Nació en Oviedo en 1963. Tras licenciarse en Bellas Artes inició su carrera como ilustradora. Viajó a Nueva
York donde colaboró con la O.N.U. en la ilustración de varios proyectos y con empresas de diseño de ta-
rots. Junto a su trabajo como ilustradora y autora de relatos, compagina la labor de conferenciante como
especialista en dibujo infantil, así como la coordinación de talleres prácticos y teóricos de fomento de la
creatividad del profesorado y alumnos en toda España.
Su estilo y técnica, especialmente los collages, son fácilmente reconocibles y dotan a su trabajo de una
genuina personalidad.
Violeta tiene manos de hada y corazón de niña. Por eso no es de extrañar la mágica empatía que logra
tener con los chavales, quienes la escuchan hechizados por su singular mundo de fantasía. Duendes, bru-
jas y dragones salen de su maleta y de sus manos en un increíble despliegue de imaginación y destreza.
Cuando estoy en el estudio, casi siempre estoy
con la cabeza en otro sitio, un bosque otoñado,
un desierto dorado o un misterioso castillo… A
eso lo llaman “estar en la nubes” aunque, en rea-
lidad, estoy trabajando y mucho. Situarme en
aquello en lo que quiero trabajar y crear una his-
toria requiere un gran esfuerzo, pero gracias a
ese esfuerzo, cuando tengo que atravesar un
bosque, cruzar un desierto o abrir un castillo mis-
terioso, ya sé lo que me voy a encontrar porque
lo he visto en mi cabeza, y me apetece dibujarlo.
El esfuerzo en el trabajo se convirtió en el
centro de mi discurso. El trabajo haría que se
consiguieran las metas que nos marcásemos,
Ya fuera dibujadas, escritas o vividas.
—Un poco más de trabajo —decía yo en to-
dos mis encuentros con niños— y conseguirás
siempre que las cosas salgan mejor.
Yo insisto en que “siempre” que se trabaja
un poco más se consigue algo mejor.
Los libros deben ser ligeros, es decir, breves, para que la perspectiva de leerlos
no agobie. Debe disociarse la literatura de la enseñanza de la lengua como disci-
plina académica. Debe estar absolutamente permitido abandonar un libro si éste
no nos parece interesante.
Siempre invito a las familias a
que incluyamos la lectura en la
rutina diaria: sería bonito re-
unirse en la misma estancia con
unos cafés, unas chuches, unos
libros para leer y comentar lo
que se lee. ¿Alguien acepta
esta invitación?
Pamela Panamá y el hechizo final Refranes de nuestra tierra
Los guardianes del secreto
Las espadas del Cid La escalera torcida
El huevo de Colón
Los duendes y la manzana ¡Mío! ¡Mío! El huevo es mío
Susto en la playa
¿Qué animal es?
S.O.S. Se necesita sonrisa
No quiero un dragón en mi clase
Días de gatos Días de perros
El pastor mentiroso
¿De qué tienes miedo?
¿Por qué estás triste?
SABER MÁS 16 pintores muy, muy importantes
16 músicos muy, muy importantes
NO SÓLO FÚTBOL Blanca, la nueva del equipo
Daniel, el del banquillo
ÑAM Fruta para la bruja
Chorizo contra salchichón
La invasión de las lentejas El rey sin sal
¿QUÉ SIENTES?
A de antipatía B de bochorno
C de celos
F de felicidad Ñ de ñoñería
PAPELES ROTOS
El fantasma blanco El gusano naranja
Aprende a dibujar con papeles rotos
ORO PARECE Plata no es
Blanca por dentro
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