Revista Conocimiento 14

Autores invitados: Javier Carrillo, Carlos Chavarría, Armando V. Flores, Humberto Leal, Mario Cerutti, Juan Ignacio Barragán, Jorge García Murillo

a seis personajes de nuestra ciudad

Director Luis Eugenio Todd

Por Juan Roberto Zavala

MARIO CERUTTIUno de los constructores de nuestra cultura regional, Mario Cerutti ha realizado investigación en historia económica y empresarial del norte de México. Es autor de 23 libros, 31 capítulos en libros y 46 artículos publicados en revistas nacionales y extranjeras. De entre sus libros sólo mencionamos Burguesía, capitales e industria en el norte de México. Monterrey y su ámbito nacional, editado en 1992 por la UANL.

Aunque nació en Córdoba, Argentina, muy joven se avecindó en Monterrey. Es licenciado en Historia por la Universidad Nacional de Córdoba,

en Argentina, y doctor en Ciencias Sociales de la Universidad de Utrecht, en Holanda. Ha dictado conferencias e impartido seminarios en numerosas universidades de América y Europa. De 1975 a 1999 fue catedrático en la Facultad de Filosofía y Letras de la UANL, y a partir del año 2000 lo es en la Facultad de Economía de la misma institución.

CARLOS CHAVARRÍA GARZADestacado hombre de negocios que en una primera etapa de su vida se dedicó a la consultoría en sistemas de redes, y de 1990 a 1996 ocupó la Dirección del Consejo Estatal de Transporte del Gobierno del Estado de Nuevo León, Carlos Chavarría Garza es actualmente secretario del Consejo del Grupo TRANSREGIO, que entre una de sus actividades se dedica al transporte público y privado.

Es ingeniero químico y tiene una Maestría en Investigación de Operaciones, ambos grados académicos de la UANL. Hizo un Diplomado en Administración de Medios de Transportes en la Universidad Tecnológica de Rhainbanhaus, en Dusseldorf, Alemania. Es autor de los libros El transporte en el área metropolitana de Monterrey. Análisis y solución de un viejo problema y Un modelo de equilibrio para redes de transporte, ambos editados en 1993 por la UANL.

Investigador en materia urbana, Juan Ignacio Barragán Villarreal es autor y coautor de 15 libros, de los que sólo mencionamos: Cien años de vivienda en México y San Pedro Garza García, participación ciudadana y desarrollo urbano, ambos publicados en 1994 y 2000 por Urbis Internacional, y autor de más de 300 proyectos de investigación urbana nacional e internacional. Actualmente es secretario de Desarrollo Urbano y Económico del municipio de San Pedro Garza García, Nuevo León.

Es arquitecto por el ITESM. Tiene una maestría en Sociología de la Arquitectura y, sin titularse, hizo el doctorado en la misma especialidad, ambos en la Ecole de Hautes Etudes en Sciences Sociales, en París, Francia. Hizo una especialización en Teoría e Historia de la Arquitectura, en la Unidad Pedagógica de Arquitectura. De 1997 a 2003 fue director de Fomento Urbano de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del Estado.

HUMBERTO LEAL GARCÍAImportante constructor de nuestra ciudad, fundador del Grupo Inmobiliario Lexus, S. A. de C. V., el ingeniero Humberto Leal García es actualmente presidente de la Sociedad de Urbanismo, región Monterrey, A. C., y del Consejo de Participación Ciudadana para el Desarrollo Urbano y Obras Publicas del Estado de Nuevo León.

Ingeniero Civil por la entonces Universidad de Nuevo León, tiene también dos maestrías: una en Administración Pública y otra en

Valuación Inmobiliaria, ambas de la UANL. Catedrático de las facultades de Arquitectura, Ingeniería Civil y Ciencias Políticas y Administración Publica de la misma institución, ha sido también secretario de Obras Públicas del municipio de Monterrey; representante del Ayuntamiento de Monterrey ante la Comisión de Agua Potable y presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Nuevo León, A. C.

Dedicado desde hace 30 años a la promoción cultural en nuestra ciudad, Jorge García Murillo fue profesor y, de 1975 a 1983, director del Departamento de Ciencias de la Comunicación del ITESM. Fue fundador y miembro del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes (CONARTE) y ha sido también director del Museo de Monterrey y del de Historia Mexicana. Actualmente es consultor del Gobierno del Estado y miembro del Comité Organizador del Foro Universal de las Culturas 2007.

Es licenciado en Psicología por la Universidad Labastida. Tiene una Maestría en Psicología Clínica por la Universidad de Lovaina, en Bélgica, y en la misma institución, sin titularse, realizó estudios doctorales en esa especialidad. Ha tomado numerosos cursos y diplomados como “Seminario de Liderazgo Siglo XXI”, “Proceso de toma de decisiones” y el de “Persuasión” los tres en la J.F.K. School de Administración Pública, de la Universidad de Harvard.

VÍCTOR AURELIO ZÚÑIGA GONZÁLEZApasionado sociólogo, cuya producción científica se inscribe en la problemática de la frontera México-Estados Unidos, y de las comunidades mexicanas en los Estados Unidos, Víctor Aurelio Zúñiga es un estudioso también de la migración interna, especialmente la que proviene del campo a la zona metropolitana de Monterrey. Actualmente es profesor en la Universidad de Monterrey. Ha sido profesor en el Colegio de la Frontera Norte, en el ITESM y en las facultades de Economía, Ciencias de la Comunicación, Trabajo Social, Salud

Pública y Filosofía y Letras de la UANL, y en el Colegio de Sonora, y es profesor huésped en la Universidad de Versailles. Es autor de siete libros, de entre los que destacamos: New destinations of Mexican Inmigration in the United States”, publicado en Nueva York, en 2005, por Rusell Sage Foundation, y de 29 capítulos en libros.

JUAN IGNACIO BARRAGÁN VILLARREAL

JORGE GARCÍA MURILLO

NuestraCiudad

del Conocimientoy de la Fraternidad

Pensar y repensar la ciudadJorge García MurilloPágina 3

La ciudad sirve y dignifica al hombreJorge VillegasPágina 5

Ante la mala planeación, sólo nos queda la reacciónCarlos ChavarríaPágina 6

Urbanismo: urgen las ciudades periféricasHumberto Leal GarcíaPágina 11

Monterrey: sus raíces industriales y económicas Mario CeruttiPágina 14

El desarrollo urbano concertado y la gran ciudadJuan Ignacio BarragánPágina 18

Ciudades del Conocimiento:Lo más nuevo con referencia a MonterreyJavier CarrilloPágina 33

Abel Guerra Garza, secretario de Obras Públicas, y experto en urbanismo.

Reunión del Consejode la Coordinación de Ciencia y Tecnología

E40 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

Víctor Alejandro VegaEl Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Nuevo León inauguró en el municipio de general Escobedo, el pasado 18 de agosto, su décimo noveno plantel, once de los cuales son escolarizados y ocho de sistemas de educación a distancia, todos en el nivel preparatoria.

Gracias al esfuerzo de su director, Roberto González Morales, y del personal de administración, la unidad brindará a esta comunidad dos especialidades técnicas: informática y turismo, y hotelería, con una duración de dos años. El plantel ya cuenta con 58 alumnos inscritos.

En la inauguración estuvieron presentes, entre otras personas, el alcalde de Escobedo, Fernando Margáin Santos; el director general del CECyTE, Luis Eugenio Todd; Jorge Cuéllar Montoya, representante de la secretaria de Educación del Estado, Yolanda Blanco García.

CRISIS EN LA EDUCACIÓNDurante su intervención, el director del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado, Luis E. Todd, manifestó que la educación en México se enfrenta a una crisis muy seria, porque está muy centralizada y politizada.

Es el momento-dijo- de centralizar la educación en la estructura municipal, y agregó que en días pasados dialogó con el presidente municipal de Escobedo, a fin encontrar la forma de conseguir un terreno para construir una unidad

más moderna.”. A su vez, el alcalde, Fernando Margáín, habló sobre la reciente inauguración de varias escuelas en su municipio, y del crecimiento ordenado y planeado que en el mismo se ha registrado.

El propio alcalde tuvo a su cargo la inauguración oficial del plantel, el cual impulsará el desarrollo de las actividades educativas en el municipio, y deseó el mejor de los éxitos tanto a los maestros, como a los alumnos de la institución.

Cuenta ya con 19 preparatorias en el Estado

Inicia actividadesel plantel Escobedo del CECyTE

DESCARTESPienso, luego existo

1596 a 1650

E di tor ia l

Durante el arranque de actividades del plantel Escobedo del CECyTE, aparecen, de izquierda a derecha, el director general del organismo, Luis E. Todd; el alcalde, Fernando Margáin; el subdirector, Jorge Cuéllar Montoya, y el director, Roberto González Morales.

La ciudad es un símbolo del fenómeno humano y social, y debe ser el ámbito adecuado para el desarrollo pleno e integral del individuo

y de la sociedad que buscan en el refugio de lo colectivo su bienestar.

La polis, o la ciudad griega, se caracterizó por el cultivo de las artes y de la ciencia; de ese proceso dialéctico entre seres humanos pensantes y sensibles nacieron las filosofías que dieron origen al pensamiento cosmogónico actual; de allí partieron los viejos y nuevos conceptos.

Dentro de ellos, se consideró a la ciudad como un conglomerado de seres humanos que se reúnen en su espíritu gregario instintivo para preservar la seguridad, favorecer los insumos básicos de la supervivencia y agregar un plus de cada uno de nosotros a lo mejor de los demás.

Para lograr lo anterior se requieren conocimientos y desarrollo urbano altamente tecnificado, pero tam-bién concepción humanista y soli-daridad, para encontrarse los unos con los otros en un concierto de apoyo comunitario y de pensar, sí, en el individuo, pero también en la sociedad.

Actualmente, el urbanismo, como ciencia del hombre y del ambiente, está en crisis, porque el dios del mercado ha condicionado las es-tructuras físicas al comercio y a la industria, y la comunicación vive en función de los sectores productivos y del trabajo que caracteriza la época de la competitividad.

Todo esto ha puesto en una jerarquía inferior a otros factores del bienestar, que no necesariamente están ligados con el monetarismo ilustrado, la tecnología o la información a tiempo real, sino que tienen que ver con la salud mental, física y espiritual que

El yo urbano y el nosotroshumanoun individuo y una sociedad deben hacer prevalecer.

Nuestra ciudad ha crecido en forma explosiva, por lo que las calles, antes señoriales y solemnes con sentido de barrio, se han convertido en flujos de angustia y ansiedad hecha vialidad; y las áreas de recreación o culturización han sido desbordadas por grandes construcciones verti-cales, comercios, empresas y una gran contaminación visual; todo esto sobre la base de que la planeación

se hizo en función del interés monetario y no del interés solidario y humanista que debe ser lo ideal.

En esta edición, y con toda libertad, urbanistas y sociólogos opinan sobre nuestra ciudad, icono de desarrollo emprendedor, acervo educativo y motor industrial de México, y la visión de todos ellos es coincidente: necesitamos una gran ciudad, sí, pero para todos, no solamente para unos cuantos.

MI CIUDAD

Cortés Melo planeó bien y a tiempo. Vino la improvisación y todo lo destruyó.

CONSEJO EDITORIALIngeniero Juan Antonio González AréchigaPresidenteLicenciado Omar Cervantes RodríguezDirector de Comunicación Social del Gobierno del EstadoIngeniero Xavier Lozano MartínezM.C. Silvia Patricia Mora CastroDoctor Mario César Salinas CarmonaDoctora Diana Reséndez PérezDoctor Alan Castillo RodríguezIngeniero Jorge Mercado Salas

DIRECTORIO Ingeniero Antonio Zárate NegrónDirector del Programa Ciudad Internacionaldel ConocimientoDoctor Luis Eugenio ToddDirector General

Félix Ramos GamiñoDirector EditorialMaestro Rodrigo SotoSecretario EditorialProfesor Ismael Vidales DelgadoEducaciónLicenciado Juan Roberto ZavalaCiencia en FamiliaDoctor Jorge N. Valero GilCiencias Económicas y SocialesDoctor Juan Lauro AguirreCiencias Básicas y del AmbienteIngeniero Gabriel ToddDesarrollo Urbano y Social Doctor David Gómez AlmaguerCiencias Médicas Contador Público José Cárdenas CavazosCiencias Políticas y/o de Administración Pública

Doctora Liliana Patricia Cerda PérezCiencias de la ComunicaciónDoctor Lothar KrauseCiencia en Nuevo LeónLicenciados Jorge Pedraza yClaudia OrdazLa Ciencia es CulturaDoctor Óscar Salas FraireEducación Física y DeporteDoctor Mario César SalinasLas Universidades y la CienciaVíctor Eduardo Armendáriz Ruiz DiseñadorLicenciado Eduardo Medina GonzálezAdministraciónProfesor Jesús Macías TreviñoCirculación

La revista CONOCIMIENTO es editada por el Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Nuevo León, y abre sus páginas a las instituciones de educación superior para la publicación de artículos y noticias de carácter científico. Teléfonos en la Redacción: 83 46 74 99 y 83 46 73 51 [email protected] Registro solicitado previamente con el nombre de CONOCIMIENTO. Las opiniones expresadas en los artículos son responsabilidad exclusiva de sus autores.

Estimado doctor Todd:

Hemos recibido 12 ejemplares del número 12 de la revista Ciencia, Conocimiento, Tecnología, en donde tuvo a bien publicar la convocatoria del IX Concurso Nacional y I Iberoamericano Leamos la Ciencia para Todos.

Además de agradecerle su interés y cooperación, me permito expresarle mi entusiasmo por su revista.

Considero, en particular, que este número “Arte y Ciencia del Lenguaje”, aborda temas de sumo interés para los estudiosos de los temas ahí tratados y para el conocimiento del público en general. Asimismo, pienso que será de gran utilidad para los estudiantes de semántica y letras en los diferentes centros de estudio.

Atentamente

María del Carmen FaríasGerente de Ciencia, Tecnología,Salud, del Fondo de Cultura Económica

Profesor Jesús Macías TreviñoEncargado de DistribuciónRevista CONOCIMIENTOConsejo de Ciencia y Tecnología Nuevo LeónPresente

Por medio de este conducto reciba un cordial saludo y a la vez informo a usted que la Revista Conocimiento ha tenido una excelente recepción entre el equipo médico y directivo de esta institución, de tal suerte que los ejemplares que nos han hecho el favor de obsequiarnos se agotaron rápidamente entre nuestros grupos de trabajo; por lo que me permito solicitar en la medida de sus posibilidades, autorizar más ejemplares de la siguiente revista:

La Ciencia de la Nutrición Arte y Ciencia del LenguajeLa Ciencia del Sexo.

En la espera de que esta petición se vea favorecida por su visto bueno, me es grato quedar de usted.

ATENTAMENTELic. Silvia Laura Camarillo VázquezDirectora del Centro de Integración Juvenil Monterrey

Cartas a la Dirección

Cuando faltan más de 100 semanas para la realización del Fórum Universal de las Culturas Monterrey 2007, los organizadores del magno evento ya cuentan con el diseño de todo el proceso de planeación. Sin embargo, en esta etapa también están dispuestos a recabar opiniones e iniciativas que se puedan integrar al proyecto. Por esta razón, Gastón Melo Medina, director general del Comité Organizador, dictó una plática sobre el tema a los miembros del Consejo de Participación Ciudadana del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología.

Durante su participación, Melo Medina explicó el plan de trabajo y contenido que se tratará en el evento, que se llevará a cabo en la ciudad, del 16 de septiembre al 16 de diciembre de 2007, y comentó cómo se puede aprovechar la experiencia del Fórum anterior, en Barcelona, para que en Monterrey no se cometan errores, y así alcanzar el éxito, el cual también estará condicionado a la aceptación del evento por parte de todos los ciudadanos, a quienes se refirió como los embajadores del Fórum.

Rumbo al Fórum Universal de las Culturas Monterrey 2007

Gastón Melo Medina (derecha) explica a los consejeros de Ciencia y Tecnología detalles del Forum Monterrey 2007.

“Es un compromiso mayor en el sentido de que, lo que ocurrió en Barcelona con el primer ejercicio del Fórum no fue todo lo virtuoso que se hubiera podido pensar; no lo fue porque es un primer ensayo, porque se trata de posicionar un evento de talla internacional. En la primera ocasión hubo sus tropiezos y sus aciertos, pero se pagó cara la curva de aprendizaje. Afortunadamente, nos lo heredan y en ese conocimiento fincamos una plataforma diferente, singular y específica para generar las ideas que habrán de conformar el Fórum”, señaló.Destacó la importancia del tema del conocimiento en los temas base del Fórum, que son condiciones para la paz, desarrollo sustentable y diversidad cultural, y como temas principales de exposición: América universal, nuevas identidades, el agua y Monterrey, en un total de 69 diálogos y 169 subtemas, que serán un 40 por ciento de continuación de los trabajos de Barcelona 2004; el resto serán nuevos para el Fórum 2007.

EVENTO DE TALLA INTERNACIONAL

Al término de su intervención, Gastón Melo Medina escuchó diversas propuestas de los consejeros; destacaron aquéllas en el sentido de buscar incluir cada vez más a la ciudadanía en el proyecto, por medio de distintos frentes, como impulsar la cultura del voluntariado, aumentar la difusión del mensaje sobre el Fórum.

Al respecto, Juan Antonio González Aréchiga, presidente del Consejo de Participación Ciudadana del COCyTE, dijo que también se debe buscar la motivación de la población en cuanto a su papel en el encuentro de las culturas.Luego de discutir ampliamente el tema del Fórum, los asistentes se avocaron a discutir el trabajo dentro del consejo. De esta primera sesión ordinaria de 2005, surgieron puntos de acuerdo que apuntan a conocer mejor el destino de la dependencia, ya que luego de las adecuaciones legales que dieron lugar a la creación del Instituto de Investigación y Transferencia de Tecnología, en breve, un próximo decreto anunciará el cambio del Consejo de Ciencia y Tecnología a Coordinación, y los miembros del Consejo de Participación Ciudadana buscarán analizar los cambios una vez que terminen las adecuaciones a la ley. Además, se acordó sostener una reunión de directivos para conocer el trabajo del recién creado Instituto, para luego discutir los resultados en el seno de la próxima reunión del Consejo que se proyecta realizar a principios del mes de octubre.

INVOLUCRAR MÁSA LOS CIUDADANOS

Dicta Gastón Melo una plática sobre el Forum Universal de las Culturas Monterrey 2007 a miembrosdel Consejo de Participación Ciudadana del COCyTE

Resumen por Carlos Joloy

Atentamente

1596 a 1650

E di tor ia l

MI CIUDAD

39CONOCIMIENTO, AGOSTO 19, 2005CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 39

dependen las economías urbanas mexicanas del mercado laboral extrafronteras y qué relaciones existen entre los cambios en el mercado laboral urbano y la migración hacia Estados Unidos. El estudio realizado en la zona metropolitana de Monterrey en 1992 se ubica en esta última perspectiva.

PRINCIPALES HALLAZGOSSe ha afirmado y escrito que la recesión de los años 80 en México convirtió a las ciudades grandes y medianas del país en expulsoras de trabajadores a Estados Unidos. El estudio realizado en Monterrey permite matizar esta idea. Es decir, permite mostrar que no todas las vacas son negras a menos de que las miremos de noche. Los datos de esta encuesta nos hablan de que Monterrey parece ser una ciudad que retiene su mano de obra; y no solamente eso, sino que atrae trabajadores internacionales repatriados.

Adicionalmente, se observa que la recesión de la década de los ochenta afectó poco la dimensión del flujo migratorio internacional desde Monterrey. Obsérvese un dato en apoyo de esta afirmación: en Monterrey, seis de cada diez habitantes que alguna vez trabajaron en Estados Unidos, realizaron su último traslado entre 1920 y 1974. Exactamente lo contrario se observa en Guadalajara, en donde precisamente el 60 por ciento de los que han laborado en Estados Unidos migraron entre 1975 y 1982.

Este primer hallazgo está relacionado con el segundo. Tal como Massey y Verduzco lo habían señalado, para Guadalajara y Zamora, respectivamente, la migración interna rural-urbana, la migración internacional de origen rural y urbano están mucho más entrelazadas de lo que parecería a primera vista. Esto significa que la migración, sea interna o internacional, se origina en pequeños poblados o en grandes ciudades; es un fenómeno de redes familiares. Grupos de parentesco que participan del flujomigratorio, se apoyan mutuamente

y crean circuitos económica y afectivamente beneficiosos para todos los miembros.

DESEMPLEO URBANOComo resultado de esta observación, se puede decir que el desempleo urbano en México acciona, en un grupo social de la clase trabajadora, un circuito ya existente, construido desde los pequeños poblados mexicanos desde hace ya 60 años. Las cosas suceden así porque en el seno de una misma unidad de parentesco existen, al mismo tiempo, miembros que viven en Aguililla, Michoacán; en Guadalajara, Jalisco, y en la Bahía de San Francisco, o, por poner otro ejemplo nada extraordinario, unos miembros de la familia están en Cedral, San Luis Potosí, otros en Monterrey y otros más en Houston, Texas.

Todo hace pensar que los trabajadores mexicanos internacionales no hacen nada que no estén haciendo las grandes transnacionales norteamericanas o japonesas. Los criterios de localización cambian y se adaptan a las coyunturas económicas. Y además se adaptan rápidamente, haciendo uso ingenioso de los recursos logísticos y económicos a su alcance.Obsérvese un dato que evidencia la existencia de estos recursos: la tasa doméstica de migración internacional en los hogares en donde ambos cónyuges

tienen un hermano o hermana en Estados Unidos es cinco veces mayor (20 por ciento) a la de los hogares en donde ninguno de los cónyuges tiene ese recurso (4 por ciento).

CIUDAD GUADALUPEUn tercer hallazgo tiene que ver con el hecho de que solamente uno de cada diez jefes de hogar de Ciudad Guadalupe tiene una experiencia laboral en USA. Es decir, nueve de cada diez nunca ha trabajado fuera del país. A esos jefes de familia se les interrogó en torno a sus deseos de trabajar en USA. En este subgrupo de jefes de hogar encontramos un rechazo de 75 por ciento de casos a trabajar o vivir en Estados Unidos. Lo que de alguna manera contradice una creencia estadunidense que dice que si se abrieran de par en par las puertas de la frontera, todos los mexicanos se irían a vivir a Estados Unidos.

Sin embargo, no todo es color de rosa en este análisis de la negativa a trabajar en Estados Unidos por parte de los jefes de hogar de Ciudad Guadalupe. El rechazo a migrar es en función de la edad. Es decir, el porcentaje de negativas aumenta notablemente en los jefes de hogar que superan los 29 años. Para los más jóvenes, la idea de migrar a Estados Unidos parece ser más atractiva.

Cuatro razones o explicaciones del rechazo ofrecen los entrevistados:

* Por un lado, hay un grupo que no tiene una clara conciencia de las ventajas de trabajar en Estados Unidos. Las respuestas típicas son: “aquí hay trabajo igual que allá”; “si aquí me va mal, pues allá, peor”;

* Por otro lado, hay un grupo que define a la sociedad estadunidense como una sociedad particularmente hermética en el sentido de que es una sociedad buena pero para los norteamericanos;

* Un grupo más rechaza la posibilidad de migrar porque ven en Estados Unidos una sociedad especialmente anti-mexicana; es decir, repelente al estilo de vida mexicano;

* Por último, hay un grupo que rechaza la idea de trabajar en Estados Unidos porque detecta rasgos indeseables, reales o imaginarios, en la sociedad norteamericana: uso de drogas, violencia, soledad, materialismo.

metropolitana de Monterrey

Nuestros Autores invitados:

CONOCIMIENTONUESTRA CIUDAD

Pensar y repensar la ciudad..............................3

La ciudad sirve y dignifica al hombre.............5

Ante la mala planeación, sólo nos queda la reacción................................................6

La Metamorfosis arquitectónica de Monterrey........................................................8

Urbanismo: Urgen las ciudades periféricas........................................11

Monterrey, sus raíces industriales y económicas.....................................................14

Monterrey, la polis social................................16

El desarrollo urbano concertado y la gran ciudad..................................................................18

LA CIENCIA ES CULTURA

La Sinfónica de la UANL,alma musical de Monterrey.............................20

Presentan Interludio en el MMM....................21

La ciudad ¿es mía o yo soy de ella?...............30

Ciudades del Conocimiento: lo más nuevo con referencia a Monterrey.............................33

Ciudades metropolitanas. Problemas con soluciones comunes.............36

Migración a EU desde la zona metropolitana de Monterrey......................................................38

Inicia actividades el Plantel CECyTE Escobedo.............................................................40

LaMetamorfosisarquitectónica de Monterrey

CIENCIAS DEL COMPORTAMIENTO HUMANO

Conciencia plena para mejorar la calidad de vida...............................................27

Una ciudad de ensueño....................................28

CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓNEl trabajo, himno regional de nuestro pueblo...................................................................24

Javier CarrilloEs doctor en Psicología de la Ciencia y la Tecnología por el King’s College, de la Universidad de Londres. Es director y fundador del Centro de Sistemas de Conocimiento (CSC) del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey. Trabajó en el desarrollo de la Especialidad en Administración del Conocimiento del Tecnológico de Monterrey y otros programas educativos. Actualmente trabaja como Vicepresidente del Knowledge Management Consortium International, y es miembro de los comités editoriales de las principales revistas técnicas de este campo.

Armando V. FloresNació el 5 de abril de 1941, y es originario de Allende, Nuevo León. Estudió en la Facultad de Arquitectura en la Universidad Autónoma de Nuevo León y en la Universidad Nacional Autónoma de México. Es maestro en Ciencias y doctor en Arquitectura. Desde 1963, ha ejercido su profesión de manera libre diseñando y construyendo diversos edificios.

Abraham NuncioNació en Texcoco, Estado de México, el once de diciembre de 1941. Estudió Derecho en la Universidad de Coahuila; cursó la carrera de Letras Latinoamericanas en la UNAM y la de

Filosofía en la UANL. En la Sorbona, de París, estudió legua francesa. Ha publicado obras como Recetas para Nada y El Grupo Monterrey, ambos en 1982.

Salvatore SabellaNació en Nápoles, el 30 de marzo de 1929. Trabajó como guardia en la Dirección General de Policía en Roma y en el Comisariato de San Pedro, del Vaticano. Desde 1945 reside en la ciudad de Monterrey. En 1977 trabajó temporalmente como coordinador cultural en el Gobierno de Jalisco.

Omar Suro ReyesNació en Monterrey, Nuevo León, el uno de octubre de 1968. Tiene una maestría en Administración Pública por la Universidad Autónoma de Nuevo León. Actualmente trabaja como profesor en la Universidad Regiomontana y en la Escuela de Ciencias de la Educación. En 1995 participó en un estudio sobre Perspectiva y Desarrollo de la Administración Aduanera México-Estados Unidos, que fue publicado por la Universidad de Texas y el Colegio de México.

NUESTRA CIUDAD

Víctor Zúñiga / Universidad de Monterrey

Este artículo pretende dar a conocer los tres hallazgos más importantes que, a nuestro juicio, resultan de una encuesta

sobre emigración internacional que coordinamos en el segundo municipio en importancia demográfica de la zona metropolitana de Monterrey, Ciudad Guadalupe. El levantamiento de los datos se llevó a cabo en 1992 y los análisis se dearrollaron a en 1993 y 1994. A pesar de que ha pasado más de una década, los patrones migratorios descubiertos en ese momento siguen vigentes en nuestra ciudad, al menos en sus aspectos más importantes.

Los resultados de la encuesta fueron dados a conocer en distintas publicaciones especializadas; en ellas se analiza la información obtenida de una muestra de 488 unidades domésticas. Sin embargo, no han sido dados a conocer en ninguna revista de divulgación científica.

La encuesta fue diseñada para dar respuesta a las siguientes preguntas:* ¿Qué dimensiones alcanza el

fenómeno y cuáles son las tendencias a partir de la recesión económica que experimentó nuestro país a partir de 1982?* ¿Qué relaciones se establecen entre los patrones de migración interna del tipo rural-urbano y la emigración internacional en Monterrey?*¿Cuáles son las características de los residentes urbanos que deciden incorporarse al mercado laboral de Estados Unidos?, y* ¿Cuáles son los rasgos distintivos de la migración internacional que se origina en zona metropolitana de Monterrey?

Antes de dar a conocer los principales hallazgos, intentaremos mostrar la importancia del estudio de la migración hacia Estados Unidos desde las grandes y medianas ciudades de México.

INTRODUCCIÓNLa emigración hacia Estados Unidos desde las ciudades grandes y medianas del país ha sido considerada un indicador de cambios importantes en el flujo migratorio internacional. Este flujo, durante décadas, estuvo casi totalmente nutrido por trabajadores adultos del sexo masculino y originarios de pequeños poblados rurales de algunas regiones, principalmente Michoacán, Guanajuato, Jalisco y Zacatecas.

Este cambio fue centro de atención de diversos autores quienes, desde fines de los años setenta, observan el

aumento paulatino de la participación de residentes urbanos en la composición del flujo. Sorprende el hecho de que la ciudad de México se convirtió en fuente expulsora de trabajadores hacia el vecino país del norte.La importancia del fenómeno es reconocida por los especialistas, pero son pocos los estudios sobre el tema. Los datos existentes son escasos y la discusión se reduce a publicaciones relativas a la ciudad de México, Guadalajara, Zamora y Monterrey.

ENFOQUES EN TORNO AL FENÓMENO Se puede afirmar que prevalecen tres tipos de preocupaciones o enfoques en torno a este fenómeno. El primero se interesa en el flujo migratorio global desde México hacia Estados Unidos, sea este documentado o indocumentado, definitivo o estacionario. Los analistas buscan determinar la porción de migrantes que provienen de los centros urbanos; es decir, la participación de las ciudades en el conjunto de la migración internacional. La pregunta central de este enfoque puede sintetizarse así: ¿qué papel juegan los centro urbanos mexicanos en la migración internacional?

Un segundo enfoque intenta observar y explicar el proceso de expulsión de mano de obra desde las ciudades mexicanas hacia Estados Unidos y determinar los condicionantes y la evolución de dicho fenómeno. Este enfoque cen-tra su atención en las características económicas de las poblaciones de origen, siguiendo las vías de análisis que se siguieron en el estudio de los pequeños poblados rurales que habían sido tradicionalmente la fuente más importante de migración durante décadas. El interés se orienta hacia el proceso de expulsión y a los circuitos migratorios de origen urbano.

El tercer enfoque centra su atención en la ciudad. Intenta medir y describir el papel que juega el mercado laboral estadunidense en las estrategias laborales de los trabajadores de las grandes y medianas ciudades mexicanas. Lo que interesa es definir qué tanto

Migración a EU, desde la zona

El caso de Ciudad Guadalupe

38 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 3CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

NUESTRA CIUDAD NUESTRA CIUDAD

TJorge García Murillo/ promotor cultural

y miembro del Comité Organizador del Foro Universal de las Culturas 2007

Tarea de todos, sin duda, es la de participar en un proceso continuo que bien podríamos llamar “pensar y repensar la Ciudad”.

¿Cuál es la ciudad que queremos?, ¿cuál es la vocación –de entre muchas posibles- que anhelamos para nuestra ciudad?, ¿cuáles son los límites de la ciudad?, ¿hasta dónde la ciudad cumple nuestros deseos de vida y desarrollo?... Éstas y muchas otras interrogantes al respecto bien podrían ser las líneas directrices de nuestro pensar y de las conversaciones, análisis, discusiones y debates orientados a clarificar el paradigma que sustente los esfuerzos públicos y privados dirigidos al mejoramiento de Monterrey.

Flâner es el término con el que los franceses describen la acción (ahora en extinción) de recorrer las calles de una ciudad sin un propósito deliberado; simplemente caminar para ver, para disfrutar la ciudad, para regodearse en sus rincones, sus avenidas, sus calles, admirar sus edificios, las viviendas, compenetrarse en el carácter de sus barrios, descubrir la personalidad de sus monumentos, sus parques, sus jardines,

Al arquitecto Jesús Javier Martínez Argaiz

sus fuentes, sus comercios, sus bares, de manera que el “flâneur” es cualquiera que camina su ciudad bajo una óptica de conversación y de descubrimiento, generalmente realizado en grupo pequeño –dos, tres, máximo cuatro-.

MIRADA HUMANAEste recorrido conforma la visión “desde abajo” de una ciudad. Su contraparte es verla únicamente desde la perspectiva del cielo (ahora se hace desde helicópteros). Obviamente la perspectiva no es la misma. Ambas miradas son humanas, ¿cuál lo es más?

Soy de los afortunados que, a fines de la década de los cincuenta y principios de los sesenta, junto con amigos, caminamos toda la ciudad (el Monterrey de esos años) y lo hacíamos sin temor alguno, desde el atardecer al anochecer, con un gozo propio de la edad, pero sobre todo, alimentados con lo que la ciudad nos iba diciendo.

Por supuesto que la misma ciudad despertaba en nosotros al “pequeño Hegel que todos llevamos dentro” pero también al “planificador urbano” que todos creemos ser, sin olvidar al arquitecto proyectista, al sociólogo, al psicólogo social, que de alguna manera todos sentimos que se mueve

Pensar y repensar la ciudad

In memorian

NUESTRA CIUDAD

In memorian

4 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

en nuestro imaginario; años felices aquéllos, en donde se forjó una visión de la ciudad, y el tiempo se ha encargado de confirmar o de derrumbar esas nuestras percepciones y nuestras apuestas.

NUEVAS TENDENCIASLo global (el bosque, la selva) y el árbol, lo universal y lo local, nuevo binomio que debemos enriquecer cuando se habla de ciudades; se trata de las nuevas polaridades en donde se incrustan – entre muchas otras- las tendencias minimalistas en contraparte de las neobarrocas, las presencias de los despachos de arquitectos “galácticos” –vs- la arquitectura desde la ciudadanía.

Hay quienes opinan que una ciudad no cambia porque se erige en ella un Guggenheim. En el lejano oriente cada día hay más y más edificios desmontables que requieren de diseños y materiales que permitan ya no sólo funcionalidad y belleza, sino transportabilidad. Las discusiones sobre lo que importa más: ¿la edificación ó el suelo? pasando por la solución al candente problema de los usos de la tierra y la llamada “microzonificación”, la vocación de los espacios: ¿cuánto es más en materia de espacios para el arte y la cultura?

Monterrey evolucionó rápidamente –como todo en la segunda parte del siglo XX- un poco como lo hicieran en el XIX las grandes ciudades europeas. Ahora vivimos un Monterrey, en donde el auto es condición (sine qua non) para disfrutar de la ciudad; cada día los espacios para caminar, simplemente caminar la ciudad, se han vuelto raros de encontrar, por no decir que el hacerlo es una peligrosa aventura.

TRANSFORMACIÓN DEL ENTORNO URBANOEl entorno citadino se ha transformado vertiginosamente, dejando de lado los conceptos que rigieron cincuenta años atrás, y qué bueno que así es. Ahora enfrentamos nuevos dilemas, nuevos desafíos, nuevos problemas demográficos… la ciudad muta hacia otros horizontes que tienen que ver más con la intrincada red de relaciones con el mundo, que con la fina y delicada urdimbre que sustenta a la ciudad; es decir, con la red de ciudadanos que la habitamos. Ciertamente a un Balzac de nuestros días se le haría más difícil desentrañar la madeja citadina como lo hiciera con París el Balzac que conocemos.

Estamos enfrascados en los esfuerzos de llegar a ser una auténtica Logópolis, a convertirnos en una metrópoli intermedia de las llamadas de “clase mundial”. Me coloco del lado de los convencidos de que tenemos todo para alcanzar esa meta; es cuestión de alinear (que no de alienar) todas las fuerzas hacia esa consecución; señalo simplemente lo que ya parece lugar común en el discurso citadino: no lo lograremos si no participamos todos en la larga cadena que arranca desde antes del conocimiento y que termina con la inclusión del valor agregado del conocimiento en todas nuestras creaciones.

Una nueva Ciudad Internacional del Conocimiento exige ante todo de un nuevo ciudadano, participativo y colaborador en la tarea de contribuir –en el imaginario y el actuar colectivos- con su pensar y su quehacer. Estamos a tiempo.

NUESTRA CIUDAD

paulatino crecimiento, los efectos de la globalización también generan asuntos o problemas específicos y obligan al diseño de instrumentos concretos derivados de su posición estratégica.

PROBLEMÁTICA URBANA“Una característica central del proceso de globalización es que se trata de un mecanismo que opera simultáneamente, tanto de manera incluyente como excluyente. Incluye e incorpora a su lógica lo que produce valor a escala mundial; excluye y margina lo que devalúa y es irrelevante para la lógica del sistema donde estos efectos se hacen visibles e imprimen un sello distintivo a la problemática urbana.”

Ciudades como la nuestra asisten a un proceso dual, donde la polarización y las desigualdades sociales son cada vez más evidentes, y convierten estos espacios en zonas de articulación de distintas demandas sociales provenientes de sectores cada vez más disímiles. Las diferencias son tan evidentes que, por ejemplo en los niveles de empleo e ingreso, sólo unos cuantos están capacitados para beneficiarse del progreso de la economía mundial, en contraste con la extensa población abandonada a las actividades de la economía informal, donde los bajos salarios y la mala calidad de vida son el denominador común.

En efecto, la pobreza extrema y la marginación social, los índices de criminalidad, violencia, actividades informales, inseguridad pública, corrupción, contaminación, mala calidad en los servicios como el transporte público, son consecuencia de un crecimiento desmedido de la metrópoli, así como de la ausencia de una gestión administrativa compartida, obligada por la magnitud y composición de estos problemas.

POLÍTICAS INTEGRADORASEstos asuntos requieren de procesos más democráticos y participativos para su atención. Los gobiernos locales deberán tener una mayor autonomía y respaldo institucional de la entidad y sobre todo la colaboración entre las localidades, que en este caso conforman la metrópoli. La participación de la sociedad en instituciones representativas locales y descentralizadas es clave para promover el ejercicio democrático desde la proximidad. A partir de estas instancias representativas mínimas, se pueden diseñar políticas integradoras que faciliten la gestión metropolitana.

Las acciones públicas suelen tener un ingrediente político y el costo de ello en ocasiones se refleja en la desatención o la falta de mecanismos de coordinación institucionalizados.

Las ciudades metropolitanas deben considerar sus asuntos como conjunto de ciudades que comparten problemas, y que sólo la acción coordinada entre las esferas de gobierno podrán tener un cauce positivo.

Las cuestiones rebasan los aspectos jurídicos y se avocan a negociaciones políticas que permitirán diseñar alternativas viables a problemas cada vez más amplios y complejos.

Los gobiernos de las ciudades metropolitanas deberán responder de una manera óptima a demandas comunes, al margen de la razón política que los respalda, y hacer del conglomerado municipal un entorno menos ajeno a los acuerdos políticos, y más proclives al razonamiento administrativo y social.

37CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

NUESTRA CIUDAD

Jorge Villegas

La polis, la ciudad griega, era algo más que un conglomerado de casas y edificios públicos,

En la polis se forjan ciudadanos y soldados, sucede el diálogo filosófico y en algunos casos, como en la Era de Pericles, se ensayan estructuras de poder y civilización.

La ciudad, por supuesto, no nació con esos objetivos nobles y de altos vuelos. Surgió para defender a un grupo de vecinos de las agresiones externas. Para conectar necesidades y soluciones comunes. Para cumplir la fórmula liberal que sigue vigente en el Siglo 21: una comunidad donde un gobierno hace lo que los vecinos no pueden hacer aisladamente.

SERVICIOS PARA RESPONDER A SUS NECESIDADES

Ya no necesita el jefe de familia empuñar la lanza en defensa de

los suyos. No necesita hornear el pan ni sacrificar animales para su consumo individual. No tiene que barrer la calle ni disponer de los

desechos cotidianos. A su servicio están los rastros, las panaderías, el agua entubada, las plantas de

energía, la policía, el camión recolector de La ciudad

sirve y dignifica

al hombre

basura; todo magnifica la capacidad del ciudadano para satisfacer sus necesidades y las de sus vecinos.

Pero una ciudad que presta servicios públicos, por eficiente que sea, no es satisfactoria para el ciudadano, que tiene necesidades lúdicas, espirituales, de realización personal.

La buena ciudad es la que va más allá, mucho más allá, de la eficiencia en la prestación de sus servicios. Es una ciudad que ofrece al ciudadano oportunidades de hacer política, cultivar las buenas letras, disfrutar los bienes del espíritu.

DESAFÍO A LA INTELIGENCIALa ciudad es un desafío a la inteligencia de sus ciudadanos. Acude a ellos para digitalizar la información, establecer sistemas inteligentes para la recaudación de impuestos. Provee kioskos

electrónicos que conectan a los vecinos con el mundo entero. Presta espacios para su expresión artística.

La cultura, a su vez, se difunde con la misma eficiencia que los servicios. Se modula la oferta cultural según el barrio y los estratos de edades, se inventarian los monumentos y expresiones arquitectónicas dignas de perdurar, se multiplica la utilidad de los espacios públicos: templos, locales sindicales, patios de escuela, palacios y plazas como escenarios de las artes, de la música.

La ciudad actual, la polis rediviva, provee al ciudadano de pan caliente, agua limpia, luz y calles seguras. Y con la oportunidad de ejercitar su inteligencia al servicio del conocimiento, que eleva la calidad de la convivencia.

Baluarte de la Civilización

Omar Suro R, IAP-NL

El crecimiento de los centros urbanos ha traído como consecuencia, en muchos casos, la integración de los mismos en espacios metropolitanos, lo cual a su vez deriva en asuntos que rebasan la competencia técnica

y jurídica de los municipios para resolverlos, los cuales se ven obligados no sólo a compartir los límites geográficos, sino a enfrentar problemas y buscar soluciones comunes.

Al terminar el siglo XX, las grandes ciudades se afirmaron como territorios centrales donde se concentran las principales actividades económicas, sociales, políticas y culturales que caracterizan nuestra época. Monterrey y su área metropolitana son un ejemplo de ello.

PROBLEMAS METROPOLITANOSMás allá de las condiciones geográficas que se comparten en las zonas metropolitanas, existen una serie de fenómenos que dificultan la generación de acciones para solventar los problemas que esta integración genera. Los problemas que hoy en día enfrenta la metrópoli no se circunscriben sólo a su crecimiento natural.Monterrey y la zona metropolitana integran un espacio urbano

con atractivos especiales para quienes desean residir en ella de manera permanente o bien la eligen como estancia temporal para posteriormente emigrar hacia el país vecino, lo que deriva en una amplitud y complejidad en las acciones, políticas y programas para brindar atención a estos nuevos pobladores.

La mayoría de los centros metropolitanos sufren esta absorción natural hacia mejores condiciones de empleo, vivienda, educación, servicios, entre otros, lo que obliga a la vez a mayores y más eficientes sistemas de gestión de servicios, no sólo a partir de una mayor demanda, sino también de una composición social y cultural distinta. Por ejemplo, nuestra entidad y específicamente la zona metropolitana ha registrado, en los últimos años, un incremento significativo de su población indígena, lo que ha obligado a los gobiernos estatal y local al diseño de programas especiales para su atención.

Por otro lado, los procesos de integración mundial suelen tener manifestaciones e impactos importantes en las ciudades. En el caso de la trascendencia de Monterrey desde los puntos de vista financiero, comercial, económico, educativo, etc., demuestra cómo, al mismo tiempo que atiende los problemas generados por la integración de los centros urbanos y su

Ciudades Metropolitanas, problemas con soluciones comunes

CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2 , 2005365CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

NUESTRA CIUDAD

Jorge Villegas

sirve y dignifica

al hombre

Omar Suro R, IAP-NL

niveles altos de productividad, calidad de vida, políticas de DBC y dominio técnico de la gestión de conocimiento.

CUENTAS SOCIALES DE CONOCIMIENTO

Uno de los vectores de desarrollo del movimiento de Gestión del Conocimiento ha sido la necesidad de identificar, valuar y capitalizar los activos de conocimiento (también conocidos como “activos intagibles” o “capital intelectual”). A nivel organizacional, se han generado múltiples modelos, principalmente ejercicios inductivos, para categorizar las dimensiones de capital de conocimiento y convertirlas en indicadores operacionales. También existen ya diversas propuestas de indicadores de CCs. Knowledge Cities Clearinghouse, antes mencionado, rastrea los ejercicios más prominentes y los compila en una lista general de dimensiones e indicadores. Tal compilación proporciona una idea de lo que se ha propuesto hasta la fecha en términos de indicadores de CCs, pero no constituye un sistema comprensivo de indicadores y, mucho menos, un sistema consistente.

Como cualquier sistema formal, un sistema de capitales debe satisfacer dos criterios fundamentales: consistencia y completud. El primero significa que se incluyen todas las categorías significativas; el segundo, que la inclusión de una no implique la exclusión de otra. Estos criterios también significan que —a diferencia de la mayoría de los inventarios existentes de indicadores— las categorías sean homogéneas; es decir, que en su totalidad sean generadas de un conjunto bien definido de dimensiones. En particular, los capitales materiales y financieros deben integrarse al mismo universo de dimensiones naturales que todas las demás categorías de capital. La definición de las cuentas de capital social de conocimiento, su operacionalización en indicadores, su contabilidad en un reporte integral de valor y su visualización en un tablero de control son los aspectos básicos de la construción del Sistema de Capitales para una ciudad.

CIUDADES DE LA ERA DEL CONOCIMIENTO

Las visiones de la ciudad futura son, con frecuencia, las de una megalópolis tecnocrática: gigantescas edificaciones unidas por sistemas de transporte desafiantes de la gravedad. Suelen ser extrapolaciones de la ciudad industrial, su sistema de valores y sus patrones de vida: la multiplicación del hoy. Pero el cambio social a la vuelta del nuevo milenio se ve marcado por vertientes inéditas que hacen prever escenarios muy distintos a los hoy populares. Algunas de estas vertientes, la mayoría de las cuales están ya inexorablemente actuando, son: la dematerialización (disminución progresiva de insumos y desperdicios, como el movimiento europeo de “factor x”); el ambientalismo (la creciente atención al medio ambiente, quizás acelerada por catastrófes ecológicas y climáticas); la recomposición demográfica (la prolongación de la esperanza de

vida, el reajuste de la curva poblacional por edades y los subsecuentes impactos económicos, laborales y socioculturales); la virtualidad (la opción de realizar la mayoría de las funciones cotidianas por mediación digital, con el subsecuente impacto en los patrones de transportación, trabajo y vivienda); el esencialismo (el centrarse en cultivar la experiencia de las comunidades como base de DBC y la sostenibilidad); el salto experiencial (la posibilidad de entrar en una dinámica de aprendizaje individual y social más productiva que la que hasta ahora ha sido humanamente posible); el nivel de conciencia (la posibilidad de la autogestión social a partir del acceso a un plano más elevado de entendimiento). Lo que es muy improbable es que las ciudades sigan una ruta de continuidad lineal del modelo industrial, pues el desenlace previsible de esa ruta es el colapso social, ambiental y económico.

Aplicando los conceptos previos al caso de Monterrey, particularmente con referencia al actual Proyecto de “Ciudad Internacional de Conocimiento”, se desprenden las siguientes conclusiones:

1. La etiqueta de “Ciudad de Conocimiento” se justifica si y sólo si la iniciativa consiste en un ejercicio deliberado y sistemático de desarrollar en forma balanceada la totalidad de elementos de valor que definen y dan viabilidad histórica a la comunidad regiomontana;

2. El punto anterior requiere como herramienta estratégica el mapeo y valuación de todos los elementos de valor –tanto los restringidos a la economía tradicional como los integrales de la economía del conocimiento-, es decir, del Sistema de Capitales o Cuentas de Capital de Monterrey;

3. Para determinar tal Sistema de Capitales, el primero de ellos es la caracterización precisa de la identidad de Monterrey y los principales elementos de la misma: su herencia, diferenciadores, perfil futuro y competencias clave;

4. El calificativo de “internacional” al proyecto compromete un referenciamiento (o benchmarking) con los mejores en clase a nivelmundial en cada rubro del Sistema de Capitales.

5. Una naturaleza más restringida de la iniciativa –por ejemplo como renovación de la planta industrial mediante la reconversión a tecnologías avanzadas- siendo por sí misma plausible, puede ser adecuadamente descrita en términos que antecedieron al concepto de Ciudad de Conocimiento y no ameritaría por tanto la referencia a este nuevo campo.

1 Este artículo es una versión abreviada de: Capital Cities: A Taxonomy of Capital Accounts for Knowledge Cities. En F. J. Carrillo (ed).: Journal of Knowledge Management, Special Issue on Knowledge-based Development II: Knowledge Cities, Vol. 8, No. 5, 2004, pp. 28-46.

CIUDAD INTERNACIONAL

DEL CONOCIMIENTO

35CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 20056 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

Carlos Chavarría Garza/ Empresario. Grupo Transregio

Resulta claro que estamos enfrentados a un serio problema. El congestionamiento de las vías principales es ya una constante cotidiana y todos sus efectos negativos también. El área metropolitana

de Monterrey ha entrado en la parte de la asintótica de su desarrollo, que hace diez años le llamábamos largo plazo.

Hace diez años todavía se podía hacer algo para evitarlo, pero ahora hay que enfrentar el problema de cómo darle viabilidad a la actividad urbana, tanto económica como social. A partir de ahora tendremos que ser reactivos; lastima, pero así es.

Hace diez años pronosticamos una ciudad densificada de acuerdo con la capacidad instalada de la infraestructura. Esperábamos también que los usos de suelo se diversificaran siempre a partir de la asociación equilibrada con los usos habitacionales, evitando con ello desperdicios en traslados de personas y bienes.

TENDENCIAS DEL DESARROLLOSupusimos, equivocadamente, que el mercado de las tierras urbanas respetaría los planes estatales de expansión o al menos que el ejecutivo aplicaría el orden para asegurar que

se cumplieran. Pero sin los instrumentos de intervención adecuados, difícilmente el estado podrá cambiar en algo las tendencias del desarrollo.

Con un conglomerado que ya no cumplió o cumplirá con el sentido común, es necesario cambiar nuestra visión de ciudad, porque ya no se dará la anterior, contenida en los planes de desarrollo.

BAJA DENSIDAD HABITACIONALAhora tendremos una ciudad de baja densidad habitacional y de empleos, con un desorden en usos de suelo, propiciado por el libre y anárquico mercado, con un gobierno sin instrumentos efectivos y reales de intervención económica o jurídica, con presiones externas generadas por el “atractivo de inversión” de la quimera que es el área metropolitana de Monterrey, y sin el talento y voluntad real en el cuerpo social que formamos para revertir la tendencia. Ante este bastante realista escenario, hay que poner los pies en la tierra.

Ya se decidió; mediante su diseño y el TLC, que la ciudad se moverá en base al auto privado; y pobre de aquél que no tenga alguno; pues los medios colectivos serán sólo para los

Ante la mala planeación, sólo nos queda la reacción

atractividad, resulta obvio que la estrategia de desarrollo de una ciudad se basa en la identificación, medición y desarrollo de los componentes de su oferta de valor y en organizarla como un arreglo propio y atractivo. La Ciudad de Holón, en Israel, se ha propuesto ser “La Ciudad de los Niños”, y todo su desarrollo urbano está orientado a potenciar el bienestar de las nuevas generaciones. La Ciudad de Córdoba, España, ha fincado su identidad como “Ciudad de los Sentidos”, y se esmera en ofrecer a sus habitantes y su turismo, un arreglo único de experiencias visuales, gastronómicas, y culturales que la hagan irresistible.

Las ciudades afiliadas al Knowledge Cities Observatory (www.kcobservatory.net) están en un proceso de desarrollo de su identidad y de construcción de sus sistemas de capitales. Éstos constituyen el “mapa genético” de una ciudad: las cuentas que permiten identificar cada dimensión de valor significativa, valuarla

y desarrollarla sistemáticamente y en forma balanceada. El Nuevo Club de Paris es una reciente alternativa al Club de Roma, enfocada en el Desarrollo Basado en Conocimiento (y, por tanto, en la valuación y desarrollo estratégico de los capitales intelectuales) de países, regiones y ciudades.

LA DEFINICIÓN DE KCDesde la óptica del Desarrollo Basado en Conocimiento de III Generación, una CC es una región urbana de rango relativamente mayor en la que la ciudadanía emprende una iniciativa deliberada y sistemática para fundar su desarrollo futuro en la identificación y gestión balanceada y sostenible de su sistema de capitales. Para explicarla por partes: “una región urbana de rango relativamente mayor” (dadas las diversas acepciones del término ciudad en sí, asumimos esta perspectiva urbanista), “en la que la ciudadanía emprende una iniciativa deliberada y sistemática” (el agente sólo puede ser

la suma de las partes interesadas —seguramente articuladas por la función facilitadora del gobierno— y lo hace con disciplina y continuidad); “para fundar su desarrollo futuro” (la capacidad de negociar conscientemente con la historia su identidad, es otro requisito fundamental); “en la identificación y gestión balanceada y sostenible de su sistema de capitales” (mediante la selección, contabilidad y balance de su sistema de capitales y el uso del mismo como base de su desarrollo estratégico).

Para una iniciativa más circunscrita no hace falta hablar de CCs. Los conceptos de tecnopolo, red tecno-industrial o cluster de innovación son suficientemente amplios y ampliamente utilizados desde hace años. Resulta obvio que la tecnología más crítica en la evolución hacia una CC es la tecnología de gestión pública y privada del conocimiento. No en vano las ciudades y regiones a la vanguardia del DBC muestran una correlación entre

34 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 77CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

que de plano no tengan posibilidad de acceso a algún carrito; los medios en común serán sólo para los marginados.

El metro y el sistema de ruta fija de autobuses, así como las troncales de autobús están condenados al fracaso y a la crisis, pues estos sistemas resultan útiles en ciudades con densidades habitacionales y de empleo superiores a 180 habitantes por hectárea y 600 empleos por hectárea. Nosotros estamos lejos. A menos, claro está, que empiecen a aplicarse restricciones a la operación del auto privado, lo cual está bastante difícil, debido a la famosa libertad de tránsito.

TRENES DE CERCANÍASEn una ciudad con patrones de crecimiento como la nuestra, más rentable socialmente seria empezar el sistema de trenes de cercanías, para conectar la periferia a la red de transporte de rueda de hule, en lugar de gastar 300 ó 400 millones de dólares en un metro que será usado quizás por 40 mil usuarios más por día.

La prioridad de ahora en adelante será recuperar derechos de vía para ampliar y construir nuevas, pero ¡nuevas! vialidades que formen una red más versátil en formación de rutas origen-destino.

También, cambiar los parámetros de autorización para nuevos desarrollos, creando el cobro de derechos por impacto vial, allegando así recursos de inversión para calles y avenidas.

Apoyar e incentivar los sistemas de transporte en común, llamados de puerta a puerta, así como los que se conocen como de respuesta a la demanda, porque van a proliferar. En cuanto las empresas de taxi serias se den cuenta de esto, encontrarán una veta de oro.

NUEVAS ZONAS DE EXPLOTACIÓN URBANATambién será fundamental un mecanismo de intervención en el mercado de las tierras y, además, gratuito: la información.

Decirle a la gente los costos de interconexión y traslado (tiempo y costo) por distintos medios para cada nueva zona en explotación de la ciudad, para crear conciencia acerca del costo de usar una vivienda y no sólo dejarse guiar por lo barato para adquirirla.

Cada vez es más lejos, porque en breña es más barato y el precio de la casa es más accesible, pero el transporte no. Por lo tanto, el transporte debería considerarse desde ahora como infraestructura

maestra para que se refleje en el precio de las tierras y crear un nuevo equilibrio en el mercado, tal y como es el caso del agua o la electricidad.

INFRAESTRUCTURA PÚBLICAPero a lo mejor me estoy preocupando de más; ninguna ciudad se paraliza por el tráfico. Tampoco se puede “vender” con este argumento de catástrofe cualquier proyecto. Claro que las ciudades se pueden convertir en cloacas, como el centro de Monterrey, donde históricamente se encuentra la mejor y mayor infraestructura pública.Aunque también se pueden convertir en un ejemplo, como es el caso de Barcelona y Dusseldorf; pero nos falta caer aún más, para que el ente colectivo y su cabeza se dé cuenta de lo mal que estamos.

DEL CONOCIMIENTO

ALTERNANCIA RELIGIOSA-CIVIL-MILITAR

La nueva realidad política del país y la región con la Independencia de México más las experiencias bélicas que se viven permanentemente de 1810 a 1867, por la Independencia, la Guerra de Texas, la Invasión Norteamericana, la Guerra de Tres Años y la Intervención Francesa conllevan a un perfil diferente de ciudad que se constata en el Plano de la Ciudad que elabora Isidoro Epstein en 1865, en que el trasfondo religioso alterna con lo civil y lo militar. Además de la Iglesia Parroquial y las Capillas del Roble, la Purísima, San José y de los Dulces Nombres, quedan registrados el Palacio de Gobierno Estatal y el Municipal, el Hospital Civil y el Colegio

arquitectónica de MonterreyLa metamorfosis

Civil del Estado que sustituyen a los religiosos, y un Nuevo Repueblo al sur del casco urbano. La presencia militar se evidencia en la Ciudadela, reutilizando la inconclusa catedral nueva, los Cuarteles y la Maestranza.

PERFIL INDUSTRIAL Y COMERCIAL

Nuevas circunstancias históricas determinan el perfil industrial y comercial que se aprecia en el Plano de la Ciudad, de G. Castañeda, de 1909. La cercanía de los puertos marítimos de Matamoros y de Soto la Marina, así como de la frontera con Norteamérica, la red ferroviaria, la política de incentivo fiscal del gobierno, los capitales disponibles y el espíritu empresarial, entre otras, serán garantes y coadyuvantes para perfilarla como zona de desarrollo y bienestar socio-económico.

Ya para 1882, la ciudad, cuyo perímetro se limitaba tan sólo por el río Santa Catarina y las calles de Aramberri y Porfirio Díaz, disfrutaba de servicios tales como ferrocarriles, tranvías, teléfono, telégrafo, electricidad y alumbrado público. La importancia de la ciudad aumenta como tal en 1890, por la decisión papal de elevar la silla Obispal a silla Arzobispal. La política porfirista de “orden y progreso” ministrada en la región por el general Bernardo Reyes incidirá en la estética urbana, promoviendo la realización de obras trascendentes.

ATENCIÓN A LOS VIAJEROSLas Estaciones de Ferrocarril extienden su eficiencia en la atención al viajero con la presencia de hoteles, restaurantes y cantinas; para la recuperación física de personas cansadas por el trabajo o la fatiga, se ofrecen baños y albercas públicas con aguas ordinarias, termales y medicinales; para satisfacer el esparcimiento, el ocio y la diversión como compensación al trabajo y producción aparecerán teatros, salones de fiestas, plazas de toros, casinos y clubes sociales.

Basílica de la Purisima.

Parque Fundidora.

NUESTRA CIUDAD

Javier CarrilloCentro de Sistemas

de Conocimiento, ITESM

UN CAMPO ESPECIALIZADOEl campo del estudio y desarrollo de Ciudades de Conocimiento, CCs, si bien reciente, es una disciplina especializada. Desde la perspectiva sociológica de la institucionalización de las disciplinas científicas, el joven campo de las CCs exhibe las características requeridas: publicaciones especializadas, foros presenciales y virtuales, asociaciones profesionales, centros de investigación y desarrollo, repositorios sustanciales.

La producción intelectual especializada crece vertiginosamente. Knowledge Cities Clearinghouse (www.knowledgecities.com) recoge y actualiza continuamente el conocimiento de dominio público sobre CCs alrededor de nueve categorías: glosarios, iniciativas de ciudades y regiones, asociaciones y organismos internacionales, dimensiones de valor, rankings, ediciones especiales, bibliografía y directorio de páginas de Internet. El campo de las CCs es una ramificación del Desarrollo Basado en Conocimiento o DBC, que ha resultado de la confluencia de la Teoría del Desarrollo Económico y la Gestión del Conocimiento. La disciplina de las CCs es a su vez, una confluencia de los Estudios y la Planeación Urbana (EPU) y la Gestión del Conocimiento. El campo de las CCs es entonces aquella parte del DBC consagrada a la comprensión, diseño y planeación de ciudades cuyo desarrollo está deliberadamente basado en el conocimiento.

CIUDADES: SISTEMAS EVOLUTIVOS DE VALOR

Para captar el espacio de posibilidades de desarrollo para las ciudades más allá de la imagen que hemos heredado y que la mayoría de las visiones de futuro tienden a proyectar inercialmente, conviene rescatar una perspectiva histórica del surgimiento y evolución de los asentamientos humanos. Resulta sorprendente percatarnos de que tres cuartas partes de la historia humana acontecieron antes de la fundación de las primeras ciudades; de que la ciudad industrial que actualmente conocemos cobró forma hace sólo 200 años (0.5 % de la existencia humana) y de que no

Ciudades del Conocimiento: lo más nuevo, con referencia a Monterrey

ha sido sino hasta la vuelta del siglo XXI cuando más de la mitad de la población del planeta vive ya en centros urbanos.

Esto significa que la experiencia urbana es un fenómeno relativamente muy reciente, que la gran mayoría de seres humanos que han existido han vivido otro tipo de experiencia y que el modelo de ciudad industrial que hemos conocido es apenas un parpadeo en la escala de la historia humana. Ciertamente, si la experiencia humana colectiva ha sido

en gran medida diferente de la que hoy vivimos la mayoría de las personas, es concebible que pueda ser muy distinta de las posibilidades urbanas que hemos explorado. La Sociedad del Conocimiento es en sí misma una redefinición de lo colectivamente significativo y lo humanamente posible. Las CCs constituyen un reto a los límites de la imaginación y la innovación humanas.

Un potenciador de las opciones de diseño para las ciudades deriva del entendimiento de los centros urbanos como sistemas de valor; comunidades humanas configuradas en torno a un arreglo de valor que las congrega y las mantiene unidas. El desarrollo de las ciudades no tiene que restringirse al mejor acomodo de la población

actual a la infraestructura heredada, sino que puede orientarse al diseño de la experiencia urbana: el conjunto de vivencias personales, familiares, sociales, laborales, entre otras, que hacen preferible fincar residencia en una ciudad.

Las posibilidades de desarrollo urbano están cada vez menos circunscritas a la construcción de obra civil y se abren cada vez más al diseño y creación de ambientes y circunstancias que

posibiliten experiencias significativas y productivas. Richard Florida, el afamado creador del concepto de clase creativa, ha puesto de relieve con numerosos estudios empíricos cómo la proporción de ciertos perfiles, tanto de profesionistas como de otros roles claves dentro de las comunidades, hacen la diferencia en el desempeño competitivo. Concluye Florida que la atractividad de la clase creativa es la característica singular más importante en el futuro desarrollo de una ciudad o nación.

LAS CIUDADES COMO SISTEMA DE CAPITALES

Si visualizamos los sistemas de valores como menúes con mayor o menor

NUESTRA CIUDAD

MArmando V. Flores

Salazar UANLMonterrey, como ciudad, comienza a ex-perimentar cambios notorios en su morfología y función a partir del establecimiento del obispado en 1777. Los primeros obispos tendrán en común la preocupación de transformar la ciudad agregando el equipamiento urbano necesario para dignificarla como sede del novel obispado.

Su evidencia se constata en el plano de la ciudad que levanta Juan Crouset en 1798, en el que se registra un nuevo trazo urbano al norte del casco fundacional, una Iglesia Parroquial en funciones de catedral y la Catedral Nueva en construcción, un Hospital Provisional y el de Nuestra Señora del Rosario en construcción, así como el Palacio de El Obispado y el Episcopal ya concluidos, y conventos, escuelas, calles, presas y puentes en construcción.

“Nunca logró ni siquiera ver tras los muros; conservaba en su mente algunas imágenes que, al querer concretarlas, se desvanecían como la niebla al roce luminoso del sol. Su mente era como desierto; sólo sus sueños le permitían dibujar siluetas lejanas de árboles y gente.

“El hombre estaba fuera de su ciudad; a veces le parecía escuchar rumores de fiesta. La verdad es que no estaba seguro de escuchar o imaginar sonidos, rumores de vida; eso es lo que llevaba en su mente: vestigios del tiempo en que había habitado en la ciudad.

LA PUERTA PROMETIDA“Todos los días intentaba e inventaba formas diversas de entrar en la ciudad. Y entonces el hombre rodeaba cabizbajo y meditabundo las largas murallas, tanteando, en busca de la puerta que, oscuramente, podría estarle prometida.

“Muy en su interior el hombre sabía que estaba predestinado a vivir en la ciudad. Estar fuera le parecía una bufonada, una situación accidental, algo intolerable para quien se decía haber “fundado” la ciudad.

“Un día, -se decía cada día- en el día exacto, no antes ni después, entraré en la ciudad. Ese día predestinado traería una explicación al por qué vivía fuera de su ciudad. Ese día sería el final, un final, un simple final.

LAS CIUDADES NO SON NUESTRAS“El hombre no sabía que las ciudades no son nuestras, sino que nosotros somos de las ciudades, y si quería entrar en ella debía luchar. Eso es lo que el hombre no sabía. No sabía que, antes de la batalla por la conquista de la ciudad, tendría que trabar otra batalla y vencer en ella. Y que en esta primera lucha tendría que luchar consigo mismo. Nada de esto sabía el hombre.

“Pero, un día, el día exacto, ni antes ni después, llegó el momento de iniciar la batalla. Como en los poemas homéricos, también los dioses entraron en ella. Combatieron a favor y en contra, y algunas veces unos contra otros.

LUCHA CON LOS DIOSES“El hombre que luchaba por vivir dentro de los muros de la ciudad, cruzó espada y palabras con los dioses que no estaban de su lado. Hirió y fue herido. Y la lucha duró largos y largos días, semanas, meses, sin tregua ni reposo; unas veces junto a las murallas, otras tan lejos de ellas que ni la ciudad veía, ni sabía ya bien qué premio encontraría al final del combate. Fue otra forma de desesperación.

“Hasta que, un día, el campo de batalla quedó libre y despejado como un estuario donde las aguas descansan. Sangrando, el hombre y el dios que había permanecido junto a él miraron de frente aquéllas puertas abiertas de par en par. Había un gran silencio en la ciudad. Amedrentado aún, el hombre avanzó. A su lado, el dios. Entraron… y sólo después de haber entrado quedó habitada la ciudad. Érase una vez un hombre que vivía fuera de los muros de la ciudad. Y la ciudad era él mismo”.

NUESTRA CIUDAD

Las avenidas Unión y Progreso –hoy Calzada Madero y avenida Pino Suárez- y el Palacio Estatal de Gobierno son parte de ello. Como testigos del desarrollo alcanzado se yerguen altivas la Cervecería Cuauhtémoc y la Fundidora. El número de edificios importantes rebasa el centenar y entre ellos han aparecido nuevas tipologías funcionales generadas como satisfactores de nuevas clases

sociales, tales como comerciantes, industriales, empresarios, diplomáticos, profesionistas, obreros y artesanos, que dan vida nueva a la ciudad.

Las Escuelas y Hospitales cambiaron de escala y sentido para adecuarse a la nueva realidad social, un tanto utópica, del bienestar comunitario, ganando importancia las escuelas normales y profesionales; el comercio se equipó con almacenes mercantiles, ferias de productos, pasajes comerciales y bancos mercantiles que promovían el flujo de capitales interregionales.

Las relaciones internacionales y la estancia de extranjeros se manejan desde los consulados; la seguridad pública para garantía del orden y la tranquilidad se equipa con penitenciaría, Juzgados y Comandancia de Policía, y la pujante empresa industrial genera, a escala monumental, edificios adecuados para la producción en línea de objetos comerciables, así como el concepto de colonia habitacional, otorgando casas de obreros a los empleados de base. De las experiencias vividas por las revoluciones Antirreeleccionista y Constitucionalista, a partir de 1910, surgirá una nueva conciencia político-social a favor de los obreros y los campesinos, que queda amparada en la Constitución de 1917 a través del derecho al trabajo, a la educación, a la vivienda, a la salud, y al ocio; derechos que se traducirán arquitectónicamente en extensas edificaciones fabriles y laborales, en escuelas elementales, normales, técnicas y universitarias; en amplios conjuntos habitacionales tanto para la clase obrera, como residenciales; en hospitales, clínicas, maternidades y puestos de socorro y en monumentales teatros, salas de cine, arenas y centros deportivos. Tal paisaje urbano dibuja un

nuevo perfil de la ciudad adjetivada de industrial que se registra en el Plano de la Ciudad de 1946 por las 650 industrias censadas en tal fecha.

FIN DE LOS GOBIERNOS MILITARESCerrando el capítulo de los gobiernos militares tanto en lo nacional como en lo estatal –Manuel Ávila Camacho, Bonifacio Salinas Leal- e iniciándose el

de los civiles –Miguel Alemán Valdés, Arturo B. De la Garza- en la década de los años cuarentas, y a partir de 1950, con la magna obra de la canalización del río Santa Catarina, la construcción de los puentes prolongando las avenidas Félix U. Gómez, Ignacio Zaragoza, José María Pino Suárez, José Eleuterio González, y la Ley de Condominio que propició la

CERVECERÍA Y FUNDIDORA

Por Carlos JoloyJorge Longoria Treviño, secretario de Desarrollo Urbano y Ecología, del municipio de Monterrey, se hizo acreedor al Premio Nuevo León a la Calidad, por la labor desempeñada en la actual administración del alcalde Ricardo Canavati Tafich, quien le ha brindado todo su apoyo.

Tal reconocimiento lo recibió el funcionario municipal durante la ceremonia celebrada el pasado 24 de agosto, en que se hizo entrega de los premios, con motivo de la XVI edición de la presea mencionada, evento que encabezó el gobernador Natividad González Parás, en las instalaciones del Club Industrial. En la ceremonia se reconoció a 12 participantes entre empresas e instituciones públicas y privadas, y destacó el otorgado a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología de Monterrey.

El alcalde de Monterrey impulsa a los que saben

Recibe Longoria reconocimiento

Parque Fundidora.

NUESTRA CIUDAD

MArmando V. Flores

NUESTRA CIUDAD

10 SEPTIEMBRE 2, 2005

NUESTRA CIUDADH

origen: “Soy mexicano, soy de Jalisco, soy de San Luis, soy de Linares, soy de Bustamante o soy de Monterrey?

La respuesta es simple, porque somos de la ciudad. Ella nos da identidad y sentido de pertenencia,

aunque algunos tienen una visión inversa: piensan que la ciudad es de ellos, y por eso pueden orinarse en sus calles, llenarlas de papeles, de humos, de desprestigio, de violencia, de inmundicia moral y de mil cosas más, porque es de ellos.

Aunque, teóricamente, la ciudad se caracteriza por su capacidad para orquestar una diversidad de actividades científicas, tecnológicas, culturales... alguna de ellas llega a dominarla. Nuestra ciudad, por ejemplo, es netamente industrial, como Fenicia fue comercial y navegante. Sin embargo, el puro aumento de habitantes debiera ser garantía de aumento de funciones y especializaciones que suman y suman. Pero, ¿por qué no ocurre así? ¿Por qué algunas ciudades están llamadas a ser cultas como la legendaria Atenas o bárbaras como muchas otras?

COMPROMISO DE LOS HABITANTES

Porque mientras mayor sea la cantidad de productos culturales y símbolos acu-mulados, más necesaria e importante es la función ciudadana de organizarlos y hacer que sigan disponibles para ser utilizados por más personas y por más tiempo. Es decir, la clave está en el compromiso de cada uno de sus habitantes de contribuir en la organización y correcta distribución de los bienes culturales; pero en tanto cada ciudadano no se apropie de las producciones culturales de su ciudad y de otras ciudades, no podrá transmitir nada.

La existencia de la ciudad estriba en la eliminación voluntaria de sus excreciones de todo tipo.

Así como una ciudad aspira a eliminar la basura, los excrementos, los escombros y los muertos, de la misma manera debiera eliminar el crimen, la deslealtad, la violencia, el robo, y más. Pero este barrido tendría que comenzar en el interior mismo de la persona y de

su casa. Sólo así podría estar en disposición de ir más allá de sus límites naturales personales y familiares.

SENTIDO DE PERTENENCIACuando el hombre no ha alcanzado la estatura de “ciudadano”, cuando ha permanecido en estado larvario de ente individual, egoísta y excluyente, entonces, imperceptiblemente, va abandonando su ciudad, hasta quedarse afuera, sin identidad ni sentido de pertenencia.

Entonces, si alguna vez llega el hombre a tener conciencia de lo que le está pasando, tendrá que enfrentar una extraña pesadilla, una especie de cuento de Saramago, más o menos al tenor del siguiente relato:

“Érase una vez un hombre que vivía fuera de los muros de la ciudad. Si había cometido algún crimen, si pagaba culpas de antepasados, o si sólo por indiferencia o por vergüenza se había retirado, eso es algo que no se sabe. Tal vez hubiera un poco de todo, pues de lo feo y de lo hermoso, de la verdad y de la mentira, de lo que se confiesa y de lo que se esconde, construimos todos nuestra azarosa existencia.

VIDA EXTRAMUROS“Vivía el hombre fuera de los muros de la ciudad. Digamos que estaba desterrado, pero no sabía por qué o por quién, no recordaba cuándo ni cómo inició ese estado de indefinición y suspenso.

“Sin embargo, vivía preocu-pado por trasponer los muros de la ciudad. Intentó algunas veces subir por las salientes y las oquedades, tumbar las puertas, trepar en escaleras, pero la verdad es que nunca pudo entrar en la ciudad.

y de ella?

verticalización arquitectónica con obras como los condominios de oficinas Acero y Monterrey y la unidad habitacional Condominios Constitución, la ciudad de Monterrey inicia una nueva fase de su imagen y desarrollo: ciudad de negocios.

En la década de los años setenta, la ciudad confirma su categoría de metropolitana tanto por la conurbación de siete municipios vecinos como por ofrecer habitación al 80 por ciento de los habitantes del Estado. El modelo político que la determina entra en crisis por los efectos de la Guerra Sucia que se abre con los inmolados de Tlatelolco y el Jueves de Corpus y cuya inconformidad social se prolonga por el resto de la centuria; el Ejército Zapatista de Liberación Nacional irrumpe en los años noventas como una más de tales manifestaciones.

CENTROS UNIVERSITARIOS, HOSPITALARIOS

Y ADMINISTRATIVOSEn este tiempo se formaliza el Movimiento Urbano Popular, de ideología marxista, que crea el frente de Tierra y Libertad para la reivindicación del ciudadano, promoviendo el autogobierno, la invasión de terrenos ociosos y la autoconstrucción de objetos arquitectónicos. La participación activa de nuevos grupos sociales incide en la configuración urbana. Paralelamente la ciudad se equipa con nuevos centros universitarios, hospitalarios, administrativos, comerciales y asistenciales que la prestigian en una nueva modalidad: ciudad de servicios.

A partir del nuevo milenio, la concentración del capital intelectual de alto nivel al servicio de los centros de enseñanza superior, de los institutos de investigación y de los centros de producción científica y tecnológica generados desde la ciudad de servicios conllevan a la conformación de la ciudad del conocimiento, proyecto que unifica, asocia y clarifica el siguiente estadio de distinción urbana. Como todos los cambios anteriores, producto de sus circunstancias históricas, este nuevo tendrá una identidad urbano arquitectónica que distinguirá dicha personalidad y aunque imperceptible ya se está construyendo.

NUESTRA CIUDAD

Ismael Vidales Delgado

Aunque el o-rigen de las ciudades co-mo forma de asentamiento humano data

de los principios mismos de la civilización, durante mucho tiempo ha escapado al escrutinio académico. La ciudad ha estado desde siempre, soportando a sus habitantes y a sus urbanistas. Morfológicamente, algunos de los cambios en su estructura corresponden a los diferentes estadios de cualquier ciclo de vida de un organismo normal.

La ciudad es un ente vivo, una colección de formas arquitectónicas en el espacio y un tejido de asociaciones, corporaciones, instituciones que ocupan esta estructura colectiva y han interactuado con ella a lo largo del tiempo. Por eso la ciudad no puede definirse bajo la óptica puramente de trazos ni por la suma matemática por encima de los dos mil 500 habitantes. La ciudad se define más por sus dimensiones cualitativas que por sus datos cuantitativos.

JUNGLAS DE ASFALTOLa historia nos ha dado excelentes ejemplos de comunidades de menos de dos mil 500 personas que funcionan orgánicamente como ciudades, y de acumulaciones humanas superiores a esta cantidad que no lo hacen; pero la modernidad nos muestra brutalmente la antítesis de una ciudad en las llamadas megalópolis en las que se ha perdido toda noción de convivencia humana, y la mejor definición que se puede hacer de ellas es “jungla de asfalto y de cemento”.

¿es mía o yo so

En ellas no se conocen ni los que viven bajo el mismo techo, y las personas mueren en la vía pública reduciendo su vida entera a la condición de objetos, que pueden ser pisados o pateados, y en el mejor de los casos, retirados como algo que estorba.

La función de la ciudad como acumuladora y transmisora de cultura está planteada desde tiempos antiguos por Aristóteles en su Política. Desafortunadamente, esa descripción aristotélica es teoría, aspiración, esperanza. Igual que las ciudades pensadas por Campanella (La Ciudad de Dios), Santo Tomás Moro (Utopía) o B. F. Skinner (Walden Dos).

CIUDAD Y CIUDADANOSLas explicaciones simplistas contenidas en los libros de primaria sobre el origen de las ciudades, que hablan de la natural expansión de habitantes por nuevos asentamientos o por el cruce de rutas comerciales, son insuficientes para la reflexión adulta (más rara que el sentido común, cuya infrecuencia de uso lo ha convertido en el menos común de los sentidos) sobre asuntos más trascendentes asociados al buen concepto de ciudad y ciudadanos, como: la observa-ción astronómica sistemática, el desarrollo de la escritura y la aritmética, la preservación del arte en pinturas, poemas y monumentos, la división y especialización del trabajo, entre otros.

Esto, lo cultural-humano-cultural es lo que da origen, desarrollo y destino a las ciudades; no lo son los trazos desafiantes, ni la depredación de laderas, ni la polución, ni la depredación de la flora y la fauna, ni la división clasista, ni la pérdida del tiempo-salud-vida en la ordeña de la

noche y del sexo.

EL ORGULLO DEL ORIGEN¿Nos hemos preguntado alguna vez sobre la trascendencia del por qué Jesús-hombre haya sido nombrado “Jesús de Nazareth” y el por qué don

Alfonso Reyes haya decidido firmarse como “Alfonso de Monterrey” y el por qué nosotros -simples mortales- luzcamos con especial orgullo, como una escarapela en el sombrero, nuestro

Humberto Leal Garcia, M. C., presidente de la Sociedad

de Urbanismo

Antes de tratar de definir lo más ampliamente posible lo que es la ciudad y el urbanismo, reflexionemos que estamos viviendo una

época de cambios profundos, y que aunque éstos siempre han existido, en este siglo XXI se están acentuando en rapidez y magnitud.

Debemos considerar que los elementos que conforman tanto a la sociedad urbana como a la rural, se han transformado a la velocidad que nos imponen la tecnología, la economía, el conocimiento, así como el desarrollo de innumerables factores y componentes culturales.

DESAJUSTES URBANÍSTICOSDesde hace muchos años, la Sociedad de Urbanismo ha estado haciendo sus mejores esfuerzos para investigar, analizar, estudiar el creciente desajuste urbanístico de las grandes metrópolis, ciudades y barrios.

Estos estudios los hemos realizado

Urbanismo: Urgen las ciudades periféricas

con un enfoque de política regional, con proyectos de desconcentración industrial, proponiendo estímulos fiscales, participando en consultas públicas de leyes, planes y reglamentos para tratar de impulsar nuevos polos de desarrollo.

DECISIONES COLEGIADASPor lo anterior, como integrantes de esta Sociedad de Urbanismo, debemos ser capaces de tomar las mejores decisiones

colegiadas en un ámbito de humanismo. El estudio de un barrio, una ciudad, una metrópoli, es tan amplio y en ocasiones tan difuso; que le es imposible a un solo hombre, desarrollarlo, ya que la gran cantidad de conocimientos que se tendrían que acumular, lo hacen muy difícil.

Es por eso que este grupo colegiado de profesionales dedicados al estudio del urbanismo, podemos estudiar

Últimamente se están buscando políticas y reformas catastrales, así como la localización de grandes extensiones de terreno; que el estado no puede adquirir y que deben tener el uso de reservas territoriales con proyectos definidos de ciudades periféricas entre asociaciones del sector público, privado y social.

Nuestra preocupación principal la queremos manifestar contribuyendo en la propuesta de soluciones con carácter gremial colegiado que propicien cambios en la mentalidad de las personas para poder lograr el equilibrio y la armonía de estos factores.Para bienestar de la comunidad, el planificador urbano debe manifestarse en un papel más humanista que el desempeñado por un tecnócrata de control urbano.

RESERVAS TERRITORIALES

NUESTRA CIUDADH

y de ella?

NUESTRA CIUDAD

¿es mía o yo so

noche y del sexo.

de Urbanismo

ganar dinero, sino para distraer a los conductores. Afortunadamente tengo trabajo, y por las tardes voy a la UNAM, en donde estoy cursando la carrera de Economía. De todas maneras muchas gracias. Por último le recomiendo que se sujete mejor el cinturón. Que Dios la bendiga, agregó con una mirada tiernísima. No lo podía creer.

UNA CIUDAD IDEALArranqué azorada y agradecida por vivir en una ciudad ideal. En el trayecto hacia la tercera Sección del bosque, no vi un solo papel tirado. Al contrario, todo se veía sumamente limpio. Todas las áreas verdes estaban perfectamente bien cuidadas. Los árboles se veían frondosos. En cada esquina se encontraba un enorme bote de basura y un gigantesco garrafón de agua purificada. No lo podía creer. El lago parecía un espejo; las lanchas eran modernísimas y no había ni un solo vendedor ambulante. Después quise entrar en el periférico. El de mi sueño tenía ocho carriles, por los cuales nada más circulaban automóviles último modelo. Nunca vi un solo camión de transporte, y nadie iba con exceso de velocidad. En las laterales, en lugar de

e ensueño…

estanquillos, había guarderías. Como prácticamente no había tráfico, pude darme cuenta que todos los teléfonos públicos funcionaban muy bien. Además, eran ¡¡¡gratuitos!!!.

Después de recorrer un Paseo de la Reforma tranquilo -por donde paseaban algunos jinetes-, y en cuyo camellón no había pirámides, ni mucho menos papeles tirados sin pirámides, llegué hasta la Zona Rosa. Pero ésta ya no era comercial, ni había tables dance, ni giros negros, ni taquerías, ni sexshops. Era otra vez ¡¡¡residencial!!!. Por eso no había ni un solo coche estacionado en doble fila. No lo podía creer. En esta ciudad sí quiero vivir. Ya no quiero regresar a la otra, me lamentaba entre sollozos.

EVOCACIONESDe pronto se me apareció un hada madrina vestida de anaranjado. En el pecho llevaba bordada la inscripción: Distrito Federal.

Querida Ciudadana: No olvides que tu ciudad es como tu casa. No olvides que aquí naciste, creciste, que por sus calles, avenidas y ejes viajes, has pasado penas y

alegrías. Aquí te tocó vivir, has recorrido sus calles a veces llorando, a veces cantando y hasta chiflando. ¿Te acuerdas cuando vivías en la colonia Cuauhtémoc?. Todas las tardes navegabas por los ríos de mi Colonia Cuauhtémoc. Qué emoción te daba ir por el Río Mississipi, dar vuelta y encontrarte con el Tigris. Caminar dos cuadras y atravesar el Rhín. Correr, y de pronto encontrarte en Amazonas. Y qué romántica te parecía entonces Río Sena. Cómo cantabas cruzando el Tiber para llegar al Nilo.

Y todos estos ríos te llevaban, atravesando el Paseo de la Reforma, a ciudades extraordinarias como: Niza, Hamburgo, Praga, Varsovia, Amberes, Marsella, Nápoles y Venecia. Cómo me enseñaba entonces mi ciudad. Entonces la adorabas porque había Cocodrilos paseándose por Reforma y con tan sólo pagar dos pesos te podías subir a uno. Cuántos amigos te hiciste en los peseros mientras escuchabas cantar a los tríos mexicanos que entonces tocaban en el radio.

Cómo te gustaba ir a la colonia Polanco y aprenderte de memoria los nombres

de todas sus calles, para después impresionar a tus pretendientes, hablándoles de autores y filósofos famosos que nunca habías leído. Sabías quién había sido Tennyson, porque tu hermana Antonia vivía en el 342, entre Eugenio Sué y Alfredo de Musset autor de esa maravillosa frase que decía que en las relaciones amorosas siempre hay que dejar una puerta abierta o cerrada, pero nunca entreabierta... No te quejes de tu ciudad. La verdadera también tiene su encanto. Permíteme hacerte una serie de preguntas y verás que tengo razón: ¿En qué ciudad del mundo hay un monumento a la Madre? Sólo en la tuya. ¿En qué ciudad del mundo hay un Zócalo con esa majestuosidad junto

a un Templo Mayor? Sólo en la mía. ¿En qué ciudad del mundo hay una plaza que canta como lo hace la Plaza Garibaldi? Solo en la tuya ¿En qué ciudad del mundo hay esculturas de emperadores aztecas? Solo en la tuya. ¿En qué ciudad del mundo hay cilindrireros entonando el Vals sobre las olas? Sólo en la tuya. ¿Qué ciudad del mundo tiene una avenida que mide 50 kilómetros de largo como Insurgentes? Sólo la tuya. ¿En qué ciudad del mundo hay espectáculos en cada alto? Solo en la mía. ¿En qué ciudad del mundo se limpian los parabrisas de todos los coches cada cinco minutos? Solo en la tuya. ¿En qué ciudad del mundo hay una Plaza dedicada a nuestras tres culturas? Solo en la tuya. Y ¿en qué ciudad del mundo hay un Desierto de los Leones, que ni es

desierto ni hay leones?. Sólo en la tuya. Y por último, ¿en qué ciudad del mundo se puede organizar una marcha ciudadana tan solidaria, blanca y pacífica como la que se organizó el domingo pasado? Solo en la tuya...

En ese momento, me desperté y me puse a llorar...

12 29CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

NUESTRA CIUDAD

esta ciencia social desde infinitos ángulos. Así, podríamos decir lo siguiente:

Desde el ángulo de la historia:“La historia universal es historia ciudadana”.

Desde el punto de vista de la geografia:“La naturaleza prepara el sitio, y el hombre lo organiza de tal manera que pueda satisfacer sus necesidades y deseos”.

Esto afirma el autor Vidal de la Blache:Desde la economía:“En ninguna civilización la vida ciudadana, se ha desarrollado con independencia del comercio y la industria”.

Desde la política:“La ciudad, según Aristóteles, es un cierto número de ciudadanos; “.

Desde la base de la sociología:“La ciudad es la fórmula y el símbolo de una relación social integrada”.

CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 1328 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

Guadalupe Loaeza

Tuve un sueño. Soñé que en el Distrito Federal todo funcionaba, que era una ciudad ejemplar. Lo primero que me llamó la atención fue la

extraordinaria visibilidad de los volcanes; se veían tan cerquita, que hasta tuve ganas de hacerme un raspado con la poquita nieve que tenía el Popocatépetl. Sentía el aire tan transparente y nítido que de pronto empecé a darle de mordiscos. ¡Ay, qué delicioso!, me decía sorprendidísima. Me sabía a miel, a vainilla, no, más bien a ¡¡¡menta!!!. Mmmmmm.... exclamaba feliz de la vida. Curiosamente, en mi sueño manejaba un Wolskwagen convertible, de color rosa nacarado. Se conducía

Una ciudad dcon mucha facilidad. Claro que por las calles por las que transitaba no había ni un solo tope, el asfalto estaba lisito, parejito y sin un solo bache. En cada esquina se encontraba un policía perfectamente bien uniformado, esbelto y con sus guantes impecables. Todos se parecían al actor mexicano Luis Aguilar.

NO LO PODÍA CREERDe repente, en un alto se me acercó uno y me dijo: Buenas tardes, señora. Le suplico respete el paso peatonal. Lo ha rebasado algunos centímetros, y esto podría perjudicar a los peatones. Le deseo un muy bonito día, me dijo al despedirse, haciéndome un guiño. En efecto, bastó con que me echara un poquito en reversa para ver a varios

de estos peatones atravesar la calle, partiendo exactamente de la esquina. No lo podía creer.

Como prácticamente no había tráfico, en un dos por tres llegué a la altura del Bosque de Chapultepec. Allí, me topé con dos jóvenes limpiaparabrisas, uni-for-ma-dos, limpios muy bien peinados. Uno de ellos se me acercó y me preguntó: ¿Quiere usted que le limpie su impecable parabrisa mientras le recito algunos fragmentos de Don Quijote de la Mancha? Y así lo hizo: En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme...decía engolando un poco la voz. No lo podía creer. Cuando le quise dar unas monedas, se negó: Señora, me ofende usted. Estamos aquí, no para

Desde el arte, la arquitectura y la ingeniería:“La grandeza de la arquitectura y la ingeniería está unida a la de la ciudad, y la solidez de las instituciones se suele medir por la solidez de los muros que las cobijan”.

TODO LO QUE AFECTA AL H0MBREAFECTA A LA CIUDAD

Y no son éstos los únicos enfoques posibles, porque la ciudad, la más comprensiva de las obras del hombre, lo reúne todo, y nada que se refiera al hombre le es ajeno.

Todo aquello que al hombre le afecta, afecta a la ciudad, y por eso muchas veces lo más recóndito y significativo nos lo seguirán dando los poetas y los novelistas.

Las grandes novelas de siglos pasados han tenido casi siempre una ciudad como marco de fondo, y lo mismo que las mejores descripciones del cuerpo y el alma de París se las debemos a Balzac, las de Madrid son obra de Galdós.

LAS FUENTES LITERARIASNo deben, pues, perderse de vista, al estudiar las ciudades, las valiosas fuentes que nos ofrece la literatura.La primera dificultad que encontramos como estudiosos del urbanismo, es la propia definición de lo que es una ciudad.

No se trata de que exista algún error, sino que estas definiciones se refieren a conceptos de la ciudad enteramente diferentes o a ciudades que constitutivamente son distintas. Nada tiene que ver la polis griega con la metrópoli comercial de Nueva York.

Para Aristóteles, una ciudad es un cierto número de ciudadanos, de modo que debemos considerar a quién hay que llamar ciudadano y quién es el ciudadano.

CIUDADANO Y CIUDADEste ciudadano se define como aquél que tiene la facultad de intervenir en las funciones deliberativa y judicial de la misma y definir la ciudad en general como el número total de estos ciudadanos.

Esta definición, por supuesto, corresponde a un concepto político de la ciudad, como lo era en su tiempo la ciudad estado de Grecia. Para Ortega y Gasset, la ciudad es un ensayo que hace el hombre para vivir fuera y frente al cosmos, tomando de él porciones selectas y acotadas.

Para los anglosajones será más difícil asimilar la idea de las ciudades en el sentido latino o de la polis griega, ya que ellos poseen los “towns” que significa un recinto cerrado, parte del campo que corresponde a una casa o a una granja.

En este caso no se trata de un concepto político, sino de un concepto agrario, en el buen sentido de la palabra. En los Estados Unidos carecen de ciudades tal y como nosotros las entendemos, aunque existan aglomeraciones humanas, concentraciones industriales, regiones suburbanas, conurbaciones, etc.

e ensueño…

NUESTRA CIUDAD

Guadalupe Loaeza

27CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

NUESTRA CIUDAD

Mario Cerutti / UANL1. Fue en los tumultuosos años que siguieron a la guerra contra Estados Unidos (1846-47) cuando comenzó a perfilarse en Monterrey un grupo comercial alimentado por las oportunidades que gestaba la flamante, árida y tosca frontera del Bravo.

Desde esos tiempos se conocieron en la ciudad o en su entorno apellidos y familias que durante décadas prosiguieron mencionándose en el escenario regional de los negocios: Madero, Garza, Calderón, Belden, Milmo, Zambrano, Hernández, Rivero, Mendirichaga, González, Treviño, Sada, Armendaiz, Muguerza, Ferrara, Maiz. Este conjunto de apellidos --que agrupaba comerciantes autóctonos e inmigrantes-- alentó la primera fase de crecimiento industrial en la ciudad (1890-1910).

CONTINUIDAD HISTÓRICA2. Algunas de estas familias habrían de ser especialmente afectadas por la revolución y por lo sucedido durante los críticos años que precedieron a la Segunda Guerra. Un período que, por otro lado, estimuló la aparición de nuevos apellidos: Santos, Benavides, Maldonado, Clariond. Todos ellos -como los que surgieron en los 40 y 50 (Lobo, Ramírez, Canales, entre otros)- estaban destinados a integrarse con las familias provenientes del siglo XIX y, así, renovar y fortalecer las redes parentales.

Puede inferirse, por lo tanto, que una de las claves de la perdurabilidad del empresariado de Monterrey podría encontrarse en la continuidad histórica de muchos de los apellidos fundadores en el siempre incierto mundo del capital y de la empresa.

3. Si los lazos familiares se tornaron un elemento decisivo para el desenvolvimiento y sobrevivencia de la actividad empresarial, otro aspecto estratégico fue el usufructo de la relación que la ciudad mantuvo desde 1850 con la economía de

los Estados Unidos y, en particular, con Texas.

Se trata de una constante que ha funcionado des-de los lejanos mecanismos de intercambio que el río Bravo propició desde 1850 hasta el reciente Tratado de Libre Comercio.

Si en los años 60 del siglo XIX la Guerra de Secesión puso al noreste de México en el corazón de la economía atlántica, el TLC ha disparado las ventas a Estados Unidos a más de cien mil millones de dólares anuales.

DINÁMICA REGIONAL4. Bases familiares y aprovechamiento de los vínculos con Estados Unidos deben sumarse a una dinámica regional que es propia y casi exclusiva del norte de México. Una correcta interpretación de la historia económico/empresarial de Monterrey reclama ubicar su devenir en el contexto más general del norte y de su peculiaridad estratégica: desde mediados del siglo XIX se convirtió, justamente, en prolongación territorial de la enorme economía de los Estados Unidos. Esta condición significó para Monterrey la posibilidad de localizarse en una de las puertas de acceso a una economía que, entre 1870 y 1920, se transformó en el más grande mercado del mundo y en cabeza del desarrollo tecnológico.

sus raíces industriales y económicas

Lazos familiares, elemento decisivo en el desarro

Monterrey:

Gabriel Todd

En los últimos meses me he dado a la tarea de leer los complicados libros del doctor David Hawkins, Phd, MD, exitoso

psiquiatra norteamericano y, creo, único investigador con formación científica enfocado al análisis y cuantificación de los niveles de la conciencia humana. La conciencia es responsable, en el fondo, de la intención con que hacemos las cosas y por lo tanto de la realidad que vamos creando.

Tuve que llegar a este extremo para tratar de explicarme por qué rara vez trascienden los planes y programas de gobierno o por qué a una persona sin hogar y sin empleo le das empleo y techo y, a la vuelta de la esquina, retorna a su antigua realidad REAL, ésa que le permite su nivel de conciencia.

CONVIVENCIA EN ARMONÍA Y PROGRESOEl médico afirma que la humanidad tiene una clara tendencia histórica a subir el nivel de conciencia, por lo que es fácilmente pronosticable que las cosas tenderán a mejorar para todos en el futuro, abriéndose nuevas puertas de entendimiento para convivir en armonía y progreso. Por el momento, asegura en sus mediciones que el 78 por ciento de la población mundial tiene un “bajo” nivel de conciencia, que él calibra en menos de 200 puntos... digamos de “vibración energética”, con lo cual ese segmento de la población se identifica con intenciones, acciones y conductas de “baja densidad”; es decir, autodestructivas o muy limitantes. Pero la percepción del 22 por ciento restante que vibra por encima de ese nivel tenderá a empujar fuertemente al segmento bajo hacia una mayor claridad o percepción colectiva en los años por venir.

Garabateo este tema por dos motivos urbanos: 1. No se puede crear una ciudad “perfecta” sin crear habitantes perfectos. La eficiencia y la arquitectura empiezan dentro de uno. De igual manera que reza el dicho ya popular de que las personas tienen el gobierno que se merecen, las mismas personas tienen la ciudad que ellas producen, con su nivel de conciencia.

2. No se pueden ATACAR problemas humanos partiendo de la FUERZA que da la intención MORALISTA, ya que esto, según el doctor Hawkins, polariza el campo energético, y hace más difícil lograr el objetivo. El solo hecho de COMBATIR la pobreza o el Alcoholismo, por ejemplo, te crea tu propio COMBATE o resistencia de regreso. Es como luchar contra un espejo. No se trata tampoco de quedarnos inmóviles, pues el espejo hará lo mismo. Se trata más bien de comprender que el bajo nivel de conciencia es parte de la escala de potencialidades humanas, y se incrementa fomentando los comportamientos que tú desearías ver, congruente con la intención que emana desde un alto nivel de conciencia. O sea, la violencia no se resuelve con violencia ni a la pobreza se la erradica con dólares. El progreso implica mayor conciencia no mayor inversión.

Conciencia plena para mejorar la calidad de vida

26 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2 , 2005 15CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 15

5. Un cuarto y último componente a tener en cuenta en esta brevísima referencia histórica es la alta capacidad de adaptación que ha presentado el empresariado de Monterrey. Si se recuerda que sus quehaceres más antiguos se remontan al ciclo de guerras que trastornó la frontera méxico-estadounidense entre 1846 y 1867; que tras la consolidación del Estado porfiriano, México vivió -entre 1911 y 1920- una profunda experiencia revolucionaria; que luego se manifestó la crisis de 1929; que tras los convulsionados años de Lázaro Cárdenas, se montó el modelo de industrialización protegida; que este proyecto terminó de estallar en 1982, y que -finalmente- la reconversión mexicana supuso adecuarse al más desigual tratado de integración comercial que se conozca (el TLC). Si se recuerda todo esto y se verifica -a la vez- que el empresariado con base en Monterrey sigue funcionando y continúa realizando buenos negocios, la conclusión más obvia es que no le ha faltado capacidad de adaptación en tan azaroso devenir.

ADAPTACIÓN A LOS TIEMPOS6. Nutrida de tan rica historia económica, no puede extrañar que Monterrey haya logrado sobresalir con nitidez en el escenario nacional. Las características de su empresariado y de su desenvolvimiento industrial (cuyo sector pesado lo diferenciaba a escala latinoamericana ya a principios del siglo XX); los sistemas de organización y de gestión impulsados en las grandes empresas a partir de los años 30; la formación local de cuadros gerenciales (sistematizada desde 1943 con la fundación del Instituto Tecnológico, ITESM); la receptividad al cambio tecnológico propiciada por su casi natural relación con los Estados Unidos; la secular experiencia de operar tanto con el mercado interno como con el externo, y -.en tiempos muy recientes- la aptitud y actitud para reconocer las nuevas condiciones dibujadas en el escenario mundial, lo pueden explicar.

llo y supervivencia de la actividad empresarial

En Monterrey se construyó el primer alto horno para Acero de Latinoamérica: fue el alto horno número 1 de Fundidora Monterrey.

En Monterrey se estableció la primera estación de radio de Latinoamérica.

En el área Metropolitana de Monterrey se inauguró el Planetario Alfa, el cual cuenta con el primer proyector OMNIMAX de Latinoamérica.

La Empresa Regiomontana Cemex es la tercera cementera del mundo y la primera en América.

N O T A S B R E V E SMilton Maciel Mata Guerrero

La ciudad de Monterrey es la tercera urbe más grande de México, y la más grande del Noreste. Es el principal centro comercial e industrial del país, ya que en el área Metropolitana de Monterrey hay más de 25 mil comercios, y de los

213 grupos industriales que hay en Nuevo León, la mayoría tienen su sede en el área Metropolitana.

En el ámbito nacional e internacional, cuando se habla de la ciudad de Monterrey, en realidad se habla de Monterrey y su área Metropolitana, formada por siete municipios, que son: Monterrey, Guadalupe, San Nicolás de los Garza, San Pedro Garza García, Apodaca, General Escobedo y Santa Catarina. A veces se consideran también los municipios de García y Juárez.

El área Metropolitana de Monterrey cuenta con una población de poco más de tres millones 837 mil habitantes, con una densidad de población de 6,700 habitantes por kilómetro cuadrado. Es interesante saber que en un kilómetro cuadrado del área Metropolitana del Monterrey actual habría más habitantes que el total de habitantes de nuestra ciudad en 1846, ya que ese año había en la ciudad un total de seis mil habitantes.

Monterrey es la segunda ciudad de México en importancia económica, con un PIB (Producto Interno Bruto) de 41 mil 242 millones de Dólares (2004).

Al municipio de San Pedro Garza García, se le considera como la ciudad más segura de México. Tiene un PIB (Producto Interno Bruto) per cápita de 32 mil dólares, el segundo más alto del país.

El municipio de San Nicolás de los Garza, es considerado el cuarto municipio Industrial de México.

El municipio de Apodaca cuenta con la colonia más grande de Latinoamérica, la cual se llama Pueblo Nuevo, y es el único en México que posee dos aeropuertos internacionales.

El área Metropolitana de Monterrey cuenta con dos grandes estadios de fútbol: el Estadio Universitario y el Estadio Tecnológico.

El área Metropolitana de Monterrey tiene una red de carreteras de más de dos mil kilómetros, y cuenta con poco más de veinte mil calles y unas mil 600 colonias.

En el área Metropolitana de Monterrey se concentra el 90 por ciento de la actividad productiva de Nuevo León; aporta el 6 por ciento al PIB (Producto Interno Bruto) y realiza el 12 por ciento de la producción industrial de México.

El área Metropolitana de Monterrey es abastecida de agua potable principalmente por la presa el Cuchillo, que cuenta con una capacidad de más de mil millones de metros cúbicos; es decir, más de un billón de litros.

La distribución del agua potable a los habitantes del área Metropolitana de Monterrey equivale a 10 mil 098 litros por segundo.

En el área Metropolitana, la temperatura promedio más alta es de 38ºC (100.4ºF o 311.15 K); la temperatura promedio más baja es de 3ºC (37.4ºF o 276.15 K), y la temperatura media anual es de 22ºC (71.6ºF o 295.15 K).

Estadio de Beisbol Monterrey.

CEMEX Monterrey.

SOBRE la CIUDAD

NUESTRA CIUDAD

Monterrey:

Gabriel Todd

CEMEX Monterrey.

SOBRE la CIUDAD

25CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 252516 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

Abraham Nuncio / Centro de Estudios Parlamentarios, UANL

El Comité Regional Norte de Cooperación con la UNESCO, con sede en Monterrey, organizó una mesa de discusión en la que

participamos Rosaura Barahona, Carlos Monsiváis y yo. El tema: la ciudad y el conocimiento. Sobre él vuelvo ahora.Lo que se ha difundido como Ciudad del Conocimiento es un concepto que pareciera indicar una totalidad. En la práctica se le asume como una extensión de la empresa situada en el mercado global; como una parcela de la realidad que pretende absorber al todo. Hasta el momento, existen unos 50 conglomerados urbanos que se han declarado ciudades del conocimiento. Se los halla, fundamentalmente, en Estados Unidos y Europa. Se trata de proyectos que intentan subordinar la vida de la ciudad a la lógica de la tecnología y ésta a la competencia en el mercado.

CONOCIMIENTO VINCULADO A LA CIUDAD

En la medida que esa visión del conocimiento vinculado a la ciudad se amplifique, las potencialidades de ésta se verán disminuidas. Entre nosotros, la ciudad del conocimiento es hasta ahora un concepto que se ha desarrollado en algunos países europeos y en Norteamérica. El conocimiento de este proyecto es tecnológico. Así que el requisito para habitar esa ciudad es ser ingeniero.

Ni siquiera científico, pues los científicos básicos a veces suelen pensar en cuestiones sobre las que no se les pide que piensen. Y el científico ejemplar, aquél que como Ricardo o Marx, Descartes o Einstein, llega a la búsqueda sistemática de ciertas regularidades, acompañado de la lectura de los clásicos, se desvanece cada vez más en el horizonte tecnocrático.

Una ciudad del conocimiento de un país latinoamericano tendría que partir de ciertas premisas a fin de convertirse en la ciudad necesaria. Por ciudad necesaria se entiende aquélla donde sus habitantes tienen oportunidades de empleo, cuentan con servicios urbanos adecuados y tienen satisfechos sus requerimientos de alimentación, salud, vivienda y educación; en la cual, además, participan activamente en la conformación de los órganos de dirección política y tienen garantizados por el Estado y la ley sus derechos humanos, de libertad de opinión y difusión, de información y cultura, de votar y ser votados, sin otro requisito que la patente de su ciudadanía.

REQUERIMIENTOSBosquejo tales premisas:1.Una ciudad situada en América Latina tendría que promover, en primer lugar, el conocimiento indispensable para que sus habitantes supieran situarla en el contexto del país y del mundo. Usualmente ese conocimiento se oculta o mistifica. Casi por sistema se omite la definición del régimen socioeconómico que prevalece en los países de América Latina, a excepción de Cuba.

En consecuencia, tampoco llega a saberse el carácter subordinado de los países latinoamericanos a los Estados Unidos.

Así, las preguntas nos aparecen. Si somos un país subordinado, ¿qué tipo de conocimiento se requiere desarrollar para poder superar en todos los órdenes esa subordinación? ¿Es posible tal superación? Y si no lo es, ¿cuáles, de haberlas, son las opciones?

La ciudad necesaria requiere situarse en su entorno nacional e internacional, y para ello precisa de la participación de los profesionales de las ciencias políticas y sociales, de los economistas, de los filósofos.

2.En el supuesto de que a los países, regiones y ciudades no les queda sino

Monter

la orden del día, existen múltiples desafíos, y de ellos nos habla nuestra realidad cotidiana.

Es cierto que industrias símbolo como Fundidora fueron cerradas; empero, también lo es que nuestra gente sabe que el mejor capital, aquél que siempre rinde dividendos es el humano. Ese capital está presente en el industrial que se arriesga e invierte; en el obrero que a las cinco de la mañana toma su autobús -almuerzo en mano- para irse a”su industria” o a “chambear”; en el ama de casa que, pese a la crisis, hace milagros que debieran ser reconocidos por el Vaticano para hacer rendir su gasto.

CAPITAL HUMANOEste capital humano creó más de una docena de universidades, innumerables instituciones de servicios y comercios. Es el mismo capital que no ignora la existencia del desempleo y de la inseguridad pública; de la escasez de recursos para investigar más y depender menos; de un clima que en el verano nos sofoca y altera, y durante el invierno nos hiela, pero que aun así todos los años lo toleramos “porque es nuestro”.

En un mundo tan cambiante, el dólar y el patrón oro definen la riqueza económica de las naciones. Sabemos que hoy, el acceso a esta abundancia material depende en gran medida de la información que tengamos a la mano para la toma de

dad, ingenio, esfuerzo y carácter

decisiones acertadas; del conocimiento y su propagación hacia todos, como fórmula para abatir el subdesarrollo y la pobreza; de la tecnología que seamos capaces de crear y de vender, aun cuando los mercados internacionales sean manejados por unos cuantos.

LA RAZÓN DE LA INTELIGENCIAEs una realidad absoluta: el mercado, está abierto y lleno de riesgos, pero también de posibilidades. Así lo pensaron los ancestros de los actuales capitanes de la industria local; así también lo entendemos y comprendemos todos.

Aquí, en la tierra de Alfonso Reyes y de soles resplandecientes, hemos asumido que la inteligencia tiene su razón, y que la razón de la inteligencia es la que por siglos -desde Diego de Montemayor a la fecha-, ha guiado el espíritu de esta gran ciudad y de su pueblo.

abajo: himnol de nuestro pueblo

ser competitivos, resulta imprescindible saber cómo compiten los que lo hacen con mayor prestancia y mejores resultados. No compiten sólo con ciencia y tecnología autogeneradas, sino con salarios remunerativos, un mercado interno vigoroso y calidad de vida de sus habitantes. Competir con pobreza y, peor aún, con hambre, no es competir. La ciudad necesaria debe estimular los esfuerzos y capacidades de todos para competir con una sociedad bien alimentada, bien educada, saludable y libre del azote del crimen organizado. Dentro del marco del sistema neoliberal, ¿es esto posible? ¿Lo es dentro del capitalismo a secas? Y si no lo es, ¿cuál pudiera ser la opción? El conocimiento permite la formulación de las preguntas. Las respuestas las tendrá que dar cada quien, ya como producto de la reflexión individual, ya como resultado de la deliberación colectiva.

3.Las ciudades latinoamericanas han sido producto, al menos, de dos concepciones y de dos procesos. Las ciudades prehispánicas partían de una visión religiosa y militar: Tenochtitlan o Popayán; las ciudades pensadas por los españoles respondían al orden racional del poder fundado en rigurosos cánones urbanísticos: Puebla o Monterrey. Antes de la era industrial, aun las más desarrolladas presentaban rasgos rurales. En aquéllas donde el desarrollo industrial es más intenso, las máquinas no sólo dictan modalidades antes desconocidas, sino que alteran, al lado de la masificación de los espacios urbanos, el hábitat en perímetros cada vez más vastos. Muchedumbre y máquinas le ganan la carrera a la planeación urbana. El comercio añade irracionalidad a los agregados urbanos: se planea en función de la industria

y la ganancia y no en función de los hombres. Parques industriales sin parques para la vivienda, el saber, el ocio, la creatividad. Y ahora, parques tecnológicos sin parques para el quehacer humanístico. La acromegalia, el hacinamiento, la depredación de las áreas verdes, la contaminación imparable del ambiente. Una ciudad del conocimiento que no reflexione sobre esta realidad urbana sólo contribuirá a la destrucción de sí misma. La ciudad necesaria exige que sea el gobierno y no sólo el mercado el que intervenga para detener los procesos irracionales del crecimiento urbano de la ciudad industrial capitalista. Además de los políticos, se requiere del concurso de urbanistas, ambientalistas, expertos en ecosistemas, arquitectos que diseñen con la naturaleza (designing with nature), artistas capaces de darle a la ciudad una dimensión estética y, desde luego, historiadores que puedan advertir al presente avasallador de la exigencia de mantener la identidad, que radica en el pasado.

4. Las ciudades de Estados Unidos han sido engendradas por el mercado y el dios de éste es Jano: una de sus caras mira hacia la libertad y la otra hacia

la opresión. La ciudad necesaria es aquella que mantiene una lucha permanente contra la opresión del mercado, en ocasiones con disfraz de democracia, para hacer que su vida cotidiana gire en torno al ágora. Hoy, el ágora sólo es posible en un marco de libertades custodiado por el Estado de derecho y por la exigencia ciudadana. Legisladores, administradores, abogados, jueces y periodistas son los responsables de que ese marco se mantenga. A los ciudadanos toca organizarse para que esa responsabilidad se cumpla.

NUESTRA CIUDAD

rey, la polis social

IPatricia Liliana Cerda Pérez

Ingenio, esfuerzo y carácter templado son las tres palabras que cotidianamente asociamos a nuestra entidad y a su capital, Monterrey.

Aquí, con temperaturas extremas de hasta 45 grados a la sombra, con poca agua y menos lluvias, el semidesierto ha enseñado por generaciones enteras que la creatividad no tiene límites y, pese a la adversidad geográfica, se han formado hombres y mujeres de ciencia, industrias, ofertas educativas, y un pueblo que hace del trabajo su credo, su himno y hasta su dogma.

PROVINCIANA CANDOROSAEscribir de la ciudad donde hemos nacido no es cosa fácil. Casi siempre perdemos la objetividad, porque el amor al terruño nos ciega y nos absorbe. Grande y cosmopolita, como se ha convertido en las últimas décadas, preferimos pensar en ella como en una candorosa provinciana que siempre nos espera; optamos por verla como el cerro de La Silla, majestuosa e imponente, y hacemos a un lado las grandes transformaciones y urgencias que el Tercer Milenio nos plantea.

En esta tierra, donde la industria local juega en las ligas internacionales; don-de la oferta educativa es amplísima y los avances jurídico-sociales están a

Frente a la adversi

El tr regionaCapital humano, el único que siempre rinde dividendos

Monter

NUESTRA CIUDAD

Frente a la adversi

CIENCIA DEL LENGUAJE

Juan Ignacio Barragán Villarreal, secretario de Desarrollo Urbano y Ecología, San Pedro Garza García

El modelo de desarrollo urbano que actualmente se sigue en el Monterrey Metropolitano y en la mayor parte del país, presenta deficiencias estructurales que impiden seguir avanzando hacia una mejor ciudad.

Ciertamente hemos avanzado en los últimos 20 años. Desde 1988 contamos con un marco de referencia en la planeación urbana metropolitana, el cual ha sido progresivamente perfeccionado, a través de planes parciales municipales, y de una nueva versión metropolitana concluida en el año 2003. Asimismo, de 2000 a la fecha se ha duplicado el número de viviendas construidas con el apoyo de un crédito hipotecario, lo que ha reducido notablemente la irregularidad en los asentamientos populares.

LOS PROBLEMAS SON MUCHOSSin embargo, el resultado es insuficiente. Aunque el crecimiento se da en forma un poco más ordenada, aún existen numerosos problemas como son:

La falta de terrenos adecuados en ubicación y en costo para edificar las viviendas de la población de menor ingreso,

La dispersión urbana en la periferia, que ocasiona altos costos en la introducción de infraestructura y genera problemas de transporte y vialidad,

La falta de integración entre la política de transporte público y el desarrollo urbano,

La falta de integración entre la política de equipamiento educativo y de salud, y el desarrollo urbano,

La falta de integración entre la política de manejo de aguas pluviales y el desarrollo urbano,

La insuficiencia de recursos públicos, sobre todo en el ámbito municipal, para llevar a cabo las obras públicas que exige el crecimiento de la ciudad.

UN PASO ADELANTEHemos avanzado en la planeación de la ciudad y en el financiamiento de la vivienda, pero seguimos muy rezagados en cuanto a la ejecución de los planes, la integración urbana y el financiamiento de la ciudad.

Los Distritos de Infraestructura, otra opción

El desarrollo urbano concertado y la gran ciudad

CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

Rodrigo Soto Mercadotecnia social

El término “kernel”, hablando de sistemas operativos computacionales, se refiere al núcleo del mismo sistema; es

decir, es el programa que permite a otros programas trabajar dentro de la computadora.

Trasladando éste al aspecto de Monterrey como una Ciudad Internacional del Conocimiento, vemos cómo la “clase creativa” es y será el factor determinante en la construcción de este magno proyecto del Gobierno del Estado.

CLASE CREATIVALa clase creativa ha sido abordada por el economista Richard Florida, en su libro The Rise of the Creative Class y también en The Cities and the Creative Class, en donde se argumenta que existen tres factores claves de desarrollo para poder considerar a una ciudad como atractiva, y éstos son:

TecnologíaToleranciaTalento

El primer punto, tecnología, se refiere a cómo las ciudades deben ofrecer la infraestructura necesaria en materia de telecomunicaciones, hardware y software para el flujo y creación de información y conocimiento. El segundo punto, tolerancia, se circunscribe al aspecto de permitir la entrada de etnias diferentes, que articulen y creen nuevo conocimiento para agregar valor a la ciudad. El último punto y tal vez el más importante, el talento, connota el nuevo reto económico que no se centra en ver donde están las compañías, sino dónde está el capital intelectual.

Por ejemplo, las antiguas civilizaciones se erigieron porque sus individuos comprendieron y promovieron el intercambio de valor como medio de

progreso y desarrollo económico, y es así como hemos pasado de tener economías basadas en agricultura, en industria, a una del conocimiento.

LA BIBLIOTECA DE ALEJANDRÍAContinuando en la historia, tenemos el caso de Alejandro Magno y la Biblioteca de Alejandría como primer intento de concentrar el talento de los individuos en un solo punto, sin poder vincular este

conocimiento a la aplicabilidad por la destrucción de este recinto a manos de los romanos.

Retomando nuestro tema, ahora el factor de intercambio de “capital” es la creatividad de cada persona, o como lo definiría el economista Kjell Nordstrom: “el talento mueve capitales”. Es decir la demanda para el conglomerado de las nuevas ciudades es explotar la mente

de cada uno de nosotros como actores y gestores del conocimiento.Es así como la economía de Monterrey debe promover un nuevo sistema de capitales sustentado en la creatividad de etnias multiculturales, que alimenten en primera instancia el Fórum Internacional de las Culturas 2007, al igual que este proyecto de convertir a Monterrey en la primera Ciudad Internacional del Conocimiento en América Latina.

LOS NIÑOS, LA MATERIA PRIMAPara lograr esto, es necesario no sólo pensar en la masa crítica de jóvenes y adultos que están aportando al proyecto desde diferentes áreas del conocimiento, sino incorporar a la materia prima del mismo: “los niños”. Mientras se acerque a éstos a comprender las ciencias de una forma creativa y divertida, podemos estar pavimentando el futuro de los nuevos artífices de la Ciudad del Conocimiento.

Tampoco olvidemos la necesidad de la cultura, punto neurálgico en el esquema de trabajo del nuevo Monterrey, ya que desde tiempos inmemoriales las manifestaciones artísticas se ligan directamente con el humanismo social y la inteligencia creativa de transmitir en cada uno de nosotros el “orgasmo de la piel” cuando, por ejemplo, escuchamos una pieza clásica de Mozart o Beethoven, situación que se repite al observar una obra de arte.

Para finalizar, es necesario tomar las palabras de Florida: “lo más preocupante de las ciudades no es el terrorismo, sino que la gente creativa y talentosa escape de nuestras fronteras” y no únicamente eso, sino también que como ciudad no podamos tener las características necesarias para ser atractivos hacia este tipo de personas, al igual que la capacidad de crear a nuestros propios genios creativos que nos enorgullezcan cuando los escuchemos gritar “eureka”.

La clase creativa

El “kernel” de Monterrey: la Ciudad Internacional del Conocimiento

Claudia Ordaz

Cómo se me hace chiquito el corazón cuando voy llegando a mi ciudad natal. Desde la ventana del avión veo cómo se yerguen, altivas, preciosas las montañas. Ningún paisaje para mí resulta igual ni más bello que

Monterrey. Pienso en los miles de años que tomó para que la tierra formara tan perfectas y caprichosas protuberancias; pienso inevitablemente que sin ellas no podría vivir, cuando siento esa opresión en el pecho, que me devuelve muy a pesar mío, más allá de mi voluntad, a mi natal Monterrey.

Son las ocho de la mañana y me imagino a Monterrey como un hormiguero; todos sus habitantes tienen bien puestas las pilas y mucho antes de las seis de la mañana ya empiezan a transitar por la principales avenidas. Monterrey es un inmenso corazón que bombea diminutas células a sus arterias. Esas células la rejuvenecen, la reinventan, la mantienen viva, la hacen ser lo que es ahora: una bellísima urbe de acero, con piernas de asfalto y brazos que son edificios donde muchos de mis paisanos construyen y reconstruyen su futuro y el de sus familias. Mentiría si dijese que pude ver Fundidora desde el avión, pero puedo jurar que es como un enorme esqueleto antidiluviano que yace insistente en un complejo que ahora es un centro donde se celebran importantes congresos, un hotel, pinacoteca, cineteca, y un parque donde tienen lugar megaconciertos. Prevalece porque es un ícono de lo que fue y de lo que sigue siendo nuestra ciudad. ¿Cómo borrar, cómo deslavar, cómo renunciar a nuestra esencia?

TRABAJADORES Y FRANCOSRegiomontano es sinónimo de gente luchona, trabajadora, y si nos tildan de tercos y necios, bien, pues que así sea. Nos aceptamos como los tercos del país, porque hemos construido una ciudad a base de picos y palas, en un ecosistema que

ha sido poco benévolo. Creo que por eso nos hemos hecho tan trabajadores. Nada nos ha sido regalado. El tiempo para nosotros es oro; lo aprovechamos como si en ello nos fuera la vida, porque no sucede como en otros estados que con sólo estirar el brazo tenemos alimento. Nuestras carreteras ofrecen paisajes desolados, secos, áridos pero no así nuestro carácter. Somos vivarachos, francotes, unos “huercos a todo mecate” que decimos las palabras por su nombre y no nos andamos por las ramas. Somos sabios, no intelectuales; no somos bárbaros, somos atrabancados, porque nos mueve una pasión inexplicable que ha hecho que no sólo las miradas de nuestros coterráneos se fijen en nosotros, sino la mirada del mundo.

Producimos cemento, vidrio, cerveza; muchas de nuestras fábricas maquilan productos para ser distribuidos en el país y fuera del mismo. Somos número uno en educación en la nación; contamos con la mejor institución en Latinoamérica. Estamos en proceso de hacer de Monterrey una ciudad del Conocimiento con el Fórum de las Culturas. A nuestros museos se les ha inyectado una nueva cara y ofrecen muestras pictóricas únicas en el país. Ya arrancamos con nuestro Primer Concurso Internacional de Cine.

Ahora que he escrito estas líneas, se me ha henchido el corazón de orgullo de ser regia. Regio significa estar excelente, y así están las cosas en mi ciudad. Más allá de sus defectos, al ponerlos en una balanza junto con sus virtudes, me abrazo a mi ciudad y la hago más mía. Me enamoro más de ella y digo que está regia, y que tan regia soy como la Huasteca, como el Cerro de Las Mitras, La Sierra Madre, Chipinque y el inolvidable Cerro de la Silla. Somos como nuestra ciudad hecha de montañas y piedras: fuertes, grandes, que no nos empequeñecemos ante ninguna adversidad; por el contrario, tratamos de encontrarle solución a cualquier obstáculo que se nos presente. Como diría el más reconocido e ilustre de los regiomontanos, Alfonso Reyes-, somos una especie de héroes en mangas de camisa, grandes mexicanos sin posturas estudiadas para el monumento, y hasta creo somos felices.

El regiomontano 19CONOCIMIENTO, AGOSTO 19, 200522 CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005

Requerimos dar un paso más allá. Existen en Monterrey algunas experiencias exitosas que han propiciado un entorno más favorable. Ciudad Solidaridad, el exejido San Nicolás, Valle Oriente y la recientemente anunciada Nueva Castilla, nos indican caminos mediante los cuales es posible alcanzar un desarrollo más integrado, equilibrado y de mejor calidad.

Todos ellos son proyectos de gran magnitud, ejecutados conforme a un Plan Maestro que establece una estructura vial, un sistema de infraestructura y una distribución de equipamientos adecuada a las necesidades de la población.

ACCIONES AISLADASDesgraciadamente, este tipo de operaciones han sido aisladas. Su ejecución ha requerido de circunstancias excepcionales y de gran cantidad de recursos.

Y las finanzas públicas son limitadas, además de que estos proyectos normalmente le cuestan a la administración actual, pero no dan sus frutos sino hasta varios años después.

No obstante, en los países europeos y en los Estados Unidos se han desarrollado esquemas que pudieran aplicarse a nuestra realidad presente. Propuestas tales como las Zonas de Desarrollo Urbano Concertado, o los Distritos de Infraestructura, pueden ser aplicados en nuestro país.

Un esquema como éste sí es posible en nuestro entorno legal; sólo se requieren algunas reformas, de un capital semilla y de una instancia responsable de su ejecución. Pero sobre todo se requiere de voluntad política, pues el cambio hacia

un modelo más avanzado podría traer alguna oposición mientras la cultura empresarial la asimila. Mas a la postre, el resultado sería de un gran beneficio para los propietarios de la tierra, para los promotores inmobiliarios, para los municipios y el Estado, pero sobre todo para la ciudad y sus habitantes; como se ha comprobado en las experiencias de los países que ya han aplicado el desarrollo concertado.

De otra manera, podemos quedarnos observando nuestra ciudad difusa: cara, desintegrada e inestética.

CONOCIMIENTO, SEPTIEMBRE 2, 2005 19

Ambos esquemas se basan en algunos principios simples.

•Definir una zona de gran magnitud donde convenga el desarrollo urbano.

•Concertar con los propietarios, con las autoridades involucradas (Estado, municipios, educación, salud, transporte, etc.) y las empresas prestadoras de servicios (Agua y Drenaje, CFE, Gas, etc.) su desarrollo en forma integral.

•Establecer un Plan Maestro.

•Establecer un esquema financiero sustentable.

•Establecer una base fiscal que permita la recuperación de las inversiones.

NUESTRA CIUDAD

La clase creativa

Claudia Ordaz

NUESTRA CIUDAD

Carlos Joloy

Durante la segunda etapa del programa “Arte Nuestro: Monterrey 2005”, el Museo Metropolitano presenta la exhibición

denominada “Interludio 70’s y 80’s”, dedicada a los artistas que se formaron durante este tiempo, en el que se presentaron importantes cambios dentro de la escena cultural de la ciudad.

La muestra presenta la obra reciente, así como la evolución de 36 artistas surgidos en esas décadas; en total son 61 obras conformadas por pinturas, esculturas e instalación. Además, se dedica una memoralia a Juan Caballero con 11 obras más.

ENLACE GENERACIONALElvira Lozano de Todd, directora del museo, explicó que se denominó “interludio” a la muestra, porque con ella se resalta y acentúa el enlace que existe entre las nuevas generaciones de artistas y la forma en que ellos se relacionan con los actores que participaron durante la explosión cultural que se registró en la ciudad durante las décadas de los 70’s y 80’s.

“En esta segunda etapa constatamos que al realizar una revisión del quehacer cultural y artístico de estas décadas, encontramos una multiplicación de actividades, no sólo en el área de la plástica, sino también en el teatro, la música, la danza, la literatura y otras disciplinas; encontramos, también, una infatigable persistencia en la creación de museos, galerías y centros culturales. La mayor parte de los artistas que presentamos tienen una preparación académica y cursaron además otras carreras profesionales, ya que representan una circunstancia distinta a los pioneros”.

La selección de las obras estuvo a cargo del Comité Curatorial del Museo Metropolitano de Monterrey, conformado por Jorge García Murillo y Xavier Moyssén, y bajo la coordinación de Eliseo Garza, quien considera que los fenómenos sociales que se

presentaron durante esta particular época generaron una aceleración en el desarrollo social, que repercutió en la creación de nuevos espacios culturales, el surgimiento de nuevos artistas y una mayor apertura hacia el ámbito cultural por parte de otras instituciones y de los medios de comunicación.

“Creo que analizando el contexto social de Monterrey y disfrutando de la propuesta que nos hacen los artistas, podemos atar ese binomio del desarrollo educativo con desarrollo económico y social de la entidad, que permite el desarrollo de la producción artística y del gusto y la admiración por la obra de arte”, expresa.

EXPRESIONES PLÁSTICASPor su parte, Jorge García Murillo

estima que el conjunto de artistas intergeneracionales responde a la explosión, pero al mismo tiempo a la implosión de las expresiones plásticas. Considera que los artistas que conforman la muestra son herederos, pero sin un abanderado definido, ya que no se les impuso ningún discurso plástico, situación que reflejan en sus obras.La exhibición, que forma parte de los festejos por el décimo aniversario del Museo Metropolitano de Monterrey, permanecerá en las diferentes salas del museo hasta principios del mes de octubre. El horario especial de verano en el que permanecerá abierta la muestra es de 10 de la mañana a 10 de la noche, y la entrada es libre.

Con obras de artistas formados en los 70’s y 80’s

Se presenta la exhibición “Interludio” en el Museo Metropolitano de Monterrey

Salvatore Sabella/Promotor cultural

Desde su fundación, Monterrey estaba destinada a ser baluarte de la república, principalmente en lo industrial, económico, social y cultural. Ciudadanos ejemplares dejaron una herencia de alto valor humano. Algunos se distinguieron en lo artístico, y crearon un pujante movimiento musical.

Los maestros Daniel Zambrano, Antonio Ortiz y Francisco Estrada crearon las primeras academias musicales, la Beethoven y la Chopin; los estudiantes eran cientos, y algunos llegaron a destacar como excelentes pianistas. Estos maestros formaron también la Orquesta Sinfónica Beethoven, aunque de duración muy breve.

AFICIONADOS A LA ÓPERAEn la década de los 50 se presentó la oportunidad de crear otra sinfónica, a iniciativa de un grupo de regiomontanos aficionados a la ópera, quienes formaron un patronato. En octubre de 1953 se presentó, en el cine teatro Florida, la primera temporada de ópera internacional con destacados cantantes, pero Monterrey no contaba con infraestructura musical propia; todo era importado, con cargas económicas gravosas.

En 1959, el patronato de la Compañía de Ópera de Monterrey creó una orquesta sinfónica propia para afrontar la parte musical de la temporada de ese año, y abatir los costos. Un joven director italiano, Antón Guadagno, fue contratado para el proyecto. Descubrir nuevos valores era una de sus virtudes; muchos cantantes en el mundo recibieron el bautismo artístico de Guadagno; entre ellos, Plácido Domingo, a quien hizo debutar en Nueva York.

A BUSCAR MÚSICOSInició la tarea a fines de abril; el destino me unió a él, y nació entre los dos una amistad casi fraternal, que perduró hasta su muerte, en 2002, en Viena. Me comentó su plan de trabajo, y solicitó mi colaboración para localizar músicos por todos los rincones; visitamos cantinas, restaurantes, clubes nocturnos, salones de bailes, concentraciones de mariachis, inclusive la ciudad de Saltillo.

Contábamos con el apoyo del Patronato de la Ópera, y también del gobernador, Raúl Rangel Frías. Un músico con gran amor a este arte, oficial mayor de Gobierno, Manuel Flores Varela, favoreció enormemente el proyecto, y pudimos disponer, como sede de trabajo, de la Casa del Campesino, en Mina y Abasolo. Como directores sustitutos se unieron

los maestros David C. García e Isaac Flores Varela.

La orquesta alcanzó un éxito histórico con su participación en la temporada de octubre. En sólo seis meses, Guadagno logró satisfacer a los críticos de la época y al público en general, así como a cantantes provenientes de los mayores teatros de ópera del mundo.

APOYO PARA LA ORQUESTAEl rector de la UANL, Joaquín A. Mora, se hizo cargo de la orquesta, con apoyo del Gobierno del Estado, del patronato de la ópera y del municipio de Monterrey. El primero de los conciertos, el 2 de febrero de 1960, fue en el teatro María Teresa Montoya, todavía como Orquesta Sinfónica de Monterrey. El día 8 del mismo mes, se organizó un concierto en el Aula Magna, para maestros y alumnos, con el nombre de. “Orquesta Sinfónica de la UANL”, bajo la dirección de Antón Guadagno, y la participación de la soprano Lucila Sabella.

Después, Mora aceptó la propuesta de Guadagno, de organizar una temporada de ópera universitaria, con La Traviata y La Bohemia, que se presentaron en mayo de 1961 en el Montoya, con artistas mexicanos, entre ellos, el tenor Plácido Domingo, así como varios cantantes regiomontanos, Lucila Sabella y Jorge Rangel Guerra; dirigió el mexicano Eduardo Hernández Moncada.

APARECE FÉLIX CARRASCOCon la muerte del maestro David C. García, la orquesta tuvo varios directores: Isaac Flores Varela, Héctor Montfort, Jesús Medina y Antonio López Ríos. En 1991 apareció en el escenario regiomontano el maestro Félix Carrasco Córdova.

Ahora que la orquesta cumplió sus primeros 45 años de vida, debemos agradecer a los fundadores, a la UANL y a sus rectores, que le dieron su apoyo en todos estos años; a su director Carrasco; a los músicos que siempre han puesto su mayor empeño en mejorar su calidad musical y al gran público asistente a los conciertos.

La Sinfónica de la UANL, alma musical de Monterrey

La ciencia es CULTURA

Presentación de la Orquesta Sinfónica UANL en la Fuente Monterrey, de la calle Zaragoza, bajo la dirección del maestro fundador Antón Guadagno; solista soprano Lucila Sabella y Coro Universitario.

Elvira Lozano, Jorge García Murillo y Eliseo Garza Salinas durante el primer recorrido por las exposiciones de “Interludio 70’s y 80’s.