TEATRO
Me gustaba, como decirlo, me gustaba hablar con él (estoy mintiendo) me gustaba hacer el amor
con él, o será mejor decir (en medio de gritos) te amo, estoy exagerando (burlas y risas en el
primer piso) y no escucho nada a mi alrededor (abstracción fatal) Te extraño (fatiga, abrazos y
gemidos).
La obra de teatro era algo así; se abre el telón, veo a los primeros personajes, dos hombres muy
atractivos, tienen relaciones sexuales, (por mi mente pasa el recuerdo del día en que salí de casa y
vi uno de esos horribles adornos de navidad, uno muy parecido a un pene erecto eyaculando) no
eran los personajes principales, la obra era algo así como una pesadilla, ni siquiera recuerdo el
título, las escenas siguientes eran más bien letargo amargo (de nuevo abstracción fatal) tengo aun
su aroma en mi cuerpo, adolorido, sudoroso.
Algo aparentemente gracioso ocurre en escena uno de los personajes femeninos encarna a la
mismísima histeria (para los del público, imagino que perfectos, una histérica es para reírse) se
desnuda, puedo ver su piel tan blanca menos la del rostro, llora con las manos sobre sus mejillas
se cubre y patalea empieza a correr y desaparece gritando (me he de enamorar de alguien así) me
recuerda que tengo que partir.
Quiero verte una vez más, a mi lado, pedirte, por favor hazlo (golpea suavemente en medio de sus
piernas la zona más cálida) penétrame. No he salido aun de este teatro, no quiero volver a verle,
(nunca me ha gustado el teatro) me siento a gusto en este lugar, (para mejorar la expresión puedo
decir que aborrezco las obras de teatro) sé que me está esperando donde quedamos (un profesor
en la universidad daño el teatro para mi) y creo que sobre todo está lloviendo.
Una mañana desperté y recordé que era un ser humano, (un ser vivo) sentí los años (lo que más le
pesa a los delgados es los huesos) y la necesidad de hacer algo, de que me reconozcan, de
inmortalizar mi existencia (solo seré algo más que aprender para alguien que luego morirá), su
ultimo regalo me hizo reconocer que el tiempo no es relativo. Un día empezó y luego termino todo
en 24 horas. siempre lo mismo, la obra de teatro al parecer ya casi termina (de seguro ya no me
está esperando) tengo el leve presentimiento de que lo que estoy viviendo se encuentra en alguno
de esos cuentos que leí para demostrarle mi amor (quería compartirlo todo) tal vez era una novela
(solo quería tener temas de los cuales hablar) no recuerdo bien nada de lo que he leído.
El fin de la obra fue algo sencillo; un joven estudiante universitario es el amante de una mujer
menor que él, la cual lleva cuatro años casada con un escritor en ascenso algo mediocre, este
peculiar personaje asesina a su hermosa amante luego de decirle por primera y única vez que la
ama, estaban justos celebrando el cumpleaños de ella en un estadio de futbol en el cual se jugaba
un partido de la categoria B de su país, ella recibe una llamada de su esposo, (los celos) miente
habla de su mejor amiga, de los años que llevan juntas y de lo importante que es para ella su
amistad, recuerda que su esposo es la verdadera y única conexión con el mundo real, mira a su
amante aun con la bocina en la oreja, llora, se despide, besa a su amante y le dice que también lo
ama, que va a terminar su matrimonio, su amante sonríe y la empuja al precipicio. Nadie nunca se
enteró que él existía, ni que tenía algún vínculo con aquella mujer.
No quiero salir del teatro. No quiero dejar de actuar, salir y reconocer que a pesar de que ella no
está puedo seguir viviendo. Que no la necesito, que soy un artista y que la puedo seguir amando a
lo lejos, que utilizare a las demás mujeres para mantener su recuerdo, lo perfecta que es sobre las
demás (ya no la amo).
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