Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

download Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

of 72

Transcript of Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    1/72

    Noviembre / 201117

    Subversiones intelectuales el XYZ d la rfa a la Ly 30 d

    1992. (Ly d educacin Supi) Batalla de ideas La CnsuynUnsaa: Una da dsupa dl sa y d la pnca Laaalla p l dch a la ducacn n la scdad nlal:Cla 2011 Cd paa la educacn Sup: Lccns dl casd Chl Neoliberalismo rampanteQun ana cn la lalzacn?L cc, apa sup dl nlals Capitalismo en

    crisisDclaacn d la rd d esuds d la ecna mundal(reDem) Nuestra Amrica Anna 2011 Qu ns djan laslccns psdncals? Crtica cultural blqus, caas, accin!minh n oj al Sancch Editorial elccns y lccns

    iSSN- 2215-8332bogot, CoLombiA

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    2/72

    todo l conndo dsa pulcacn pud

    poducs ln,consando sus cdos.

    Jao esada laz Dco

    Jss gualdn SandoalJf d daccnlao vsquz dl ral, Danl Los Cacdo, Csa galdo galdo,Fank molano Caao, Jo gana Sla, maa tsa Cfuns taslaa,Nlson Fajado maulanda, Paca Aza, So D Zua Sap, vcomanul moncayo Cuz Consjo doal

    baz Solowcz (mxco), Julo gana (Anna), rcado Anuns (basl),Anono elas (Uuuay) Consjo asso nnaconal

    taanna Casllo rys Dso y daaacn

    espaco Cco edconsPulcacn auspcada po espaco Cco Cno d esudoswww.spacocco.co

    iSSN-2215-8332N 17, No d 2011. boo, Coloa

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    3/72

    eL XYZ De LA reFormA A LA LeY 30 De 1992. (LeY De eDUCACiN

    SUPerior)Leopoldo Mnera Ruiz 4

    LA CoNStitUYeNte UNiverSitAriA: UNA iDeA DiSrUPtivADeL SAber Y De LA PoteNCiA Jorge Gantiva Silva 18LA bAtALLA Por eL DereCho A LA eDUCACiN eN LASoCieDAD NeoLiberAL: CoLombiA 2011 Carlos WladimirGmez Crdena24CrDito PArA LA eDUCACiN SUPerior: LeCCioNeSDeL CASo De ChiLe Daniel Munevar32

    QUiN gANA CoN LA gLobALiZACiN?Libre ComerCio, etAPA SUPerior DeLNeoLiberALiSmo Jos Francisco Puello-Socarrs 38

    DeCLArACiN De LA reD De eStUDioS De LAeCoNomA mUNDiAL (reDem) 46

    ArgeNtiNA 2011 QU NoS DeJANLAS eLeCCioNeS PreSiDeNCiALeS?

    Julio C. Gambina 54

    bLoQUeS, CmArAS,ACCiN! morriNho eNoJo AL SANCoChoJuanCamilo Daz 62

    eLeCCioNeS YLeCCioNeS JairoEstrada lvarez 68

    Subversion

    es

    intelectuale

    s

    C

    rtica

    Cultural

    Ed

    itorial

    Capitalismoencrisis

    Batalla

    de

    ideas

    Neoliberalismorampante

    NuestraAmrica

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    4/72

    LeopoLdoMnera ruiz

    Profesor Asociado

    Facultad de Derecho,

    Ciencias Polticas y Sociales

    Universidad Nacional

    de Colombia

    1. Para qu y por qu una reformaa la educacin superior?

    La reforma est dirigida a reestructurar elmercado laboral en funcin de las nuevasformas de acumulacin del capital y de la insercin

    acrtica y subordinada en la economa global.

    Durante la segunda mitad del siglo XX, la baja

    cobertura en la educacin superior colombiana fue

    compatible con un tipo de desarrollo que no exiga

    una mano de obra especialmente cualificada. No

    obstante, los cambios en el proceso productivo,

    determinados por el postfordismo y la globalizacin,

    exigen en la actualidad la formacin de operadores

    competentes para hacer funcionar la nueva mquina

    social y productiva del capital en el pas. De lo

    contrario, la competitividad en el mercado global

    y la capacidad de consumo de los nuevos bienes y

    servicios continuar siendo muy limitada.

    El XYZ de la Reforma a la

    Ley 30 de 1992

    (Ley de Educacin Superior)

    _4 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    5/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    6/72

    _6

    En trminos generales, la educacin de las elites se concentrar en unas

    pocas universidades privadas de alto costo y en algunas estatales con tendencias

    a asimilarse a aquellas, la de los cuadros medios en el resto de las universidades

    pblicas sumidas en diferentes procesos de privatizacin o reconvertidas en mixtas

    y la de la mayora de la poblacin en la educacin tcnica y tecnolgica de baja

    calidad, poca creatividad y salarios precarios. De esta forma piensa el Gobierno de

    Santos insertar el pas en el mercado global y enganchar la educacin superior a las

    locomotoras del desarrollo.

    2. Sin embargo, de acuerdo con la Ministra de Educacin, seva a aumentar el presupuesto para la educacin superior comonunca antes en la historia colombiana.

    Si nos atenemos a las cifras dadas por la Ministra de Educacin, sin explicar

    con claridad la destinacin especfica de los recursos ni cmo se calcularon, en

    los prximos tres aos se va a incrementar el presupuesto para el sector en 1,5

    billones de pesos para generar 600.000 nuevos cupos en el pregrado y 45.000 en

    el postgrado. Para las instituciones pblicas se van a destinar 420.000 millonesde pesos frescos para generar 95.000 cupos. Adems, entre 2012 y 2022, los

    recursos nuevos llegarn a ser 11.1 billones de pesos.

    Sin duda, en trminos absolutos el presupuesto va a aumentar. Pero va a

    suceder lo mismo en trminos relativos, es decir en lo que el Estado invierte por cada

    estudiante, suma que se ha venido reduciendo notoriamente en los ltimos aos?

    Veamos:

    De acuerdo con las cifras oficiales, el presupuesto anual por cada estudiante,

    sumados los de pregrado y postgrado, inscrito en una institucin de educacin

    superior, pblica o privada, es de $4.764.164 (8,06 billones de pesos dividido por

    1.691.797 estudiantes) y el de las instituciones pblicas es de $4.557.635 (4,24

    billones de pesos dividido por 930.307 estudiantes). Ambos son menos de la mitad

    del presupuesto per cpita mexicano.

    En virtud de la reforma se van a destinar 1,5 billones de pesos para los tres

    primeros aos, con el propsito de generar 645.00 cupos nuevos. Es decir, por cada

    estudiante nuevo se van a invertir $2.325.581 para el primer trienio, $775.194 por

    ao: unasexta parte de lo que se invierte en la actualidad. No hay que olvidar que el

    76% de los cupos nuevos debe ser ofrecido por instituciones oficiales y que despus

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    7/72

    Fotografa:JavierGuqueta

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Subversiones intelectuales Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    8/72

    _8

    de 2014 los cupos debern seguir aumentando hasta llegar a un 64% de la

    tasa bruta de cobertura.

    A las universidades pblicas, que tienen un dficit acumulado cercano a

    los 715.000 millones de pesos, se les asignar un poco ms de la mitad del

    mismo, 420.000 millones de pesos en los tres aos, con el propsito de que

    ofrezcan 95.000 cupos nuevos: $4.421.052 por estudiante para el trienio,

    $1.473.684 cada ao.Menos de una tercera parte.

    Desde luego, estas proyecciones son meramente ilustrativas, pues

    los 645.000 cupos nuevos son la meta para el tercer ao y para llegar aella se debe seguir un aumento progresivo. Sin embargo, si calculamos el

    presupuesto per cpita necesario de acuerdo con el que actualmente existe

    en las instituciones pblicas, los 1.5 billones de pesos solo serviran para

    329.118 cupos nuevos en un ao, conservando una calidad de la educacin

    mediana y baja.

    No es necesario hacer ms operaciones, aunque desde luego pueden

    ser afinadas, para deducir que en las instituciones pblicas el presupuesto

    por estudiante se va reducir y que, por consiguiente,si se aprueba la reforma,el presupuesto relativo de las instituciones pblicas va a disminuir.

    Dos datos ms permiten confirmar este clculo. Si se estima que por

    cada treinta estudiantes es necesario un profesor de tiempo completo,

    promedio muy superior al actual, se deberan contratar 21.500 docentes

    para atender los nuevos cupos. Si se les pagara un salario promedio bajo,

    comprendidos todos los gastos laborales, de $2.500.000 mensuales, slo

    la nmina costara cada ao $650.000 millones de pesos. En tres aos

    superara el presupuesto previsto en la reforma para el periodo comprendido

    entre 2012 y 2014. No quedaran recursos para laboratorios, proyectos

    de investigacin, aulas, honorarios de los auxiliares de docencia, equipos

    informticos, etc.

    Para los subsidios de sostenimiento, matrcula y tasas de inters se

    prevn $915.000 millones de pesos: $472.868 por ao para cada uno de

    los 645.00 cupos nuevos. Con tan pocos recursos se podr bajar la tasa

    de desercin del 45%? El gobierno no est haciendo demagogia con cifras

    absolutas gigantescas que en trminos relativos son diminutas? Si se

    quiere ofrecer una educacin superior de calidad no se debe tener en cuenta

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    9/72

    el presupuesto por estudiante en las universidades pblicas y privadas de

    calidad que hay en Colombia, el cual flucta entre 10 y 22 millones por

    ao? No se deberan incrementar paulatinamente los recursos para la

    educacin superior como un porcentaje del presupuesto de gastos de la

    nacin, teniendo como referencia las instituciones que el mismo gobierno ha

    considerado de alta calidad?

    3. Con este presupuesto se puede ofrecer una educacin

    de calidad, incluso si el nico criterio son las competenciaslaborales?

    La reforma no est orientada a crear una educacin superior de calidad,

    sino a convertir el modelo del SENA, cuya educacin para el trabajo fue

    deformada durante el gobierno de Uribe al disfrazarla de educacin tcnica

    y tecnolgica de calidad, en la principal alternativa de educcin superior

    para la juventud colombiana, especialmente para los sectores ms pobres

    de la poblacin. As no tendremos derecho ni a una educacin para el trabajo

    pertinente, ni a una educacin tcnica y tecnolgica de calidad.Para inflar las estadsticas de cobertura, el gobierno de Uribe, en un

    poco ms de un ao, entre noviembre de 2009 y diciembre de 2010, le dio la

    certificacin de calidad a 72 programas del SENA. Bati as todos los records

    latinoamericanos y mundiales. Ese es el camino que desea seguir el gobierno

    actual: hacer una reforma para la educacin superior que se fundamente en

    una educacin para el trabajo travestida en educacin tcnica y tecnolgica

    y en una educacin superior articulada alrededor de competencias laborales

    acrticas que inhiben la capacidad creativa de los estudiantes.

    De los 465.00 cupos nuevos para los prximos tres aos, 395.000 (85%)

    deben ser generados por las instituciones tcnicas y tecnolgicas pblicas,

    incluido el SENA. De dnde van a salir los docentes especializados?

    Dnde estn los recursos para la formacin de profesores que permitan

    la innovacin que requiere el pas? Cul va a ser la inversin en los

    laboratorios indispensables para que este tipo de educacin sea de calidad?

    Se va a reducir la infraestructura a salones para jornadas triples? Es

    esta la educacin superior de calidad que no estn prometiendo? De esta

    manera vamos a superar el 13% de programas, el 8% de instituciones de

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Subversiones intelectuales Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    10/72

    _10

    alta calidad y el 13,5% de profesores con doctorado? Se ha reflexionado

    sobre el tipo de profesional que necesita Colombia para salir de la situacin

    de pobreza y violencia en la que est sumida o slo se est pensando en

    crear condiciones para la expansin de la inversin extranjera en el pas?

    La calidad implica pensar en la pertinencia social de la educacin superior

    y en los objetivos colectivos que se pretende alcanzar con ella mediante la

    formacin, la investigacin y la interaccin con el conjunto de la sociedad.

    Cualquiera que sea la manera como el gobierno entiende la calidad, est

    engaando a los estudiantes de educacin bsica o media y a los padres defamilia que esperan que en el futuro sus hijos puedan acceder a instituciones

    que les ofrezcan una educacin superior que le sirva a ellos y a Colombia, y no

    slo a un pequeo nmero de inversionistas nacionales y extranjeros.

    4. Pero de todas formas fueron retiradas del proyectode reforma las instituciones con nimo de lucro.

    Las instituciones con nimo de lucro fueron criticadas por miembros

    de la comunidad acadmica colombiana, entre ellos por rectores deuniversidades pblicas y privadas, pues son vistas como un negocio en el

    que con una baja inversin se espera sacar grandes ganancias, ofreciendo

    un producto, la educacin, que slo puede ser de calidad cuando se asume

    como una inversin social destinada a generar beneficios individuales y

    colectivos, pero no ganancias econmicas.

    No obstante, el conjunto de la reforma conserva la ideologa del

    nimo de lucro: ampliacin de mano de obra con una formacin bsica y

    flexible, baja inversin pblica que no implique una mayor carga tributaria

    y ganancias para el capital, mediante la formacin de una fuerza de trabajo

    de bajo costo. Los intereses del conjunto de la sociedad colombiana son

    totalmente olvidados.

    Adicionalmente, a pesar de las declaraciones de la Ministra, la definicin

    poco clara de las instituciones mixtas deja abierta la posibilidad de que el

    nimo de lucro se cuele por ellas y de que sean la nica alternativa para las

    instituciones pblicas que por la falta de recursos estatales se encaminen

    hacia la quiebra. En este caso, estas ltimas quedaran listas para someterse

    alRgimen de Insolvencia Empresarialcontemplado en la ley 1116 de 2006

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    11/72

    Fotografa:JavierGuqueta

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Subversiones intelectuales Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    12/72

    _12

    y consagrado en el proyecto de reforma, que curiosamente en su articulado

    excepta a la mayora de las instituciones prestadoras de servicios pblicos, por

    ser una norma aprobada solo para las instituciones con nimo de lucro.

    El nimo de lucro no ha desaparecido de la reforma.Para poder sobrevivir, las universidades pblicas colombianas cada vez se

    parecen ms a empresas productoras de mercancas: amplan la contratacin

    de profesores ocasionales a bajo costo, sustituyen las investigaciones que sus

    comunidades consideran pertinentes por consultoras rentables econmicamentepara las instituciones y los profesores, o reducen la interaccin con la

    sociedad a la denominada extensin remunerada. En consonancia con estas

    actividades, la direccin acadmica est siendo sustituida por nuevas formas

    de gerencia, poco compatibles con las actividades acadmicas, inspiradas en

    la simple eficacia econmica. De igual manera, los profesores son obligados a

    comportarse como microempresarios de sus proyectos para poder realizarlos y

    en medio del mercado de crditos acadmicos, muchos estudiantes escogen

    sus asignaturas electivas de acuerdo con un clculo de costo y beneficio de tipoeconmico y no del sentido que le desean dar a su formacin. Finalmente, la

    tendencia a privilegiar dentro de los nuevos recursos el subsidio o el crdito a

    la demanda, destinado a los estudiantes individualmente considerados, sobre

    el subsidio a la oferta, destinado a las instituciones, crea una competencia

    universitaria alrededor de la financiacin dominada por la reduccin de costos y

    no por la ampliacin de la calidad. La reforma va a agudizar estas caractersticas

    que estn deformando la educacin superior pblica con rasgos propios de las

    empresas con nimo de lucro.

    5. Acaso en la reforma no se define la educacinsuperior como un derecho?

    La primera propuesta de reforma elaborada por el gobierno de Juan Manuel

    Santos fue criticada por los rectores y las comunidades acadmicas por reducir

    la educacin superior a su condicin de servicio pblico.

    En consecuencia, la Ministra de Educacin decidi corregir el error en la

    nueva versin. La educacin superior pas a ser un derecho, un servicio y un

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    13/72

    bien pblico basado en el mrito y la vocacin. Sin embargo, el texto de la

    reforma no desarrolla en ninguno de sus artculos lo referente al derecho.

    De acuerdo con la caracterizacin contempornea ms generalizada,

    acogida por las Naciones Unidas, el derecho a la educacin tiene cinco

    componentes bsicos: la asequibilidad o disponibilidad, la accesibilidad, la

    adaptabilidad o permanencia de los estudiantes, la aceptabilidad o la calidad

    y el respeto por la diversidad. Ninguno es garantizado en el proyecto de ley,

    ni siquiera considerado en sus aspectos ms elementales.

    Cules y de qu tipo van a ser las instituciones encargadas de garantizarel aumento de la cobertura de tal forma que se realice el derecho mediante

    la oferta de diferentes alternativas de calidad? Cmo se le va a garantizar a

    los estudiantes un acceso en condiciones de igualdad y no de segmentacin

    y diferenciacin jerarquizada? Qu polticas pblicas de bienestar se van

    a implementar para evitar la desercin? Quin determina la calidad de la

    educacin superior y mediante qu mecanismos participativos? Cmo se

    va a garantizar la diversidad tnica y cultural definida por la Constitucin

    Poltica?Ninguno de estos interrogantes puede ser respondido mediante eltexto del proyecto de ley, a menos que se recurra a las virtudes mgicas y

    azarosas de la frmula manida: ms cobertura con menos recursos relativos.

    6. La reforma no estructura por primera vez unsistema de educacin superior en Colombia?

    El sistema que supuestamente va a organizar la nueva ley es ms

    bien un embrollo o conjunto amorfo donde caben todas las instituciones

    relacionadas con la educacin superior en una unidad sin diferenciaciones

    internas, sin funciones, sin una estructura jerrquica y sin articulaciones con

    los otros sistemas educativos.

    En este maremgnum educativo solo sobresale la omnipresencia del

    Estado y de sus dependencias como reguladores absolutos de la amalgama

    educativa. Todas las IES (Instituciones de Educacin Superior) tienen

    autonoma sin que nadie se haya preguntado por el origen acadmico de

    la misma, el cual se basa en la existencia de comunidades acadmicas

    productoras de sentido social y societal y en su fundamento constitucional,

    limitado a las universidades; la educacin terciaria, como la ofrecida por

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Subversiones intelectuales Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    14/72

    _14

    el SENA, que ha servido para aumentar la estadsticas de cobertura y los

    indicadores de financiacin, es rebautizada legalmente como superior;

    los ttulos en los diferentes niveles pueden ser otorgados por todas las

    instituciones, sin importar los requisitos que debe reunir una comunidad

    acadmica para ofrecer programas de maestra y doctorado, siempre

    y cuando tenga la acreditacin de alta calidad, que es conferida por un

    gobierno con la obsesin de ampliar la cobertura a toda costa; todas pueden

    organizarse por ciclos, y los dos organismos sistmicos -el CESU (Consejo

    Nacional de Educacin Superior) y el SUE (Sistemas de UniversidadesEstatales)- son, en el mejor de los casos, cuerpos consultivos sin ninguna

    incidencia en la adopcin de decisiones.

    De esta manera, la existencia de comunidades acadmicas compuestas

    por miembros con altos niveles de formacin (la exigencia mnima del ttulo

    de maestra para los profesores queda reservada en la propuesta de reforma

    para las instituciones pblicas) y caracterizadas por comprender en su

    complejidad campos de conocimiento diversos, interactuar permanente con

    la sociedad y articularse alrededor de la investigacin, pierde su relevanciaante cualquier tipo de institucin que sea considerada por el Estado como

    de alta calidad y que en consonancia con tal calificacin tenga la patente

    de corso para expedir todo tipo de ttulos.

    Este embrollo no constituye un simple recurso retrico destinado a

    producir una eficacia simblica limitada dentro de la nueva norma, es decir,

    a generar reconocimiento dentro de algunos sectores de las directivas

    universitarias o de la comunidad acadmica que con sentido pragmtico

    pueden ver en l un gran avance hacia la constitucin de un eventual sistema

    a mediados del siglo XXI, sino que permite, adems, ampliar los mbitos de

    intervencin del Estado en desmedro de la autonoma universitaria, seguir

    jugando nacional e internacionalmente con las estadsticas de cobertura y

    de financiacin al fusionar toda la educacin terciaria y superior en la masa

    de las IES y convertir la denominacin universidad, que contiene una rica

    historia social, poltica e institucional, en una especie de ttulo nobiliario

    postrevolucionario: intil y con muy poca incidencia prctica.

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    15/72

    Foto

    grafa:JavierGuqueta

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Subversiones intelectuales Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    16/72

    _16

    7. Tampoco hay una ampliacin de la autonoma?Como se dijo con anterioridad, la autonoma se extiende a todas

    las instituciones de educacin superior (IES) sin ninguna diferencia.

    Fundamentalmente se trata de una autonoma empresarial, de gestin, para

    rendirle cuentas transparentes a un gobierno que en forma heternoma

    define el derrotero del sector y se reserva la facultad omnmoda de reconocer

    o no a las instituciones que participan en l.

    La exclusin de los consejos acadmicos, conformados en su mayora

    por los miembros de las comunidades acadmicas, de los rganos degobierno, para incluirlos posteriormente, mediante un eufemismo, como

    cabezas de una direccin acadmica supeditada al consejo superior, con las

    caractersticas de una junta directiva, no es sino el smbolo del desprecio por

    la autonoma universitaria que campea en todo el texto de la reforma.

    La funcin de inspeccin y vigilancia, de la cual afortunadamente

    se suprimi la inconstitucional intervencin directa en las instituciones

    que incluso estaba prevista como medida preventiva, centrada en los

    compromisos de cumplimiento y en la tipificacin abierta e imprecisa de lasfaltas1, tiene ms bien las caractersticas de una funcin disciplinaria y de

    control institucional.

    En trminos financieros, la reforma mantiene las restricciones

    presupuestales que atentan contra la autonoma universitaria y, en contra de

    los fallos reiterativos de la Corte Constitucional, somete los nuevos recursos

    financieros a condicionamientos gubernamentales.

    Al igual que la ley 30, el proyecto del gobierno solo reconoce una autonoma

    institucional restringida en cabeza de las directivas que, a su vez, seguirn

    siendo nombradas en las universidades pblicas por Consejos Superiores,

    1 Artculo 103 del proyecto: El incumplimiento de las disposiciones consagradas enla ley y en las normas institucionales, particularmente respecto de la direccin ygobierno, y la prestacin del servicio educativo, por las instituciones autorizadas paraprestar el servicio o por sus directivos, dar lugar a la iniciacin de las investigacionescorrespondientes por parte del Ministerio de Educacin Nacional y, previa observanciadel debido proceso, a la imposicin de las sanciones y medidas correctivas que seindican en la presente ley.

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    17/72

    en los que la representacin de la comunidad universitaria es claramente

    minoritaria y la influencia del gobierno nacional o departamental decisiva.

    Tampoco se reconoce una autonoma sistmica. En el CESU (Consejo

    Nacional de Educacin Superior) las universidades slo tienen dos

    representaciones directas en un conjunto de diez y siete miembros, las del

    Rector de la Universidad Nacional de Colombia y la del Presidente del SUE,

    mientras el gobierno tiene seis, incluido el Director del SENA, el denominado

    sector productivo dos, las asociaciones profesionales uno, y las IES en su

    conjunto los seis restantes. El CNA, a su vez, estar integrado por miembrosnombrados por el CESU, y la CONACES (Comisin Nacional Intersectorial de

    Aseguramiento de la Calidad de la Educacin Superior) por tres miembros

    del gobierno y uno del sector productivo. Es decir, en la regulacin de la

    calidad de la educacin superior no participan las universidades, tampoco el

    resto de las IES, a menos que lo hagan como invitadas especiales. Solo el

    SUE (el retrico Sistema de Universidades Estatales) tiene una composicin

    mayoritaria de las universidades, pero para cumplir tareas operativas y de

    racionalizacin y optimizacin de los recursos. La autonoma sistmica noest ni siquiera en los bordes ms lejanos del horizonte de sentido de los

    reformadores y, por consiguiente, las universidades no van a tener la ms

    mnima injerencia en la formulacin de las polticas pblicas para el sector o

    en el gobierno externo de las instituciones.

    8. De acuerdo con la Ministra, el ltimo proyecto dereforma fue el resultado de una amplia participacin dela comunidad acadmica en el debate.

    Los ltimos gobiernos, y tambin las autoridades acadmicas de las

    universidades pblicas, han ido institucionalizando lo que en teora poltica

    se denomina una simulacra: la participacin de la sociedad en debates

    destinados a legitimar decisiones previamente adoptadas, la cuales solo

    sufren retoques en virtud del proceso participativo.

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Subversiones intelectuales Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    18/72

    La disrupcin del tiempoContra toda previsin ha irrumpido una nueva Idea,

    una nueva forma de pensar y transformar el quehacer

    universitario. Ha surgido la Constituyente Universitaria como

    potencia creadora en la Universidad del Tolima en medio de

    las ms duras condiciones de silenciamientos, provocaciones

    y descalicaciones; como fantasma ha tomado el rostro

    de nueva esperanza que recorre el Desierto de lo Real

    para construir otro tiempo, otra manera de producir un

    nuevo sentido de la vida universitaria. Naci un discurso

    sin permiso, una voz desde abajo, una idea que rompi la

    modorra, el apoltronamiento y la naturalizacin con la

    vieja institucin clientelar y regional que ha resultado

    ser funcional a la lgica de la poltica neoliberal, la cual se

    articula maravillosamente en lo local con la mentalidad de

    la servidumbre voluntaria (La Boitie) y las ensoaciones del

    rgimen seorial-hacendatario (Antonio Garca Nossa).

    La Constituyente Universitaria:Una idea disruptiva delsaber y de la potencia

    FilsofoUniversidad Nacional

    de ColombiaProfesor Titular

    Universidaddel Tolima

    Jorge gantivaSilva

    solo hay conocimientos a modo de relmpagos.

    hacer saltar del continuo del curso

    de la historia... es una exigencia.

    Walter Benjamin

    _18 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    19/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    20/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    21/72

    El planteamiento inicial se sita en la politizacin de lo social, la

    apertura hacia la comunidad y la ciudadana. La Constituyente arma

    que su reto es desaar el poder constituido; por eso, busca trascender

    los lmites de la participacin de los estamentos universitario, los

    saberes sometidos y las prcticas fetichizadas del sentido comn

    pragmtico-cosicado. Su Idea se perla en torno a la construccin

    del Poder Constituyente asentado en la fuerza de la comunidad

    educativa y popular que despliegue la participacin, deliberacin

    y decisin de padres, madres de familias, instituciones educativasde la regin, movimientos sociales y ciudadanos. La formacin de

    esta subjetividad mltiple recongura otra poltica, otras formas de

    organizacin y otras visiones y prcticas de la educacin y de la cultura.

    Se proyecta entonces como la posibilidad para potenciar el lenguaje,

    el habla, la voz y las miradas de esta multitud que despierta a la

    actividad pblica, democrtica y de pensamiento. En esta direccin,

    la Constituyente abre un espacio social para producir una verdad

    construida colectivamente sobre la Universidad Pblica, su sentido,sus campos, sus relaciones de saber y de poder.

    La Constituyente Universitaria es una propuesta que incorpora

    el Programa Mnimo de los estudiantes, organizados en la Mesa

    Amplia Nacional Estudiantil, MANE, y lo articula con la idea de

    construir una propuesta alternativa de educacin superior. En este

    sentido, se hermanan las distintas iniciativas nacionales y regionales

    para enfrentar la reforma de la ley 30. Previo a la convocatoria del

    paro nacional universitario del 12 y 13 de octubre, la propuesta de

    Constituyente Universitaria desa la verdad constituida y asumi la

    tarea de construir un derrotero ante la profunda crisis interna que vive

    la universidad y asumi los retos ante la poltica neoliberal del gobierno

    nacional y regional. El vigoroso movimiento cont con la amplia

    participacin y procesos de deliberacin mediante una pluralidad de

    acciones colectivas y asambleas generales que denieron lneas de

    pensamiento y movilizacin que conectaron con la convocatoria del

    paro nacional universitario.

    Esta Idea de la

    Constituyente

    Universitaria tiene

    el fuego juvenil

    y el encanto

    de la potencia

    contra el hasto

    de la democracia

    representativa,formal, cnica

    y vaca. La

    que empieza a

    abrirse paso,

    con sus propias

    limitaciones, es

    la democracia

    profunda queel pensamiento

    crtico ha dibujado

    a lo largo de

    la experiencia

    histrica de la

    resistencia y de

    la emancipacin.

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Batalla de ideas Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    22/72

    _22

    El proceso surgi desde abajo, desde mbitos no estamentales

    que reclamaban un empoderamiento de una subjetividad

    desconocida que empezaba a reconocerse como voz rebelde

    y creativa desde su sencillez humana. No haba sabihondos, ni

    formatos; solo los adversarios reclamaban hojas de ruta, reglas

    y justicaciones jurdicas. En su sabidura la Junta Constituyente

    admiti que esta problemtica sera abordada sobre la base de la

    politizacin del proceso, el reconocimiento de los autoaprendizajes

    formativos y organizativos de la subjetivizacin creadora. Losreparos cayeron ante la supuesta ignorancia, el desconocimiento

    de la ciencia jurdica y la ausencia de las bendiciones del poder

    constituido. El rumbo fue otro: los sin voz empezaron a hablar,

    los desde abajo encontraron espacios de intersubjetividad crtica y

    no esperaron que llegara la cartilla o la voz salvadora. Desde su

    autonoma dibujaron su camino y sus argumentos. En este tringulo

    amoroso -sujetos, lenguaje y verdad-se ha ido potenciando esta Idea

    que articula las tareas nacionales de lucha y resistencia, y desafael tiempo histrico. Su formulacin inicial apunta a responder a la

    pregunta: Qu universidad queremos construir?

    La Causa de la democracia profundaLa esclerosis duerme la fatalidad del tiempo. La esta de los

    pueblos despierta la fuerza de la vida, del saber, de la potencia

    creadora. El consuelo de los acomodados y de los cooptados se refugia

    en la simulacin y en la servidumbre voluntaria. La historia que

    despliega la disrupcin del tiempo y la anormalidad de la vida, viene

    cargada de la fuerza utpica que mueve montaas y asume que la

    idea es poder material tan pronto se apodera de las masas. Esta Idea

    de la Constituyente Universitaria tiene el fuego juvenil y el encanto

    de la potencia contra el hasto de la democracia representativa,

    formal, cnica y vaca. La que empieza a abrirse paso, con sus propias

    limitaciones, es la democracia profunda que el pensamiento crtico ha

    dibujado a lo largo de la experiencia histrica de la resistencia y de la

    emancipacin. Profunda, porque va al fondo de los problemas; por

    Este nuevo tiempo

    ha repensado

    la construccin

    de una nueva

    subjetividad que

    busca superar los

    estrechos marcos

    de la universidad

    y trascender haciala ciudadana, las

    organizaciones

    sociales y

    populares y

    reconstruir una

    nueva relacin

    con la sociedad, el

    entorno geopolticoy el pas. El sueo,

    a todas luces, es

    utpico. No de

    otra forma puede

    superarse el

    actual estado de

    cosas y encarar

    una propuesta de

    transformacin

    democrtica de

    la universidad

    pblica.

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    23/72

    la consistencia de su pensamiento; por sus razones

    y alcances; por su horizonte de sentido y por su

    fuerza tica y creadora, por las fuerzas telricas que

    la mueven.

    Esta nueva Idea -que despierta entusiasmo

    y compromiso en amplios sectores universitarios y

    tanta oposicin en los poderes establecidos-cuenta

    con simpata y comprensin en varias universidades

    en Colombia y tiene ricas experiencias nacionalese internacionales. Repensar la Universidad Pblica

    plantea confrontar las visiones esclerotizadas del

    saber sumiso y permite cimentar las verdades de la

    nueva subjetividad, incipiente, humilde y rebelde,

    pese a sus limitaciones, con la fuerza telrica de

    imaginar otro destino, otro sentido, otra razn de

    ser. Sin lugar a dudas, Ningn pueblo desespera

    y aunque se vea obligado a esperar por obtusidad,llegar un da, despus de muchos aos, que en un

    alarde de repentina inteligencia, llevar a cabo sus

    ms elevados deseos (Karl Marx). El encanto de la

    democracia profunda radica en la reinvencin de esta

    nueva experiencia de la subjetividad crtica y plural

    entendida como interrupcin, esto es, como tiempo

    disruptivo contra el tiempo muerto del capital y

    del sistema. La Constituyente Universitaria tiene el

    propsito de suscitar la mxima potencia creadora

    de soar una nueva universidad, sin los remilgos de

    la democracia liberal-procedimental y de la lgica

    del capital. Edicar una propuesta alternativa de

    educacin superior compromete la reinvencin de la

    democracia, el protagonismo de los simples, de los

    sin voz, de la subjetividad ignorante que desafa el

    saber y el poder constituidos.

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Batalla de ideas Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    24/72

    L

    a actual administracin del presidente Santos

    inici un radical proceso de transformacin del

    esquema educativo cuyo vrtice aparece en lasfuentes de nanciamiento futuras de la Educacin Superior

    en Colombia donde claramente el Estado consolida su

    retirada de la nanciacin del sistema abriendo paso a

    inversionistas privados.

    Objetivos especcos presentados en la reforma tales

    como : i) promover mayor calidad; ii) generar condiciones para

    que ms colombianos ingresen y se graden de la educacin

    superior; iii) ampliar y exibilizar la oferta de programas; iv)

    promover el acceso y la permanencia de los estudiantes en

    el sistema, y v) fortalecer de las fuentes de nanciacin y la

    participacin regional, esconden verdaderas intenciones de

    mercantilizar mucho ms el sistema educativo por la va de

    consolidar cuasimercados.

    A la luz de la actual administracin, permitir la inversin

    privada directa a travs de alianzas pblico-privadas y de la

    transformacin de instituciones de educacin superior en

    La batalla por el derechoa la educacin en lasociedad neoliberal:

    Colombia 2011

    Politlogocolombiano

    CarloSWladimirgmez CrdenaS

    _24 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    25/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    26/72

    _26

    Estos argumentos se corresponden con la problemtica situacin que vive

    el sector educativo en nuestro pas. La oferta de las instituciones es insuciente,

    generndose niveles de cobertura y calidad incluso inferiores a los de la regin. (Tabla

    2; Tabla 3; Tabla 4; Tabla 5.)

    Tabla 1. Argumentos ociales para adelantar la reforma a la Educacin Superior en Colombia

    Tipode ArgumenTo ArgumenTo

    Estructural - Cobertura -

    Permanencia

    Entre 2000 y 2010, el nmero de bachilleres que no ingresaron

    a la educacin superior o que ingresaron, pero en algn

    momento desertaron de ella, fue de 3.226.000.

    Estructural - Calidad

    12 aos despus de entrar en funcionamiento el sistema de

    acreditacin, tan slo el 13% de los programas de pregrado

    cuenta con acreditacin de alta calidad y apenas el 13,5% de los

    docentes en tiempo completo equivalente cuenta con doctorado,

    lo que sumado a la baja produccin cientca y visibilidad de la

    misma origina que ninguna universidad colombiana aparezca

    entre las 15 primeras de Amrica Latina ni entre la primeras 500

    del mundo.

    Estructural -

    Financiamiento

    Para adelantar las anteriores medidas se deben incrementar los

    recursos pblicos y privados para el sector.

    Fuente: Elaboracin propia a partir de documentos del Ministerio de Educacin Nacional - MEN.

    Tabla 2. Tasa bruta de cobertura (censo 2005)

    Ao 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010*

    MatrculaPregrado

    937.889 996.688 1.063.183 1.137.772 1.219.954 1.306.520 1.424.631 1.493.525 1.587.928

    Poblacin17- 21

    3.839.783 3.885.777 3.942.893 4.001.081 4.064.849 4.124.212 4.180.964 4.236.086 4.285.741

    Tasa deCoberturaura

    24,40% 25,60% 27,00% 28,40% 30,00% 31,70% 34,10% 35,30% 37,10%

    Fuente: MEN SNIES, DANE *Informacin preliminar

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    27/72

    Tabla 3. Tasa de cobertura en amrica latina 2008

    Tipode ArgumenTo ArgumenTo

    Promedio Amrica Latina y el Caribe 38,00%

    Blgica 62,30%

    Mxico 27,20%

    Brasil 34,40%

    Colombia 35,40%

    Ecuador 42,40%Panam 45,10%

    Chile 54,80%

    Uruguay 64,90%

    Cuba 121,5%

    Fuente: UNESCO

    Tabla 4. Tasa bruta de cobertura (censo 2005)Variables 2004 2005 2006 2007 2008 2009

    NBC 43 50 55 55 55 55

    Nmero de estudiantesevaluados

    81.996 3.885.777 3.942.893 4.001.081 4.064.849 4.124.212

    Fuente: ICFES

    Tabla 5. . Calidad: docentes por nivel de formacin

    Nivel de

    Formacin2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009

    %

    2009

    Pregrado 39.063 38.985 38.597 39.265 39.616 42.929 46.555 46.741

    Especializacin 27.420 38.985 38.597 36.221 37.979 36.406 37.958 38.076

    Magister 14.414 15.457 17.309 19.657 19.471 19.288 21.026 21.093

    Doctorados 2.445 2.617 2.871 3.193 3.540 3.522 4.105 4.578 4.14

    Total 83.342 90.303 92.537 98.336 100.606 102.145 109.644 110.488

    Fuente: MEN SNIES

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Batalla de ideas Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    28/72

    _28

    Para el gobierno nacional en Colombia se necesita invertir ms recursos

    en educacin si se quiere ampliar la cobertura y mejorar calidad. Dentro de su

    retrica, invertir en la educacin es el mejor negocio que puede hacer un pas.

    Sin embargo, la propia propuesta de reforma reconoce abiertamente

    que no resolver los problemas de nanciamiento del sector (Tabla 6):

    () el Gobierno es consciente de que los recursos pblicos no son

    sufcientes, e incluso son limitados. Por eso, la propuesta plantea,

    adems del incremento en los aportes a las instituciones deeducacin superior, la inversin privada en el sector. La propuesta

    de Reforma no plantea que gracias al incremento de los aportes de

    la Nacin se resuelvan todos los problemas de fnanciacin de las

    universidades pblicas. Sin embargo, estamos seguros de que, gracias

    al planteamiento de un conjunto de medidas adicionales, sumado

    al mejoramiento de la gestin interna, el proyecto s aporta a la

    solucin.1

    1 Vase: ABC del proyecto de reforma a la educacin superior en Colombia.

    Disponible en lnea en: http://www.mineducacion.gov.co/cvn/1665/w3-article-266644.html. Fecha de Consulta: 14 de julio de 2011.

    FuenTe monTo porcenTAje

    Aportes directos de la Nacin y las entidades

    territoriales

    $2,48

    billones59.8%

    Generacin de recursos propios que cada institucin

    consigue en el ejercicio de sus labores misionales de

    formacin, extensin e investigacin

    $1,66

    billones40.2%

    Fuente: Elaboracin propia a partir de datos del MEN

    Tabla 6. Estructura del fnanciamiento pblico de la educacin superior en

    Colombia para el ao 2011

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    29/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    30/72

    _30

    favorecen a estas ltimas con estructuras de cuasimercados distorsionados

    por el propio Estado hacia los intereses de la inversin privada.

    En estos trminos, la actual reforma propone un esquema de fnanciacin

    para las universidades pblicas, consideradas en conjunto, que no solamente

    prolongara sino agravara la progresiva disminucin de sus presupuestos,

    expresados como porcentaje del PIB, en especial de los destinados a

    fnanciar obligaciones recurrentes, en contraste con la importancia creciente

    que tiene la educacin superior y su correspondiente fnanciacin en los

    pases de ms acelerado progreso econmico.2La propuesta de ley que cursa en estos momentos en el Congreso de

    la Repblica es ambiciosa en metas, pero falaz en la asignacin de recursos

    para el cumplimiento de las mismas. El presidente Santos pretende durante

    su administracin pasar de una cobertura del 37% al 50%, lo que implicara

    la generacin de ms de 500.000 nuevos cupos. Aunque esta meta sea

    importante, sus medios de fnanciacin son inconsistentes.

    Como se ve, el aspecto de la fnanciacin del Sistema es el punto

    ms rechazado de la propuesta ofcial. Tanto directivos, como docentesy estudiantes de las universidades pblicas y privadas coinciden en que el

    proyecto abre la puerta para que las universidades puedan declararse en

    quiebra y liquidarse como empresas privadas si no son autosostenibles.

    La comunidad acadmica en general conoce la experiencia colombiana

    con otros servicios pblicos fundamentales como la salud y los propios

    servicios pblicos domiciliaros, donde se adelantaron esquemas de

    desfnanciamiento estatal bajo estructuras de cuasimercados y escenarios de

    abierta mercantilizacin de lo pblico, lo cual le puede suceder a la educacin

    en su nivel superior. Frente a este panorama habr que movilizar a la nacin

    entera bajo la consigna de Unidad, Resistencia y Lucha frente al apartheid

    educativo planteado por la administracin de Santos.

    2 Vase: Documento sobre el proyecto de reforma a la ley de educacinsuperior. Universidad Nacional de Colombia. Disponible en lnea en: http://

    www.bogota.unal.edu.co/reforma/doc _ ref _ ley30 _ bog.pdf (Fecha deconsulta 23 de julio de 2011).

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    31/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    32/72

    E

    l pasado 4 de Octubre, la Ministra de Educacin

    de Colombia, Mara Fernando Campo, radic de

    forma ocial el proyecto de Reforma de la Ley30 de Educacin Superior. Uno de los elementos claves

    de la reforma propuesta es el incremento de los recursos

    canalizados a la educacin superior a travs de crditos. De

    esta forma, el gobierno espera incrementar la cobertura de

    la educacin superior y promover el acceso de estudiantes

    de bajos ingresos a la universidad. Cerca del 40% de los

    recursos nancieros incluidos en el proyecto de reforma estn

    destinados a apoyar el programa de crditos estudiantiles

    del ICETEX. El gobierno propone especcamente ofrecer

    crditos con tasa de inters real a estudiantes de bajos

    ingresos, con condonaciones de hasta el 25%, sujetas ambas

    condiciones a la disponibilidad de recursos del Estado. Esta

    situacin ha creado un masivo debate sobre la viabilidad de

    la reforma propuesta.

    Desde la perspectiva del actual debate que est teniendo

    lugar en Colombia, es til observar la experiencia de otro

    pas en el cual se est utilizando crdito para incrementar el

    Crdito para laEducacin Superior:Lecciones del

    caso de Chile

    Analista del Comitpor la Anulacinde la Deuda del

    Tercer MundoCADTM

    danielmunevar

    _32 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    33/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    34/72

    _34

    Un buen lugar para iniciar el anlisis es la evolucin

    del nmero de estudiantes matriculados en la educacin

    superior. Entre 1990 y 2007, este nmero prcticamente

    se triplic, pasando de 245 mil estudiantes a 678 mil4.

    Las grandes beneciarias de esta dinmica han sido las

    universidades privadas de Chile, toda vez que durante este

    periodo el nmero de estudiantes matriculados en ellas se

    ha multiplicado por diez. La expansin en la matrcula no se

    ha dado a travs de la creacin de nuevas instituciones, sinode la apertura de nuevas sedes universitarias. Esto permite

    explicar la alta concentracin de receptores de crditos en un

    nmero reducido de universidades privadas de baja calidad.

    En el caso del CAE, 6 universidades concentran el 60% de los

    beneciarios de este tipo de crdito5.

    Debido al hecho de que el gasto pblico en educacin

    creci por debajo del ritmo de la expansin de las matrculas,

    los costos de la educacin superior empezaron a recaer deforma creciente sobre los estudiantes y sus familias. Mientras

    que en el resto de los pases de la OECD el Estado asume el

    70% de los gastos de la educacin superior, en Chile slo lo

    hace en un 15%, y las familias deben asumir cerca del 80%

    restante de los gastos6. De tal forma, las familias no solo

    se han visto obligadas a nanciar una parte cada vez ms

    importante de los gastos en educacin, sino que al mismo

    tiempo, ante la falta de controles sobre los costos de las

    matrculas, se ha dado un masivo encarecimiento de stas.

    As, entre 1995 y 2005, su costo en la educacin superior ha

    aumentado en un 58%. Dicha situacin ha convertido a la

    educacin chilena en la ms costosa del mundo en trminos

    4 OECD (2009), La Educacin Superior en Chile : 37.

    5 Banco Mundial (2011), Programa de Crdito con Aval delEstado (CAE) en Chile : 59.

    6 Ibd., 4 : 232, 237.

    En trminos prcticos,

    este tipo de modelo

    funciona en beneficio

    de las instituciones

    de educacin superior

    privadas, las cuales

    pueden cobrar altas

    matrculas otorgando

    una educacin demnima calidad.

    Ganan, as mismo,

    las instituciones

    financieras que

    manejan la cartera

    de crdito educativo,

    las que, en el caso

    chileno, obtienenbeneficios anuales

    superiores a los 50

    millones de dlares.

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    35/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    36/72

    _36

    de bajos ingresos representan ms de las dos terceras

    partes de los prestamistas del programa. En el caso

    del quintil de ms bajos ingresos, se observa una

    imagen dramtica si se tiene en cuenta que los

    crditos llegan a representar 2 veces el ingreso de los

    estudiantes de dicho quintil11.

    Dada esta situacin no es sorpresivo encontrar

    altas tasas de impago en los crditos del sistema

    debido a que los volmenes de endeudamiento dejanen una situacin comprometedora a los estudiantes

    que los adquieren para entrar a la educacin superior.

    En el caso del FSCU, el coefciente de recuperacin de

    los crditos otorgados ha cado de forma sostenida

    entre 2000 y 2005, pasando de un 64 a un 45%12.

    Los crditos otorgados a travs del CAE tambin

    han experimentado el mismo proceso con un

    incremento en la moratoria que alcanza ms del 30%de la cartera, siendo los quintiles ms bajos los que

    presentan las tasas ms altas de crdito en mora13.

    Dicha situacin no representa una cuestin menor,

    dado que el pago de estas obligaciones se extiende

    por un periodo de entre 15 y 20 aos, por lo que los

    estudiantes egresados con crditos en mora pueden

    experimentar posteriormente serios problemas a la

    hora de obtener empleo o acceder a crdito para la

    compra de vivienda.

    Esta breve panormica del impacto del

    fnanciamiento va crdito del sistema de educacin

    superior en Chile deja una imagen bastante

    desoladora. En trminos prcticos, este tipo de

    11 Ibd., 6: 44.

    12 Ibd., 5: 120.

    13 Ibd., 6: 52-53.

    Con este modelo pierde

    el sistema educativo en

    su conjunto, toda vez que

    el acceso a educacin de

    calidad se ve restringido

    a la capacidad de pagar

    las matrculas ms caras

    del sistema. Pierden

    la investigacin y eldesarrollo tecnolgico,

    en la medida que la

    obtencin de beneficios

    en el corto plazo que

    gua las decisiones de las

    universidades privadas

    no pasa por destinar

    recursos para este fin.Tambin pierde el Estado

    chileno, pues los crditos

    en mora son respaldados

    por garantas ofrecidas por

    ste. Ms importante an,

    pierden los estudiantes

    y familias que deben

    sacrificar sus ingresos y

    patrimonio para acceder

    a lo que es en primera

    instancia un derecho que

    debe ser garantizado de

    forma gratuita y universal

    por el Estado.

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    37/72

    modelo funciona en benecio de las instituciones

    de educacin superior privadas, las cuales pueden

    cobrar altas matrculas otorgando una educacin de

    mnima calidad. Ganan, as mismo, las instituciones

    nancieras que manejan la cartera de crdito

    educativo, las que, en el caso chileno, obtienen

    benecios anuales superiores a los 50 millones de

    dlares14. Sin embargo, pierde el sistema educativo

    en su conjunto, toda vez que el acceso a educacinde calidad se ve restringido a la capacidad de

    pagar las matrculas ms caras del sistema. Pierden

    la investigacin y el desarrollo tecnolgico, en la

    medida que la obtencin de benecios en el corto

    plazo que gua las decisiones de las universidades

    privadas no pasa por destinar recursos para este n.

    Tambin pierde el Estado chileno, pues los crditos

    en mora son respaldados por garantas ofrecidas porste. Ms importante an, pierden los estudiantes y

    familias que deben sacricar sus ingresos y patrimonio

    para acceder a lo que es en primera instancia un

    derecho que debe ser garantizado de forma gratuita

    y universal por el Estado.

    En otras palabras, como lo estn manifestando

    los cientos de miles de estudiantes chilenos que se

    han tomado las calles de ese pas durante los ltimos

    meses, la leccin que nos ofrece Chile, donde se

    somete el acceso a la educacin superior al crdito,

    es una que es mejor no escuchar ni aplicar.

    14 Ver, Economista Marcel Claude seala quedeuda de estudiantes subi 28 veces, disponibleen: http://www.biobiochile.cl/2011/08/04/

    economista-marcel-claude-senala-que-deuda-de-estudiantes-subio-28-veces.shtml 26 de Octubre, Medelln

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Batalla de ideas Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    38/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    39/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    40/72

    econmica (fundamentalmente respecto a los

    aspectos internacionales) en los Estados Unidos

    durante, por lo menos, las tres ltimas dcadas.

    Bastara recordar que entre el staff de

    investigadores se encuentran figuras acadmicas

    que trabajan en varias de las ms prestigiosas

    universidades de los Estados Unidos y su equipo

    permanente, en algn momento y la mayora de

    veces en simultneo, estrecha vnculos carnalescon los principales organismos gubernamentales,

    estatales y multilaterales con sede en

    Washington empezando por la Presidencia de

    la Repblica y tambin con el complejo circuito

    de lobby alrededor de Wall Street. No obstante,

    entre todos ellos, sobresale especialmente

    uno, John Williamson, economista que desde

    hace un par de dcadas salt a la fama por dar

    a luz el Consenso de Washington. De hecho, elInstituto para la Economa Internacional fue la

    institucin responsable de organizar durante

    1989 las conferencias en las cuales tuvo lugar el

    tristemente clebre Consenso y, tiempo despus,

    sus sucesivas versiones2. Esta breve resea

    ya pone en perspectiva sobre quines estamos

    hablando y las nuevas frmulas que intentan

    promocionar.

    El texto del discurso en segundo trmino-

    inicia resumiendo la situacin actual de la

    economa usamericana. Bergsten advierte, entre

    otras cosas, que los Estados Unidos importa hoy la

    mitad del petrleo que requiere su economa; que

    casi la mitad de los balances contables de las 500

    2 Sobre las diferentes versiones del Consenso deWashington, cfr. Puello-Socarrs, J.F., Nueva

    Gramtica del Neoliberalismo, Bogot, UniversidadNacional de Colombia, 2008: www.espaciocritico.com.

    La globalizacin

    a la que se refiere

    aqu y adula hasta el

    paroxismo Bergsten es

    evidentemente aquella que

    favorece en exclusiva los

    intereses de los capitales

    usamericanos, es decir, la

    globalizacin de carcterneoliberal, la cual en

    estos momentos, en su

    concepto, debera avanzar

    hacia su fase superior: el

    libre comercio (total).

    _40 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    41/72

    primeras compaas usamericanas se derivan de operaciones internacionales3;

    que la mayora de la deuda del gobierno pertenece a los inversores extranjeros,

    capital que, segn Bergsten, financia buena parte de la inversin domstica

    requerida para mantener un crecimiento econmico decente y que gracias al

    dficit comercial registrado por ese pas durante ms de 30 aos, los Estados

    Unidos es hoy el primer deudor mundial: posee una deuda externa bruta total

    de aproximadamente U$23 trillones -la mayora en manos de China, Rusia y

    varios pases del Medio Oriente, precisamente (qu casualidad!) los principales

    exportadores de petrleo y pide prstamos al mundo del orden de U$500billones anuales.

    Subrayaba adems el deterioro de la importancia econmica de los Estados

    Unidos en trminos mundiales, la cual viene literalmente en picada. Desde la

    Segunda Guerra Mundial la economa usamericana haba aportado el 50% al PIB

    mundial mientras que en este momento significa no ms del 20% (septiembre

    de 2011), sin contar el estancamiento de los salarios promedio por ms de una

    generacin y que la distribucin del ingreso tiende a empeorar cada vez ms.

    Desde luego, el panorama presentado, de ninguna manera, es halagador.

    Para Bergsten, la situacin de crisis profunda en la que se encuentra laeconoma usamericana, sin embargo, puede ser revertida: lejos de modificar el

    rumbo de las decisiones hasta ahora adoptadas -y que segn varios analistas

    en su propio pas son las mismas que han acelerado las contradicciones

    econmico-polticas que se extienden globalmente de lo que se trata ahora

    es de profundizar, hasta sus ltimas consecuencias, el modelo de desarrollo

    vigente (trmino con el cual eufemsticamente se denomina a las estrategias de

    expansin imperial en el capitalismo contemporneo) y, en particular, aquel que

    ha rendido grandes beneficios para los capitales usamericanos: la globalizacin.

    A pesar de los problemas por los que atravesara la economa usamericana,

    el balance en este sentido explica consistentemente esta apuesta: Los

    Estados Unidos han ganado enormemente con esta globalizacin. Nuestro

    pas dice Bergsten cada ao es mucho ms rico en ms de U$1 trilln

    3 En esto llama la atencin que del total de la deuda usamericana (U$750.000.000.000.000)1) los Derivados Financieros representen el 81,13%, U$600 billones (40 veces al PIB de losEstados Unidos y 10% del mundial), y 4 bancos usamericanos concentren el 95,5% delrubro (JP Morgan Chase, CityGroup, Bank of America y Goldman Sachs); 2) la Salud: 0,34%;

    3) Medicare: 8,06%; 4) Seguro Social: 5,37%; 5) FED: 3,18%; 6) Deuda Pblica: 1,92%.Informacin del Contralor de Divisas de los Estados Unidos: www.desdeabajo.info.

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Neoliberalismo rampante Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    42/72

    gracias a la integracin comercial. Esto equivale

    aproximadamente al 10% de toda nuestra

    renta nacional y ms de U$10.000 por hogar.

    Se acumulan ventajas adicionales con la

    globalizacin financiera que ha acompaado los

    crecientes flujos comerciales (subrayo) [Nota:

    los beneficios adicionales podran aadir otros

    U$0.5 trillones al clculo]. Lo anterior por el lado

    de las ganancias.Mientras tanto las prdidas (costos en

    trminos de Bergsten) de la globalizacin para los

    Estados Unidos resultan ser bastante diferentes:

    Cerca de medio milln de trabajadores (de una

    fuerza laboral total de 150 millones) pierden su

    trabajo anualmente, la mayora por perodos

    temporales, como resultado del incremento en

    las importaciones. Algunos tienen que aceptar

    empleos con bajos salarios en el largo plazo,sufriendo una prdida en ingresos durante toda

    su vida. Esos efectos totalizan aproximadamente

    U$50 billones por ao, un monto sustancial en

    trminos absolutos pero slo un vigsimo de la

    rentabilidad anual fruto de la globalizacin

    (resalto y subrayo). Lo anterior no podra ser

    ms expresivo del deplorable y cnico estilo

    usamericano que impera en asuntos como stos

    pues los negocios son los negocios!

    La globalizacin que puede ser de diferentes

    tipos, dimensiones y magnitudes a la que se

    refiere aqu y adula hasta el paroxismo Bergsten es

    evidentemente aquella que favorece en exclusiva

    los intereses de los capitales usamericanos, es

    decir, la globalizacin de carcter neoliberal, la

    cual en estos momentos, en su concepto, debera

    avanzar hacia su fase superior: el libre comercio

    No se ha recalcado

    suficientemente que estos

    Tratados por ms que

    aludan al libre comercio

    -desde luego una

    realidad completamente

    inexistente, pues

    en la prctica se

    trata de negocios depoderosos monopolios

    transnacionales- tampoco

    son estrictamente

    de comercio. Este

    componente slo

    representa una mnima

    porcin de lo que se

    negocia en ellos. Se

    trata mejor de acuerdosde liberalizacin de

    inversiones, en los

    cuales los servicios

    (especialmente

    financieros; las compras

    estatales, los derechos

    de propiedad, etc.) tienen

    un significado muy

    estratgico.

    _42 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    43/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    44/72

    negocios de poderosos monopolios transnacionales-

    tampoco son estrictamente de comercio. Este

    componente slo representa una mnima porcin de lo

    que se negocia en ellos. Se trata mejor de acuerdos de

    liberalizacin de inversiones, en los cuales los servicios

    (especialmente financieros; las compras estatales, los

    derechos de propiedad, etc.) tienen un significado muy

    estratgico5.

    Lo anterior responde a que los Tratados, recordemos,diseados a la medida de las pretensiones usamericanas,

    reproducen las mismas estructuras productiva y de

    intereses que actualmente existen en los Estados

    Unidos despus de las transformaciones sufridas en ese

    pas desde la dcada de los 80. Hoy por hoy el sector

    manufacturero usamericano representa a lo sumo el 10%

    de la economa mientras que la agricultura no ms del

    1% y los servicios (sobre todo, los financieros) ms del

    80%. Este ltimo sector provee el 25% de los empleos yha crecido los ltimos treinta aos a tasas del 30% y con

    salarios 10% superiores a los de la manufactura.

    Bergsten sugiere precisamente que los esfuerzos

    internacionales de los Estados Unidos deben enfocarse

    y apuntar hacia all, mxime cuando en reas como

    Amrica Latina y el Caribe y en las llamadas economas

    emergentes la legislacin en estos aspectos no se

    encuentra acondicionada (o desregulada), lo cual

    supone una gran oportunidad para la apertura de los

    mercados.

    5 Cfr. Estrada lvarez, J., Derechos del Capital, Bogot, UniversidadNacional de Colombia, 2010: www.espaciocritico.com

    _44 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    45/72

    N17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Neoliberalismo rampante Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    46/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    47/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    48/72

    gigantescos salvatajes de grandes bancos y empresas privadas en

    problemas. La contracara son los millones de personas sobreendeudadas,

    muchas de las cuales han perdido sus viviendas, as como el fenomenal

    incremento del endeudamiento pblico.

    La teora de la crisis y su superacinExiste un debate terico sobre las interpretaciones de la crisis,

    con impactos en las polticas anticrisis que se procesan en las

    diferentes geografas del mundo. Existe una tendencia instalada por losorganismos financieros internacionales que remite las causas de la crisis

    a la dimensin de las finanzas y su complejidad en los instrumentos

    derivativos, la especulacin y la desregulacin del mercado del dinero,

    ttulos y acciones, restringiendo la respuestas a la necesidad de la

    regulacin y hace responsables de ello a algunos ejecutivos del mbito

    financiero. La reflexin de la REDEM apunta a destacar la complejidad del

    fenmeno de la crisis, asentando sus principales causas en la produccin,

    en tanto eje articulador del proceso integral de la economa, lo que suponela produccin, la distribucin, el cambio y el consumo.

    Pero ms all de esta consideracin esencial, la gestin del capitalismo

    en crisis actual se debate entre dos frentes de polticas econmicas.

    Uno remite al pasado reciente e insiste con las polticas ortodoxas de

    liberalizacin y ajuste, apuntando a resolver los desequilibrios fiscales

    y financieros de los Estados ms comprometidos con la situacin de la

    crisis, imponiendo la receta de la austeridad y reduccin del gasto pblico,

    especialmente el de contenido social. Al mismo tiempo se impone el

    discurso del privilegio a la iniciativa privada, las privatizaciones y las

    desregulaciones para la libre circulacin del capital, las mercancas y

    los servicios. Desde otro ngulo se sostiene una poltica econmica

    de vuelta a la intervencin estatal para reactivar la economa. La

    intencin es la bsqueda del crecimiento, estado idealizado para superar

    la desaceleracin o recesin, la que se identifica con la situacin de

    crisis. Se busca el crecimiento aun con los impactos ambientales que

    genera el modelo productivo depredador en curso, que contamina con

    la emisin de gases txicos y consume vorazmente recursos naturales

    _48 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    49/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    50/72

    relevantes, aunque de lento avance hasta la fecha, como es la utilizacin

    de una moneda comn, el uso conjunto de las reservas internacionales

    de la regin que acumulan ms de 550.000 millones de dlares, o el

    Banco del Sur.

    Las respuestas a la crisis pasan necesariamente por los pases en

    una perspectiva de articulacin productiva que potencie las relaciones

    econmicas por fuera del circuito de la hegemona del sistema del

    capitalismo. Se trata de pensar en una organizacin econmica de la

    sociedad que supere el lucro y la explotacin. La posibilidad del socialismoreaparece en el discurso renovado de la izquierda en Nuestra Amrica.

    Es una reflexin que remite a los cambios en curso en el socialismo

    cubano; a las formulaciones de un Socialismo del Siglo XXI o un

    Socialismo comunitario que emergen de Venezuela o Bolivia, incluso de

    la recuperacin de un proyecto de revolucin, tal como se enuncia en la

    Revolucin ciudadana en Ecuador.

    El debate anticapitalista recorre el anlisis y las propuestas de

    variados movimientos sociales, de trabajadores en actividad laboral, enel territorio; de comunidades y pueblos originarios; de jvenes y mujeres;

    de multiplicidad de organizaciones por reivindicaciones diversas. Es

    una constante de nuestro tiempo que exige la reflexin terica sobre

    las posibilidades de otro orden socioeconmico posible, y necesario.

    No se trata de la ilusin temprana que animaron los primeros aos de

    la objecin a la poltica neoliberal hegemnica en los 80 y 90, sino de

    pensar en la evolucin de una dcada transcurrida, sobre el estado y

    evolucin de los procesos ms radicalizados, de la capacidad de avance

    de instrumentos constitucionales de propuestas que constituyen ms

    un programa que una realidad, sea el buen vivir o la consideracin de la

    naturaleza como sujeto de derecho.

    Crtica al modelo productivo y de desarrolloEn los debates, junto a la crisis capitalista, se analizaron los cambios en

    la estructura productiva y econmica social de la regin latinoamericana

    y caribea, confirmando algunos problemas histricos, entre los que se

    destaca la dependencia econmica. Un fenmeno mltiple, financiero,

    _50 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    51/72

    econmico, tecnolgico, cultural que actualiza la

    necesaria crtica al desarrollo regional contemporneo

    y a repensar perspectivas emancipatorias, construidas

    desde las clases subalternas. En los anlisis de las

    distintas realidades de la regin, se enfatiz la tendencia

    a la primarizacin de las exportaciones en buena parte

    de los pases, destacando incluso la concentracin en

    varios de ellos en la produccin primaria exportadora,

    los agronegocios, el monocultivo, y la minera, que auncon precios internacionales en alza en la ltima dcada,

    genera condiciones estructurales de debilidad ante la

    ausencia de una diversificacin productiva. Claro que

    resulta diferenciada la situacin del Caribe y Centro

    Amrica junto a Mxico, ms afectados en la crisis por

    su articulacin estrecha con la economa estadounidense

    que lo que ocurre en el resto sudamericano, donde la

    situacin poltica adquiere mayor dinmica e impacta enuna posibilidad econmica de carcter alternativo.

    En la discusin de la REDEM se consider el modelo

    productivo mundial y en la regin, cuestionando el modelo

    de desarrollo, ya que el resultado es la consagracin de

    la pobreza, la superexplotacin y la desigualdad, con

    minoras que ostentan una calidad de vida similar o

    superior a la de las clases dominantes del capitalismo

    desarrollado. Expresin de ello son las nuevas burguesas

    hegemnicas en la regin que pueblan los listados de las

    lites de enriquecidos del mundo. Son manifestaciones

    de las reconfiguraciones de las clases dominantes, que

    deben ser estudiadas en su lgica de manifestacin y

    reproduccin, tanto como las posibles reconfiguraciones

    de las clases subalternas y sus estrategias de disputa del

    poder local, regional y mundial. Se abog por el logro de

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Capitalismo en crisis Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    52/72

    una reconfiguracin antagnica a la que manifiesta el poder, en el sentido

    de construir poder popular para la emancipacin.

    Ni optimismo ni pesimismoLa reflexin de la REDEM nos exige profundizar en nuestra indagacin

    de la realidad para su transformacin. No alcanza con buenos deseos e

    ilusiones de una fcil modificacin del cuadro social actual. Pero tampoco

    con exacerbar el poder de las clases dominantes que paraliza respuestas

    audaces en un tiempo de crisis global.La profundidad y extensin de la crisis nos convoca a renovar el

    compromiso intelectual con las aspiraciones de los pueblos de nuestra

    Amrica por la emancipacin.

    Desde la REDEM, al tiempo que nos solidarizamos con la lucha de

    los estudiantes secundarios y universitarios chilenos y de todos los

    pueblos del mundo para que la crisis no la sigan pagando los sectores

    sociales empobrecidos, los ms vulnerables, nos pronunciamos por

    ejercer el derecho al pensamiento crtico, en la mejor tradicin de lahistoria de resistencia y crtica de nuestros pueblos, contra la conquista y

    colonizacin; contra la dependencia capitalista. Es un no a la realidad de

    explotacin y un compromiso en la bsqueda de horizontes de liberacin

    social y emancipacin.

    Agustn CRiveLLi (Argentina), Antonio eLAs (Uruguay), CLAudioKAtz (Argentina), ConsueLo siLvA (Chile), CLAudio LARA (Chile),

    FedeRiCo MAnChn (MxiCo), geRMn snChez (Mxico), gLAdysheRnndez (Cuba), iRene MAestRo (Espaa), JAiMe estAy (Mxico),JAiRo estRAdA (Colombia), JAvieR MARtnez (Espaa), Jess RiveRA

    (MxiCo), JoseFinA MoRALes (Mxico), JuAn ARAnCibiA (Mxico),Judith CheRni (Argentina), JuLio gAMbinA (ARgentinA), LizA ACeves

    (Mxico), LouRdes RegeiRo (Cuba), niLdo ouRiques (Brasil),oRLAndo CAputo (Chile), RAFAeL AgACino (Chile), RAMn snChez(Espaa), Ren ARenAs (Mxico), RosA MARA MARques (Brasil).

    _52 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    53/72

    Abrazatn, 26 de octubre. Bogot.Fotografa: : http://www.facebook.com/pages/Mesa-Amplia-Nacional-Estudiantil-MANE-Colombia.

    N17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Capitalismo en crisis Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    54/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    55/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    56/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    57/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    58/72

    _58

    y el componente de autopartes nacionales es el ms

    bajo de la historia de la produccin de automotores

    en el pas.

    En los aos del kirchnerismo, se procesa

    el crecimiento econmico local, fuertemente

    concentrado y extranjerizado, tal como expresa la

    Encuesta Nacional de Grandes Empresas (ENGE)

    que realiza anualmente el INDEC en un seguimiento

    de las 500 empresas de la cpula empresarial(excluye agro y bancos). Esa evolucin econmica

    tuvo en origen dos medidas previas. Una es la

    cesacin de pagos del 2001 que liber de parte de

    los compromisos de cancelacin de deuda hasta

    la renovacin derivada del canje de deuda pblica

    de 2005 y 2010, que incluyeron dos dcadas de

    gracia para la cancelacin del principal. La otra

    fue la devaluacin de la moneda que agrav lascondiciones de penuria de la mayora de la poblacin,

    especialmente de los trabajadores y sectores de

    menores ingresos, que en ese acto y por un tiempo

    transrieron recursos al sector ms concentrado. Es

    cierto que la reactivacin econmica y del empleo

    cre mejores condiciones para la disputa del ingreso

    popular, lo que se vio reejado en la expansin de las

    negociaciones salariales y convenciones colectivas.

    Sin duda, la situacin econmica y la sensacin

    relativa a ella son causa del consenso electoral en el

    gobierno de CFK. La ampliacin del consumo tiene

    expresin en la capacidad de gastos de los sectores

    de altos y medios ingresos, tanto como en la franja

    de menores recursos.

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    59/72

    Iniciativa poltica de CFK

    Ms all de la economa, la poltica otorga seales interesantes. Durante el 2008, el

    gobierno de CFK fue objetado desde los sectores ms concentrados del agro, a los que se

    unieron las voces de otros mbitos de las clases dominantes y la derecha poltica. Esa

    situacin intervino en la derrota electoral de medio tiempo del gobierno de CFK (2009). Desde

    entonces, y especialmente con la muerte de Nstor Kirchner (octubre 2010), la iniciativa poltica

    del gobierno favoreci la disputa del consenso. Se destaca en ese sentido la nacionalizacin

    del sistema de capitalizacin de pensiones y jubilaciones; la masividad de la Asignacin

    Universal por Hijos de desempleados (abarcar a cerca de 4 millones de personas en 2012) yel matrimonio igualitario, entre otras medidas de importante aceptacin social.

    A esos argumentos debe adicionarse el capital simblico construido por el gobierno,

    tanto en el mbito de los derechos humanos y asumirse como los herederos de las Madres

    de Plaza de Mayo, como en el latinoamericanismo esgrimido contra el ALCA y en la posterior

    conguracin de UNASUR. Son elementos que enriquecen la comprensin del consenso

    generado y contribuyen a explicar el alto porcentual de votacin.

    La oposicin por derecha no pudo capitalizar el triunfo electoral del 2009 y corri

    detrs de la iniciativa gubernamental para quedar sin juego en la eleccin del 2011, al puntoque el segundo agrupamiento por votos, el FAP, se asume en la centro izquierda de las

    opciones polticas. El principal referente de la derecha partidaria, el Jefe de Gobierno de la

    Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, aspira a canalizar desde ahora el liderazgo de ese

    espacio poltico en el proceso que se inicia con el segundo mandato de CFK. Estas elecciones

    dejaron vacante el liderazgo a la derecha tradicional y fuera del gobierno. Al mismo tiempo,

    posicionaron una fuerza expectante de centro izquierda con el FAP, que an muy lejos de la

    votacin por el Frente para la Victoria (un 36% menos) emerge con un colectivo parlamentario

    y cierta capacidad de organizar sectores sociales, especialmente trabajadores de la CTA. Una

    mencin especial merece la izquierda trotskista (FIT) que, an lejos de obtener representacin

    electoral, pudo vencer su carcter testimonial y hacerse visible desde una campaa que la

    acerc a la sociedad. Los grandes perdedores de esta eleccin son los sectores tradicionales

    del peronismo y el radicalismo.

    Todas ellas son expresiones de lo que denominamos crisis poltica y bsquedas de nuevas

    representaciones. El kirchnerismo construy desde la debilidad (2003), conrm liderazgo

    sucedindose en 2007 (CFK) y luego de la derrota electoral del 2009 reconstruy consenso

    electoral (2011). En nuestra hiptesis, la disputa del consenso sigue abierta, especialmente

    desde la protesta y el conicto social.

    N 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia Nuestra Amrica Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    60/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    61/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    62/72

    Qu ruede la cinta!

    Imagnate un cerro de arena y un montn debloques listos para ser usados, cerca, unhombre de piel morena con cara un poco seria tocando

    unos bloques o ladrillos, sintiendo su aspereza, peso,

    textura, etc., a su lado -y siempre con una cmara

    de video o fotogrfica- un hombre alto y blanco que

    graba cada uno de los movimientos del primer sujeto

    que apareci en escena. Todo se desarrolla en un

    espacio amplio, un lugar pblico en donde se sientan

    las personas a ver pasar el tiempo. Pocos saben que

    va a suceder all, algunos suponen que se ir a hacer

    una construccin o algo por el estilo, mientras que los

    ms conservadores afirman que ese cerro de arena

    y bloques no debera estar regado all, en la Plaza

    Principal del pueblo.

    Bloques, cmaras, accin!

    Morrinho en

    Ojo al Sancocho

    Juan Camilo Daz

    FilsofoEstudiante Maestra en

    Historia UniversidadNacional de Colombia

    Pobres, lo que se dice pobres, son los queno tienen tiempo para perder el tiempo.

    Pobres, lo que se dice pobres, son los queson siempre muchos y estn siempre solos.

    Eduardo Galeano, Patas arriba. La escuela del mundo al revs, p.319.

    _62 Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    63/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    64/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    65/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    66/72

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    67/72

    Volver

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    68/72

    _68

    El reciente proceso electoral invita a una reexin que trascienda la estadstica

    de los resultados. Si la mirada se enfoca hacia las trasescena, son varios los

    aspectos que se podran destacar:

    1. Las conguraciones criminales y maosas del rgimen poltico colombiano

    estn lejos de superarse, pese a la campaa meditica desplegada con el

    n de debilitarlas. El mapa poltico muestra con claridad que la organizacin

    del territorio con fundamento en el ejercicio de la violencia paramilitar enconnivencia con fuerzas estatales y sectores del empresariado privado ha

    tenido, entre otros, el efecto de la institucionalizacin de poderes locales, que

    ahora legalizados se reproducen mediante el procedimiento electoral. De

    ello dan cuenta los resultados electorales en varios departamentos y en un

    sinnmero de municipios a lo largo y ancho del territorio nacional.

    2. La institucionalizacin de poderes criminales y maosos no ha sido posible o es

    mucho menos notoria en los grandes centros urbanos. All la dinmica electoral

    parece tener sus especicidades. La conformacin de una variable democracia

    de opinin, en la que las fabricaciones mediticas ocupan un lugar central,parece ser una de ellas. Se trata de corrientes de opinin expresivas de la

    constitucin de ciudadanas urbanas pasteurizadas, cuya percepcin uctuante

    deviene en fundamento de la alternancia electoral y de la gobernabilidad

    democrtica. Un cierto progresismo y una tica de capas medias son algunos

    de sus rasgos distintivos.

    3. El sistema poltico, en la forma de sistema de partidos, contina caracterizndose

    por su fragilidad y precariedad, lo cual pone en duda los alcances mismos del

    ejercicio democrtico liberal por la va electoral. No slo es notoria la ausencia

    de organizacin partidaria formal, sino ante todo la inexistencia de propuestas

    programticas salvo excepciones que apunten al debate pblico y ciudadano.

    En realidad, lo que se activa en forma consuetudinaria son maquinarias

    electorales, organizadas en algunos casos como empresas capitalistas cuya tasa

    de ganancia depende de los resultados. Si se gana, la inversin realizada ser

    recuperada a travs de la captura de rentas del Estado. Por ello, la corrupcin

    es inherente a la forma de organizacin del sistema poltico y de partidos, y

    deviene en forma importante de acumulacin capitalista.

    4. Las ausencias programticas son compensadas con la activacin de los

    variados y creativos dispositivos del marketing electoral. Como ocurre en

    Elecciones y leccionesJairo EstradalvarEz

    Volver a contenido

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    69/72

    EditorialN 17, Noviembre de 2011 Bogot, Colombia

    toda relacin de mercado, se trata de realizar una mercanca, con un valor de uso

    determinado. El discurso poltico y la propuesta programtica devienen en simulacin

    organizada, concebida a la medida de una demanda potencial, previamente estudiada.

    La competencia electoral se constituye en empresa por el control del mercado y por la

    captura de nichos de indecisos. Se trata de una organizacin capitalista del ejercicio

    democrtico, caracterizada por una creciente extensin e intensicacin de la lgica

    mercantil. Todo ello diculta an ms la identicacin de los fundamentos tericos eideolgicos de los proyectos polticos.

    5. La escenicacin del ejercicio democrtico en la forma de mercado electoral explica la

    constitucin recurrente de nuevos proyectos polticos. Muchos de ellos se hacen en

    el proceso electoral mismo, se van pregurando al ritmo de las encuestas. La historia

    poltica reciente es prolca en el surgimiento de partidos o movimientos, que se

    anuncian incluso como alternativas. Los ejemplos del Partido de la U, del Partido Verde

    y, ahora, de Progresistas anunciado como el proyecto poltico del siglo XXI, son

    sucientemente ilustrativos. En la mayora de los casos, tales proyectos se conguran

    en torno a la gura de un lder carismtico, cuya mayor o menor aceptacin dependedel tratamiento meditico.

    Si la mirada se orienta a un examen de los resultados, se podra armar:1. El gobierno de Santos avanz en su empresa de lavado de fachada ensangrentada y

    de posicionar la idea de una transicin de ruptura con las prcticas del rgimen de la

    seguridad democrtica. Sin que se haya producido un cambio denitivo en la correlacin

    de fuerzas en el bloque de poder, es evidente que el uribismo pese a mantener y considerar

    algunos poderes regionales y locales sali debilitado. Lo que sigue sern seguramente

    realinderamientos en el Partido de la U y disputas por su control. La demanda por la

    direccin formal de Uribe no es mera casualidad.

    2. El Partido Liberal es uno de los beneciados. Su recuperacin con relacin a las elecciones

    parlamentarias y presidenciales es notoria. Tras el marchitamiento de la ltima dcada, su

    adhesin a la Unidad Nacional parece estar rindiendo frutos. En el Partido Conservador,

    por el contrario, se pudo evidenciar lo que estaba oculto por su seguimiento irrestricto a las

    polticas del anterior gobierno: una debilidad estructural y una carencia de proyecto poltico

    y de cuadros.

    3. El Partido Verde aunque tuvo resultados favorables en algunas (pocas) regiones del pas,

    termin de perder la imagen de probable opcin poltica ciudadana que haba logrado

    capturar en las elecciones presidenciales. Demostr ser una fuerza poltica que en nada se

  • 8/3/2019 Revista Izquierda No 17, noviembre de 2011

    70/72

    _70

    diferencia de las prcticas que anunciaba combatir al primar el pragmatismo y el

    oportunismo poltico. Se perl denitivamente como una fuerza del centro a la

    derecha poltica.

    4. La proliferacin de coaliciones regionales y el triunfo de personeras ms que departidos o movimientos polticos es un indicador preocupante de los resultados

    electorales que desdice, como ya se dijo, de la calidad del sistema poltico. El

    espectro poltico de tales coaliciones y personeras es muy amplio e incluye a la

    llamada parapoltica.

    5. El Polo Democrtico Alternativo sufri una derrota contundente, independientemente

    de algunos resultados locales favorables, como el de Cali, que podran destacarse.

    Tal derrota tiene mltiples explicaciones. Sin duda actuaron en su contra la

    campaa meditica, el deslinde tardo de las prcticas corruptas del gobierno de

    Samuel Moreno en Bogot y su debilidad organizativa. No obstante, el problema

    parece ser ms de fondo: se trata de la naturaleza del proyecto poltico. Todo

    pareciera indicar que tal proyecto devino en proyecto meramente electoral, con

    una desconexin fuerte con las luchas sociales y populares, con una dosis fuerte

    de cretinismo parlamentario y sometido a la democracia de opinin, justamente

    por ello. La opinin simplemente mud hacia nuevas ofertas.

    Lo de Progresistas es por lo pronto un fenmeno de opinin, que puede tener

    mltiples lecturas que escapan al propsito de esta nota editorial. Sera prematuro

    decretar el surgimiento de una nueva fuerza poltica, dada la inexistencia de organicidad

    y de deniciones programticas como se entienden stas en el campo de la ciencia

    poltica. Si el proyecto se juzga por el discurso poltico, se podra armar que ste es

    eclctico y no se inscribe, en sentido estricto, dentro de una tradicin que siquiera

    pudiera caracterizarse como socialdemcrata. Se trata de un discurso, eso s, que recoge

    algunos de los temas que estn el centro de los debates tericos y polticos actuales.

    Los resultados electorales deben llamar a una profunda reexin a los proyectos

    polticos de izquierda que han hecho sus apuestas y encauzan la mayor parte de sus

    esfuerzos hacia los ejercicios electorales. Tal reexin arranca por la valoracin de la

    forma de funcionamiento de la democracia liberal y de las posibilidades transformadoras

    y de construccin de la poltica que de all se pueden der