Había una vez, en un gran bosque, un gusano.
Un día al gusano le cortaron la cola.
La serpiente que lo hizo huyó hacia el bosque.
Al otro día el gusano salió a buscar su cola perdida.Se encontró con Miss Mouse y todos sus hijitos. Le preguntó
si vio a una serpiente cargando su cola.
Miss Mouse le contestó que hace rato vio pasar una serpiente cargando una cola amarilla
como el color de su piel.
Más tarde el mono Tito le dijo que se
fue hacia los hermosos árboles donde viven los
pájaros carpinteros.
Gusano le preguntó a Mónica Carpintero
y a su esposo. Ellos no vieron nada.
Se encontró con la ardilla Vainilla.
Ella también la estaba buscando porque le robó sus
nueces.Un duende quiso ayudar.
Gusano y el duende caminaron mucho para llegar al campo donde
vive el Toro Sabio.
El Toro Sabio les contó que la gata chismosa conversó un
rato largo con esa serpiente.
La gata chismosa le dijo a gusano que se
busque otra cola porque la suya y
unas nueces fueron el desayuno de
muchas serpientitas.
Gusano se fue muy muy triste, pensando qué le diría su mamá.
Pero su mamá lo abrazó fuerte y le contó un secreto: “la cola de los gusanos
siempre vuelve a crecer”
Gusano saltó feliz y se fue a jugar con su nuevo
amigo, el duende.
fin
Original :La lagartija que perdió la cola.
Marta Ghiglioni
R e i n v e n t o r: F r a n c i s c o P o n
s