P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es...

20
BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras o poemas de hasta 20 versos a: [email protected] Búscanos en Facebook, Twitter, o visita nuestra web: www.papenfusslarevista. wordpress.com

Transcript of P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es...

Page 1: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS

VALENCIA NÚM. 14

PAPENFUSS

PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar

enviando relatos de hasta 800 palabras o poemas de hasta 20 versos a:

[email protected]

Búscanos en Facebook, Twitter, o visita nuestra web:

www.papenfusslarevista.wordpress.com

Page 2: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

María GilSierra

Sonia Pina Eva GarcíaMartín

María AntoniaRamos Prada

@Om_duart AlejandroCamacho

Elena BethencourtRodríguez

MustaphaHandar

Juan AntonioMorán

Nuria RozasÁlvarez

AlbertoJesús Vargas

Patricia Collazo

Paloma Hidalgo Díez

SusanaRevuelta

AnaVidal

Pily Barba IvánRomero

CarlosSáez

TOMAOS UNOS

MINUTOS Y ESCANEAD

CON EL MÓVIL LOS

CÓDIGOS QR DE LOS

AUTORES Y LAS

AUTORAS

COLABORADORAS

Y DISFRUTAD DE SU

TALENTO.

SIN SU AYUDA,

PAPENFUSS NO SERÍA

POSIBLE.

Page 3: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

E l capitán Anzuelo ha regresado

y trae perturbadoras noticias:

—Hemos encontrado una prueba de-

terminante. Los gotaformistas se

equivocan.

Ante tal estupor, la mayoría del pue-

blo prendió al capitán, los tridentes

más afilados lo señalaban, el mar

estaba bullicioso, hambriento de sa-

crificio, pero en los adentros de cada

habitante de Aguas redondas crecía

la curiosidad por la historia de An-

zuelo; le permitieron unas últimas

palabras.

—Habitantes de Aguas redondas,

nuestro mundo tiene forma de bote-

lla y…

—¡Hereje! ¡Traidor! ¡Enloqueciste!

¡La fiebre del mareo te devora!

—Sé que no soy el primero que lo

afirma pero yo lo he visto, el mundo

se empequeñece y expira por un agu-

jero por el que justo pasaría una em-

barcación y…

El valiente y sincero Anzuelo recibió

una estocada, tres heridas empezaron

a sangrar, los fieles del Gotaformismo

lo cogieron y echaron a la mar.

El capitán, aún con vida y ha-

ciendo gala de su conocimiento

de flotabilidad, convirtió su

tórax en una quilla de buen

roble y sus brazos en remos,

descubriría el fin del mundo

antes de morir, saldría de él y

de la ignorancia.

Aguas redondas Omduart

PAPENFUSS - 3

Page 4: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 4

L a televisión enciende

nuestro deseo de ob-

tener cosas innecesarias.

Presumimos, con orgullo,

de los objetos que nos

hacen parecer menos po-

bres que otros pobres, por-

que si hay algo que todos

tenemos en común, es la

pobreza.

Los medios dicen que Júpi-

ter se alineará con el sol y

eso provocará un cambio

positivo en un país donde

los cambios solo causaron

desigualdad.

Un eclipse es la noticia del

año, la gente mira hacia

arriba. Abajo, muchos

mueren de hambre, pero

miran hacia arriba: los mo-

nopolios han hablado.

Nadie percibe que hay más

eclipses en la vida de un

desamparado que en la ab-

surda inmensidad del cielo.

Los remedios que sanan el

cuerpo dañan el bolsillo.

Las verduras que limpian el

intestino están intoxicadas.

Los árboles tienen asma.

La droga consume a los

consumidores.

Las vírgenes llevan a sus

hijos a una escuela que

cobra por recibirlos.

La reproducción social es

inhumana.

No observamos, nos obser-

van. Y saben perfecta-

mente dónde colocar los

hilos para movernos a su

antojo.

No observamos,nos observanAlejandro Camacho

Page 5: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

¡I n nomine Patris et Filii et

Spiritus Sancti, te ordeno

abandonar a este hombre! ¡Sal de su

cuerpo, Asmodeo, seguidor de Luci-

fer! —interpeló el exorcista mos-

trando la cruz del Señor.

—¡Imposible! El pacto que hicimos

este hombre y yo es indeleble y no

será cancelado hasta que yo cumpla

todas mis misiones —dijo el demonio.

—¿En qué consiste ese contrato, per-

nicioso ente de las tinieblas?

Con fuerza sobrenatural el hombre

poseído saltó bruscamente sobre el

sacerdote y le oprimió el cuello. El

maligno le contestó:

—Yo le propicio a este hombre her-

mosas mujeres a cambio de que él me

traiga exorcistas.

Seguidamente, lo apuñaló hasta la

muerte y lo arrojó en un sótano ati-

borrado de cadáveres vestidos de so-

brepelliz sangrienta y estola violeta.

PAPENFUSS - 5

EXTERMINATIOEXORCISTIS INVOCAREMustapha Handar

Page 6: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 6

Me quiereGanadora Anual de la XII edición de

Relatos en Cadena de la SERy finalista mensual de abril de 2019

María Gil Sierra

E l último día de vacaciones Alberto se

acercó a mí y me entregó un sobre. No

dije nada. Nunca sé qué decirle. Dejé a mis

amigas y me fui sola camino del río. Lo abrí

y saqué una hoja escrita a mano. Era una

carta de amor, breve, con algunas faltas de

ortografía. Pero no importaba. Era la carta

del chico de mis sueños. Me tumbé sobre la

hierba, cerré los ojos e imaginé que sus labios

rozaban mi boca. Después guardé la carta. El

sobre no. El sobre lo partí en pedacitos hasta

que desapareció el nombre de mi hermana.

Page 7: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

U jier: comienza la vista oral del

procedimiento 435/2019.

Juez: ¿Es usted Serenidad Karma

Amores, comparece con su capaci-

dad plena y en el ejercicio de la

misma acepta la representación de

su letrada?

Acusada: Jijiji…sip.

Juez: Se la juzga por atentar contra

varios directores de banco. Consta en

autos como prueba 1 el vídeo de las

cámaras de seguridad con su imagen.

Acusada: Si todo el mundo quisiera

una canción que hable de paz, que

hable de amor, sería sencillo poder-

nos reunir para vivir con ilusión.

PAPENFUSS - 7

El juicioSonia Pina

Ficha policial

Nombre: Serenidad Karma Amores

Edad: A los 30 empezó a fluir, y ya ni se sabe.

Profesión: Abrazadora de semáforos y animadora de lunes, fija disconti-

nua.

Delito del que se le acusa: Atentado en grado de tentativa y desorden público.

Descripción de los hechos: La acusada deposita bombas artesanales (pe-

tardo infantil, pimienta y confetti) en las oficinas de los principales ban-

cos y cajas de ahorro. La detonación conecta automáticamente un

reproductor de audio que los peritos están analizando y en el que se puede

escuchar en bucle “Felicidad”, de Al Bano y Romina Power.

Page 8: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 8

Abogada: Señoría, como puede obser-

var no se aprecia dolo en la conducta

de la acusada.

Juez: Letrada, la ignorancia de la ley

no exime de su cumplimiento.

Acusada: Hay quien va matando ca-

nallas con su cañón de futuro….

Abogada: Con la venia, mi defendida

se refiere a que hay mucha violencia

callejera.

Acusada: Lo más terrible se aprende

enseguida y lo hermoso nos cuesta

la vida.

Juez: Una frase más de Silvio Rodrí-

guez y hago desalojar la sala.

Acusada: Señor Venia, disculpe, ¿no

siente usted ganas de tomar de las

manos a ese lindo ujier y abrazarlo

hasta que a los dos les broten lágri-

mas de emoción? ¿No le parece que

mi abogada tiene una de las auras

más generosas que en la ciudad

existen?

(El ujier asiente, mirando a la abo-

gada con curiosidad. Un murmullo

recorre los primeros bancos, ocupa-

dos por amigos de la acusada y un

grupo de estudiantes de Derecho).

Juez: ¡Silencio en la sala! ¿Tiene

algo que añadir a la acusación el mi-

nisterio fiscal?

Fiscal: Consideramos que la conducta

de la demandada constituye un de-

lito continuado, por lo que no se

aprecia concurso ideal en este caso y

el hecho ilícito se subsume en…

Acusada: Mire, es así de fácil.

Page 9: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

(En ese momento se levanta, se di-

rige al estudiante de Derecho más

próximo y le da un abrazo. El resto

del primer banco la imita e inician

un mantra con sonidos guturales,

cada vez más intensos).

Juez: ¡Si no deponen su actitud ten-

dré que suspender la sesión! Letrada,

proceda a interrogar a su defendida.

Abogada: Con la venia, Señoría.

Señora Karma, ¿no es cierto que lo

que consta en el sumario como arte-

factos explosivos no son sino presen-

tes que usted se disponía a entregar

a los denunciantes generosamente?

Acusada: El amor es paciente, es

bondadoso; no es orgulloso ni jactan-

cioso. Corintios 13:4.

Abogada: Entonces, ¿usted cree que

se puede amar a las personas aunque

no exista reciprocidad?

Juez: Pregunta improcedente.

Abogada: ¿No es más cierto que vive

la sociedad sedienta de buenos senti-

mientos y de generosidad? ¿No hemos

sentido todos cómo la piel se eriza

ante la bondad humana…? ¿Cree

usted en las redes de apoyo mutuo?

Acusada: Si no creyera en la locura

de la garganta del sinsonte, si no cre-

yera que en el monte se esconde el

trino y la pavura…

(La acusada se levanta, pasa por de-

lante del ujier y se abrazan fuerte-

mente, los ojos de este empañados. A

continuación sonríe a la sala y aban-

dona el lugar, ligera y relajada. El abo-

gado del BBVA y el de Bankia miran

sus relojes y se levantan a la vez. La

abogada sonríe; el juez tapa su cara

con las dos manos y cuenta hasta

diez, como le indicó su terapeuta).

PAPENFUSS - 9

Page 10: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 1 0

¿M e oyes?… yes… yes…

yes… Su amigo inglés es

el único que está siempre dispuesto

a escuchar esas cosas malas que le

suceden en la escuela. Por eso cada

tarde se las cuenta acercándose un

poquito más al borde del barranco

donde se esconde.

EcosFinalista mensual de septiembre2018 de Relatos en Cadena

de la SEREva García Martín

La otra dimensiónFinalista mensual de octubre 2018 de Relatos en Cadena

de la SERMaría Antonia Ramos Prada

C omienzan a acumularse en la

superficie del planeta: ne-

gros, blancos, a cuadros, de rayas,

cortos, largos… Nadie sabe por qué

desde hace varios años, con un ruido

ensordecedor y repentino, a veces se

abre un torbellino en el cielo, escupe

un calcetín y, tan misteriosamente

como apareció, se cierra.

Page 11: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 1 1

E ra lo único que podíamos

hacer por él, dadas las cir-

cunstancias. Sus padres se habían

comprado un libro para enseñarle a

dormir con un método infalible y lle-

vaban noches dejándole llorar. Pri-

mero cinco minutos, luego diez y así

hasta que aprendiera a dormir solo.

Una noche el niño sollozó y sollozó.

Papá no vino, mamá tampoco. Lloró

más y más fuerte. Finalmente, se

hizo el silencio, pero solo porque yo

mismo salí de debajo de la cama y

me lo llevé con mi familia al infra-

mundo. Para que luego digan que los

monstruos somos nosotros.

N inguno de

los niños

que había en el

arcón era

Tomás. En

cinco años de

“mago a domi-

cilio” era la

primera vez que me

fallaba un truco. Debía ser el arcón

CorazoncitoFinalista mensual de noviembre 2018 de Relatos en Cadena

de la SERElena Bethencourt Rodríguez

Cumpleaños felizFinalista mensual de febrero 2019 de Relatos en Cadena

de la SERJuan Antonio Morán

Page 12: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 1 2

nuevo que compré en el bazar, o la va-

riación del conjuro “meigas de la

noche, ninfas del día… devolvednos la

alegría”… Estaba el rubio de la gorra

blanca, la pecosa de las coletas, y los

dos hermanos pequeños. Sin embargo

en lugar del protagonista del cumplea-

ños —chillón, caprichoso y engreído—

había aparecido una princesita de ras-

gos orientales que nos ofrecía golosi-

nas con gesto sonriente. Pero los

padres de Tomas insistían en recupe-

rar al estúpido de su hijo.

L o sé, soy un nostálgico —le su-

surró el príncipe a la princesa

mientras le guiñaba un ojo.

Entretanto, ella miraba, con angustia,

a los comensales de ambos lados de la

mesa, y pedía al cielo que nadie hubiera

visto a su marido atrapar a la fasti-

diosa mosquita con su lengua veloz.

O rdenó sin pestañear que no

pestañeara.

—Eso es imposible, papá. Tarde o

temprano, se nos cerrarán los ojos

DelicatessenFinalista mensual de diciembre 2018 de Relatos en Cadena

de la SERNuria Rozas Álvarez

PerseidasFinalista mensual de enero 2019 de Relatos en Cadena

de la SERPatricia Collazo

Page 13: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 1 3

—dije dije mientras los abría mucho

para seguirle el juego. Estábamos

mirando las estrellas recostados en

el prado de la casa del pueblo. Era

verano.

—Si los mantenemos abiertos, este

momento durará para siempre —ase-

veró enigmático.

Entonces no lo comprendí.

Hoy, mirando su nombre en la lápida

recién estrenada, quisiera poder

pestañear y borrarlo. Pestañear

para regresar a aquella noche de ve-

rano en que con su brazo bajo la ca-

beza, me quedé dormido hilvanando

constelaciones.

T engo pensado hacer varios

peces de colores también, me

explica mi hijo en cuanto entro en su

cuarto, ense-

ñándome los

dibujos de dos

estrellas de

mar, tres ca-

ballitos y una

medusa, para pegarlos en la ventana

de su habitación, que sé que al abuelo

le gustan mucho las cosas del mar. Y si

me da tiempo antes de que te vayas a

verle al hospital, añade sonriente, sin

imaginarse lo que he venido a decirle,

le dibujaré una caracola, igualita a la

que nos encontramos mientras paseá-

bamos juntos por la playa, el último día

de vacaciones.

Las cosas de la vidaFinalista mensual de marzo 2019 de Relatos en Cadena

de la SERPaloma Hidalgo Díez

Page 14: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 1 4

S í, soy su esposa. Fui la mujer

bala en sus primeros shows,

casi me quemo la lengua con quero-

seno al escupir fuego y tengo la

tripa llena de cicatrices, de tanto en-

sayar lo de partirme en dos con el

serrucho.

Una noche en un cabaret perdí una

oreja cuando me lanzaba sables,

pero yo, muy profesional, simulé

que era parte de la actuación. El

público aplaudió entusiasmado de

lo hiperrealista que quedó, su fama

se extendió y pudimos ¡por fin! con-

tratar una ayudante.

En mi última función decidió ha-

cerme desaparecer. Y aquí estoy, es-

perando que acabe el truco, que ya

tengo los pies fríos.

Y a tengo los pies fríos. A través

del suelo puedo sentir ese pai-

saje helado que se instala en el piso

de abajo cuando él llega. Soy capaz

entonces de escuchar, como si huyeran

El piso de abajoFinalista mensual de junio 2019 de Relatos en Cadena

de la SERAlberto Jesús Vargas

El magoFinalista mensual de mayo 2019 de Relatos en Cadena

de la SERSusana Revuelta

Page 15: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 1 5

el uno del otro, pasos que van y vie-

nen cada cual por su lado. No se ha-

blan. Ponen la televisión. Cierran una

puerta. Abren algún grifo. Ni una pa-

labra que evidencie que existe una

convivencia entre ambos. Yo intento

concentrarme en mis libros hasta que

den las nueve. A esa hora, como

todos los días, me llamarán para que

baje a cenar en familia.

M e preguntas que cuánto te

quiero. Cuánto, como si eso

se pudiera medir, sacar del armario

la pesa de la cocina y colocar en-

cima nuestro amor: 780 gramos. O

mejor, ya lo sé, preferirías que utili-

zara la báscula del baño y que por

una vez nos alegráramos de que

algo en esta casa engordara. Pre-

fiero decirte, querida, que lo que

siento es como ir en un crucero de

lujo, capuccinos a cualquier hora,

daikiris hasta reventar, caviar, lan-

gosta, todo el día viendo el mar en

Adverbio de cantidad

Ana Vidal

Page 16: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

sus distintas tonalidades. Música,

descanso, tiempo para leer. Y al lado

los pies desnudos de hombres y mu-

jeres de la tercera o cuarta edad, re-

torcidos, todos juntos en el borde de

la piscina. Un crucero puede ser un

lugar maravilloso, pero estás ahí en-

cerrado, en mitad del océano, en un

puto edificio de doce plantas, hay

niños por todas partes que corren y

gritan, tienes que hacer cola para re-

cibir un masaje y siempre ese ruido

de fondo. Así es como te quiero,

amor, bastante, pero con matices.

Bastante, pero no todo.

L a observé en silencio mientras

todos despejaban la habita-

ción. A pesar de tener

un rostro cadavérico,

tremendamente del-

gado y blanco como la

cera, Isadora parecía

una persona aparen-

temente dormida; su

aspecto ya solo pare-

cía enfermizo; no

había ni rastro del trozo de carne

fracturado, desfigurado y amoratado

que llegó al hospital. Dada su apa-

riencia, cualquiera diría que la casi

mujer jamás volvería a despertar.

Pobre niña…

Respiré hondo, dispuesto a no perder

un segundo más. El sufrimiento de

PAPENFUSS - 1 6

Knockin’ onheaven’s door

Pily Barba

Page 17: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

los suyos era tan extremo y su coma

tan inútil que, ¿para qué esperar? Me

senté rápidamente a su lado, la

tomé de la mano y,

mientras acariciaba

su pelo rubio, el

eco de nuestros

pensamientos

empezó a en-

tremezcla se:

habíamos esta-

blecido cone-

xión… y la hallé

desesperada. Entonces me

apresuré a mostrarle qué había suce-

dido después de haber perdido la

consciencia bajo los efectos de esa

droga que ella desconocía haber to-

mado. No se lo esperaba, o sí, pero

siguió dudando, y lo hacía de una

manera tan dañina para sí misma

que terminó obligándome a proyectar

mi propia energía casi con violencia

sobre la vorágine en la que se estaba

convirtiendo ella. De esa forma, de-

jándola prácticamente inmovilizada,

intenté ayudarla a comprender

que, a pesar de haber

sido abusada y mu-

tilada por su

novio y varios

tipos más, ella

no había pro-

vocado nada.

¡Nada!

Llegaba el mo-

mento de enseñarle

cuál era su auténtica natu-

raleza, pero para eso debía tranqui-

lizarla más; dominar su miedo, su

ira, su impotencia, y no me veía

capaz. Era la primera vez que me en-

frentaba a tanta vehemencia; nunca

le había plantado cara a un cúmulo

de energía tan desaforada habitando

un cuerpo tan joven y menudo. Es-

taba alucinando. Mientras, Isadora

seguía sin dejarse hacer, así que opté

PAPENFUSS - 1 7

Page 18: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

por devolverle en un único rebote el

reflejo de sus propias vibraciones: su

bondad, el lugar donde residía su au-

téntica belleza, toda su valía, y es

que no se me ocurría otro modo de

hacerla ver cómo era en realidad, ya

que parecía haberse olvidado por

completo. Por eso la estampé todo lo

suyo así, a lo vivo, a ver si de paso

entendía que ella solo había sido una

víctima más de la crueldad y el capri-

cho; de la falta de humanidad de

aquellos en quienes había confiado. Y

entonces, ¡plup!, sucedió: cuando la

niña por fin consiguió reconocerse y

volver a sentirse a sí misma por pri-

mera vez desde que abandonó el

mundo de los conscientes; cuando

dejó de verse como una posible cul-

pable, cuando se dio cuenta de que el

monstruo no era ella y comprendió

que solo había tenido la mala suerte

de ser alumna de una lección que

ningún ser humano debería aprender

jamás, por fin se dejó ir. En paz. Para

siempre.

Yo, bueno, no pude evitar dejar esca-

par una leve sonrisa: el limbo aca-

baba de convertirse en un lugar

mucho más solitario, y eso, claro, eso

siempre era una buena noticia.

M ientras se afeita frente al es-

pejo escucha las noticias de

la radio. Se siente afortunado por el

simple hecho de ir a trabajar. Lo que

hace algunos años era lo más pare-

PAPENFUSS - 1 8

Afeitado perfectoIvan Romero

Page 19: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 1 9

cido a una tortura ahora se había

convertido en un momento místico,

singular, más allá del bien y del mal.

Antes se dejaba la barba en un acto

absurdo de rebeldía, descuidaba su

imagen con la fe de que algún día su

jefe le recriminara su falta de hi-

giene y le pudiera despedir pagán-

dole una suculenta indemnización.

Sabía que por eso no lo iban a echar,

así que bajó su rendimiento para que

pudiera sumar con su pequeño acto

subversivo. Pero no. Nunca sucedió.

Soñó con ese dinero, con la posibili-

dad de irse al Caribe con su mujer y

montar un negocio de tapas españo-

las. Sería un éxito. Tenía que serlo.

Pero tuvieron su primer hijo y enton-

ces la quimera de la nueva vida en el

Caribe se esfumó y la substituyó por

un chalet en primera línea de mar

que nunca tuvo, con garaje, piscina y

jardín. Ver a su hijo correr por el cés-

ped, el sol dorando los jazmines de

Más o menosCarlos Sáez

Más o menos te quiero

dices

antes de cerrar los ojos y esconderte

Más o menos

pienso yo

es solo menos

y mientras tú brillas en el cielo

rodeada de princesas tristes

y de ranas disfrazadas

yo me quedo desnudo

con un cigarrillo apagado

y cien millones de cerillas mojadas

a la orilla de un mar

que se burla de mí eternamente

Más o menos

pienso yo

es solo menos

y mientras tú

brillas

en el cielo

Page 20: P A P E N F US S · BOLETÍN GRATUITO DE RELATOS VALENCIA NÚM. 14 P A P E N F U S S PAPENFUSS es un boletín gratuito de relatos. Puedes colaborar enviando relatos de hasta 800 palabras

PAPENFUSS - 2 0

la entrada, el mar... No pudo ser. El

afeitado debe ser apurado, las pati-

llas se tienen que repasar, los rinco-

nes del cuello y maxilares se pasan a

contrapelo, la cara se hidrata bien

antes de poner la espuma y el after

shave debe ser meloso a la nariz.

Apaga la radio. Se peina ocultando

su alopecia. Le da un beso a su mujer

y le dice que llegará tarde porque han

reducido personal y tiene que doblar

turno. El trabajo como momento mís-

tico, singular, más allá del bien y del

mal, lo ha convertido en un héroe de

la estupidez. Lo sabe. Pero la resigna-

ción es cómoda y siempre queda el

consuelo de que tiene trabajo, no

como muchos otros que andan de bar

en bar, sumidos en la desesperación.

Ya no tiene edad. No. Antes de empe-

zar su jornada, entrará en un super-

mercado y comprará cuchillas, serán

Wilkinson de triple hoja. Las mejores

para un afeitado perfecto.

Descarga la versión

electrónica de todos los

números publicados.