El año litúrgico empieza con el
Tiempo de Adviento que se
inicia cuatro domingos antes
del 25 de diciembre y
termina con la misa de vigilia de Navidad.
Tiempo de preparación para
la celebración del nacimiento de Jesús, como recuerdo de la
primera Navidad.
Tiempo para reflexionar y
prepararse para la segunda
venida de Cristo al final de los
tiempos.
Lo importante no es la preparación “exterior” …
Si no la preparación “interior”, la reflexión.
• Durante el tiempo de Adviento recordamos:
• los largos años de espera del Mesías por el pueblo de Israel,
• el mensaje de esperanza de los profetas• y cómo María y José fueron fieles al plan
de Dios.
El Adviento no es un tiempo de penitencia, sino de preparación y
espera gozosa.
Colores litúrgicos: Como el Adviento es tiempo de espera y preparación,
los colores violeta y morado son usados en las vestimentas y decoraciones.
El morado es un color reservado para el uso de la realeza y en Adviento se usa como símbolo de la venida de Cristo nuestro rey, que celebramos en
Navidad, mientras nos preparamos para la venida del reino de Dios.
Símbolos de Adviento: La corona de Adviento representa una
costumbre que los cristianos han mantenido por siglos.
Símbolos de Adviento: El círculo de la corona recuerda todos
los años que el pueblo esperó el Mesías.
Símbolos de Adviento: Las cuatro velas nos recuerdan que el Adviento tiene cuatro semanas. Cada semana se enciende una de las velas, al final del Adviento las cuatro están
encendidas.
Tres de las velas son moradas, el color del Adviento. La vela que se enciende la tercera semana es con frecuencia rosada y significa la esperanza de la
venida de Jesús.
Las velas nos
recuerdan que nos
preparamos para recibir a Jesús, la
Luz del Mundo.