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4. Climas Dentro del territorio poblano se presentan casi todas las variedades climáticas existentes, este fenómeno es consecuencia de los siguientes factores geográficos: por un lado, la entidad se localiza en la región intertropical, lugar donde dominan los vientos alisios, que están cargados de humedad; por otro, está rodeada de importantes sistemas montañosos, cuya morfología presenta grandes contrastes altimétricos que varían desde los 200 m en San José Acateno hasta 5 610 m en el Pico de Orizaba; por último, la influencia marítima se deja sentir principalmente en la porción septentrional, área expuesta a la acción de los vientos húmedos del mar. Se registra una gradación térmica que comprende desde los climas cálidos de la vertiente este de la Sierra Madre Oriental, hasta los fríos con nieves perpetuas en las cumbres volcánicas. Con base en su humedad, se distribuyen de los húmedos con lluvias todo el año, como en la región de Cuetzalán en el noroeste, hasta los secos de carácter continental en el valle de Tehuacán. En general, la marcha anual de la temperatura media a lo largo del año presenta una máxima que ocurre principalmente en mayo, periodo que corresponde al primer paso del sol por el cénit en su camino hacia el Trópico de Cáncer, y la mínima sucede sin excepción en enero. Las medias más altas se presentan en dos áreas: la primera al suroeste del estado en la depresión del río Acatlán, así como en los alrededores de Jolalpan, la otra se extiende en la región que baia hacia el declive del Golfo, en donde se registran más de 25°C. En contraposición con lo anterior, en el valle de Puebla, en los llanos de San Juan, San Andrés y Tepeaca, las temperaturas varían de los 1 3.5°C hasta 1 7.5°C. Las medias más bajas corresponden a las zonas más altas de la entidad, que se sitúan en las cumbres volcánicas, donde las temperaturas oscilan entre 4 y 0 o C. Las máximas temperaturas van de 24° C en las laderas orientales de las sierras de Quimixtlán y Negra, hasta los 36 °C en el extremo suroeste. Las mínimas fluctúan de 2°C en las zonas altas de la sierra Norte de Puebla y en las laderas orientales de la Sierra Nevada, hasta 12°C en el sureste del estado. En los meses veraniegos llegan a la entidad los vientos alisios cargados de humedad que, combinados con los fenómenos de convección local, originan que se concentre lo máxima precipitación En el otoño las masas de aire que invaden el territorio poblano son también húmedas por la acción de los ciclones tropicales, en tanto que en la primavera las masas de aire son secas y cálidas, produciendo escasas precipitaciones. Las lluvias en el invierno son resultado de los frentes fríos o nortes, que se presentan principalmente en la Sierra Norte, en Cuetzalán y Jopala. El mayor volumen de precipitación durante el año se registra en las laderas orientales de esta misma sierra, Tuzamapan es la porción más húmeda de la entidad, este fenómeno es producto de las lluvias orográficas. La influencia de La Malinche se deja sentir en el valle de Puebla, lo mismo que la de la Sierra Nevada sobre el occidente del mismo valle, y la del Pico de Orizaba en los llanos de San Juan. En la entidad se distinguen tres áreas climáticas: CLIMAS DE LA SIERRA MADRE ORIENTAL Es una región que se localiza en la porción más septentrional de la entidad, en ella se consideran también las áreas correspondientes a la Llanura Costera del Golfo Norte. La distribución climática en esta zona se presenta en una serie de franjas orientadas noroeste- sureste, donde los cambios se realizan paulatinamente conforme aumenta o disminuye la altitud. de noreste a suroeste los climas varían desde los cálidos hasta los templados, lo mismo ocurre con el régimen de humedad, que fluctúa de menor a mayor y decrece en la vertiente de sotavento. Los climas cáhdos imperan sobre las aderas orientales de la sierra, más o menos hasta 1 000 m de altitud Se caracterizan porque sus temperaturas medias anuales oscilan entre 22 y 26° C. El cálido subhúmedo con lluvias en verano se distribuye en I<js partes más bajas del noreste ooblano, en los límites con el estado cié Veracruz, donde la precipitación total anual es menor de 1 500 mm. Conforme aumenta la altitud, el clima cálido se torna húmedo con abundantes lluvias en verano. Estas lluvias junto con las que se presentan en otros periodos del año dan un tota: precipitado cercano a os 2 000 mm, corno ocurre en los alrededores de ívlellaltoyuca. En las zonas próximas a los 1 000 m.s.n.m. se presenta el cálido subhúmedo con lluvias todo el año, donde la cantidad anual de precipitación es superior a los 2 500 mm, como ocurre en Jalpan Entre los 1 200 y 1 500 m do altiluo se si lúa el sernicálido húmedo con lluvias todo el año, clima Iransicional entre los cálidos y los templados, ocupa una franja más amplia que los anteriores, en él, la precipitación Iota: va de los 2 000 mm en Ahuacatlán y sobrepasa los 4 000 mm en Tuzamapan En esta zona se registran los promedios mensuales más altos de lluvia en el estado, en e verano de 400 a 600 mm, en el otoño e invierno de 300 a 500 mm. principalmente en la estación de Cuetzalan. Sus temperaturas medias al año son mayores de 1 8°C. En las partes más altas de la sierra, entre 2 000 y 2 400 m, se encuentran los climas templados, cuyo gradiente térmico medio anual varía de 14°C en las cimas a 18°C en los valles intermontanos. El templado con lluvias todo el año, con una precipitación anual entre los 1 500 y los 2 500 mm, abarca desde e 1 este de Chiconcuautla hasta Zacapooxtla. El templado con abundantes lluvias en verano se localiza en el sur del anterior, ahí se registran de 1 000 y 1 500 mm de precipitación al año. Finalmente, en los alrededores de Zautla se desarrolla el templado subhúmedo con lluvias en ve'a no, cuyo rango de precipitación anual va de 800 a 1 000 mm. CLIMAS DEL EJE NEOVOLCANICO En esta región se encuentra la gama climática más amplio, que va desde los cálidos del sur hasta los fríos de las zonas con mayor altitud. El ciima predominante es el ternolado, sus temperaturas varían de 18°C en los valles v llanuras, a 12°C en terrenos más elevados; algo similar ocurre con las precipitaciones, las cuales se distribuyen en franjas que de norte a sur van de mayor a menor. Desde el húmedo con lluvias abundantes en el verano, en el que la precipitación total anual llega a sumar 2 000 mm, al occidente y sur de la Sierra Madre Oriental, así como en la Sierra de Quimixtlán; y va disminuyendo conforme decrece la altitud, hasta llegar a los 600 mm en la región del centro, principalmente en Ocotepec, donde prevalecen los subhúmedos con lluvias en verano. En la parte más estrecha del estado, de San José Alchichica a Oriental, se registra el clima semiseco templado como consecuencia de la barrera orográfica que representan el Cofre de Perote y el Pico de Orizaba para el paso de los vientos húmedos del Golfo, por lo cual, la humedad es menor que en el clima anterior, pero el régimen térmico es similar. Este clima también se distribuye en los alrededores de Palmar de Bravo y Morelos Cañada, donde se registra una cantidad anual de lluvias entre los 200 y 500 mm Es clima sernifrío subhúmedo con lluvias en verano se desarrolla en lugares con más de 2 600 m de altitud, como en las faldas del Pico de Orizaba, de La Malinche y de la Sierra Nevada, así como en el macizo de la sierra Quimixtlán Aquí, las temperaturas medias varían de a 1 2 o C. En las regiones más elevadas del Popocatepetl, del Iztaccíhuatl y del Pico de Orizaba, a más de 4 000 m s.n.rri., se distribuyen los climas más fríos. Al ir hacia el sur las altitudes comienzan a disminuir, por lo que el clima se torna más cálido, así, en Atlixco el clima que se registra es el sernicálido subhúmedo con lluvias en verano;, éstas suman, junto con las de otras temporadas, entre 7 00 y 1 000 mm al año, y las temperaturas medias son superiores o!8°C CLIMAS DE LA SIERRA MADRE DEL SUR Los climas de esta región presentan una graoación desde el cálido húmedo de las laderas orientales de la Sierra Negra hasta el seco cálido del valle de Tehuacán, los cuales ocupan iranias orientadas más o menos norte sur. El clima cálido húmedo con lluvias todo el año se localiza en el extremo sureste, en zonas con menos de 1 000 rn de altitud, como ocurre en Tlacotepec de Díaz, ahí la precipitación total anual varío de 2 500 a más de 4 000 mm, y la temperatura media entre 22 y 26°C. Hacia el poniente se incrementa ia altitud y disminuyen las temperaturas hasta un rango de 18 a 22°C, que corresponde a los semicálidos húmedos con lluvias todo el año, en los cuales el régimen pluviométrico es mayor de 2 500 mm, afecta al poblado de Eloxochitlán. En las partes más elevadas de las sierras Negra, Zongolica y Zapotitlán, de 1 600 m en adelante, el clima se torna templado con temperaturas medias anuales que oscilan do 1 2°C a 1 8°C El templado húmedo con abundantes lluvias en verano se distribuye en ;a región de Santa María Coyorneapan y Zoquitlán, su volumen total de lluvia varía de 1 2 00 a 2 500 mm. Conforme se avanza hacia el poniente la precipitación disminuye hasta llegar a 600 mm, como ocurre en las proximidades de Santa María del Monte y Xoxocotla, donde prevalece el clima templado subhúmedo con lluvias en verano. 15 INEGI. Síntesis geográfica nomenclátor y anexo cartográfico del estado de Puebla. 1987

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4. Climas

Dentro del territorio poblano se presentan casi todas las variedades climáticas existentes, este fenómeno es consecuencia de los siguientes factores geográficos: por un lado, la entidad se localiza en la región intertropical, lugar donde dominan los vientos alisios, que están cargados de humedad; por otro, está rodeada de importantes sistemas montañosos, cuya morfología presenta grandes contrastes altimétricos que varían desde los 200 m en San José Acateno hasta 5 610 m en el Pico de Orizaba; por último, la influencia marítima se deja sentir principalmente en la porción septentrional, área expuesta a la acción de los vientos húmedos del mar. Se registra una gradación térmica que comprende desde los climas cálidos de la vertiente este de la Sierra Madre Oriental, hasta los fríos con nieves perpetuas en las cumbres volcánicas. Con base en su humedad, se distribuyen de los húmedos con lluvias todo el año, como en la región de Cuetzalán en el noroeste, hasta los secos de carácter continental en el valle de Tehuacán. En general, la marcha anual de la temperatura media a lo largo del año presenta una máxima que ocurre principalmente en mayo, periodo que corresponde al primer paso del sol por el cénit en su camino hacia el Trópico de Cáncer, y la mínima sucede sin excepción en enero. Las medias más altas se presentan en dos áreas: la primera al suroeste del estado en la depresión del río Acatlán, así como en los alrededores de Jolalpan, la otra se extiende en la región que baia hacia el declive del Golfo, en donde se registran más de 25°C. En contraposición con lo anterior, en el valle de Puebla, en los llanos de San Juan, San Andrés y Tepeaca, las temperaturas varían de los 1 3.5°C hasta 1 7.5°C. Las medias más bajas corresponden a las zonas más altas de la entidad, que se sitúan en las cumbres volcánicas, donde las temperaturas oscilan entre 4 y 0o C. Las máximas temperaturas van de 24° C en las laderas orientales de las sierras de Quimixtlán y Negra, hasta los 36 °C en el extremo suroeste. Las mínimas fluctúan de 2°C en las zonas altas de la sierra Norte de Puebla y en las laderas orientales de la Sierra Nevada, hasta 12°C en el sureste del estado. En los meses veraniegos llegan a la entidad los vientos alisios cargados de humedad que, combinados con los fenómenos de convección local, originan que se concentre lo máxima precipitación En el otoño las masas de aire que invaden el territorio poblano son también húmedas por la acción de los ciclones tropicales, en tanto que en la primavera las masas de aire son secas y cálidas, produciendo escasas precipitaciones. Las lluvias en el invierno son resultado de los frentes fríos o nortes, que se presentan principalmente en la Sierra Norte, en Cuetzalán y Jopala. El mayor volumen de precipitación durante el año se registra en las laderas orientales de esta misma sierra, Tuzamapan es la porción más húmeda de la entidad, este fenómeno es producto de las lluvias orográficas. La influencia de La Malinche se deja sentir en el valle de Puebla, lo mismo que la de la Sierra Nevada sobre el occidente del mismo valle, y la del Pico de Orizaba en los llanos de San Juan. En la entidad se distinguen tres áreas climáticas:

CLIMAS DE LA SIERRA MADRE ORIENTAL

Es una región que se localiza en la porción más septentrional de la entidad, en ella se consideran también las áreas correspondientes a la Llanura Costera del Golfo Norte. La distribución climática en esta zona se presenta en una serie de franjas orientadas noroeste- sureste, donde los cambios se realizan paulatinamente conforme aumenta o disminuye la altitud. de noreste a suroeste los climas varían desde los cálidos hasta los templados, lo mismo ocurre con el régimen de humedad, que fluctúa de menor a mayor y decrece en la vertiente de sotavento. Los climas cáhdos imperan sobre las aderas orientales de la sierra, más o menos hasta 1 000 m de altitud Se caracterizan porque sus temperaturas medias anuales oscilan entre 22 y 26° C. El cálido subhúmedo con lluvias en verano se distribuye en I<js partes más bajas del noreste ooblano, en los límites con el estado cié Veracruz, donde la precipitación total anual es menor de 1 500 mm. Conforme aumenta la altitud, el clima cálido se torna húmedo con abundantes lluvias en verano. Estas lluvias junto con las que se presentan en otros periodos del año dan un tota: precipitado cercano a os 2 000 mm, corno ocurre en los alrededores de ívlellaltoyuca. En las zonas próximas a los 1 000 m.s.n.m. se presenta el cálido subhúmedo con lluvias todo el año, donde la cantidad anual de precipitación es superior a los 2 500 mm, como ocurre en Jalpan Entre los 1 200 y 1 500 m do altiluo se si lúa el sernicálido húmedo con lluvias todo el año, clima Iransicional entre los cálidos y los templados, ocupa una franja más amplia que los anteriores, en él, la precipitación Iota: va de los 2 000 mm en Ahuacatlán y sobrepasa los 4 000 mm en Tuzamapan En esta zona se registran los promedios mensuales más altos de lluvia en el estado, en e verano de 400 a 600 mm, en el otoño e invierno de 300 a 500 mm. principalmente en la estación de Cuetzalan. Sus temperaturas medias al año son mayores de 1 8°C. En las partes más altas de la sierra, entre 2 000 y 2 400 m, se encuentran los climas templados, cuyo gradiente térmico medio anual varía de 14°C en las cimas a 18°C en los valles intermontanos. El templado con lluvias todo el año, con una precipitación anual entre los 1 500 y los 2 500 mm, abarca desde e1 este de Chiconcuautla hasta Zacapooxtla. El templado con abundantes lluvias en verano se localiza en el sur del anterior, ahí se registran de 1 000 y 1 500 mm de precipitación al año. Finalmente, en los alrededores de Zautla se desarrolla el templado subhúmedo con lluvias en ve'a no, cuyo rango de precipitación anual va de 800 a 1 000 mm.

CLIMAS DEL EJE NEOVOLCANICO

En esta región se encuentra la gama climática más amplio, que va desde los cálidos del sur hasta los fríos de las zonas con mayor altitud. El ciima predominante es el ternolado, sus temperaturas varían de 18°C en los valles v llanuras, a 12°C en terrenos más elevados; algo similar ocurre con las precipitaciones, las cuales se distribuyen en franjas que de norte

a sur van de mayor a menor. Desde el húmedo con lluvias abundantes en el verano, en el que la precipitación total anual llega a sumar 2 000 mm, al occidente y sur de la Sierra Madre Oriental, así como en la Sierra de Quimixtlán; y va disminuyendo conforme decrece la altitud, hasta llegar a los 600 mm en la región del centro, principalmente en Ocotepec, donde prevalecen los subhúmedos con lluvias en verano. En la parte más estrecha del estado, de San José Alchichica a Oriental, se registra el clima semiseco templado como consecuencia de la barrera orográfica que representan el Cofre de Perote y el Pico de Orizaba para el paso de los vientos húmedos del Golfo, por lo cual, la humedad es menor que en el clima anterior, pero el régimen térmico es similar. Este clima también se distribuye en los alrededores de Palmar de Bravo y Morelos Cañada, donde se registra una cantidad anual de lluvias entre los 200 y 500 mm Es clima sernifrío subhúmedo con lluvias en verano se desarrolla en lugares con más de 2 600 m de altitud, como en las faldas del Pico de Orizaba, de La Malinche y de la Sierra Nevada, así como en el macizo de la sierra Quimixtlán Aquí, las temperaturas medias varían de 4° a 1 2o C. En las regiones más elevadas del Popocatepetl, del Iztaccíhuatl y del Pico de Orizaba, a más de 4 000 m s.n.rri., se distribuyen los climas más fríos. Al ir hacia el sur las altitudes comienzan a disminuir, por lo que el clima se torna más cálido, así, en Atlixco el clima que se registra es el sernicálido subhúmedo con lluvias en verano;, éstas suman, junto con las de otras temporadas, entre 7 00 y 1 000 mm al año, y las temperaturas medias son superiores o!8°C

CLIMAS DE LA SIERRA MADRE DEL SUR

Los climas de esta región presentan una graoación desde el cálido húmedo de las laderas orientales de la Sierra Negra hasta el seco cálido del valle de Tehuacán, los cuales ocupan iranias orientadas más o menos norte sur. El clima cálido húmedo con lluvias todo el año se localiza en el extremo sureste, en zonas con menos de 1 000 rn de altitud, como ocurre en Tlacotepec de Díaz, ahí la precipitación total anual varío de 2 500 a más de 4 000 mm, y la temperatura media entre 22 y 26°C. Hacia el poniente se incrementa ia altitud y disminuyen las temperaturas hasta un rango de 18 a 22°C, que corresponde a los semicálidos húmedos con lluvias todo el año, en los cuales el régimen pluviométrico es mayor de 2 500 mm, afecta al poblado de Eloxochitlán. En las partes más elevadas de las sierras Negra, Zongolica y Zapotitlán, de 1 600 m en adelante, el clima se torna templado con temperaturas medias anuales que oscilan do 1 2°C a 1 8°C El templado húmedo con abundantes lluvias en verano se distribuye en ;a región de Santa María Coyorneapan y Zoquitlán, su volumen total de lluvia varía de 1 2 00 a 2 500 mm. Conforme se avanza hacia el poniente la precipitación disminuye hasta llegar a 600 mm, como ocurre en las proximidades de Santa María del Monte y Xoxocotla, donde prevalece el clima templado subhúmedo con lluvias en verano.

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Las dos primeras sienas mencionadas impiden el paso de los vientos húmedos del Golfo hacia el valle de Tehuacán, por lo que ahí el clima es seco cálido, con precipitaciones anuales menores de 500 mm y una temperatura media mayor de 20°C. En el otoño la región más seca corresponde a las ¡aderas occidentales de las sierras antes mencionadas. De Tepexi de Rodríguez a Chila, el clima que se presenta es el semicálido subhúmedo con lluvias en verano Aquí la precipitación total anual va de 700 a 1 000 mm. En el extremo suroeste, sobre la Sierra Grande y los valles de Matamoros y Chiautla, se

distribuyen los cálidos subhúmedos, en los que la lluvia anual es menor de 800 mm, las temperaturas medias oscilan entre 22° y 26°C, además, en los meses invernales se presenta una sequía bastante notable. La sierra antes mencionada impide el paso de los vientos húmedos hacia el valle de Acatlán, originando un clima semiseco muy cálido, con un régimen térmico similar al anterior, pero con precipitaciones menores a 700 mm.

HELADAS Y GRANIZADAS

El fenómeno de heladas se presenta con un rango de más de 100 días al año en Amozoc

de Mota, Zacatepec y Guadalupe Buenavista. La frecuencia de 40 a 80 días ocurre en los climas templados de la región centro, las zonas afectadas son Tepeaca, Oriental, Tepeyahualco, Morelos Cañada, Guadalupe Victoria, Loma Alta, Palmar de Bravo, Acajete, Ciudad Serdán, Alchichica y Libres. Las dos áreas donde casi no se produce este fenómeno corresponden a las zonas con clima cálido de la Sierra Madre Oriental y de la Sierra Madre del Sur. ti mayor número de días con granizo durante el año se registra en la capital estatal, con 6.8, le siguen Tlaxco con 4.9 y Huejotzingo con 4.4 días

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5.Geología

En Puebla existen diversos afloramientos de rocas ígneas, sedimentarias y metamórficas, así como depósitos de suelos aluviales y lacustres. Estas unidades están distribuidas en las provincias geológicas Sierra Madre Oriental, Llanura Costera del Golfo Norte, Eje Neovolcánico y Sierra Madre del Sur Cada provincia posee características litológicas y estructurales distintivas, relacionadas con los fenómenos que actúan en ellas durante el tiempo geológico. Fisiográficamente también existe un contraste en su relieve, mismo que acusa los efectos de los procesos endógenos y exógenos. Los endógenos, relacionados con la formación del relieve original, se manifiestan en

fenómenos tectónicos y magmáticos que ocasionan rupturas, aparatos volcánicos y cuerpos intrusivos, expresados en sierras plegadas volcánicas y complejas. Los exógenos son evidentes en las formas denudatorias del relieve, como las mesetas disectadas, y en formas acumulativas, tal es el caso de las planicies aluviales, llanuras costeras y lagos interiores. En el estado, la Sierra Madre Oriental se encuentra representada por una franja terminal, formada por sierras paralelas en dirección noroeste-sureste, con altitudes que oscilan de 2 000 a 3 000 metros. En ella, las rocas sedimentarias, dispuestas en capas de espesor variable, ofrecen diferente resistencia

ZONAS MINERAS

a los procesos erosivos y a los esfuerzos corticales, y se manifiestan en grandes estructuras plegadas y dislocadas en ángulos bajos. En esta provincia las deformaciones orogénicas son las principales formadoras del relieve original, sobre el que han actuado procesos erosivos controlados por sistemas de fallas y fracturas. Asimismo, el agua en su efecto disolutivo ha contribuido a generar una morfología cársica y ha labrado, a la vez, profundos cañones por los que drenan diversos ríos hacia el Golfo de México. Las porciones de la Llanura Costera del Golfo Norte en territorio poblano, corresponde a los bordes de una antigua costa progradante, formada con materiales terrígenos aportados del continente hacia la cuenca del Golfo de México. Por su parte, la región que ocupa el Eje Neovolcánico se caracteriza por el predominio de magnas estructuras volcánicas, típicas de la provincia, que la entidad comparte con los estados vecinos. Dichas estructuras son relativamente jóvenes, del Terciario Superior y Cuaternario, y en general no han sufrido perturbaciones desde su formación originada por lenómenos corticales profundos. Esta cadena montañosa representa la imagen más conocida del vulcanismo en México. En lo que respecta a la Sierra Madre del Sur, está configurada por un mosaico complejo de rocas metamórficas, ígneas y sedimentarias, que muestran los efectos de una intensa erosión hídrica, realizada sobre distintos patrones de fracturas. Las rocas más antiguas del territorio poblano afloran en el extremo sureste, en el límite con Oaxaca; son "metamórficas de alto grado pertenecientes al Complejo Oaxaqueño, del Precámbrico: PE (Gn). las rocas metamórficas del Precámbrico, Paleozoico y Mesozoico se distribuyen principalmente en la Sierra Madre del Sur, aunque las del Paleozoico se presentan también en el Eje Neovolcánico y en la Sierra Madre Oriental. Las rocas que cubren una mayor extensión son las volcánicas del Cenozoico (Terciario y Cuaternario), con predominio en el Eje Neovolcánico; en cambio las sedimentarias del Mesozoico abundan en la Sierra Madre Oriental, Sierra Madre del Sur y Llanura Costera del Golfo Norte Extensas áreas tienen una variada litología de edad precámbrica con rasgos de metamorfismo, en conjunto comprenden el Complejo Acatlán, que según algunos investigadores representa la evolución geológica del sur de México durante el Paleozoico Inferior: P (E). En la Sierra Mazateca existen terrenos metamórficos que dafan del Mesozoico, pertenecientes al Complejo Cuicateco, cuyo protolito corresponde a secuencias de rocas sedimentarias con intercalaciones de lava, posiblemente formadas en un ambiente de arco insular magmático, que han sido intensamente deformadas y metamorfizadas de manera incipiente en las facies más bajas de exquisitos verdes. En la misma zona, hay además unidades de rocas con metamorfismo dinámico, K (Ct), cataclasitas. Las rocas del Triásico sólo afloran en el flanco suroccidental del Anticlinorio de Huayacocotla, en la Sierra Madre Oriental.

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LLANURA COSTERA DEL GOLFO NORTE

SIERRA MADRE ORIENTAL

EJE NEOVOLCANICO

SIERRA MADRE DEL SUR

X BANCO DE MATERIALES

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PROVINCIA SIERRA MADRE ORIENTAL

Esta provincia abarca, en Puebla, una porción del noroeste. Limita al sur con el Eje Neovolcánico y al oriente con la Llanura Costera del Golfo Norte. Dentro del estado, las rocas más antiguas clasificadas en la provincia son metamórficas y sedimentarias del Paleozoico; sin embargo, las que tienen afloramientos más extensos son las sedimentarias de ambiente marino del Mesozoico, aunque también hay pequeños afloramientos de rocas de tipo continental del Triásico. Las rocas más jóvenes son las volcánicas, de composición acida y básica, del Terciario Superior y Cuaternario, que coronan el paquete plegado de rocas del Mesozoico

Estratigrafía.

Del Paleozoico existen afloramientos de esquistos, P (E), formados por metamorfismo regional de bajo grado. Pueden considerarse como el basamento sobre el que evolucionó la cubierta de rocas depositadas durante el Mesozoico. Esta unidad se localiza en Tlatlauquitepec, Yaonáhuac y Hueyapan, y está correlacionada con las rocas del Complejo Acatlán, que están descritas en la Sierra Madre del Sur. Además, hay afloramientos del Pérmico, que consisten en una secuencia de rocas sedimentarias. La base del Mesozoico está representada por una potente secuencia del Triásico, formada por rocas continentales depositadas como relleno de fosas tectónicas. Dicha secuencia consta de areniscas, conglomerados y algunas capas de lutitas arenosas, que forman estratos masivos y delgados, y subyacen en discordancia angular a los depósitos de Jurásico Inferior. Se localiza al occidente de Huauchinango —a lo largo del Anticlinorio de Huayacocotla— y corresponde a la Formación Huizachal. El Jurásico, en sus rangos Inferior, Medio y Superior, se manifiesta conforme el alineamiento general que caracteriza a la Sierra Madre en su porción terminal. Ei Inferior está representado por una secuencia detrítica marina, formada por intercalaciones de lutitas y areniscas en estratos masivos y delgados, que presentan una ligera filitización y clivaje de fracturamiento oblicuo a la estratificación. Contiene fósiles bibalvos y cefalópodos de diversos géneros, deformados por esfuerzos tectónicos regionales. Sobreyace discordantemente a la secuencia de rocas del Jurásico Medio y Superior y a i.is rocas volcánicas del Terciario Superior. Esta secuencia rocosa so extiende desde Huauchinango, Puebla, hasta cerca de Molango, Hidalgo. La unidad aflora en los municipios de Tlacuilotepec, Tlaxco, Pahuatlán, Naupan y Chila Honey. El Jurásico Medio se evidencia por una unidad detrítica formada en un medio continental, constituida por grauvacas y areniscas conglomeráticas compactas, en estratos gruesos, ocasionalmente masivos. Sobreyace en discordancia angular a la secuencia de rocas del Jurásico Inferior y subyace en igual forma a la del Jurásico Superior. Aflora en terrenos de Tlacuilotepec. El Jurásico Superior tiene representación en una serie rítmica de calizas y lutitas de potente espesor, formadas en mares profundos. Las calizas son negras, microcristalinas, con alto contenido de materia orgánica y manganeso; las lutitas son calcáreas, con impregnaciones de calcopirita y manganeso. En esta unidad también existen areniscas compactas de color verde, en estratos de un metro de espesor. Sobreyace en discordancia angular a la secuencia rocosa del Jurásico Medio y subyace en concordancia a las calizas del Cretácico Inferior. Aflora en los municipios de AjaIpan y Vicente Guerrero. Del Cretácico Inferior y Superior hay grandes afloramientos de rocas marinas, en su mayoría calcáreas y arcillosas. La secuencia del

Cretácico Inferior está integrada por sedimentos carbonatados marinos, formados como depósitos de talud y arrecifales. La secuencia de borde de plataforma se encuentra constituida por estratos calcáreos de textura variable, de 10 cm a 1 m de espesor, que contienen fósiles del Albiano. Se correlaciona con las Formaciones Pimienta y Tamaulipas Inferior. Los estratos de talud, compuestos por calizas de color gris claro, alcanzan espesores que varían de 30 cm a 1 m. Contienen fósiles del Albiano-Cenomamano y se correlacionan con ¡a Formación Tamaulipas Superior. También hay lentes de caiiza en capas delgadas, de facies lagunares. Estos depósitos descansan sobre las rocas de Jurásico Superior y subyacen concordan temen te a ía serie del Cretácico Superior Se distribuyen en una amplia extensión de la Sierra Madre Oriental y siguen una orientación similar al patrón general de la misma, en la cual conforman las sierras altas y alargadas La secuencia del Cretácico Superior está constituida por rocas caicáreo-arcillosas, que en la parte inferior forman estratos medianos •/ delgados de calizas microcristalinas de faces de talud a orearrecifal, correlacionares con las Formaciones Guzmantla y Maltrata. En su parte media se presenta un paquete de rocas formado por la alternancia de calizas microcristalinas, lutitas verdes y ocres de fades pelágicas. Las calizas se encuetran en estratos gruesos a delgados, en tanto que las lutitas se disponen en otros que van de delgados a laminares. El contenido fosilífero de la unidad abarca del Santoniano al Camoamano y la hace correlacionare con la parte superior de ;a Formación Maltrata. También del Cretácico Superior data otra unidad formada por estratos delgados de lutitas calcáreas de tonos ocres y verdes, de facies de talud, que contiene fósiles de rmicrofauria del Campaniano Las rocas del Cenozoico son sedimentarias clásticas, depositadas de manera progradante en franjas paralelas a la costa del Golfo de México. Los depósitos del Paleoceno, formados por una interestratificación de lutitas y areniscas de aguas moderadamente profundas, sobreyacen en concordancia a las calizas y lutitas del Cretácico Superior. Durante e Cenozoico, gran parte de las rocas del Mesozoico y aun más antiguas de la provincia en territorio poblano, fueron cubiertas oor extensos derrames de lava y depósitos piroclásticos ácidos y básicos. Las rocas ígneas extrusivas intermedias, principalmente andesitas. brechas volcánicas y tobas, pertenecen a eventos magmáticos ligados a las emisiones volcánicas del Cofre de Perote y La Mahnche. Este conjunto de rocas descansa discordantemente sobre rocas carbonatadas de las secuencias del Mesozoico que a su vez están cubiertas por tobas acidas del Terciario Superior y del Cuaternario. Las emisiones volcánicas andesíticas forman parte de las primeras manifestaciones que dieron origen al Eje Neovolcánico, iniciado a fines del Oligoceno Por último, las rocas ígneas del Cuaternario (Acidas y básicas!, producto de la actividad volcánica del Eje Neovo,cánico, se hallan en varios lugares sobrepuestas discordantemente a las rocas plegadas de la Sierra Madre Oriental.

Geología Estructural

Parte de la secuencia estratigráfica que aflora en Hidalgo y Veracruz, también lo nace en Puebla, pues existe continuidad entre la Sierra Madre Oriental y la megaestructura denominada Anticlinorio de Huayacocotla. Las estructuras denotan una evolución compleja sobre rocas del Precámbrico y Paleozoico, y se manifiestan en anticlinales y sinclinales — recostados hacia el noreste—, dislocados por fallas de empuje (cobijaduras), que han imbricado la secuencia del Mesozoico, misma que forma el Anticlinorio de Huayacocotla, el cual se extiende por varios estados vecinos y

remata en Puebla al intersectarse con el Eje Neovolcánico. Los cuerpos intrusivos que afectan la secuencia del Mesozoico fueron inyectados durante el periodo más activo de la fase orogénica Laramídica. Las fallas y fracturas de tipo normal, asociadas con las fases neotectónlcas, afectan a las rocas del Mesozoico y Terciario. Las rocas ígneas extrusivas que afloran en la Sierra Madre Oriental son resultado de los fenómenos que dieron origen al Eje Neovolcánico.

PROVINCIA LLANURA COSTERA DEL GOLFO NORTE

En la entidad, esta región comprende las zonas boreal y noreste. Su composición litológica es principalmente de rocas arcillo- arenosas de tipo marino y derrames basálticos. En el área de contacto con la Sierra Madre Oriental, las rocas sedimentarias presentan una intensa perturbación, reflejo de los esfuerzos a que fue sometida la cordillera al plegarse hacia la planicie costera. La provincia muestra evidencias de procesos denudatorios y acumulativos, los cuales han modelado una extensa planicie aluvial con lomeríos. Existen además, evidencias de procesos endógenos, manifestados por la presencia de rocas volcánicas de composición básica del Terciario Superior, Ts (Igeb), que cubren parcialmente de manera discordante a las rocas clásticas marinas del Paleoceno, Eoceno y Oligoceno. La llanura costera se originó como consecuencia de la regresión del Atlántico, iniciada a principios del Terciario; así como del relleno gradual de la cuenca oceánica, a partir del talud, por materiales terrígenos provenientes del continente. El rejuvenecimiento continuo de la llanura costera ha propiciado la erosión de los depósitos marinos del Terciario, localizados desde el pie de la Sierra Madre Oriental hasta la costa También ha propiciado la depositación de aluviones recientes.

Estratigrafía

Los afloramientos más antiguos de la Llanura Costera del Golfo Norte en Puebla son del Cretácico Superior, y están constituidos por lutitas calcáreas de facies de talud, de color ocre, dispuestas en estratos delgados. Contienen microfósiles del Campaniano, además de fragmentos de ostrácodos y radiolarios. Esta unidad se correlaciona con la Formación Méndez y aparece representada como K (lu). De la base del Cenozoico, en el Paleoceno, también fueion depositadas lutitas calcáreas, T pal (lu), de facies de talud, de color pardo claro, que contienen intercalados algunos horizontes arenosos. La unidad se encuentra dispuesta en estratos medianos, y presenta concreciones de pedernal e intemperismo en forma de almendrillas. Es parte de la Formación Velasco, del Paleoceno Inferior, y cubre discordantemente a depósitos del Cretácico Inferior y Superior. Asimismo, existe otra secuencia alternante de areniscas, lutitas i margas, depositadas en facies de talud, con microfósiles del Paleoceno que permiten correlacionarla con la parte baja del grupo Chicontepec y con la Formación Velasco. Sobreyace en discordancia a las rocas calcáreas del Cretácico Inferior; está cubierta en su mayor parte por materiales terrígenos del Eoceno, y sólo en algunas áreas por rocas ígneas extrusivas del Terciario Superior, l a secuencia terrígena del Eoceno, Te (lu-ar), está constituida por la alternancia de lutitas, arenisca y margas, que ¡ocalmente presentan horizontes de bentonita. Contienen nodulos calcáreos e impresiones de hojas, así como microfósiles que la relacionan con las Formaciones Velasco, Chicontepec, Aragón, Chapopote y Tantoyuca, del Eoceno. Sobreyace de manera concordante a los sedimentos areno-arcillosos del Paleoceno, y de la misma manera subyace a depósitos

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areno-arcillosos del Oligoceno, To (lu-ar) así como a rocas piroclásticas del Terciario Superior. Del Oligoceno se presenta una alternancia de areniscas con microfósiles y lutitas. To (lu-ar), en estratos larrvnares. En ocasiones se encuentran estratos delgados de conglomerados y margas. La unidad se correlaciona con las Formaciones Palma Real, Horcones, Alazán, Mesón y Coatzintla. Descansa concordante sobre los depósitos terrígenos del Eoceno y lo cubren derrames basálticos y andesíticos del Terciario Superior. Las rocas volcánicas del Terciario Superior, Ts (Igeb), incluyen derrames de basaltos, basaltos andesíticos de estructura columnar y vesicular, fracturados; también intercalaciones de basaltos y depósitos piroclásticos (tobas y brechas) que conforman mesetas profundamente disectadas, con cañones de paredes verticales. Las rocas basálticas del Cuaternario afloran en áreas de Jalpan, Pantepec y Jopala. Se presentan en forma de derrames superpuestos a las rocas del Mesozoico. Por su parte, los depósitos aluviales originados por la acción fluvial, forman suelos limo-arenosos constituidos por gravas, arenas, limos y arcillas, escasamente consolidados, que se encuentran como relleno de valles en el municipio de Tenampulco.

Geología Estructural

Los paquetes rocosos que constituyen las unidades de esta provincia fueron deformados, en el Terciario, por el empuje de las rocas de la Sierra Madre Oriental. Esto originó el aspecto escalonado de la llanura.

PROVINCIA EJE NEO VOLCANICO

Abarca una gran porción del centro y algunas áreas del noroeste de Puebla, colinda al norte con la Sierra Madre Oriental y la Llanura Costera del Golfo y al sur con la Sierra Madre del Sur. El Eje Neovolcánico difiere de las provincias adyacentes en su origen, en su estructura geológica y en sus rasgos del relieve. Es una enorme franja de rocas volcánicas de diversos tipos y texturas, como derrames lávicos, tobas, brechas y cenizas volcánicas, que fueron emitidas sucesivamente por un gran número de volcanes durante el Cenozoico, y que actualmente forman un extenso y grueso paquete superpuesto a las rocas del Mesozoico. Los rasgos característicos del paisaje de esta provincia en territorio poblano son, por un lado, los estrato-volcanes más espectaculares del país: el Pico de Orizaba, el Popocatepetl, el Iztaccíhuatl y La Malinche, cuyas cumbres son las más altas de México, y por el otro, las cuencas endorreicas con el consecuente desarrollo de lagos, que fueron originadas por la actividad volcánica al obstruir los antiguos patrones de drenaje. Entre dichas cuencas se encuentran la de Oriental, con los vasos de los lagos Totolcingo y Tepeyahualco; la de Puebla y la de Atlixco. La composición petrológica de las rocas vo,cárneas de esta región es muy heterogénea. Las rocas que constituyen al Iztaccíhuatl y al Popocatépetl están clasificadas como riodacitas y dacitas; estas últimas son también las que integran al cerro La Malinche. En los límites con la Sierra Madre Oriental se manifiesta un zoneamiento diferencial entre el volcanismo andesítico y el ignimbrítico. En la cuenca de Puebla las rocas son extrusivas de diversos tipos: dacitas, riolitas y andesitas. Esta diferenciación petrológica en las regiones que integran la provincia, hace suponer que el magma se formó a diversa profundidad de la corteza o del manto superior, y que fue evolucionando en su ascenso hacia la superficie. Los grandes aparatos volcánicos se formaron sucesivamente en varias épocas del Cenozoico Superior. La Malinche, cuyo cráter presenta un estado muy avanzado de erosión, indica el

periodo más antiguo del volcanismo en Puebla. El Iztaccíhuatl representa un periodo posterior; y el Pico de Orizaba y el Popocatépetl corresponden al Plioceno Medio.

Estratigrafía

Las rocas más antiguas en esta provincia son esquistos del Paleozoico, P (E). Afloran como ventanas de erosión en los terrenos predominantemente volcánicos y se localizan en el municipio de Hueyapan Asimismo, hay rocas sedimentarias marinas del Mesozoico, que fueron puestas al descubierto por procesos erosivos, o bien, no alcanzaron a ser cubiertas por el paquete de rocas volcánicas del Cenozoico Superior. Entre las unidades del Mesozoico que se representan cartográficamente en esta provincia están las limolitas y areniscas del Jurásico Medio, Jm (Im-ar), en el municipio de Teziutlán; y las calizas y lutitas del Jurásico Superior, Js lcz-lu), que floran en terrenos pertenecientes a Chignautla. El Cretácico Inferior está representado por calizas, K¡ (cz), las cuales son similares a las descritas en la Sierra Madre Oriental, y están distribuidas en varios municipios, como Hueytamalco, Tlatlauquitepec, Zautla, Cuyoaco, Tepeyahualco y Tlachichuca. Del Cretácico Superior hay unidades de calizas, Ki (cz); de calizas y lutitas alternadas, Ki (cz-lu); y de lutitas, Ki.(lu), que afloran en áreas pertenecientes a Ayotoxco de Guerrero, San Juan Acateno, Amozoc, Puebla, San Salvador el Seco, Palmar de Bravo, Esperanza y Quimixtlán, Se presentan también varias unidades sedimentarias del Cenozoico Inferior y Superior, algunas de ambiente marino como las de lutitas alternadas con areniscas pertenecientes a los pisos del Paleoceno, Eoceno y Oligoceno, que están localizadas en Hueytamalco, Tenampulco y Acateno. Estas unidades se formaron sucesivamente como relleno de una cuenca oceánica y están descritas en la provincia de la Llanura Costera del Golfo Norte. En el municipio de Tecali de Herrera afloran las unidades sedimentarias de ambiente continental del Terciario Inferior, Ti (ar). Las unidades rocosas clásticas y volcano- clásticas correspondientes ai Terciario Superior son: depósitos de areniscas y conglomerados, Ts (ar-cg); brechas sedimentarias, Ts (bs); y voicanoclástico, Ts (vi, los cuales se distribuyen en partes de los m-unicipios de Tzicatlacoyan, Acajete, Puebla, Tepatlaxco de Hidalgo y Cuautinchán. La unidad base del paquete volcánico característico de la provincia está constituida por rocas andesíticas del Oligoceno, Ti (Igei). Esta unidad aflora ampliamente en la región y forma las grandes estructuras volcánicas del Pico de Orizaba, El Cofre de Perote y La Malinche. En ella, cartográficamente están incluidas varias unidades de composición andesítica, de diversa textura, como brechas volcánicas, tobas y derrames. Tales unidades sobreyacen discordantemente a rocas sedimentarias del Mesozoico y a la vez están cubiertas por tobas ácidas, ignimbritas y ceniza volcánica del Terciario Superior y Cuaternario. Los derrames basálticos del Cuaternario, Q (Igeb), forman parte del volcanismo básico que dio origen a la configuración típica del Eje Neovolcánico. Tienen una extensión amplia y constituyen numerosos aparatos volcánicos y derrames lávicos. En la carta geológica, esta unidad incluye rocas basálticas de vanada textura, que contienen material piroclástico del tamaño de "Lapilli", gran cantidad de pómez y escoria; así corno bloques y "bombas" de diferente tamaño, que se encuentran escasamente consolidados y ¡ocalmente estratificados. Estos materiales son los principales constituyentes de los conos cineríticos, y se utilizan como agregados y relíenos en ¡os diversos tipos de construcción. También durante el Cuaternario, en las últimas etapas del volcanismo, se generaron rocas de

composición ácida y de textura variada, entre otras, vitrofiros rioliticos, brechas volcánicas, arenas y cenizas volcánicas; provenientes de magmas silícicos que tuvieron un enfriamiento rápido, dando lugar a la formación de estructuras dómicas como las del cerro Las Derrumbadas y del Cerro Pinto.

Geología Estructural

El Eje Neovolcánico se formó en una zona de fallas de tensión que dieron lugar a grandes fosas y fallas diagonales de orientación noreste-suroeste, las cuales afectaron las áreas del volcanismo preexistente. La actividad volcánica se concentró a lo largo de estas grandes fracturas, lo que explica el aspecto bien definido de la provincia como una cadena volcánica. En esta región se presentan rasgos de grandes estructuras de dislocación, que han cortado el territorio poblano en varios cientos de kilómetros. Tal es el caso de la Falla de La Malinche, orientada noreste-suroeste, que tiene su trazo al sureste de Atlixco, y mantiene su expresión morfológica desde Chignahuapan hasta la región de Chilpancingo, Guerrero. En algunas partes, como en el valle de Puebla, la falla está cubierta por depósitos volcánicos del Terciario Superior y del Cuaternario. El volcán. La Malinche se encuentra ubicado en la intersección de la falla del mismo nombre y el Graben Central de Puebla. Los principales aparatos volcánicos que la entidad comparte con los estados vecinos son estrato-volcanes de dimensiones considerables, como el Pico de Orizaba, el Iztaccíhuatl, el Popocatépetl y La Malinche. Estas grandes estructuras fueron formadas por emisiones alternadas de productos piroclásticos y derrames lávicos; además, muestran evidencias de emisiones fisurales, y numerosos conos adventicios que se han desarrollado en sus laderas. Otras estructuras importantes son. los conos cineríticos dispersos por toda la provincia; el grupo de cráteres típicos que reciben el nombre de Xalapascos y Axalapaseos, de los cuales destaca el de Alchichica, con un diámetro aproximado de 1 km; y algunas calderas tanto de colapso como de explosión, entre ellas la de Los Humeros.

PROVINCIA SIERRA MADRE DEL SUR

Cubre toda la porción sur del territorio poblano, y limita al norte con el Eje Neovolcánico. Los factores geológicos que han contribuido a la transformación del relieve original de esta provincia, han sido el tectonismo, el magmatismo sinorogénico, el volcanismo y los largos periodos de exposición a los agentes erosivos, controlados por sistemas de fracturas que nan contribuido al diseño de los patrones de drenaje y a la configuración del paisaje actual. La Sierra Madre del Sur es un conjunto de grupos estructurales y estratigráficos de diferentes eras, interrelacionados de manera compleja y con una gran variedad petrológica. En esta porción de Puebla hay diversos terrenos polimetamórficos antiguos, con edades que datan desde el Precámbrico hasta el Mesozoico Superior, agrupados en tres Complejos, cuyas interrelaciones estratigráficas y estructurales son difíciles de determinar con precisión. La presencia de estos complejos metamórficos ha dado lugar a la creación de diferentes modelos que intentan explicar el origen y la evolución del sur de México.

Estratigrafía

Las rocas más antiguas del territorio poblano son gneises que pertenecen al Precámbrico, se localizan en el extremo sureste, en el municipio de Caltepec. Estos afloramientos forman parte del Complejo Oaxaqueño, que está integrado por gneises de granulita con transición a granulita-anfibolita, incluyendo

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charnockitas, anortositas y pegmatitas. El Complejo Oaxaqueño, por su antigüedad y contenido litológico, es el resultado del primer ciclo orogénico conocido en esta provincia sobre rocas en las que se observan procesos de sedimentación, magmatismo y metamorfismo. En Puebla se encuentra una gran parte de los 'terrenos que constituye el Complejo Acatlán, el cual está dividido en tres asociaciones petrotectónicas superpuestas tectónicamente, en las que tuvieron lugar los procesos de sedimentación clástica en un margen continental convergente, con restos ofiolíticos de cuenca oceánica y el magmatismo orogénico de "arco continental". Este complejo representa la evolución de un margen continental "tipo Atlántico", limitado por un océano Pre-Atlántico en el Cámbrico- Devónico. Este es el único terreno que tiene definida la relación estratigráfica entre el Paleozoico Inferior y Superior. Según algunas interpretaciones científicas, este complejo corresponde a la sutura entre dos continentes, y ha sido ubicado en el lugar actual por medio de un proceso acrecional que lo ha superpuesto a otros terrenos a través de contactos tectónicos y cabalgaduras. En él han sido detectadas hasta siete fases de compresión y seis de metamorfismo. El Complejo Acatlán es de una litología variada y está integrado por numerosas formaciones divididas en dos Subgrupos: Petlalcingo y Acateco. El Subgrupo Petlalcingo está constituido por migmatita (Migmatita Magdalena), esquistos de biotita con intervalos de cuarcita, metagabro diferenciado y esquisto pelítico, de la Formación Chazumba; así como por esquistos psamíticos y pelíticos con presencia de roca verde, esquistos de talco, esquisto calcáreo, metapedernal y rocas magnesíferas pertenecientes a la Formación Cosoltepec. Al Subgrupo Acateco lo constituyen esquistos verdes, anlibolita, metagabro, eclogita, serpentinita, milonita, esquisto pelítico y cuarcita, correspondientes a la Formación Xayacatlán; metareniscas, pelitas y semipelitas tobáceas, metacalizas y metaconglomerados de la Formación Tecomate; además de rocas graníticas aplíticas y pegmatíticas cataclásticas y metamorfoseadas de los Gianitoides Esperanza. También forman parte del Complejo Acatlán algunas rocas intrusivas de composición Trondhjemítica (Tronco Totoltepec), granítica y tonalítica (Diques San Miguel) Este conjunto de rocas metamórficas está representado cartográficamente cor, las claves P (E), P (Mt) y P (Igia). Aflora ampliamente un áreas de los municipios de Acatlán, Xicotlán, Cuayuca, Totoltepec de Guerrero, Ahuotlán e Ixcamilpa de Guerrero. Las rocas del Paleozoico Superior (Pensilvánico), integradas por secuencias de calizas y de areniscas y lutitas interestratificadas, descansan en forma discordante sobre las rocas metamórficas del Paleozoico Inferior. Dichas unidades pertenecen a la Formación Matzitzi. La primera, Ps (cz), está constituida predominantemente por calizas, con intercalaciones esporádicas de lutitas y areniscas. Las calizas forman estratos gruesos fosilíferos, las lutitas y areniscas son calcáreas y presentan huellas de oleaje. Estas rocas afloran al norte de Los Reyes Mezontla. La segunda unidad, Ps (lu-ar), está formada por areniscas carbonatadas con intercalaciones de lutitas calcáreas, así como por algunos conglomerados polimícticos y pequeños estratos de carbón. Esta unidad está intensamente plegada, fallada y afectada por intrusivos; además contiene plantas fósiles bien conservadas. Su contacto inferior es discordante con las rocas metamórficas del Complejo Acatlán, y el superior, también discordante con lechos rojos del Jurásico, y con lutitas y areniscas y calizas del Cretácico Inferior. Sus afloramientos se localizan en Santiago Cuautepec, Caltepec, Los Reyes Mezontla, San Francisco Xochiltepec y en el municipio de San Gabriel Chilac.

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El Triásico no está representado en la porción poblana de la Sierra Madre del Sur. Después del Paleozoico Superior las rocas más antiguas son las del Jurásico Inferior. La unidad del Jurásico Inferior, Ji (lu-ar), está constituida por areniscas, lutitas, limolítas y conglomerados con líticos de rocas metamórficas. Esta secuencia alternante se presenta en estratos delgados, intercalados con algunas capas de carbón que indican un ambiente mixto, predominantemente continental. Subyacen en forma discordante a as rocas metamórficas del Complejo Acatlán

y afloran en áreas correspondientes al municipio de Chila. El Jurásico Medio está representado por unidades rocosas sedimentarias de origen continental, que cartográficamente están marcadas con la clave Jm (ar-cg). Algunas unidades están constituidas por alternancias rítmicas de conglomerados, areniscas, lutitas y limolítas, que contienen fósiles de la flora representativa de este periodo. Sobreyacen en discordancia angular y litológica a las rocas metamórficas del Complejo Acatlán, y subyacen a calizas del Jurásico Superior y a depósitos clásticos del Terciario. En la Sierra Mazateca, esta secuencia tiene como base una unidad de pizarras oscuras con intercalaciones esporádicas de areniscas y lutitas calcáreas. Otras unidades están formadas por alternancia de areniscas arcósicas y conglomerados polimígticos, con algunas capas intercaladas de limolitas, en estratos de espesor variable. Corresponden a la Formación Tecomazúchil y sobreyacen discordantemente a las rocas metamórficas del Paleozoico. Estas unidades afloran en terrenos pertenecientes a los municipios de Tulcingo, Fecomatlán, Petlalcingo, Totoltepec de Guerrero, Tepexi de Rodríguez y Santo Domingo Huehuetlán. Del Jurásico Superior hay dos unidades: una formada por alternancias rítmicas de calizas y lutitas, Js (cz-lul, y la otra por lutitas y areniscas, Js (lu-ar). La primera unidad pertenece a las Formaciones Caliza Chimeco y Mapache en el área de Petlalcingo, y a la Formación Tepexilotla en la Sierra Mazateca. El afloramiento correspondiente a la Caliza Chimeco que se localiza en el municipio de Tianguismanalco, está constituido por una secuencia de cali/as arcillosas, gruesas en la base, con intercalaciones esporádicas de lut'tas de color verde amarillento, y con un gran contenido de pelecípodos y amonitas gigantes muy fragmentados. En la porción media los estratos son gruesos y están formados de calizas oolíticas, que hacia la cima tienden a ser delgados y arcillosos. Suprayace a las rocas del Jurásico Medio en aparente contacto transicional. El afloramiento de la Formación Mapache está integrado por una secuencia de calizas arcillosas grises, en estratos gruesos y medianos, interestratificados con limolitas y lutitas, que forman capas gruesas, medianas y delgadas. Este afloramiento contiene abundantes pelecípodos que indican un ambiente de depósito de zona infralitoral. Subyacc en discordancia erosional a ¡as rocas calcáreas del Cretácico Inferior. En la Sierra Mazateca esta unidad está formada por estratos de calizas de 10 a 30 cm de espesor, y de lutitas de 5 a 30 cm. Esta zona presenta un aspecto pizarroso que acusa un ligero metamorfismo, y sobreyace tectónicamente a las unidades del Cretácico Inferior. La segunda unidad, también perteneciente a la Formación Tepexilotla, consiste en una secuencia rítmica de lutitas bituminosas apizarradas, que forman estratos de 50 cm a 1 m de espesor, intercalados con areniscas arcósicas; además se encuentran algunos estratos de calizas. Esta secuencia indica un ambiente de depósito sublitoral, alfora en los municipios de Eloxochitlán, Zoquitlán y Coyomeapan; sobreyace tectónicamente a lutitas del Cretácico Superior y subyace a la

unidad de lutita-arenisca del Cretácico Inferior. También se encuentra el grupo de terrenos que forman el "Complejo Cuicateco", en ellos la presencia de elementos fósiles indica que pertenecen al rango Jurásico-Cretácico. Dicho complejo está integrado por basaltos almohadillados, interestratificados con rocas sedimentarias marinas. Esta relación sedimentológica hace suponer la existencia de una zona de "arco insular magmático" Además, por la relación anormal que guarda con las secuencias sedimentarias del Cretácico, se cree que pudo haber sido acrecionada tectónicamente. Los protolitos de este complejo corresponden a diversos terrenos más antiguos, y a rocas graboicas y graníticas del mismo rango que se mencionó. En su margen occidental presenta una zona extensa de milonitización, cartografiada como K (Ct) y K (Mt). Estas rocas metamórficas asignadas al Mesozoico consisten en cataclasitas y metasedimentos con rocas verdes. La unidad metasedimentaria tiene como protolitos a secuencias sedimentarias con intercalaciones de coladas, probablemente pertenecientes a una secuencia de arco volcánico, que han sido deformadas y metamorfizadas. Estas rocas se encuentran muy plegadas y presentan metamorfismo incipiente de la facles más baja de esquisto verde. Incluye metaconglomerados, metacalizas y metalavas andesíticas porfídicas. Subyace a la unidad de cataclasita y sobreyace a una porción de la Formación Chivillas. Aflora en áreas de San Antonio Cañada, Coxcatlán, Zoquitlán y Teotitlán. La unidad de cataclasita está constituida por rocas con metamorfismo dinámico, cuyo protolito corresponde a rocas sedimentarias que al ser afectadas por procesos de metamorfismo adoptaron texturas gneisica cataclástica y blastocataclástica. Contiene también rocas ultramáficas (horblenditas). Esta unidad forma pliegues recostados generalmente hacia el oriente, y se distribuye en el flanco occidental de la Sierra Mazateca. Está cubierta en forma discordante por conglomerados del Terciario, de la Formación Cuarteles, y sobreyace por contacto tectónico a la unidad metasedimentaria del Cretácico. El Cretácico Inferior está representado por unidades de: conglomerados, Ki (cg); lutitas y areniscas Intercaladas, Ki (lu-ar); calizas, Ki (cz); limolitas y areniscas, Ki (Im-ar); y andesitas, Ki (A). La primera unidad está constituida de conglomerados con algunas intercalaciones de areniscas de ambiente marino, cercano a la costa. Pertenece a la Formación Zapotitlán, sobreyace discordante al Complejo Acatlán y subyace por contacto transicional a la unidad de lutitas y areniscas de la Formación San Juan Raya. Aflora en terrenos de los municipios de Atexcal y Zapotitlán. La segunda está formada por lutitas calcáreas intercaladas con gruesos bancos de calizas fosilíferas, y por lutitas y areniscas calcáreas con abundante fauna de diversas especies. La unidad aflora en áreas de Atexcal, Zapotitlán, Tehuacán, Juan N. Méndez, Ajalpan y Coyomeapa, y está correlacionada con las Formaciones Zapotitlán, Chivillas, San Juan Raya y Capolucan, del Aptiano. La unidad de calizas pertenece a las Formaciones Miahuatepec, Morelos, Orizaba, Tamaulipas Superior y una parte de la Formación Xonamanca. La porción de esta última Formación corresponde al Neocomiano, consta de calizas y dolomías, así como de escasas tobas, limolitas y grauvacas. La Formación Miahuatepec, del Aptiano, está constituida por caliza gris muy plegada y fallada, con sus fracturas rellenas de calcita. Forma estratos gruesos a los que ocasionalmente se intercalan capas arcillosas que incluye nódulos y bandas de pedernal y margas. Descansa de manera discordante sobre unidades de Paleozoico Superior y sobre las lutitas y areniscas del Cretácico Inferior; además, está cubierta por sedimentos del Terciario Inferior.

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La Formación Morelos, del Albiano- Cenomaniano, está formada por calizas masivas de color gris, fosilíferas, con gasterópodos, rudistas y microfósiles. Estas calizas sobreyacen a rocas del Jurásico y Cretácico Inferior y subyacen a sedimentos continentales del Terciario. La Formación Orizaba, también del Albiano- Cenomaniano, consiste en calizas dolomitizadas, masivas, que contienen rudistas, miholidos y fragmentos de briozoarios. Descansa sobre unidades del Cretácico Inferior y está cubierta por calizas del Cretácico Superior. Los afloramientos de dichas calizas están localizados en los municipios de Tulcingo, Albino Zertuche, Chietla, San Diego la Mesa Tochimiltzingo, Tepexi de Rodríguez, Tlacotepec de Benito Juárez, Zapotitlán y San José Miahuatlán. La unidad de limolitas y areniscas constituye una secuencia de capas rojas continentales, con intercalaciones de calizas marinas. Está integrada por escasas lutitas guindas, limolitas y areniscas silíceas de color verde olivo, a veces conglomerates, con gradación en capas delgadas y medianas. Incluye horizontes de conglomerado con líticos de caliza y rocas volcánicas, un paquete de calizas con Toucasias, e intercalaciones de tobas verdes andesíticas. También hay una interestratificación de capas pizarrosas, calizas, margas y limos de colores verde y rojo, con ostreas. Aflora en terrenos de Cohetzala y Santo Domingo Huehuetlán. Al oriente de Tehuacán, en la Sierra de Chivillas, aflora la unidad de andesitas, que corresponde a una secuencia volca nosed ¡menta ría constituida por intercalaciones de andesitas con calizas, areniscas y lutitas. Las andesitas tienen una estructura fluidal almohadillada y vesicular; las calizas son oolíticas, conglomeráticas negras, de aspecto masivo, con líticos de andesita, y presentan fósiles de caprínidos y ostreidos. Las areniscas son de color rojizo y forman capas gruesas laminares; las lutitas son calcáreas, de color gris oscuro e integran capas delgadas. Del Cretácico Superior hay unidades de calizas, Ks (cz); de calizas y lutitas, Ks (cz-lu); y de lutitas, Ks (lu). La unidad de calizas pertenece a las Formaciones Tehuacán, Guzmantla y Maltrata. En la primera formación la caliza es rojiza, de facies pelágica y arrecifal, con microfauna. Se encuentra fracturada, presenta vetillas de calcita, bandas y nodulos de pedernal y está dispuesta en estratos de más de un metro de espesor. Aflora en el municipio de Tehuacán. En la Formación Guzmantla la caliza es gris crema con nódulos de pedernal, está muy recristalizada e intensamente fracturada; presenta vetillas de calcita, estilolitas, cavidades de disolución, y contiene diversos microfósiles que indican un ambiente de depósito de plataforma lagunar interarrecifal. Aflora en áreas de Tepeaca. La caliza de la Formación Maltrata aflora cerca de Tetla, incluye sedimentos calcáreos de ambiente de cuenca depositados en estratos delgados, con bandas y nódulos de pedernal negro y algunas lutitas calcáreas intercaladas. Presenta pliegues en "Chevrón" La unidad de calizas y lutitas es integrante de las Formaciones Maltrata y Mezcala. La primera consiste en una intercalación de calizas y lutitas calcáreas, amarillentas, intensamente deformadas, las cuales afloran en las cercanías de Tetla. La segunda formación está constituida por calizas grises interestratificadas con lutitas calcareolimosas grises oscuras, dispuestas en capas de 10 a 60 cm de espesor, y se encuentra también como una secuencia rítmica de tipo flysch de calizas y lutitas, en estratos de 5 a 50 cm, con bandas de pedernal negro. Representan un ambiente de cuenca poco profundo y afloran al sur de Puebla. La unidad de lutitas está formada por lutitas calcáreas y margas pardo amarillentas, en estratos de 10 a 15 cm, que presentan laminación ondulante y microfauna de

Globotruncanas Esta unidad se encuentra intensamente deformada y apizarrada, pertenece a la Formación Méndez-Necoxtla y aflora en los municipios de San Sebastián Tlacotepec, Eloxochitlán y Zoquitlán. El Cenozoico está representado por distintos tipos de unidades rocosas que reflejan, en los fenómenos de sedimentación, dislocación y magmatismo, la intensa actividad tectónica y volcánica ocurrida en diferentes ciclos geológicos del Terciario Inferior y Superior y del Cuaternario. Durante el Cenozoico se formaron numerosos depósitos clásticos de origen continental, así como depósitos de rocas ígneas extrusivas, que cubrieron la superficie plegada de las rocas del Mesozoico, y aun las del Paleozoico. También se formaron yacimientos de mármol, T (M), por la recristalización de las rocas calcáreas de la Formación Orizaba, perteneciente al Cretácico. Esta unidad consta de mármol cataclástico de color blanco a gris, y está formada por calcita espática, cuarzo y sílice secundario. Sobreyace por falla inversa a las rocas calcáreas de la Formación Tuxpanguillo, integra una franja con relieve crástico de medio a un kilómetro de ancho y aflora en la porción central de la Sierra Mazateca. El Terciario Inferior está representado por unidades sedimentarias cubiertas en algunas partes por rocas ígneas, que posiblemente fueron precedidas por.eventos que dieron lugar a la formación de cuerpos de rocas intrusivas granodioríticas y graníticas, T ligia); y a derrames dacíticos y andesíticos. Ti (Igeil La unidad T (Igia) se presenta en forma de troncos de cuerpos rocosos de granito, el cual gradúa hacia la periferia a granodiorita. El cuerpo que se halla en las inmediaciones del Jolalpan es un microgramto muy fracturado e intemperizado. Estos intrusivos están emplazados en colizas del Cretácico y en rocas metasedirrientarias del Paleozoico, afloran cerca de Chiautia y en áreas del municipio San Miguel Ixitlán. Los derrames son de andesitas con textura afanítica y presentan lajeamiento provocado por esfuerzos de tensión. Sobreyacen a rocas sedimentarias del Cretácico y afloran en terrenos de San José Miahuatlán. Las unidades sedimentarias del Terciario Inlerior son; La de lutitas y areniscas, que constituyen una secuencia alternante tipo flysch, T pal (lu-ar), en la cual las areniscas forman estratos de 10 a 30 cm, guardan impresiones de plantas mal conservadas y en ocasiones contienen foraminíferos. Esta secuencia corresponde a las Formaciones Chicontepec y Velasco, descansa sobre calizas del Cretácico Superior y está cubierta por areniscas y conglomerados del Mioceno. Aflora en el municipio de San Sebastián Tlacotepec. La unidad integrada por lutitas arenosas de color verde y areniscas arcillosas rojizas en estratos de 50 cm a 1 m, Ti (lu-ar) Esta sobreyace a rocas metamórficas y sedimentarias del Paleozoico y Mesozoico en la Sierra Mazateca. Pertenece a la parte inferior de la Formación Cuarteles y aflora al oriente de Tehuacán y en áreas de San José Miahuatlán. La constituida por calizas de color claro en estratos de 1 0 a 30 cm, y por capas intercaladas de lutitas calcáreas de origen continental, Ti (cz-lu). Dicha unidad es integrante de la Formación Cuarteles y sobreyace a la secuencia de areniscas y conglomerados de la misma Formación. Aflora en terrenos de San José Miahuatlán. La unidad cartografiada como Ti (lu-y), que está formada por lutitas verdosas intercaladas con yeso y escasas areniscas, conglomerados y calizas de origen continental. Pertenece a la Formación Cuarteles. Sobreyace a las unidades de caliza y lutita, lutita y arenisca, y caliza del Cretácico Inferior. Aflora en territorios de San Gabriel Chilac y Zapotitlán; lo mismo que al sur de Tehuacán, donde está constituida por lutitas, yesos, calizas y limolitas, correspondientes a la Formación Tehuacán.

La de areniscas y conglomerados, Ti (ar-cg), que consiste en una alternancia de areniscas calcáreas, con estratificación gradada, y conglomerados olimígticos dispuestos en espesores de 2 a 10 m, cuyos líticos son esquistos, e incluye también una matriz calcareo-arenosa. Presenta burda estratificación, cubre discordantemente a las rocas metamórficas del Complejo Acatlán y a la unidad de areniscas y conglomerados del Jurásico Medio. Aflora en los municipios de Ajalpan, Coxcatlán y Tepanco de López. La unidad Ti (cg), constituida por conglomerados rojos y calcáreos, con interdigitaciones y superposiciones de paquetes de areniscas y limolitas En su mayoría, los conglomerados son masivos y bien compactados, compuestos por fragmentos de calizas, dolomías, areniscas, pedernal y rocas ígneas. Esta unidad contiene ntercalaciones de derrames de basaltos y andesitas, pertenece a la Formación Balsas y aflora en zonas correspondientes a Jolalpan, Acatlán, Chietla, Cuayuca, Tehuacán y Huehuetlán el Chico. Por último se encuentra la unidad de calizas, Ti (cz), que está' formada por calizas continentales de color crema y textura arenosa, dispuestas en capas de 60 a 70 cm de espesor, parcialmente silicificadas y con fragmentos de pedernal. En la base de esta unidad hay conglomerados, y en la parte superior areniscas. Posiblemente corresponde a la Formación Balsas. Sobreyace discordantemente a calizas y lutitas del Cretácico Superior y a esquistos del Paleozoico. Aflora en los municipios de Tepexi de Rodríguez, Huitziltepec, Tochtepec y Xochitlán Todos Santos. El Terciario Superior está representado por una secuencia de rocas ígneas de composición y textura diversas, agrupados en tres unidades; así como por unidades sedimentónos que constituyen depósitos de rocas híbridas, volcanoclásticos, lacustres, de evoporitas y arenocong lomera ticos. La unidad de rocas ígneas extrusivas intermedias, Ts (Igei), está formada por derrames tipo aa de andesitas porfídicas amigdaloides, que presentan intemperismo esferoidal, y por tobas vitrocristalinas de composición andesítica, con seudoestratificación. Descanso sobre sedimentos continentales del Terciario Inferior y sobre rocas metamórficas del Paleozoico, y está cubierta por basaltos y brechas volcánicas Básicos Sus afloramientos se ubican al oriente de Nicolás Bravo y en territorios de Chiautla, Jolalpan, íeotlalco, Cohuecón, Tepexco, Chilo y Ahuatlán. En algunas áreas de los municipios Juan Galindo, Tecomatlán, Caltepec y San Jerónimo Xayocotlán, aflora la unidad de rocas ígneas extrusivas básicas, Ts (Igeb), que está constituida por basaltos vesiculares y arnigdaloides, de textura holocristalina, con aspecto de lavas acordonadas y bloques. Además, presenta alternancias de coladas basálticas con brechas volcánicas básicas. Sobreyace a rocas metamórficas y depósitos continentales del Paleozoico, lo mismo que a rocas del Cretácico Inferior y Superior La unidad de rocas ígneas extrusivas ácidas, Ts (Igea), aflora en terrenos de Izúcar de Matamoros. Está integrada por toba ácido en seudoestratos de 2 m aproximadamente, y por algunas intercalaciones de toba intermedia con lapilli pumicítico. Se encuentra sobre basaltos del Terciario Superior y sobre calizas del Cretácico Inferior y Superior En los municipios de Guadalupe y Chiautla están ubicados los afloramientos de la unidad de rocas híbridas, T (ar-T). Esta consiste en una interestratificación de epiclásticos, volcanoclásticos y depósitos tobáceos, casi horizontales, así como de conglomerados calcáreos, arenitas volcánicas y tobas ácidas retrabajadas. La secuencia fue afectada por algunos diques y mantos diabásicos. La unidad de volcanoclásticos, T (v) es de composición dacítica o riolítica, de diversas texturas. Está formada por arenas volcánicas

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intercaladas con areniscas y conglomerados híbridos, los cuales presentan horizontes bentonícos, estratificación cruzada y superficies de erosión. Aflora en los municipios de Tepexco y Chiautla. Los depósitos lacustres, T (Im-ar), están integrados por limolitas y areniscas pertenecientes a diversas formaciones del Terciario Los constituyen clásticos continentales que comprenden conglomerados calcáreos, areniscas tobáceas y arcillas; derrames de rocas volcánicas andesíticas y basálticas, así como lutitas, limolitas, areniscas, calizas lacustres con pedernal y algunas capas de evaporitas intercaladas entre las tobas. Los afloramientos de esta unidad se localizan en terrenos de Tehuitzingo, Tecomatlán, Tulcingo y Santa Inés Ahuatempan La unidad ce evaporizas, Ts ly), consiste en yesos intercalados con estratos arcillosos horizontales También incluye limos, conglomerados, calizas, margas y pedernal. Pertenece a la Formación Cuayuca, sobreyace discordante a la Formación Balsas y se encuentra interestratificada con rocas volcánicas de la Formación Tepexco. Aflora en las cercanías de Jolalpan y en áreas de Teotlalco. Del Cuaternario hay una unidad volcánica, Q ílgebi, en la que se incluye un conjunto de rocas ígneas uxírusivas de composición básica y textura diversa. Asimismo, hay rocas sedimentarias sem ¡consolidadas que forman unidades de areniscas y conglomerados, T Pl (ar-cg); conglomerados, Q (cg); travertino, Q (tr); caliche, Q (ch); depósitos aluviales recientes no consolidados y algunos depósitos lacustres, Q (s). La primera unidad forma aparatos volcánicos cómeos y depósitos lávicos, cuyos componentes son brechas, tobas, alternancia Ce co'Tientes lávicas y productos piroclásticos, cenizas y lapnEsta unidad se correlaciona con la Formación Chichinautzin y, por ser la mas ¡oven, cubro incluso a depósitos aluviales. Aflora en territorio de Yehualtcpcc y Xochitlán. La unidad de areniscas y conglomerados corresponde a la Formación Cuernavaca. Consiste en una mezcla de depósitos clásticos y volcanoclásticos continentales, así como de conglomerados originados oor abanicos aluviales, con ciastos andesíticos. Los abanicos están interdigitados con material volcanoclástico de tipo lahárico. En algunas partes, la unidad su presenta como una alternancia de areniscas con horizontes gravosos y conglomérateos u horizontes de arenisca tobácea. Además, incluye depósitos margosos, diatomáceos, de yesos y travertinos Descansa discordantemente sobre casi todas las unidades litológicas de la provincia y aflora en áreas de los municipios Tulcmgo, Tecomatlán, Cohuecán, Chietla y Chila de la Sal. La tercera unidad, Q leg), está constituida por conglomerados polimígticos continentales, con Uticos de calizas, areniscas, rocas ígneas y fragmentos de cuarzo y pedernal, englobados en una matriz arciHo arenosa poco consolidada y pobremente cementada. Sobreyace de manera discordante a sedimentos continentales del Terciario, de la Formación Cuarteles, y a lutitas y areniscas del Paleozoico Superior y del Cretácico Inferior. Sus afloramientos están situados en las faldas de la Sierra Mazateca, al sur de Zapotitlán de Salinas y en el municipio de Santo Domingo Huehuetlán. La unidad de travertino tiene su origen en el proceso de evaporación de antiguos manantiales. Está formada por travertino bandeado y cristalino, que Incluye tufas calcáreas porosas con rubificaciones e impresiones de plantas y cavernas de disolución. Cubre a depósitos de la Formación Cuarteles, y aflora a manera de pequeñas terrazas en el valle de Tehuacán. Al poniente de Tepanco de López y en terrenos de San Juan Ixcaquixtla se localiza la unidad de caliche, que es el resultado de la

acción capilar y de la evaporación de aguas ricas en óxido de calcio sobre un sustrato calcáreo antiguo. Consiste en una costra blanco amarillenta de 1.5 m de espesor aproximadamente, con un promedio de regolita de 50 cm, aunque en algunos lugares es de gran espesor y tiene ciastos de calizas y fragmentos de conchas de gasterópodos. Descansa sobre calizas y lutitas del Cretácico Superior. La última unidad, Q (s), está constituida por depósitos arenogravosos que sobreyacen discordantemente a las demás secuencias. Dentro de esta unidad quedan incluidos los sedimentos lacustres, como los que están ubicados en la margen de la presa Valsequillo

Geología Estructural

Esta provincia constituye una región de alta complejidad estructural, en la cual se presentan varios dominios tectónicos yuxtapuestos. Las rocas más antiguas manifiestan varias etapas de deformación, intrusión y metamorfismo de tipo regional y cataclástico. Las estructuras de mayor relevancia son las que reflejan las etapas de deformación plástica y cataclástica, como son plegarnientos y fallas normales e inversas, y diversos sistemas de fracturas orientados generalmente noroeste-sureste. Las estructuras plegadas son simétricas y recostadas, principalmente en la Sierra Mazateca, donde se encuentran dislocadas conforme a una sene de escamas definidas por fallas inversas que yuxtaponen bloques de diversas características. Las fallas normales definen pilares y cuencas. Las secuencias de rocas del Jurásico y el Cretácico forman pliegues asimétricos, recumbentes y desarmónicos, con fallas inversas y normales. Las rocas del Terciario Inferior presentan combamientos con echados de más de 45°. En cambio, los depósitos volcánicos del Tercano Superior están por lo general en forma horizontal, con algunos basculamientos, fallas y fracturas de orientación diversa. Las intensas deformaciones y dislocaciones, así como el metamorfismo que afectó las secuencias rocosas del Complejo Acatlán, dificultan la Interpretación paleográfica en esta provincia.

GEOLOGIA ECONOMICA

Como actividad económica en Puebla, la minería es de poca importancia, ya que la

explotación es reducida y el valor de la producción de escasa relevancia. Sin embargo, cuenta con numerosos yacimientos de minerales no metálicos, entre los que destacan los de barita, yeso, talco, perllta, mármol, feldespato, arcilla, caliza, bentonita y magnetita. En los municipios de Zacatlán y Zacapoaxtla están localizados los yacimientos de grafito y hulla. Tehuitzingo, en la Sierra Madre del Sur, y Xicotepec, en la Sierra Madre Oriental, son los productores de barita. El primero sólo produjo 31 toneladas en 1977; mientras que en el segundo la producción fue de 16 863 toneladas en 1980, de 18 733 toneladas en 1981 y de 15 686 en 1982. Puebla ha contribuido con el 20% de la producción nacional de yeso. Es el principal productor de sílice expandible <perlita) y ocupa los primeros lugares en la producción de caolín, bentonita, calcita, sodio y talco industrial. Además, los mármoles poblanos son conocidos internacionalmente por su calidad. Los yacimientos de minerales metálicos son escasos y están ubicados en Ixcamilpa de Guerrero e Izúcar de Matamoros, ambos en la Sierra Madre del Sur. En Ixcamilpa se explotó un total de 6 toneladas de plomo y 48 kilogramos de plata, en 1981. En Izúcar se produjeron 79 toneladas de plomo en 1981 y 21 toneladas en 1982, así como 37 y 14 kilogramos de plata en cada año, respectivamente; en 1981 se obtuvieron 2 toneladas de cobre, y 2 kg de oro en 1981 y 1 kg en 1982 " En Tepeaca se explota la caliza en forma de bloques para obtener losetas, gravillas y agregados. La exploración de petróleo se reduce a algunas zonas que corresponden a la Llanura Costera del Golfo Norte. Conforme a los datos reportados en 1981 por la Dirección General de Minas de la Secretaría del Patrimonio y Fomento Industrial, en Puebla hay 9 plantas de beneficio, que en su mayoría procesan minerales no metálicos, como: yeso, barita, sílice, bentonita, caolín, feldespato, grafito, magnesita y talco. En Izúcar de Matamoros se reporta una planta que tiene capacidad para procesar, por flotación, 30 toneladas diarias de minerales de plomo y oro. En Tetela de Ocampo está instalada otra planta con capacidad para procesar 20 toneladas diarias de minerales de oro y plata, aplicando el proceso de amalgamación y cianuración.

'Anuario Estadístico de la Minería Mexicana, 1982 Consejo de Recursos Minera es

PLANTAS DE BENEFICIO INSTALADAS EN PUEBLA

Razón Social Ubicación Sistema de Minerales Municipio Capacidad Tratamiento Beneficiados

Minerales y Molienda ile Puebla, S.A Yeso Panamericano. S A de ( Cía Minera del Sur, S A Yeso Cerro Blanco, S A Yeso La Montaña, S A Martínez Hernández Emeterio Cía Industr.al Kaisei, S A. M reíales Le Cruz del Su' S /

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FUENTE: Dirección General de Minas de la Secretaría del Patrimonio y Fomento Industrial, 1981.

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6. Hidrología

El estado de Puebla reviste gran importancia económica debido a su posición geográfica, a su creciente industrialización y a su desarrollo agropecuario. Uno de los factores vitales para este desarrollo ha sido el agua, tanto superficial como subterránea. La configuración del territorio poblano ha propiciado que la mayoría de sus corrientes sean las formadoras de los importantes ríos que corren en los estados vecinos (Veracruz y Oaxaca). Asimismo, la topografía accidentada ha permitido construir, sobre el cauce de las corrientes, obras hidráulicas relevantes, de las cuales gran parte se destina a la generación de energía eléctrica, siendo mínimo su aprovechamiento en la agricultura, pues sólo el 15% del área agrícola se irriga con el agua de tales almacenamientos. El agua del subsuelo también es importante, ya que se utiliza con fines industriales y domésticos en el valle de Puebla, lugar donde

se ubican la capital estatal y los mayores centros industriales de la entidad. Este valle se encuentra dentro de la cuenca del río Atoyac, su recurso hidrológico subterráneo es relativamente abundante y es factible explotar cantidades adicionales de agua en forma permanente

HIDROLOGIA SUPERFICIAL

Para describir con mayor amplitud la hidrografía del estado de Puebla, se dividió a éste en tres zonas, tomando como base la regionalización hidrológica elaborada por la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos.

Región Hidrológica "Río Balsas"

Esta región comprende la mayor parte de la entidad (20 328.17 km2), abarca las zonas

centro, oeste y suroeste. Tiene como cuenca principal la del río Atoyac, que es la corriente formadora más importante del Balsas, y está considerada como su origen. El río Atoyac se forma a partir de los deshielos que descienden, desde altitudes superiores a los 4 000 m, del flanco oriental del volcán Iztaccíhuatl, en los límites de los estados de México y Puebla. En su recorrido recibe varias aportaciones relevantes por una y otra margen, como son las de los ríos Nexapa, Mixteco, Acatlán, Zahuapan , Alseseca y otros. En la ciudad de San Martín Texmelucan, Pue , las aguas de dicha corrriente y sus afluentes se aprovechan en las actividades agrícolas, domésticas e industriales. Esta porción se caracteriza por lo accidentado de su topografía y el grado de pendiente de los cauces de sus corrientes, mismas que, sin control pueden ocasionar pérdidas en la agricultura. El rango de escurrimiento en esta cuenca es menor de 10 mm y el gasto medio de sus corrientes de 9.152 m3/seg. Este promedio se obtuvo de las 14 estaciones hidrométricas ubicadas en la entidad, de las cuales se tienen registros en un periodo de 12 años. Dicho gasto corresponde al 55% de los escurrimientos aforados en el estado. Dentro de esta cuenca se encuentran importantes obras hidráulicas, entre las que destacan las presas: Atexaco, con capacidad de 150 millones de m3, y cuya agua se utiliza para la generación de energía eléctrica; Boqueroncítos, que tiene una capacidad de 5 millones de m3 y de la cual el agua se emplea para irrigar algunas de las zonas agrícolas; La Soledad, con 62 millones de m3, empleada en la generación de energía eléctrica; y Manuel Avila Camacho (Valsequillo), con 405 millones de m3 de capacidad. Las aguas de esta última presa se aprovechan en el distrito de riego No. 30 "Valsequillo", a través de canales. De esta misma región hidrológica, en Puebla se encuentra una pequeña porción de la cuenca del río Grande de Amacuzac. Dentro de dicha porción se localiza la presa Huachinol, que tiene una capacidad de 5 millones de m3 y se utiliza para riego

Región Hidrológica "Tuxpan-Nautla"

Comprende la parte norte del estado de Puebla (8 246.19 km2!, lugar en el cual está representada por parciales de las cuencas de los ríos Tecolutla, Cazones y Tuxpan. El río Tecolutla tiene su origen en la Sierra Norte de Puebla. Algunos de sus afluentes en esta zona son los ríos Necaxa, Laxaxalpa y Apulco. Los afluentes del río Cazones en territorio poblano son el San Marcos y el Tenixtepec, entre otros. El río Tuxpan es alimentado dentro de la entidad por el Tepantepec y sus afluentes El rango de escurrimiento en estas cuencas es de 100 a 200 mm, y el gasto medio de sus corrientes de 101 .84 m3/seg. Este gasto corresponde al 44% de las corrientes de la entidad, las cuales se ubican en esta zona. Los almacenamientos más relevantes de la región, que en su totalidad se emplean para generar energía eléctrica, son las presas:

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REGIONES HIDROLOGICAS Y CUENCAS

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LIMITE DE REGION HIDROLOGICA

LIMITE DE CUENCA

R.H. 18 Río "Balsas" CUENCA A Río Atoyac CUENCA E Río Ttapaneco CUENCA F Rio Grande de Amacuzac R.H. 26 Río "Pánuco" CUENCA D Río Moctezuma R.H. 27 "Tuxpan-Nautla" CUENCA A Río Nautla y otros CUENCA B Rio Tecolutla CUENCA C Rio Cazones CUENCA D Río Tuxpan R.H. 28 "Papaloapan" CUENCA A Rio Papaloapan CUENCA B Río Jamapa y otros

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Los Reyes, cuya capacidad es de 32.5 millones de m3; Nexaca, con 43 millones de m3 de capacidad: Nexapa con 17 millones de m3; y Tenango, con 50 millones de m3

Región Hidrológica "Papaioapan"

Dentro del estado de Puebla está integrada por dos áreas que corresponden a las cuencas "Río Papaioapan" y "Río Jarrtapa", que en conjunto abarcan 5 442.68 km2 de la superficie total estatal. En esta zona, las corrientes tienen una disposición radial y paralela controlada por las elevaciones de la Sierra Madre Oriental y el Pico de Orizaba. El río Papaioapan se origina en la Sierra Madre de Oaxaca y el Nudo Mixteco. En territorio poblano,la cuenca de este río ocupa la zona sureste y sus afluentes son los ríos: Comulco, Hondo, Tonto, Petlapa, Zapotitlán y Rancho Cabras, entre otros. En esta porción se encuentra una gran área del distrito de riego "Valsequillo", el cual se irriga a través de canales con las aguas de las corrientes mencionadas. El rango de escurrimiento aquí es de 1 000 mm y el gasto medio anual de 1 1 .55 millones de m3. Este dato se obtuvo de las dos estaciones hidrornétricas ubicadas en los ríos Zapotitlán y Rancho Cabras, de las cuales se tienen registros en un periodo de más de 1 0 años La cuenca del río Jamapa comprende una pequeña porción del oriente poblano. Dicho río nace en las faldas del Pico de Orizaba y corre en la barranca Coscomatepec hasta la confluencia con el río Xicuintla, a partir de aquí se conoce ya como Jamapa El rango de escurrimiento en esta área es de 500 a 1 000 mm, pero no se tienen estaciones hidrométricas para calcular el gasto medio de las corrientes.

HIDROLOGIA SUBTERRANEA

La extracción y aprovechamiento del agua subterránea se efectúa en diversas zonas de la entidad En la región Tepeaca-Valsequillo, que comprende los valles de Tepeaca, Palmar de Bravo y el distrito de riego Valsequillo, se ha desarrollado la agricultura aprovechando el agua subterránea junto con la superficial. La potencialidad de los acuíferos permite ampliar la superficie agrícola de riego, pero se enfrentan algunas dificultades para la captación del recurso, debido a que la estructura geológica del subsuelo es compleja. Hacia el sur, entre Valsequillo y Tehuacán, se distribuyen grandes afloramientos de calizas que descansan sobre rocas metamórficas paleozoicas. Estos afloramientos constituyen el borde norte de la Sierra Madre del Sur y funcionan como zona de recarga del manto acuífero. En esta porción se localiza la región de Tehuacán, en la que se aprovecha el agua subterráneas con fines agrícolas; e industriales mediante una red de galerías filtrantes de notable longitud; así como la región de Atllxco-lzúcar, en donde se pretende incrementar el área agrícola uitlizando el agua del subsuelo. En la cuenca de Oriental hay acuíferos que pueden ser aprovechados como fuente complementaria de abastecimiento de agua para la Ciudad de México.

Unidades Geohidrológicas

Se definen así aquellas unidades constituidas por uno o varios tipos de material, en los cuales las características físicas, tales como porosidad, permeabilidad, grado de cementación, etc., permiten o no su funcionamiento como acuíferos.

Estas unidades se clasifican de la siguiente manera: Unidades geohidrológicas de material consolidado de permeabilidad alta, media y baja; y unidades geohidrológicas de material no consolidado de permeabilidad alta, media y baja. En el estado de Puebla se localizan las siguientes:

Unidad de Material Consolidado de Permeabilidad Alta.

Esta unidad está constituida por rocas ígneas en la porción correspondiente al Eje Neovolcánico y por rocas sedimentarias en la Sierra Madre Oriental. Se distribuye de forma discontinua y abarca el 18% de la superficie estatal. Dentro del primer tipo de rocas destacan los basaltos, en los que, por fracturamiento, movimientos tectónicos y efectos denúdatenos, existe una intercomunicación de flujo del agua. En las calizas, que afloran principalmente en e, norte del estado, el fracturamiento y los planos de estratificación ensanchados por disolución, permiten la infiltración del agua.

Unidad de Material Consolidado de Permeabilidad Media

En esta unidad se agrupan las rocas sedimentarias que no presentan buena permeabilidad debido a su escaso fracturamiento, a la presencia o alternancia de arcilla y a .a cementación media. Dentro de ésta se encuentran las unidades areno- conglomeráticas que se ubican al sur del estado, en los alrededores del poblado de Chigmecatitlán y al sur de San Gabriel Chilac. También se agrupan las rocas ígneas que tienen escaso fracturamiento. Tal es el caso de los basaltos, las andesltas y los plroclastos depositados en medios lacustres, que se distribuyen notablemente en la zona correspondiente al Eje Neovolcánico.

Unidad de Material Consolidado de Permeabilidad Baja

Está integrada tanto por rocas ígneas como por sedimentarias y metamórficas. En las prmeras se agrupan las intrusivas, los derrames y los piroclastos de composición ácida, intermedia y básica. Estas rocas tienen un fracturamiento escaso no intercomunicado, por lo que geohidrológicamente funcionan como barreras o confinantes. Las rocas sedimentaras, entre ellas las lutltas, las calizas y las areniscas, se clasificaron con permeabilidad baja debido a su contenido o alternancia de material arcilloso, a su escaso fracturamiento y a su tipo de cementación y grado de compactación. Las rocas metamórficas, por su genética y su fracturamiento poco profundo y escaso, están consideradas como malas conductoras y almacenadoras de agua. Esta unidad abarca el 45% de la superficie estatal, se distribuye ampliamente en la entidad, y comprende áreas de mayor proporción en la Sierra Madre del Sur.

Unidad de MateriaI no Consolidado de Permeabilidad Alta.

Están clasificados en esta unidad los conglomerados poco compactados, bien clasificados y con porosidad intercomunicada, a arena y la grava. Estos materiales se encuentran en los valles y abanicos aluviales situados principalmente en el centro del estado y al sur de la presa Valsequillo. En

conjunto, la unidad abarca el 16% de la superficie total del estado.

Unidad de material no Consolidado de Permeabilidad Media

Está constituida por todos aquellos materiales de origen aluvial y lacustre mal clasificados, con alternancia o contenido de arcilla, bien compactados y algunos con presencia de cementante calcáreo. Dicha unidad ocupa el 6% del área estatal y se distribuye fundamentalmente en les alrededores de San Vicente Coyotepec, Ahuatlán y Tecali de Herrera.

Potencial Acuífero

En el estado de Puebla, actualmente hay ubicados de 2 033 a 2 500 pozos. Las principales áreas donde se distribuyen son: la reglón de Atoyac, que comprende una zona de explotación de 750 km2, en la cual la recarga anual es de 310 millones de m3 y la extracción, también anual, de 139 millones de m3; la región Tepeaca-Valsequillo, donde la zona de explotación abarca 1 800 km2, la recarga anual es de 164 millones de m3 y la extracción de 75 millones de m3; la cuenca cerrada de Oriental, con una zona de explotación de 3 000 km2, una recarga anual no cuantlficada todavía y una extracción de 30 millones de m3; la región Atlixco-Ma ta moros, cuya zona de explotación es de 990 km2, en la que no se ha cuantificado la recarga y se extraen 16 millones de m3 de agua al año; y la región de Chinantla-Ahuehuetitla, que abarca una zona de explotación de 50 km2, sin que se haya cuantificado su recarga anual, pero con una extracción anual de 1 millón de m3. La condición geohidrológica de estas áreas es de subexplotada, pues aunque no se cuenta con los datos de recarga en todos los casos, ésta es mayor que la extracción. Tomando como base las condiciones antes expuestas, de los tres tipos de veda (rígida, intermedia y elástica) establecidos por la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos, en territorio poblano únicamente opera la elástica. Esta permite la explotación del agua subterránea para cualquier uso, pero bajo control de la misma Secretaría. Las áreas sujetas a este tipo de veda son: la cuenca cerrada de Oriental-Perote, el norte y suroeste de la presa Manuel Avila Camacho, el distrito de Riego No. 30 "Valsequillo", la cuenca de Tehuacán y toda la porción sureste. Así, se puede considerar que el estado de Puebla tiene una condición hidrológica buena, que permite ampliar la explotación del agua subterránea.

Geotermia

En la entidad se encuentran importantes focos termales, entre los que destacan Los Humeros. Esta zona se localiza en las cercanías de Perote, Veracruz, el área de estudio por parte de la Comisión Federal de Electricidad es del orden de 5 000 km2 y resulta promisoria, ya que la cubierta de rocas ígneas ácidas sobreyace a una estructura de rocas sedimentarias que favorecen al suministro geohidrológico. La temperatura de los focos termales es de 90°C y éstos resultan de gran interés geotérmico. Otras zonas de importancia térmica son: Zacatlán, Chignahuapan, con temperatura de 50°C; Ixtlaclala, con 43°C; Las Derrumbadas, con 90°C; Santa Cruz el Porvenir, Rancho el Colorado y Los Baños de Atotonllco y Colucán (Gerencia de Proyectos Hidroeléctricos, Departamento de Geotermia, C.F.E.).

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7. Suelos

Cerca del 90% de los terrenos que conforman el estado de Puebla están cubiertos por suelos jóvenes, como los Regosoles y Rendzinas. En ellos han sido pocos los cambios y la diferenciación con respecto al material de origen. Los suelos maduros, como los Luvisoles y Acrisoles, abarcan el 10% restante del área estatal; en éstos se han dado grandes cambios internos. La configuración topográfica y los factores climáticos han propiciado que alrededor del 55% de los suelos de la entidad tengan una profundidad menor de 50 cm , pues están limitados por una capa rocosa, una capa de caliche o una de tepetate. Estos se concentran principalmente en el sur de la entidad, mientras que los suelos profundos, en ocasiones algunos limitados por piedras, gravas o sales y sodio, se distribuyen de centro hacia el norte.

Debido a su juventud, la mayoría de los suelos no han perdido cantidades considerables de sus elementos constitutivos, esenciales para el desarrollo de las plantas; por tanto, se les puede considerar, en general, como suelos fértiles.

REGOSOLES

Los suelos de mayor distribución en la entidad son los Regosoles (calcáricos, éutricos y dístricos). Ocupan una superficie de 7 066.77 Km2, que representa el 20.77% del área estatal. Su origen es residual y coluvíal, excepto en algunas zonas como en Rafael Lara Grajales, donde son de origen aluvial. Estos suelos son muy parecidos al material del que se originan, su color es gris, pardo o pardo amarillento; en la capa superficial la materia orgánica aportada por la vegetación

FASES FISICAS Y QUIMICAS DE LOS SUELOS

natural (bosques y selvas) no ha tenido todavía una marcada influencia La textura que presenta es fina, media y gruesa. Los Regosoles calcáricos se localizan principalmente en las mesetas de la Llanura Costera del Golfo Norte, van de ligera a moderadamente alcalinos (pH entre 7.7 y 8.1), pues su saturación de bases es muy alta. Las cantidades de cationes intercambiales de calcio, magnesio y potasio son muy altas, moderadas y bajas, respectivamente. Estas características les confieren una fertilidad buena a los suelos, pero su utilización se ve limitada, ya que gran parte de los mismos presentan un lecho rocoso a menos de 50 cm de profundidad. Los Regosoles éutricos son moderadamente ácidos (pH entre 5.6 y 6.2), están ubicados en las sierras de la Cordillera Costera del Sur y del Carso Huasteco. Su saturación de bases va de alta a muy alta, la cantidad de calcio, magnesio y potasio intercambíales es de moderada a alta, de baja a moderada y baja, respectivamente. Los Regosoles dístricos se encuentran en parte de las laderas de los volcanes Popocatepetl e Iztaccíhuatl. Son de moderada a fuertemente ácidos, pues su saturación de bases es media y las cantidades de los elementos intercambiables citados anteriormente son bajas. Esto propicia una baja fertilidad natural en esta subunidad de suelos.

FEOZEMS

Los suelos denominados Feozem ocupan el segundo lugar en cuanto a la superficie que abarcan (6 004.86 km2). Se distribuyen en las mesetas y las llanuras de la porción centro y noroeste de la entidad, en la provincia del Eje Neovolcánico, donde son profundos; mientras que en el suroeste, sobre las sierras, son más someros, pues están limitados por una fase lítica. En el perfil de estos suelos se dan ciertos cambios con respecto a los descritos antes. En primer lugar, la capa superficial está enriquecida con materia orgánica aportada por la vegetación natural, ya sea en cantidad media o alta, dicha capa tiene de 15 a 30 cm. En segundo lugar, en algunos suelos se encuentra una capa subsuperficial (horizonte B cámbico) que se diferencia del material de origen por la formación de terrones; o bien, en otros se presenta una capa de arcilla (horizonte B argílico) proveniente de la o las capas superiores. Los colores de estos suelos son pardo oscuro o gris en la parte superficial, y cambian a pardo amarillento o pardo rojizo a medida que aumenta la profundidad. La textura que domina es la de migajón arcilloarenoso, pero también se presentan texturas de migajones arenosos en la capa superficial y de migajones arcillosos o arcillas en los horizontes subsuperficiales, las cuales propician un drenaje interno de moderado a lento. Dentro de los Feozem, los háplicos son los más representativos en la entidad. Estos son muy ligeramente alcalinos por su contenido de materia orgánica relativamente bajo. Su capacidad para intercambiar cationes de calcio, magnesio y potasio, elementos esenciales para el desarrollo de las plantas,

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SUELOS LIMITADOS EN PROFUNDIDAD I POR UNA FASE FISICA

ENTRE 10 Y 100 CM.

SUELOS MENORES DE 10 CM.

■■■■ SUELOS CON FASE GRAVOSA ■ O PEDREGOSA

SUELOS CON FASE QUIMICA

SUELOS SIN FASE

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es de moderada a alta, encontrándose las partículas (o complejo de intercambio) de suelo casi completamente saturadas con cantidades altas de los dos primeros elementos y moderadas del último. Los Feozem calcáneos, distribuidos al norte de Acatlán de Osorio y en los alrededores de Chapulco, son moderadamente alcalinos, su capacidad para intercambiar cationes es alta y las partículas de suelo están completamente saturadas con cantidades altas de potasio, muy altas de calcio y magnesio Estas características les confieren una buena fertilidad a los suelos, la cual es más alta en los Feozem calcáneos y más baja en los Feozem ICívicos Estos últimos se localizan al oeste de Zacatlán y Chignahuapan, y necesitan ciertas cantidades de cal para meiorar su fertilidad

CAMBISOLES

l ¡i mayoría de os Cam bisóles que se encuentran en la entidad pertenecen a la su bu ni dad ele ¡os éutncos. Estos se localizan en las aderas de as sierras ubicadas en el norte del estado y en algunas llanuras y lómenos del centro T enen como características distintivas la presencia del horizonte R cárnbico, el cual se diferencia del material de origen por la formación de terrones, y de la capa superficial, denominada horizonte A 6crico, que no ha alcanzado un oscurecimiento en un espesor considerable (75 cm) Fstá última capa es de color pardo o pardo amarillento, y cuando llega a ser gns o pardo grisácea es de unos lb cm, en tanto que las capas más profundas son de color pardo loiizo o pardo amarillento. La textura de estos suelos es rie miyajón arenoso en la superficie v de migajón arcilloarenoso a meo da que aumenta la profundidad. Son ligeramente ácioos o ligeramente alcalinos. Su capacidad de intercambio catiónico es moderada, pero cuando las capas son arenosas es baia. Las partículas en las que se realiza este intercambio se encuentran saturadas con cantidades de moderadas a altas de calcio y magnesio y moderadas de potasio. En los alrededores de Esperanza y Ahuehuetitla se distribuyen los Cambisoies cáleteos, suelos moderadamente alcalinos, en los cuales se encuentra una capa subsuperf'cial con acumulación de carbonates rie calco. Este elemento se encuentra en cantidades muy altas, lo mismo que el magnesio, saturando as partículas de intercarnb o del sue.o, mientras que el potasio se encuentra en cant dades moderadas En con ¡unto, los Cambiso.es abarcan 5 095.02 km-' de la superficie total estatal, y en muchos de los casos son profundos Su potencialidad para el desarrollo de los cultivos es de media a alta, debido a los nutrientes que contienen.

RENDZINA

Los suelos denominados Rendzina comprenden 4 741.67 km-', se localizan en las oorciones centro v sur, fundamentalmente sobre sierras y lomeríos, como en Teopantlán y San Pablo Arrrcano. Estos suelos se derivan de rocas calizas, de algunas lutitas y conglomerados, por ,o cual tienen cantidades altas o muy altas de carbonato de calcio, que os hacen muy ligeramente salinos.

Al ser intemperizadas en estas zonas de climas cálidos y templados subhúmedos, dichas rocas producen materiales muy finos, que determinan las texturas arcillosas o de migajones arcillosos de los suelos. Por otro lado, la formación de complejos entre el calcio del suelo y la materia orgánica aportada por la vegetación natural (selvas bajas, bosques y algunos pastizales!, ha producido la melamzación u oscurecimiento del suelo en todo su perfil; debido a ello, los colores que presentan son gris muy oscuro, negro o pardo grisáceo muy oscuro. Tales características confieren una alta fertilidad natural a estos

suelos, pero su utilización se ve restringida, ya que se encuentran limitados por una capa de caliche o un lecho rocoso a menos de 50 cm de profundidad; además, el hecho de encontrarse en sierras y lomeríos representa graves riesgos de erosión. A través de ciertos procesos de evolución y transformación, estos suelos llegan a constituir a los Vertisoles, con los cuales se encuentran asociados

LITOSOLES

Los Litosoles, suelos extremadamente delgados, menores de 10 cm de profundidad, deben esta característica en gran parte a ,as cord icones topográficas de las zonas donde so desarrollan, pues -as pendientes abruptas no perm ten la acumulación de las partículas del suelo a medida que éstas se forman; además, las condiciones climáticas y la vegetación no han tenido gran influencia en el interriperismo de las rocas de las cuales se originan Estos suelos se localizan principalmente en las sierras del centro- sureste de la entidad, como la de la Zapotitlán y la de Filo de Tierra Colorada, asimismo, se encuentran sobre algunos lomeríos. Abarcan 3 165.83 km*' de la superficie total estatal y se encuentran en asociación con otros suelos do mayor profundidad, corno Rendzinas, Regosoles y Feozem.

ANDOSOLES

hn las zonas de la entidad donde ha habido una actividad volcánica reciente se distribuyen los suelos denominados Andosoles, ya que se forman a partir de cenizas volcánicas. Estos suelos son esponjosos o muy sueltos, pues tienen texturas de migajones arenosos o francas, y en ocasiones de migajones limosos o arcillosos; en ellos hay una gran cantidad de minerales coloidales, los alófanos, que junto con las cantidades muy altas de materia orgánica dan una gran capacidad de retención de humedad. Un problema que presentan estos suelos es la retención o fijación de fósforo, por ¡o cual éste no puede ser asimilado por las plantas. Los Andosoles húmicos se localizan en parte de las laderas del Pico de Orizaba y de la Malinche, así como en los alrededores de Rafael J. García. Son de color grisáceo oscuro en la capa superficial y pardo o pardo amarillento en las capas más profundas. Son ricos en materia orgánica, pero muy ácidos y muy pobres en nutrientes. Esto último se debe a que sus contenidos de calcio, magnesio y potasio son bajos, aun cuando es alta su capacidad de intercambio catiónico. De Ocotepec a Teziutlán se encuentran los Andosoles mélicos, que presentan características similares a los anteriores Andosoles, con excepción en cuanto al contenido de nutrientes, que en este caso es alto. Los Andosoles ócncos se distr1 buyer en el noroeste de Zacatlán. Tienen una capa superficial de color pardo amarillento, con bajos contenidos de materia orgánica y su saturación de bases es moderada. En conjunto, estos suelos ocupan 2 251.80 km2 del área total estatal, y la mayoría responde bien a la aplicación de cal y de fertilizantes fosfatados, algunos son profundos y otros no alcanzan los 50 cm de espesor.

VERTISOLES

En los alrededores de Metlaltoyuca, .Vlecapaiapa, Tenampuleo, Ayotoxeo de Guerrero, Izúcar de Matamoros y Huehuetlán el Chico, sobre valles, llanuras y algunos lomeríos, se distribuyen los Vertisoles, suelos que cubren 2 093.68 km2 de territorio poblano. Estos se han originado de areniscas, calizas e ígneas básicas, las cuales al ser intemperizadas forman materiales moderadamente finos (migajones arcillosos o

arcilloarenosos) o muy finos (arcillas), que confieren una textura arcillosa a los suelos. El color que presentan es gris oscuro en los Vertisoles pélicos y pardo en los Vertisoles crómicos. Son de ligera a moderadamente alcalinos, tienen una capacidad de intercambio catiónico alta o muy alta y están completamente saturados con cantidades muy altas de calcio, de altas a muy altas de magnesio y de bajas a moderadas de potasio. Dichas características proporcionan una alta fertilidad a los Vertisoles; .sin embargo, su utilización en las actividades agropecuarias se ve limitada con frecuencia por el alto contenido de arcillas expandibles (montmorilonita), que produce un drenaje lento y como consecuencia el encharcamiento en la temporada de lluvias; mientras que, en la época seca del año, se agrietan y endurecen dificultando su manejo. A pesas de esto, si se utiliza la tecnología adecuada se pueden obtener altos rendimientos en las actividades antes mencionadas.

XEROSOL

Los suelos de tipo Xerosol se localizan en las zonas de clima seco de la entidad, como son la cuenca de Tehuacán y la franja que va desde Acatzingo de Hidalgo hasta el norte de Morelos Cañada, cubriendo 1 561.31 k? del área estatal. Dichos suelos presentan una capa superficial de color pardo o pardo pálido y tienen texturas medias o finas. Son fundamentalmente de origen aluvial, pero también hay de origen residual, derivados de rocas sedimentarias (calizas, areniscas v conclomerados). Cerca del 50% de estos suelos están limitados por una capa de caliche a menos de 50 cm de profundidad, mientras que el resto son profundos. La baja precipitación en estas zonas ha dado lugar a que los procesos transformadores del suelo se efectúen con mucha lentitud, pues a través de los mismos únicamente pasa una mínima cantidad de agua que no provoca la pérdida de materiales por lavado. Debido a esto, las cantidades de bases tales como calcio, magnesio y potasio, son considerables. A diferencia de lo anterior, la materia orgánica, aportada por la vegetación natural (selva baja caducifolia y mezquital) es humificada con raoidez, por lo que su contenido es bajo. La productividad de estos suelos está en función de la cantidad de agua que se les proporcione. En áreas cercanas a Tlanepantla se dedican actualmente a la agricultura de riego.

LUVISOLES

Los Luvisoles abarcan cerca de 1 122.16 km2

de territorio poblano, se distribuyen en las áreas cercanas a Jalpa y Xicotepec de Juárez, así corno al norte y este de Tlacotepec de Díaz, entre otros sitios. Presentan colores pardo rojizo, rojo amarillento o amarillo rojizo. Se han originado de diversos tipo de rocas, desde ígneas y sedimentarias hasta metamórficas Las altas precipitaciones de las zonas donde se han formado estos suelos han propiciado la translocación de arcilla del o de los horizontes superiores hacia uno más profundo (horizonte B argílico) en el cual se acumulan, además, han causado la remoción de los cationes del suelo, lo que se refleja en la moderada saturación de bases y en el pH ligeramente ácido.

ACRISOLES

Los Acrisoles son suelos estrechamente emparentados con los Luvisoles, en ellos también se han efectuado la translocación de arcilla y la remoción de cationes, pero en una proporción mayor; por eilo su saturación de bases es baja y son de fuerte a muy fuertemente ácidos. Cubren unos 629.38 km2

del área total de la entidad, se localizan en los

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alrededores de Eloxotitlán y Tlacotepec de Díaz, lo mismo que al este de Coxcatlán. En ambas unidades de suelo es necesario aplicar cal, nitrógeno y fósforo para elevar su fertilidad, pero los Acrisoles requieren cantidades más altas. Además, para efectuar en ellos actividades agrupecuarias, es indispensable llevar a cabo un estricto control

en su manejo, pues son muy susceptibles a la erosión.

SOLONCHAK

Por último, en áreas circundantes a las lagunas de Totolcingo y El Salado se distribuyen los suelos denominados

Solonchak, que cubren 284,56 km2 en el estado. Estos suelos tienen altas concentraciones de sales y altas cantidades de sodio, por lo que son extremadamente alcalinos. Para dedicai os a a producción agrícola es necesario remover las sales por medio del lavado y desalojarlas través de un sistema de drenaje.

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8.Vegetac¡ón

Los principales tipos de vegetación que se desarrollan en el estado de Puebla son: selva baja caducifolia, en el suroeste; selva alta perennifolia, en el norte y noreste; selva mediana subperennifolia, en el sureste; bosques de pino, encino, mixtos, de oyamel y mesófilo de montaña, en el noroeste, oeste y este; matorral crasicaule, chaparral y mezquital, en el sur; y pastizales cultivados e inducidos, que se encuentran intercalados con las comunidades antes citadas. En conjunto, la vegetación cubre un 61% de territorio poblano, en tanto que el resto (39%) se dedica a las actividades agrícolas. La vegetación se distribuye conforme a un patrón altitudinal, el cual es también uno de ios factores que inciden en el tipo de clima. Gran parte de ella ha sido altamente explotada, de tal manera que se encuentra en diferentes etapas sucesionales de desarrollo, formando así comunidades secundarias.

SELVAS La selva baja caducifolia es el tipo de vegetación más abundante en Puebla, pues cubre cerca del 19% de la superficie estatal. Se localiza sobre las sierras de laderas abruptas integrantes de la Sierra Madre del Sur, principalmente en las cercanas a los límites con los estados de Morelos y Guerrero, así como en las de los alrededores de Santa Inés Ahutempan y Teopantlán. Su distribución en estas zonas se debe en gran parte a las condiciones climáticas, ya que la precipitación total al año va de 800 a 1000 mm y la temperatura media anual es mayor de 22°C. Esta última propicia un alto índice de evapotranspiración, y como resultado disminuye la humedad ambiental, lo que da lugar al desarrollo de árboles como Bursera spp., tepehuaje (LysHoma sppA casahuate (Ipomoea spp,A amapola (Pseudobombax palmeri), colorín (Erithryna spp J, pochote (Ceiba spj y cueramo (Cordia sppj, que son algunos de los elementos característicos de la selva baja caducifolia. Dichas especies alcanzan alturas no mayores a los 1 0 m, su fuste es de 40 cm aproximadamente y pierden su follaje durante la época seca del año. En general, esta vegetación se encuentra en estado secundario (arbóreo, arbustivo, y hasta herbáceo), pues se explota para uso doméstico, mediante la obtención de leña y postes para la construcción de canales y cercas; así también, algunas áreas de selva se queman para inducir el crecimiento de pastos e introducir ganado, o bien son desmontadas para realizar actividades agrícolas, que son poco productivas debido a la escasez de agua y a los suelos con fases lítica o pedregosa. La selva alta perennifolia abarca un 7% del área total estatal, en terrenos correspondientes a la Llanura Costera del Golfo Norte y a las laderas de barlovento de la Sierra Madre Oriental, entre Metlaltoyuca y Hueytlalpan. En esta región los climas que prevalecen son los cálidos subhúmedos y húmedos, cuya precipitación total anual varía de los 1 500 a los 4 000 mm. Dicha condición, junto con la temperatura media anual que oscila entre los 22° y 26°C, favorece el desarrollo de esta comunidad vegetal, que está constituida por: zapote (Diospyros ebanester), mamey (Pouteria

zapota), chirimoya (Annona cherimola) y pimienta (Pimienta dioica), árboles de los cuales se aprovechan sus frutos; cedro (Cedrela odorata) y caoba (Swietenia humilis), elementos apreciados por su madera; chalahuite (Inga spp) y sangre de grado (Croton draco), especies que en las zonas desmontadas se dejan para dar sombra al ganado, o bien a los cultivos permanentes como el café; y chaca o palo mulato (Bursera simaruba), que se utiliza para formar cercas vivas debido a su facilidad para dar nuevos brotes. Además, hay otros árboles que en algunas ocasiones se emplean para efectuar prácticas medicinales La selva alta también ha sido intensamente explotada, ya que algunas áreas han sido taladas para dedicar los terrenos a ia agricultura seminómada, al cultivo de pastos o para inducir el crecimiento de estos últimos,

por lo que se encuentra en estado secundario Entre esta selva se distribuyen los paztizales cultivados e inducidos, que se utilizan para el pastoreo, pues la actividad ganadera ha proliferado en gran medida en esta región. De igual manera, hay vegetación secundaria denominada acahual, misma que crece en terrenos que se dejan descansar de la actividad agrícola durante periodos largos (máximo 10 años), para después reanudar dicho uso. Entre las poblaciones de Eloxochitla'n y Tiacotepec de Díaz, crece la selva mediana subperennifolia. Esta cubre el 1% de la superficie estatal y aparentemente se encuentra bien conservada; sin embargo, es probable que ya haya sido alterada. Los árboles que la constituyen llegan a medir de 15 a 20 m de altura y el 30% de ellos pierden sus hojas en la temporada más seca

VEGETACION

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AGRICULTURA

BOSQUE

SELVA

MATORRAL

PASTIZAL

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del año. Algunas de las especies que la forman son: ramón (Brosimum alicastrum), palo mulato (Bursera simaruba) y chicozapote (Achras z a pota).

BOSQUES

Otra comunidad vegetal importante es la de los bosques, los cuales se localizan en un 15% de los terrenos que conforman el estado Se distribuyen principalmente en el norte, sobre las laderas occidentales de la Sierra Madre Oriental y en el Eje Neovolcánico, entre los poblados de Huauchinango y Hueyapan; pero también hay pequeñas áreas en la Sierra Madre del Sur. En general, estos bosques se desarrollan bajo un régimen climático templado subhúmedo y húmedo, en el que las precipitaciones varían de los 800 a los 2000 mm anuales. El bosque de pino-encino es el de mayor distribución (5.58%), le siguen en orden de abundancia los de encino-pino, pino, encino, oyamel y mesófilo de montaña. Entre los pinares se encuentra una gran variedad de especies, como son: Pinus ayacahuite, Pinus ayacahuite veitchii, Pinus cembroides, Pinus leiophylla, Pinus michoacana cornuta, Pinus montezumae, Pinus montezumae /indleyi, Pinus oocarpa, Pinus patuia, Pinus pseudostrobus, Pinus pseudostrobus apulcensis, Pinus pseudostrobus oaxacana, Pinus rudis, Pinus strobus chapensis y Pinus teocote. Entre las especies de encino se encuentran:

Quercus sororia, Quercus furfuracea, Quercus excelsa, Quercus calophylla, Quercus candoHeana y Quercus polymorpha. Gran parte de dichas especies son escasas, ya que la explotación de los bosques ha sido muy alta, sobré todo de los pinares, debido a que su madera es de utilidad para la industria, pues con ella se fabrican muebles y casas, se elabora papel y se obtienen otras materos primas. Los encinos también han sido explotados pero en menor escala; esto se debe a que su madera es más difícil de trabajar a causa de su dureza. Como consecuencia de esa intensa extracción de elementos forestales, además de las quemas periódicas intencionales que se efectúan en las zonas boscosas, tiene lugar la propagación de pastos inducidos que son utilizados para alimentar al ganado. Por otro lado, algunas de estas zonas han sido taladas para dedicar los terrenos a la act vidad agrícola de temporal. Sin embargo, cuando se deja de cult'var se producen problemas de erosión en los suelos. El bosque de oyamel (Abies sp. i se localiza en las partes elevadas ce los volcanes Iztaccíhuatl, Popocatépetl y Citlaltepetl (Pico de Orizaba), mientras que el bosque mesófilo de montaña se desarrolla en las áreas más protegidas de las sierras, en donde la humedad ambiental es alta y se presenta neblina casi todo el año, como en el caso de las zonas ubicadas al noreste de Rafael J. García, en los límites con el estado de Veracruz, y al noroeste de T lapa coya

OTROS TIPOS DE VEGETACION

En las zonas de clima seco de la Sierra Madre del Sur, fundamentalmente de Atenayuca a Tehuacán, se desarrollan tres tipos de vegetación: el matorral crasicaule (3.1 2%), el chaparral (2.2 1%) y el mezquital (0.87%). Los dos primeros se localizan sobre las sierras; sin embargo, el matorral es más abundante, pues aunque ambos se encuentran en zonas de clima seco, dicha comunidad vegetal es más resistente a las altas temperaturas y como consecuencia a la humedad ambiental relativa más baja. El mezquital tiene una distribución menor y se desarrolla en las partes bajas que conforman el valle de Tehuacán. Estos tipos de vegetación han sido altamente explotados a nivel local, ya que de sus elementos arbustivos se obtiene leña, postes para corrales y carbón, entre otros. Cabe señalar que en estas áreas, pero básicamente en las que se encuentra el mezquital, los problemas de erosión del suelo son altos. En la porción correspondiente al Eje Neovolcánico hay pequeñas zonas que sustentan vegetación de matorral desértico rosetófilo (2.22%), cuya distribución es a manera de manchones sobre lomeríos. Dicho matorral está constituido por elementos que en su mayoría presentan las hojas acomodadas en forma de roseta. Finalmente, en las áreas circundantes a las lagunas de Totolcingo y El Salado, crece la vegetación halófila, que es típica de zonas donde los suelos tienen exceso de sales.

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