La Fonética y Sus Elementos

La Fonética y sus Elementos.

Es el estudio de los sonidos físicos del discurso humano. Es la rama de la lingüística que estudia la producción y percepción de los sonidos de una lengua con respecto a sus manifestaciones físicas. Sus principales ramas son: fonética experimental, fonética articulatoria, fonemática, fonética acústica y fonética auditiva.

1. Ejercicios de respiración.

Siendo la respiración un proceso automático propio del ser humano, coger aire al inspirar por la nariz y expulsándolo en la espiración, normalmente por la boca, lleva el oxígeno a las células eliminando el dióxido de carbono producido por el cuerpo.

La respiración es necesaria para vivir y para mantener limpia la sangre. Una incorrecta respiración produce problemas de irritabilidad, fatiga, falta de atención, y problemas o perturbaciones en el lenguaje hablado, que es el punto que nos interesa.

Los ejercicios ayudan a controlar la respiración y para ser conscientes del acto de respirar. El habla se produce en la fase de espiración, al sacar el aire, si no existen problemas respiramos y hablamos con normalidad, pero si existe alguna dificultad para respirar o bien dificultades o situaciones que alteran la respiración aparecen dificultades en el lenguaje hablado: voz temblorosa, omisión de fonemas, sustitución de fonemas, perturbaciones gramaticales de orden o de construcción, tartamudeces esporádicas, etc.

En los niños pequeños o menores de ocho años los ejercicios además de ayudar a controlar la respiración, ayuda a entrenar los músculos que participan en el habla, especialmente los músculos bucinadores que son los que están en la mejilla y son los que se utilizan para soplar y silbar.

Los ejercicios de logopedia basados en el soplado, el soplo, tienen como finalidad general, las siguientes, que también pueden aplicarse a la oratoria:

- Aprender o mejorar la respiración para el habla.

- Aprender a manejar y controlar el aire al hablar.

- Mejorar y controlar la voz.

- Mejorar o entrenar el sistema muscular que participa en el acto de hablar.

- Mejorar las articulaciones y la pronunciación.

- Afianzar fonemas o reeducarlos.

Algunos ejercicios a efectuar son:

Ejercicio Nº. 1:

- Inspira por la nariz, lenta u silenciosamente.

- Retén y bloquea el aire.

- Expira por la boca, lentamente, diciendo shhh.

- Controla la salida del aire y toma el tiempo con un reloj.

- Repite el ejercicio varias veces de espacio.

Ejercicio Nº. 2:

- Inspira por la nariz lenta y silenciosamente.


- Expira por la boca, lentamente, como si inflaras una bomba.

- Controla la salida del aire.

- Repite el ejercicio varias veces, despacio.

Ejercicio Nº. 3:

- Inspira.


- Expira diciendo “uno…”.

- Controla el tiempo y la salida del aire.

- Repite varias veces el ejercicio sin cansarte y lentamente.

Una vez familiarizados con el proceso de respiración sintiendo tu diafragma, liberando tensión en el vientre, procurando respirar por la nariz, y sintiendo cómo tus pulmones aprovechan toda su capacidad con la respiración completa, puedes comenzar a intervenir en los ritmos de tu respiración para optimizarla y aumentar sus beneficios, además de ser plenamente consciente del acto de respirar.

Para éstos ejercicios nos serviremos de la respiración completa, procurando hacerla de manera fluida, sin tensión. No se trata de llenar los pulmones como un globo sino de procurar que el aire llegue a todos los rincones. Mientras más practiques más capacidad pulmonar tendrás y disfrutarás más. Realiza el primero, y cuando sientas que lo haces con facilidad, con naturalidad, pasa al siguiente. No intentes empezar por el último, vamos a subir las escaleras peldaño a peldaño con buen pie.

Todos estos ejercicios constan de 3 fases: inspiración, retención del aire y exhalación. Cada fase es diferente pero va hilada con la siguiente, de manera que con las tres hagas un todo. En cada fase vas a ir contando mentalmente los tiempos (1, 2, 3, 4…), y lo que vamos a intentar es ir alargando la expulsión de aire cada vez más. Una buena expulsión limpia bien tus pulmones de aire residual y toxinas, y con ella el diafragma actúa sobre el corazón acompasándolo y ralentizando su ritmo. Todo esto dará como resultado una profunda sensación de relajación y de seguridad en uno mismo.

Ejercicio 1.

• Inspira contando 8 tiempos

• Retén el aire 4 tiempos (sin tensarte, relajadamente)

• Exhala contando 8 tiempos (la expulsión y la inspiración duran lo mismo)

Cuando éste ejercicio te resulte cómodo y fácil, puedes pasar al siguiente.

Ejercicio 2


• Retén el aire 4 tiempos

• Exhala contando 8 tiempos (la expulsión dura el doble que la inspiración)

Ejercicio 3



• Exhala contando 16 tiempos

Ejercicio 4



• Exhala contando 16 tiempos (la expulsión dura el doble que la inspiración)

2. Ejercicios resonadores.

Para poder identificar nuestros resonadores, voy a pasar algunos simples ejercicios:

• Inspirar profundamente, llevando el aire a la zona baja de los pulmones, expandiendo abdomen, pelvis y costillas mientras inspiro. Preparo una “M” con boca cerrada (como si fuera a decir Mamá) y la hago resonar en mi boca mientras voy exhalando el aire.

• La sensación de la “M” vibrando adentro de mi boca puede generar cosquillas en los labios, en la nariz o en los dientes superiores, mostrándome la zona de resonancia.

• Una vez que logré encontrar la vibración en esas zonas, pruebo hacer el mismo ejercicio, esta vez diciendo sostenidamente “MI” ó “MU”.

• Al principio puede que no sea fácil encontrar esa sensación de cosquilleo, pero para lograrlo debo evitar hacer fuerza con los músculos de la garganta. El aire que exhalo tiene que ir acompañando el sonido que emito, no empujarlo con fuerza.

• Repetir el ejercicio, esta vez con la consonante “L”. Mantengo la punta de la lengua hacia arriba y adelante apoyada en los dientes superiores y relajo el resto de la lengua.

• Puedo intentarlo con “N” también.

Proceso De Fonación:

Al chocar el aire con las cuerdas vocales, éstas vibran con la ayuda de la lengua, los dientes, el paladar y los labios producen la voz.

La respiración realizada en forma correcta, es muy importante para que nuestro aparate vocal este siempre en óptimas condiciones.

La laringe es una cavidad que está en la parte superior del conducto respiratorio. La laringe constituye el órgano de la voz porque contiene las cuerdas vocales, por lo tanto debemos cuidar con especial atención.

Ejercicio Nº. 1:

- De pie, con tu cuerpo relajado, coloca suavemente una de tus manos sobre la garganta.

- Aspira el aire por la nariz (silenciosa y lentamente).

- Coloca la boca en posición de “o” y al expirar pronuncia un sonido al de la letra “o” y largamente hasta que agote el aire.

- Siente la vibración que produce el aire al chocar con las cuerdas vocales.

- Realiza este ejercicio varias veces todos los días utilizando todas las vocales.

Es muy importante recordar que no se debe esforzar ni realizar los ejercicios hasta el cansancio, por el contrario de debe ir poco a poco, hasta lograr aumentar su capacidad de controlar la salida del aire.

Aparato Resonador:

Mediante el aparato resonador, el sonido producido por las cuerdas vocales se amplía. El aparato resonador es la caja de resonancia de la voz.

Algunos de los resonadores son:

- La Laringe.

- El Maxilar Superior.

- Los Huesos de las Fosas nasales:

- La Bóveda Palatina.

- Los Dientes.

- El Velo del Paladar.

- La Lengua.

- Las Mejillas.

- Los Labios.

Ejercicio Nº 1:

- De pie, siente tu cuerpo relajado, realiza el proceso de respiración:

1. Aspira aire por la nariz, lenta y silenciosamente.

2. Retén y bloquea el aire.

- Coloca la boca en forma de O.

- Expira el aire lentamente, diciendo: o o o o o o o o o…

- Toca con suavidad tu laringe, tu garganta, tus mejillas, tus labios, tus fosas nasales y siente como vibran tus resonadores.

- Cuenta mentalmente hasta 5 sin respirar (repite este ejercicio varias veces todos los días.

Para la correcta emisión vocal, es decir, para producir correctamente algún sonido tenemos que poner en práctica lo aprendido al realizar los ejercicios de respiración, fonación y resonancia.

Ejercicio Nº 2 con la l.

En este caso la vibración la sentirás casi exclusivamente en las mejillas.

Las vocales son todas sonoras, por lo tanto al colocar los dedos de tu mano a la altura de la nuez de Adán o laringe, sentirás la vibración de las cuerdas vocales.

Si bien cada vocal tiene diferentes zonas de predominio resonancial, ahora nos interesa notar su vibración a ese nivel.

Para mejorar la participación de las diferentes estructuras del sistema resonancial, te puedes valer de pequeños golpeteos de puño, y palpaciones manuales sobre: cabeza, nariz, mejillas y tórax.

Ahora vamos a combinar los ejercicios anteriormente aprendidos.

Por ejemplo produce una emisión prolongada de m. Luego intenta lo mismo pero subiendo un tono. Es decir que imaginarás el comienzo de una escalera, y cada escalón representa un tono que subes. Con Tres Escalones Es Suficiente. Puedes subir y bajar la escalera. Puedes hacer lo mismo con l.

Luego cada uno de estos fonemas con las diferentes vocales.

RECUERDA: Realiza todos los ejercicios palpando las distintas zonas del sistema resonancial.

3. Ejercicio de entonación.

Son aquellos ejercicios que permiten la correcta pronunciación de una oración, dándole además el tono adecuado para que el oyente sepa distinguir si se trata de una exclamación o una pregunta, dándole al discurso una nueva forma de interpretación.

Por ejemplo:

Al hablar, el tono de voz no es constante, no es lo mismo un enunciado:

- Hoy está lloviendo.

A una pregunta:

- ¿Hoy está lloviendo?,

O una exclamación

- ¡Hoy está lloviendo!

Existe una diferencia en los enunciados ya descritos, todo depende como lo pronuncie el orador y la entonación que se le dé a la frase. A esto se le llama tonema.

El tonema:

Cada subida, bajada o mantenimiento del tono es un tonema, se reconocen tres:

- Ascendente. - Horizontal. - Descendente.

El tonema es la unidad de medida de la entonación.

Puede mencionarse el Grupo Fónico, ya que siempre que producimos un enunciado, hacemos dos tipos de pausas, unas largas y otras breves.

Las pausas breves sirven para separar cláusulas o sintagmas del resto de un enunciado y no se usan para respirar. Las pausas largas sí se usan para respirar y separan oraciones. Cada una de esas pausas, sea breve o larga, separan grupos fónicos.

- Enunciado declarativo.

Es aquel cuyo tonema se mantiene, es decir, es plano y solo sirve para exponer un hecho, no hace una pregunta ni mucho menos una exclamación que demuestre algún estado de ánimo o sensación, por su parte, el enunciado declarativo nos permite conocer una afirmación sencilla, una oración básica sin alzas o bajas, el grupo fónico es igual de principio a fin.

Por ejemplo podemos mencionar algunos enunciados declarativos.

- El cielo es azul.

- La calle está sucia.

- El perro es bonito.

- El polvo me molesta.

- Enunciado interrogativo.

Son los enunciados cuyos tonemas presentan un alza al principio y acaban descendiendo, expresa un cuestionamiento, una pregunta, el orador lo utilizara para dar énfasis a alguna cuestión que interesa a su oratoria y que debe resolver el público.

Los enunciados interrogativos pueden ser con:

Pronombre Interrogativo: Tienen un tonema ascendente muy elevado al principio y acaban ascendiendo descendiendo.

Sin Pronombre Interrogativo: Cuando no se encuentra el pronombre en cuestión, la entonación es ascendente al final.

Interrogativas Disyuntivas: En este caso, la primera es ascendente y la segunda descendente.

Algunos ejemplos son:

- ¿Hay algo de comer?

- ¿Puedo salir?

- ¿Qué debo hacer?

- ¿Alguna reflexión que nos deje la lectura?

- Enunciado admirativo.

Los fonemas de los enunciados admirativos o también conocidos como exclamativos ascienden hasta bajar, hay una fuerte subida al principio y desde ahí todo es descenso. El orador se sirve de estos enunciados para demostrar al público un estado de ánimo o un sentir sobre el tema que comparte, permite demostrar sus sentimientos.

Existen oraciones exhortativas, bastante semejantes a las exclamativas, es frecuente que la exhortación sea suavizada con una pregunta, usualmente para que el público sea cautivado y sientan afinidad por la situación que el orador expone. Ya sea por la sensación de lastima, aceptación o repudio.

Algunos ejemplos:

- ¡No dejemos que nuestros bosques sufran!

- ¡El mundo no es un mal lugar! ¿O sí?

- ¡La maldad humana! ¡Debemos huir de ella!

- ¡El corazón de la tierra late de pena por sus hijos contaminados!

4. Ejercicios del control de la respiración.

Sirven para aprender a dosificar el aire al momento de hablar o cantar. Igualmente estos ejercicios se realizan con el propósito de llevar las cuerdas vocales a su correcta posición, para evitar una voz ventosa al momento de hablar y cantar. Se debe repetir estos ejercicios de control respiratorio con una frecuencia de 2 veces por día durante un mes o más.

A. Conteo:

Este ejercicio de control respiratorio serealiza acostado, sentado y parado, siguiendo el procedimiento a continuación. A medida que se vaya dominando el ejercicio, se debe ir aumentando la cantidad de números a decir en cada serie. Durante la ejecución de este ejercicio se debe tratar de dosificar el aire que se emplea para decir los números.

Primeros Tres Días de haber empezado a realizar el ejercicio cuenta de 5 en 5:

Inspira, diciendo los números del 1 al 20 en serie de 5 en 5, inspirando en cada serie.

Siguientes Tres Días:

Inspira, se dicen los números del 1 al 30 en serie de 6 en 6, inspirando en cada serie.









Y así sucesivamente se va aumentando la cantidad de números a decir en cada serie, esto progresivamente a medida que se vaya teniendo mayor control y dominio en la dosificación de aire empleado para decir los números.

B. Acostado:

Este ejercicio de control respiratorio se realiza como si se estuviese haciendo pequeños abdominales, por lo tanto se debe contraer los músculos del abdomen para realizar la serie de ejercicios que se explican a continuación. Se repite 3 veces cada uno, dos veces al día.

Inspira, se levanta medio cuerpo diciendo: eeeee…. Cuando se esté acabando el aire se va bajando.

Inspira, se levanta medio cuerpo diciendo: iiiiii... Cuando se esté acabando el aire se va bajando.

Inspira, se levanta medio cuerpo diciendo: eieieieieiei… Cuando se acabe el aire se va bajando.

C. Vuela:

Este ejercicio de control respiratorio consiste en mover ambos brazos de forma como si se quisiera volar, pero con el siguiente procedimiento:

Ponte de pie, separa las piernas y lleva la cara hacia atrás.

Inspira mientras vas subiendo los brazos.

Baja los brazos mientras vas diciendo: gep, gep, gep…



Baja los brazos mientras vas diciendo: gip, gip, gip…



Baja los brazos mientras vas diciendo: gep, gip, gep, gip…

D. Empuja:

Este ejercicio de control respiratorio lo realizas imaginándote que se está haciendo flexiones pero en vez de realizarlas en el suelo, se realizan de pie empujando una pared.

Ponte de pie frente a una pared,

Deja caer el cuerpo sobre la pared, empujándola con tus manos,

Inspira y mientras empujas ve diciendo: eeeeeee… hasta que se te vaya a agotar el aire. Repite esto unas tres veces.

Inspira nuevamente, y empuja la pared diciendo: iiiiiii… hasta que se te vaya a agotar el aire. Repite esto unas tres veces.

Inspira de nuevo, y empuja la pared diciendo: eieieieie… hasta que se te vaya a agotar el aire.

5. Ejercicios para relajar los músculos de la garganta.

Principalmente para realizar los ejercicios para relajar la garganta, la postura debe ser la correcta, los hombros no deben ir levantados, ni se debe dejar caer o levantar la barbilla, mucho menos apretar la mandíbula, es recomendable revisar ante un espejo la postura, la cual debe ser recta y con los hombros relajados, las manos deben ir sueltas a los lados del cuerpo, la vista al frente, la barbilla en un ángulo normal, o la pose usual.

Algunos oradores suelen cometer el error de ser llamativos en sus expresiones faciales, un buen orador no necesitara hacer muecas, en su lugar debe verse y escucharse natural.

Las cuerdas vocales están alineadas horizontalmente en un espacio pequeño – no se necesita más que una buena respiración bien apoyada y formas normales de la cara para producir un buen sonido vocal, de hecho, al hablar, simplemente, el tracto vocal (resonador) no debe hacer ningún trabajo adicional del que se necesitaría para hablar.

Aprender a hablar de forma correcta es importante, no desarrollar malos hábitos que obstaculicen el progreso o dañen las cuerdas vocales. Una vez dominada la respiración y la voz, se debe practicar para encontrar el estilo personal, utilizando un espejo, grabadora o video cuando se ensaye, deberán analizarse los movimientos efectuados y como lo verá la audiencia.

Algunos ejercicios para relajar los músculos de la garganta:

Lleva tu barbilla al pecho y llévala luego lentamente hacia el hombro izquierdo, vuelve al centro mirando hacia el frente, a continuación, mueve la cabeza hacia el hombro derecho, dejar caer la barbilla lentamente hacia el hombro y regresa lentamente de a la posición de inicio – repetir a la inversa (Gira a la derecha, luego a la izquierda, deja caer lentamente al centro).

Inclina tu cabeza hacia atrás suavemente y mirar hacia arriba, mueve lentamente la cabeza hacia atrás a su posición normal y luego lleva la cabeza lentamente hacia el pecho – Deja caer los hombros y relájate con un conteo de 3 y luego levanta la cabeza lentamente a su posición normal.

Practica tararear con la boca abierta y cerrada. Practica los movimientos de masticación de manera exagerada y luego poco a poco, con el tiempo, añade sonidos al azar, palabras, frases, oraciones y conversaciones mientras se reduce poco a poco el grado de exageración de los movimientos de la boca.

Este ejercicio ayuda a liberar el exceso de tensión en el tracto vocal y el área de la laringe y si se hace correctamente colabora con la apertura de la boca y la reducción de las tensiones en la mandíbula.

6. Ejercicios para mejorar la calidad del tono.

Dado que la oratoria se centra en hablar en público, es común que se tenga miedo a hacerlo, mucha gente intenta mejorar su lenguaje tanto verbal como corporal, su apariencia o incluso su apoyo visual, sin recordar que lo más importante está en el tono de voz.

Para ponerle fin a este miedo lo recomendable es concentrarse en la voz, dándole un tono y seguridad que nos permitirán expresarnos sin miedo a fallar, lo que a su vez nos ayudara a relajarnos, facilitando la experiencia frente al público.

Ya se han establecido algunos ejercicios resonadores y de respiración, sin embargo algo que ayudara mucho es la dicción. Los ejercicios para fortalecer este punto son sencillos y rápidos, además pueden ser realizados en cualquier momento y forman parte de una rutina para mejorar la voz. Al ponerlos en práctica, rápidamente notaremos una mejoría sustancial en nuestro tono de voz y en nuestras habilidades de oratoria.

Ejercicios:

1.- El primer paso es leer. Se Debe leer en voz alta cualquier texto, de la manera como se haría comúnmente, sin modificar el tono de voz o esforzarse de más.

2.- En segundo lugar, se repite dicha lectura, esta vez se hará con la boca cerrada con los dientes unidos. Enfócate en el sonido de tu voz y trata de darle tono al texto mientras lo lees de esta manera.

3.- Después de hacer lo anterior, se debe leer por tercera vez el texto, se va a articular las palabras de una forma muy exagerada, intenta abrir lo más posible la boca, pronunciar de una manera lenta y realizar las pausas necesarias.

4.- Incorpórate y de pie se coloca la barbilla unida al tórax, se lee el texto por cuarta ocasión. Al leerlo, debería notarse cómo el tono de voz suena más profundo, con mayor presencia.

5.- Para terminar, permanecer en la posición del paso número 4, relajando el cuerpo se lee de nuevo el texto de la misma forma natural con que se hizo al inicio. Observa cómo tu voz es diferente, tiene un mejor tono y es más profunda y grave.

Se recomienda grabar la voz antes de comenzar a practicar los ejercicios y luego comparar las grabaciones para comprobar el avance.

7. Ejercicios para lograr la flexibilidad en el manejo de la voz.

Es el entrenamiento que prepara la disposición física general para organizar los elementos necesarios para la función del desarrollo de las habilidades vocales teniendo en cuenta que la voz es una de las principales herramientas para un orador. Para lograr una buena voz y un manejo adecuado de la misma existen una serie de ejercicios de tipo físico que aportan al cuerpo resistencia, fuerza y flexibilidad de modo que influya positivamente en el manejo de la voz, los más importantes son:

1. Parados y con los pies paralelos un poco más del ancho de las caderas, bajar hasta la posición de cuclillas sin levantar los talones del piso y con la espalda derecha. Repetir el ejercicio 4 o 5 veces.

2. Acostados boca arriba, levantar las piernas lentamente contando hasta diez sostener en cinco tiempos y seguidamente bajar en 10 tiempos. Repetir el ejercicio 4 o 5 veces.

3. En la misma posición, ahora con las plantas de los pies apoyadas en el piso, subir el tórax y sostenerlo 5 segundos, bajar y repetir; un compañero ayudará para no levantar los pies del piso. Repetir el ejercicio 4 o 5 veces.

4. En posición de pie, poner las manos a los costados a la altura del estómago e inspirar tratando de expandir el estómago de modo que las manos se muevan. Repetir el ejercicio 4 o 5 veces.

Este ejercicio se realiza para aumentar la capacidad de la columna de aire y poder emitir frases largas sin agotarse.

Es importante tener en cuenta que las piernas sostienen el cuerpo y por lo tanto deben estar fortalecidas y como consecuencia de ello las tensiones de los hombros irán cediendo poco a poco, de esta manera se logra una relajación de la zona del cuello para que la voz tenga una mejor resonancia y proyección. Esta parte con relación a la estructura física.

Los ejercicios relacionados a la voz son los siguientes:

Para estos ejercicios es necesario contar con un espacio lo suficientemente aireado, igual que el anterior con ropa cómoda que no apriete en ninguna parte del cuerpo.

1. Inhalar lentamente contando mentalmente hasta 4, sostener 8 segundos y exhalar en 4 segundos, a medida que se avanza la cantidad de tiempo aumenta así: de 8 segundos para

sostener el aire se pasa a 16 y de 4 segundos para exhalar se pasa a 8, los 4 segundos para inhalar no varían.

2. Después de repetir el ejercicio anterior por lo menos 4 o 5 veces pasamos a contar en voz alta de 1 a 5 haciendo una vocalización correcta y una dicción limpia. A medida que vamos avanzando aumentamos de 5 a 10 tiempos, después de 10 a 15 y por último hasta llegar a 20 sin tener que tomar aire en cada conteo. Este ejercicio ayuda a tener resistencia y flexibilidad a la hora de narrar textos largos. Terminada esta seria de ejercicios se toma un descanso de 10 minutos para continuar con el siguiente ejercicio.

3. Después de contar hasta 20 y de haber descansado se continúa con el ejercicio, ahora pronunciando palabras, versos u otros textos que sean definidos por los estudiantes junto con el profesor, si se hace de modo individual es necesario tener consciencia de cuánto tiempo se está empleando para los ejercicios.

Para finalizar el profesor pasa una lista de textos sin puntuación, que los estudiantes leerán antes del siguiente ejercicio, con el fin de lograr una mejor pronunciación.

El ejercicio consiste en lo siguiente:

Cada estudiante leerá su texto sin parar, teniendo en cuenta que el aire debe alcanzar hasta finalizar la lectura teniendo en cuenta las pausas que sea necesario hacer si el aire se agota.

Después cada estudiante propondrá una puntuación tentativa y jugará con el texto, pronunciándolo de varias maneras.

8. Pronunciación correcta.

Una de las habilidades base para ser un buen orador es el de pronunciar correctamente las palabras, cuando se habla en público es muy importante que al hacerlo las palabras sean entendibles y sea posible para el escucha distinguir fonemas que puedan parecerse a otros. Esto resulta complicado si la pronunciación de cierta vocal simula ser otra, por lo que existen ejercicios para evitar lo anterior.

- Correcta articulación.

Los ejercicios de articulación deben realizarse al menos unas 5 veces cada uno tres veces al día durante una semana o un mes en adelante dependiendo del grado de malas posturas y administración del aire cuando se habla. La idea de estos ejercicios es que a medida que se tenga dominio de los labios, mejillas y lengua, hechos cada vez más rápido. Igualmente se recomienda que una vez realizados estos ejercicios se realicen los ejercicios para relajar los músculos del cuello.

a) Ejercicios Para Los Labios:

1. Con la boca abierta, llevar los labios atrás y adelante como si dijeras las letras “a” – “o” pero sin emitir sonido.

2. Con labios separados, llevarlos atrás y adelante como si estuvieras diciendo las vocales “e” – “u” pero sin emitir sonido.

3. Sonrisa – Beso: Con labios juntos, llevarlo atrás y adelante como si se estuviera sonriendo y besando.

4. Con los labios juntos, llevarlos de un lado al otro lado de la cara.

5. Vibrar los labios: Inspirar, luego con los labios cerrados y ligeramente apretados, expulsar el aire por la boca sin abrir los labios, a modo que nuestros labios vibren.

La idea con este ejercicio 5, es que logres vibrar los labios el mayor tiempo posible, aumentando con la práctica y dominio de este ejercicio el tiempo en el que duras vibrando los labios.

6. Morder alternadamente los labios: Este ejercicio consiste en morder los labios de arriba con los dientes de abajo, y luego, morder los labios de abajo con los dientes de arriba.

7. Masajes de labios: Este ejercicio consiste en darle masajes al labio de arriba presionando hacia abajo con el labio de abajo, y viceversa. Realizar unas 50 veces estos masajes tres veces al día por una semana. El propósito de este ejercicio es para ayudar a bajar el labio superior y subir el labio inferior.

b) Ejercicios Para Las Mejillas:

Durante la ejecución de estos ejercicios para las mejillas, solo se debe mover las mejillas, evitando mover los labios y la mandíbula.

1) Inflar ambas mejillas, sostener el aire luego sacarlo.

2) Alternar el aire de las mejillas de un lado a otro.

c) Ejercicios Para La Lengua:

Parte I: Todos estos ejercicios de articulación realizados con la lengua se ejecutan con la boca abierta como si estuviese diciendo la letra “a”, una “a” grande, con la boca bien abierta, sin mover las mandíbulas ni los labios durante los ejercicios. Durante estos nueve ejercicios de articulación solo se debe mover la lengua. Esto con el propósito de evitar tener la lengua pesada al momento de hablar, cantar o pronunciar palabras. A medida que se practiquen estos ejercicios de articulación y adquieras práctica, debes hacer las repeticiones de cada uno de ellos más rápido cada vez.

1. Con boca abierta, sacar la lengua y llevarla arriba-abajo por fuera de nuestra boca.

2. Saca la lengua y llévala a cada lado por fuera de la boca.

3. Pasa la lengua recorriendo los labios.

Realizar este ejercicio con la lengua, recorriendo los labios en ambos sentidos, primero hacia un lado y luego hacia el otro.

4. Con los labios cerrados pasar la lengua por los dientes de adelante, moviéndola como si estuvieses dibujando una gran circunferencia.

Realizar este ejercicio con la lengua, recorriendo los dientes en ambos sentidos, primero hacia un lado y luego hacia el otro.

5. Con la punta de la lengua empujar cada mejilla.

6. Dobla punta de la lengua arriba-abajo, presionándola con los dientes.

7. Ancha-Fina: Tócate la parte superior del labio con la punta de la lengua, y ahora pon la lengua ancha y fina.

8. Pasa la lengua por el paladar, moviéndola hacia adelante y hacia atrás.

9. Chasquido de la lengua.

Parte II: Los ejercicios de articulación a continuación consisten en decir repetidamente ciertas letras, frases o palabras con el propósito de destrabar la lengua.. Igualmente es necesario haber realizado al menos los ejercicios de control respiratorio a modo de dominar la técnica de respiración y pronunciar las letras o palabras empleando la cantidad de aire necesaria para evitar maltratar tus cuerdas vocales. La manera correcta para pronunciar la “s” es sin mover la lengua durante su pronunciación se queda abajo recogida hacia atrás. Es conveniente grabar el movimiento recitando o leyendo algún texto antes de empezar a realizar estos ejercicios de articulación, y mensualmente se debe recitar o leer el mismo texto para que darse cuentas de las mejorías obtenidas. Es recomendable grabar la pronunciación. Realiza repetidamente los ejercicios a continuación en cantidad y frecuencia como cada uno de ellos los indica, practicando uno de los ejercicios por tres días y al dominarlo pasar al siguiente ejercicio, y así sucesivamente hasta realizarlos todos.

1. Con la boca debe estar abierta como si dijéramos una “a”, sin mover mandíbula, solo mover la lengua; dí varias veces:

La la la la

Tele tele tele

Tol tol tol tol

Tra tra tra tra

p-p-p-p-k-k-k-piriet piriet

2. Decir en voz alta las siguientes letras, silabas, frases y palabras. Repetir este ejercicio 5 veces, tres veces al día.

S s s

Sa se si so su

Saco casado pasa

Seco cacería pase

Silla casino casi

Solo mazorca lazo

Suma casual

As es is os us

Hasta canasta paz

Espina celeste pez

Isla arisco luz

Ostra Orozco tos

Uslar molusco pus

3. Decir en voz alta los siguientes textos para destrabar la lengua, diciéndolas cada vez más rápido a medida que vayas dominando el ejercicio:

• Ruso reza Rosa Rigo, reza ruso Rosa Rizo.

• Rosario Rosales, cortó una rosa de su rosaleda; rosácea era la rosa, que Rosario Rosales cercenó.

• Salas sola en su sala sale sola con la sal salobre. Si la salmuera sale con Salas, salada la sala de sales queda.

• Si cíen sierras sierran cíen cipreses, seiscientas sierras sierran seiscientos cipreses.

• Si el ciervo que te serviste, no te sirve ya servido, ¿de que sirve que te sirvas un ciervo que ya no te sirve?

4. Repetir 10 veces con una frecuencia de una vez por día, la lista de palabras dadas a continuación con el propósito de destrabar la lengua:

Te Lino Nené Tela Tete

Luna Nilo Tilo Luto Loro

Nulo Tuna Lula Nata Nola

Nada Tu Dani Nudo Daniel

5. Leer la lista de palabras 10 veces una vez por día:

Chicha Yoyo Chinchilla

Chicho Yiya Chanchullo

Chucho Chayoto Chancho

Chuchu Yuyu Georgina

6. Decir en voz alta los siguientes textos con el propósito de destrabar la lengua. A medida que se domina el ejercicio, decir los textos cada vez más rápido:

Sede ata la lata alta

la lata alta alda la ata

como ata alda la lata alta

la lata alta está atada.

Habla de las balas alba.

de las balas Alba habló.

Si de balas no habla Alba

de balas y Alba hablo yo.

Chalinas y Chinelas, chilenas son?.

Las chilenas son chilenas

Las chalinas no lo son.

Ocho chicos chilenitos

chocan coches chiquititos

ocho chinos chiquititos

chocan coches chilenitos

chinitos y chilenitos

chocando sus cochecitos.

Nadie silba como Silvia Silba

porque el que silba como

Silvia silba, fué porque

Silvia silba le enseño a silbar.

7. Repetir 10 veces las siguientes palabras una vez por día. Este ejercicio tiene como propósito trabajar la parte de atrás de la lengua:

Coco Kiosco Gago Conga

Coca Cuqui Gaga Ganga

Kike Cucu Gogó Gas

8. Decir los siguientes textos para destrabar la lengua y a su vez trabajar la zona media de la lengua:

• Cocococo cocococo, el gallo grande soy yo. Cocococo cocococo a las gallinas voy a buscar, cocococo cocococo de los pollitos soy el papá.

• Quique come, 1 rico coco y a Kelita le dá 1 poco. Kelita le da más pero Quique mo le dá.

• Cuánto canta Catalina?. Canta mucho y desafina, qué poco canta Curiel. Canta poco y canta bien.

Una vez realizados estos ejercicios de articulación es recomendable realizar ejercicios para relajar los músculos del cuello.

- Expedita articulación.

Se trata de la simple y llana adecuada pronunciación o articulación, como ya se estableció anteriormente la mejor manera de conseguir esto es por medio de trabalenguas.

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