Recuerdos y criterios de un viejo

8/3/2019 Recuerdos y criterios de un viejo

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ngel Ayala, S.J.

RECUERDOSY

CRITERIOS DE UN VIEJODE

OCHENTA Y OCHO AOS

1956

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Imprimatur:EMMANUEL OLLEROS, S. J.

Praep. Prov. Tolet.

Nihil obstat:D. ANTONIODEL CUETO,

Censor.

Imprimatur:Jos Mara,

Vicario General y Obispo Auxiliar.Madrid, enero 1956.

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NDICE

PRLOGO.........................................................................................5

EL VALER DE LOS HOMBRES.............................................................8

DE MI CRCULO DE JVENES UNIVERSITARIOS Y ALGUNAS IDEASQUE LES HE EXPUESTO..................................................................24

CMO ME ECHARON DE MADRID....................................................39

GRANDES DESATINOS SOBRE MI VOCACIN RELIGIOSA Y SOBREOTRAS VOCACIONES......................................................................49

CUALIDADES, DEVOCIONES Y VIRTUDES APTASPARA TODOS..................................................................................56

PROBLEMAS DE MUCHACHAS.........................................................73

PROBLEMAS DE FAMILIA.................................................................84

COSAS DE MONJITAS......................................................................95

DE ALGUNOS IDEALES MOS.........................................................102

DE MIS LTIMOS DAS..................................................................118

CMO UN VIEJO A LOS OCHENTA Y OCHO AOS VEALGUNAS COSAS DE LA VIDA.......................................................127

ALGUNOS RECUERDOS DE MI INFANCIA.......................................132

PRIMERAS AFICIONES DE MI NIEZ, QUE DESPUSCONTINUARON.............................................................................140

DE MI PREOCUPACIN POR LA UNIVERSIDADCATLICA LIBRE...........................................................................155

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PRLOGO

Este libro viene a ser una seleccin de recuerdos de una larga vida yuna sencilla exposicin de algunos criterios que han dirigido mi accinapostlica, y, segn creo, podran dirigir en algn modo la de los dems.

Si se hubiera limitado al recuerdo de los hechos ms salientes de mivida, sera de muy escaso inters para los lectores a los que se dirige, y node gran provecho.

A qu lectores me dirijo?Ya he escrito para jvenes, ellas y ellos; para universitarias, para

educadores, gobernantes, religiosos y obreros.

Ahora pens en escribir para los viejos.

Y usted cree que eso puede ser de alguna utilidad?

Pues, s. Vern ustedes.Los viejos y viejas me entendern mejor que los jvenes, y aun que

los hombres y las mujeres en la madurez de la vida.Porque las cosas, hechos y criterios que escribo me las han enseado

mis ochenta y ocho aos.

Muchas veces pienso que si vivo quince das ms sabr algo ms dela vida, y nuevo y estupendo.

La vida es un libro sapientsimo que nunca acaba de saberse.Un hombre de ochenta y un aos sabe ms que uno de ochenta.Cuando se llega a la edad de los sesenta se figura uno que se lo sabe

todo.

Se equivoca.Cuando yo tensa sesenta me figuraba que me iba a morir sin haber

visto nada grande.

Pues he visto nuestra guerra, que ha sido una cosa muy grande.Y muchos inventos..., como la bomba atmica, y muchos desatinos

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de los hombres, ms grandes que el invento de la bomba atmica.

Sobre todo, desatinos nuevos, estoy vindolos todos los das.

Y desatinos cometidos por los hombres grandes. Que si fuera por lostontos...

Como, por ejemplo, dejar que el comunismo de Rusia se engulla latierra entera.

Y por qu dedico tambin estas pginas a los pollitos y pollitas?

Porque los pobrecillos no saben absolutamente nada de la vida.

Estn en la edad de las mentiras.

Todo lo que ven, piensan e imaginan son cuentos.Y por eso les convienen consejos y experiencias de viejos.

Por ejemplo, se figuran ellos que se van a casar con princesas.Pobrecillos! Con princesas!

Y se figuran que con unos papeles que se llaman billetes de Bancovan a ser felices.

Pobrecillos!

Como los infantes que mandan regimientos de plomo o de cartn.

Repito algunas ideas en estas Memorias mas?S, primero por la naturaleza de la obra, que lo exige as.

Segundo, porque la insistencia en algunas ideas que sean de intersme parece, no repeticin intil, sino provechosa.

Eso lo hacen todos los autores sensatos que intentan ensear. El casoes hacerlo con discrecin.

El hombre, generalmente, tiene mucho de nio en cuanto a lo que hade aprender.

Con leer o ver una vez las cosas nadie se queda con ellas.Es gran principio pedaggico para todos, nios, jvenes, hombres

maduros y viejos, la necesidad de la repeticin. Tambin esto lo heaprendido por la experiencia. Pero, y los sabios?

Yo no escribo para sabios.

Adems, los sabios y los muy inteligentes son, a veces, los quemenos entienden las verdades llanas y de sentido comn.

Aqu viene bien aquello deAquila non capit muscas.Qu repetir, quiz sin sentir, con ms frecuencia?

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Ciertas ideas sobre educacin, apostolado, orden sobrenatural, queson las de ms inters y que ms quiero llevar en mi alma, porque sonmacizas y eternas.

Las dems, lo nuevo, ingenioso, original, nunca han sido de mi

predileccin.Tal vez por red vulgaridad?

Concedido.

Pero no me pesa.Es poco el tiempo de esta vida.

Y pasarlo en decir agudezas y originalidades, o cosas balades, esimpropio de quien piensa que est en la vida para algo ms que eso.

Yo pienso as. Qu le vamos a hacer!Pido a Dios que no le sea molesto al lector.

Y con eso, contento l y contento yo.

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EL VALER DE LOS HOMBRES

Por casualidad han visto ustedes poraqu algn hombre?

Yo soaba una noche que, estando en la Gran Va de Madrid, entren una casa y se me ocurri preguntar:

Por casualidad han visto ustedes por aqu algn hombre?

Pero, qu dice usted, seor? Esto es un bar, donde se comenmariscos y se bebe cerveza.

Ya lo veo. Pero lo que yo pregunto no es si han visto personas, queya veo hay aqu muchas, sino s han visto algn hombre, es decir, algunapersona que piense de dnde ha venido y adnde va y para qu est en este

mundo.Ah, ya! Pues, mire usted, aqu no sabemos de eso, sino que aqu

se come y se bebe, y nada ms.

Perdonen ustedes.Me fui derecho a la casa siguiente. Y pregunt al portero:

Me hara usted el favor de decirme si vive aqu algn hombre?

Creo que no. Esto es un cine. Y no creo que habite nadie.

Pero ninguno de los que vienen es hombre?Naturalmente, y mujeres.

Lo supongo, varones y hembras. Pero no pregunto eso, sino sialguno de ellos ha pensado alguna vez de dnde ha venido, adnde va ypara qu est en el mundo.

Pues, ver usted. De eso no entiendo ni palabra. Aqu vienen apasar el rato, y no creo haya ni uno que se haya puesto, mientras vea la

pelcula, a pensar en esas filosofas.Total, que recorr la Gran Va, encontr tiendas lujossimas donde se

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venda de todo y se preocupaban, los de dentro y los de fuera, de joyas,muebles, objetos de arte, dulces, etc., pero no de si haba hombres; hastaque di con un viejecito simptico, que me dijo:

Ah, ya caigo! Pues vaya usted a cualquier barrio bajo,

verbigracia, Cuatro Caminos, Carabanchel, Ventas, etctera, etc., y verusted un letrero de cuando en cuando que dice Escuela, y all encontrarusted muchos hombres, todas los chiquillos que estn all, y todos lecontestarn a sus preguntas. Ahora, aqu, en la Gran Va, nadie le darrazn de lo que quiere, como no sea algn cura que pase per la calle oalguna monja.

De lo que he visto a mi paso por la vida

entre los hombres.

He visto incontables corderitos inocentes, blancos como la nieve.Entre los nios.

Y palomitas?

Lo mismo. Infinitas nias como ngeles, con unos ojitos tanpuros...

Y borregos? Ha visto usted? La mar, en unos prados que se llaman partidos polticos yorganizaciones sociales.

Y qu es lo que ms abunda en el mundo, a su juicio?

Sin duda, los puercos. Va uno por la calle, y ve muchas porqueras.Se mete en los cines, y porqueras.

Y gansos? Ha visto usted muchos?

No lo creern ustedes, pero hay gran abundancia. Y de lobos, y deperros, y de buitres, y de escarabajos y culebras.

Topos, no digamos; y asnos, no digamos, y zorros, y zorras...

No todo es eso, gracias a Dios. Tambin hay personas, pero qupoquitas!

Pero no todos los hombres son animales dainos. Los hayInofensivos; por ejemplo, los hombres conejos y los hombres liebres.

A stos les tiran un empleo sustancioso y quedan heridos adisposicin de los cazadores.

Lo ms gracioso no es eso, sino que los conejos y liebres se dan gran

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pisto considerando que ellos no son los cazados, sino los cazadores.

Y as, piensan: Los que se figuran que nos han cazado, no se dancuenta de que han cazado hombres honrados y laboriosos, en vez devividores e inmorales.

De modo que nosotros somos los cazadores, que hemos cazadopuestos de provecho para la patria, e incluso para la Religin.

En general, los hombres conejos cumplen mejor sus deberesreligiosos que los deberes polticos y sociales. Porque or misa los das defiesta, comulgar por Pascua Florida y hasta ayunar, como se ayuna ahora,no son deberes heroicos, que digamos.

Pero tener un ideal de gobierno catlico, no creyendo que todo lohace maravillosamente, sino defendiendo lo bueno y aguantando loequivocado o advirtindolo y corrigindolo cuando pueda, luchando contralos enemigos de ese ideal catlico, dndole a esa lucha el tiempo, el dineroy las contrariedades inevitables, eso es ms difcil que rezar el rosario enfamilia.

Y hacer obras sociales; Sindicatos, cuando se pueda organizarloscatlicamente; crear las obras profesionales, culturales y econmicasnecesarias para darles consistencia y vigor, cuesta bastante ms que llevarun cirio en una procesin o asistir a una vela en la Adoracin Nocturna.

Comulgar con frecuencia es cosa que los catlicos fervorosos debenhacer y hacen; pero eso no es tan meritorio como dirigir un diario paradefender los derechos de la Iglesia, sean los que sean, contra los enemigosque sean, de arriba, o de abajo, o de enfrente.

No nos creemos un catolicismo femenino y muelle, que consista en practicar devociones, dejar que pase lo que pase, no llevarse ningndisgusto, gozar de puestos de honor y de provecho y, si se gobierna

desacertadamente, aguantarlo con paciencia provechosa y esperar a mejo-res tiempos, que por s solos no vendrn nunca.

Los catlicos que dicen que aborrecen la poltica son comodones queno quieren defender a la Iglesia sino slo comulgando.

Es como si un soldado en plena batalla, cuando los adversarios estndisparando caonazos, l rezase una novena.

Pero hay otros tipos humanos.

No diga usted nada a ver si acierto yo. A que abundan mucho losalcornoques?

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Ha dado usted en el clavo.

Pero tambin habr muchas azucenas, y rosas, y claveles, yvioletas.

Claro! Entre las jvenes educadas por sus madres cristianas con

gran esmero. Desde luego que se estarn ustedes figurando que lo ms

abundante de cuanto pertenece a este reino son los adoquines.

Claro! Y que habr encontrado poqusimo oro, ms plata, mscobre, ms hierro. Diamantes, rarsimos. Perlas, casi ninguna.

Qu ojo tiene usted!

El hombre de talento.

Es falso criterio valorar al hombre slo por su talento. Es un errorgrave.

Ha habido en la Historia muchos hombres de gran talentofunestsimos.

Y hay y habr siempre muchos talentos grandes e intiles.

Qu hara un talento grande sin:Espritu de sacrificio.Vocacin natural para alguna obra.

Preparacin conveniente.

Tenacidad en las empresas.

Fracasos en los tanteos.

Consejos de los prudentes.

Vencimiento de dificultades.Las cooperaciones necesarias.

Consagracin a las obras?

En cambio, un talento corriente adquiere un valor incalculable:

Si es virtuoso.SI tiene carcter.

Si es activo.

Si tiene prudencia.

Si es amable.

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Si es comprensivo.

Si tiene tenacidad.

Al talento, slo porque lo es, se le pondera, se le alaba, se le tributahonor casi divino.

El valer de una persona depende del conjunto de sus prendas.A veces, en los profesores y maestros jvenes, vale ms para

conciliarse el amor de los nios, y aun influir en su educacin, saber tocarla armnica o hacer juegos de prestidigitacin, que no ser un portento desabidura.

En las Misiones pasa igual.

Con un acorden puede un misionero convertir ms infieles que con

toda su Teologa.Luego vale ms un acorden que la Teologa?

Lo que decimos es que no se debe medir el valer de una persona,sobre todo para apreciar su influjo sobre otras, slo por su talento o suciencia.

Qu consecuencia puede sacarse de aqu?Que el talento no se debe envanecer creyendo que lo tiene todo.

Y que los de inteligencia corriente no se deben deprimir, porque conotras prendas que fcilmente se tienen pueden hacer mucho ms bien queotros con su inteligencia superior.

El hombre de accin.

El hombre de accin se caracteriza por empresas de valer, por lapreocupacin de las obras de importancia para la Iglesia o la sociedad.

De ordinario, los hombres de accin no son inteligencias superiores.Un hombre de talento corriente puede ser hombre de accin si tiene

virtud.

Es que para hacer cosas relevantes se necesita, ms que discurrirmaravillosamente, sacrificarse maravillosamente. Y eso no se logra con elentendimiento, sino con el trabajo, el esfuerzo, la constancia, la tenacidad.

Hay hombres de accin y hombres de inaccin.

Los yanquis son de los primeros.Los espaoles, de los segundos.

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Hay hombres tericos y hombres prcticos.

Los espaoles son de los primeros.

Los yanquis, de los segundos.Aqu se estudia, pero no se hace.

En Estados Unidos se estudia y se hace.En Espaa no se sabe trabajar, y por eso no gusta trabajar.

En Espaa no se sabe trabajar porque no se aprende a trabajar.

No se aprende a estudiar, y por eso no agrada estudiar.No est bien remunerada la accin.

Y por eso no hay accin.

Un catedrtico gana una oposicin.Y no puede vivir de ella.

No viven los abogados, ni los mdicos, ni los licenciados enFilosofa.

Ni la inmensa mayora de los empleados.

Cmo van a trabajar con gusto?Es decir, cmo van a trabajar?

No somos indolentes por naturaleza, sino por gracia, por arte, porformacin, por organizacin.Estamos organizados para tener gusto en no trabajar.

Cmo vamos a tener hombres de accin?

Ni siquiera para ganar dinero, que es el gran estmulo.

Porque no sabemos negociar.

Sabemos vivir de la renta, del papel del Estado, de las obligaciones...;

pero de los negocios?...Las izquierdas tienen ms juicio, a lo menos segn parece en la

rbita mundial.

Se organizan, saben lo que es eso, se sacrifican para eso.

Y por eso tienen hombres de accin.

A los dirigentes les estimula ms el mangoneo que a nosotros el biencomn y el de la Iglesia.

Es lo que deca Cristo: Los hijos de las tinieblas son ms sagacesque los hijos de la luz?,

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No slo el mangoneo, sino lo que siempre le acompaa, el honor y elprovecho.

A nosotros nos acompaan el sacrificio y la lucha. A ellos, tambin.

Pero las soportan por el inters del honor o del dinero. Nosotros, no;

ni por Dios.El hombre de accin es hombre de lucha. Lucha porque salga

adelante su accin. Y si es beneficiosa, tendr que luchar contra muchos,porque son muchos los que no quieren el bien comn.

Hay muchos hombres de accin en Espaa?

Hay muchos amigos de la tinta, del tintero y el silln. Muchosamigos del caf, del mus y del ftbol, de jugar al alza y baja de los valores.

El hombre de corazn.

No me agradara que mi corazn amara slo con las obras.

Mi ideal sera amar con el corazn y las obras de amor.

Amamos ms al que nos da su amor que la ddiva sin amor. El pandel amor es el sustento del alma. No amamos al pobre, al enfermo, alafligido slo con la ddiva: le damos muy poco; necesario, pero poco.Dmosle amor del corazn.

El gran amor de las madres es el amor de sus desvelos, con sus besos.Ese amor es el que produce el fruto de la educacin.

El gran amor de los padres es el de sus trabajos con sus carios.

Qu es eso? La sonrisa, la palabra cariosa, la frase de consuelo, lacompasin, el aliento, la mirada, el gesto amable.

El mismo amor sobrenatural, cmo llena, acompaado del amor del

corazn!No es necesario; es til, dulce, poderoso.

Cmo am Cristo? Como Dios y como hombre. Cmo am encuanto hombre? Con la voluntad humana y el corazn humano.

Llam a sus apstoles hijos, hijitos. San Juan reclin su cabeza sobresu pecho. Llor ante la tumba de Lzaro. Con razn decan los judos:Cmo lo amaba! Eso es amar con el corazn!

Cmo amaba la Virgen a su Hijo?

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La Madre piadosa estaba

junto a la Cruz, y lloraba

mientras el Hijo penda;cuya alma, triste y llorosa,

traspasada y dolorosa,fiero cuchillo tenia.

No le amaba slo adorndole, ni aprecindole como Dios, niconocindole como a su Dios y creador del cielo y de la tierra.

Le am en Beln, besndole, abrazndole, dicindole ternuras,sustentndole. Y en la Cruz? Llorndole, abrazndole sus pies, besndoselos, participando de su deshonra. Madre de un crucificado,sepultndolo.

Oh Madre, fuente de amor!

Hazme sentir tu dolor,para que llore contigo,

y que por mi Cristo amado,

mi corazn abrasado

ms viva en l que conmigo.Y porque a amarte me anime,en mi corazn imprime

las llagas que tuvo en S,

y de tu Hijo, Seora,

divide conmigo ahora

las que padeci por m.Eso es el amor del corazn. Padecer por el amado, llorar por l, gozar

con l, expresndose con la palabra que le amamos de corazn.

Yo no quisiera un amor sin corazn, sin lgrimas, sin gozo, sinpenas.

No est en nuestras manos este amor cuando se trata de Dios. Pero pidmoslo, procurmoslo con las palabras, con el sentimiento de no

sentirlo.Oh, qu gran tesoro!

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As quieren las madres a los hijos; as los hijos buenos a las madres.As los esposos entre s.

Un amor sin corazn no convence a nadie, ni es de influjo en nadie.

Le dais a un pobre una limosna sin palabras de amor, y queda

agradecido, pero no consolado.Un esposo da a su esposa comodidad y regalo, y no le da amor, que

lo vea en sus ojos, en sus palabras, en sus sonrisas, y se considerar nodichosa.

El hombre de carcter.

Un hombre de carcter es, en primer lugar, un hombre de ideas clarasy firmes.

Y, consiguientemente, de voluntad constante y segura. Un hombreque cuando acomete una empresa arrostra todas las dificultades que haprevisto.

Y por eso, de ordinario, triunfa.

Y cuando fracasa, no se deprime, sino que el mismo fracaso le sirvede leccin para otras empresas.

En este sentido, el carcter es una cualidad excelsa. En otro sentido,el carcter es el conjunto de cualidades que adornan a una persona:amable, equilibrado, activo, inteligente. Es lo que se llama la fisonomamoral de una persona.

El carcter es una cualidad magnifica propia de todos los grandeshombres, si se trata del primer sentido. Si se trata de un conjunto decualidades buenas, el carcter es un ornamento estimabilsimo de la

persona. Lo ordinario y corriente es encontrar caracteres vulgares, que nosaben o no quieren hacer sino las trivialidades de la vida.

Un hombre sin carcter es un hombre sin ideas arraigadas.

Un hombre sin coraje para defenderlas.Un hombre sin entusiasmo para difundirlas.

Un hombre sin amor a sus convicciones.

El carcter es necesario para todo, principalmente para defender sus

ideas religiosas.Qu diversidad de caracteres hay en el mundo! Todosfundamentalmente los ha hecho Dios. Con sus buenas cualidades y

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deficiencias. Qu sabidura! Qu bondad! Para que nos amramos y nosamasmos, como deca no s quin. Para que notramos lo bueno ysufriramos lo deficiente; para que alabramos lo bueno y perdonramoslas faltas; para que nos alegrara lo alegre y nos entusiasmara el entusiasta y

con el optimista nos alentramos; nos ayudara el emprendedor y noselevara el religioso y nos moliera el tonto. Tambin entra eso en suprovidencia.

Porque hay hombres nacidos para moler a los dems. Quin no seha encontrado con hombres moscas, impertinentes, fastidiosos?

Y con hombres mosquitos, de los que pican y escuecen? Yhombres avispas? De todo ha de hallarse en la vida. Porque sa es la vida.Yo quisiera que mi carcter fuera de los que saben soportar moscones y

tbanos. Qu virtud! Llevar eso bien, saber tratar a todos con amor, saberhacerles bien... Qu difcil! Esos son caracteres! Que saben sufrir, callar,hablar, disimular, condescender, corregir, castigar y perdonar.

Cuntas cosas quisiera ser y cuntas no ser! Pero no es mi ideal serun hombre sabio, ni portento en nada, sino bueno, amable, simptico, deaccin, defensor de la Iglesia, sin homenajes, sin artculos de Prensa,encomisticos para m; sin grandes cruces, sino la cruz de la vida bienllevaba, oculta, bienhechora, con paz interior.

Se puede adquirir el carcter?

S.Adquiriendo desde jvenes el hbito del deber. Quebrantando la

voluntad en cosas licitas, que la habiten al vencimiento propio.

Imponindome una sancin cuando falto a mi deber. Llevando con

nimo varonil las contrariedades de la vida.Considerando que los hombres sin carcter acaban por ser unos

desgraciados.

Todos los hroes fueron grandes caracteres.

Ningn cobarde fue gran carcter.

Ningn vicioso lo fue.

Todos los santos fueron caracteres heroicos.

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La vida no es matemtica.

Pero a veces los hombres nos empeamos en hacerla as. Y no es as.Sino humana, es decir, no sometida a reglas de acero, sino a normas

flexibles y morales.Ni la vida es matemtica ni filosfica.Hablamos y escribimos y nos debemos entender como hombres, no

como matemticos ni como filsofos. Cuando usamos de la hiprbole,todos entendemos lo que queremos decir, que no es lo que decimos.

Pobres andaluces si la vida fuese matemtica! Y hubiramos dehablar como en nmeros!

Por eso no hay regla general sin excepcin.Y a veces no las hacemos y nos parece que somos justos. Y somos

injustos.Y en vez de hacer felices, hacemos desgraciados. Hasta para los

condenados a muerte por asesinos hay las excepciones de los indultos.

La vida matemtica sera horrible.Dios no es matemtico, sino en los dogmas.

En lo dems es ms misericordia que justicia. Y ms bueno queriguroso.Le imitamos y no creemos que cuando hacemos una excepcin por

razones de prudencia o caridad, vamos a sentar un precedente que va aarruinar nuestro gobierno.

Cuando no se trata de quebrantar una norma moral, que eso noadmite excepciones, por mil razones atendibles hacemos lo que queremos.

Y no se hunde el mundo. Ni nuestro gobierno.

El hombre individualista.

La asociacin primera fue la del hombre, la mujer y los hijos.Despus vino el pueblo, y, por ltimo, la nacin.

Por ltimo, no. El hombre, ms adelante, sinti la necesidad de unbloque de naciones.

Y ahora se unen el Oriente contra el Occidente. Esto los hombres.Y los animales?

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Lo mismo. Se unen las abejas, las hormigas, las aves, los toros. Y loslobos y los asnos, por lo menos, para atacar o defenderse.

Se asocian, en cierta manera, hasta los vegetales, en bosques, y losminerales, en tomos, que se adhieren los unos con los otros.

Todos menos los espaoles.Cada uno es una asociacin.

Tomamos ejemplo de los hongos.

Y del pjaro solitario en los tejados de que nos habla la Escritura.

Y de la lechuza que habita sola en las ruinas. Bueno: vamos a lasaplicaciones.

Cuntos alumnos saldrn cada ao de los colegios catlicos para la

Universidad, Escuelas Especiales, Medicina, profesionales particulares?Para carreras infrauniversitarias, para la industria y el comercio?

Cuntos sern en total?

Muchos millares. Muchos!La flor de Espaa en clase, riqueza, influjo, cultura, educacin.

Qu fuerza social, poltica, cultural, religiosa! Inmensa!

Es intil.

Por no organizada, por no aprovechada, por no dirigida.Como todas las gotas de las cataratas del Niagara, dispersas.Y ahora, pongmonos a llorar.

Cmo est la poltica, la cuestin social, el cine y los espectculos,las costumbres, la juventud!

Qu til, qu bello, qu meritorio!

En ningn pueblo de la tierra se gime tanto.

Los espaoles somos reyes de taifas. Aqu mando yo!, decimostodos.

Una asociacin, qu difcil! Una federacin, qu milagro! Unaconfederacin, metafsicamente imposible! Ya est la asociacin.

Ahora viene lo mejor.

Son cien socios? Cien pareceres distintos. Qu camorra tan bella!Qu fuerza tan fructuosa!

Y qu ojo para el acierto!Se renen unos antiguos alumnos. Tienen una comida al ao Qu

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alegra, qu recuerdos! Se proponen como fin la defensa de la libertad dela enseanza.

Imposible! Eso es poltica! (histrico).

Qu seguridad! Qu tino! Qu fruto!

Tantos conventos que oran, tantos colegios que educan, tantospredicadores que hablan, tantos catedrticos que ensean, para qu?

Para crear fuerzas intiles.

Nos falta el sacrificio final. El de la organizacin.

El hombre de gobierno.

Autoridades de energa bastante para cumplir bien con su deber, heencontrado pocas a mi paso por la vida. Lo ms frecuente ha sido hallareso que llaman prudentes.

Qu es eso?

Personas que no quieren molestarse ni molestar, aunque sea paracumplir con su deber. No exigindolo a los que estn a sus rdenes.

Y por eso se callan cuando ven algo mal hecho en los que dependen

de ellos.Y se forman la conciencia con gran facilidad. Va a ser peor si leaviso. No va a reconocer su falta. Se va a indisponer conmigo, y en vez detener un sbdito bueno voy a tener un enemigo ms. Esperaremos a que sepresente una ocasin propicia. Y la ocasin no se presenta.

De esta manera, lo que pasa es que hay en el mundo una inopia deautoridades enorme.

De hecho, se encuentran muchos con deseos de mandar. Pero

poqusimos que sepan mandar.No por falta de educacin.

Ni de bondad.

Ni de deseo de hacer bien a los sbditos y a las obras. Ni de talento.

Sino par falta de carcter, es decir, de energa para hacer cumplir eldeber con gusto.

No como los soldados en el cuartel.

Reconozcamos que eso es difcil.Pero necesario.

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Quien no tenga esa dote, que no mande.

Porque si manda lo har mal.

Lo mismo como padre que como alcalde, superiora de monjas aministro.

Por qu est el mundo cmo est?Pues por eso.

Gobernantes buenos son:Los que producen bienestar en los pueblos.

Los que saben or a los prudentes y tener en cuenta su parecer.

Los que lo siguen cuando todos piensan del mismo modo.

Los que aman y se hacen amar de sus dirigidos.Los que cuando comienzan proceden despacio y con reflexin y con

consulta.

Los que dejan a las autoridades subalternas actuar libremente dentrodel campo de sus atribuciones.

Los que son humanos y no quieren corregir y sancionar hasta las msmenudas faltas.

Los que saben alentar con palabras amables a los que comienzan a

tener autoridad.Los que tienen conciencia de que no se lo saben todo, sino que

preguntan a los entendidos.

Los que se rodean de capacitados, no slo de amigos.

Y gobernantes malos, quines son?Los que se figuran que gobernar es echar discursos.

Los que juzgan su gobierno excelente cuando aplauden las

multitudes.Los que reciben la autoridad porque son parientes o amigos del que

gobierna.

Los que suben a altos puestos sin haber comenzado por otrosinferiores.

Los que no oyen, porque se lo saben todo.

Los que no dejan el cargo, aunque lo desempeen con general

disgusto.

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El hombre de ideas propias.

Siempre cre que las ideas de cada hombre eran suyas, y ahora resulta

que casi todas las ideas de cada hombre no son suyasSon de sus padres, de sus maestros, del ambiente regional, de su

pueblo y hasta de sus tatarabuelos, y de ms all. Y de ms ac. De susamos polticos y de sus intereses.

Me refiero a las ideas sobre la vida y los hombres, obras,sentimientos y normas de accin.

En todo eso quiero pensar como yo. Y cuantos ms aos tengo,

quiero ser ms mo.No me tengo por eso por orgulloso, sino por mo.

Al decir mas, no quiero decir que sean exclusivamente mas, sinoque son mas no porque no las piensa nadie, sino porque las veo yo.

Al contrario, son ms mas cuanto ms las tienen los dems; pero nolas tengo yo porque las tienen los dems, sino que, vindolas yo, meconfirmo ms en que lo que yo pienso es verdadero porque lo piensan losdems. Es cosa que causa gran placer tener ideas propias, que no es lo

mismo que tener ideas originales; sino que las veo yo, y como las veo yo,las sostengo con firmeza, aunque piense lo contrario quien sea.

Lo cual no quiere decir que prescinda del argumento de autoridad,pero a condicin de que vea con mi entendimiento la fuerza de la raznque da la autoridad. Y entonces la defiendo con ms conviccin y con msfuerza cuanto ms me acompaa la autoridad de los dems. No habloprecisamente de la autoridad que tiene derecho de mandar.

Porque la autoridad no siempre tiene razn, ni mucho menos. Simanda y es legtima y no es pecado lo que manda, se la debe obedecer;pero creer con ntima conviccin que es verdad lo que manda, eso slopuede creerlo el entendimiento cuando lo ve.

Las ideas son parte de nuestro ser.

Las ideas propias son un gran don que concede Dios a las almas, yuna de las felicidades humanas que ms satisfaccin procuran en la vida.

Todas las ideas de la Iglesia son ideas mas.

No slo las que son de fe, sino las de las Encclicas.Todas las ideas admitidas por todos los doctores y telogos catlicos,

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todas son mas, y las defender con toda mi alma.

Todo lo que es de sentido comn, es decir, generalmente admitidopor todos los hombres, todo eso es idea ma.

Todo lo que cuatro o seis personas prudentes sienten sobre lo que

pertenece a la vida humana, es idea ma.Todo lo que la experiencia larga de mi vida me ha enseado, sobre

un punto cualquiera, acerca de los hombres o de las cosas, es idea ma,aunque no sea idea de otros.

La vida me ha enseado:

Que los hombres no suelen ser tan malos como de ordinario,precipitadamente, se les juzga, sino ligeros, irreflexivos, desorientados.

Que hace falta mucha compasin y caridad para con los desvalidos,ms de la que se tiene de ordinario, etc.

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DE MI CRCULO DE JVENES UNIVERSITARIOS YALGUNAS IDEAS QUE LES HE EXPUESTO

Tengo un Crculo de jvenes que seforman para apstoles.

Para lo mismo que pretend de los antiguos jvenes propagandistas.Pretendo formarlos terica y prcticamente,

Con qu fin? No slo religioso, sino social y poltico. Paragobernar incluso en poltica?

S.

Con qu ideas?

No con las mas, que no puedo menos de tenerlas, como todo buenespaol.

Sino con las de la Iglesia.

Nada ms con las de la Iglesia?

Nada ms.

Pero con todas las que constan en los documentos de los Papas?Con todas.

Con todas, sin dejar una.Ah! Si hace tiempo se hubiera hecho eso y formado hombres as!

Pero no tenemos hombres as sino rarsimos.

Que hablen y escriban as, defendiendo todos los derechos de laIglesia!

No habra tantos catlicos-conejos, modelos de timidez y de miedo.

Ni tantos prudentes con la prudencia del provecho propio.

Ni tantos cegatos sin visin poltica certera.Que se figuran que son unos linces.

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Que pescan un puesto poltico y se figuran unos polticosconsumados. Y suelen ser unos gazapillos cogidos como inocentones.

No sostengo que sean eso todos los que tienen cargos polticos.

Sera una falsedad.

Y una impostura.Pero hay mucho peligro.

Por la natural inclinacin a vivir...Por este Crculo han pasado gran nmero de jvenes de talento y

buenos.

Pero no eran para el caso.Porque se necesitan jvenes de visin lejana, que entiendan que su

educacin es para el porvenir.De temple de guerreros, que no aspiren a ningn puesto inmediato y

estn dispuestos a luchar.

Que tengan presentes aquellas palabras de Cristo: S a M me hanperseguido, a vosotros tambin os perseguirn.

Que vean con claridad meridiana que un puesto poltico puedeaceptarse a condicin de ser libres en el opinar. Que vean que as han

procedido gloriosamente algunos hombres de altura.Eso es ajustarse a las normas de la Iglesia sobre la libertad de

opinin.

Y, adems, es conforme a la razn y conforme a una visin favorableal gobierno y al rgimen, sea el que fuere. Son en la actualidad estosjvenes una veintena. A mi juicio, una esperanza para la patria.

Pido a Dios que perseveren en su actitud.

Oh, si en todos los pueblos se hubiera formado una agrupacin as!No estaramos, como estamos en casi todo el mundo, gobernados porindeseables, enemigos de la Iglesia catlica y amigos de sus provechospersonales.

Da inmensa tristeza ver cmo se cumplen las palabras de la Escritura:Todos buscan las cosas que son para s, no las de Jesucristo.

El comunismo se ha engullido el mundo entero sin masticarlo.

Y nosotros, los que queremos el imperio del Evangelio, noscontentamos poco ms que con llevar un cirio en la procesin.

Qu hacemos por el obrero, por los espectculos decentes, por las

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radios catlicas, por el cine decoroso, por la organizacin de losestudiantes, por todos los grandes problemas de la Iglesia, de la enseanza,de la moda, de la caridad?

Vemos muy bien todo lo bueno que se hace; pero da pena ver que la

inmensa mayora de los hombres son gusanos de seda en el periodo de susueo.

Principios fundamentales.

I.Nadie puede servir para ocupar puestos relevantes en la sociedads no se prepara para ellos de una manera conveniente.

II.Luego quien quiera servir a la Iglesia como catlico y a Espaacomo espaol, ha de prepararse para ello con tiempo y mediosconvenientes.

III.Tres cosas son necesarias para una preparacin adecuada:

Espritu sobrenatural.

Conocimiento de la doctrina catlica.

Ser hombres de accin.

IV.En Espaa hay:Muchos hombres de comunin diaria.

Muchos hombres de palabra abundante.

Y muchos hombres pacficos.

Lo que no hay es muchos hombres que sepan a qu les obliga ladoctrina catlica.

V.Como los primeros puestos de influjo en la sociedad son loscargos polticos, claro es que los catlicos han de aspirar a ellos; pero nopor eso el Crculo de Jvenes (militantes) es poltico.

VI.Forma hombres para la alta poltica, que son los principiosestablecidos en los documentos pontificios; pero el Crculo no forma paraun partido poltico, sino para ocupar puestos en cualquier partido, que segobierne conforme a las normas de la religin catlica.

VIIEl programa del Crculo exige: Sacrificio, Optimismo, Visinde los problemas, Tenacidad, Unin, Constancia, Audacia, Accin, Lucha,

Sinsabores.VIIICreer que se puede hacer algo de valer en la vida sin algn

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sufrimiento, es soar.

IX.En qu temas preferentemente quiere trabajar el Crculo?

En las cuestiones sociales.En la enseanza.

En la moralidad.En la Prensa.

X.Por consiguiente, el Crculo,

No es una Agencia de colocaciones.Ni una Sociedad de alabanzas mutuas.

Ni una escuela de oratoria entre amigos.

Ni una cosa parecida a una Repblica presidencial, en que todo lo esel presidente.

XI.No damos al talento un valor absoluto. Es falso que el hombrevale lo que vale su entendimiento solo. Para el Crculo preferimos un buenconjunto de cualidades:

El espritu.

La simpata.

La accin.La comprensin.

La tenacidad.

La unin.

Estas prendas, con un regular talento, tienen en la vida unaimportancia enorme.

Nuestros lemas son:

Siempre unidos con los amantes de Dios y de Espaa.Siempre dispuestos a trabajar por Dios y por Espaa.

Siempre dispuestos al sacrificio por Dios y por Espaa.

Otras normas para el Crculo.

Nuestro Crculo tiene por fin caracterstico la preparacin de sussocios para la vida pblica.

Esta preparacin exige:

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A) Estudio de la doctrina catlica, sealadamente en las cuestionesde actualidad.

B) Conocimiento ele los problemas culturales, polticos, sociales yeconmicos de inters nacional.

C) Cultivo serio de la vida espiritual.El hecho de que en el Crculo se estudien problemas polticos no

significa que sea poltico en el vulgar sentido de que defienda o propaguela ideologa de un determinado partido poltico, sino slo en el ms noblede que se estudien a fondo y a la luz de la verdad cristiana las cuestionespolticas que deben ser conocidas por los catlicos cultos, a fin de poderactuar a su tiempo con eficacia y saludablemente en la promocin del biencomn. Ni los Papas, ni los eclesisticos telogos, canonistas y filsofos

son polticos en el primer sentido, y, sin embargo, los Papas, en encclicasy alocuciones, y los dems, en sus libros tratan de problemas polticos, ysuministran la doctrina segura para darles la posible y acertada solucin. Silos jvenes no se ejercitan en el estudio de esta doctrina y de los problemasactuales que a su vez han de resolverse, cmo estarn un da capacitadospara intervenir en la vida pbica de su pas, cul es su deber, como se lorecuerdan los mismos Romanos Pontfices?

Eso s, al discutir esos temas y todos los dems, se tendrn presentes

dos normas:1. Debe distinguirse lo que es doctrina cierta de la Iglesia y debe ser

aceptado por todos sus hijos, de lo que no es tal doctrina de la Iglesia, sinosolamente razonable opinin, que puede ser aceptada o rechazada, como acada uno le pareciere despus de seria consideracin.

2. Una vez asegurada la unidad en lo indiscutible, necesario,obligatorio, el espritu cristiano, y aun la pura razn exigen a todos mutuo

respeto en todo lo opinable. La convivencia pacfica, cordial, cristiana, noha de hacerse imposible, ni siquiera difcil, a los circulistas, dentro y fueradel Crculo, por el hecho de disentir en algunas cosas que Dios ha dejado ala libre discusin y opinin de los nombres. In necessariis, unitas; indubiis, libertas; in omnibus, caritas.

3. Al tratar un tema cualquiera, cada uno ha de estar seguro de que puede manifestar y razonar con toda libertad su opinin; y todos,convencidos de que por caridad, y tambin por utilidad y por elegancia,

deben dialogar sin la menor impaciencia ni alteracin, pese a la diversidadde pareceres.

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Por consiguiente, en punto a formas de gobierno, cada socio podropinar como quiera, ya que en eso la Iglesia concede plena libertad.

Entendiendo, no obstante, que tal libertad no significa que a los ojosde la Iglesia las formas de gobierno son igualmente tiles a todos los

pueblos, sino que, en abstracto, las tradicionales de que hablan los autoresson indiferentes y lcitas, aunque no todas lo sean en concreto; y que supreferencia queda al razonable arbitrio de los ciudadanos.

En todo caso, sea cual fuere la forma poltica de una sociedad, laIglesia necesita no slo hombres catlicos, cultos en Religin, sinohombres eminentes en los diversos ramos de la gobernacin de lospueblos; ya que sin esa eminencia ni podran aspirar al poder, ni, caso deposeerlo, podran usarlo provechosamente para la Iglesia y para la patria;

y, por otra parte, los catlicos bien preparados sern y se ha de procurarque lo seanlos que por su competencia y rectitud moral, y por lasnaturales exigencias sociales, tengan que encargarse de la direccin de losasuntos pblicos.

Sealadamente, si a su destacada competencia se une un verdaderoespritu de sacrificio, en orden al cual, lo primero que se exigir en nuestroCrculo es la asistencia puntualsima a las sesiones y el cumplimientoexactsimo de las tareas encomendadas a cada cual. En la inteligencia de

que si esto, siendo cosa tan necesaria, no se cumple, se podr considerarcomo indicio evidente de que no se sirve para el caso.

De frente o de costado?

Voy a tratar aqu de qu tctica han de seguir los jvenes paraconquistar la opinin.

FERNANDO.,Qu mtodo te parece ms apto para conquistar laopinin indiferente: disimular o hablar claro desde el principio?

RODRIGO.Hablar claro.

F.Yo, camuflando la verdad. Si soy sacerdote, me pongo un monoy hablo al obrero de lo bueno del comunismo.

R.Pues yo, si trato con un obrero, le doy cinco duros, y luego lehablo de Dios.

F.No te oir.

R.Falso. Lo que no quiere el obrero es morir de hambre y or quelos hartos le hablen del Infierno.

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F.Las moscas se cogen mejor con miel que con vinagre.

R.Partes del supuesto de que la verdad es vinagre y la mentiradulce. Y no es cierto. La verdad es hija de Dios, y, por consiguiente,amable. Pero hay que servirla en bandeja de oro, llevando en ella el don.

F.No te comprendo.R.Cmo gan Cristo a las muchedumbres? Curaba a los enfermos

y les hablaba del pecado y del infierno.

La Iglesia siempre ha hecho lo mismo. Cura los enfermos en sushospitales, ensea a los ignorantes en los colegios, recoge a los ancianosen los asilos; pero en todas sus obras exige que se cumpla la ley de Dios.No camufla nada.

F.Camufla la verdad con el don.R.Falso. Nunca disimula la verdad. Cundo la han disimulado losPapas, los Obispos, los misioneros, los Institutos religiosos?

F.Y cmo se da el don con la verdad en la Prensa, en el cine, enel teatro, en los Sindicatos?

R.Haciendo las obras perfectamente. Crees t que por serCervantes un autor francamente catlico, apostlico, romano, no se le haledo en el mundo entero? Lo verdadero y bueno hay que vestirlo

ricamente con las galas del arte. Si no. se despreciarn, no por bueno yverdadero, sino por vulgar.

F.Un diario o una revista francamente catlica desde el principio,difcilmente llegarn a tener gran circulacin.

R.ComoEl Debate y Gracia y Justicia.

F.Una excepcin. Un drama y una pelcula, menos.

R.Como La vida es sueo y La mies es mucha.

F.Otra excepcin.Ni unos Sindicatos.R.Como los de la C. E. S. 0., que reunieron durante la Repblica

ms de 270.000 obreros.

F.No me lo explico.R.Yo, s. El disimulo es falta de fe y confianza en Dios y falta de

visin y observacin.

Yo he conocido un sacerdote bueno que trabaj mucho en sindicatos

libres, creyendo que camuflando la verdad religiosa los reunira a millares.Reuni poqusimos, y lo mataron los rojos.

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F.No me lo explico.

R.Yo, s. Primero, porque la verdad y el bien tienen una fuerzainmensa por su propia naturaleza.

Segundo, porque las obras de Dios tienen su bendicin.

Tercero, porque los que temen la confesionalidad, nunca dan el pasodel disimulo a la confesin de la fe.

Cuarto, porque los camuflados son hombres sin fe en su ideal, que,por consiguiente, no la pueden inspirar a nadie.

F.Pues muchos sacerdotes se camuflan de mono y trabajan en lasminas y los talleres para conquistar a los obreros para la Iglesia.

R.Pues siendo muy buenos sacerdotes y muy sacrificados, lo que

yo opino es que la eficacia de la obra o ser nula o poqusima.Si hablan de Dios, para qu el mono?

Si no hablan de Dios, qu consiguen?

Si habitualmente llevan el mono, para qu el sacerdocio?Si lo llevan poco tiempo, con qu eficacia?

Cuanto se necesita para la cuestin social, lo han dicho los Papas.

De eso no hacemos nada o casi nada; pero nos ponemos el mono.

Se puede recomendar a los jvenes lalectura de Voltaire, tomando de l la

bueno y dejando lo malo?

Qu dira la razn?

Que era una barbaridad.

Y la Iglesia, qu dira?Que era un desatino.

Y los padres de familia catlicos?Que yo estaba loco.

Pero Voltaire, no tiene algo aceptable?

S, seor.

Pues eso es lo que yo recomiendo.

Muy bien: Mndeme a sus hijos, que los voy a obsequiar.Llegan los nios a mi casa, y les digo:

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Hijitos: tomad lo que queris. Tomad lo bueno y dejad lo nocivo.

Y ellos prueban de todos los tarros de mi farmacia, y como no sabenqu es lo bueno y qu es lo malo, toman de todo.

Y como es natural, porque no distinguen, algunos enferman y otros

mueren.Qu padre permitira a sus nios tomar lo bueno y dejar lo malo si

no lo conocen?

Eso pasa en el orden moral.Por consiguiente, no es lcito decir: De Voltaire o de Lutero se debe

tomar lo bueno y dejar lo malo.

Pero, qu joven sabe distinguir lo uno de lo otro? El error, de la

verdad; la hereja, de la doctrina catlica?Nadie.

Resultado: La recomendacin slo sirve para hacer un dao inmenso.

El que quiera cargar con esa responsabilidad, que cargue.Yo, no.

Preparacin de oposiciones.

Como se trata de jvenes, muchos de los cuales han de haceroposiciones, es conveniente decirles cmo, y para este fin no ser intileste dilogo:

Cuntas horas estudias al da?Unas diez.

Cunto te cuesta la Academia que te prepara?

Es cara y muy acreditada: 1.000 pesetas al mes.Buena seal. Por qu dices que est acreditada?

Primero, porque es muy cara, y, adems, ha obtenido un tanto porciento notable en el ingreso todos los aos.

Buena orientacin! Los textos que estudias, son excelentes?

Excelentes dice usted? Como que son de los profesores de laEscuela.

Cuntos aos te vienes preparando?Cuatro.

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Magnifico! Te da leccin particular alguien?

Uno que ha sido antes director de la Escuela.

Quin te ha orientado?Mi padre, mis tos, mis ms ntimos amigos, un profesor de la

Academia, padre de mi novia.Me satisface cuanto me dices. Tienes talento para Matemticas?

Estoy entre los primeros de mi Academia. Has estudiado otra carrera?

Me he preparado para ingresar en Caminos; dos aos.

Poca cosa. Yo he conocido uno que ingres despusde ocho. Tienes en la misma carrera algunos parientes?

Mi padre y cuatro tos.Se ve que es vocacin familiar.

Yo creo que entre todos no dejarn de ayudarme.

Claro! Vives con tu familia o en hotel?Con mis padres.

Cada vez me gusta ms tu posicin. Tengo esperanzas de xitototal. Me has dicho que tienes novia...

S, seor, y muy buena y muy guapa.

Esperas que ella te recomendar?

Cmo no! Si tiene ms deseos que yo de que ingrese!

Hablas mucho con ella?

Eso si que no; no por falta de ganas, sino porque la oposicin esdura.

Le escribes mucho?No mucho; pero pensar... Eso si que no puedo remediarlo... Unasveces pienso en sus ojos, qu ojos!; otra vez, en su boca, un cielo!; otravez, en su sonrisa y en su dulce hablar... Es un ngel! Pero mis horas deestudio, sas, nadie me las quita!

Veo que eres hombre de fuerza de voluntad.

Mire usted: tengo un entendimiento aceptable, una memoriabuena; pero, fuerza de voluntad?... pocos me ganan.

Pues te aseguro un xito fenomenal. Con voluntad se llega a todo.Eso digo yo. Diez horas de estudio, dos aos de otra carrera,

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cuatro de preparacin en sta, mi padre y mis tos de la carrera, un profesorde la Escuela to de mi novia, la Academia muy acreditada, 1.000 pesetasmensuales. El colmo del prestigio!

Muy bien, muy bien. Ahora, una ltima pregunta: Tienes algn

to ministro?Ninguno.

Ni siquiera un director general pariente tuyo en sptimo grado?

No.Pues te falta casi lo esencial.

El trato habitual de los chicos con las

muchachas.

No soy partidario de que un joven a los diecisiete o dieciocho aostrate habitualmente a muchachas, y muchsimo menos que se ponga enrelaciones a esa edad.

Me parece peligroso y nocivo desde muchos puntos de vista.

Pero que a un joven se le retire en absoluto del trato social y del tratocon chicas, me parece igualmente condenable.

Eso ha dado ocasin al siguiente chiste. Perdonen mis lectores si locuento, porque tiene gracia, aunque sea picaresca. No tiene intencininmoral, ni nada contra la fe, aunque hable de frailes.

Un fraile va con un novicio jovencito a una ciudad, desde suconvento, que est en un desierto.

Y a la vuelta a su retiro, le pregunta el Superior:

De todo lo que has visto, qu es lo que ms te ha llamado la

atencin?Y contesta sin vacilar:

El demonio.

Mis lectores no sabrn que el novicio, cuando iba por las calles, aveces se encontraba a su paso con una muchacha. Y preguntaba al fraileque le acompaaba:

Padre: qu es eso?

Y el viejo le contestaba:Hijo, no lo mires, que es el demonio.

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Claro, que es chiste con malicia picaresca y gracia.

Pero en el fondo oculta la verdad de que a un joven no esconveniente se le eduque en un desierto, porque lo ms sencillo e inocentele ha de impresionar notablemente.

Lo cual no es abogar por el absurdo de las escuelas mixtas, queeducan juntos a nios y nias, muchachos y muchachas. Eso es undesatino.

Pero sin llegar a este exceso, me agrada ms para educar elmediopensionado en una gran ciudad que el internado en un campo.

Otros pensarn de otra manera.Yo pienso as.

Estudiar o negociar?

Sobran estudiantes y faltan negociantes.

Hay quien comienza la carrera de ingeniero y acaba con la deveterinario. Qu xito!

Y quien comienza por vender patatas y acaba en millonario. Qudesastre!

La verdad es que sobran universitarios y hacen falta industriales.Verdad que se concreta en esta otra. Sobran hombres de vida mezquina yhacen falta hombres de vida con bienestar humano.

El rector de la Universidad de Pars ha dicho: Qu llegarn a ser enla vida esos 19.000 alumnos de Derecho, esos 15.000 estudiantes de Letrasy esos 10.000 mdicos? Un buen herrero, un buen ebanista, un buenaparejador, valen ms que un mal abogado o un mal mdico.

Eso lo ha dicho el rector de la Universidad de la Sorbona.Pues si l lo ha dicho, no les parece a ustedes que yo tambin lo

puedo decir?Y lo digo.

l lo dice de los franceses.

Yo, de los espaoles.

Pero los 10.000 y los 15.000 y los 10.000 franceses y espaoles dicen

a gritos lo contrario: Un mal abogado y un mal mdico valen ms quetodos los herreros y ebanistas juntos.,

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Pues no faltaba ms! Querer comparar lo uno con lo otro!

Supongamos que ellos comen mejor, visten mejor, se diviertenmejor, tienen una vida con ms bienestar; pero no podrn decir: Yo soyabogado! Yo soy mdico!

Y eso no vale nada?No slo de pan vive el hombre, sino de rango, de la amistad, del

trato, del nivel social, de la cultura, de la educacin.

No les parece a ustedes que esto est pero muy requetebin dicho?Y no les parece a ustedes que est mejor dicho que de lo primero de

que debe vivir el hombre es de la cocina? Lo primero es vivir, y despusser marqus.

Yo as lo entiendo.Si con una carrera vivo decorosamente, desahogadamente, muy bien.

Si no, prefiero ser zapatero, si de mis zapatos vivo con holgura yviven con bienestar la mujer y los hijos.

Aunque no hay necesidad de llegar a zapatero.

Muchos universitarios viviran incomparablemente mejordedicndose a negociar.

Si sus padres tienen tierras, mejorndolas y administrndolas.Si tienen fbricas, aprendiendo a saberlas llevar. Si tienen tiendas,

aprendiendo a comprar y vender. Negociar no es ningn misterio.

Claro es que hay que resolverse a trabajar.

Y a comenzar por lo ms bajo, e ir subiendo poco a poco.

As se hacen los hombres y los negociantes.En la vida son pocos los que nacen seoritos.

Y de los que nacen, muchos acaban por ser desgraciados. Porque noquieren trabajar.

En conclusin, el universitario de talento y estudio hace muy bien enhacer su carrera, si le da para vivir con holgura.

Si no, que se dedique a la industria o al comercio, y con eso vivirms humanamente.

Lo que no es humano, ni tolerable, ni racional, es estudiar para hacer

una carrera que le d a uno derecho a vivir con angustia y estrechez toda lavida.

Eso, no.

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Los catlicos que yo deseo formar son loscatlicos autnticos que saben influir en

la sociedad.

Quines son? Los que rezan el rosario todos los das? Hacen muybien en rezar...

Los que confiesan y comulgan todas las semanas? Hacen muy bienen comulgar...

Entonces, sern los que se disciplinan por sus pecados y los ajenos?

Hacen admirablemente...

En qu quedamos?

Quines son esos catlicos?Los que dan dinero esplndidamente para un gran peridico, para un

cine decente, para una escuela profesional, para una Universidad catlicalibre, para los pobres. Con generosidad.

No hay seal ms cierta de un catolicismo legtimo que soltar loscuartos por amor de Dios.

A m qu me cuesta pasar el rosario?

Qu me cuesta comulgar los domingos?Qu me cuesta dar unas pesetas a los pobres?Lo que me cuesta es dar limosna con esplendidez, segn mi

capacidad, se entiende.

Recordar el lector lo que dice el Evangelio de aquella pobre viudadel gazofilacio.

Eso.

No todos pueden lo mismo. Los que tienen mucho, mucho; los quetienen poco, lo que puedan generosamente. Dan ms los pobres que losricos.

Mucho ms.

Porque saben ms lo que es hambre y penas.

Un albail con siete hijos recibi en su casa a otros siete hurfanosde un hermano suyo.

Eso es dar.

Y con esplendidez.

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Los pobres dan ms que los ricos.

Porque saben lo que ellos no: las penalidades que origina la pobreza.

Y por eso son ms compasivos.Ya que los ricos no sufren esas penas, por lo menos que vayan a

verlas en las casas de los muy pobres. Seran ms compasivos y daranmucho ms.

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CMO ME ECHARON DE MADRID

La Asociacin Catlica Nacional dePropagandistas.

Ya era Superior en el Colegio de Areneros, y unos seores, que nis quines fueron, ni me interes nunca saberlo, intrigaron para echarmede Madrid.

Y lo echaron a usted?

Claro que me echaron! No fueron mis superiores.

Me podra usted decir por qu?

Se lo dir a usted con tal de que me guarde secreto absoluto. Meecharon porque fund una cosa que se llamaba Asociacin Catlica

Nacional de Jvenes Propagandistas.Y por eso le echaron?Porque queran que fuera para otra cosa que yo no quera que

fuese.

Y usted, para qu quera que fuese?Para defensa y honor de la Iglesia. Y por eso me pareca que deba

ser independiente, desinteresada, unida de accin, de lucha, optimista,

sobrenatural.Y los que le echaron, no queran eso?

Queran llevar el agua a su molino.

A qu molino?A uno que no era el mo. Y yo, ni entonces, ni nunca, querr otra

cosa que la que quise al fundarla.

El que quiera otra cosa, que funde lo que quiera, que lo llame como

quiera, que le d los medios que quiera y los fines que le d la gana; peroque no espere que lo que yo fund para un fin determinado sea para el fin

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que l quiera.

Eso, no.

Les digo a ustedes que no.Espero que con la ayuda de Dios eso no pasar nunca.

Con qu fin se cre la Asociacin dePropagandistas.

Ni fue, ni es, ni debe ser partido poltico.Sino algo sobre y por encima de todo partido poltico. Una

Asociaran de hombres catlicos, que han querido y quieren influir en la

vida pblica, directa e indirectamente, pero sin formar partido y unindosecon todos los catlicos o ciudadanos de buena voluntad para todo lo quesea defensa de la religin y del bien comn.

Hubiera podido pretenderse con la Asociacin una obra de purapropaganda religiosa y se habra intentado hacer una asociacin de granprovecho; pero no fue se el pensamiento que le dio origen.

Ni lo fue el hacer una agrupacin de jvenes catlicos que seconsagraran slo a la accin social.

Ni se quiso crear una fuerza en el sentido de grupo poltico; que nipoda serlo por su naturaleza, ni por quien la fundaba, ni por el inters dela cosa en s.

Se pretendi crear una fuerza catlica que no siendo partido polticopudiera influir en la vida pblica, incluso en la poltica, siguiendo lasnormas de la Iglesia en todo lo relativo a la direccin de la poltica,despertando vocaciones de polticos catlicos que defendieran los intereses

de la religin y de la patria desde los puestos del Gobierno, cada cuallibremente, segn sus preferencias personales.

Una fuerza poderosa, no grupo poltico, pero preparada para influiren los Gobiernos de un pueblo, no es una fuerza poltica; pero es de msinters que un partido poltico.

Porque todo partido poltico, como tal, se gasta, aunque sea catlico,cuando a su programa catlico agrega notas caractersticas opinables comoesenciales

Pero una agrupacin que slo pretende la defensa de los derechos dela Iglesia y de los intereses nacionales, de evidente conexin con el bien

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moral y religioso; una agrupacin que ni es partido ni puede ser partido,que acoge en su seno a cuantos quieren influir en el gobierno del pueblo,tengan las ideas que tengan en cuanto a las formas de Gobierno; unaagrupacin siempre dispuesta a ir de la mano con todos los catlicos, en

orden a la defensa de los intereses morales y religiosos, esa Asociacinperdurar con la misma vida que recibe de los principios catlicos en quese apoya.

Toda la dificultad estribar en atenerse a esas normas sobrenaturales,que no son precisamente prcticas de devocin, aunque stas seannecesarias, sino normas doctrinales que regulan el proceder de lospropagandistas.

Cuando esas normas pertenecen al orden especulativo, con facilidad

todos somos catlicos fervorosos; pero cuando han de regular nuestraconducta y tocar los intereses de la vida, con facilidad se olvidan o seinterpretan torcidamente.

Como en este captulo quisiramos dar un juicio de conjunto de laobra de la Asociacin, no debe parecer extrao que nosotros que lafundamos y que no la dirigimos hace casi cuarenta aos, digamos confranqueza lo bueno y lo defectuoso de sus actuaciones en todo ese lapso detiempo, sin otra intencin que la de contribuir a mejorarlas.

Nos mueven a ello las siguientes consideraciones:1. Que no es razonable se nos atribuya ninguno de los xitos y

aciertos que durante ese espacio de tiempo ha tenido la Asociacin.

2. Que tampoco lo es se nos atribuyan algunas cosas tal vez noacertadas; ciertamente, sin comparacin, menores que los bienes por ellaproducidos.

3. Que siendo muchos los jvenes que todos los aos ingresan en

ella, no parece fuera de camino conozcan nuestro sentir en algunos puntosen que hemos podido discrepar de su direccin.

4. Que conviene a la misma Asociacin conocer lo que de ella sientequien tiene el deber de amarla y no se deja llevar de aversin poltica, ni deninguna otra especie.

La Asociacin tiene conciencia de sus obras.

Lo que tal vez no conozca, al menos de un modo adecuado, es eljuicio general que se da de sus modos de proceder.

Espaa podra dividirse en tres grupos respecto a ella:

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a) El de los indiferentes, que es, sin duda, sin comparacin, el mayor;es, a saber, el de los que no sienten ni amor ni aversin hacia ella, por elsencillo motivo de que no se dan cuenta de su existencia, como no se ladan de tantas otras cosas buenas.

b) El de sus enemigos, grupo numeroso, compuesto de polticosadversos a la poltica que, con razn o sin ella, se le atribuye.

e) El de los amigos, grupo compuesto de sacerdotes, religiosos ycatlicos ecunimes, cuya estimacin con respecto a los propagandistasdepende ms del recuerdo de sus actuaciones pasadas que de sus obras yactos presentes o pertenecientes a estos aos de nuestra posguerra.

Ahora bien: lo que nosotros sentimos y juzgamos de la Asociacin, sipuede tener algn valor, es porque justamente coincide con el parecer de

este ltimo grupo.Y el juicio se resume en esto: que la Asociacin ha hecho una gran

labor nacional, que es una organizacin catlica de gran fuerza y que hatenido errores, entre los que figuran, como ms trascendentales, lainterpretacin de la doctrina acerca de la sumisin a los poderesconstituidos, y el no haber defendido la Universidad catlica, ni la libertadde enseanza en general, con el entusiasmo y eficacia que era debido.

Todo lo cual no menoscaba en lo ms mnimo la estimacin y elafecto que nosotros le debemos, ni el aprecio que debemos tener y tenemosde los excelentes frutos que ha producido y est llamada a producir.

En ltimo trmino, lo acaecido era forzosamente lo que haba deacontecer, es decir, lo que ocurre con toda obra en que ha habido ms deuna direccin: que es moralmente imposible la coincidencia absoluta entodos los pareceres.

Ni es posible tampoco la carencia absoluta de errores, sea cual sea la

naturaleza de las obras, ya que todas son humanas.Eso, en el supuesto, de que los errores que le atribuimos sean

objetivos y reales; no apreciaciones meramente subjetivas nuestras, si biencreemos que no lo son.

De cmo la Asociacin de Propagandistases una gran fuerza catlica organizada.

Es una organizacin poderosa.De carcter simplicsimo, con Asamblea nacional, Consejo superior,

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presidente nacional, secretarios de Centro, vocales, estatutos y socios.

Tiene centros establecidos en casi todas las capitales de provincia yalgunos pueblos importantes.

Los miembros son unos quinientos, de carrera, abogados, ingenieros,

mdicos, catedrticos de Universidad, de Instituto, etc.Muchos son cargos importantes en la Accin Catlica, la

Administracin, la poltica, la enseanza, empresas industriales,Sociedades de cultura, etc.

La Asociacin dispone de una prensa numerosa y de prestigionacional. Ya, de Madrid; Ideal, de Granada; Hoy, de Badajoz; IdealGallego, de La Corua;La Verdad, de Murcia; revistas Dgame yLetras;Logos, Agencia de informaciones de Prensa y Editorial Catlica; tuvoantesEl Debate y Gracia y Justicia.

Dirige obras importantes: el C. E. U., Centro de EstudiosUniversitarios; el Colegio Mayor de San Pablo, la Biblioteca de AutoresCristianos.

Y antes de la guerra, el Instituto Social Obrero, la Escuela dePeriodismo, y, de algn modo, la Federacin Espaola de Trabajadores,que lleg a reunir ms de 270.000 obreros.

En el orden politice, aunque la Asociacin ni es poltica, ni puedeserio, pero si puede formar y debe formar hombres para que acten en lapoltica dentro de los partidos no prohibidos por la Iglesia, cada unolibremente, conforme a sus preferencias.

Pues, siguiendo esa norma, al advenimiento de la Repblica fueronmuchos los propagandistas que actuaron en la poltica, uniendo sus fuerzasa las de los otros grupos adversos a los socialistas y dems partidos deizquierda.

Es, por consiguiente, la Asociacin Catlica Nacional dePropagandistas una organizacin poderosa, de influjo social, poltico,cultural y religioso.

Sin mengua ni desestima de ninguna otra organizacin catlica, quizla fuerza organizada catlica de influencia ms poderosa en Espaa.

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De cmo su influjo social no responde asu fuerza y su poder.

Preguntamos: Corresponde hoy a la magnitud de esa fuerza la

importancia de su influjo?Contestamos: No.

La Asociacin ha tenido varias pocas brillantes: la de su luchacontra las escuelas laicas, la campaa contra la ley del Candado, la deoposicin a la supresin del Catecismo en las escuelas, en tiempo deRomanones, y la ms gloriosa de todas, aunque malograda, por arte deAlcal-Zamora, presidente de la Repblica, que debi dar consti-tucionalmente el Poder a la fuerza poltica ms poderosa del Parlamento, y

no se lo entreg, dndoselo a Portela Valladares, que ni tena fuerzaalguna, ni talento, ni carcter para contener la revolucin.

Los excesos de sta produjeron el glorioso Movimiento Nacional ycon l sobrevino una poca de atona de la Asociacin, que no justifica,sino en parte, la naturaleza del rgimen poltico imperante.

Aun as, el poder de la Asociacin es tal, por virtud de su propianaturaleza, que actualmente dos de sus ministros son propagandistas, y

varios directores generales, gobernadores y rectores de Universidad.Pero, dnde aparece la influencia benfica que poda esperarse delos quinientos propagandistas derramados por toda Espaa?

Es verdad que en la enseanza superior y media figuran miembros dela Asociacin; pero, de qu ha servido si no han cooperado cual deban altriunfo, que las circunstancias exigan y prometan, de la libertad de laenseanza, bien mximo e indispensable para la enseanza catlica, para lapatria y para la Iglesia misma?

Es verdad que entre sus quinientos socios hay muchos buenosoradores, capaces de influir en las masas, divulgando las doctrinas socialesde las Encclicas; pero, qu mtines, qu conferencias se han tenido contrael socialismo y el comunismo, la gran preocupacin del mundo en estosmomentos?

Entindase bien nuestro pensamiento.

Lo que afirmamos es que no corresponde el influjo actual de laAsociacin a su poder y fuerza.

Que dentro del rgimen actual queda an un campo extenso yfecundo para un trabajo ms entusiasta y ms eficaz.

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Queda el campo de la propaganda religiosa.

Queda el campo de la cuestin social.

Queda el campo de la enseanza profesional. El campo de la libertadde enseanza.

El campo de la propaganda popular escrita.El campo de la lucha contra la inmoralidad del cine.

El campo de la persecucin contra la inmoralidad del libro y delgrabado, etc., etc.

Sobra campo y falta accin.

La Asociacin podra influir bastante ms de lo que influye en todosesos sectores del apostolado catlico. Mucho ms.

Actualmente es una agrupacin de hombres de valer que enocasiones ocupan puestos relevantes.

Con elocuencia expresaba esta idea un joven de talento, cuando anteuna reunin de stos deca que al invitar l a los universitarios a queentraran en la Asociacin de Propagandistas, le respondieron: Y qu eseso? Es decir, que ni en Madrid, donde la Asociacin tiene tantos y tandestacados elementos, era conocida por sus obras y su influencia social.

Sin embargo, estamos seguros de que en la Asociacin siempre haalentado y alienta un gran espritu sobrenatural de santificacin propia yapostolado que la mueve a corregir sus defectos y adaptarse cada da ms asu ideal.

Este espritu le ha inspirado ya, le inspira y seguir inspirandodecisiones renovadoras. Y como un cuerpo sano y robusto en lo esencialreacciona eficazmente contra accidentales achaques y recaba la plenitud desu vida tras cada eventual crisis, as la Asociacin no dejar de ponerse en

forma para realizar perfectamente, y en cuanto lo permita la fragilidadhumana, los altos fines para que se fund.

Interpretacin de la teora del bien posi-ble e imposible. Cmo es posible lo

imposible,

En esa interpretacin algo han fallado los propagandistas.

Pensamos que las cosas son imposibles porque nos cuestan trabajo,porque hemos de prepararnos para ellas, porque queremos conseguirlas a

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la primera vez, porque no estamos habituados a vencer dificultades, porquenos hemos criado en el regalo y la comodidad, porque nos lo han dadohecho todo en la vida.

Pero viene la adversidad y con ella la necesidad de hacer lo

imposible.Y entonces pasa a ser posible lo que se crey que no lo era.

A veces pasa de imposible a fcil y apetecible y gustoso. Qu cosams imposible a la naturaleza humana que llevar el dolor?

Pues nosotros hemos visto un anciano enfermo, pobre, en unhospital, sufriendo siete aos dolores en un pobre camastro, y pidiendo aDios que no se los quitara. No es nico caso.

Qu cosa ms imposible a una persona aristocrtica que tener quepedir una limosna?

Pues no son raras las que hoy, como ayer y maana, siendo de linajenoble, se ven en la precisin de pedirla, y la piden y gozan con recibirla.

Qu cosa ms imposible a un deshonesto que guardar la castidad?

Pues todos los das se ven casos de quienes pasaron de laimposibilidad a la pureza.

Se piensa en el uso de instrumentos de penitencia, y no se concibe la posibilidad de usarlos. Un cilicio, qu horror! Unas disciplinas, quhorror!

Es un engao de la naturaleza y del demonio.

Porque se resuelve la voluntad, y las penitencias se llevan confacilidad.

Hemos conocido muchas cosas imposibles pasadas a la realidad.

No era posible a los Luises, en Madrid, all por el ao 1904, hacer

Ejercicios en retiro absoluto.Y se dieron las tres tandas que podan darse en un curso. Y se

hicieron con gusto y con el sentimiento de que fueran slo de tres das,

El mismo imposible se dio en los ingenieros de la I. C. A. I. Y fueposible.

Desde entonces ac, cuntas imposibilidades convertidas en hechos!

Imposibilidad de una organizacin catlica de universitarios.

Imposibilidad de una Asociacin de selectos para el apostolado.Imposibilidad de un gran rotativo catlico.

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Imposibilidad de una revista satrica honrada.

Imposibilidad de una campaa de mtines.

Imposibilidad de una Confederacin de Sindicatos catlicos.Imposibilidad de una gran fuerza catlica de carcter poltico.

Imposibilidad de Residencias universitarias para los jvenes decarrera.

Imposibilidad de Internados donde los bachilleres educaran sulibertad con bienestar y espritu.

Imposibilidad de que los bachilleres de catorce aos hicieranEjercicios en absoluto silencio.

Imposibilidad de que hicieran Ejercicios las Academias militares, los

mineros de Asturias y los ferroviarios.Imposibilidad de que los quioscos de ferrocarriles y los de las

ciudades los explotara una Asociacin catlica.

Imposibilidad de una gran editorial catlica y de una radio catlica.Quedan muchas imposibilidades posibles?

Muchas.

La Universidad catlica libre.

La segunda enseanza libre de veras.La Legin de la Decencia contra el cine inmoral.Un reparto equitativo de la propiedad.

Un teatro decente, artstico.

Una playa decente.

Una gran librera religiosa.Unas modas elegantes y decorosas. (De nuestro librito Consejos a los

universitarios, pg. 64.)Unas Escuelas profesionales rurales.Una revista grfica, artstica y moral

Una gran Confederacin de Sindicatos catlicos independientes.

Unos bachilleres bien formados con textos brevsimos.

Una gran organizacin universitaria, de carcter profesional, etc.

Todo imposible, pero realizable, con esfuerzo, con plan, condireccin, con un hombre para cada cosa.

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Lo imposible es lo fcil si no se quiere trabajar, si no se quiere gastar,si no se quiere disgustar, si no se quiere reir, si slo se quiere lalamentacin.

En todas partes hay imposibles perfectamente posibles; en Espaa

ms posibles, por la fuerza de los catlicos, porque los espaoles, aunque parezcan rebeldes, son dciles; slo les falta direccin, perfectamenteposible.

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GRANDES DESATINOS SOBRE MI VOCACINRELIGIOSA Y SOBRE OTRAS VOCACIONES

Primer desatino: dejar mi ingreso en lavida religiosa hasta la terminacin de la

carrera.

Yo sent la vocacin a la Compaa al terminar el bachillerato.

Y cundo ingres usted?

Cuando termin la carrera.Y por qu tard usted tanto en ingresar?

Porque no tena ni pizca de ganas de ingresar. Para que se entiendaque el meterse religioso o monja no suele ser ningn plato de gusto, como

dicen algunos que se creen muy listos.Dios Nuestro Seor a cada alma la trata segn sus planes. A unas las

llama una, o dos, o tres veces a la vida religiosa. Y si no responden, no lasllama ms. Y se quedan en el mundo y se pierden.

No se pierden por quedarse en el mundo, porque en l Dios tambinles da gracia para salvarse.

Se condenan porque el mundo tiene mil peligros, y en ellos caen en

pecados graves, y les llega la muerte y se pierden. Pero a otras almas lasllama, y las llama mil veces, hasta que las rinde.

Segundo disparate:

Pedirle a San Jos, con los brazos en cruz y de rodillas, antes deacostarme, me alcanzara de Dios la gracia de no tener vocacin.

Han visto ustedes cosa ms necia?

Gracias a que el Santo bendito hizo las cosas al revs

Tercera locura:

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Hubiera yo podido hacer la carrera en Madrid. Pero no quise, y laquise hacer encerrado en Deusto. Y a que no adivinan mis lectores porqu?

Pues para no perder la vocacin.

Entienden ustedes eso?Qu bueno es Dios y cunto aguante ha tenido conmigo!

Cuarto desatino:

Acab la carrera, y entonces me dije: Ahora, qu hago? Voy a hacerocho das de Ejercicios en Deusto, a ver si Dios me da fuerzas paradecidirme.

Hice los Ejercicios, y al terminarlos me hallaba lo mismo que antes.

Lloraba, pero no me decida.Hasta que Dios se apiad de m y por medio de mi Padre espiritual,

que me dijo estas sencillas palabras: Dios quiere la voluntad. Me decid.

Pero no acaba aqu mi historia.

Quinto desatino:

Lleg el momento de la despedida, y entonces la escena fue tremenda

para todos: Lloraba mi madre, lloraba mi padre, lloraban todos mishermanos, lloraba yo.

Pero no crean ustedes que era un llanto silencioso, sino a gritos:como si se muriera la mitad de la familia.

Me fui. Me acompaaba un hermano mayor. Fuimos a un hotel deunos amigos de mi familia, en Murcia.

Y como no me corra prisa ingresar en el noviciado, al segundo otercer da de estar en el hotel, mi madre, que iba a tomar los baos de

Alhama, creyendo que yo estaba ya en el noviciado, se present enMurcia, y, sabiendo que estaba en el hotel, me mand un recado,preguntndome si quera acompaarla aquellos das.

Lo pens un poco, y la dije que s.

Me desped de mi hermano mayor, y me fui con mi madre y mis doshermanas a los baos. Y a los dos o tres das, como no haca nada all,pens en volver a ver a mi padre, que estaba pasando el invierno con parte

de mi familia en un pueblo de Alicante, de donde era natural.Excuso decir a mis lectores la sorpresa de mi padre. Le cont loocurrido. Y aquel mismo ella me volv a Alhama.

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Pero sereno, con paz, sin una lgrima, ni ma ni de mi padre.

Es que ya haba hecho el sacrificio, y Dios me lo pagaba. Debo deciraqu que la conducta de mis padres y mis hermanos fue siempre digna ycristiana.

Jams se opusieron a mi decisin ni me dijeron una sola palabra quesignificara desaprobacin.

Su conducta era hija slo del sentimiento y dolor por la separacin.

Y debo decir aqu tambin que m sacrificio obedeci slo al cariode los mos.

Eran todos muy buenos.

Mi madre y las dos hermanas mas, que estaban con ella en Alhama,

me llevaron al noviciado, que era un antiguo convento de jernimos.Nos abrazamos, nos despedimos, serenos todos, sin una lgrima.

Pero supe luego por el Hermano Comprador, que se cruz con elcoche que las llevaba a ellas, que su llanto se oa en toda la huerta deMurcia.

Y ahora una consideracin para los jvenes que me lean.

Un consejo a las jvenes:

No me imitis en el desatino de diferir vuestra entrada en la vidareligiosa si Dios os llama.

Ni consintis en la tentacin de hacer primero la carrera, comoquieren algunos padres.

Conozco algunos jvenes que han cedido a esa tentacin y hanperdido la vocacin.

Los padres se tranquilizan pensando: Es que no la tenan.

S la tenan.Pero la perdieron por culpa de sus padres. Su responsabilidad es

enorme.Dir el lector: Usted no la perdi.

Y yo respondo: Porque Dios hizo muchos milagros de misericordiaconmigo.

Qu bonsimo ha sido Dios conmigo!

Toda la eternidad, si tiene, como espero, misericordia de m, meparecer poco tiempo para darle las gracias por la predileccin y paciencia

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que ha tenido conmigo.

Ests enfermo? Qu te pasa?

Referir a ustedes una cosa ntima ma, relacionada con mi ingresoen la Compaa de Jess.

Hasta cundo estuve haciendo la hereja de pedir por las noches, conlos brazos en cruz, la atrocidad de que San Jos me alcanzara de Dios lagracia de no tener vocacin?

Yo creo que debi ser hasta el tercer ao de la carrera de Leyes.

Vern ustedes lo que pas.

No fue milagro, ni xtasis, ni cosa parecida.Pero una cosa extraordinaria en el orden de la gracia s fue.

Mi rector de Orihuela me regal unNovum Testamentum.

Un da, oyendo Misa en la capilla del Colegio de Deusto, lo abr, ypor previdencia de Dios, lo abr por donde el Evangelista San Mateocuenta las seales del Juicio universal.

Cosa singularsima! Aquellas seales del Juicio, que yo haba ledo

cien veces, me causaron tal impresin, que vern ustedes...Salimos de or Misa, y, yendo por un trnsito del Colegio del pisoprincipal, me encontr con un compaero que, adems de serlo en laUniversidad, lo era casi paisano, porque era extremeo, y yo tena muchafamilia en Extremadura.

Me par, y me dijo:

Ests enfermo? Por qu? te respond.

Porque tienes el rostro demudado notablemente.

Me di cuenta entonces de que la impresin de mi lectura en la capillahaba sido algo extraordinario.

Desde aquel da hice el propsito de no resistir ms a la vocacin.

Y aquel mismo da descubr a mi confesor, que era a la par maestromo en Derecho Poltico, mi problema interno.

Dios santo! Qu paciencia tuviste conmigo!

Porque, despus de ese llamamiento tan fuerte, an estuve tres aossin resolverme.

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A veces me ocurre pensar que Dios Nuestro Seor tiene tambin, nodigo predilecciones, sino sus caprichos.

Porque si eso lo hubiera hecho con un futuro San Luis!...

Pero fue conmigo, que no he sido ningn San Luis. Y ahora, la

ltima reflexin.Jvenes que me leis: no cometis un desatino tan enorme como el

mo, porque probablemente no tendr Dios con vosotros la predileccin, lapaciencia, como queris llamarlo, que tuvo conmigo.

Fueron muchos milagros de la gracia.

Hay vocacin a la fe catlica, vocacin a

un estado y vocacin individual ypersonalsima.

Adems de la vocacin a la fe, hay vocacin a un estado y vocacinsingular y personal.

De la vocacin a la fe se ocupan principalmente los misioneros entreinfieles.

De la vocacin al estado se preocupan los diversos Institutos

religiosos.De la vocacin singular y personal se debe preocupar el individuo.

Cmo?

Estudindose, observndose, consultando a prudentes y peritos.

Hay muchas personas que parecen nacidas en serie.

Lo mismo si son seglares que religiosos, no buscan ni pueden hacersino lo que les ordenan.

No sienten impulso de nada, fuera de lo que les mandan; puedenhacer mucho bien en la oscuridad, haciendo lo que todos.

Pero otros tienen cualidades para hacer algo que no es lo de todos:sienten un ideal concreto, que les entusiasma, con el que gozan, para el quese sienten capacitados.

Hay muchas vocaciones personales e individuales.

Se pueden formar y ser sobresalientes; no se forman y quedan

vulgaridades.Entre los religiosos, a veces no se forman, porque les parece a ellos

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que pensar en salirse de la formacin en serie es pecado.

Les parece que toda la virtud consiste en obedecer. Es un error.

Y as se pierden grandes vocaciones.Hombres capaces de hacer algo eficaz, nuevo, conforme a los deseos

de los Papas, que todos los das nos hablan de grandes problemas y luchas,de que nosotros no hacemos caso.

Qu hacer?

Ningn joven que se estime en algo debe pasar por la vida sin tenerconciencia de que ha venido al mundo para hacer algo de provecho a laPatria y a la Religin.

Lo digo para cualquier joven seglar o religioso.

Pero no hablo de hacer lo que le pide su sola profesin. Eso es poco.Y lo supongo.

Sino para hacer algo segn su vocacin personalsima. Todostenemos la vocacin de cristianos, seglares o religiosos y adems otravocacin individual.

En unos se manifiesta con evidencia; en otros, ms o menos confusa.En otros, de ningn modo.

Si Dios no nos ha dado seales claras de esa vocacin personal,paciencia; pero hemos de pedrsela humildemente.

Sin ellas podemos ir al cielo, que es lo esencial. Pero no se trata deese egosmo sobrenatural. Se trata de Dios, de su Iglesia y de Espaa.

Y para ellos debemos esforzarnos para no pasar por la vida como unode los infinitos.

Sino pasar por la vida dejando en la tierra algo propio y duradero yde honor para Dios y para la Patria. Y quin sabe eso y puede hacer eso?

Los que tienen corazn e ideal y lo estudian y se estudian y loconsultan y lo piden a Dios.

En la tierra hay infinitas cosas buenas y ptimas que nadie las hace ni piensa en ellas, ni parece que les importa nada, se hagan o dejen dehacerse.

Si tuviramos un poco de corazn y lo pensramos... Pero noscontentamos con ser del montn y hacer lo que el montn.

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Cmo hacen los espaoles la eleccin decarrera?

Poco ms o menos, como en todas partes. Mal.

Por capricho. Por rutina. Porque la tienen su padre y su abuelo.Y a veces por esttica. Por el uniforme, por los galones. Porque da

mucho dinero.

Todo equivocacin. Porque no se tiene vocacin. Y qu es vocacinpara una carrera?

Tener las prendas necesarias para hacerla y ejercerla. Talento, amoral estudio, gusto por ella, constancia. Yo propondra que a nadie se le diera

acceso a una carrera sin que primero se hiciese una encuesta a losprofesores del aspirante, al confesor y a dos personas prudentes.

Qu preguntara?

Si tiene las cualidades indispensables.

Por no hacerlo se da el caso de infinitos fracasados en las carreras.

Comienzan por Caminos y acaban en Veterinarios.O comienzan por otras carreras de Ingenieros y acaban por

conductores de tranvas.Yo s de un abogado que rechaz un empleo de diez pesetas diariasporque pidiendo limosna ganaba quince. Aparte de que muchos y muchassobran como estudiantes.

En Espaa y en Francia.

Sobran infinitos abogados, mdicos, licenciados en Filosofa yLetras.

Sobran seoritos y faltan obreros.

Sobran infinitos que viven misrrimamente de las carreras y viviranholgadamente de electricistas.

Ah! Pero la clase... Y la clase?

Es verdad. La clase con hambre es preferible a una condicin socialms modesta con una vida mucho mejor!

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CUALIDADES, DEVOCIONES Y VIRTUDES APTASPARA TODOS

El buen humor es un don de Dios muy amable y beneficioso.

La alegra habitual es un anticipo del cielo, donde hemos de estarsiempre felices.

Los santos, aun en medio de sus contrariedades, no perderan sualegra.

Es que no sufran?Claro que s.

Es que no vean las infinitas calamidades de la tierra?

Claro que s.

Pero la gracia de Dios, que nunca les faltaba, era para ellos una

fuente de felicidad inagotable.El pecado es lo que hace infelices a los hombres.

Ni los adlteros, ni los ladrones, ni los asesinos, ni los malvados decualquier gnero viven alegres. Ni los que se divierten a todas horas.

Se divierten precisamente porque no estn alegres. Es Dios el que lesniega la alegra para su bien. Y su conciencia.

Pero la alegra es un don, no slo que nace de la gracia habitual, sinodel temperamento y modo de ser natural.

Y es un gran don de Dios.Con alegra, la vida, que es triste e ingrata por sus infinitos dolores y

amarguras, se hace llevadera.

Hacemos ms amable a los que nos rodean su existencia.Trabajamos ms.

Practicamos la virtud con ms facilidad.

Pidamos a Dios el don de la alegra.

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Hay relacin ntima entre la santidad yel sentido comn?

No pregunto si todo el que tiene sentido comn es santo, sino si todo

el que es santo tiene sentido comn. Desde luego se puede dar por ciertoque todos los santos tuvieron sentido comn.

Esta no es una afirmacin a priori, sino que consta por sus vidas.

Algunos hicieron cosas al parecer raras; pero, ms que raras, sedeben llamar extraordinarias.

Si a eso lo llamamos falta de sentido comn, adis santidad.

Tendramos que borrar de las letanas de los santos una gran parte de

los nombres que figuran en ellas. Aparte de que hay hechos que figuran enlas Vidas de los santos y en las lecciones del breviario, que seguramente laIglesia las eliminar. Como apcrifos, en futuras ediciones.

Pero es que esta ltima conexin entre el buen juicio y la santidad escosa muy conforme a razn.

Porque as como la pasin influye en el entendimiento para desviarlode la verdad y del juicio recto, as la santidad influ

Recuerdos y criterios de un viejo

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