El título establece, para expresarlo comouna "definición" en términos aristotélicos, elgénero próximo en el cual arraiga la presentecomunicación.

La diferencia específica radica en la preci-sión acerca de la obra particular de Maupassantde la que nuestra reflexión ex-trae la temática deuna filosofía radical.

Nos centramos en los Contes du jour et dela nuit, los Cuentos del día y de la noche, cuyatrama envuelve una viviente filosofía latente,"puesta en obra" (parafraseo a Heidegger) encada Cuento?

Los Cuentos abren un escenario, pues seinician con una puesta en escena.

Se corren las cortinas, aparece el escenario.Maupassant describe el lugar de la esce-

na, bosqueja una pintura, lugar donde ocurrela acción. Cada Cuento se inicia trazando sucontexto, un suelo preciso, en el que la luz y elcolor, dan una atmósfera a la escena. La plumade Maupassant lleva al lector a imaginar el lugarcomo un cuadro impresionista.

La literatura se convierte en pintura en laimaginación del lector.

En ese escenario se desarrolla la acción.El desenvolvimiento de la acción transcurre

en el tiempo.El tiempo imaginario del cuento recoge en su

particularidad, la universalidad del tiempo "real", cós-mico. En ese mismo acto el tiempo del cuento encar-na, en el sentido fuerte del término, "dota de carne", elesqueleto conceptual abstracto de la filosofía.

En otras palabras convierte la "radiografía"conceptual filosófica, en los personajes real-ima-ginarios de "carne y hueso".

El tiempo en nuestro autor se manifiesta entodo su esplendor.

María Noel Lapoujade

La seducción de una filosofía radical en Guyde Maupassant

Abstract. The purpose of the article is toshowthat in Guy de Maupassant in Contes dujouretde la nuit, the philosophy and the literaturearenotclosedand separated areas, but that bet-weenthem there are deep relations. The methodofthiscommunication is to diiscover and to showthisphilosophical ideas in Cuy de Maupassant.Wefind somesphilosophical subjects such as thetime,the rhythm, the passions, the reason, thesuspensee,the paideia and the black humour. Allthatpoint to one ethic reflexion on the socraticimperative:"know your self",

Key words: time, passions, reason, blackIwmour,ethic.

Resumen. El propósito del artículo es elde poner de manifiesto en un caso concreto:/UJ autor,Guy de Maupassant y una obra, Loscuentosdel día y de la noche, que la filosofíay la literaturalejos están de ser áreas cerradasy separadas, sino que por el contrario entreellas existen unos invisibles "vasos comuni-CflIItes"por los que circulan sus discursos. Deestamanera,el método de la presenta reflexiónconisteen detectar y sacar a luz esas vetasfilosóficas radicales en esta obra literaria deMaupassant.En tal sentido, el artículo recorreenlaobrade Maupassant, temas filosóficos tanfundamentalescomo el tiempo y el ritmo, laspasionesy la razón, el suspenso, la paideia y elhomornegro, todo ello apuntando a la necesi-dadética de un cuestionamiento radical de laWdaquevuelvea conducir en la actualidad a lanecesidaddel socrático "conócete a tí mismo".

Palabras clave: tiempo, pasiones, razón,Iuunornegro,ética.

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Si nos detenemos en el título de la obraen su sentido literal, un ritmo cósmico surgeante la mirada? Con él se alude de manera casiinmediata al ritmo de vida y muerte y, de maneramediata, ascendiendo un nivel en la espiral de lareflexión, el título induce a pensar en el tema deeras y thánatos en general y, en particular, en losaportes de Sigmund Freud.

Si ascendemos otro nivel, para incursionaren el universo metafórico, el título sugiere lametáfora arquetípica de claridad y oscuridad,luz y tinieblas, con el rico espectro de susimplicaciones ontológicas, teológicas, estéti-cas, éticas y epistémicas; más aún, exotéricasy esotéricas.

Es un título que en su vértigo envuelve todala historia del pensamiento humano, en las másdiversas culturas, etnias, sociedades y tiempos.

Si es posible argumentar un pesimismocomo perspectiva dominante en Maupassant, locual es preciso previamente poder demostrar,entonces es adecuado concluir que la muertedevora todo lo que existe.

Pero cuidado con las reducciones unila-terales, porque debemos enfatizar que no haypesimismo sin optimismo. En este caso, ese ciclorítmico reinicia su tejido con la vida que vuelve abrotar de la muerte.

La vida, como señala la alquimia, nace de lamuerte.

De la descomposición de los cuerpos; de lavida que en su muerte se pudre, se engendran losgusanos de una nueva vida. Regeneración de lavida que señala el rítmico devenir de pesimismo-optimismo con que el espíritu humano acompañael movimiento de los ciclos.

En la aparente inocencia filosófica de estosCuentos se despliega el que llamaremos un pan-temporalismo radical.

Aquí se integran todos los tiempos, entreellos el tiempo cósmico y el tiempo biológicoante cuya inexorable irreversibilidad se agita elespíritu rebelde de Maupassant:

Un dolor violento me oprimía el corazón, ytambién una rebelióncontra la naturaleza misma, una indignaciónno razonada contra estaobra brutal, infame de destrucción. 3

La crueldad del tiempo biológico transcu-rriendo bajo la medida cronológica del reloj llegaimperceptiblemente:

¡Doce años son tan poca cosa en la existen-cia de un hombre! ¡Uno no los siente pasar!¡Van uno tras otro, los años, suavemente yrápido, lentos y a prisa, cada uno es largo ytan pronto terminado! Y ellos se suman tanrápidamente, dejan tan poca huella tras desí, se disipan tan completamente que regre-sando para ver el tiempo recorrido uno nopercibe más nada, y uno no comprende cómoes que uno sea viejo.oo. Ahora, yo era viejo. 4

Su estilo despliega todos los tiempos.Domina la lógica de la continuidad temporal,

es decir, la duración, en la narración.Frecuentemente recurre a la superposición

de tiempos diversos, para lograr otra forma desimultaneidad, a través de la narración en lanarración, que traduce en palabras la figura pic-tórica del "cuadro en el cuadro".

Maupassant logra a nivel de la lengua hacercoexistir tiempos diversos en algún tiempo, enuna trama de tiempos verbales y adverbios, comoese magistral: "ahora, yo era viejo".

En aquel momento presente del pasado, en quese dio cuenta, su vejez era un hecho consumado.

El adverbio que indica el momento presentese une por el intervalo de una coma, con el tiem-po del verbo, cuyo imperfecto denota un pasadoterminado.

El presente del pasado terminado radicalizael carácter irrevocablemente acabado, porqueenfatiza más, si cabe, la constatación de que se havuelto irremediable, inalterable.

Maupassant también sabe de tiempos salpi-cados de instantes irreverentes interrumpiendo lacontinuidad, de los cuales Gaston Bachelard esel esteta. 5

Ciertos instantes producen un giro radical enuna vida, rompiendo la inercia de la continuidad.

En un instante puede cambiar la vida: esposible morir a una vida anterior e iniciarse unavida nueva.

Así, en un comentario encierra una concep-ción del tiempo cuando reflexiona:

¡Cómo la vida es singular y cambiante!¡Cómo es preciso poca cosa para perderseo salvarse! 6

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LA SEDUCCIÓN DE UNA FILOSOFÍA RADICAL EN GUY DE MAUPASSANT 35

Entre todos los instantes, en cada Cuento seimpone el instante supremo, la última interrup-ción fugaz, inesperada, la que marca el final.

El estilo de Maupassant estableceel desenlace en el tiempo de un golpe

de martillo

Un golpe de martillo: así cae el final paraun lector inevitablemente desprevenido ante lalógica de la sorpresa con la que se desarma laperspicacia de la mirada más atenta.

Su estilo maneja a la perfección la lógica dela continuidad en la narración, y la disconti-nuidad de los instantes que la interrumpen en subrusca aparición, la necesidad previsible de lostiempos cíclicos y la contingencia imprevisiblede momentos fugaces.

Cuandosu criado corrió, atraído por la deto-nación,lo encontró muerto, de espaldas. Unchorro de sangre había salpicado el papelblanco sobre la mesa y formaba una granmancharoja debajo de estas cuatro palabras:'Estees mi testamento' 7

Maupassant nos recuerda que la serenidad dealgunasnoches se ve sorprendida por el rayo queirrumpecon su luz sonora rasgando la calma.

Noches sonoras de violenta luz desgarranotrociclo, otro ritmo, el de la alternancia monó-tona de sueño y vigilia, con los que el hombreacompaña los ciclos del cosmos.

De éstos también sabe Maupassant, y enellos, trabaja esos "rayos" que son las pasionesen la vida humana. Con la fuerza avasallan te delrayo irrumpen las pasiones en la serenidad desueñoy vigilia.

En los Cuentos del día y de la noche, laspasionesextremas son dínamos de la acción.

La acción despliega el tejido de laspasiones

Los cuentos recorren el crimen, el alcoho-lismo, el parricidio, el suicidio, la violación, lavendetta, extremos a los que empujan pasionesdesenfrenadas, la ambición desmedida, el apa-rentarvano, los celos, la "mala fe", la avaricia, lacobardía, etc.

Una atmósfera de misterio, de incertidum-bre, la permanente espera de que puede ocurrirlo inesperado, la sospecha, la intriga, se tejen enestos cuentos de suspenso.

Se crea una intriga que mantiene al lector envilo, respecto de un desenlace imprevisible.

El suspenso es la manera idónea de escri-bir las pasiones, ellas son arrasadoras en sucaprichosa necesidad.

Paradojalmente, las pasiones, en la necesidadque les es inherente, son a la vez imprevisibles,precisamente en la invención de recursos y estra-tagemas para obtener el fin que las mueve.

Las pasiones en su caprichosa necesidad avan-zan, inexorables, con ritmos alucinantes: lentos,rápidos, vertiginosos, permanentes o efúneros.

En ocasiones irrumpen en instantes pujantes,que se imponen en su fugacidad, para permaneceren ella.

Maupassant escruta con cortante lucidez laspasiones llevadas al extremo.

Sus Cuentos ilustran una tesis desconcertan-te: la racionalidad de las pasiones humanas.

Más precisamente, nuestro autor muestra laluminosa racionalidad de pasiones tenebrosas.

Las pasiones extremas exigen a la razón unmáximo refinamiento.

Así, se describe un espíritu humano desga-rrado por la tensión de esos extremos hacia losque su naturaleza tiende inevitablemente.

Pasión y razón son ambasla oscuridad y la claridad del espíritu,

muerte y vida en la vida

Pero cuando la razón se vuelve sigilosa en sulúgubre lucidez, tentada por el estallido pasionalhacia la vida, se deja llevar por el vértigo.

Entonces, se invierten sus papeles y, comoel rayo en la noche serena, la pasión irrumpe consu luz deslumbrante, como afirmación de la vidacontra la castración nocturna de una razón frus-trante. A la noche oscura sigue la luz.

El espíritu reproduce en su noche y su día, lainterminable sucesión cósmica de noches y días.

El trabajo imperceptible del tiempo, cualPenélope infatigable, recomienza su infmito tejido

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de luz y tinieblas entre los que late el pulso de lavida humana.

En este sentido, por asociación, es inevitableevocar la tradición gnóstica que recoge la sabiduríade Herrnes Trimegisto, faro oculto de Occidenteproveniente del Oriente egipcio antiguo.

Cada instante es grávido de presente,pasado y porvenir

El instante que brota en algún minuto de undistraido reloj, envuelve todos los tiempos en lamagia del tiempo vivido:

Comencé a caminar lentamente,bajo las hojasnuevas, bebiendo este aire sabroso que perfu-man los brotes y las savias. Iba con pequeñospasos,olvidadizode los papeluchos,de la ofici-na, del jefe, de los colegas,de los expedientes,y soñandocon cosas felicesque no podíandejarde llegarme, soñando con todo lo desconocidovelado del porvenir. Estaba atravesadopor milrecuerdos de infancia que estas fragancias decampaña despertaban en mí, y yo iba, todoimpregnado del encanto oloroso, del encantoviviente,del encanto palpitante de los bosquesentibiadospor el gran sol de junio. 8

Todo ello es puesto en la clave del humor; deun humor negro no exento de cierto sadismo.

Maupassant despliega su propuesta específi-ca de un gozo de la crueldad.

Así, su estética de la crueldad, permiteinscribir los Cuentos en la tradición de Sade,Lautréamont, Artaud, Breton, etc

Maupassant produce la sonrisa estupefactadel lector, ante lo sorprendente del giro instan-táneo, inesperado, de la situación, que devieneridícula.

Entonces, la escena adquiere la dimensión deun cuadro crítico.

El humor es el instrumento refinadoy preciso con que nuestro filósofo

culmina cada cuento en una denuncia

Una denuncia de los vicios que caricaturizanla naturaleza humana. A través de situaciones que

provocan cierto humor, los espíritus deformesquedan en evidencia.

El humor es su instrumento para des-enmas-carar las acciones humanas surgidas de la mez-quindad de espíritus ramplones, roedores de lapequeñez.

Más allá del esbozo de risa congelada, másallá del rostro de un lector en quien las comisurasde sus labios titubean antes de continuar desple-gándose ante el horror, el cuento apunta a un finmás elevado.

El humor negro es la didácticade Maupassant

Desenmascarando la sordidez del espíritu deun personaje, interpela al lector. Invoca al lectorcon un elíptico: "Tú lector: alerta"

En fin, su didáctica, como en Las Fábulas deLa Fontaine conduce a una enseñanza moral.

Más aún, pienso que su didáctica trasciendela moral, para hacer blanco en la exigencia deun cuestionamiento radical de la vida de cadauno.

Sus Cuentos a veces resultan "incómodos".Son incómodos porque nos cuestionan.

Exigen al lector la más drástica y dura de lasexperiencias, la del imperativo socrático: conoce-te a ti mismo.

Notas

l. Guy de Maupassant, Cantes du jour et de la nuit,Paris: Albin Michel, 1988.

2. María Noel Lapoujade, "Tiempos cósmicosy transgresiones imaginarias", p.l9 a 40, enM.N.Lapoujade, Tiempos imaginarios: ritmos yucronias. Benemérita Universidad Autónoma dePuebla: Benemérita Universidad Autónoma dePuebla, 2002.

3. "Une douleur violentem'étreignait le coeur,et aussiune révolte contre la nature mérne, une indignationirraisonnée contre cette oeuvre brutale, infamededestruction." Op.Cit., Adieu, p. 151

4. " Douze ans sont si peu de chose dans J'existenced'un homme! On ne les sent point passer! ElIesvont J'une apres J'autre, les années, doucementelvite, lentes et pressées, chacune est longue el si

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LA SEDUCCIÓN DE UNA FILOSOFÍA RADICAL EN GUY DE MAUPASSANT

tót finie! Et elles s'additionnent si promptement,elles laissent si peu de trace derriere elles, elless'évanouissent si completernent qu'en se retour-nant pour voir le temps parcouru on n'apercoitplus rien, et on ne comprend pas comment il sefait qu'on soit vieux.... Maintenant, j'étais vieux.» ldem., p. 150 Yp.l52

5. Gaston Bachelard, L'intuition de ['instant. Paris:Editions Stock, 1992.

6. "Comme la vie est singuliere, changeante! Commeil faut peu de chose pour vous perdre ou vous sau-ver l" Op.cit. .La parure, p.52

7. "Quand son valet de chambre accourut, attiré parla détonation, il le trouva mort, sur le dos. Un jetde sang avait éclaboussé le papier blanc sur la

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table et faisait une grande tache rouge au-dessousde ces quatre mots:'Ceci est mon testament', « Op .cit., Un láche, p. 80.

8. Et je me mis a marcher lentement, sous lesfeuilles nouvelles, buvant cet air savoureux queparfument les bourgeons et les seves, J'allais apetits pas, oublieux des paperasses, du bureau,du chef, des collegues, des dossiers, et songeant ades choses heureuses qui ne pouvaient manquerde m'arriver, a tout J'inconnu voilé de l'avenir.J'étais traversé par mille souvenirs d'enfanceque ces senteurs de campagne réveillaient enmoi, et j'allais, tout imprégné du charme odo-rant, du charme vivant, du charme palpitant desbois attiédis par le grand soleil de juin. Op Cit.Souvenir, p.155.