerpo y alma al cielo, como mujer entera, es un gran signo de esperanza cristiana. Es “nuestra gran señal en el caminar”. Nuestro cuerpo y nuestro espíritu serán alguna vez de Dios tanto como hoy lo es María, “pobre, virgen y obediente, consagrada totalmente a la obra de su Hijo” (CC. 9).

Con ella y hacia Él peregrinamos, con humildad pero no por ello con menos firmeza y deseo de formar parte de aquellos que mantienen con su vida el testimonio vivo de Cristo, por muchas “guerras” que se nos hagan. En esta tarde, que finalizamos la novena de la Inmaculada, queremos pedirle a Ella que interceda por la paz, y nos ayude a cada Misionera Claretiana a ser


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“instrumentos de paz” en cada comunidad y en cada lugar de misión en la que estamos.

SILENCIO

ORAMOS POR LA PAZ

Con todos los hombres y mujeres de buena voluntad, y con María, Reina de la paz, suplicamos:

Escucha, Señor, nuestra plegaria cuando te pedimos que conviertas nuestros corazones para que reine primero en nosotras mismas la paz, la tolerancia y la justicia. OREMOS

“TODOS SOMOS HERMANOS”

Escucha Señor, nuestra plegaria cuando te rogamos los unos por los otros y te pedimos que nos muestres que somos de veras hermanos, hermanas, hijos, hijas de un mismo Padre. OREMOS


Te pedimos Señor por todos los países que sufren a causa del odio, la violencia, la pobreza, las injusticias. OREMOS

“TODOS SOMOS HERMANOS” Te pedimos Señor nos concedas la fuerza necesaria para no bajar los brazos por egoísmo, cansancio o indiferencia mientras


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que nuestro mundo está desangrando, gritando justicia, paz, amor. OREMOS


DECÁLOGO PARA UNA ESPIRITUALIDAD DE LA NO VIOLENCIA

Cada participante leerá un compromiso y en ese momento se enciende una vela de las que está encima del mapa:

1. Nos comprometemos a aprender a reconocer y respetar lo

“sagrado” en cada persona, incluyéndonos a nosotras mismas, y en cada parte de la Creación. Los actos de la persona no-violenta ayudan a liberar lo Divino en el oponente, desde la oscuridad o cautiverio.

2. Nos comprometemos a aceptarnos a nosotras mismas profundamente, “a quienes somos” personalmente, con todos nuestros dones y riqueza, con todas nuestras limitaciones, errores, fallas y debilidades, y a darnos cuenta de que somos aceptadas por Dios. Queremos vivir en la verdad de nosotras mismas, sin excesivo orgullo, con menos delirio de grandeza y falsas expectativas.

3. Nos comprometemos a reconocer que aquello por lo que sentimos resentimiento, y quizá hasta lo detestamos en otro, viene de nuestra dificultad en admirar que esta misma realidad vive también en nosotros mismos. Queremos reconocer y comenzar a renunciar a nuestra propia violencia, que se hace evidente cuando reexaminamos nuestras palabras, gestos y reacciones.


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4. Nos comprometemos a renunciar al dualismo, a la idea del “nosotros-ellos”. Esto nos divide en “gente buena-gente mala” y nos permite satanizar al adversario. Es la raíz de una conducta autoritaria y exclusiva. Genera racismo y posibilita los conflictos y las guerras.

5. Nos comprometemos a enfrentar el miedo y abordarlo con amor, no sólo ni principalmente con valor.

6. Nos comprometemos a comprender y aceptar que la “Nueva Creación”, la construcción de la “Amada Comunidad” es también llevada adelante con otros. Nunca es un “acto solitario”. Esto requiere de paciencia y de capacidad de perdonar.

7. Nos comprometemos a vernos a nosotras mismas como parte de toda la creación con la que promovemos una relación de amor, no de dominio, recordando que la destrucción de nuestro planeta es un problema profundamente espiritual, no simplemente científico o tecnológico. Nosotras somos una sola.

8. Nos comprometemos a estar dispuestas a sufrir, tal vez hasta con alegría, si creemos que ayudaremos a liberar el “hijo de Dios” que hay en los otros. Esto incluye la aceptación de nuestro lugar y momento en la historia con sus traumas y con sus ambigüedades.

9. Nos comprometemos a ser capaces de celebrar, de gozar, cuando la presencia de Dios ha sido aceptada; y cuando no lo ha sido, y a ayudar a descubrir y reconocer este hecho.

10. Nos comprometemos a tomarnos tiempo, a ser pacientes, a plantar las semillas del amor y del perdón en nuestros corazones y a nuestro alrededor. Poco a poco creceremos


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en el amor, en la compasión y en la capacidad para perdonar.

GESTO

x Una vez que hemos finalizado nuestros compromisos unimos nuestras manos ante el mapa y oramos un momento en silencio.

x Y la que dirige la oración entrega a cada hermana la oración de San Francisco. (o se recita juntas o se canta)

Hazme instrumento de tu paz (nº 476) CANTO:

ORACION ECUMÉNICA POR LA PAZ (rezamos una estrofa espontáneamente)

Mujeres y hombres en comunión de Iglesias, de un solo corazón y una patria grande, te confesamos ¡oh Dios de la vida!, en la diversidad de credos y único Dios. Te sentimos presente con rostro de hombre y de mujer, te descubrimos en los rostros de indígenas, de negros y negras, en el sector campesino y urbano, en una iglesia, pueblo de Dios vivida en la diversidad y en la mesa común. Tú te hiciste humano en Jesús de Nazaret, revelación del Padre y del Espíritu de amor. Tú tienes el sueño de una vida digna y plena, con igualdad y justicia en libertad y fe.


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Confiamos en la fuerza de tu Espíritu, que todo lo renueva, que vence la injusticia y la muerte, que aclara la verdad y defiende el derecho de los pueblos. Por eso, ¡oh Dios de la vida!, te expresamos nuestro dolor por los pueblos que viven en guerra, gritamos a una voz el atropello constante a los Derechos Humanos. Haz llover la justicia como rocío mañanero, mantén la esperanza en un proyecto de vida, acompaña nuestro caminar en la fe y la resistencia. Que brote la solidaridad y la hermandad entre pueblos, que la paz sea la meta con justicia social, que tu Reino de amor se concrete en nueva sociedad. que todos los credos, diversidad de culturas y pueblos, construyamos hoy la paz:

con la sangre de los mártires, con tu Palabra hecha vida, con la resistencia y los sueños, con la danza, el canto y la alabanza, con el arco iris que alumbra el camino, con nuestras vidas convertidas en esperanza, con justicia, fruto de la verdad.

Que tu paz, llegue hoy Señor. Te esperamos como el Príncipe de la Paz. Y te lo pedimos por medio de María Inmaculada Reina de la paz. Amén


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NOVENA DE LA INMACULADA - Claretianas Norte · El misterio de la Inmaculada es para Claret y para...

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