Viaje a lo desconocido

Los niños y niñas de tercero, del Colegio Juan Rodríguez Muñiz, escribimos estos relatos de misterio y fantasía

Curso 2010-2011

EEELLL SSSEEECCCRRREEETTTOOO DDDEEE LLLAAA HHHOOONNNDDDAAA AAABBBSSSOOORRRBBBEEEDDDOOORRRAAA

Me llamo Manuel y de mayor pienso ser inventor. Tengo un amigo que se llama Adrián

Freije.

Una tarde de domingo me encontraba solo y vi algo extraño en la calle. ¡Era una honda

absorbedora! Entonces vi a mi amigo Adrián luchando contra aquella aspiración co-

rriendo hacia adelante. Adrián intentaba escaparse, pero al final fue absorbido sin re-

medio.

Yo como quería ser inventor, se me ocurrió montar un aparato con madera, hojas, dos

ruedas, una puerta y una bellota gigante. Como la bellota no era hueca, con mi sierra

Ultramegaslipcalzones corté cuadrados para las ventanas y un rectángulo para la puerta.

Luego pegué la puerta, la rama en la popa y coloqué las hojas en la rama. Le puse de nom-

bre Girobellota.

Minutos más tarde volvió a aparecer aquella misteriosa honda absorbedora y vi… ¡coches

volando! Entonces me apresuré para salir y meterme dentro de la honda absorbedora, me-

ti mi aparato volador y me encontré en un lugar extraño lleno de basura y de…¡¡¡ los coches

que la honda se tragó!!! Pero lo más raro que ocurría era que los coches parecía que se mo-

vían solos. No era así. Vi un coche que iba a arrancar, me acerqué y apareció un ovni feo. Es-

capé corriendo y me encontré….¿quizás en la selva? Vinieron más ovnis. Estaba aterroriza-

do. Más tarde vi que los ovnis estaban puestos en cruces. En ese momento vi a Adri

con unos galos. Los galos tiraron de una cuerda y los ovnis cayeron al subsuelo. Los

galos se llamaban Asterisco y Obelisco.

Asterisco me pegó tal patada que salí volando por los aires y al final me encontré en

la cama.

Manuel Reyero

VIAJE AL PASADO Sidreneitor, mi aparato especia, y yo somos muy amigos. Un día monté el él y fuimos al pasado.

Primero vimos muchos vampiros chupando sangre a la gente. Con los misiles que llevábamos matamos a los vampiros.

Luego nos encontramos con fantasmas. Sidreneitor se caló y caímos sobre ellos. Salimos corriendo y nos escondimos detrás de una roca.

Por último pasamos por los dragones y uno de ellos nos comió. Prendimos una cerilla, al dragón le dio la tos y nos lanzó de nuevo al presente.

William Quirós

Misterios terrestres

Un día en el espacio con mi aparato me encontré con algo esponjoso y no sabía

que era. De repente vino un astronauta y me dijo lo que era ¡¡¡Era un cerebro de persona¡¡¡ Yo

decidí llevar el astronauta a casa.

El espacio era un sitio que parecía muy esponjoso, secreto y con mucho misterio,

porque había cosas extrañas como cerebros y corazones de personas. A mí me pasó algo

terrible. De repente me empezó a doler todo el cuerpo. Mi aparato Caramelosidrín que era mi

acompañante durante éste misterioso viaje, me enseñó un pasadizo secreto, a través del cual

pudimos salir del espacio secreto y nos fuimos a dormir tranquilamente a mi cama.

PAULA GIL

ESTABA PASANDO UNOS DIAS CON MIS PRIMOS PEDROY LAURA EN

SU PUEBLO.

UN DIA DIJJE YO:

-VENGA VAMOS A HACER UNA MAQUINA , METERNOS EN ELLA E IR

A OTRO LUGAR.

ENTONCES MIS PRIMOS Y YO NOS PUSIMOS A HACER UNA

MAQUINA

DEL TIEMPO. CUANDO ACABAMOS TENIA FORMA DE BOTELLA DE

SIDRA Y POR ESO LA LLAMAMOS SIDROVOLADORA..

UNA VEZ TERMINADA NOS METIMOS EN ELLA YCOMO NO

SABIAMOS COMO FUNCIONABA,NO PARABAMOS DE TOCAR

BOTONES .DECIDIMOS SALIR Y NOS ENCONTRAMOS EN UN LUGAR

LLENO DE ROBOTS.

UN ROBOT LLAMADO EXTERMINADOR DIJO:

-EXTERMINADOR TENER QUE MATAR A LOS HUMANOS.

NOS ASUSTAMOS Y MIS PRIMOS Y YO NOS ESCONDIMOS EN UNA

CASA.AQUELLA CASA ESTABA HECHA DE METAL Y HABIA

MUCHAS COSAS QUE SE MOVIAN:PERROS ROBOTS, PERSONAS

ROBOTICAS, COCHES QUE TRANSPORTABAN ROPA …Y…¡ALLI

ESTABA TAMBIEN EXTERMINADOR!

HUIMOS HASTA NUESTRA MAQUINA.LLEGAMOS

PERO…¡EXTERMINADOR LA HABIA DESTRUIDO!

EN ESE MOMENTO OI UNA VOZ:

¡VERO!¡ DESPIERTA!¡ DESPIERTA!

ERA LA VOZ DE MIS PRIMOS .¿SANOS Y SALVOS! ME DI CUENTA

QUE SOLO HABIA SIDO UNA PESADILLA.

VERÓNICA del ROSAL

UN LIBRO MUY ESPECIAL El viernes, después de clase, estaba leyendo mi libro especial. En ese momento

apareció mi amigo Pinchito que me preguntó:

- ¿Qué estás haciendo?

- Estoy leyendo un libro con unas palabras súper raras como ésta: “kacapiripol”.

En ese momento el libro me absorbió por completo.

Pinchito se puso muy nervioso e intentó recordar la palabra tan rara que había

dicho, y decidió pedir ayuda a Feli, que es mi hada.

- ¿Qué te pasa Pinchito? – le preguntó cuando lo vio tan asustado.

-¡Que Lucía ha desaparecido!

Entonces le contó todo lo sucedido y Feli decidió que lo mejor era leer el libro

para descubrir la palabra. Lo fue a buscar, encontró la palabra y la subrayó a

boli. Después se fue en busca de Pinchito que estaba muy triste llorando.

-¡Creo que he encontrado la palabra! ¿Es ésta?

-¡Sí! ¡Vamos a buscar a Lucía pero iremos con nuestros supercoches: Erizón y

Castañerona!

Tres minutos más tarde Pinchito bajaba las escaleras a toda pastilla.

-¡Feli!, ¡Feli!, ya estoy listo ¡di la palabra!

-¡Kacapiripol! - dijo ella.

Una hora más tarde Pinchito y Feli aparecieron inconscientes en sus vehículos.

Pinchito se despertó intentando reconocer donde estaban y llamó a Feli, con

todas sus fuerzas

-¡Feli!, ¡Feli! ¡Feli despierta!

-¿Qué pasa? ¿Lo hemos conseguido? – preguntó Feli todavía aturdida.

-¡Si!, ha funcionado.

-Pues busquemos a tu amiga.

-¡Eh, ¡Feli!,¡mira! ¡Es el colgante de Lucia! Y hay un camino de piedras. Seguro

que si lo seguimos la encontraremos.

Después de un buen rato caminando, Feli me vio dormida al lado de un árbol,

-¡Mira Pinchito allí está tu amiga!

-¡Es verdad, vamos a recogerla!, corre y nos marcharemos.

Cuando me despertaron nos dimos un abrazo enorme los tres, me llevaron hasta

los coches y nos preparamos para pronunciar nuevamente la palabra mágica.

Entonces nos absorbió de nuevo el libro y poco después estábamos los tres en

casa sanos y salvos, terminando así nuestra aventura.

Lucía Morán

UUUNNN PPPLLLAAANNNEEETTTAAA RRRAAARRRÍÍÍSSSIIIMMMOOO

Yo quería irme a un lugar misterioso y no podía, hasta

que un día inventé una máquina, llamada Peceneitor. Me

subí a ella, la arranqué y salí disparado.

Llegué a un lugar llamado Fantasma ¡Buuuu! Era un

planeta rocoso y con mesetas, en el que habitaban unos

fantasmas muy raros. Su jefe era el rey, llamado Casipa

Me escondí detrás de una roca y subí hasta lo más alto

del planeta.

Vi unos cuantos esclavos. Las cámaras que había me

impedían que los salvara. Les daban latigazos para que

funcionase una máquina de agua. También vi unos

superiores que vinieron hasta mí, sin que las cámaras los

viesen. Me dijeron que el más fuerte era el rey y que

teníamos que luchar.

Después me convirtieron en un superhéroe. Saltamos y

llegamos y llegamos a lo más alto de la máquina. Les

pregunté qué poderes tenía y me dijeron que ser más

rápido y que con los ojos podía cambiar los cuerpos.

Me costó mucho derrotara a los fantasmas. A

continuación salió el rey y vio que derrotamos a los

fantasmas. Calcó un botón y salieron diez u once

serpientes venenosas. No podíamos derrotarlas, pero por

suerte apareció una chica, que tenía una flauta mágica,

que las hizo parar.

Entramos en un templo y llegamos a la sala del rey. Allí

vimos una burbuja que sabía de todo. También estaba la

mejor amiga de la chica de la flauta mágica, que estaba

prisionera.

Entonces apareció el rey y con mis ojos cambié su cuerpo

por el de una rana. Rescatamos a la amiga y salimos. Los

fantasmas se estaban recuperando. Nos fuimos dónde

estaba mi máquina y regresamos a la Tierra.

Adrián Alonso

UN VIAJE A LO DESCONOCIDO

Un día pensé ir de viaje con mi aparato Castañín

Castaña. Me monté en sus pinchos y le dije:

_ Castañín llévame adonde quieras.

Me llevo a un gran bosque y se hizo de noche. De

repente vi unos ojos amarillos. Empecé a oír ruidos. Las

plantas tenían pinchos. Cuando caminábamos parecía

que no te movías. De pronto Castañín empezó a gritar:

_ Aaaaaaaaaaaaaah!

Me di la vuelta y vi unos enanitos que nos dijeron:

_ Este lugar tiene árboles gigantes y....aaaaaaaaaah!

_Que pasa?

_Detrás de ti!

Me di la vuelta, vi un gran dragón y eché a correr.

Pero cuando caminábamos o corríamos parecía que no

te movías, me metí detrás de un árbol y llamé al enanito.

Y el enanito no venía. Entonces miré a ver si el dragón

estaba ahí y como no lo vi busque a Castañín y lo vi

detrás del árbol y me dijo: ¡Castañas! y por suerte tenía

Castañas de repuesto y se las di. Y encontré una carta.

La abrí y ponía:

"Querida Olaya:

Móntate en tu aparato y sal volando"

Fernando

Olaya Lajara

UUUnnn vvviiiaaajjjeee iiinnneeessspppeeerrraaadddooo

Os voy a leer dos páginas de mi diario:

12 de Mayo de 2008

Querido diario:

Hoy he pasado mucho repelús. Mi Anfibiogiro está haciendo cosas raras. Me subo en él.

13 de Mayo de 2008

Querido diario:

Estoy en un planeta desconocido. Mi vehículo ha sido destruido y un alien me ha llevado a su

casa.

__¿Qué has venido a hacer aquí?- me preguntó.

__Estoy aquí por accidente. ¿Por que tenéis tanto blindaje?

__Hay muchos meteoritos. Caen 57 cada día.

__ ¿Cómo?- pregunté.

__No lo sé- respondió.

__Espera, puedo reconstruir mi vehículo y mejorarlo con el blindaje.

Nos pusimos manos a la obra. Cuando terminamos me despedí y tomé rumbo a mi casa. De

camino fui destruyendo todos los meteoritos que encontré.

Dan Walica

COLOMOLLO, UN PAIS MISTERIOSO Yo decidí hacer un viaje a Villa hormes. Y me encontré en otro país llamado COLOMOLLO. Yo pensaba que estaba en Villa hormes hasta que salí de mi aparato Corcho giro y vi que

había meteoritos y gente loca .Yo me metí otra vez en mi aparato Corcho giro. Intenté volver a salir y lo conseguí. Después fui a ver las tiendas estaban llenas de telarañas, los centros comerciales estaban llenos de bichos y los bares daban cervezas caducadas y aceitunas pochas. Las farolas no se encendían, el paisaje estaba lleno de basura porque no había contenedores ni papeleras .Yo me metí en mi aparato, calqué todos los botones y conseguí arrancar a Corcho giro. Me paré en una gasolinera y ya estaba volando y llegué a mi pueblo LAS CAMPAS.

FIN

Noelia

UN VIAJE MISTERIOSO

Mi amigo William y yo David, íbamos leyendo por la

calle. Acabamos de leer el libro y nos encontramos con

una ciudad sin nadie, ni calles había. Entramos en un

bosque, el me pregunto que donde estábamos. Entonces

nos encontramos con un erizo que hablaba y nos dijo:

Estáis en Funa una ciudad sin nada. No hay persones ni

animales, solo estoy yo. Yo le pregunte: ¿Viste un

aparato que se llama Castañafer? A lo que él me

respondió: Si lo vi, lo tengo en mi cueva. William y yo

gritamos… ¡Bien por fin lo encontramos! Y al final

empezamos a andar y andar hasta que llegamos a las

afueras y nos marchamos. Llegamos a casa y nuestros

padres nos preguntaron por el viaje a lo que

respondimos: ¡lo pasamos genial! Ah! Y encontramos el

aparato Castañares. Cuando se lo dijimos a ellos como

premio nos llevaron a Disneyland Paris, donde

disfrutamos de las atracciones. El erizo, por supuesto, se

vino con nosotros a vivir y por ultimo acabamos nuestra

aventura yéndonos todos de camping a hacer un picnic

¡lo pasamos genial!

David Menéndez

Un viaje a Júpiter

__Hola, me llamo Ana y voy a ir de viaje a Júpiter en Semana Santa.

El día que me iba, me encontré con mi amiga Reyes.

__ ¡Eh, Reyes! ¡Me voy de viaje a Júpiter! __ ¡Vale! ¡Me voy contigo!

Reyes y yo llenamos a Botella Sirvesidra con comida. Nos montamos

e iniciamos el viaje. Cuando llegó la noche nos dormimos y Botella Sirvesidra voló sola a

un mundo desconocido.

A la mañana siguiente nos bajamos de la máquina y…. ¡sorpresa! ¡Nos encontramos con un mundo hecho de papel.

Picamos en un portal. El señor que nos abrió era muy educado y nos dejó pasar. Nos dio de comer y nos dijo que unos metros más allá

había unos edificios para vender.

Compramos un piso en el portal 54 3ºB. La casa era guapísima. Nos hicimos muchas fotos y las pusimos por

toda la casa.

__ ¡Ah!, el lugar se llama Pañolandia.

Ana Rodríguez

UN VIAJE A LA ANTARTIDA

HOLA SOMOS MARIO, CUBITOSAGUA Y MIS PERIQUITOS PANCHO Y PANCHITA.

NOS VAMOS DE VIAJE A LA ANTARTIDA A BUSCAR HIELO PARA

CUBITOSAGUA, TENEMOS QUE ENCONTRAR EL MAPA.

ENCONTRAMOS EL MAPA ¡GENIAL!¡NOS IREMOS A LA ANTARTIDA! LLENAMOS

EL DEPOSITO DE CUBITOSAGUA Y MI APARATO EMPIEZA A ARRANCAR.

INICIAMOS NUESTROS VIAJE, DESPEGAMOS Y VI QUE PASADO UN TIEMPO

CUBITOSAGUA IBA PERDIENDO AGUA.TUVIMOS QUE HACER UN ATERRIZAJE

FORZOSO.VI QUE NO HABIA AGUA EN EL DEPOSITO DE

CUBITOSAGUA.SALIMOS A INVESTIGAR EL SITIO .ENCONTRAMOS UNA PIEDRA

CON UNA BOTELLA QUE TRAIA “CRECES AL INSTANTE” .Y ME DIO UNA IDEA

PARA PANCHO Y PANCHITA.

SE LO QUE VOY HACER CON VOSOTROS DOS, ECHAROS UN LIQUIDO EN EL

PICO PARA QUE CHUPEIS.

SE LO TOMARON TODO A LO LARGO DEL TRAYECTO.PANCHO SE DAÑO UNA

PATA AL TROPEZAR CON UNA PIEDRA, Y VIMOS QUE HABIA OTRA PIEDRA CON

OTRA BOTELLA QUE TRAIA: “¡ENCOGERAS AL INSTANTE ¡” PANCHO SE LO

TOMO TODO Y NOS FUIMOS A CASA.

MARIO

PALACIOS

UN SITIO MISTERIOSO

¡Hola! niños y niñas. Me voy de viaje en mi aparato llamado Castañogiro. Pero… ¿dónde estoy? Estaba todo oscuro. Yo no veía nada me quedé quieta y grite ¡Socorro! ¡Socorro! Me escucho un fantasma. Vino corriendo. Yo me asusté mucho pero no tenía motivo porque era muy bueno y nos hicimos grandes amigos. Jugamos mucho. Llegó la hora de irme. Durante el viaje de vuelta me encontré un monstruo muy muy malo, me rompió mi aparato. Caí en medio del mar y tuve que nadar muchísimo para lograr salir. Una vez fuera camine y camine perdida sin saber a dónde iba. Era un lugar muy misterioso y yo nunca había pasado por allí. De repente reconocí las calles ¡creo que estoy en el buen camino, me dije a mi misma. Al poco rato ya era todo conocido y enseguida llegue a mi casa. Allí estaba mi madre y yo le conté lo que me había pasado. Ella se asustó mucho con todo lo que me había sucedido. Como estaba muy cansada me fui a la cama. Al día siguiente me levante y le conté a mi madre que había soñado con el sitio misterioso, pero el monstruo que me rompió el Castañogiro solo quería jugar. En mi sueño le perdoné.

FIN

Claudia Álvarez

¡UN VIAJE MISTERIOSO!

Un día decidí ir de viaje a Marte con mi Panoyagiro.

Llegué a un sitio muy feo, verde, grande y no tenía ni montañas ni prados. Luego di un paseo

para conocerlo y me di cuenta de que no era Marte.

Un poco más tarde, vi un castillo y me encontré un personaje que era rarísimo y me dijo como

se llamaba. Su nombre era Monstruo Sucio. Luego yo le dije mi nombre, Elena González

Fernández.

A continuación bajó el rey, era muy alto y delgado.

Todos nos hicimos muy amigos y decidimos preparar una fiesta con muchos juegos, uno de

ellos era el juego de las sillas. Cuando me iba a sentar en una para ganar al rey y así el juego,

me caí al suelo y me hice daño en el brazo y lo tuve que llevar escayolado en verde, ya que

todo lo que había allí era de ese color.

Cuando llegue a mi casa, mis padres se asustaron al verme así, pero se lo conté todo y se

quedaron alucinados pero tranquilos.

.

Elena González

.

UN VIAJE RARÍSIMO

Un día por la tarde fuimos a explorar, como solíamos hacer

habitualmente Sidragiro, mi aparato especial, y yo, cuando de

repente nos encontramos en un sitio misterioso.

Era una especie de laberinto de carreteras. Estuvimos un

buen rato pensando por dónde salir. Dimos vueltas y vueltas...

Nos encontramos con unos enanos rojos muy raros.

Tenían cuatro ojos, las antenas un poco raras que, en vez de

ir para arriba, iban para abajo. La nariz era de color verde. Nos

dijeron “¡Holaaaaaa!”, con una vocecita muy simpática. Nosotros

nos partimos de risa.

Continuamos el camino y vimos cosas disparatadas como un

gato volando y un perro haciendo el mono. Al principio nos dio

miedo, aunque después nos fuimos acostumbrando.

Luego nos encontramos con la carretera número cinco. Ahí si que

pasamos miedo. Salían dragones echando fuego por la boca.

Por fin vimos la salida. Era la carretera número tres.

Llegamos a casa y encontré un libro misterioso dónde nos

ponía que el lugar dónde habíamos estado se llamaba

“CARBEZALLUDA”.

Bueno después de todo me lo pasé bien.

Alicia Grande

UUUNNN VVVIIIAAAJJJEEE RRRAAARRROOO

Hola, me llamo Nicolás y os voy a contar una historia que me ocurrió hace cinco años,

viajando con mi Cidgiro.

Me dirigía a Marte. Cuando casi había llegado un agujero negro me tragó. Un minuto después

llegué a un lugar muy extraño: había árboles con hojas rojas, flores negras, y no se veía vida

humana, no había casas, el cielo era de color verde, los prados azules…

El tiempo pasaba y no se me ocurría nada. Una hora después me encontré con un marciano.

__ ¿Cómo te llamas?- le pregunté.

__Me llamo X2 ¿Necesitas ayuda?

__Pues claro, quiero volver a mi casa. Pero no sé cómo.

__Primero necesitaríamos un trozo de pizza, un poco de pegamento y mucho metal.

__ Ahora vuelvo- le dije.

Cuando regresé, traía un trozo de piza, mucho pegamento y muchísimo metal que tenía en el

maletero de Cidgiro.

Después nos vimos obligados a construir un aparato muy potente para poder abrir una fisura

en el planeta Tierra.

Cinco años más tarde el aparato estaba listo. Cuando lo probamos funcionaba de maravilla.

Me subí a él y regresé a casa.

Nicolás Cattaneo

VIAJE A LA ATLÁNTIDA

Yo me llamo Eduardo y construyo cosas.

Un día decidí irme a la mar. Hice un helicóptero con armas y una

balsa por si se hundía, ya que el helicóptero podía flotar, volar y

sumergirse.

Todo iba bien, pero de repente una flecha atravesó mi helicóptero

y chocó con una piedra. Se averió y caímos al fondo. Me encontré

con una ciudad bajo el mar. El sitio era increíblemente

sorprendente. Lo más maravilloso de la tierra que yo había

imaginado.

De pronto oí un sonido extraño y eran unas calaveras con armas y

una con capa, que era el rey. Encontré una espada de oro y con

una gema en la parte de abajo. Las calaveras me vieron y yo tuve

que luchar. Entonces fui a por ellas y les corté la cabeza. Pero

“el míster capas”, como le llamo yo, mandó al craqueen, que era

un pulpo gigante. Fue una batalla encarnizada, pero al final

gané. Entonces el “Don capas” se sintió acorralado y vino a

atacarme. En la pelea atravesó mi brazo con su espada. El agua

del mar curó mi brazo. Fue increíble. Al final gané a “mister

capas”.

Aparecieron los verdaderos habitantes del lugar. Me eligieron

como rey y reconstruimos la cuidad.

Eduardo Domínguez

Mi viaje a Paris Un día de primavera mi aparato volador y yo fuimos a Paris. Mi aparato

estaba muy contento de que fuéramos juntos a Paris. Llegamos a Paris.

Fuimos a un centro comercial y nos encontramos a una chica francesa,

que se llamaba Nuria. Nuria era una chica muy amable, llevaba un precio-

so vestido. Le dije a Nuria que había venido a pasar unos días de vacacio-

nes a París. Nuria y yo nos hicimos buenas amigas. Así que la invité a dor-

mir en mi hotel hasta que volviera a Oviedo.

El hotel estaba en la parte antigua de París. Al entrar notamos algo raro.

Subimos a la habitación y vimos que era muy vieja. Había esqueletos en

el baño. Nos dio mucho miedo. Nuria y yo cogimos las maletas y salimos

corriendo. En el pasillo nos encontramos con un fantasma. Las dos dimos la

vuelta atrás y bajamos las escaleras corriendo. Salimos del hotel a toda

pastilla, cogimos mi aparato y Nuria y yo nos alejamos de aquel hotel fan-

tasma.

Alba García

VVVIIIAAAJJJEEE AAALLL PPPAAAÍÍÍSSS DDDEEE LLLOOOSSS CCCUUUÉÉÉLLLEEEBBBRRREEESSS

Una noche muy tranquila, mientras dormía,

oí un ruido muy extraño y me desperté

aterrorizado. Me asomé a la ventana y… ¡era

mi aparato Manzanagiro!

Le pregunté que qué le pasaba y él me

contestó que había una trampa por allí.

-¡Craaaac!- La trampa se abrió.

-¡Aaaaaaaah!- Gritamos mientras caíamos.

-¿Dónde estamos? ¡Es horrible! ¡Terrorífico!

¡Está todo sucio y oscuro!- dijo el aparato.

-¡Qué es eso?- pregunté asustado.

-Parecen cuélebres.

-¡Qué hacemos?

-¡Huir!- dije yo.

-Vale.

-Pero…es que estamos rodeados de cuélebres.

-Hablaremos con ellos.

-Si nos dejáis salir os daremos comida- les

dije a los cuélebres.

-Eeeeh… Vale- contestaron ellos.

-¡Tomad comida!

Entonces nos dejaron salir.

-¡Adiós!

-¡Volved cuando queráis!

-¡Gracias!

Entonces los cuélebres dijeron:

-Vamos a atraparle.

-¿Qué hacéis? Me habéis mentido- les dije.

-Bien. Una cosa: tú vas a morir y tu aparato

servirá para cocerte- me amenazaron los

cuélebres.

-¡Te atrapé!- dijo un cuélebre mientras me

cogía con su cola.

-¡Noooooo!- grité asustado.

-No te preocupes, te salvaré…- dijo mi

aparato.

Entonces empezó a girar sus hojas, se levantó

del suelo y yo me agarré a él. Así salimos

volando de la trampa mientras los cuélebres

gritaban enfadados:

-¡Las pagaréis algún día!

FIN Adrián Freije

Viaje a lo desconocido

Taller de escritura de Tercero del Colegio Juan Rodríguez Muñiz

Oviedo, Curso 2010-2011