Rutas por la ciudad

El Barroco turiasonense

Catedral de Ntra. Sra. de la Huerta

Convento de San Francisco de Asís

Convento de Ntra. Sra. de la Merced

Iglesia de la Virgen del Río

Iglesia de San Atilano

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ciudad que presiden la torre de Santa María Magdalenay el Palacio Episcopal. El pequeño templo todavía siguelos cánones de la arquitectura clasicista; sin embargo, elretablo mayor, esculpido en el taller bilbilitano de lafamilia Ibáñez, pertenece ya al pleno barroco.

Finalmente, en el barrio del Cinto, en el solar dondese encontraba la casa de sus padres, el consistorio turia-sonense decidió levantar un templo eremitorio dedica-do al patrón de la ciudad, San Atilano (939-1009). Laiglesia fue construida en la segunda mitad del siglo XVIII

y su retablo, actualmente desmantelado, en 1 798,aunque la imagen que lo presidía, conservada en laparroquia de la Magdalena, está datada entre 1740 y1744 y atribuida al escultor zaragozano José Ramírezde Arellano.

Rutas por la ciudad

Aunque a esta ruta deberíamos incorporar lamayoría de los conventos de la ciudad, pues práctica-mente todos fueron fundados o reformados duranteeste periodo histórico, resulta interesante marcar unaserie de hitos barrocos dentro de dichos edificios, asícomo mencionar otros nuevos.

En primer lugar, debemos acudir a la catedral paracontemplar su retablo mayor, realizado por los bilbili-tanos Jaime Viñola y Pedro Martínez y policromadopor los turiasonenses Agustín Leonardo y Gil XiménezMaza entre 1605 y 1614. Escenas de la vida de laVirgen, los cuatro patronos de la diócesis, San Pedro ySan Pablo, y los cuatro Padres de la Iglesia acompañana la imagen medieval de Nuestra Señora de la Huerta,titular del templo.

Asimismo, el mueble que preside el temploconventual franciscano también tuvo que proceder delos talleres escultóricos de Calatayud. Fechado en losaños centrales del siglo XVII, sabemos que fue dorado ypolicromado por el pintor soriano Martín González en1651. Entre su iconografía, totalmente franciscana,destacaremos la presencia de la InmaculadaConcepción, en la casa central del retablo, por la queestos frailes sentían gran devoción, y de San Franciscode Asís, justo encima, escultura dotada de movimientoy expresividad.

El retablo mayor del convento de la Merced, ya delsiglo XVIII (1734-1737), es una pieza de notable cali-dad artística. Aunque fue esculpido por un fraile de laOrden, fray Pedro Puey, goza de interesantes conco-mitancias con la obra de los hermanos Churriguera.

Las dos iglesias levantadas por las autoridadesmunicipales en honor de sendos patronos de la ciudad,la Virgen del Río y San Atilano, constituyen otras tan-tas muestras muy representativas del barroco enTarazona. La iglesia de la Virgen del Río se ubica en elpaseo del mismo nombre, en la margen derecha del ríopero justo enfrente de la magnífica panorámica de la

El Barroco turiasonense

Retablo mayor de la iglesia de San Francisco