REFLEXIONES SOBRE EL ABORTO Y LA EUTANASIA

MAGDA CONSTANZA GONZALES CARDOSO, ALCIDES LEONARDO GONZALEZ, TATIANA ALEJANDRA CAVIEDES Y JUAN GABRIEL CASTRO ARTUNDUAGA

WILDER YAMILSO MEDINA ROJASTUTOR

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA UNADTICA PARA PREGRADOGRUPO 241ABRIL 13/2013REFLEXIONES SOBRE EL ABORTO Y LA EUTANASIA

El aborto y la eutanasia en la sociedad, cada vez toman ms fuerza en la sociedad actual como una supuesta salida a dificultades que se presentan en las comunidades. La falta de una educacin integral en valores, y la falta de amor a la vida, han conllevado a que las personas se crean dueos de la vida de alguien, y se creen con la facultad de disponer de la vida de un ser humano.De alguna manera, el estado ha propiciado a que esto se lleve a cabo, gracias a las legislaciones que permiten la libertad de eleccin al momento de decidir sobre si se quiere tener un beb o no, sobre si se quiere desconectar a alguien que padece una enfermedad terminal.Se debe implementar en el sistema educativo, las bases de la tica y de la moral humana, para inculcar en los estudiantes, el amor a la dignidad humana, al amor, al respeto y sobre todo a aprender a vivir con las dificultades que se puedan presentar en el acontecer de la cotidianidad. Si se empieza a educar a los estudiantes en valores, desde sus comienzos en la escuela, muy seguramente, la situacin de antivalores que se presenta en la sociedad no sera un problema de tan grandes magnitudes. El aborto es un tema muy preocupante para la sociedad ya que todo ser humano tiene derecho a la vida y al momento de realizar la vida est violando ese derecho tan importante ya que desde el momento que una mujer queda en embarazo ya se le denomina feto o ya es vida y no es justo que le quiten la vida a una criaturita inocente. De igual manera, con la eutanasia se vulnera, no slo la dignidad humana, sino el amor propio porque cuando no se tiene una autoestima favorable, no se tiene respeto hacia nada.Qu lstima que cada vez sea ms frecuente ver se desprecio por la vida, se desarraigo de valores que hacen que las personas obren segn conveniencias, mas no por un sentir de amor o respeto hacia la vida.El aborto es uno de los temas que se han venido discutiendo por su choque con algunos derechos como lo ha sido el derecho a la vida en el cual dice que todas las personas tienen el derecho a que se respete su vida y es inviolable; al realizar el aborto se est violando este derecho pues dice que toda persona tiene este derecho y pues desde el mismo momento de la concepcin ya se cataloga al feto como una persona entonces l tiene este derecho a vivir, esto ha venido siendo defendido por la iglesia pues dios es el nico que puede decidir si nace o muere.Es absurdo el pensar en quitarle le vida a una persona, y ms an a una persona indefensa. Es ilgico desde todo punto de vista, pues la vida no tiene precio, no es un mueble que se puede desechar cuando se considera que ya no nos es til. La dignidad humana no se compra, o se cambia como una cosa que podemos desechar. La dignidad humana se hereda mediante la aplicacin de valores, de amor, y no se debe alterar el concepto como lo que vemos hoy en da.El aborto y la eutanasia son prcticas las cuales no se deberan practicar primero porque se estara violando el derecho a la vida el cual no solo aplica a las personas que se encuentran en la capacidad de razonamiento si no para cada persona desde el momento de su concepcin y es un derecho el cual cada persona debe respetar y llevar a cabo; sin importar las razones que lleven a la toma de esta decisin se debe pensar en la vida que est creciendo dentro de ese vientre ya que l no debe pagar por errores o actos que sean realizado por otro ser humano. Y en el caso de la eutanasia, no se puede prescindir de alguien slo porque est postrado en una cama y no tiene los medios para valerse por s slo.Sobre el tema del aborto, la verdad es que el problema principal no es legalizar si no el tomar conciencia que esto no se trata de un dogma religioso y entender que estamos decidiendo si vive o muere una persona con derechos y la dignidad de vivir, quienes somos para discutir si vive o muere una persona, cuando el nico que tiene derecho de quitarnos la vida es dios, l nos la dio y es el nico que puede ponerle el fin.Es absoluto el sentir de desprecio a stas prcticas, por parte de la mayora de la sociedad de los estratos bajos. Al contrario, estas prcticas son ms frecuentes en las familias de buena posicin social, porque para ellos el dinero y la imagen es primero, aboliendo toda posibilidad de moral. Cuando decimos esto no se quiere decir que las personas de estratos sociales altos son todos as, son muy pocos, pero se presentan estos casos con mayor frecuencia que en os estrato sociales ms bajos.En conclusin; el grupo 241est en total desacuerdo con stas prcticas desastrosas que atentan contra la vida, ms an tratndose de personas en vulnerabilidad, o en estado de indefensin. Es una falta de tica y de moral que es ms frecuente en la actual sociedad, en la que lo ms importante son las apariencias, o los intereses colectivos materialistas, dejando as al lado todo lo concerniente a la tica y la moral.