4. Tipología de las formas troglodíticas

Desde la simple adecuación de un emplazamiento natural bien dispuesto, hasta la

creación total de un relieve incluyendo un hábitat troglodítico totalmente construido por

el hombre, las actuaciones son muy diversas y nos muestran la variedad de las

respuestas portadas a esta confrontación hombre-naturaleza.

1. Arquitectura de modificación de emplazamientos y configuraciones naturales.

Las cavernas naturales: El acondicionamiento solo consiste, en la mayoría de los

casos, en la localización de un hogar.

- El abrigo bajo la roca que puede quedar cerrado o no con una pared

construida.

- Vivienda entre rocas: El pueblo de Monsanto, en Portugal, es un caso de

organización a partir de un caos granítico, hecho de megalitos de formas

redondeadas. Estos sirven de elementos de sujeción para las viviendas y al

mismo tiempo para los caminos y vías de distribución del pueblo, que se

deslizan entre estos elementos duros aprovechando su topografía. El trabajo y

la acción del hombre ha sido aquí el de una obra de acabado de aquello que la

naturaleza ya había preparado.

- Viviendas adosadas: Forman a veces un pueblo completo que aprovecha la

protección de una muralla natural para abrigarse (protección climática) o para

apoyarse (solución constructiva).

2. Arquitecturas sustractivas.

Los volúmenes habitables se obtienen aquí por la sustracción de materiales. La

acción no se limita a explorar o completar una configuración natural, sino que se

crean nuevas configuraciones.

Esta actitud de excavación se desarrolla según tres tipos, en función de la

dirección de la excavación:

Excavación de las formaciones situadas por encima del suelo:

No se trata aquí, como en Monsanto, de situar la vivienda entre dos megalitos

que actúan como muros y puntos de apoyo de una parte construida, sino de

excavar el interior mismo de la roca. Esto presupone una roca lo

suficientemente blanda como para poder atacarla con una herramienta (creta

micácea calcárea, por ejemplo). Los copos de Capadocia (Turquía), modelados

por la erosión, ilustran esta técnica. (26)

Excavación de paredes verticales:

La excavación se desarrolla en dirección horizontal, atacando el frente de un

acantilado. Esta es la solución más corriente, tanto en el campo de la vivienda

(como en la Turena y Vaucluse, en Francia), como en numerosos casos de

arquitectura funeraria o religiosa (Egipto, India).

Excavación vertical en el terreno:

Este tipo de actuación se observa en ciertos tipos de hábitats prehistóricos de

China, llegando hasta el hábitat enterrado contemporáneo de Henan y de

Shensi. Es el punto de partida para una doble evolución

Primera evolución

La vivienda sale progresivamente del suelo, a medida que aparecen los

materiales y el arte constructivo que permiten la edificación en superficies.

Segunda evolución

La vivienda continúa enterrada y evoluciona hacia una mayor complejidad,

perfeccionando esta arquitectura subterránea hasta la producción de un

urbanismo enterrado (China, Túnez). Este estadio (Esquema 8 de la Figura 29),

es el resultado de la conjunción de las actuaciones 6 y 7. Otro resultado de

esta conjunción de soluciones, consiste en aislar un monolito excavado al suelo

a su alrededor. Este monolito se ataca a continuación en la solución 7 y da

lugar al caso representado en el esquema 9 (Figura 29).

3. Arquitecturas de terraplenado

En este caso, no existe excavación, sino al contrario, se aportan materiales (tierra)

para modificar el relieve. De hecho, se trata de la creación de un micro relieve que

incluye en su seno la construcción. Las arquitecturas antiguas que pertenecen a

este tipo son esencialmente (40) sepulturas. Los túmulos están construidos sobre

todo mediante aporte de tierras; las pirámides y las mastabas, con obra de piedras,

ladrillos crudos o cocidos. Muchas viviendas solares pasivas semienterradas

utilizan esta técnica.

4. Soluciones mixtas e intermedias

El ingenio de los arquitectos trogloditas, se ha empleado en adaptar de la mejor

forma posible, estas configuraciones elementales que hemos expuesto, siempre

que ello fuera posible. Esta <<superación>> de los tipos básicos puede hacerse

combinándolos entre ellos o añadiéndoles nuevas disposiciones. Pueden darse

diversas explicaciones a este <<enriquecimiento>>:

- Mejor adaptación a las necesidades de grupos de habitantes. Es el caso de la

extensión en superficie de ciertos hábitats, donde hace su aparición la madera,

la piedra, y eventualmente la tela.

- Motivos climáticos: Algunos dispositivos completan al elemento básico formado

por la parte excavada.

- Motivos técnicos: Pueden aparecer nuevas técnicas, nuevas herramientas o el

saber constructivo, que explican la sucesión en el tiempo de arquitecturas

sobrepuestas (estratificación). La fase troglodita solo es uno de los

componentes de la arquitectura resultante.

- Por último hay motivos <<arquitectónicos>>, es decir, la máxima explotación de

la riqueza de expresión que permite el paso de lo excavado a lo construido, de

lo subterráneo a lo superficial, de lo visible a lo oculto, de lo oscuro a lo

luminoso.

- En trogloditismo contemporáneo aparecen soluciones inducidas por las

modernas técnicas constructivas: posibilidad de excavar el terreno con grandes

medios mecánicos; posibilidad de realizar grandes terraplenados; técnicas de

fijación de terraplenes con distintos sistemas de sostén, resultados de la

aplicación del hormigón armado, o de las técnicas de estabilización de tierras

tomadas de la ciencia de la obras públicas.