Numero 13

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DrosophilaB O L E T NDivulgando la vida

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@drosophilas Sguenos en

Foto

por

Jose

Luis

Garc

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Animales anaerobios

La rabia

El aroma de las emociones

Un proceso de extincin peculiar

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W W W . D R O S O P H I L A . E S

3 Boletn Drosophila n 13, Diciembre 2013

El seis de noviembre de este ao un dinosaurio acapar la atencin de las webs de noticias cientficas. Vivi hace 80 millones de aos en el continente de Laramidia que ahora forma el oeste de Norteamrica. Adems se posiciona como uno de los miembros ms antiguos de la familia Tyrannosauridae. Lo cual parece sugerir que este grupo surgi en en dicha regin. Pero lo que llam la atencin de los medios fue su nombre. Llamndose El Rey del Gore los titulares se escriben solos.

El nombre de la especie completo es Lythronax argestes. Sus largos dientes son el motivo del apelativo sanguinario. El nombre genrico, Lythronax, es una composicin de las palabras griegas lythron (gore o sangre) y anax (rey). Mientras que su epteto especfico hace referencia a unos vientos citados por Homero que venan del suroeste. As se apela a la regin geogrfica de Amrica del Norte donde fue descubierto.

Hasta ah todo bien. Cuando uno descubre una nueva especie es libre (dentro de algunas normas) de ponerle el nombre que quiera. Y si encima demuestras que es de un nuevo gnero mucho mejor. Valgan algunos ejemplos. Este mismo ao se describa una nueva especie de rana y su autor la llam Pristimantis jamescameroni en honor a James Cameron. En el ao 2006 investigadores espaoles nombraron a un hexpodo caverncola como Gollumjapyx smeagol en referencia al personaje de El Seor de los Anillos. Tambin tienen sus insectos Darth Vader (Agathidium vaderi), el Dalai Lama (Dalailama bifurca y D. vadim) e incluso Hitler (Anophthalmus hitleri). A veces, no hace falta darle muchas vueltas a la cabeza y puedes nombrar a una avispa como Aha ha. El entomlogo que la descubri exclam Aha! cuando abri un paquete que le enviaban con ejemplares de insectos dnde iba la nueva avispa.

Pero volvamos a nuestro rey. Lo que me sorprendi al leer la noticia fue la declaracin de uno de sus descubridores: Pensamos que Lythron o sangre representa correctamente su estilo de vida, cubrindose con la sangre de un animal muerto. Admito que mis conocimientos sobre los dinosaurios no van ms all de un Parque Jursico 2.0 con velociraptores ms pequeos y cubiertos de plumas. As que mi intencin no es poner en duda la profesionalidad de los investigadores. Pero esta afirmacin me hizo alzar una ceja en seal de escepticismo. Cmo saben eso? Da la impresin de que en esa frase hay ms de vender un descubrimiento que de rigor cientfico. Sobre todo si tenemos en cuenta que los propios cientficos han querido equiparar la nueva especie con el mtico Tyrannosaurus rex.

Concluyendo, no es necesario exagerar o fantasear para vender la ciencia. El simple hecho de descubrir un dinosaurio ya es ms que atractivo. Es cierto que hay cosas ms sorprendentes que otras. Por ejemplo, la existencia de animales anaerobios har que ms de uno enarquemos las cejas en seal de sorpresa. Y si esto falla, siempre se puede acudir a la nomenclatura binomial.

ngel Luis Len Panal

Editorial

Nmero 13 noviembre 2013

- La biologa en tu cartera, 6

- Matriz GAGO y la estandarizacin en la catalogacin de especies invasoras, 9

- Verdades sobre la produccin de biocombustible de microalgas, 10

- La mirada de Gaia, 13

- El aroma de las emociones, 20

- La rabia, 25

ndice

- Fichando mamferos, 14

- La importancia de llamarse humedal, 15

- Instantes de vida, 18

- Animales anaerobios, 4

Ejemplar de Anophthalmus hitleri.

- Un proceso de extincin peculiar, 22


4 Boletn Drosophila n 12, Junio 2013

Animales anaerobios


Boletn Drosophila n 13, Diciembre 2013 5

Sinceramente no estaba seguro de qu escribir para este nmero de Boletn Drosophila. Tenamos pensado un artculo totalmente distinto y no paraba de darle vueltas una y otra vez hasta que, de pronto, en una de estas clases que verdaderamente te envuelven, el profesor solt un dato que brill en mi cabeza, animales anaerobios. Un dato que siendo estudiante de Biologa te chirra a ms no poder.

La existencia de procariotas unicelulares que pueden vivir sin oxgeno no es nada nuevo, muchas bacterias son capaces de vivir en estas condiciones. Tambin la presencia de eucariotas unicelulares en sistemas marinos anxicos ha sido documentada desde hace dcadas, pero en este caso el salto es mucho m a y o r . H a b l a m o s d e o r g a n i s m o s pluricelulares de nuestro mismo Reino, el Reino Animalia. Estos animales forman parte de la meiofauna, es decir, organismos pluricelulares que su tamao vara entre unos micrmetros y un milmetro. La meiofauna representa e l 60% de los metazoos (pertenecientes al Reino Animalia) que hay sobre la tierra. Pocos grupos de metazoos son capaces de tolerar condiciones de anoxia por cortos perodos de tiempo. Por eso, lo s o r p r e n d e n t e d e e s t o e s q u e v i v e n permanentemente en estas condiciones, s iendo el primer metazoo con estas caractersticas.

Durante los ltimos 10 aos se llevaron a cabo 3 expediciones oceanogrficas para buscar vida en los sedimentos profundos de una cuenca del Mar Mediterrneo. Dicha cuenca se encuentra a unos 192 Km al oeste de la isla de Creta y es de ambiente hipersalino. Mediante varios estudios se descubri que haba 3 especies del phylum Loricifera nuevas para la ciencia, que estaban adaptadas a estas

condiciones de vida sin oxgeno, careciendo incluso de mitocondrias.

Una de las especies que podemos ver en una ilustracin para hacernos una idea de cmo son estos pequeos animalejos es Pliciloricus enigmaticus. En el dibujo podemos apreciar su morfologa, as como su aparato digestivo. En la parte superior en el centro apreciamos una boca alargada que, pasando por el tracto digestivo, llega a un estmago amplio y desemboca en el ano.

Como comentbamos en nuestro nmero monogrfico de zoologa marina, parece que la taxonoma est en declive, sin embargo algunos cientficos estiman que an quedan por descubrir el 86% de las especies terrestres y el 91% de las especies marinas.

Los ltimos descubrimientos parece que nos acercan ms a la ciencia ficcin que a la realidad, lo que quiere decir que vamos por buen camino. El camino que hace que nos cuestionemos las cosas y no pensemos en la ciencia como un dogma. Un camino que nos lleva hacia el conocimiento y que, por desgracia, le estn cerrando las puertas en nuestro pas.

Bibliografa:The first metazoa living in permanently

anoxic conditions. BMC Biology 2010. Roberto Danovaro, Antonio DellAnno, Antonio

Pusceddu, Cristina Gambi & Iben Heiner.

Pablo Escribano lvarezEstudiante de Grado de Biologa en la

Universidad de Sevilla



El billete que trataremos en esta seccin nos llevar de viaje a travs de una imagen poco comn y real del Parque Nacional de las Montaas Simen. Este parque se e n c u e n t r a e n A m h a r a ( R e p b l i c a Democrtica Federal de Etiopa), que es la regin norte del pas y lo conforman una serie de sistemas montaosos con clima semirido que incluye el pico de Ras Dejen (3.543 metros). La cual es la montaa ms alta del pas y la cuarta cumbre del continente africano. Este espacio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Dentro del billete observamos tres animales (un kud menor, un caracal y unos elefantes africanos) y una planta (caf). A priori, podramos pensar que se tratan de especies significativas de este espacio natural pero no es as. Se trata de una representacin de la riqueza natural del pas y solamente el caracal se encuentra en el Parque Nacional de las Montaas Simen.

En el centro de la imagen tenemos un kud menor (Tragelaphus imberbis), un

mamfero herbvoro de tipo antlope del frica Oriental de hbitos nocturnos y crepusculares. Suele vivir en grupos de dos a veinticuatro especmenes. Su velocidad mxima puede llegar a los 70

km/h. Los machos poseen cuernos y coloracin de piel entre gris y marrn y las hembras son de color marrn claro. Adems, ambos poseen diez rayas blancas en el cuerpo y dos flecos blancos en el cuello. Se encuentran extintos en el vecino pas de Djibouti y segn la Unin Internacional para la Conservacin de la Naturaleza su estado actual es de Especie Casi Amenazada sobreviviendo entre el centro y el sur del pas.

A la derecha, contemplamos un ejemplar de caracal (Caracal caracal nubica), un mamfero felino carnvoro. Antiguamente se le conoca como lince africano, aunque no se encuentran emparentados entre s. Suelen ser animales solitarios, excepto en pocas reproductivas. Se alimenta de toda una serie de mamferos de pequeo tamao y hasta de cras de antlope, pero lo ms comn es que se alimente de aves, como el que podemos ver en la imagen. Son capaces incluso de cazar guilas. Esta subespecie se extiende entre Sudn y Etiopa. Histricamente la

La biologa en tu cartera. El billete de Etiopa.



civilizacin egipcia lo domestic para la cacera.

Como curiosidad, en miniatura se muestra tambin una manada de elefantes (Loxodonta africana oleansie). Tampoco se encuentran en este parque nacional debido a que stos habitan dentro del Santuario de vida salvaje de Harar (Santuario de Elefantes de Babille) al sureste del pas. Debido a que el billete intenta mostrar las maravillas biolgicas del pas, el error seguramente ha sido intencionado.

Fuera de escena se representa una planta de cafeto arbigo (Coffea arabica), rubicea de forma arbustiva originaria del este de frica. Supone el principal cultivo en un pas donde la agricultura absorbe aproximadamente el 50% del PIB y casi la totalidad de sus productos se exportan al

resto del planeta. An as, segn las estadsticas de la FAO en 2011, Etiopa estaba en el quinto en la produccin mundial por detrs de Brasil, Vietnam, Indonesia y Colombia.

El billete est fechado en 1997, se encuentra escrito en el anverso en ingls y en el reverso en amhrico (el que se muestra aqu) que es un lenguaje de la regin del Cuerno de frica y se encuentra oficializado en Etiopa. Tiene un valor de 5 Birr, que en e u r o s s e r a n u n o s 2 0 c n t i m o s aproximadamente.

Bernardino Saudo FranqueloLicenciado en Biologa por la Universidad

de Sevilla.

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A menudo, nos cuesta creer que las invasiones biolgicas se hayan convertido en la segunda causa de prdida de biodiversidad. Resulta difcil imaginarse a un mejilln arrasando ecosistemas con un abrir o cerrar d e v a l v a s , o a u n c a r a c o l a f r i c a n o propagndose a una velocidad tan elevada que los medios de control apenas si pueden seguirle la estela. Pero s, este hecho es ya una realidad, al igual que lo es que pese a ser un problema ecolgico, el mercado es el enorme pilar que lo sustenta. Es ste quien en ltima instancia potencia e l t ransporte de mercancas, posibilita la compra-venta de mascotas o redistribuye las plantaciones agrcolas. As pues no parece descabellado pensar que las estrategias y las tcnicas de mercado puedan ser parte de la solucin. Ya que han servido para potenciar el problema.

Mientras un bilogo tarde ms tiempo en decidir si una especie es invasora, de lo que tarda un comprador, en una tienda de mascotas, en conocer el precio de la misma, la naturaleza estar en la parte dbil de la balanza. Y de poco servirn los recursos humanos y econmicos invertidos en la lucha contra las especies invasoras.

Por este motivo nace la necesidad de estandarizar esta lucha, especialmente en lo que compete a la catalogacin de las especies invasoras. Una estandarizacin que es el objetivo del mtodo de la Matriz GAGO. La cual por decirlo de alguna manera, persigue la creacin de un cdigo de barras ambiental. As tras localizar un ejemplar de cualquier especie en una zona nueva, podremos conocer el riesgo

Matriz GAGO y la estandarizacin en la catalogacin de especies invasoras

Ejemplar de cangrejo de ro americano (Procambarus clarkii)



de que la misma se convierta en una especie invasora y en consecuencia actuar o no.

Como todo bilogo sabe, los recursos para investigacin son ms bien escasos, algo que ha obligado a generalizar a nivel espacial, y que en este tema puede ser un grave error. Sirva como ejemplo el caso del cangrejo rojo americano que a nivel general es una amenaza seria. Pero a nivel regional, por ejemplo en la Cuenca del Guadalquivir, es el nico sustento de la avifauna. Erradicarlo sera ms daino de lo que lo es la propia invasin. As mismo, esta falta de medios obliga a trabajar en la escala del hoy para maana. Es decir que yo detecto la invasin hoy, pero la considero como tal en el maana de modo que ya es incontrolable.

As pues, cualquier mtodo que pretenda la catalogacin de este tipo de especies debe llevarse a cabo desde la escala del aqu y ahora. Y por supuesto a un bajo coste. De ah que el principal objetivo de la primera fase del citado mtodo sea filtrar entre todas las especies entrantes en un ecosistema. Slo aquellas que pueden suponer un riesgo. Y lo hace de una manera muy visual, pues se limita a cruzar las especies nativas con aquellas susceptibles de ser invasoras. Basndose en una serie de parmetros para establecer relaciones de competitividad. Es decir, si tengo dos especies que comen lo mismo, anidan en el mismo sustrato y se trasmiten enfermedades cabe pensar que del encuentro entre ambas una saldr perjudicada.

Para determinar hacia dnde se inclina la balanza de competitividad recurrimos a una segunda fase. Nos acercamos al ecosistema para obtener un valor de vulnerabilidad y de invasividad. Y este es quizs el punto de mayor controversia en cuanto a la catalogacin. Esta cuestin es la que ha tumbado la mayora de esfuerzos para catalogar las especies invasoras. Resultaba prcticamente imposible encontrar un consenso en cuanto a cmo de vulnerable es un entorno o a cmo de invasiva es una especie. Y pese a que habamos criticado al mercado por su influencia en las invasiones, la respuesta se encontraba en este. Lo que se hace en esta segunda fase es aplicar un mtodo muy similar al que usan las compaas aseguradoras de coches. stas pueden estimar el valor del seguro por encima o por debajo del precio estndar en funcin del tipo de vehculo, edad del conductor y zona del pas. En el caso de las e s p e c i e s i n v a s o r a s , a t e n o r d e s u s caractersticas podemos establecer un valor ms alto o ms bajo de riesgo de invasin.

En aquellos casos que el riesgo sea alto, slo queda un interrogante: actuar o no. Y si bien la respuesta a primera vista puede resultar obvia, no lo es tanto. Baste pensar en el anterior caso comentado del cangrejo rojo americano. Por lo que la ltima fase del mtodo permite realizar una serie de clculos con los valores obtenidos para decidir si, pese a valores altos de invasin, la actuacin es recomendable o no.

As pues, del mismo modo que un censo es mucho ms que un nmero, este sistema de codificacin es mucho ms que un catlogo. Permite recomendar una actuacin para cualquier regin concreta desde el primer individuo. Y de esta manera esquivar las consideraciones polticas o sociales que se ciernen en torno a ciertas especies comerciales, como aquellas objeto de caza, en cuanto a considerarlas invasoras o no.

Ivn Lobato Gago Consultor medioambiental en Ciconia

Consultores S.L.

Ejemplares de caracol manzana (Pomacea diffusa)



El cultivo de microalgas se ha venido usando hasta la actualidad para la produccin de sustancias de inters, de elevado coste aadido y la produccin de biomasa para nutricin animal o vegetal. Sin embargo, la necesidad de reducir emisiones de gases de efecto invernadero y buscar combustibles ms viables, ha producido un gran desarrollo en el c a m p o d e l o s b i o c o m b u s t i b l e s . Principalmente, los que permiten su utilizacin en mquinas actuales, como son los casos del biodiesel y etanol.

En Europa los motores diesel nos han

hecho decantarnos por la produccin de biodiesel, producindose un gran aumento en el mercado de dicho producto y siendo actualmente los mayores productores. Alemania destaca como el productor y consumidor ms fuerte de biodiesel. En

Espaa el mercado an no se encuentra afianzado, aunque somos capaces de producir 4 Mton, no consumimos prcticamente nada y lo poco que consumimos lo importamos desde otros pases, incluso importamos la materias primas para su produccin.

L o s s i s t e m a s d e p r o d u c c i n d e

b i o c o m b u s t i b l e s s e e n c u e n t r a n y a desarrollados para otros cultivos, pero no para los de microalgas, que tericamente al crecer de forma ms rpida y permitir el cosechado continuo, podran presentar una produccin terica muy elevada. Adems del aspecto de la produccin otra ventaja importante de los cultivos de microalgas para combustibles es la no necesidad de suelo cultivable, cosa que evita la competencia con el mercado alimenticio. Concretamente los biocombustibles de microalgas se consideran

Verdades sobre la produccin de

biocombustible de microalgas



biocombustibles de segunda generacin, es decir, obtenidos a partir de materia vegetal no comestible, aspecto que reduce an ms la competencia con el mercado alimenticio.

El crecimiento de un cultivo de algas

necesita principalmente luz, dixido de carbono, nutrientes, liberacin de oxgeno, un pH estable, una temperatura estable y mantener un mezcla homognea. Estas condiciones son relativamente fciles de mantener en laboratorio, sin embargo su extrapolacin y control a escala industrial es bastante ms difcil y sobretodo muy costoso.

El coste principal es la instalacin de los

fotorreactores donde crece el cultivo, pudindose clasificar como tipo cerrado (siendo los raceways los ms usados) y tipo abierto (principalmente los reactores tubulares). Ambos tipos presentan problemas y ventajas, los de tipo cerrado permiten un mayor control del cultivo, mayor calidad y

produccin, pero sus costes son muy superiores a los abiertos, siendo estos los ms usados a escala industrial, aunque su control sea ms difcil dado que estn en contacto con la atmsfera. Aunque se utilicen reactores raceways que son ms viables para la produccin de biodiesel al presentar un menor consumo energt ico para una mayor produccin de biomasa algal, actualmente el c o s t e d e i n s t a l a c i n d e l s i s t e m a y mantenimiento de todo el proceso hace que el coste del producto sea elevado, muy por encima del precio que permite el mercado de los combustibles.

Existen distintos puntos que abordar para hacer viable econmicamente la produccin de biocombustible desde algas. Para comenzar es inviable la suministracin de nutrientes como se hace en la actualidad, es decir, eliminar el uso de abonos para suministrar nutrientes y recurrir al uso de aguas fecales, de esta manera se reduciran costes y se realiza una parte



importante de los sistemas de depuracin de aguas. El uso de aguas fecales solventa tambin un problema de utilizacin de recursos limitados, principalmente el del fsforo, que se encuentra de forma utilizable principalmente en yacimientos limitados de Marruecos y China. Para producir biodiesel solo para un 10% del combustible consumido en Espaa necesitaramos 10 veces la produccin de abono rico en fsforo producido en nuestro pas.

Otro factor importante y fundamental es

e l d i x i d o d e c a r b o n o , q u e p u e d e suministrarse puro pero esto es costoso, siendo la opcin ms viable y ecolgica la utilizacin de gases de escape de las distintas industrias. Las microalgas presentan la capacidad de utilizar distintos gases de escape, reduciendo las emisiones de las distintas industrias.

Los fotorreactores son caros, as que el estudio de sistemas ms productivos y materiales ms baratos puede reducir las inversiones iniciales. Dentro de lo necesario, la mejora en la eficiencia del proceso es fundamental, principalmente en el proceso cosechado de biomasa y en el de obtencin y tratado de las sustancias necesarias para producir los biocombustibles. Todo esto supone una inversin en I+D que pocas empresas pueden permitirse.

Para mejorar la productividad es

fundamental el uso de microalgas concretas, que deben presentar ciertas caractersticas, entre las que cabra destacar: un rpido crecimiento, elevado rendimiento de cidos grasos (en el caso del biodiesel) y una fcil recoleccin. Todo esto supone implicar dinero para la mejora (usando biotecnologa) o bsqueda de la cepa oportuna, bien del medio o de algn banco de cultivos. En la actualidad se comienza a hablar del cultivo de comunidades, esto aunque pueda dar lugar a una reduccin de la produccin, puede suponer grandes mejoras al conferir al cultivo una mayor estabilidad, reduciendo la

probabilidad de contaminacin y los costes asociados a esta.

Como medida final para hacer rentable la

p r o d u c c i n d e b i o c o m b u s t i b l e d e s d e m i c r o a l g a s s e h a c e f u n d a m e n t a l l a coproduccin. Los residuos orgnicos generados pueden ser tratados para la obtencin de sustancias de inters, con elevado coste en el mercado (aunque supone un serio coste en tratamiento) o biofertilizantes (de bajo coste productivo). Todo esto supone una reduccin en los costes de eliminacin de residuos y una mejora en la rentabilidad del proceso al generar beneficios de los residuos, reduciendo el precio final del biocombustible y por tanto hacindolo ms competitivo.

Finalmente, como conclusin, podramos

decir que el mercado actual de combustibles impone unos precios que hacen que la obtencin de biocombustibles desde microalgas no sea rentable. Tal vez en unos aos, la tecnologa y la subida de los precios de los combustibles fsiles hagan rentable esta produccin.

Ismael Ferreira PalomoLicenciado en Biologa por la Universidad

de Sevilla

B I O T R I V I A D O SEnvanos tus preguntas para la primera

versin del Biotriviados, el juego de trivial sobre ciencia que estamos preparando junto a

BioDic - Diccionario de trminos cientficos



Artculo 45.1 de la Constitucin espaola: Todos tienen el derecho a

disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la

persona, as como el deber de conservarlo

Para abastecer nuestros hogares de electricidad es necesario transportarla desde los lugares donde se produce o almacena. Para ello se han levantado infinidad de postes para sujetar los cables de alta tensin. Aunque a veces esto es un peligro para humanos tambin, aqu me centrar en contar los riesgos que suponen para la fauna y las soluciones que se pueden utilizar. Muchas aves no ven el cableado en vuelo lo que deriva en una colisin muchas veces mortal. Por otro lado, cuando un ave se posa en un poste en mal estado o no adaptado a aves sufre una electrocucin. Muchas especies amenazadas sufren este problema, algunas tan sonadas como el guila imperial ibrica, el alimoche, el buitre negro, etc. En muchos espacios de importancia para las aves se han tomado, o se deberan tomar, ciertas medidas.

En el cableado se colocan objetos (espirales, bolas, etc) que generan un contraste que permite al ave ver y esquivar el cable. En el caso de las electrocuciones se colocan unos apoyos especiales que evitan el contacto del pjaro con el cable. Hay casos extremos, como en algunas zonas de hbitat del urogallo, donde se recurre a soterrar la lnea elctrica.

El problema viene cuando, por ejemplo en un espacio natural del entorno de Doana, donde supuestamente todo esto debera estar controlado, aparecen en pocos das una cigea y un crabo literalmente pegados a los cables. Para el inters del lector, decir que si os encontris alguno de estos casos, el poste debe tener un cdigo que es el que permite identificarlo cuando deis el aviso. Parece mentira que en una zona cercana a los lugares de nidificacin de muchas especies amenazadas an queden postes obsoletos y peligrosos para la fauna. Soluciones hay, lo nico que hace falta es voluntad para arreglar el problema.

La mirada de Gaia

Eduardo Jos Rodrguez Rodrguez. Licenciado en Biologa por la Universidad de Sevilla.



Morfologa e identificacin

Con un cuerpo de 64 a 88 mm y un peso entre 7,5 a 16,5 gramos, puede confundirse con e j e m p l a r e s d e m u s g a o p a t i b l a n c o . Diferencindose principalmente por su tamao y color casi blanco en el vientre, existiendo ejemplares activos todo el ao. Caractersticas de la reproduccin muy similares a las de el erizo europeo, pero por lo general presentando un menor nmero de cras (1-3).

Presenta una cola ms corta que la de otras especies cercanas, con hocico alargado como el resto de especies de la familia. El color de su pelaje es negro en el dorso y blanco en el vientre. Presentando al final de la cola una hilera de pelos que tiene aspecto de pincel.

Al igual que el musgao patiblanco presenta pelos rgidos en pies y manos, lo que les

permite un mayor desplazamiento bajo el agua. Aunque stos como el tamao de las patas son ms cortos en el musgao de cabrera.

HbitatSe presupone al tratarse de un animal tan parecido al musgao patiblanco que como l, nos encontramos ante un animal territorial ligado a medios acuticos como cauces fluviale. Pero sin excesiva dependencia de estos, pues sus caractersticas nos informan de una menor adaptacin al nado. Es decir, no es necesario plenamente un medio acutico, encontrndose en cultivos hortcolas y bosques hmedos.

AlimentacinSu alimentacin se basa en larvas de invertebrados acuticos y terrestres, caracoles y

Fichando mamferos

Especie: Neomys anomalus

Autor: Cabrera, 1907Nombre comn: musgao de cabrera.Estado de Conservacin: LC

Orden: SoricomorphaFamilia: Soricidae (Sorcidos)Gnero: Neomys



larvas de anf ibios y peces . Aunque principalmente est compuesta de presas terrestres como lombrices, insectos e incluso mamferos de menor tamao.

ComportamientoEstos animales pueden encontrarse activos tanto de da como de noche.

ReproduccinPresentan una gestacin de unos veinte das, de la que nacen en torno a 6 o 8 cras, siendo mayo y junio los meses que presentan los

picos en el nmero de nacimientos por mes en Europa. Las cras recin nacidas no superan el gramo de peso y estn poco desarrolladas. Durante los primeros 10-15 das crecen rpido, producindose el destete un mes despus del nacimiento. Los jvenes podrn pasar unos das ms con la madre y finalmente se dispersarn.

La importancia de llamarse humedal

A menudo, el funcionamiento de la ecosfera se nos presenta como una trama de gradientes al que el hombre busca lmites o acotaciones s in ms pretensin que desmenuzar la realidad con el objetivo de hacer ms factible su conocimiento y gestin. As, por medio de estas unidades operativas, el hombre intenta desarrollar un vehculo de comunicacin y trabajo universal con visos a cumplir los objetivos anteriores. De esta forma, desde el punto de vista del gradiente

existente entre ecosistemas acuticos y terrestres, se reconocen claramente las entidades situadas en sus extremos: por un lado encontraramos a los ocanos o ros m i e n t r a s q u e e n e l o t r o e x t r e m o encontraramos los ecosistemas tpicamente terrestres. Hasta aqu no debe existir controversia, el problema surge cuando se intenta buscar una definicin o unos lmites precisos al segmento de este gradiente ecolgico que se encuentra alejado de estos

El flamenco (Phoenicopteriformes sp) es un ave tpica de los humedales.

Ismael Ferreira Palomo. Licenciado en Biologa por la Universidad de

Sevilla.



dos extremos anteriormente citados, siendo esto lo que ocurre con los humedales.

Los humedales son una zona de frontera o ecotono que muestran la particularidad de

ser altamente heterogneos y sobre todo muy dinmicos, encontrndonos de lleno en el campo de los ecosistemas fluctuantes. Por esta razn, desarrollar un concepto de humedal resulta tarea tan compleja. La mayora de definiciones denominadas formales intentan describir los elementos bsicos de los humedales atendiendo al procedimiento de desmenuzar la realidad en unidades operacionales, pero este trabajo es tedioso y aunque puede resultar atractivo al pblico que desconoce la materia, puesto que entiende los humedales como entidades fisionmicas que albergan componentes emblemticos para la conservacin, (especialmente organismos acuticos y comunidades de aves) lo hace en base a criterios tan poco sl idos como los componentes visuales bsicos en lugar de por los procesos funcionales (ciclos de materia y flujos de energa entre otros muchos), menos evidentes por permanecer ocultos, pero que son los que condicionan en mayor o menor medida este particular paisaje.

De todas las definiciones formales que existen, la ms conocida y la nica con cierta proyeccin internacional es la elaborada por el Convenio Ramsar quien considera como humedal las extensiones de marismas,

pantanos, turberas o superficies cubiertas de agua, sean stas de rgimen natural o artificial, permanentes o temporales, estancadas o corrientes, dulces, salobres o saladas, incluidas las extensiones de agua marina cuya profundidad en marea baja no exceda los seis metros.

Imagino que a estas alturas del discurso, el lector se estar preguntando cul es el motivo que me lleva a escribir sobre los humedales, tambin conocidos como charcas de manera ms general. Pues bien, no es otro que las n u m e r o s a s m o d i f i c a c i o n e s q u e h a n experimentado stos durante el siglo XX, quienes como consecuencia de las actividades humanas (que se han venido intensificando desde el primer tercio del siglo pasado a la actualidad) han derivado en la aparicin en nuestro territorio de seales alarmantes e inquietantes que nos estn poniendo sobre aviso de la magnitud e intensidad de las alteraciones que sufren nuestros humedales y las consecuencias que lleva aparejada su deterioro o prdida. De esta manera, los limnlogos y eclogos acuticos llevan apreciando fundamentalmente dos tipos de seales, por un lado un aumento de la eutrofia en la masa de agua (condicin de una masa de agua que se encuentra en la etapa de mxima capacidad productiva; es decir, con exceso de nutrientes, especialmente fsforo y nitrgeno), y derivada de la anterior, el recambio de las especies vegetales acuticas autctonas de estos humedales por otras exticas y de marcado carcter invasor, que acaban desplazando y llevando a la desaparicin de las primeras. La segunda, hace referencia al deterioro o prdida de estas peculiares masas de agua por desecacin de zonas pantanosas con fines agrcolas, lo que nos lleva a la siguiente reflexin: En qu nos beneficia o perjudica la prdida y deterioro tanto del humedal como de la calidad de sus aguas?. Intentar enumerar brevemente algunas de las razones por las que debemos cuidar y respetar estos ecosistemas, a menudo olvidados por la ciudadana y a los que los propios cientficos le prestan poca atencin con respecto a otros ecosistemas.

Flores del gnero Ranunculus



1. Control de inundaciones: actan como esponjas almacenando y liberando lentamente el agua de lluvia. Adems, muchos humedales contribuyen a recargar acuferos, quienes almacenan el 97% de las aguas dulces no congeladas del planeta y aportan agua a casi un tercio de la poblacin mundial.

2. Proteccin contra tormentas, t s u n a m i s y o t r o s f e n m e n o s climticos: las marismas salobres, los manglares y otros humedales arbolados sirven de primera lnea de defensa frente a es tos fenmenos meteoro lg icos de descomunales magnitudes, reduciendo la accin del viento, as como de las olas y corrientes.

3 . Sumideros de carbono: La degradacin de humedales liberara grandes c a n t i d a d e s d e d i x i d o d e c a r b o n o (responsable del efecto de calentamiento global) y otros gases de efecto invernadero como metano que contribuyen al aumento de la temperatura mundial.

4. Depuracin de aguas: Las plantas y suelos que conforman los humedales eliminan altas concentraciones de nitrgeno y fsforo y, en algunos casos, productos qumicos txicos, asociados comnmente a la escorrenta agrcola.

5. Reservorio de biodiversidad: los h u m e d a l e s s i r v e n d e s u s t e n t o y descansadores para innumerables especies silvestres dependientes de estas zonas hmedas. As, ms del 40% de las especies del mundo y el 12% de todas las especies

animales se hallan en los humedales de agua dulce.

6. Turismo-Educacin Ambiental-Investigacin: Son lugares idneos para involucrar al pblico en general y a los escolares particularmente en experiencias prcticas de aprendizaje de manera recreativa y ldica, elevndose la conciencia respecto a las cuestiones socio-ambientales de estos peculiares ecosistemas. Asimismo deben ser lugares potenciados con finalidad cientfica.

7. Por su valor cultural y patrimonial: Con frecuencia los humedales revisten importancia histrica, arqueolgica u otros motivos culturales en el plano tanto local como nacional. Adems de esto, debemos pretender conservar un pedazo de nuestro patrimonio ecolgico que nos ha sido prestado para nuestro disfrute.

Espero este breve acercamiento a los humedales y al fundamental papel que juegan como ecosistema les haya sido agradable y tras ello, todos le hagamos una respetuosa visita el prximo da 2 de Febrero, Da Mundial de los Humedales, para darle las gracias por realizar su tarea de manera tan efectiva y paciente.

Me despido de vosotros, no sin antes dejarles con una cita de Rabindranath Tagore que ilustra nuestra relacin con los humedales (y no slo con ellos) en los ltimos 100 aos: La tierra es insultada y ofrece sus flores como respuesta. Cuiden sus humedales, puede que maana necesiten de ellos.

Eduardo Bazo CoronillaEstudiante de la Licenciatura en Biologa

en la Universidad de Sevilla

Panormica de la Laguna de Zarracatn (Utrera)



La mirada de la vida

Lepus granatensis (Parque Natural Sierra Andjar)

Papilio machaon (Desi Huertas Rojas)



Dama dama (Juan Pedro Serrano Len) Drosophyllum lusitanicum (Jose Luis Garca)

Lynx pardinus (Parque Natural Sierra Andjar)Ophrys tenthredinifera (Jose Luis Garca)


20 Boletn Drosophila n 12, Junio 2013

No existe un claro consenso sobre la definicin de emocin, definindose muchas veces como una alteracin o agitacin repentina causada por un sentimiento fuerte de miedo, sorpresa, alegra, etc. Algunos autores se centran en la dimensin afectiva y otros prefieren centrarse en los aspectos fisiolgicos o comportamentales. En cualquier caso se considera emocin primaria o simple a las que son acompaadas por expresiones faciales o gestos universales independientemente del ambiente o la cultura. De estas existen seis: alegra, tristeza, miedo, enfado, sorpresa y asco. Una emocin compleja o secundaria es el resultado de la combinacin de varias emociones simples, por ejemplo: nostalgia, amor

El aroma de las emociones



Hay que tener en cuenta tambin que hay una diferencia entre lo que es el sentimiento y la emocin, ya que estn controlados por circuitos y estructuras neurolgicas relacionadas pero diferentes. El sistema que controla las emociones es el sistema lmbico. En el circuito participan estructuras importantes: amgdala, hipocampo o corteza.

Por su parte la informacin olfativa es leda en nuestro cerebro gracias a dos tipos de reas: corteza (produce la percepcin consciente del olor) y sistema lmbico (da el componente inconsciente: olor agradable, desagradable y emocin).

Como podemos comprobar ambos sistemas (emociones y olfativo) se encuentran relacionados estructuralmente en nuestro cerebro. Esto facilita un aprendizaje asociativo: un olor es fcilmente asociable a una situacin, con la emocin del momento, creando as un recuerdo asociado a un olor. Esto es el motivo por el que determinados olores o fragancias nos transportan a situaciones pasadas, incluso de nuestra niez y evoquemos lugares o acontecimientos relacionados. Adems del recuerdo se produce una emocin (alegra, tristeza, nostalgia) correspondiente a la emocin que nuestro cerebro tiene asociada a ese olor.

Distintos desrdenes emocionales, depresin, bipolaridad, o ansiedad tienen una relacin muy importante con el sistema olfatorio. Por ejemplo una interaccin exagerada entre emocin y olor en estados de humor negativos convierten olores neutros en aversivos, pasando a ser posteriormente

en olores causantes de ansiedad y depresin en ambientes estresantes.

Adems el olfato tiene una gran influencia en el comportamiento social. El olfato parece jugar un papel primordial en la eleccin de pareja y ayuda a detectar emociones en otras personas. Existen estudios que demuestran que personas que nacen con un defecto en el sistema olfativo o con una capacidad menor para diferenciar olores por cualquier motivo tienen una gran inseguridad social. Los hombres que nacen con un sentido de olfaccin disminuido tienen menos relaciones sexuales y mujeres afectadas por esta disminucin de la percepcin olfativa se sienten menos seguras con su pareja. Esto es una muestra de la importancia del olor en las relaciones personales y la gran importancia en la aceptacin social de este.

Los olores pueden modular humor, cognicin y comportamiento. Debido a esta capacidad para modular el humor gracias al papel del sistema lmbico podemos clasificar de forma general olores que nos relajan o que nos exciten, es lo que se conoce como aromaterapia y se basa en el doble uso funcional del sistema lmbico: emocional y olfatorio.

Sara Pinto Morales. Licenciada en Biologa por la Universidad de

Sevilla.

www.certificarq.es



Las extinciones con mayor o menor profundidad son acontecimientos no slo comunes desde el origen de la vida en nuestro planeta, sino asimismo, totalmente moderadoras de las dist intas formas de seres vivos caractersticas de las distintas eras geolgicas. De ese modo se han producido cinco grandes extinciones masivas, en las que han desaparecido un 65 % del total de los organismos y entre un 20 y un 25 % de las familias en un breve perodo de tiempo geolgico.

De este modo nos encontramos desde la primera gran extincin masiva de finales del Ordovcico hace 438 millones de aos hasta la famosa extincin que acab a finales del Cretcico, hace 65 millones de aos, con los dinosaurios, pterosaurios y otras conocidas formas de vida. En todas ellas nos encontramos que son responsabilidad de factores endgenos de la propia biosfera, cambios climticos bruscos, accin volcnica o choque de meteoritos. En

muchos casos son una mezcla de varios de los factores anteriormente citados, no slo debidas a la accin de uno slo.

Pero desde hace unos miles de aos nos enfrentamos a un proceso de extincin de signo distinto a los anteriores. Nos enfrentamos a una extincin de caractersticas tan devastadoras como las cinco grandes extinciones precedentes, con tasas de extincin como las calculadas por el bilogo de Harvard E. O. Wilson, de prdida de 30.000 especies al ao, unas tres especies a la hora.

Sin embargo, ahora no son las causas fsicas que han definido las extinciones anteriores las causantes de esta ltima, sino la transformacin del paisaje, la sobreexplotacin de especies, la contaminacin o la introduccin de especies exticas. Sin ningn precedente anterior en la historia de la vida, todo es debido a la accin de una sola especie, la nuestra.

Un proceso de extincin peculiar

Las dos especies de moas (gnero Dinornis) que vivan en Nueva Zelanda se extinguieron por la presin antrpica.



Diversos cientficos han situado el inicio de esta gran extincin hace 100.000 aos, cuando los primeros seres humanos modernos empezaron a dispersarse por la superficie terrestre desde la cuna de la humanidad, en el continente africano. Aunque existen discusiones sobre la totalidad de la responsabilidad de los seres humanos en este proceso y en distintos escenarios, achacndolo en muchos casos a fenmenos fsicos como cambios climticos, existen pocas dudas sobre si fue fundamental la accin humana en este exterminio.

La extincin de la megafauna en Amrica del Norte (con mastodontes, camellos, felinos, osos de diverso tipo o caballos como vctimas), la de

Amrica del Sur (con marsupiales gigantes, roedores o aves) o en Australia, son un ejemplo de ello. A pesar de lo rudimentario de las armas y tcnicas utilizadas por estas personas, el hecho de que no evolucionaran y como el caso de la megafauna africana con los seres humanos, no posibilit que nos vieran como una amenaza y estuvieran adaptadas para sobrevivir a nuestros ataques.

La segunda fase de la 6 gran extincin comenz con un fenmeno absolutamente revolucionario, la invencin de la agricultura hace 10.000 aos en Oriente Prximo. Ello permiti y a diferencia de las sociedades de cazadores- recolectores, el asentamiento de poblaciones



humanas ms o menos estables. Asimismo, permiti un incremento del nmero de seres humanos, descartando o minimizando gracias a la mayor productividad de los cultivos, los factores limitantes naturales que limitaban el crecimiento de las poblaciones.

La extincin de especies tan singulares como el hipoptamo de Chipre o el mamut de Cerdea fueron el principio de esta ola. Casos como el de Madagascar con lmures gigantes o la famosa ave elefante de Simbad el Marino, el de Nueva Zelanda con los moas y el guila de Haast o las de tantas especies de aves en las islas del Pacfico forman parte tambin de esta hornada.

Pero una subfase es interesante destacar en esta segunda fase. Desde los albores de la Revolucin Industrial, aproximadamente desde finales del siglo XVIII, el ritmo de extincin y el impacto absolutamente brutal en los ecosistemas ha tomado una nueva dimensin, acrecentado por el Calentamiento Global de origen antrpico puesto de manifiesto en las ltimas dcadas.

Y aunque de nuevo he de citar a especies como el tarpn (caballo salvaje en Europa), el len del Atlas o el lobo marsupial, hay que hacer tambin hincapi en la desaparicin de miles de especies de plantas, microorganismos u otros seres vivos. Esto va ms all de las especies emblemticas que suelen ser grandes mamferos o aves, debido a la riqueza gentica que la diversidad en su sentido amplio atesora y que podra contribuir al desarrollo en diversos campos como el farmacolgico o el tecnolgico.

Debido a la singularidad de esta ltima gran extincin, sobre todo en su segunda fase, muchos investigadores abogan por sustituir el trmino Antropoceno al de Holoceno como era geolgica desde hace unos 10.000 aos. Por primera vez la caracterizacin de una era geolgica viene definida por la accin de una nica especie.

Como resulta evidente, el actual proceso pone en peligro no slo a unas pocas especies, sino a la biodiversidad en su conjunto, con el ser humano incluido en ella. Debemos avanzar en el desarrollo de tecnologas ms sostenibles y que no resulten tan devastadores como las actuales; frenar un consumo insostenible aunque concentrado en una minora tanto en los pases del Norte como en los del Sur o la extensin y proteccin de la naturaleza ms de all de las islas que son las reservas naturales o zonas verdes, promoviendo un nuevo reencuentro del ser humano con la naturaleza. Y

quizs ms importante, tenemos que buscar la manera de garantizar un nivel de vida decente para millones de personas en el mundo pero reinventando unos modelos de consumo y de sociedad que vayan ms all del modelo tan trgico que hemos construido en Occidente, que no ha posibilitado ni la proteccin medioambiental ni un nivel de vida aceptable y natural para la mayora de la poblacin.

Santiago Jos Amador Rodrguez. Licenciado en Biologa por Universidad de Sevilla

El Megatherium formaba parte de la megafauna de Sudamrica.

Uno de los ltimos ejemplares de tilacino (Thylacinus cynocephalus).



QU ES LA RABIA?La rabia es una enfermedad vrica del hombre y de los animales que cursa con una encefalitis aguda, progresiva y mortal, que se transmite por la mordedura de animales infectados. Est producida por virus pertenecientes al gnero Lyssavirus (virus de ARN) de los que se conocen, al menos, trece especies distintas basadas en sus caractersticas genticas, antignicas y patognicas. De entre ellas, la especie ms importante es el virus de la rabia clsica (RABV), pero tambin se han detectado otros Lyssavirus en murcilagos i n s e c t v o r o s c a p a c e s d e c a u s a r u n a enfermedad, la rabia de los quirpteros, indistinguible de la rabia clsica aunque mucho menos frecuente.

La rabia se conoce desde hace siglos. En 1880 Louis Pasteur identif ic el virus que anualmente sigue matando a ms de 55.000 personas en el mundo ( 95% en frica y Asia)

DNDE EST PRESENTE LA RABIA?

El virus de la rabia est presente en todos los continentes, sobre todo en pases de Asia, frica, Centro y Sudamrica. Europa est prcticamente libre de la enfermedad , se ha notificado casos en Europa Oriental. En Marruecos se sealan oficialmente ms de 250 casos al ao. El pasado 31 de Agosto se declar un foco en Francia (zona Vende, Oeste del pas), introducido por unos turistas que adoptaron un cachorro en el pas Magreb. En Febrero 2012 otros turistas holandeses llevaron un cachorro a su pas , el perro estuvo 4 dias en Mlaga y posteriormente se declar un foco en Holanda y este ao en el mes de Junio un caso en un pueblo de Toledo en el que el perro agredi a tres personas. Desde 1980 hasta lo

que llevamos de 2013 se han denunciado 153 casos de rabia animal en Espaa (129 perros y 12 gatos), pero todos en las ciudades autnomas de Ceuta y Melilla.

Todos los aos casi un milln y medio de ciudadanos magrebes utilizan ms de 350.000 vehculos en la "operacin paso del estrecho", entre Marruecos y los puertos espaoles de Algeciras (que acoge un 70% del paso de personas), Almera (23%), Mlaga (3%), Motril, Tarifa y Alicante. Mayoritariamente son ciudadanos de origen magreb o inmigrantes residentes en pases como Francia, Pases Bajos o Alemania que hacen el trayecto de ida y vuelta a travesando Espaa por carretera . Es relativamente fcil que viajen con sus mascotas o, lo que es peor, que recojan animales en sus pases

La rabia

Imagen captada con un microscopio electrnico de transmisin (MET). En ella se ve un grupo de virus de la rabia (en color gris oscuro y con forma de varilla).



de origen. Por lo que no hay que bajar la guardia contra esta terrible enfermedad que tenemos tan cerca.

CMO SE TRANSMITE Y PROPAGA LA ENFERMEDAD?

La rabia se transmite por la saliva de un animal infectado. Se han documentado casos por inhalacin en cuevas densamente pobladas por murcilagos. La infeccin se produce fundamentalmente por heridas de mordeduras, permitiendo el contacto de la saliva con los tejidos. A travs de los nervios migra al cerebro, donde se multiplica rpidamente dando lugar a los signos clnicos. Posteriormente el virus se desplaza hacia los nervios perifricos y glndulas salivales.

QU RIESGOS REPRESENTA ESTA ENFERMEDAD PARA LA SALUD PBLICA?

La rabia se considera una de las enfermedades zoonticas ms graves que existen en el mundo. Los animales salvajes rabiosos pierden su temor natural al ser humano, lo que aumenta el riesgo de sufrir incidencias. Cualquier mordedura

conviene lavar la herida rpidamente con agua y jabn , y notificarlo al servicio de urgencia del hospital ms cercano.

CULES SON LOS SIGNOS CLNICOS DE LA ENFERMEDAD?

Los signos clnicos de la rabia en los animales varan en funcin del efecto del virus en el cerebro. Los signos ms frecuentes son cambios de comportamiento repentinos, vocalizacin, salivacin excesiva y finalmente asfixia que produce la muerte del animal.

CMO SE DIAGNOSTICA LA ENFERMEDAD?

Los signos clnicos pueden ser indicativos de la enfermedad, pero para confirmar el diagnstico se requieren pruebas de laboratorio.

QU SE HACE PARA PREVENIR O CONTROLAR LA ENFERMEDAD?

La vacunacin es la mejor forma de prevenir la enfermedad, en nuestra comunidad la vacunacin es obligatoria. En Espaa, y ms concretamente en Andaluca, una elevada proporcin de los perros estn debidamente identificados (Orden de 14 de junio de 2006, por la que se desarrolla el Decreto 92/2005, de 29 de marzo, por el que se regulan la identificacin y los registros de determinados animales de compaa en la Comunidad Autnoma de Andaluca) y, por tanto, deberan estar vacunados (Orden de 19 de abril de 2010, por la que se establecen los tratamientos obligatorios de los animales de compaa, los datos para su identificacin en la venta y los mtodos de sacrificio de los mismos en la Comunidad Autnoma de Andaluca).

Federico Vilaplana ValverdeVeterinario Clnico con 33 aos de experiencia y

Presidente del Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de Cdiz.

Perro afectado por la rabia



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Boletn Drosophila - Divulgando la vida.Editores: ngel Leon, Ismael Ferreira, Pablo Escribano, Francisco Glvez, Eduardo Bazo Coronilla, Sara Pinto Morales y Bernardino Saudo Franquelo.Editado en Avda Reina Mercedes 31 Local Fondo (BioScripts & IguannaWeb), Sevilla, 41012 (Espaa)ISSN digital: 2253-6930

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