Nombre: Jordi Sández Martínez
Tutor: Mari Carmen Pascual
22/02/2010
Graffiti: Arte o Vandalismo
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
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Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
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ÍNDICE
1. Introducción ………………………………………………………………………………………………………5
2. Aspectos principales……………………………………………………………………………………………6 2.1 Qué es el graffiti?................................................................................................6 2.2 Técnicas de graffiti………………………………………………………………………………………….9 2.3 Materiales…………………………………………………………………………………………………….13 2.4 La figura del escritor de graffiti………………………………………………………………….…..14
3. Graffiti paso a paso…………………………………………………………………………………………..17
4. Historia del graffiti…………………………………………………………………………………………… 4.1 Nueva York…………………………………………………………………………………………………. 4.2 España…………………………………………………………………………………………………………
5. El graffiti en el mercado…………………………………………………………………………………….
6. El impacto medioambiental del graffiti………………………………………………………………
7. Entrevista a Werens…………………………………………………………………………………………..
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8. Graffiti en la sociedad actual…………………………………………………………………………
9. Conclusión……………………………………………………………………………………………………..
10. Anexos……………………………………………………………………………………………………………
11. Documentación 11.1.- Bibliografía………………………………………………………………………………………… 11.2.- Páginas web……………………………………………………………………………………….. 11.3.- Documentales y material fotográfico…………………………………………………..
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1.- INTRODUCCIÓN El tema del graffiti hoy en día es un tema muy polémico. Hay quienes lo consideran un arte, pero para la mayoría de las personas es tomado como un crimen, un acto vandálico. ¿Es realmente el graffiti un crimen? Los pintores de graffiti son, en ocasiones, detenidos por hacer lo que les gusta, y sancionados con multas de hasta 6.000€ e incluso con penas penitenciarias. El objetivo del trabajo que veremos a continuación no es el del poder dar una respuesta precisa a la pregunta formulada anteriormente, sino obtener una extensa información sobre el polémico tema del graffiti como para poder dar una opinión justificada, y entender realmente qué es el graffiti y cuáles son sus objetivos. A la hora de encontrar información para poder realizar este trabajo, se han tenido enormes dificultades. Se encuentra fácilmente información en Internet, pero la mayoría no tiene validez alguna, es falsa o incorrecta. Además, muchas de las publicaciones literarias que hablan sobre graffiti no dicen realmente lo que es o lo que representa, ya que los autores de éstas no forman ni han formado nunca parte del mundo del graffiti, suelen ser personas que investigan sobre el tema, desde un punto de vista ajeno al movimiento. Las pocas publicaciones literarias o cinematográficas que hablan del graffiti desde un punto de vista más directo, suelen ser americanas (añadiéndose así dificultades de comprensión) y poco conocidas, por lo que la dificultad de búsqueda de ese material también ha sido muy grande y se han encontrado pocas fuentes de las cuales se pudiera sacar la información. Por lo tanto, para elaborar este trabajo, se ha utilizado la propia experiencia del autor en el mundo del graffiti, sintetizada y/o añadida a los documentos bibliográficos que sí se han acercado más al graffiti de la calle, que hablaban del graffiti de verdad. Se decidió escoger este tema para el trabajo porque es un tema que ha sido muy pocas veces tratado, y es muy interesante. Además, el autor del trabajo consta de una propia experiencia como pintor (o escritor) de graffiti de unos cuatro años aproximadamente que pueden dar un aspecto mucho más cercano al graffiti de verdad, al que se vive día a día en las calles de las ciudades, y no a un graffiti ceñido a los medios de comunicación.
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2.- ASPECTOS PRINCIPALES 2.1.- Qué es el graffiti? El término graffiti no consta de una definición precisa. Según la Real Academia, la palabra ‘’graffiti’’ es una adaptación de la voz italiana graffito, popularizada en español a través del inglés, relacionada con el sentido de ‘‘inscripción o dibujo hecho en una pared’’. Para poder empezar a hablar sobre este término, debemos hacer previamente un pequeño inciso dentro de la cultura hip hop: El hip hop es un movimiento artístico y musical que nació en Estados Unidos a finales de 1960 en las comunidades afroamericanas de los barrios bajos de la ciudad de Nueva York. Este movimiento se divide en cuatro únicos elementos (actualmente se habla de un quinto) que forman la cultura hip hop:
El RAP (Rythm And Poetry) es el género musical de esta cultura, el cual se utiliza
como crítica social y política sobre ritmos lentos de percusión extendida. La
persona que da vida a este estilo musical, es nombrada MC (Maestro de
Ceremonias).
El breakdance es el ‘’baile’’ del hip hop. Durante los inicios del hip hop, la persona
que practicaba breakdance era conocida como b-boy (break boy), pero
actualmente se considera b-boy a cualquier representante de esta cultura.
El Turntablism (o Djing), cuyo representante es conocido como DJ, es la persona
que se encarga de producir y mezclar los sonidos sobre los cuales rima el MC.
El graffiti es la expresión gráfica del hip hop, aplicada sobre superficies urbanas,
unas veces con intenciones artísticas y otras como crítica social y/o política.
Por lo tanto, vemos que el graffiti tiene un vínculo muy fuerte con la cultura hip hop de
la cual, sin embargo, no toma parte en el significado etimológico de la palabra.
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Otro ejemplo lo encontramos en la definición que encontramos en el famoso libro
‘’Getting Up’’ de Craig Castleman, uno de las primeras publicaciones literarias sobre
este género:
Graffiti. Este término (que procede del italiano graffierae,
<<garabatear>>) es el empleado generalmente para describir muchos
tipos diferentes de escritura mural, entre los que se pueden incluir las
pinturas de ciertas cuevas prehistóricas y toda la suerte de mensajes
políticos, sexuales o humorísticos que han sido garabateados, pintados o
marcados en las paredes a lo largo de la historia. […]En el uso común se
utiliza la misma forma para el singular y el plural, […]1
Los primeros investigadores que estudiaron las primeras pintadas sobre el metro de
Nueva York y en los barrios bajos de esta, son entre otros: Craig Castleman (1987),
Sarah Giller (1997), Jane Gadsby (1995) o Henry Chalfant (1987). Según Gadsby, la
palabra graffiti es utilizada actualmente para referirse a cualquier escritura mural,
imágenes, símbolos o marcas de cualquier clase y en cualquier superficie, sin importar
la motivación del escritor. Vemos que en la definición de Gadsby, y en las definiciones
vistas anteriormente, no consta en ningún lugar la referencia que el graffiti debería de
tener respecto a la cultura hip-hop.
En el primer documental de graffiti de la historia, Style Wars (1983), Bernie Jacobs,
inspector de policía y coordinador para la prevención del crimen en el metro de Nueva
York nos ofrece su visión del graffiti cuando dice:
-El graffiti, como su nombre indica, no es un arte. Graffiti es la aplicación
de un mensaje a una superficie. Como esas letras, al final de ese vagón,
justo detrás de mí. ¿Eso es una forma de arte? No lo sé, no soy un crítico
de arte, pero pongo la mano en el fuego y digo que esto es un delito.2
1 Craig Castleman, ‘’Getting Up’’, Ed. The Massachussets Institute of Technology, 1982
2 Henry Chalfant y Tony Silver, Documental Style Wars, EEUU, 1983
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Por lo tanto, observamos que la palabra graffiti tiene un significado muy amplio.
Finalmente, un concepto de graffiti más callejero sería el que nos ofrece Werens, que
nos lo describe así:
[…] el graffiti es regalar arte a la ciudad, es mi caso. Yo lo hago más
desde un punto de vista artístico y a lo mejor un escritor de bombing no lo
valoraría.3
3 Extraído de la entrevista que se muestra más adelante en el trabajo (página XX)
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2.2.- Técnicas de graffiti
Como en todo estilo artístico, en el graffiti hay una diversidad de estilos enorme. Cada
escritor tiene su propio estilo a la hora de realizar un graffiti, pero (hablando de graffiti
referido a las letras), los estilos se podrían dividir, comenzando por el más sencillo
hasta el más complicado, en:
· Tag: la palabra ‘’tag’’ proviene del inglés, y su
tradición al español sería ‘’firma ‘’, pues un tal es
la firma marca de un escritor, cada una firma su
estilo y eso diferencia de los demás. De los tags
surgieron lo que más adelante fueron piezas,
pompas... también es una forma rápida y
sencilla de dejar huella por la ciudad
prácticamente sin temor a que quede a la gente
o la policía. Podemos encontrar tags realizados
con rotulador o con espray, pero el número de
tags realizados con rotulador es
considerablemente superior al de hechos con
espray, ya que éste ocupa menos espacio y es
económicamente más asequible que el espray.
Tag de Kamy
· Pompa: graffiti con letras muy
redondas, generalmente mal
rellenadas y sin detalle alguno,
utilizadas para pintar de la manera
más rápida posible. Es uno de los
estilos de graffiti más sencillos y más
utilizados en todo el mundo.
Normalmente aparecen sobre todo
tipo de superficies. Después de los
tags, es el estilo de graffiti más
habitual y más frecuentemente lo
podemos encontrar en la ciudad.
Pompa de Sotik
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·Block letters: letras parecidas a las de un cartel publicitario, sencillas, perfectamente
legibles por cualquier persona, normalmente pintadas en grandes espacios, y también
de grandes o enormes dimensiones.
Block Letters de Roik
·Pieza: graffiti no
muy complicado,
formado por unas
letras fácilmente
legibles,
generalmente
muy coloridas y
acompañadas de
muchos detalles
(aunque esto
puede variar
según el artista).
Pieza de winer
Las podemos encontrar en lugares donde pintar graffiti está permitido, pero también
abundan en el ámbito ilegal del graffiti. Las piezas pintadas en color plateado (éste es
el color que más nivel de cubrición tiene de toda la gama de colores, por lo que nos
permite pintar más superficie en menor tiempo) se conocen como ‘’platas’’, y
aparecen casi exclusivamente puntos de la ciudad donde no está permitido el pintar
graffiti.
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·Wildstyle: es el estilo de
graffiti más complicado,
rebuscado e ingenioso, por
lo que requiere un nivel de
experiencia como escritor
de graffiti mayor que el
que necesitamos para
pintar cualquier estilo
nombrado anteriormente.
Wildstyle de Ryaw
En este tipo de graffiti, las letras se mezclan unas con otras de tal modo que para los
individuos que sean ajenos al mundo del graffiti, es imposible su lectura, e incluso, en
algunas ocasiones, ni siquiera parecen letras.
Muy raramente encontraremos un wildstyle pintado de forma ilegal, pues su
complexión su abundancia de colores y el gran número de detalles que podemos
encontrar lo hacen prácticamente imposible de realizar en otros muros que no en los
que está permitido pintar.
·Model Pastel: graffiti con efecto de volumen, en tres dimensiones, que pretende
simular la salida del graffiti por encima de la pared o superficie en la que se encuentra.
Suelen ser letras sencillas fácilmente legibles, pero también los hay que combinan el
wildstyle con el
model pastel, es
decir, un wildstyle
con efecto de
volumen en tres
dimensiones. Éste
es el estilo más
complicado de
todos, dado que
combina
complejidad e
ingenio con el
efecto 3D. Model Pastel de Mes
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Los escritores más conservadores, consideran que el graffiti, si no son letras pintadas
de forma ilegal, no es graffiti (no todo lo que se pinta con espray es graffiti). Éstos
apoyan la idea de que los dibujos pintados con espray, ya sean de tipo cómico o
realista, no son graffiti. Los tipos de dibujos que se pintan con las técnicas de graffiti
son:
·Kekos: dibujos animados poco elaborados realizados por los escritores, que estos
generalmente utilizan como icono de su nombre artístico. Encontramos un claro
ejemplo de keko en el artista Pez, de Barcelona, que siempre pinta ese pez
característico que todos hemos visto alguna vez por la ciudad condal.
Keko de Haku Keko de Pez
·Realismos: graffiti que intenta plasmar la
realidad. Es el género más artístico el graffiti.
Suelen ser rostros o personajes pintados de
la manera más real posible. Hay personas
ajenas al mundo del graffiti que, en
ocasiones, pintan realismos junto a algunos
escritores de graffiti. Suelen aparecer en
murales, acompañados de letras.
Realismo de Kairo
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También es importante nombrar un género no muy
lejano al graffiti: el street art.
El street art engloba lo que son las pegatinas, carteles,
póster es y plantillas que encontramos en la ciudad.
Las plantillas suelen estar hechas de plástico para
poder reutilizarlas y las pegatinas cuanto más
resistentes y difíciles de desenganchar mejor.
Hay quien las usa como crítica social o política, o que
las usa como simple género decorativo. Escritor pintando con una plantilla
2.3.- Materiales
En general y en casi todos los casos, los escritores utilizan la técnica de pintado con
espray para realizar sus obras, pero también podemos encontrar graffiti pintado con
pintura plástica (ya sea con rodillo o brocha), o una combinación de éstos.
Normalmente se usa la pintura plástica para pintar primero sobre la pared y así pintar
sobre un color claro y limpio, y encima realizar el pintado del graffiti con espray. Hay
también quien usa pintura plástica y rodillo para pintar graffiti de manera ilegal,
llegando a pintar grandes superficies en muy poco tiempo, en comparación con la
superficie que se puede cubrir con el espray.
En cuanto a los tags o firmas, varía el uso del espray
respecto del rotulador, generalmente recargado con alguna
tinta más resistente al borrado y a los efectos de la
corrosión provocada por el sol.
Tagger de la marca On The Run
En el street art, la diversidad de materiales utilizados es mayor:
- Para la fabricación de las plantillas generalmente se utiliza un plástico resistente para
poder ser utilizado, y para poder pintar la en la pared, se utiliza un espray.
- Los carteles están hechos de papel, y son enganchados con un pegamento en espray
o, si el cartel enganchar es de dimensiones muy grandes, se utiliza un rodillo para
aplicar el pegamento, en este caso no en espray.
- En cuanto a las pegatinas, se utilizan las más resistentes y difíciles de desenganchar
posible.
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2.4.- La figura del escritor de graffiti
Como se nombra al principio de este trabajo, el graffiti está directamente ligado a la
cultura hip-hop. En los inicios del graffiti, todas las personas relacionadas con este,
también lo estaban con la cultura hip-hop. No obstante, actualmente esto no es así.
Podemos encontrar muchos escritores que graffiti unidos a la cultura hip-hop, pero
también los hay (en cantidades considerables) que no tienen nada que ver con esta
cultura.
La vida de un escritor de graffiti, comienza como tal normalmente sobre la
adolescencia. Cuando un escritor de graffiti comienza a serlo, es denominado toy
(juguete en inglés), ya que en comparación con el nivel de los escritores expertos,
estos adolescentes, están muy verdes en el mundo del graffiti y a veces pintan en sitios
donde perjudican a los demás escritores, por ejemplo, pintando una pieza muy poco
elaborada y con mucha falta de experiencia sobre la pieza de otro escritor con mucha
más experiencia, creando así un
conflicto entre toys y escritores
expertos.
El tiempo en que un escritor pasa
de ser un toy a un escritor experto,
es imposible determinarlo, ya que
algunos escritores en sus inicios son
mejores que algunos expertos, el
tiempo puede oscilar entre uno y
cuatro años, depende mucho
también la edad en la que el
escritor comienza a pintar graffiti.
Parodia referida a los escritores de graffiti
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Actualmente, la mayor parte de los escritores son jóvenes de entre catorce y
veinticinco años. Hay tanto hombres como mujeres, pero predominan los primeros.
Sobretodo abundan los más jóvenes, ya que muchos comienzan a pintar graffiti por
moda y a los pocos años dejan de pintar (toys). Aunque la mayor parte oscile entre
esas edades, encontramos apasionados del graffiti que con una edad mayor a la
nombrada, siguen pintando graffiti hasta que su cuerpo o su nivel económico se lo
permiten.
El graffiti no está ligado a una determinada clase social, pues existen escritores de
todas clases, aunque en menos cantidad los de clase alta. Sin embargo, en los inicios
del graffiti, en la old school4 como sólo se pintaba graffiti de forma ilegal, los escritores
pertenecían a clases bajas y la edad de los escritores oscilaba entre los diez y los
dieciséis años. Después de esa edad dejaban de ser menores, y al ser llevados a juicio
por ser sorprendidos mientas pintaban graffiti, se les podía abrir una ficha policial que
constaría en su expediente para el resto de sus días, lo cual retraía a los pintores el
impulso de llevarlo a cabo.
A pesar de todo, también había escritores de mayor edad, de entre dieciséis y
veinticuatro años, pero sólo algunos casos aislados (la media de edad de los escritores
de graffiti estaba en los 15 años).
Vemos otra vez un ejemplo de estas excepciones en el libro ‘’Getting Up’’ de Craig
Castleman:
El agente Lesnewski 5 observa lo siguiente: <<Sabemos de muchachos que
siguen pintando graffiti con diecinueve, veinte e incluso veintiún años.
Hay uno que sale a pintar con su mujer y su pequeño en los brazos. >>6
4 Old shchool, ‘’vieja escuela’’ es como se les denomina a los escritores de graffiti que pintan y/o
pintaban desde 1984. 5 Agente de la brigada antigraffiti dependiente del ‘’Transit Police Department’’ de Nueva York.
6 Craig Castleman, ‘’Getting Up’’, Ed. The Massachussets Institute of Technology, 1982
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La intencionalidad de los writers7 a la hora de pintar graffiti, se podría reducir a en tres
objetivos:
-Para obtener una fama anónima: sobretodo los escritores que se dedican a pintar en
todas partes, sin importarles la calidad de las pintadas, solo la cantidad, lo que se
conoce actualmente como bombing8. Para éstos el mejor lugar donde pintar graffiti es
el que más se vea (de aquí ese afán por pintar los trenes y metros). Suelen sentir una
sensación de plenitud al ver por todos los rincones de la ciudad su nombre escrito.
Parecen sufrir de egocentrismo, pero no es así: pues el egocéntrico rehusaría de la
fama anónima para hacerla pública.
-Como forma de expresión o por “amor” hacia el graffiti: el writer pinta simplemente
por gusto, porque el graffiti le llama la atención, porque huye del típico lienzo y sale a
la calle a demostrar su talento. Le gusta decorar las calles a su gusto o simplemente
gozar de una tarde pintando graffiti con sus compañeros de fechorías. El escritor de
graffiti que pinta con este objetivo, no se preocupa por ser famoso dentro del mundo
del graffiti (solo en algunas ocasiones), sino por mejorar él mismo y para sí mismo, sin
pensar en los demás.
-Como protesta social: muchos escritores pintan para dar constancia en los muros de
las ciudades de sus creencias respecto a temas políticos o sociales. Algunos solo pintan
por protesta, otros pintan por fama además de eso. Abundan más los que se dedican al
street art en esta intencionalidad, y siempre se le relaciona a éste con el mismo
objetivo.
Por desgracia para los demás writers, también existe gente con otro objetivo: el de
presumir por sus graffiti. Por suerte, suelen ser niños que, movidos por el actual
negocio que están haciendo con la cultura hip hop en televisión, deciden imitar a sus
ídolos televisivos vistiendo ropa ancha y “pintando graffiti”. Esos niños que solo pintan
por moda son los ya nombrados antes toys.
7 Del inglés ‘’escritores’’, término con el que se hacen conocer los pintores de graffiti.
8Del inglés ‘’Bombardear’’, pintar por todas partes, con cualquier tipo de utensilio y sobre cualquier
superficie.
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3.- GRAFFITI PASO A PASO
Siendo yo mismo un escritor de graffiti, cómo no podía incluir en el trabajo un
apartado como éste en el que se representa el pintado de una pieza de graffiti paso a
paso.
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4.- HISTORIA DEL GRAFFITI
4.1.- Nueva York
Ya podíamos ver pintura mural en la prehistoria, las
llamadas ‘’pinturas rupestres’’; pero la modalidad
del graffiti se inicia en la ciudad de Nueva York en
los años sesenta, cuando ‘’Taki 138’’, un joven de
Washington Heights llamado Demetrius, a los 17
años comenzó a escribir su apodo por todo
Manhattan. ‘’Taki’’ era su apodo, y 138 el número
de su vivienda.
Taki 138 firmando
Taki trabajaba como mensajero y viajaba constantemente en el metro por su trabajo,
de un lado a otro de la ciudad. En el trayecto estampaba su tag (firma) allí por donde
pasaba, tanto dentro como fuera del vagón. No buscaba ningún significado artístico en
ello, únicamente se limitaba a escribir su nombre con letras vulgares.
Pronto surgieron imitadores del mensajero que estampaban su firma por todos sitios,
como Frank 207, Chew 127, Julio 204, Bárbara 62, etc. Estos escritores no buscaban
calidad en su trabajo, sino cantidad, para que la gente lo viera y así obtener una fama
anónima. Las calles se llenaron de tags y entonces surgió el boom del graffiti.
Entonces cientos de adolescentes seguidores de este fenómeno, comenzaron a poner
su nombre por toda la ciudad, cada uno con su estilo propio. Esta diversidad de estilos
hizo ganar importancia a la calidad respecto a la cantidad de las firmas, pero aún
dando una gran importancia a la cantidad. Entonces, lo que los escritores de graffiti
buscaban, era una gran cantidad de firmas de buena calidad.
Un factor muy importante era el lugar donde se realizaban. Por ejemplo, se le daba
más importancia a un tag realizado en algún sitio alto, de difícil acceso aparentemente
imposible de poder pintar sobre él, un lugar con un habitual alto nivel de personas,
que a un tag realizado en la fachada de un edificio a altura normal, por muy bien
elaborado que estuviera. El graffiti fue tomado como una competición: si un artista
pintaba una firma en lo alto de un edificio y además de buena calidad, todos los
artistas que veían esta firma, buscaban de cualquier forma la manera de pintar en
algún lugar aún más alto, más llamativo, y realizar un trabajo de más calidad. El mejor
escritor era el que más tags y de mayor calidad tenía por toda la ciudad.
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Esta mentalidad de pinturas de calidad en cantidad va a perdurar durante muchos
años. Un escritor que nos da un gran ejemplo sobre esto, es el artista Seen, que, en
1985 (cuando ya era más frecuente la pintada de piezas), logró pintar su nombre sobre
las enormes y famosas letras que indican la entrada en Hollywood.
Graffiti de Seen sobre las letras de Hollywood
Dada la importancia de ser reconocido en el mundo del graffiti, y hacerse famoso en el
mismo, qué mejor manera de ganar fama, que pintar el metro. Un escritor de
Brooklyn, por ejemplo, podría ser el más famoso en su ciudad debido a una gran
cantidad de tags por todos sitios, pero el escritor que pintaba toda una línea de metro,
no sólo era reconocido en su ciudad, sino en todas las ciudades por las que pasaba el
metro. Además, como durante esa época reinaba la pobreza en América, la mayor
parte de los ciudadanos no tenían acceso a un vehículo propio, y utilizaban el
transporte público, o sea, el tren.
Los trenes eran pintados tanto por dentro como por fuera. No importaba el material
que se utilizara, lo importante era dejar marca. En esas épocas difíciles, no eran
muchos los que podían permitirse comprar pintura en espray, por lo tanto,
mayoritariamente los trenes eran firmados con rotulador o rayados con cualquier tipo
de material afilado.
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El graffiti pintado hasta ese momento eran tan sólo firmas. A fin de destacar cada
escritor su firma, cada escritor comenzó a embellecer de una forma distinta su tag. Por
ejemplo, Kool Jeff, acababa la letra “J” en punta, imitando la cola del demonio. Cada
escritor seguía un estilo diferente de firma hasta que apareció el artista de Manhattan
Top Cat, que utilizaba a la hora de firmar, unas letras alargadas, finas y muy juntas,
de manera que las firmas de este escritor eran casi ilegibles. Esto fue un gran punto a
favor para el artista, ya que, al ser unas firmas con un estilo tan diferente al usado
hasta el momento que poca gente lograba
entender, destacaban sobre las demás.
Actualmente aquellas firmas nos parecen muy
sencillas y fáciles de leer, pero para los
escritores de los años 70 era un estilo muy
complicado, que dio origen al estilo Broadway
Elegant, que muchos jóvenes decidieron
adoptar también para sus firmas.
Al mismo tiempo, aparece el estilo Brooklyn, caracterizado por la utilización de letras
muy separadas y adornadas con corazones, flechas y espirales. También el estilo del
Bronx se hizo popular, que consistía en una combinación de los dos anteriores.
Sin embargo, otros escritores preferían continuar teniendo estilo propio a imitar el
estilo de otros.
Durante los inicios de los años 80, aparecen en el mercado una línea de rotuladores de
gran tamaño y resistencia que facilitaban a los escritores el pintado de sus tags y
mejoraba los estilos de los mismos.
Imagínense: miles de jóvenes de todo Norteamérica cogiendo el rotulador o el espray y
saliendo a la calle para pintar allí donde podían. Miles de tags de diferentes colores,
tamaños, estilos, etc. inundaban la ciudad. En esa inmensa nube de firmas, era muy
difícil distinguir unas de otras, lo que llevó a los escritores a centrarse mucho más en la
elección del color y del tamaño de los tags.
Tag de Raid al estilo Broadway Elegant
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Entonces, el escritor Super Kool descubrió que cambiando la válvula (o boquilla)
convencional que llevaba el spray por una más ancha, como las de los sprays de laca o
espuma para el pelo, podría conseguir cubrir mucho más superficie de pintura en
mucho menos tiempo. En la cochera 221 del metro de Nueva York, con un espray de
color rosa con la boquilla gruesa y con otro espray de color amarillo con una válvula
común, pintó su nombre en unas grandes letras rosas trazadas (o perfiladas) en
amarillo. Las letras estaban torcidas y eran irregulares, pero aun así, fue considerado el
mejor graffiti realizado hasta el momento en el metro de Nueva York, y causó un gran
impacto sobre los demás escritores.
Basándose en el trabajo de Super Kool, un writer del Bronx que se hacía llamar Phase
II, inventó el primer estilo de graffiti: el estilo pompa9. Sus letras pompa eran unas
letras de gran tamaño, huecas,
bien trazadas y de colores
cuidadosamente elegidos.
Dentro de las letras pompa,
distinguió diversos subestilos,
como el phasemagorical
fantástico (letras pompa
decoradas a su alrededor con
estrellas), el pompa nublado
(letras pompa rodeadas de
nubes) y el pompa gigante
(letras pompa más grandes en
la parte superior de éstas),
entre otras.
Phase II fue el inventor de este famoso estilo y dio nombre a diversos subestilos de
éste, pero el escritor solo había iluminado el camino que otros iban a seguir.
La siguiente evolución en el estilo del graffiti tuvo lugar cuando Pistol I, un escritor de
Brooklyn, pintó su nombre en unas letras rojas y blancas perfiladas ligeramente de
manera que daba un efecto de volumen 3D A la pieza. Los otros escritores no daban
crédito a lo que veían.
Más tarde, otros escritores también fueron capaces de pintar graffiti con volumen 3D.
En este momento nace la guerra de estilos.
9 Véase el apartado del trabajo perteneciente a la introducción “Técnicas del graffiti” (páginas X y Y)
Pompa de Phase II
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Los escritores ahora valoran más el estilo del escritor que el número de piezas o firmas
pintadas. Pasa a ser más importante la calidad que la cantidad. Algunos escritores
incluso cambiaron sus nombres de manera que éstos combinaran mejor y pudieran
hacer diseños con más estilo. A medida que los writers mejoraban la técnica y el estilo
de sus obras, surgió la necesidad deaumentar también el tamaño de éstas. Los
escritores consideraban insuficiente el espacio entre las ventanillas y la parte inferior
del tren, e hicieron sus piezas más grandes.
Algunos las hacían cubriendo desde la parte inferior hasta la parte superior del vagón,
el conocido como top to bottom, “de arriba abajo” popularizado por Riff. Otros las
pintaban de manera que cubrían desde el inicio del vagón hasta su final, el end to end,
“de principio a fin”.
Ejemplo de end to end, varios autores
Sin embargo, la verdadera revolución en el tamaño de los graffiti se lleva a cabo
cuando, a finales de 1973, el escritor Flint 707 pinta unas letras tridimensionales,
pintadas a rayas, en color negro y plata con una lista azul y una nube blanca, de las
cuales destacaba el tamaño, pues ocupaban todo el vagón: de la parte superior al
inferior y desde el extremo derecho hasta el izquierdo. Éste fue el primer vagón
pintado entero: el primer wholecar.
Wholecar de Lee con un dibujo
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Desde que Flint 707 lo hizo, todos los escritores también querían hacerlo, hasta que se
llegó a un punto en que, además de perfeccionarse el estilo y se añaden letras y
dibujos a los wholecar. A mediados de los años sesenta, ya se podían apreciar sobre
muchos vagones ejemplos de wholecar que además de letras también tenían
personajes, caricaturas, representaciones de escenas, e incluso la visión de los
escritores hacia la vida en su ciudad.
Pocos fueron los que llegaron a pintar algo más grande que un wholecar, como el
famoso Lee, que pintaba hasta dos vagones con una misma obra.
En la misma época en la que aparecen los wholecar¸ en 1975, el artista IN, que eligió
ese nombre para poder pintar muchas veces sin gastar mucha pintura decide
recuperar la competición inicial del graffiti: la cantidad frente a la calidad. Para ello, se
dedicó a practicar pintando su nombre al estilo pompa, pero de una manera muy poco
trabajada, muy sencilla y muy rápida. Al principio solo pintaba su nombre con este
estilo de pompa chapucera dos o
tres veces en cada vagón, pero
cuando cogió suficiente práctica,
éste bombardeaba los trenes
(nace el concepto de bombing)
con lo que él denominaba
vomitados (throw-up). Hasta ese
momento, se utilizaba el término
throw-up para hablar de obras
pobres en estilo y en técnica (mal pintadas, con goterones o con letras torcidas), pero
IN modifica el concepto de la palabra y los throw-up pasan a ser otro estilo de graffiti.
Al principio, los demás escritores no valoraban en absoluto los throw-up de IN, pero
cuando éstos aparecieron en todas las líneas de metro de la ciudad, se dieron cuenta
de que, aunque careciera de estilo y técnica, era famoso en todas partes. Entonces
muchos writers siguen el mismo camino de IN: cambian su nombre por uno de dos
letras y basan su obra en la pintada del mayor número posible de veces en toda la
ciudad (algunos alternan los throw-up para ganar fama, con obras elaboradas para
demostrar su estilo). Por ejemplo, Jester, uno de los writers que más estilo tenían
hasta el momento, cambió su nombre por el de DY y se dedicó únicamente a los
throw-up.
Throw-up de In
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Los escritores que se dedicaban a pintar wholecar o piezas, califican este nuevo estilo
de “montones de basura”, y se lamentan de que este estilo tan pobre de graffiti. No
obstante, después de que pasara la moda de los throw-up, que se habían vuelto
predominantes en los trenes, la mayor parte de los writers siguieron valorando más los
wholecar, los top to bottom o los end to end que los throw-up. Los hay que siguieron
pintando throw-up únicamente, pero estos escritores fueron de número reducido: los
demás preferían la calidad que la cantidad, o alternaban los dos estilos.
Las siguientes evoluciones en el estilo del graffiti no son tan significativas como las
anteriores, ya que éstas se basan en variantes de las anteriores. Estas evoluciones se
consiguen gracias a que el nivel económico es más elevado y los writers pueden
permitirse el comprar un número mayor de espráis y, por lo tanto, utilizar más colores
en sus obras.
Nace el estilo de graffiti model pastel gracias a este aumento del capital que permite
utilizar una gama mucho más amplia de colores y así conseguir pintar letras
tridimensionales, muy realistas, que semejan su salida de la pared.
También aparece la técnica del difuminado, que consiste en mezclar sobre la pared dos
colores de manera que se difuminen gradualmente.
Aunque los servicios de limpieza del metro limpiasen los trenes y fuesen repintados
por los escritores cientos de veces, el graffiti nunca ha dejado de crecer. En los
documentos de los cuales he extraído la información de la historia del graffiti, dada la
antigüedad de éstos, la historia acaba en 1980. La última información que dan, es la de
que algunos fabricantes de pintura en espray sustituyen los espráis de válvula gruesa
por espráis de válvula fina y fija. Esto supuso una preocupación para los escritores, ya
que si no podían utilizar válvulas gruesas, no se podrían pintar throw-up, top to
bottom, wholecar, o cualquier tipo de graffiti de grandes dimensiones, volviendo así a
la primera etapa del graffiti.
No obstante, el graffiti no entró en decadencia ni mucho menos: las válvulas gruesas
se conservaron, siguieron evolucionando los estilos y el graffiti se expandió por todos
los países desarrollados gracias a la cultura hip hop. Éste causó un gran impacto en
Alemania, Holanda, España, Francia, y sobre todo en la mayor parte de los Estados
Unidos.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[25]
La aparición de empresas dedicadas a la fabricación de espráis dedicadas
exclusivamente al graffiti dio lugar a una evolución en los estilos y en las facilidades a
la hora de conseguir pintura de calidad. La primera en especializarse en el mundo del
graffiti fue la empresa Montana Colors, fundada en 1994 en España (como se explica
más adelante en el trabajo).
Actualmente, el graffiti está en casi todas las ciudades del mundo y sigue en expansión,
tanto a nivel de territorio como a nivel de calidad y como a nivel de cantidad.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[26]
4.2.- España
Al igual que en la historia de Nueva
York, en la que todo comienza con un
personaje en particular (Taki 183), el
graffiti en nuestro país tiene inicio
básicamente en un solo nombre:
Muelle.
Muelle es un escritor de Madrid de los
años 80 que pintaba con éste nombre y
colocaba una característica espiral
acabada en una punta de flecha en
cada una de sus firmas. Su nombre real
era Juan Carlos Argüello, y su mote
provenía de su época escolar, pues
surge cuando Juan se hace una
bicicleta con un muelle gigante como
amortiguador y desde entonces le
llaman muelle en la escuela. Muelle con su famoso tag pintado en la mano
Este artista, lo que quería en la vida y buscó hasta su muerte, eran derechos de autor
para su obra, tener un local para ensayar con su grupo de rock y tener una imprenta
para imprimir sus propias pegatinas que hacía normalmente a mano. Comenzó a pintar
en 1984, y no lo dejó hasta 1993, dos años antes de su muerte, cuando dijo que su
mensaje ya estaba agotado. Pintó por todo Madrid la segunda mitad de los ochenta,
comenzando por su barrio, y poco a poco extendiéndose por toda España. Al principio
solo hacía tags simples, pero luego los hizo más complejos: con sombras, con varios
colores o con profundidad. Aun así, nunca llegó a hacer más que firmas.
Aunque no llegó al nivel de los escritores de Nueva York, Muelle sirvió de referencia a
muchos jóvenes españoles en cuanto al hecho de pintar graffiti, y en cuanto al estilo
de éstos. Nace así el estilo flechero característico de la ciudad de Madrid que hoy en
día algunos writers siguen utilizando.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[27]
Otra característica importante de Muelle era el lugar donde pintaba sus firmas. Los
primeros años no le daba importancia, pero más adelante era habitual en él pensar el
sitio en donde iba a pintar. Lo hizo sobre todo en superficies muy visibles, tapias de
solares o vallas publicitarias, estas últimas preferiblemente ya que consideraba su
“mensaje” como un antídoto contra el bombardeo de publicidad que inundaba la
ciudad, evitando de cualquier manera los lugares culturales o naturales.
Además, se preocupaba mucho por la contaminación que causaban los aerosoles sobre
la capa de ozono. Por lo tanto, vemos que era un hombre enemistado con el sistema
que plasmaba su voluntad de expresión. Lo era hasta tal punto que en diciembre de
1985 registró su nombre en la propiedad industrial, para que su nombre nunca fuera
utilizado como logotipo o marca comercial. En varias ocasiones puso pleitos a varias
agencias de publicidad ya que defendía que éstas le habían plagiado parte de su
logotipo. Incluso denunció, en junio de 1988, al ayuntamiento de Madrid, ya que este
incluyó su firma en la revista Villa de Madrid.
Una de las hazañas más
características de muelle fue,
cuando en 1987, éste fue detenido
por dejar su firma en la estatua al
oso y el madroño10 de Madrid
pocas horas después de haber sido
colocada. Fue multado con 2500
pesetas por ello. Sin embargo él
defendió su inocencia ante los
tribunales, defendiendo que su arte callejero justificaba el hecho de que hubiera
pintado en la estatua. Por el hecho de aparecer en los tribunales, éste también
apareció en los periódicos, lo que hizo que el artista Muelle, anónimo, dejará de ser
misterioso y secreto: pasó de ser Muelle a ser reconocido públicamente como Juan
Carlos Argüello. Al año siguiente, cuando los operarios municipales limpiaban la
estatua, todos los andamios que utilizaron para limpiarla aparecieron firmados por
Muelle.
10
Escultura de la segunda mitad del siglo XX, ubicada en la ciudad de Madrid que representa las armas heráldicas de la villa y se encuentra instalada en la Plaza del Sol, en la embocadura de la calle del Carmen, en pleno centro histórico de la ciudad.
Firma muy elaborada de Muelle
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[28]
Pero esa no fue la primera detención policial que experimentó Muelle por pintar
graffiti. En una ocasión, mientras firmaba sobre un cartel publicitario del metro, fue
sorprendido por un guarda jurado. Fue a juicio, y el juez le impuso una multa de 2500
pesetas. Las multas fueron incrementando hasta llegar a acumular las 12000 pesetas,
que saldó con dos días de cárcel.
Durante una noche en la que salió a la calle a firmar, mientras pintaba, notó la
presencia de un Nissan conducido por la policía, saltó a su moto, e intentó una alocada
huida desesperada por Madrid. La huida acabó cuando se encontró con semáforo en
rojo, y su respeto por las normas de circulación le hizo parar y caer en manos de la
policía. La conversación que tuvo con el policía fue la siguiente:
-¿Eres tú el que estabas haciendo la pintada?
-¿Qué pintada?
-¡Hombre, un listillo!
-Sí, era yo.
-¿Tú eres el Muelle?
-Sí, ¿por qué?
-¿Te importaría firmarnos un autógrafo?
Vemos así que muelle se había ganado a la gente de Madrid. Otro ejemplo que nos lo
confirma, es el de los funcionarios municipales que se dedican a “limpiar” graffiti, que
respetaba la firma de Muelle y borraban todas las demás.
Desde que la gente toma como héroe de barrio a Muelle por sus contradicciones con la
ley y las denuncias a las multinacionales que habían copiado su firma, el artista,
deseoso de comunicarse, aunque en el anonimato, abre un apartado de correos al que
amas de casa, niños y profesores mandan caricaturas, firmas con logos y cartas, entre
otros.
En una ocasión, una conocida fábrica de colchones ofreció al artista cinco millones de
pesetas a cambio de los derechos de la firma de Muelle, oferta que éste rechazó y
causó conmoción entre sus seguidores.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[29]
Juan Carlos Argüello, Muelle, muere en 1995 a la edad de 29 años víctima de un
cáncer de hígado. Su última obra importante fue la firma a seis colores en una pared
de la autopista M-30 de Madrid, que hizo antes de retirarse por siempre del graffiti, en
1993.
Después de su muerte, durante algunos años se siguen conservando algunas de sus
firmas por la ciudad. Los escritores las consideran reliquias, aunque no el
ayuntamiento, que finalmente ha limpiado de la ciudad todas sus obras. Actualmente,
el que conserva alguna muestra de una firma de muelle, la conserva como reliquia,
pues muelle es admirado por todo escritor del panorama español, considerado como
un héroe. Incluso, en más de una ocasión se han pintado murales en su memoria y
honor.
Writer pintando en memoria de Muelle, durante el pintado de un mural en su honor.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[30]
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[31]
5.- EL GRAFFITI EN EL MERCADO
Durante los inicios del graffiti, muchas eran las marcas diferentes de espráis que se
utilizaban. La pintura en espray que se vendía no estaba pensada para pintar muros,
sino para pintar metales, plásticos e otros materiales
utilizados en la industria.
Cada escritor utilizaba una marca diferente de espray, y lo
que se buscaba en éstos era pintura de alta cubrición, alta
presión para poder cubrir más superficie, y que el espray
contuviera una cantidad generosa de pintura.
Antes de que salieran al mercado las empresas
especializadas en el graffiti, en España, una de las marcas
favoritas de los escritores era la marca Felton.
Dicha marca fabricaba (y lo sigue haciendo) productos en aerosol, especialmente
pinturas, dedicadas a la industria, a la decoración, y a la automoción. Sin embargo, los
escritores utilizaban esa pintura para pintar graffiti, ya que la marca Felton les
proporcionaba pintura que, en esos momentos, era de la mejor calidad.
En 1993, Jordi Rubio, director comercial de la empresa de pintura Felton, descubre que
en una tienda de productos de jardinería de Barcelona a la que Felton distribuye sus
productos, hay un muy elevado nombre de compradores de pintura en espray. Decide
hacer una visita a este negocio y descubre que el dueño del comercio es Moockie, un
conocido writer de la zona. Los clientes que compraban espráis a Moockie, por
supuesto, eran escritores de graffiti que compartían con él su pasión por ese arte,
como por ejemplo el conocido writer barcelonés Kapi.
Jordi, fascinado por la gran devoción que sentían los escritores como Moockie y Kapi,
se interesa en el desarrollo de productos de pinturas especiales para graffiti, nunca
antes elaborados. Propone su idea a la empresa donde trabajaba, Felton, pero es
rotundamente rechazada, pues en esa época el graffiti era considerado únicamente
vandalismo y fabricar productos para éste daría una mala imagen de la empresa.
Espráis de la marca Felton
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[32]
Jordi, convencido de que el graffiti no era vandalismo y que el
negocio podría salir rentable, decide en 1994, junto a su
compañero de trabajo Miquel Galea, fundar una empresa dedicada
al graffiti, la mundialmente conocida Montana. Su objetivo al
fundar esta empresa era el de fabricar pintura pensada únicamente
para los escritores de graffiti: alta cubrición en, alta presión, amplia
gama de colores, cualquier característica que buscase un escritor
de graffiti a la hora de pintar. Gracias a la ayuda de Moockie y Kapi,
diseñan el primer producto de Montana, el más tarde conocido
como Montana Classic, un bote de espray de 200 ml con una gama
de 60 colores. El espray presentaba las características que todo
escritor buscaba a la hora de comprar pintura: alta presión, alta
cubrición, y un precio asequible.
Para hacer promoción de la marca de pintura antes del lanzamiento de los Montana
Classic, Moockie y Kapi organizan en Barcelona un evento de graffiti llamado “Aerosol
Art”. Después distribuyen su producto a la tienda Game Over (posteriormente Bunker),
que sería la primera tienda de Barcelona especializada en graffiti de la historia.
Se corrió la voz de que los productos Montana eran de muy buena calidad, y
comenzaron a llegar a Barcelona writers desde todas partes de Europa (Francia,
Alemania, Suiza e Italia en especial) para comprar productos Montana en grandes
cantidades y llevarlos a su país.
Tal fue la demanda que la pequeña empresa Montana, que sólo distribuía a unas pocas
tiendas de Barcelona, tuvo que expandirse y organizarse en gran medida para poder
hacer frente a la demanda europea de espráis. En 1995 los Montana Classic pasaron de
200 ml a 400 ml, y se distribuyeron mejor por toda Europa.
Montana Classic
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[33]
La empresa gozaba de éxito y seguía creciendo, pero las ganas de
mejorar los productos también estaban en aumento. Este afán de
mejorar lleva a Jordi, en 1996, a diseñar un nuevo espray, también
de 400 ml, con una válvula muy rápida y potente. La impresión de
Kapi al probarlo en su tienda, Game Over, la resumió con unas
palabras: -“¡Qué hardcore!”. La naturalidad con la que dijo estas
palabras, llevaron a Jordi a ponerle ese nombre al nuevo bote de
espray. Surge así el Montana Hardcore.
Actualmente, este producto sigue siendo incomparable con los
demás en cuanto a rapidez y cubrición. Así, el Montana Hardcore
marcó un antes y un después en el mundo del graffiti.
La idea más copiada por la competencia de Montana surge en
1997, el añadir un “donut” o anilla en la parte superior del
espray que identifique el color del mismo, en vez de
identificarse por el clásico tapón de espray.
Tres años más tarde, en el año 2000, la empresa alemana
Multi-Color se especializa también en el fabricado de espráis
para graffiti e intenta comprar Montana. Como es de esperar,
éstos rechazan la oferta, y a la empresa alemana no le hace
ninguna gracia. De hecho, crean una campaña publicitaria en
contra de Montana, asegurando que sus espráis contenían plomo y otros venenos y
materiales nocivos, además de copiar el nombre de la empresa española.
El año 2001 lanzan al mercado la gama de espráis Montana Alien, de
menor presión y tamaño, con 250 ml de pintura satinada en su
interior, que ofrecen al writer un manejo y precisión mucho mayor
que el que ofrecen los Montana Hardcore.
Montana Hardcore
''Donuts'' de Montana Colors
Montana Alien
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[34]
Durante el conflicto con la empresa alemana, en el 2002, a causa de un fallo en el
sistema eléctrico, la fábrica de Montana de Vacarisses se incendia y queda
completamente destruida. A pesar del incendio, Montana vuelve a comenzar des del
principio, reconstruyen la empresa y continúan siendo líderes mundiales en cuanto a la
venta de espráis.
Finalmente, el año 2003, después de haber ido a juicio en varias ocasiones por la
campaña directa en contra de la empresa española y el hecho de que la empresa
alemana les hubiera copiado el nombre, consiguen tener una distinción: Montana
alemana pasa a ser Montana Cans, y Montana española pasa a ser Montana Colors.
Durante los siguientes años, muchos productos son fabricados por Montana Colors:
camisetas, rotuladores, tintas, válvulas y espráis, siempre haciendo sombra a Montana
Cans.
El último lanzamiento al mercado de la empresa ha sido una nueva gama de espráis:
los Montana 94. Con un nivel de presión muy bajo, alta cubrición, secado ultrarrápido,
más de 100 colores nuevos, 400 ml en cada bote, e incluso con un olor muy agradable,
ésta nueva gama ha sido un éxito para la empresa. Sin embargo, Montana Cans
también ha lanzado al mercado una nueva gama de espráis que no tienen nada que
envidiar a los Montana 94: los Montana Black, que gracias a su bajo precio respecto a
los españoles, están teniendo también mucho éxito entre los writers.
Actualmente, el conflicto sigue entre las dos empresas, pero el monopolio mundial
pertenece a Montana Colors, que exporta sus productos por todo el mundo.
También existen otras marcas de pintura importantes, como la marca alemana
Molotow, que presenta productos muy parecidos a los de Montana Cans, o la marca
Australiana Ironlak, que gracias a su bajo precio está haciéndose un lugar entre las
demás marcas.
Logo de Montana Colors (izquierda) y logo de Montana Cans (derecha)
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[35]
6.- EL IMPACTO MEDIOAMBIENTAL DEL GRAFFITI
Dados los tiempos en los que nos encontramos, en los cuales se habla mucho del
medioambiente, no podía faltar en el trabajo un apartado en el que se nombrara este
aspecto.
Antiguamente, todos los aerosoles contenían un compuesto de flúor llamado CFC,
causante (entre otros) del actual agujero de la capa de ozono.
El CFC (clorofluorocarburo) es un gas utilizado como líquido refrigerante, agente
extintor, y sobre todo como propulsor de los aerosoles.
Fue comercializado en 1932 por ingenieros de la empresa automovilística General
Motors, para substituir materiales peligrosos por otro material fisicoquímicamente
estable y careciente de toxicidad. No es hasta 1973 cuando se dan cuenta del efecto
negativo de los CFCs: la degradación que causan éstos sobre la capa de ozono.
Esta degradación es debida a la alta capacidad de supervivencia del gas en la
atmósfera, de 50 a 100 años. Al pasar el tiempo, el gas alcanza la altura a la cual se
encuentra la capa de ozono, recibe directamente los rayos solares, y en ese momento
liberan cloro de su composición, y así comienza un proceso de destrucción del ozono.
A partir del descubrimiento de este efecto, los productos contenedores de CFC se han
ido retirando del mercado, hasta el punto de que, actualmente, en algunos países
están prohibidos o en fase de retirada del mercado.
Dada la utilización del CFC en los aerosoles hasta que se descubre el impacto de éstos
sobre la capa de ozono, se puede decir que el graffiti ha sido, en parte, causante del
agujero de la capa de ozono. Sin embargo, los espráis utilizados para el graffiti
actualmente, son totalmente libres de CFCs. Usan en su lugar propulsores alternativos
a éste, no contaminantes.
Lo único que contamina de los aerosoles, es su envase. El bote de espray no puede
rellenarse, por lo tanto, después de su uso, el espray se desecha. Si no se lleva a un
punto de reciclaje, el espray puede tardar miles de años en degradarse en la
naturaleza. Si además de no ser reciclado, después de ser desechado entra en contacto
con el flujo de un río, el bote de espray puede ser mucho más nocivo para la
naturaleza. La pintura sobrante es altamente contaminante y puede tener
consecuencias nocivas sobre la biodiversidad cercana al río.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[36]
Para evitar el impacto medioambiental, la empresa Montana Colors, por ejemplo,
tiene a su disposición en sus tiendas un contenedor para tirar los espráis ya utilizados,
y no acabar en ríos o en contenedores, sin ser reciclados.
Respecto a la salud de las personas, los aerosoles utilizados para pintar graffiti pueden
tener varios efectos si se utilizan de manera prolongada y sin ningún tipo de
protección:
-Sobre la piel: eliminación de la grasa de la piel, enrojecimiento, ampollas, reacciones
alérgicas o dermatitis.
-Respecto a la respiración: irritación de la mucosa y del sistema respiratorio.
También puede causar síntomas como dolores de cabeza, vértigos, fatiga, debilidad
muscular, somnolencia, y en casos extremos pérdida de la consciencia.
Para evitar éstos síntomas, se deben utilizar guantes como protectores de la piel, y
mascarillas para la protección de las vías respiratorias. Las marcas de pintura más
conocidas suelen contar en su catálogo con productos para la protección de la salud.
Sin embargo, son muchos los writers que no toman medidas de protección al pintar
graffiti. Sobre todo no se usan mascarillas protectoras de la respiración. Si se pinta al
aire libre o en algún lugar bien ventilado sin mascarilla, el efecto del gas del espray no
se hace notar demasiado. Pero si se pinta en un lugar cerrado o poco ventilado, el
impacto sobre el organismo es muy fuerte, causando dolores de cabeza e irritación de
la mucosa y el sistema respiratorio.
Típica mascarilla utilizada como protección de las vías respiratorias
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[37]
7.- ENTREVISTA WERENS
Ramon Puig, más conocido como Werens, es el dueño del único establecimiento
dedicado exclusivamente al graffiti de Sabadell. Dada su larga experiencia en el ámbito
del graffiti, decidimos entrevistarle, preguntándole sobre algunos de los temas que se
trata en el trabajo. La entrevista es la siguente:
-¿Desde cuándo pintas?
Bueno, pues pinto desde los 15 años o así, desde los años ochenta, ochenta y algo.
Hace unos 25 años que pinto, bueno que empecé. Y bueno, empezamos no porque…
aquí era cuando comenzaba todo el rollo del hip hop y tal, pero yo no estaba metido
en ese tema, estaba más con el rollo punki y tal, y empezamos a pintar porque
Sabadell era súper gris. No por ningún rollo de modas ni ningún rollo de estilos que nos
vinieran de fuera sino que a nosotros ni nos interesaba demasiado todo lo que
estuviera pasando fuera porque estábamos pensando en otras cosas de fuera que era
el graffiti en sí, pero sí que enseguida vimos que había toda una corriente que no era la
que venía de América. Era una corriente que se estaba creando en Europa, y vimos que
nosotros encajábamos más en este tema porque nosotros no estábamos haciendo
letras, ni nada que viniera de allí, a nosotros lo que nos gustaba era dar color a la
ciudad y hacer dibujos y claro, cuando empezamos, ya te digo: no había graffiti aquí en
Sabadell. Supongo que había mucha gente que empezaba en el mismo momento que
nosotros, pero no había nada en que basarse. Y empezamos a hacer dibujos. Eso nos
hizo conseguir un estilo propio que no se parecía en nada a ningún otro de la zona lo
cual, quisieras o no, resaltaba y empezamos a tener trabajos rápidamente, y gracias a
eso, empezamos a pintar bastante.
-¿Cuándo nace el graffiti en Sabadell?
Bueno, nace por diferentes canales. Nosotros cuando empezamos no había nada de
graffiti en Sabadell. Supongo que habrían firmas, pero en muy poca cantidad. No te
puedo decir que yo fuera el primero, pero entre los primeros seguro que estuve.
Éramos los que empezábamos y no seguíamos ningún tipo de moda. Eso es lo que
marcó que fuéramos diferentes de todos los demás.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[38]
-¿Qué materiales utilizabais al principio?
Pues pintábamos con espráis, de los que habían unos 8 colores, y con una calidad
increíble, ¿no? Que con la toxicidad que tenían, con dos espráis te quedabas hecho
polvo. Nada que ver con lo que hay ahora. Eso también te tiraba un poco para atrás, te
hacía buscar otras soluciones. Porque claro, te tenías que inventar mil historias para
poder hacer un graffiti guapo. Porque realmente con esos espráis costaba mucho
hacer algo importante. Además eran carísimos. Por eso enseguida empezamos a
intentar encontrar trabajos para conseguir los espráis, porque un espray valía mil
pesetas.
-¿Cómo ves Sabadell a nivel de graffiti?
A ver… nunca ha destacado como ciudad. No porque no hubiera gente buena o que no
lo hiciera bien, sino que la gente que había pues, había quien tiraba y quien no… Es
decir, no es que haya poca gente que pinte bien, sino que hay gente que pinta muy
bien pero no pinta frecuentemente. De todas maneras, el problema que tiene
Sabadell es que el ayuntamiento “tapa” mucho. Siempre se han negado a ayudar. Cada
vez que hemos intentado hacer algo, el ayuntamiento se ha metido por medio, y se ha
‘’ido a la mierda’’ la cosa. Eso ayuda a que la gente se desespere y deje de pintar
también.
Flores de Werens
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[39]
–Ahora en Tarrasa, han hecho un plan, en el que dejan muros para pintar, a cambio
de que todos los ‘’grafiteros’’ se pongan de acuerdo, que den el nombre en el
ayuntamiento, y les van facilitando muros. ¿Qué opinas de eso?
Bueno, yo creo que está muy bien, porque quieras que no, eso hace que la gente
pueda practicar mucho más tranquila, y puede subir mucho más el nivel. Yo no digo
que tengamos que pintar en paredes legales o no, sino que defiendo que si hubiese
paredes legales, los chavales que no tienen dónde pintar, aprenderían mucho más
rápido. Sí que hay una minoría que se dedica a hacer vandalismo porque realmente les
gusta el vandalismo, y esos no van a cambiar. La mayoría de los que no avanzan en el
graffiti es porque no encuentran el momento. Pero si les dan paredes, verán que
pueden avanzar, o lo dejarán porque no es lo suyo. Por lo menos, lo habrán probado, y
no seguirán haciendo vandalismo.
-¿Sobre la tienda, qué te llevó a abrir una tienda de graffiti, eso mismo que decías
antes de…?
Bueno no, la tienda la abrimos hace cuatro años y era un poco para crear un centro de
graffiti en Sabadell, ya que aquí en Sabadell la gente está muy desvinculada unos de
otros, y realmente este sería un sitio donde la gente pudiera venir aquí y encontrar
material, para que no tuvieran necesidad de ir a Barcelona. En esos momentos, no
había ninguna tienda en Tarrasa, ninguna en Cerdañola… no había ninguna tienda en
ningún lado. Era en Barcelona y punto. Por lo tanto, quise abrir una tienda en el Vallés,
un sitio donde encontrar el material, y ya que había un material tan bueno aquí
mismo, pues se tenía que aprovechar, ¿no? Igualmente, yo ya tenía la tienda, antes era
una galería de arte, o sea que yo ya tenía mi espacio. De alguna manera, era como
decir: pues bueno, ya que tengo el espacio, vamos a aprovecharlo.
-¿Por qué decidiste vender Montana Colors y no Montana Cans?11
Por lógica. Si hay dos marcas, y una se ha copiado de la otra, y quieren destruirla para
poder subir los precios, pues prefiero unirme a los buenos. A parte de que
lógicamente, si unos fabrican en Manresa, y otros en Alemania, pues tendré mejor
servicio en Manresa.
11
Véase el apartado del trabajo El graffiti en el mercado, página XXXX
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[40]
–Bueno, ahora es un poco al revés según tengo entendido: Montana Cans se está
poniendo bastante al nivel de Montana Colors, y está bajando mucho los precios.
¿No?
Esto lo está haciendo Montana Cans para reventar precios, no para ayudar al graffiti.
La diferencia entre las dos es que una es una multinacional, y otra es una empresa que
le gusta el graffiti, y que lo que quiere es promocionar el graffiti. La multinacional lo
que hace es bajar los precios para destruir a la otra marca, y una vez lo haya hecho,
tendremos los espráis a 5€, que es el precio al que están en Europa. ¿Por qué Montana
Cans vende los espráis a 3,80€ y 4,50€ en Europa y aquí los vende a 3,20€? Es lógico:
porque aquí está la Montana Colors, que le hace competencia, pero bueno, es cuestión
de cada uno decir: apoyo a uno o apoyo al otro. Yo apoyo a aquellos en los que creo. Si
tuviera que vender los otros, pues preferiría vender otra marca, alguna marca italiana,
griega o inglesa, pero nunca apoyaría a una empresa tan cutre como ésta, que van a
machacar.
-¿Qué es para ti el graffiti?
Para mí el graffiti es regalar arte a la ciudad, es mi caso. Yo lo hago más desde un
punto de vista artístico y a lo mejor un escritor de bombing no lo valoraría.
-¿Graffiti legal o ilegal?
Yo creo que el graffiti no tiene por qué ser legal. Creo que no hay que pedir permiso
alguno para poder pintar un muro. A ver, si ves un edificio del siglo XIV, pues no es
plan de pintarlo, pero tener que pedir permiso al ayuntamiento para poder pintar el
muro de algún particular, me parece ridículo. El ayuntamiento no pinta nada en este
tema.
Tienda de espráis de Werens “impaktesvisuals”
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[41]
-¿Qué opinas del bombing?
Bueno, eso va a gustos. Mientras se pinten muros o persianas sin hacer daño a nadie,
no hay ningún problema, pero por ejemplo los que pintan escaparates con ácido, me
parece una cabronada. Si lo hacen en una parada de bus por ejemplo, que pertenece al
ayuntamiento, pues ‘’que se jodan, ¿no?’’ pero lo mismo pasa con los camiones. Pintar
el camión de algún particular y que tenga que pagar la limpieza es muy bestia, pero si
pintan el camión, no sé, del Mercadona por ejemplo, pues bien hecho.
-Para acabar, ¿cuál es la situación actual del graffiti en Europa?
Creo que el graffiti cada vez está peor. No por los escritores, sino por la sociedad. Cada
vez están prohibiendo más el graffiti en toda Europa cuando cada vez son más las
personas que pintan. En Alemania por ejemplo, muchísima gente pinta, y sólo es legal
en dos o tres puntos del país, y meten unas multas increíbles, y está muy perseguido el
graffiti. Sin embargo, estuve una vez en Portugal, concretamente en Lisboa, y allí el
ayuntamiento es mucho más flexible en el tema del graffiti, facilitando muros donde
pintar, organizando eventos, y todo eso. Pero bueno, lo que intentan en toda Europa
es acabar con el graffiti, y lo único que consiguen es que haya más graffiti ilegal.
Flor de Werens
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[42]
8.- EL GRAFFITI EN LA SOCIEDAD ACTUAL
Como ya se decía en la introducción de este trabajo, el graffiti suele estar relacionado
por la sociedad con el vandalismo. En la mayor parte de los casos, esto no es así. Sí
existen personas que utilizan el graffiti de forma digamos maligna, que serían las
personas anteriormente nombradas que se dedican al bombing.
Entonces el graffiti quedaría dividido en dos partes: los que se dedican al bombing y los
que no. Los primeros no luchan por un graffiti mejor visto y más valorado por las
personas como arte, si no simplemente pintan graffiti como método antisistema o por
causar destrozos.
No obstante, los que pintan graffiti “legal” son igual o peor vistos los que se dedican al
bombing. Normalmente, lo que busca la mayoría de escritores es un lugar donde
pintar tranquilo y sin problema alguno. Esto cada vez es más difícil dado que las
ciudades cada vez están más en contra del graffiti, lo que provoca que los muros
disponibles para pintar disminuyan y aumente así el número de escritores de graffiti
que lo hagan ilegalmente.
Tal y como nos lo dice Werens en la entrevista que se le realizó12, en Alemania
muchísima gente pinta graffiti, y sólo está permitido pintar en unos pocos puntos del
país, además de perseguir y multar gravemente al autor de los graffiti en caso de que
sea detenido. Alemania es solo un ejemplo de la dura represión que están utilizando
para parar el graffiti en toda Europa, ya que países como Francia, Italia, Holanda y
Suiza siguen los mismos métodos represivos.
En España, hasta hace unos años, el graffiti no estaba tan penado legalmente como
ahora, con multas de hasta 6.000€. Durante los últimos años, ha habido fuertes
medidas en diferentes lugares del país para acabar con el graffiti. Una de éstas
medidas más famosas fue la que tomó la ciudad de Alcorcón (Madrid), que fue la
pionera en considerar el pintado de graffiti sobre la vía pública como una falta grave,
por la cual las multas ascendían de entre 600 y 900 euros a entre 1.500 y 3.000 euros,
llegando incluso a los 6.000 en caso de reincidencia. Además, dedicaron una patrulla
policial específicamente para atrapar a todos los writers, y borraron todas las
“pintadas” que había en la ciudad.
12
La encontramos en la página XX
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
[43]
Los escritores reaccionaron multiplicando el número de graffiti, que causaron también
mucha polémica y aparecieron en los medios de comunicación. Por ejemplo, un grupo
de unos quince escritores a pleno día y con el convoy en funcionamiento con pasajeros
en su interior, pararon el metro de Madrid en una estación, y en unos 5 minutos
pintaron tres vagones enteros con las palabras: “Puto Gay-Ardon”, haciendo referencia
al alcalde de Madrid que había aprobado la ley anti-graffiti.
También, los artistas Asier y Murphy pintaron un mural de más de 25 metros
parodiando al mismo personaje, que al día siguiente éste derrumbó y enterró.
Graffiti en contra de Gallardón, por Asier y Murphy
Otra conocida represión contra el mundo del graffiti en España fue la que tomó en 2006 la ciudad de Granada, la cual prohibía por completo el pintar graffiti en cualquier lugar. Lo hizo imponiendo la necesidad de tener un permiso especial para pintar, sin vía administrativa para poder conseguirlo, además de aumentar las multas por pintar de 900 a 1.500 euros. Por lo tanto, ni siquiera un particular propietario de un muro determinado en el cual quisiera pintar graffiti, puede ceder permiso a alguien para que pinte en su propia casa o terreno. Esta nueva ley ha afectado al famoso escritor El niño de las pinturas, al cual han denunciado por pintar en un muro del cual posee el permiso tanto del propietario como del ayuntamiento, y se le pide pagar una multa de 1.200 €.
En Barcelona, la situación es parecida a la de Granada. Multas de hasta 3.000€ por pintar en cualquier sitio hacen que la ciudad condal esté repleta de graffiti de menos calidad, y pocos son los murales que encontramos.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
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En Sabadell, el graffiti también es tomado como un crimen. Ha llegado a tomarse como
tal hasta el punto de contratar a un grafólogo especializado en graffiti para, en caso de
detener a un escritor, que éste no pague solo por lo que ha sido visto pintando, sino
que pague también por todos los tags que el perito caligráfico determine que ha
pintado. La operación policial ha sido llamada ‘’Operació Taca”, y entró en vigor en
Marzo de 2009. Jesús Delgado, el grafólogo contratado, dice poder reconocer
mediante el análisis de la forma, el trazo, el color, etcétera, la personalidad del autor
del tag y saber si otra firma ha sido realizada por el mismo.
Sabadell ha sido pionera en utilizar éste método de reconocimiento de los escritores,
método que han tomado también en Alicante y se está planteando en otras ciudades
del país.
Jesús Delgado, grafólogo contra el graffiti de Sabadell
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
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9.- CONCLUSIÓN
Dado que el autor del trabajo ya contaba con la experiencia de cuatro años en el
graffiti, este trabajo no ha supuesto una adquisición de conocimientos nuevos, sino
una extensa ampliación de los mismos. Además, el hecho de haber tenido que
sistematizar y organizar estos conocimientos, han servido para, además de llevar a
cabo un estudio riguroso sobre el hecho del graffiti, poder tener una visión sobre el
tema mucho más ámplia, clara y precisa.
Una de las dificultades añadidas al trabajo durante su escritura, ha sido la de encontrar
un material fotográfico que se adecuara con precisión a las explicaciones dadas.
También ha sido complicado a la hora de llevar a cabo el apartado “Graffiti paso a
paso”, el hecho de tener que depender del clima, pues hemos de tener en cuenta que
mientras llueve es imposible realizar el pintado de un graffiti.
Otro aspecto interesante a comentar sería el hecho de tener que intentar entrar en un
mundo tan cerrado como es el del graffiti, donde cada artista o escritor representa su
propio mundo, con ideas e intenciones propias y distintas de los demás, no siempre
fáciles de comprender o interpretar. Por lo tanto este estudio, no intenta explicar el
significado de las obras, sino resaltar el fenómeno en sí mismo, sin entrar en aspectos
personales.
El autor ha intentado acotar la visión del graffiti más puro, ceñido al graffiti originario y
su evolución, dejando de lado otras manifestaciones aproximadas, pero que se alejan
de su esencia originaria, como lo es por ejemplo el graffiti en las galerías de arte.
El objetivo del trabajo, conseguir que el lector después de leerlo entendiera realmente
qué es el graffiti huyendo del típico estereotipo de “mancha en la pared”, creo que ha
quedado bien definido dentro del cuerpo del trabajo y que se ha conseguido
fácilmente.
El autor ha intentado no dejar huecos sustanciales por explicar sobre el mundo del
graffiti a la hora de hacer este trabajo, y espero que al lector le haya sido fácil su
comprensión e interesante su contenido.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
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Por último, el autor quiere hacer mención de todos los que han hecho que este trabajo
sea posible, y está muy agradecido por su ayuda. Se agradece la colaboración de Mari
Carmen Pascual por toda la ayuda que ha aportado al trabajo, Werens por haber
accedido tan amablemente a entrevistarse, Ryaw por facilitar parte del material
fotográfico, y todas las personas que han participado de alguna manera, ya sea directa
o indirecta en la realización o en el apoyo del trabajo.
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
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10.- ANEXOS
MADRID.- La vertiente creativa del 'graffiti', un lenguaje urbano plasmado casi siempre
en paredes ajenas y espacios públicos, aún choca con su lado vandálico, que hace que
ciudades como Madrid gasten casi seis millones de euros al año en la defensa de los
muros sin mácula.
Estas manifestaciones salen caras tanto a los 'grafiteros' -que prefieren llamarse
'escritores' y que pagan unos tres euros por cada bote de 'spray'-, como a los
contribuyentes: el Ayuntamiento de Madrid gastó cerca de seis millones de euros en
2005 en la limpieza de 1.245.000 metros cuadrados de pintadas y pegatinas,
una superficie equivalente a 125 campos de fútbol.
Más de 100 trabajadores se suben cada día a los 50 vehículos del servicio especial de
limpieza que el consistorio madrileño ha puesto en marcha para acabar con lo que
denomina 'suciedad urbana'.
Pero no todo tiene por qué ser suciedad. Según el historiador del Arte Fernando
Figueroa, autor de 'Graphitfragen' y coautor de 'Historia del Graffiti madrileño: 1982-
1995', los 'graffitis' pueden habitar las ciudades 'con coherencia' e incluso 'servir para
embellecerlas'.
Para Figueroa, "este es un problema social y por eso los políticos deberían ser más
sociales que represivos", ya que la convivencia entre los autores y su improvisado
público pasa, en su opinión, por dejar pintar a la gente "más o menos libremente, con
control, habilitando zonas para los 'graffitis'".
"El problema es que mientras que para algunos una ciudad con 'graffitis' puede ser
estéticamente progresista, para otros es sinónimo de caos e inseguridad", señala este
doctor en Historia del Arte por la Universidad Complutense, uno de los estudiosos
españoles más importantes de este fenómeno.
Extraído del diario El Mundo, 27/08/2006
Graffiti: Arte o Vandalismo
Jordi Sández Martínez
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El artista que creó el icónico retrato del presidente estadounidense, Barack Obama, en rojo, blanco y azul que durante la campaña apareció en miles de carteles y camisetas ha sido arrestado en Boston acusado de hacer grafitis, según ha anunciado la policía este sábado.
Shepard Fairey, un artista de Los Angeles, ya tiene su imagen 'Hope' (esperanza) colgando en la National Portrait Gallery de Washington.
La suerte parecía seguir sonriendo a este artista, que este viernes por la noche se dirigía al Institute of Contemporary Art para inaugurar su primera exposición en solitario. Camino del centro de arte, Fairey fue arrestado.
La policía le acusa de dañar la propiedad con grafitis en varios lugares y emitió la orden de arresto el pasado 24 de enero, según explicó el protavoz de la policía de Boston, James Kenneally.
Según un comunicado emitido por el museo, durante las dos últimas semanas, el artista había estado en Boston organizando la exposición, dando conferencias y creando arte al aire libre, incluida una pancarta junto al ayuntamiento.
Según el centro artístico, Faire ha sido arrestado "en relación con sus esfuerzos por colgar su arte en varias zonas de la ciudad". "Creemos que Shepard Fairey ha hecho una importante contribución a la historia del arte y al pensamiento popular sobre el arte y su papel en la sociedad".
El lunes comparecerá ante el juez. Si es condenado por estos cargos, se enfrenta hasta a tres años de cárcel, según el portavoz policial. El trabajo de Fairey tuvo tanto éxito en todo el país que los miembros de la campaña de Obama se pusieron en contacto con el artista para hacer nuevas versiones del cartel con los mensajes 'Change' (Cambio) y 'Vote' (Voto).
La revista 'Time' también echó mano del retrato para su portada cuando eligió a Obama hombre del año.
El propio Obama le envió una carta de agradecimiento por haber utilizado su talento para apoyarle y "haber alentado a los estadounidenses a creer que pueden cambiar su status quo", decía la carta.
Extraído del diario El Mundo, 9/2/2009
Retrato de Barack Obama, por Shepard Fairey
Graffiti: Arte o Vandalismo
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El graffiti, arte de la calle, tiene desde hoy un hueco en la Tate Modern de Londres,
cuya emblemática fachada que mira al Támesis muestra los trabajos de seis artistas
"callejeros" internacionalmente reconocidos. En un momento dorado para el arte
urbano, con prestigio cultural y que ha entrado en las más cotizadas galerías y casas de
subastas, este museo contemporáneo ha puesto sus muros a disposición de los artistas
del aerosol.
Hasta el próximo 25 de agosto, quienes acudan a ese centro, uno de los museos
contemporáneos más visitados del mundo, o aquellos que den un paseo por el río
Támesis, no se quedarán indiferentes al ver las seis pinturas de 50 metros de altura
cada una que prácticamente cubren la fachada de la Tate Modern.
La iniciativa es Street Art at Tate Modern, una nueva apuesta del museo londinense
por nuevas técnicas artísticas urbanas, la mayor de las veces contestatarias y más
libres porque las calles no imponen los límites de un lienzo. Entre los seis artistas que
participan en la muestra se encuentra el barcelonés Sixeart y los brasileños Os Gêmeos
y Nunca.
El comisario de la iniciativa, Cedar Lewisohn, ha explicado que Londres es un lugar
idóneo para mostrar el "interesante" arte desarrollado en los ambientes urbanos, pues
por toda la ciudad pueden verse trabajos de graffiteros anónimos, entre ellos los del
famoso Banksy. Se ha elegido a seis artistas no británicos para tomarle el pulso a las
diferentes tendencias de este arte en el mundo.
Lewisohn ha asegurado que los autores españoles de este tipo de arte están entre los
mejores del mundo, por lo que decidió que un grupo de artistas asentados en Madrid
crearan una serie de trabajos en los alrededores del museo, lo que se ha
llamado Walking Tour. Se trata de Spok, El Tono and Nuria, Nano 4814 y 3TTMan,
quienes llevan años llenando de arte las calles madrileñas.
El comisario de esta iniciativa sostuvo que artistas como Pablo Picasso o Jean-Michel
Basquiat ya utilizaron recursos del arte callejero y que influyeron en su desarrollo, que
fue rápido desde los años 70 del siglo pasado. Cuando termine Street Art, la fachada de
la Tate Modern volverá a mostrar su aspecto habitual, conocido por sus característicos
ladrillos industriales de color marrón.
Extraído del diario El Periódico, 23/5/2008
Graffiti: Arte o Vandalismo
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Pieza de Kapi13
Mural compuesto por una pieza de Sotik, y un keko de Haku
El artista Vicio pintando una pieza
13
Dueño de la antigua tienda Game Over de Barcelona (consultar apartado “El graffiti en el mercado” para más detalles)
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Plata y keko de Cliff159
Pompa de Amigo
Wildstyle de Kies
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11.- DOCUMENTACIÓN
11.1.- Bibliografía
De Diego, J. Graffiti. La palabra y la imagen. Los Libros De La Frontera. Barcelona. 2000
Stahl, J. Street Art. H.F.Hullmann.
11.2.- Páginas Web
11.3.- Documentales y material fotográfico
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