UTILICEMOS MEJORLAS PELICULAS

En los últimos años y en algunas regio-nes parece haberse producido un cierto des-censo en la utilización del cine en el trabajode las Agencias de Extensión Agraria. Y siese síntoma no se ha manifestado con ca-racteres acusados se ha debido a la necesi-dad que los CECAS sienten de utilizar ayu-das audiovisuales.

Las causas que más han contribuido a estasituación han sido, según los Centros Re-gionales consultados al respecto, como crite-rio más generalizado y en lugar destacado,las deficiencias en el funcionamiento de losequipos de proyección.

Hay que reconocer en honor a la verdadque, efectivamente, la calidad de los equi-pos actuales de proyección y su funciona-miento son mejorables y que las deficienciasy fallos achacables a estas causas son de unefecto desmoralizador para el Agente que ce-lebra una reunión con proyecciones.

Las ideas que en la actualidad se estánconsiderando sobre la mejora de los equiposde proyección permiten confiar en que esteproblema pueda solucionarse en breve.

Otros motivos aducidos por los CentrosRegionales apuntan hacia la escasa adapta-ción de la temática de las películas a las ne-cesidades específicas de las regiones, el limi-tado número de títulos disponibles, la inco-modidad en el manejo y transporte de losequipos de proyección, el mal estado de lascopias, etc.

Sin negar validez a estas causas podríaargumentarse que todas estas circunstanciashan concurrido siempre en nuestro Servicio,por lo cual, tales razones no resultan plena-mente convincentes.

Algo ha cambiado en torno al empleo delcine en Extensión. Si las dificultades antesapuntadas han sido siempre prácticamentelas mismas, hay que buscar otros motivos.¿Es que el cine ha perdido su fuerza comomedio audiovisual ante el agricultor? Esto entérminos generales, no puede admitirse perosí el hecho de que las películas por sí mis-mas, como simple estímulo o atractivo parallevar agricultores a las reuniones, ya no tie-nen el mismo valor que hace veinte años.Al medio rural ha llegado la TV que puedeofrecer, en el aspecto recreativo, espaciosmás interesantes y variados que las películasque una Agencia de Extensión tiene habitual-mente a su alcance.

Tampoco las reuniones son las de antaño.Hoy se programan con objetivos más concre-tos y definidos y para grupos de agricul-tores más reducidos. Y, por otra parte, laatención del Agente se ve reclamada por másasuntos, lo que no le permite dedicar eltiempo que quisiera a preparar las activida-des. Y la inclusión de películas en una reu-nión representa siempre tiempo y esfuerzo. Elmarco, pues, donde las películas agrarias seutilizan ha sufrido notables cambios y hayque adaptarse a la nueva situación. En elmomento presente muchos Agentes de Ex-tensión dudan de que el tiempo que invier-ten en las gestiones para obtener y proyec-tar las películas y las complicaciones que lesacarrea en su trabajo estén compensadoscon la mejora de resultados que conseguiríanincluyendo las películas en sus reuniones.

Una de las medidas que pueden influir po-sitivamente en el nivel de empleo de las pe-lículas es cuidar con esmero su forma de uti-lización.

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Conocer bien las películas

Antes de continuar quizá sea el momentode puntualizar que, en modo alguno, se pre-tende defender que, a ultranza, sin justifica-ción, se hagan más proyecciones cinemato-gráficas. En absoluto. A nadie interesa. Só-lo serviría para hinchar las estadísticas y gas-tar tiempo, esfuerzo y dinero. Por el contra-rio, creemos que, precisamente, el empleo depelículas sin criterios claros y correctos, sinaplicar una técnica adecuada, ha llevado a uncierto desinterés por el cine como instrumen-to de trabajo de Extensión y CapacitaciónAgrarias.

No. No se trata de incrementar el númerode proyecciones sino de aprovechar mejor lasposibilidades del material cinematográficodisponible.

Pero, para aprovechar mejor las posibili-dades de unas películas es indispensable, enprimer lugar y ante todo, conocerlas bien.Saber que existen y conocer su contenidoreal y su posible valor para un caso con-creto.

En la actualidad todas las Agencias y Es-

Trofeo obtenido por una de nuestras películas.

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cuelas de Capacitación Agraria poseen unCatálogo General de películas del SEA y pe-riódicamente se envían Hojas para incorporaral mismo con fichas de los nuevos títulospero, según parece, esto no es suficiente.

La medida práctica que se estima podríaresultar más eficaz, sería incluir la proyecciónde películas en las reuniones que las Agen-cias Provinciales habitualmente celebran conlos Agentes Comarcales de su demarcación.En ellas se podrían pasar de forma sistemá-tica y generalizada, las películas de interéspara la provincia, acompañadas de la presen-tación y comentario oportunos sobre su apli-cación en sus respectivas zonas. Decimos deforma sistemática y generalizada porque dehecho este tipo de proyecciones ya vienenhaciéndolo, desde hace mucho tiempo, algu-nas Agencias Provinciales.

Esta idea de aprovechar las reuniones paradar a conocer las películas a los AgentesComarcales es aplicable a las que se celebrencon Agentes en los Centros Regionales.

También es muy importante y útil que losAgentes Especializados en Canales de Comu-nicación conozcan las películas perfectamen-te. De esta forma podrán atender mejorlas peticiones de películas de las Agencias.

Porque estimamos que en los Centros Re-gionales se deben completar, modificar e in-cluso suprimir títulos en las listas solicitadas.Y esta función de revisión y mejora de laspeticiones creemos corresponde a los Espe-cialistas en Canales de Comunicación, quedeben efectuarla personalmente para lo cualnecesitan conocer muy bien todo el materialcinematográfico de que su Centro dispone.Para realizar este trabajo con eficiencia, ra-pidez y comodidad resulta muy útil tenerconfeccionadas «fichas-guía» detalladas decada película para consultar en el momentode revisar las peticiones.

También para facilitar esta labor de losAgentes Especializados en Canales de Co-municación las Agencias, por su parte, de-ben consignar en su escrito de petición toda

la información posible sobre el uso que pien-san hacer de la película (objetivo de la reu-nión, asistentes, motivo del empleo de la pe-lícula, etc.).

Antes de utilizarlasCon la película en su poder el Agente de-

be proyectarla antes de incluirla en el progra-ma de una reunión. En todos los casos. Nobasta con que en alguna ocasión anterior lahaya visto. Es muy conveniente que para sunuevo uso vuelva a visionaria detenidamente.Así puede analizarla, tomar nota de las cosasque no quedan claras o suficientemente ex-plicadas en la imagen o en el comentario,prever los reparos que los asistentes puedanformular y llevar preparada la información ocontestación oportunas. Es decir, conocien-do bien la película se está en condicionesde contrarrestar las deficiencias de sus as-pectos o partes menos logrados. Y ademásfacilita la decisión sobre cuestiones impor-tantes: la integración de la película en el mar-co de la reunión, la función que puede asig-nársele y su forma de utilización, o sea, có-mo, cuándo y cuántas veces convendrá pa-sarla dentro del programa de la reunión todolo cual depende, en buena parte, de las ca-racterísticas de cada película concreta y decada reunión.

También puede ocurrir en casos extremosque, al visionar una película se estime queno aportará nada positivo a la reunión. En ta-les casos quizá lo más oportuno sea renun-ciar a su proyección.

La forma de utilización

Decidida la utilización de la película llega elmomento de su proyección a los destina-tarios.

La forma en que una película se empleaes un factor que influye decisivamente en sueficacia. La forma de utilización —acabamosde decir y conviene repetir— depende, prin-cipalmente, del tipo de reunión y de la fun-ción que la película ha de cumplir.

Como no es posible considerar todos lossupuestos vamos a referirnos al que estima-mos de mayor interés para el trabajo deExtensión y Capacitación Agrarias, que escuando la película trata específicamente deltema-objeto de la reunión. La película juegaentonces un papel importante. En casos ex-tremos puede llegar a constituir el núcleoprincipal de la reunión, su centro de interés.

La coincidencia entre los temas de la pe-lícula y de la reunión suele darse en las pe-lículas sobre desarrollo comunitario, el traba-jo con jóvenes, el cooperativismo en sus di-versas formas y, en general, en bastantes pe-lículas que hemos venido llamando en ante-riores escritos «documental-educativas» y enalgunas de las denominadas «de enseñanzay divulgación».

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Norma general aplicable a todos los casoses que no se puede proyectar una películasin una presentación previa. Hay que prepa-rar a los asistentes, facilitarles el entendi-miento y la interpretación de las imágenesque se les va a ofrecer y ayudarles a quesaquen el máximo provecho de ellas. Es ne-cesario dar una idea general del tema, expo-ner los motivos por los que se hace la pro-yección y destacar las ideas más interesantescontenidas en la película. Y es muy impor-tante llamar la atención sobre los aspectos,secuencias o pasajes de la película en los queconviene que los asistentes se fijen especial-mente, bien porque presenten situaciones,problemas o soluciones similares o aplicablesa los suyos, bien porque apoyen las ideasque se van a exponer en la reunión, bienpor otro cualquier motivo de interés para losasistentes o la Agencia.

Finalizada la proyección es muy útil hacerun resumen de lo que se ha visto, volviendoa llamar la atención sobre los puntos de lapelícula a que anteriormente se hizo refe-rencia.

Y después de la intervención del Agente ydel coloquio con los asistentes hay sobradasrazones en nuestro trabajo de Extensión pararecomendar que se vuelva a pasar la pelícu-la, especialmente cuando presenta cierta cali-dad y riqueza de contenido y éste está ple-namente de acuerdo con los objetivos de lareunión.

Lógicamente si la película sólo tiene enparte relación con el tema de la reunión, su

interés y utilidad son menores y se la dedi-cará menos tiempo: la presentación será muybreve, el resumen y comentario posterioresa la proyección se ceñirán a la parte de in-terés y probablemente no merezca la penahacer una segunda proyección o, a lo sumo,ésta se limitará a las secuencias de la pelícu-la relacionadas con la reunión. Si esta rela-ción prácticamente no existe, como sucedíacuando se pasaban películas con el fin deatraer gente a las reuniones, estimamos per-sonalmente que en la actualidad, salvo casosrealmente excepcionales, el tiempo, dinero yesfuerzo que cuesta la proyección no quedancompensados en modo alguno.

Intencionadamente hemos venido refirién-donos a «la película», en singular, porquejuzgamos poco provechoso pasar varias pe-lículas en una misma sesión a menos quetengan bastante relación entre sí. La atenciónde los asistentes se dispersa en detrimentode la película que verdaderamente interesa.

Quisiéramos terminar expresando nuestraconvicción de que el empleo del cine en Ex-tensión Agraria como instrumento de trabajono debe perder relieve si la utilización seefectúa de forma adecuada, con una técnicacorrecta. Lo prueba el hecho de que losAgentes que vienen haciéndolo así continúanempleando como siempre el cine en su la-bor habitual. Y es que cuando se aprove-chan las posibilidades que el cine ofrece, laspelículas siguen proporcionando suficientescompensaciones.

Francisco de la Calle

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