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SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL UNIDAD AJUSCO LICENCIATURA EN PEDAGOGÍA PLOTINO RHODAKANATY Y LA ESCUELA LIBRE DE LA RAZÓN Y DEL SOCIALISMO EN CHALCO (1861-1871). UNA EXPERIENCIA DE EDUCACIÓN ANARQUISTA T E S I S QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE LICENCIADO EN PEDAGOGÍA PRESENTA: CÉSAR GABRIEL PEÑA RAMÍREZ ASESOR: DR. JUAN PABLO ORTÍZ DÁVILA CIUDAD DE MÉXICO, AGOSTO, 2016

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SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL

UNIDAD AJUSCO LICENCIATURA EN PEDAGOGÍA

PLOTINO RHODAKANATY Y LA ESCUELA LIBRE DE LA RAZÓN Y DEL SOCIALISMO EN CHALCO (1861-1871). UNA EXPERIENCIA DE

EDUCACIÓN ANARQUISTA

T E S I S QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE

LICENCIADO EN PEDAGOGÍA

PRESENTA: CÉSAR GABRIEL PEÑA RAMÍREZ

ASESOR: DR. JUAN PABLO ORTÍZ DÁVILA

CIUDAD DE MÉXICO, AGOSTO, 2016

A mis padres y mi hermano: Rosaura Ramírez Ibarra, Gabriel Peña Camacho y

Héber Agustín Peña Ramírez. Los amo.

A mi asesor: Dr. Juan Pablo Ortiz Dávila

A todos aquellos que han formado parte de mi vida y que por ellos soy lo que soy…

A la memoria de Andy.

Tabla de contenido

Agradecimientos ................................................................................................... 5

Introducción ........................................................................................................... 7

Capítulo 1. Comprender el socialismo del siglo XIX, entender la idea de

hombre y educación ........................................................................................... 13

1.1 La revolución que trajo la idea de socialismo ............................................... 16

1.2 El debate: ¿socialismo utópico o socialismo libertario? ............................... 45

1.3 Charles Fourier: la civilización vs la vida societaria ..................................... 51

1.4 Pierre-Joseph Proudhon, padre del anarquismo moderno ........................... 62

Capítulo 2. Historias paralelas ........................................................................... 76

2.1 Guerra de Reforma ¿y la educación dónde queda? .................................... 78

2.2 Más cerca de lo que pensamos. El segundo imperio y su propuesta

educativa ............................................................................................................ 90

2.2.1 Educación durante el Imperio, un corto periodo .................................... 94

2.3 Los motivos y las circunstancias. Plotino Rhodakanaty, un griego socialista

........................................................................................................................... 99

2.3.1 La Cartilla Socialista, educación y organización obrera y campesina .. 102

2.3.2 El socialismo mexicano basado en la educación ................................. 112

Capítulo 3. La Escuela Libre de la Razón y del Socialismo. Educación

campesina bajo a bandera de la libertad......................................................... 117

3.1 Antecedentes y contextualizaciones. Cambios y despojo de tierras .......... 118

3.2 Julio López sembrando el camino hacia la Escuela de la Razón ............... 124

3.3 La Escuela Libre de la Razón y del Socialismo.......................................... 130

3.3.1 Insurrecciones en Chalco. La lucha cobijada por el socialismo ........... 141

3.4 Los años posteriores .................................................................................. 152

Conclusiones ..................................................................................................... 156

ANEXOS ................................................................................................................ 163

Referencias ........................................................................................................ 181

Una historia del anarquismo es inseparable de la historia de todas las evoluciones

progresivas y de la eterna aspiración humana hacia la libertad.

Max Nettlau

Con la excepción de momentos muy escasos en que el pueblo intervino en una etapa

de la historia como actor principal, su papel se ha limitado al de espectador del

drama de la historia…

Mijaíl Bakunin

5

Agradecimientos

A mis padres, Rosaura Ramírez Ibarra, Gabriel Peña Camacho. A ustedes y por

ustedes soy quien soy, por su amor, por su guía, por su amistad y porque siempre han

estado ahí, alentándome a salir adelante. A ustedes que me han comprendido y me

han apoyado pese a todos mis descalabros, mis desaciertos y mis aciertos. Ustedes

que me han levantado cuando he caído y son el motor de mi vida. Porque me han

acompañado y apoyado en mis locuras y se han preocupado en cada una de ellas. No

bastará la vida para agradecerles lo que han hecho de mí y por mí. Los amo…

A mi hermanito, Héber, que ha sido mi amigo desde que llegó a este mundo y

me ha apoyado en todos sentidos, sabes que te quiero mucho.

A mi tía Norma que desde hace mucho me ha apoyado y me ha aconsejado, a

mi tía Laura también por su apoyo y motivación. A mi primo Marcos que me sacó de

varios apuros a lo largo de este periodo. A toda mi familia, a mis tías, tíos, primas y

primos, a los nuevos integrantes y los que vendrán. Gracias.

A mi asesor Juan Pablo Ortiz Dávila que me ha apoyado, por sus aportaciones

y observaciones acertadas a lo largo de este proceso.

A Valeria, tú que me has acompañado por tanto tiempo, que formas parte

importantísima en mi vida, hemos crecido, aprendido y madurado juntos. Esas charlas,

debates, coincidencias y disparidades frente al tema educativo me han servido de

mucho. Eres una de las mujeres más nobles y luchonas que conozco, sigue así. Te

amo.

De manera especial: A mi amigo José Ávila, quien siempre me ha apoyado y

con quien aprendí que al trabajo arduo no se le teme, simplemente se le enfrenta. A

Luis (Cabo) por sus innumerables pláticas, por proporcionarme gran parte del material

bibliográfico, juntos hemos aprendido mucho. Erick Benítez, por leer mi trabajo y

hacerme las debidas correcciones y por haberme ayudado a comprender un poco más

el pensamiento de Proudhon. A Daniel (Tobi), por las buenas charlas y por haberme

6

acompañado al AGN, juntos descubrimos otra faceta en la vida de Julio López y a la

Biblioteca Social Reconstruir por las facilidades de material bibliográfico y por el apoyo.

A las y los compañeros de la FAM. A mis profesores del campo de Historia de la

educación y educación histórica: Belinda Arteaga, Edith Castañeda (quien trabajó duro

y me apoyo en cada momento de este proceso) y Juan Pablo Ortíz y por último, pero

no menos importante, a todos mis profesores, todos ellos y ellas que desde que inicié

este proceso han contribuido en mi formación. A los profesores de la UPN que me han

enseñado que otra educación es posible, a mis compañeras y compañeros de la

mañana y la tarde con quienes me he formado en este tiempo.

Este trabajo lo presenta una persona, pero detrás de ésta hay muchísimos

implicados, cómplices de una locura. Desde el fondo de mi ser, a todos ustedes…

¡Gracias!

7

Introducción

El anarquismo, desde cualquier posición política, ha sido calumniado y difamado casi

desde su aparición como teoría filosófica, política o económica. Ha intentado ser

negado pues su posición antiautoritaria y abolicionista de las formas de explotación de

las masas y su rotunda lucha en contra del Estado, la Iglesia, el capital y la propiedad

privada atentan contra quienes pretenden sostener el statu quo.

Las visiones históricas sobre esta teoría generalmente están realizadas desde

el marxismo u otro tipo de corrientes historiográficas que comúnmente distorsionan

sus verdaderos ideales o su visión crítica. Pese a la vasta y, paradójicamente poca

conocida bibliografía, hay escasos estudios referentes a la historia del anarquismo

desde una visión propiamente libertaria. La labor por rescatar esta historia nace

generalmente de los propios militantes. Sin embargo existen autores como Max

Nettlau, Osvaldo Bayer, Ángel Cappelletti o José Cayetano Valdés en México1 quienes

han realizado una labor enorme por tratar de recuperar la memoria libertaria.

Hace falta realizar este tipo de investigaciones, demostrar a los sectores

sociales y científicos que el anarquismo cuenta con propuestas de toda índole, desde

políticas hasta económicas y, en este caso, educativas. Sabemos que muchos

pensadores y teóricos han depositado en la educación, un gran peso como forma de

transformación social. Dentro del anarquismo, existen diversas propuestas venidas del

iluminismo francés en los que no es posible dejar de lado la influencia pedagógica de

Rousseau pese a las grandes críticas que se le pudieron hacer.

En la memoria libertaria está plasmada la escuela y propuesta educativa llevada

a cabo por Francisco Ferrer i Guardia y su Escuela Moderna, idea que permitió, junto

a los ateneos en España, realizar un gran trabajo de concientización en los sectores

trabajadores que culminaron en la Guerra Civil Española entre 1936 y 1939. Pero en

1 Solo por mencionar a los historiadores anarquistas que más renombre tienen dentro de estos círculos,

aunque es necesario mencionar que en el caso de José Valadés, quien simpatizaba con las ideas y después militó en los grupos comunistas de los años 20 y 30.

8

otras muchas ocasiones, quedan relegados dentro de la memoria ácrata los trabajos

realizados en Cempuis por el educador Paul Robin, o la Rouche, otra comunidad

educativa que con gran esfuerzo levantó Sebastien Faure, ambos franceses de

nacimiento. O la propuesta rusa de Lev Tolstoi y su Yasnaia Poliana; el trabajo de

Alexander Neill y la Escuela de Summerhill en Inglaterra. Y es que ahora presentamos

una experiencia más, realizada en México. La Escuela Libre de la Razón y del

Socialismo fue una experiencia de corto tiempo, pero que tuvo gran influencia en los

estratos sociales desheredados invocando en ellos el espíritu de solidaridad, de lucha

y de libertad. Como anarquistas y como humanos, es tarea nuestra hacer trabajo de

memoria histórica, recordar, reflexionar, investigar y dar a conocer todos estos trabajos

que intentaron, a diferencia de la educación del siglo XXI, cumplir con los objetivos de

la misma, además de contribuir en el desarrollo de concientización en pos de la

liberación de las masas oprimidas, permitir el desarrollo integral individual y social de

los seres humanos en busca de la felicidad, la paz, la comunión y la libertad.

En esa tónica va dirigida el presente trabajo académico, el cual se ha realizado

con varias finalidades 1) aportar a la memoria libertaria una experiencia educativa

como es el caso de la Escuela Libre de la Razón y del Socialismo; 2) participar en la

construcción del conocimiento científico y humano que permita seguir abonando en la

construcción de quienes somos; 3) como se mencionó, coadyuvar en el trabajo de

desmentir las calumnias realizadas en contra del pensamiento anarquista y 4)

demostrar que el anarquismo se encuentra presente en las diversas facetas del siglo

XIX y que ha sido de gran importancia para el desarrollo de las ideas y los movimientos

sociales.

Este texto ha sido realizado con mucho esfuerzo, y sobre todo, con mucho amor

y pasión. El lector podrá observar que se ha hecho un vasto trabajo -aunque de manera

personal no suficiente- en archivos públicos y privados y en bibliotecas en la búsqueda

de una construcción lo más próxima a lo acontecido, puesto que soy de la firme idea

que a la vez que cambiamos nuestro presente y nuestro futuro, el pasado deviene

constantemente cada vez que sumamos una aportación nueva a las ya realizadas.

9

Esta es una investigación histórico-filosófica pues dentro del cuerpo literario podemos

encontrar las acciones íntimamente ligadas al pensamiento. Otro aspecto peculiar que

encontraremos dentro del trabajo, es la historia “oficial” ligada a la historia popular,

obrera y campesina puesto que ambas se repercuten mutuamente. Las legislaciones

políticas venidas del Estado tuvieron graves afectaciones en las clases desheredadas

y llevaron a los situados en el poder a tomar represalias ora políticas, ora económicas

o hasta de persecución y muerte por lo que es difícil desligar una historia de la otra.

Para tener un panorama amplio, se realizaron análisis de fuentes de corte

liberal, conservador y socialista (anarquista) como es el caso de los periódicos de

época. Se ha realizado trabajo en el Archivo General de la Nación, así como el Archivo

Histórico de la Ciudad de México y otros archivos públicos los cuales pueden ser

consultados en la bibliografía al final de este trabajo junto a los periódicos revisados y

analizados. Un aspecto que cabe resaltar, es que he decidido, adrede, trabajar con

fuentes secundarias, en su mayoría ácratas, esto con la idea de acercarnos de la mejor

manera al pensamiento libertario y no asumir fines ligados al poder como se mencionó

al principio de esta introducción.

Así mismo, quiero destacar que a pesar de buscar -por medio de las fuentes

primarias y secundarias- realizar un análisis de las mismas por medio de la

confrontación de textos. Hago un breve paréntesis. Pues aunque en muchas de las

ocasiones se ha pretendido realizar innovaciones a la investigación histórica,

continuamos bajo el dominio de la historiografía positivista, la cual está encaminada a

dar mucho peso a los propios documentos, a la realización de historias políticas,

diplomáticas que hasta el siglo XX con la llegada de la historiografía francesa de los

Annales, estuvo concentrada en una historia estatal y legitimadora.

Hoy, el estudio de la historia nos permite, desde diferentes visiones, tener un

amplio margen de reflexión. En el caso de esta investigación, la aproximación intenta

adentrarse por la propia historiografía francesa, haciendo énfasis en que el objeto de

estudio de la historia es el hombre y su devenir en ella. Los hechos políticos,

10

económicos, culturales, bélicos, no son más que acciones humanas en contextos

diversos y determinados, sumando a esta posición, el análisis crítico de la

historiografía anarquista de Max Nettlau.2 Citemos a este autor: “Sigo pensando que

el historiador no puede hacer otra cosa que interpretar con sumo cuidado las fuentes

informativas y proyectar sobre ellas todos los conocimientos disponibles, procurando

llenar los huecos con hipótesis prudentes”.3 El historiador vienés tenía claro que la

historia es un constructo de causas y efectos diversos, que está subjetivada por la

corriente política, económica o filosófica del propio historiador y por ello el cuidado con

las fuentes analizadas.

En contraposición a Marx. Nettlau comprendía que las condiciones económicas

no sólo podían considerarse como el único motor de la historia y llevado a un fatalismo

hegeliano que era transferido a lo económico. Existen diversos fenómenos que afectan

los procesos históricos tales como la psicología, la cultura y hasta el avance las

ciencias. Rocker lo retrata muy bien al explicar que en la concepción histórica de Max

Nettlau estaba lo posición libertaria de Piotr Kropotkin y su tesis sobre el apoyo mutuo

como forma de evolución de las sociedades animales y humanas yuxtapuesta al

darwinismo social y la lucha del más fuerte.4 La solidaridad en las luchas obreras y

campesinas son un factor clave en el devenir histórico el cual debe ser comprendido y

reflexionado. Ahí radica la esencia de esta investigación.

Si bien la temática es poco conocida y estudiada por escasez de información,

en los últimos años ha sido el doctor Carlos Illades quien ha llevado a cabo el estudio

del primer socialismo en México, sin embargo con poca información respecto a la

escuela instaurada por Rhodakanaty. Se ha realizado un gran esfuerzo por leer entre

líneas en algunos textos, analizarlos, compararlos y confrontarlos, en algunos casos

2 Para un análisis más completo del análisis de Max Nettlau, vid. Rocker, Rudolf, Max Nettlau. El

Heorodoto de la anarquía, México, Ediciones Estela, 1950. 3 Nettlau citado en Rocker, Max, 1950, p. 75. 4 Ibid.

11

desmentir ciertas acciones o lugares geográficos con la finalidad de dar la máxima

certeza posible.

En el anexo número cuatro, el lector podrá encontrar un breve glosario que tiene

como finalidad permitir la mejor comprensión de ciertos conceptos que tal vez puedan

ser confusos y de esta forma faciliten la lectura del texto, así mismo se recomiendan

algunas lecturas que le permitan profundizar en algunos temas que pueden ser de

interés.

El trabajo se compone de tres capítulos y que de manera somera describiremos

a continuación:

En el primer capítulo podemos analizar de forma breve los acontecimientos

anteriores a la Revolución Francesa de 1789, la propia Revolución y su posterior

influencia en el nacimiento del pensamiento socialista francés, desde Babeuf hasta el

nacimiento del anarquismo moderno con Proudhon, pasando por el debate del

concepto de socialistas utópicos llamados así por Marx y Engels, el análisis histórico-

filosófico de las ideas de Charles Fourier y Pierre-Joseph Proudhon para comprender

la influencia que éstos tuvieron en Plotino Rhodakanaty y en la necesidad de crear una

escuela en la región de Chalco, México.

En el segundo capítulo analizaremos las propuestas educativas realizadas por

los gobiernos de Juárez (antes del Segundo Imperio) y Maximiliano de Habsburgo sin

dejar de lado los acontecimientos históricos que se encontraron íntimamente ligados a

las decisiones y posiciones educativas de la época. En un tercer momento nos

centramos en las ideas político-pedagógicas de Plotino Rhodakanaty, precursor de las

ideas socialistas-anarquistas en México, teniendo así una comparativa entre las

propuestas educativas que surgieron en la mitad del siglo XIX.

En el último capítulo, nos centramos en La Escuela Libre de la Razón y del

Socialismo que fue instaurada en Chalco en el año de 1865, la labor realizada en esa

región y los posteriores levantamientos campesinos encabezados por Julio Chávez

12

López, alumno de Rhodakanaty y en quien gira una gran leyenda como revolucionario

y el posterior inicio del debate, durante el año de 1871, que tuviera el griego con la

corriente positivista traída por Gabino Barreda.

Por tanto, tenemos en nuestras manos, una pequeña parte de la historia

libertaria, un breve fragmento de nuestra historia humana y que a diferencia de la

historia oficial, hemos colaborado en su construcción con nuestro actuar en cada

segundo de la vida. Espero pues, que este trabajo permita abrir un pequeño sendero

en la investigación de estas temáticas tan relevantes en la búsqueda de alternativas

educativas en pos de la transformación social.

13

Capítulo 1

Comprender el socialismo del siglo XIX, entender la idea de hombre y

educación

Muchas de las ocasiones, cuando llegamos a hablar de socialista o socialismo,

solemos identificarlo con la doctrina marxista, sin embargo, y aunque muchos no

lleguen a estar de acuerdo, es necesario comprender que el socialismo nace años

antes que el comunismo marxista o el mismo anarquismo5 como doctrina teórica.

Es debido a que ambas doctrinas -marxismo y anarquismo- tienen sus

fundamentos en la base social por lo que suelen ser confundidas en la mayoría de las

ocasiones. Esto sumado a que la mayoría de las luchas por la liberación durante el

siglo XX, tanto en Rusia en 1917, pasando por la China Maoísta, Argelia en África;

hasta las revoluciones latinoamericanas,6 adoptaron no solo las filosofías marxistas,

leninistas, trotskistas o estalinistas, sino que las llevaron a la praxis y adoptaron el

nombre de socialistas.

Por lo tanto, solemos confundir ambos términos, incluso, es necesario decir que

tanto el socialismo, el anarquismo y el comunismo7 marxista no son iguales, aunque

5 En 1793, William Godwin (1756-1836), escribe su “Investigación acerca de la justicia política”,

precedente primitivo del comunismo libertario, por lo que es complejo aseverar que el socialismo haya nacido antes que el anarquismo y viceversa. Es este trabajo y específicamente este ´primer capítulo, nos enfocaremos en la Revolución francesa y su influencia en el nacimiento de las ideas de Fourier y Proudhon. 6 Podemos enumerar un sinfín de luchas por la liberación que sucedieron en diferentes partes del mundo

y que tuvieron consigo los postulados marxistas, por lo cual solo cito algunos ejemplos. 7 Es importante mencionar que de igual forma encontraremos dos acepciones de comunismo, el

comunismo-marxista, que como en el texto se menciona, opta por el empoderamiento de la clase proletaria y, desde el Estado mismo busca su abolición y posterior instauración del comunismo. Y el comunismo-anarquista o comunismo libertario basado en el apoyo mutuo que preconizó Piotr Kropotkin y la voluntad a la que hizo alusión el italiano Errico Malatesta, ambos como los mayores representantes de esta corriente anarquista. Como todo el anarquismo, el anarco-comunismo pugna por la destrucción del Estado y el poder, una de las más grandes diferencias con el marxismo, pues la toma de éste -el poder- corrompe a las personas y empodera las clases que acceden a la toma del mismo. Para mayor referencia, se pueden leer los textos de Luigi Fabbri y Nicolai Bujarin, Anarquismo y comunismo científico, México, Ediciones La Voz de la An-Arquía, 2014.

14

éstos dos últimos suelen sustentarse en el primero.8 Por ello trataré de enfocarme en

discernir sobre el concepto de socialismo basándome en su propia visión para después

centrarlo en la óptica de Charles Fourier y el anarquismo de Joseph Proudhon, para la

comprensión de ambas posturas y la influencia que tuvieron en el pensamiento del

griego Plotino Rhodakanaty.

Como bien se ha mencionado, el socialismo como doctrina surge en la primera

mitad del siglo XIX. Si bien el concepto socialista es amplio, ésta toma la definición

doctrinal en el año de 1897 empleada en la revista Co-operative Magazine que

fundaron los partidarios de Owen.9 Mientras que la palabra socialismo “apareció, que

se sepa, por primera vez impresa en el periódico francés Le Globe en 1832. Este

periódico estaba entonces dirigido por Pierre Leroux, que había hecho de él el órgano

principal de los saint-simonianos; y la palabra socialisme fue empleada como

caracterización de la doctrina saint-simoniana”.10

Un factor que fue decisivo en la aparición del socialismo en el siglo XIX, fue el

creciente desarrollo industrial, así como su modo de producción capitalista. El

crecimiento que hubo por parte de la burguesía, a la par del incremento poblacional de

los trabajadores. Teniendo como antecedente próximo, la revolución burguesa

realizada en Francia durante el año de 1789.

A la corrupción de la monarquía francesa, su ostentosidad y las crisis políticas

se sumaron los despilfarros por parte de los terratenientes, quienes pretendían imitar

a la misma monarquía en los gastos excesivos o el libertinaje intrínseco de las

aristocracias de Francia. A esto se agregó “el exceso de injusticia, de miseria, y

derrotas militares”.11

8 Hay que mencionar, que muchos autores coinciden en que William Godwin fue el predecesor directo

de estas ideas, sobre todo las anarquistas, antecediendo incluso a las propuestas de los “utópicos”. Véase nota uno. 9 Cole, Historia, 1964, t. I. 10 Ibid., p. 9. 11 Maurois, Histoire, 1974, p. 289.

15

Con todo lo que acontecía en Europa durante el último tercio del siglo XVIII, era claro

que la revuelta estaba a punto de estallar, aunque esto no se hubiera concretado si la

revolución no hubiese tenido consigo una ideología. “Esto se refiere en primer lugar a

la revolución burguesa en Francia, donde los llamados iluministas, representantes

avanzados del tercer estado, sometieron a una ruda crítica el régimen feudal

dominante y demostraron la necesidad de acabar con él, mucho antes de haber

comenzado la revolución”.12

Autores como Montesquieu y su “Espíritu de las leyes”, Rousseau y “El Contrato

Social”, la influencia de los enciclopedistas, y de manera más crítica y participativa no

se puede negar a Voltaire, quién sentó mucho las ideas sobre la libertad de expresión.

Sus ideas se concretaron no sólo en la Revolución de 1789, sino que con ellas crearon

una corriente política que serviría como contrapeso al denominado Despotismo

ilustrado que gobernaba en la Francia del siglo XVIII, refiriéndonos al liberalismo.

Sabemos que la Revolución francesa trajo consigo los ideales de una nueva

humanidad, cobijados por el pensamiento iluminista basado en la razón y la ciencia,

pero a la par de estos conceptos, legaron otros como el liberalismo en su definición de

filosofía y concepción económica, los derechos individuales del hombre y uno de los

aspectos que Pierre-Joseph Proudhon considera esenciales para comprender la

desigualdad contemporánea, la propiedad privada: “Un autor enseña que la propiedad

es un derecho civil, originado por la ocupación y sancionado por la ley; otro sostiene

que es un derecho natural, que tiene por fuente el trabajo; y estas doctrinas tan

antitéticas son aceptadas y aplaudidas con entusiasmo. Yo creo que ni el trabajo, ni la

ocupación, ni la ley, pueden engendrar la propiedad, pues ésta es un efecto sin

causa”.13

Estos argumentos fueron acogidos por la burguesía que comenzaba a hacerse

en el poder, comenzó un avance del proceso industrial, sí, pero de igual manera

12 Mitropolski, Compendio, s. a. p. 251. 13 Proudhon, Propiedad, 2010, pp. 9-10.

16

comenzó el declive social así como el descontento por la actual forma de vida. Con el

surgimiento de una clase económica, se dio apertura a una clase política que

comenzaba a gobernar y generar todo tipo de desigualdades sociales. No obstante,

para entender las ideas socialistas, es necesario remontarnos a los antecedentes de

los que ya he hablado líneas arriba, puesto que las teorías de Saint-Simon, Fourier o

Proudhon específicamente, se debieron a un largo proceso revolucionario que culminó

en el empoderamiento de una burguesía absoluta con el control no sólo económico,

sino político-monárquico.

1.1 La revolución que trajo la idea de socialismo

Es más que claro que la Revolución francesa de 1789 trajo consigo un giro total a la

historia contemporánea humana, sumado claro, a la previa revolución industrial en

Inglaterra. Describir esta revolución, analizarla en lo profundo, no es el tema de esta

investigación, sin embargo, es necesaria conocerla para entender el porqué del

pensamiento socialista, bajo qué formas, condiciones históricas, sociales y hasta

económicas logró desarrollarse.

Los cambios en la sociedad feudal en Francia durante el siglo XVIII ya se venían

dando, tal vez no con la fuerza que se suponía o esperaba, ya que al contrario de

Inglaterra, el país galo tuvo una industrialización más lenta ¿Esto qué quiere decir?

que la población en Francia era mayormente campesina y artesana, pocos eran los

lugares que se encontraban industrializados, por ende, este fue uno de los mayores

empujes en los levantamientos hasta 1789.

Son varios los trances que se suscitaron antes de dicha fecha como las crisis

en el campo, la sobrepoblación que comenzó a originarse, pues para 1788, Francia

representaba el 16% de la población continental con 26 millones de habitantes,14 a

14 Maurois, Histoire, 1974.

17

diferencia de su gran competidor Inglaterra, con 12 millones de personas. Mientras que

para 1789 “casi de cada cinco europeos, uno era francés”.15

Como se señaló líneas arriba, se sumaron a estos conflictos: el aumento de la

pobreza, como ya vimos, en parte por el crecimiento poblacional, pero a esto se añadió

el despilfarro económico por parte de la nobleza, pues sabemos que ésta vivía de

arrendar sus tierras lo que generaba el aumento de los tributos hacia los señores

feudales, los diezmos a la iglesia y gabelas,16 por lo que solo era cuestión de tiempo

este apoyo sobre pueblo pobre. Esto se debía a que el sistema fiscal era demasiado

rígido, aumentando a esta situación que cuando Francia se encontraba en guerra, los

impuestos aumentaban lo que por ende empeoraba la situación de las clases más

bajas.

La monarquía intentó todo lo posible por detener el descontento que comenzó

en los sectores populares, pues entre 1724 y 1789 los precios de los cereales habían

aumentado en un 70%, pero los salarios de los trabajadores seguían siendo los

mismos.17 Esto causó la hambruna, la miseria y la desesperación. No fue de esperarse

que la situación terminara en bandidaje. En algunos casos los vagabundos y mendigos

formaron grupos que se dedicaban al asalto de caravanas con alimentos. Para llevar

a cabo una solución, se tuvo que definir entre la “existencia de un Estado capaz de

una acción de largo alcance. Para llevar a cabo tal acción, se planteaba la acción entre

absolutismo y un régimen más liberal que adquiriría su fuerza de la opinión”.18

El liberalismo hizo contrapeso a la monarquía, apoyándose sobre todo en el

pensamiento de Montesquieu y su visión sobre el gobierno y la política. Este

liberalismo buscó fundarse sobre todo en la defensa de las causas justas, en ella iba

de manera intrínseca la necesidad de la igualdad, no ya la libertad, sino la igualdad

ante la ley, la igualdad económica sustentada en la propiedad privada y el respeto al

15 Hobsbawm, Revoluciones, 1980, vol. I, p. 105. 16 Ibid. 17 Jardin, Historia, 1998. 18 Ibid., p. 88.

18

ser como individuo. Para evitar problemáticas más graves, el rey decidió mostrarse

conciliador entre sus representantes y las asambleas y los parlamentos, pues sabía

que cualquier chispa de descontento podría desencadenar una situación incontrolable.

Aunado a todos estos problemas, una nueva clase comenzó a situarse en las

estructuras sociales más altas, la burguesía. Esta clase contaba con al menos tres

aspectos que la hacían poderosa y por ende le permitían hacerle frente a la nobleza

francesa. El primero de ellos es que era una clase organizada y cohesionada con fines

en común; el segundo fue la paulatina escalada dentro de los puestos oficiales del

gobierno y, el tercer punto y tal vez el más importante, es que la burguesía contaba

con una ideología que devenía de los pensadores ilustrados quienes cimentaron la

necesidad de terminar con la nobleza, con el fin de secularizar los bienes eclesiásticos

lo que ocasionó una campaña de ataques y desprestigios en contra de los privilegios

políticos del clero, que generó total intolerancia en contra de éste.19 Además de

enfocarse en los aspectos importantes del hombre, que serían concretados en la

Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano.

Estas características, le permitieron tener gran influencia sobre los sectores

trabajadores y campesinos al momento de las revueltas antes, durante y después de

1789. Por ello Eric Hobsbawm no duda en decir que “de todas las revoluciones que la

precedieron y la siguieron, fue la única revolución social de masas e

inconmensurablemente más radical que cualquier otro levantamiento”.20

En sí, las revoluciones son de los hechos más complejos que existen según los

paradigmas históricos. Habrá quienes consideren que es debido al necesario cambio

de producción, feudal a capitalista, otros, que se debió al incremento de población y

paralelamente la pobreza y la sobreexplotación o a la ideología iluminista que se fue

adquiriendo. ¿Por qué es necesario plantear estas diferentes visiones? A la vez de

que todas estas causas pertenecen a un mismo cambio, según los paradigmas, las

19 Maurois, Histoire, 1974. 20 Hobsbawm, Revoluciones. 1980, vol. I, p. 105.

19

repercusiones son diversas y que para nosotros culminan con las ideas socialistas. Y,

es debido a las circunstancias anteriormente mencionadas que el pueblo francés se

lanza al grito de La liberté ou la Morte. Por ende, es de mucha relevancia la frase

anterior porque el “vocablo «libertad», que antes de 1800 no era más que un término

legal, denotando lo contrario que «esclavitud», también había empezado a adquirir un

nuevo contenido político”.21 Pero, para otros, como es el caso de Edmund Burke,22 la

libertad fuera del gobierno ¿podía considerarse como tal?, puesto que la Asamblea

Nacional no tendría la capacidad de representar los ideales de la revolución, ni siquiera

la capacidad de llevar a cabo a tarea de gobernar:

Pero ¿hubiera yo podido elogiar con sensatez a Francia hace diez años por

tener un gobierno (porque entonces, en efecto, tenía uno), sin meterme a

averiguar cuál era su naturaleza y cómo funcionaba? ¿Puedo yo hoy felicitar

a esta nación por su libertad? Porque la libertad sea, indudablemente, en

principio, uno de los grandes bienes de la Humanidad, ¿podría yo felicitar,

seriamente, a un loco que se hubiera escapado del retiro protector y de la

saludable oscuridad de su celda, porque ha vuelto a disfrutar de la luz y de la

libertad?23

La situación fue rápidamente agravándose, la monarquía evitaba lo posible por

sucumbir ante las exigencias de la burguesía que reclamaba un gobierno

constitucional, mientras en los campos se corría el peligro ante los bandidos pues las

malas cosechas y los inviernos24 duros agudizaron y permitieron acelerar el proceso

revolucionario. Mientras en la ciudad hubo que racionar los alimentos debido a la falta

21 Ibid., p. 107. 22 Edmund Burke (1729-1797), fue un destacado político y filósofo nacido en Irlanda, sus trabajos le

valen el nombre de “padre del conservadurismo inglés”. Su contemporaneidad con la Revolución del 89 le permitió llevar a cabo un extenso análisis sobre la misma y su crítica en contra de la violencia ejercida en el país galo, especialmente porque este autor temía que la violencia revolucionaria se extendiera, específicamente a la Gran Bretaña, por lo tanto, este trabajo nos permite tener desde una óptica distinta la idea de la revolución. 23 Burke, Reflexiones, 1978, p. 35. 24 Hobsbawm, Revoluciones. 1980, vol. I.

20

de éstos y a su alta demanda.25 A principios de 1789, la Asamblea convocaría a

elecciones, la nobleza y el rey veían en éstas un último intento por controlar el

descontento del tercer estado. Terminadas las elecciones, cada asamblea redactó un

cuadernillo de quejas en las cuales se vertieron dos necesidades de importancia “un

intento de unificación del régimen electoral y la indicación de que el poder real deseaba

que se nombrasen auténticos representantes, es decir, diputados capaces de zanjar

los problemas que se les expondrían, sin que se viesen ligados por mandatos

imperativos”.26 El momento fue complicado, por lo que se vio la necesidad de que se

formase, el 17 de junio de 1789, la Asamblea Nacional, apoyada ésta por Felipe de

Orleans quien más tarde se autoproclamaría Felipe Igualdad. Este príncipe, enemigo

de María Antonieta sería pieza clave en el derrocamiento de la nobleza.27

La nueva Asamblea decidió comenzar a recibir los impuestos, por lo que poco

a poco comenzó a mermar el poder del rey Luis XVI. El poder de la nobleza francesa

empezó a desgajarse, el gobierno comenzó a ser sucedido y en las calles de París y

en los campos las revueltas se intensificaron. La propia Asamblea miró como una

revelación la necesidad de llevar a cabo los ideales de la nueva política con el

decaimiento de la monarquía, por lo que se convirtió en una sagrada misión dar:

una Constitución a Francia […]. Esta gran aventura intelectual, que carecía de

precedentes en el pasado desde los tiempos de Licurgo y de Solón, y que

habría de poner las bases de la felicidad futura no sólo de Francia, sino de

todos los hombres, sobre los cimientos indestructibles de la razón, produjo

una exaltación generosa y audaz en nobles liberales, curas igualitarios y

oscuros legistas provincianos”.28

25 Ribard, Historia, 1941. 26 Jardin, Historia, 1998, p. 110. 27 Ribard, Historia, 1941. 28 Jardin, Historia, 1998, p. 111.

21

El gobierno noble terminó por decaer. El golpe final lo asestaría el pueblo parisino que

con piedras en la mano atacó a los dragones y liberó a los prisioneros que se

encontraban en la Abadía.29

A las nueve de la mañana del 14 de julio del mismo año, el pueblo decidió no

esperar más y se lanzó a la toma de la Bastilla, pues se creía que era la base de

operaciones de las tropas enviadas por Felipe XVI. Dicha toma sería célebre por la

resistencia que opondrían quienes se resguardaron en la Bastilla, pero más aún por el

célebre paseo de un cráneo sobre una pica, el del gobernador Launay.30

Prácticamente, el gobierno de Luis XVI fue vencido y tuvo que ser necesario comenzar

a restaurar el orden y el poder por lo que “Bailly es elegido alcalde de París y Lafayette

comandante de la Guardia Nacional […]. La Asamblea le envía una diputación que

acompaña al rey. Este ha repuesto a Necker; la monarquía está vencida. ¿Quién ha

vencido al rey? La fuerza del pueblo. ¿Quién pretende aprovechar esta victoria? Las

fuerzas burguesas. Toda la Revolución está en eso”.31

Hubo pensadores como Élisée Reclus32 (1830-1905), que consideraban a las

revoluciones como un juego dialéctico eterno entre la evolución y la misma revolución,

una sucede a la otra y viceversa, sin embargo, existen “revoluciones negativas”, esto

es, que en vez de generar un cambio positivo en el contexto en el que éstas se

desarrollan, por el contrario degeneran y ceden ante la involución, entendiendo a ésta

como un retroceso en este proceso complejo de cambios y no podemos negar que “la

ideología del mundo moderno penetró por primera vez en las antiguas civilizaciones,

que hasta entonces habían resistido a las ideas europeas, a través de la influencia

francesa. Esta fue la obra de la Revolución francesa”,33 pero tampoco podemos negar

29 Ribard, Historia, 1941. 30 Ibid. 31 Ibid. pp. 158-159. 32 Geógrafo y anarquista francés, conocido por su gran obra “El hombre y la tierra”. 33 Hobsbawm, Revoluciones. 1980, vol. I, p. 104.

22

que estos cambios degeneraron en procesos económicos y políticos más sanguinarios

como lo hemos visto en el ya agitado siglo XIX.

La nobleza comenzó un éxodo, ya no fue soportable el clima revolucionario en

los campos y en las ciudades de Francia. El miedo a los sublevados no pudo

esconderse más y sin embargo, el miedo alimentó la sed de poder de la aristocracia

emigrada. La batalla por una nueva forma de gobierno comenzó a hacer estragos y

era necesario resarcir la economía nacional, pero el pueblo no fue ya más el sumiso

cordero esperando en el matadero, no más; no estuvo dispuesto a pagar tributos

señoriales y por el contrario, quiso que fuesen respetadas sus decisiones y las

promesas hechas por la revolución,34 además era necesario indemnizar a los

afectados, pero la abolición de los derechos feudales, así como la del diezmo y la

destrucción de privilegios de gremios y provincias, comenzó a complicar la situación.

Apareció el Amigo del Pueblo, periódico de Marat y dio comienzo la agitación,

el pueblo creyó la traición de la Asamblea, pues parecía inactiva, no había trabajo en

las reformas tan esperadas por la gente. La escasez de pan continuaba y el poco que

se conseguía estaba duro y amarillento o en el peor de los casos, envenenado. Y pese

a la derrota, Luis XVI convocó a sus tropas para retomar el poder, y ofreció un banquete

en Versalles. “En la mañana del 5 de octubre un cortejo de 8 000 mujeres, arrastrando

cañones, fusiles, picas, sables y hachas y tras ellas todo un tumulto, marcha sobre

Versalles en busca de pan”.35 La gente no podía esperar más, el hambre, la miseria y

las ansias de justicia orillan a las personas a luchar “La libertad o la muerte” sigue

resonando en la conciencia de las masas.

Por fin la Asamblea decide votar las reformas planteadas por la revolución y el

júbilo se hizo presente, pero ¿quiénes serían los beneficiados de dichas reformas?

“[…] los grandes burgueses se reparten los bienes de los emigrados”.36 Burke arguye

sobre esta cuestión, la libertad -concepto abstractamente complejo-, es poder según

34 Ribard, Historia, 1941. 35 Ibid., p. 160. 36 Ibid., p. 162.

23

este autor cuando esta de comunaliza: “[…] las personas avisadas querrían, antes de

dar su opinión, ver el uso que se hace del poder, sobre todo cuando es algo tan

delicado como un nuevo poder confiado a nuevas personas de las cuales no se

conocen sino poco, o quizá nada, los principios, los caracteres y las disposiciones, y

las que, quizá por las circunstancias especiales que se dan, aquellos principios que se

exhiben no son los que más practican”.37 Pero recordemos que esta visión particular,

se centra en la crítica a la revolución desde una visión “conservadora”, la libertad tiene

diversas acepciones según la temporalidad histórica.

Retornando a la situación de la revolución, Mitropolski comenta que:

Para legalizar la igualdad de la burguesía con los estamentos feudales, la

Asamblea Constituyente adoptó el 26 de agosto de 1789, la ‘Declaración de

los derechos del hombre y el ciudadano’ como preámbulo a la futura

constitución. El significado progresista de este documento consiste en que

estaba dirigido contra los pilares de la sociedad feudal. Proclamó la igualdad

de los hombres y afirmó como los ‘derechos naturales e inalienables del

hombre’ a la libertad, a la propiedad (como derecho inalterable y sagrado), a

la seguridad y a la resistencia a la opresión, así como el principio de la

soberanía del pueblo. La tesis acerca de la propiedad revela el carácter

clasista, burgués, de la Declaración, pues identifica al hombre verdadero con

el burgués propietario. La desigualdad feudal fue sustituida por la desigualdad

burguesa.38

En este momento se comenzó con la secularización de los bienes de la Iglesia,

se nacionalizó la propiedad, por lo que la burguesía empezó a recibir el apoyo de los

campesinos. Estas reformas darían un vuelco total a la forma de vida francesa y

marcaría un parteaguas en la historia:

37 Burke, Reflexiones, 1978, p. 37. 38 Mitropolski, Compendio, s. a. p. 255.

24

Desde el punto de vista económico, las perspectivas de la Asamblea

Constituyente eran completamente liberales: su política respecto al

campesinado fue el cercado de las tierras comunales y el estímulo a los

empresarios rurales; respecto a la clase trabajadora, la proscripción de los

gremios; respecto a los artesanos, la abolición de las corporaciones. Dio

pocas satisfacciones concretas a la plebe, salvo, desde 1790, la de la

secularización y venta de las tierras de la Iglesia (así como las de la nobleza

emigrada), que tuvo la triple ventaja de debilitar al clericalismo, fortalecer a los

empresarios provinciales y aldeanos y proporcionar a los campesinos una

recompensa por su actividad revolucionaria.39

Por momentos pareciese que la situación mejoraría. “Por todas partes se pone

marco a la ‘Declaración de los Derechos del Hombre’, que han redactado La Fayette,

Talleyrand, Sieyès y Mounier”.40 En este marco y como es sabido, una de las

principales reformas es la anulación de la propiedad colectiva y se da cabida a la

propiedad privada como un derecho natural del hombre, por lo que “los dirigentes de

la revolución, tanto los moderados, los girondinos, como los jacobinos, se proclamaron

a sí mismos firmes mantenedores del derecho de propiedad, así como de la libertad

civil y política, y que nada estaba más lejos de su pensamiento que desafiar la

propiedad privada y tratar de sustituirla por una especie de propiedad común de los

medios de producción”.41 Esto debido al temor de la burguesía de perder lo que había

consumado en la revolución del 89 y el poder que concentraban las masas.

Pese al contexto de miseria y hambre, el pueblo continuaba siendo el arma más

poderosa para terminar con quien se encontraba en el poder, por lo que la Asamblea

decidió terminar con dicha fuerza popular y encubriéndose en la Declaración de los

Derechos del hombre, se decide diluir a los gremios ocultando esta decisión y que

39 Hobsbawm, Revoluciones. 1980, vol. I, pp.112-113 40 Ribard, Historia, 1941, p. 163. 41 Cole, Historia, 1964, t. I, p. 21.

25

saldría a la luz por medio del Amigo del Pueblo de Marat.42 La revolución había

traicionado al pueblo.

En Saint-Etienne, los trabajadores comenzaron las revueltas; los salarios cada

vez más decadentes, mientras que la burguesía aumentaba su poder y su riqueza por

medio de la Declaración, enardecen las mentes de aquellos que no estaban dispuestos

a morir de hambre. El miedo de la burguesía se hacía presente. Es debido a este

temor, que un abogado de Rennes: Le Chapelier43 propuso a la Asamblea abolir las

coaliciones de los obreros, ante todo, la de aquellos que pretendiesen exigir un

aumento de salario.

La ley fue votada por unanimidad. La revolución, realizada gracias al valor de

los trabajadores, les negaba el derecho de huelga y de coalición, como lo

había hecho en otra época el edicto real de Villers-Cotterets […] El conoce el

terror que la burguesía empieza a experimentar ante toda concentración

obrera, sabe que la burguesía quiere disolver a toda costa las fuerzas que

pueden realizar la unión única, pero omnipotente arma del pueblo […] La ley

Le Chapelier es, pues, el documento esencial de los propósitos

revolucionarios de la burguesía; es la unidad de medida de sus decisiones;

establece los límites y el contenido de la nueva libertad; es el acta de

acusación firmada por los legisladores de una clase preocupada por conservar

para ella sola el poder conquistado con el concurso de todos.44

Era claro –pues ya se ha mencionado a lo largo del texto- que tanto los

trabajadores como los campesinos estaban organizados ya en una fuerza temible, lo

que orilló a los burgueses en el poder a tratar de aminorar esta fuerza. Su propia

ideología comenzaba a traicionarlos. Y las clases pobres aún sin contar con una

conciencia como tal, comenzaban a exigir y a conocer los derechos a los que tenían

acceso, debido a la Declaración de los Derechos del Hombre, cosa con la que el poder

42 Ribard, Historia, 1941. 43 Ibid. 44 Ibid., p. 164.

26

no contaba. Esta lucha permanente y dialéctica dará lugar a formas de pensamiento

revolucionario, social e histórico.

Una vez más, la Constitución de 1791 asestaba un duro golpe a las clases

pobres del campo y la ciudad, pues no sólo aseguró la propiedad privada, sino que

comenzó a hacer distinciones entre ciudadanos a los que se les denominaba activos

y pasivos. Los primeros “pagaban un impuesto igual a tres días de trabajo”,45 éstos

contaban con el derecho a elegir a la representatividad en el congreso o mejor

llamados electores. Los electores eran aquellos ciudadanos que podían pagar un

impuesto mayor a doscientas jornadas de trabajo, por lo tanto, el pueblo era

representado por la burguesía. Según la Constitución, la Asamblea ya no se llamaría

como tal, sino que se trasformaba en Asamblea legislativa,46 los electores se llamaron

diputados y se transformaron en la representatividad del “pueblo” aunque la finalidad

era representar los intereses de una sola clase. La Constitución ya no se formó de los

ideales de Montesquieu y tampoco en la influencia de Locke o Blackstone. La

Asamblea no pudo confiar en de manera en el poder que se le confería al ejecutivo,

por lo que se nivelaron las fuerzas.

La guerra internacional comenzaba a amenazar aún más a la ya grave situación

francesa. La clave radicaba una vez más, en el poder popular y en su idea de mantener

la situación política y económica de su país. Por lo mientras, en Europa se escuchaba

que los reyes buscaban la reimplantación de Luis XVI47, cosa más errónea, pues ¿qué

esperamos cuando un enemigo poderoso se encuentra flaqueando ante la situación

política y económica?

Los burgueses franceses, sobre todo los girondinos, consideraban de gran

ventaja la guerra, porque debido a ésta y con el apoyo de las masas populares en

defensa del territorio francés, podrían asegurar no sólo el apoyo del pueblo, sino

concretar la obra de la revolución, pues debido a la situación, el círculo no lograba

45 Ibid., p. 165. 46 Ibid., y Jardin, Historia, 1998. 47 Ibid.

27

cerrarse. Funcionaría para los girondinos la posición de Luis XVI, quien con la guerra

creía su seguro regreso al poder y el restablecimiento de la monarquía. Los girondinos

apelaron al nacionalismo: “la patria estaba en peligro”,48 por lo que se comenzó con el

reclutamiento de las masas, la Revolución llamaba a las masas patriotas, el acto

libertador contra el invasor solo podría ser detenido por aquel pueblo valiente que

detuvo a la monarquía y que logró su liberación.

A pesar del hambre, de la miseria y la explotación, el pueblo seguía

demostrando que la organización era capaz de afrontar incluso a los ejércitos más

poderosos. Una vez más, el pueblo daba un golpe más a la monarquía, esta vez

definitivo en este primer periodo. Con Danton al frente, el pueblo se opuso a las tropas

monárquicas y las derrotaron, el rey había caído y fue apresado. Se buscaba la

destitución de éste y la proclamación de la República. La asamblea ya no era suficiente

y se convocó a la supresión de la distinción entre ciudadanos pasivos y activos,49 se

formó la Convención.

El ejército prusiano invadió Francia, pero el miedo, como mecanismo de

supervivencia, aunado a la fuerza nacionalista enaltecida por el discurso

revolucionario, son un gran dúo, pues el pueblo se batió ante el invasor. La victoria

frente al ejército en Valmy hizo retroceder a los prusianos, una vez más, la Revolución

triunfa y la Convención decide proclamar la República. Es claro que la burguesía

seguía con el temor a la organización popular, más cuando la Revolución permite el

realce de los denominados líderes: Marat, con el control de la opinión pública por medio

del Amigo del Pueblo y quien gracias a su campaña ganaría una diputación y

Robespierre, indiscutible jacobino.

Sin embargo, ni las victorias en contra de los “contrarrevolucionarios” y los

invasores impedirían una guerra aún más larga que la librada contra Prusia y que la

burguesía aprovecharía al máximo para seguir manteniéndose en el poder. Inglaterra

48 Ibid., p. 167. 49Ibid.

28

era ahora el terrible y eterno rival: “Si separamos lo esencial de lo accesorio, podemos

decir que fue un episodio de la rivalidad comercial y colonial entre Francia e Inglaterra,

cada vez más viva a medida que avanzaba el siglo XVIII. Pues ya en aquella época,

con pretextos insignificantes, dinásticos, confesionales o morales, el interés mercantil

era el que provocaba las guerras”.50

Al igual que como aconteció en los primeros años de la revolución, los

burgueses estaban dispuestos a aprovechar la guerra como forma de empoderamiento

y aumento de sus riquezas, sin embargo, Inglaterra no estaba dispuesta a ceder esa

fuerza con la que también contaba. Uno de los territorios más codiciados por ambas

naciones fueron los Países Bajos, no solo la situación geográfica beneficiaba a las dos

potencias, sino sus propios recursos, así como su aspecto militar. Para Inglaterra

significaba un puente de unión con Europa, mientras que para Francia representaba

un puesto estratégico en la lucha armada en contra de los ingleses.51 Recordemos una

cosa, Francia hasta los inicios de la revolución, se caracterizó por ser un país

altamente campesino, mientras que en Inglaterra, la revolución industrial partía ya

desde el siglo XVIII, por lo que existía una gran ventaja del segundo sobre del primero.

Francia tenía un atraso de veinte años con relación a Inglaterra. Hasta 1780

aproximadamente no empezaron las jennies, pequeños mecanismos

manuales, a substituir a los antiguos engranajes arcaicos. En 1790, había sólo

unas novecientas, aproximadamente, en toda Francia. La hilandería mecánica

seguía siendo una industria doméstica, dispersa por los campos y las

viviendas urbanas. Entre 1787 y 1790 aparecieron las primeras máquinas de

hilar de invención británica: el water-frame de Arkwright, la mule de Crompton.

Desde entonces, la hilandería abandonó la estructura artesanal y se concentró

en la manufacturas.52

50 Guérin, Lucha, 1974, p. 35. 51 Ibid. 52 Ibid., p. 37.

29

Esta fue una de las oportunidades más claras que se vieron desde el gobierno y las

fábricas francesas para comenzar a acelerar el proceso de abolición feudal. En la

acción revolucionaria, era claro que la abolición del feudalismo no se generaría de

manera espontánea, sino que lógicamente tenían que comenzarse a dar procesos

políticos y económicos que dieran cabida a la instauración del capitalismo como

sistema de producción. Para poder acelerar dicho proceso el pensamiento liberal que

radicaba en el gobierno revolucionario, decidió optar por la competencia, es decir, dar

paso al libre mercado. La entrada de empresas extranjeras permitiría la rápida

evolución de fabricación y mejoramiento de las mismas fábricas, estimulando así la

industria nacional y la inserción de maquinaria.

Al tiempo que la máquina era insertada en las fábricas francesas, comenzaba

una producción más acelerada. La empresa de guerra fue una de las más beneficiadas

en este aspecto. La guerra entre Inglaterra y Francia era cada vez más latente. Las

industrias de fabricación de armas comenzaron a crecer a la par de la miseria que

continuaba en el campo y en las ciudades. Campesinos y artesanos cercanos a las

fábricas comenzaron a aproximarse dejando a un lado sus posesiones o tierras así

como los pequeños talleres viéndose en la necesidad de transformarse en

trabajadores asalariados.53

Este fenómeno surgió a raíz de la secularización y estatización de los bienes,

tanto de la Iglesia como de la nobleza francesa y los gremios.

Cuando la Constituyente había decidido la confiscación de los bienes

nacionales, había obedecido a un pensamiento doble: enriquecer a la

burguesía y paliar el déficit presupuestario; intenciones contradictorias, por lo

demás, pues, para llenar los bolsillos de los burgueses, los bienes nacionales

no debían venderse a precio elevado, y, para llenar las arcas del Tesoro, no

debían fijarse a un precio demasiado bajo. Se fijó un nivel desproporcionado.

53 Ibid.

30

La burguesía pagó un precio justo, muy ventajoso para ella, y obtuvo enormes

facilidades de pago.54

Estos precios eran inalcanzables para los pequeños campesinos, quienes a la

larga, además de no poder adquirir las tierras, fueron absorbidos por los campesinos

acomodados quienes terminaron por asimilar a esos pequeños propietarios y que

culminaron por transformarse en la fuerza de trabajo en las fábricas de los nuevos

grandes capitalistas.

Nuevamente, el discurso revolucionario se veía tergiversado por aquellos que

se encontraban en el poder. Podemos poner como hipótesis que el discurso

revolucionario que tenía tras de sí a la burguesía, permitió la concienciación de las

masas campesinas y trabajadoras que dio cabida, en principio, a la organización desde

arriba, para después a la autoorganización obrera y campesina.

La extensión repentina que había alcanzado la industria de guerra, la creación

de enormes fábricas de armas había producido un comienzo de concentración

industrial, habían reunido a millares de obreros en talleres comunes.

Numerosos artesanos independientes se transformaron en proletarios. Como

disponían de la posibilidad de ponerse de acuerdo, aquellos trabajadores

entraron en lucha por una mejora de su paga pero tenían frente a ellos a un

Estado-patrón que hacía reinar en sus talleres una disciplina militar, que

disponía de poderosos medios de represión. Esa es la razón por la que los

conflictos en ellos fueron más frecuentes y más violentos que en los otros

ramos de la producción.55

Líneas arriba propuse como hipótesis que el discurso revolucionario no sólo

fungió como discurso para derribar el régimen feudal y nobiliario de la Francia del siglo

XVIII, sino que dio las bases de la organización obrera y campesina, no solo aunado al

régimen de explotación que se dio en las fábricas, sino la ya de por sí fuerte miseria

54 Ibid., p. 151. 55 Ibid., p. 229-230.

31

que asfixiaba a los trabajadores. Es así como los trabajadores comenzaron a

proclamar un salario más justo, que les permitiera vivir de manera más digna, pero la

burguesía y el régimen revolucionario ya tenían planes diferentes que los beneficiarían.

Las organizaciones obreras fueron dirigidas por hombres cercanos al pueblo…

para sentir sus sufrimientos, pero no esclavizados al largo trabajo cotidiano,

que habían aprendido en los bancos de los colegios burgueses el arte de la

palabra, la tomasen en nombre y en lugar de los descamisados. Jacques

Roux, Teóphile Leclerc, Jean Varlet, a quienes sus adversarios calificaban

con el nombre de enrangés («rabiosos»), fueron en 1793 los intérpretes

directos y auténticos del movimiento de las masas […].56

Sin embargo, estos intelectuales dirigentes de las masas trabajadoras no las

representaban en su forma total, pues su discurso iba dirigido, sí a las clases

poderosas que gobernaban Francia, pero a favor de los pequeño burgueses que

fueron afectados por la reparticiones de los bienes nacionales, hacia los artesanos que

se vieron mermados en su propiedad, esto es, el trabajo de los “rabiosos”, fue el de

defender la propiedad privada de una clase media, por decirlo en un concepto más

contemporáneo.

A pesar de ese carácter combativo, muchos de estos dirigentes de las masas,

como Danton, Robespierre, Hérbert, Brissot, Condorcet o Roland y los mismos

rabiosos, se enfocaron en la defensa de la propiedad privada. Repudiaban el hecho

de crear una ley agraria, la participación directa del pueblo en la organización regional

y nacional, a la soberanía nacional. Pero sí pugnaban por el parlamentarismo como

forma de organización política y económica, centralizando así el poder en un solo

círculo gobernante.57

En estas circunstancias de luchas entre los Girondinos y los Jacobinos que

culminan con la muerte de Luis XVI el 21 de enero de 1793 y más tarde la instauración

56 Ibid., p. 55. 57 Ibid.

32

de una nueva Constitución en la que se descentraliza el Estado, se vuelve a refirmar

la idea de la propiedad privada. “La Constitución de 1793 es el primer texto legislativo

que toma en cuenta al pueblo, aunque excluía del sufragio universal a las mujeres, los

soldados, los criados y los jornaleros agrícolas”.58 Mientras que Hobsbawm comenta:

“El feudalismo no se abolió finalmente hasta 1793. A finales de agosto la revolución

obtuvo su manifiesto formal, la Declaración de los Derechos del Hombre y del

Ciudadano”.59

El gobierno consideró que la Constitución decretaba el objetivo de la revolución,

por lo tanto, ésta había concluido. Habiendo la revolución alcanzado sus ideas y

objetivos, no había razón más para luchar, la monarquía fue reducida, el sistema feudal

fue abolido, por lo cual, las masas populares debían ser desarmadas. Pero la verdad

es que el hecho de que se abolieran los derechos de las clases gobernantes

monárquicas y se implantara un régimen republicano liberal este no contribuiría al

mejoramiento en las condiciones de los campesinos y los trabajadores urbanos. “[…]

el pueblo grita su hambre, la Convención sabe que es incapaz de resolver el problema

económico, puesto que no tocará jamás a los responsables, los especuladores, que

tan difícilmente se hacen entregar certificados de civismo”.60

Los descontentos en el país no se hicieron esperar, por lo que se optó por una

medida, en una perspectiva de autosalvación, de implantación del terror. El régimen

del terror comenzó. Todo aquel sedicioso sería considerado sospechoso. Francia

pasaba por momentos de pánico, la menor consideración hacia un país se tomaba

como traición y fomento a la invasión extranjera, los rencores personales o las

injusticias podían aprovecharse para generar la culpabilidad entre los ciudadanos, la

guillotina esperaba impaciente.61

58 Ribard, Historia, 1941, p. 171. 59 Hobsbawm, Revoluciones, 1980, vol. I, p. 119. 60 Ribard, Historia, 1941, p. 171. 61 Ibid.

33

La Convención decidió reafirmar la prohibición de la unión obrera, la propiedad privada

era intocable y la burguesía no debía ser molestada. Los revolucionarios no soñaban

con la abolición de la propiedad, como se ha ilustrado líneas arriba, ni siquiera entraba

en sus planes, por el contrario, personajes como Saint-Just, buscaban, en el ideal

rousseauniano, la idea de una República burguesa. Por un lado la guerra de invasión,

y por otro la sublevación popular en contra de la miseria, mantenía al país galo entre

la espada y la pared. La guerra era más apremiante y es necesario el reclutamiento

con la finalidad de soportar ambos embates, sobre todo el internacional. Las victorias

en Wattignies, Alsacia, Tolón y la derrota en contra de insurreccionalistas en Lyon,

fortaleció las figuras de Sain-Just, Robespierre y Billaud-Varenne.62 El segundo vio la

necesidad de aumentar el terror; la corrupción de altos mandatarios, el apoyo a la

contrarrevolución y a los enemigos de Francia, la conspiración, fueron razones

suficientes para la pena de muerte.63 Pero Robespierre, ciego en su idea de mantener

los ideales de la revolución, fue ofuscado por su propia efigie y se alejó de los ideales

jacobinos, se ganó el desagrado de las masas populares, fue tejiendo rápidamente su

propia caída. En julio del siguiente año -1794- es pasado por la guillotina. Tras de

Robespierre, siguieron otros como Saint-Just.

La convención decidió reponer a los girondinos y suprimir el club Jacobino.

Llegaría un momento de éxito para la República. Lo que el gobierno necesitaba era

apaciguar las revueltas y mantener a raya a los países que pretendían arrebatar o

recuperar territorios antes conquistados. Lo que se necesitaba era armar, alimentar,

vestir y pagar al ejército.64 De esta manera hubieron dos beneficios implícitos: por una

parte, y como se mencionó, el refuerzo de las fuerzas militares para el sostenimiento

del control y, en segundo lugar, el apoyo al sector burgués por medio del aumento de

fabricación de armamento militar. Para aumentar la producción armamentística, fue

necesario elevar el número de mano de obra, por lo que las mujeres fueron incluidas

en estas tareas. “Los principios abstractos y la violencia popular podían ser utilizados

62 Ibid. 63 Ibid. 64 Goubert, Historia, 1987.

34

como instrumentos, pero el propósito era establecer el dominio incuestionable de la

burguesía”.65 De esta manera, no solo se confirmaba el poder de los girondinos y la

burguesía, sino que permitió el aumento de las riquezas, a raíz, también, de los

impuestos obligatorios de los países sometidos, así como su explotación. El beneficio

económico se monopolizó, mientras la industria de la guerra era grandemente

beneficiada, los demás trabajos decayeron en gran medida al alza de los precios, al

aumento de la inflación a la especulación y al acaparamiento de los alimentos.

El descontento aumentaba, por lo que no hubo más remedio y “se desarmó a

los obreros, la penuria se hizo atroz, los acaparadores multiplicaron sus fortunas y para

afirmar claramente su voluntad, la Convención votó una Constitución que abolía la del

93 y restablecía el sufragio restringido según un censo más alto que el de la

Constitución del 91”.66 Finalmente, se firmó la paz en Basilea entre la Convención e

Inglaterra en el mes de julio de 1795. Nuevamente, se refirmaría el poder burgués,

pero era necesario mantener los ideales de la Revolución y terminar con los futuros

ideales de la nobleza que hasta ese entonces continuaba disputando su lugar en el

poder francés. Se eligió un Directorio, el cual se encargaría de elaborar una nueva

Constitución que siguiera manteniendo los privilegios.67

En octubre del mismo año, se convocó a elecciones, en las cuales la

Convención debería ser disuelta, pero en París, un gran ejército marchó con el objetivo

de destruir la República e instaurar nuevamente la monarquía. Se intentó tomar la

Asamblea,68 pero el alzamiento fue reprimido por un joven general de 26 años. Este

joven corso, Napoleón Bonaparte, era para la mayoría de los oficiales del ejército,

considerado como una persona intrigante e imbécil, beneficiado por personajes

oscuros que no buscaban sino un beneficio69 y que, sin embargo, toda la burguesía

organizada “había venido buscando largamente una espada a fin de que asegurase el

65 Guérard, Breve, 1966, p. 137. 66 Ribard, Historia, 1941, p. 175. 67 Ibid. 68 Ibid. 69 Goubert, Historia, 1987.

35

nuevo orden: Bonaparte fue un enviado del cielo. El golpe de Estado contra el

Directorio fue preparado desde dentro”.70

Si bien fue Sieyès el orquestador de la ascensión de Bonaparte, éste último

consiguió la simpatía de la burguesía debido a sus campañas militares, sobre todo la

que sucedió en Italia, pues anexó a Francia todo el territorio italiano, fue considerado

el salvador de la Revolución.71 Esto dio comienzo a la cacería, la Guardia Nacional fue

confiada a la burguesía de los barrios de París, por lo que se comenzó a perseguir y

suprimir lo que restaba del Club Jacobino y se prohibió la palabra “revolucionario”.72

Aun así, y pese a la represión, “reaparecen algunas sociedades democráticas,

circulan hojas sueltas y carteles con proclamas hostiles al gobierno. Aunque éste

prohíbe los grupos y persigue a todos aquellos que reclaman la Constitución del 93, la

agitación se agrava”.73 Nuevamente surge un personaje carismático, seguidor de las

ideas de Marat y en el cuál, los últimos grupos demócratas pusieron su fe: François-

Noël Babeuf,74 proclamó el comunismo y se publicó el Manifiesto de los Iguales. “El

manifiesto circula de mano en mano por tabernas, talleres y círculos obreros. […] Entre

sus premisas, la de suprimir al «corruptor universal: el dinero», es decir, el grupo

pretende instaurar una sociedad agraria, colectivizada y con un sistema económico de

trueque o intercambio, como en el antiguo sistema comunal”.75

El Directorio, que se encuentra tras las decisiones de Bonaparte, lo obligó a

cerrar el club demócrata del Panteón. Esto no detuvo a los Babeuvistas y comenzaron

a editar periódicos y folletos, el periódico más conocido es Le Tribune du Peuple,

donde instaba a los trabajadores a la acción revolucionaria. El grupo tenía aceptación

entre las masas y algunos oficiales del ejército. Sin embargo, la publicación lo llevó a

70 Guérard, Breve, 1966, p. 139. 71 Hobsbawm, Revoluciones, 1980, vol. I. 72 Goubert, Historia, 1987. 73 Ribard, Historia, 1941, p. 178. 74 Por cuestiones temáticas y de espacio, no podemos centrarnos en la figura de este personaje, pero

para mayores referencias, se recomienda el libro de Ángel Cappelletti, Etapas del pensamiento socialista, Buenos Aires, Libros de Anarres, 2007. 75 Marin, Anarquismo, 2015, p. 35.

36

ser amenazado de arresto, por lo que Babeuf se vio en la necesidad de refugiarse.

Pero las conspiraciones continuaron, el trabajo revolucionario no cesaba, y la situación

social y económica llevó a los conspiradores a negar la lucha pacífica y verse obligados

a la lucha revolucionaria con la finalidad de instaurar el comunismo republicano.76 En

ese momento, Babeuf decide cambiar su nombre al de Gracchus, como homenaje a

los hermanos Graco de la antigüedad.

Por medio de Le Tribune du Peuple se da comienzo a la agitación popular y

obrera de manera clandestina, pues el régimen colocó espías y mensajeros que se

encontraban al acecho de los conspiradores. Y es debido a esta agitación

propagandística que en abril se suprimió la libertad de prensa,77 pero esto no detuvo

la propaganda e incluso empezó a filtrarse entre el ejército y la misma policía. Los

trabajadores se reunían en lugares públicos lo que generó la alarma. En las plazas y

las calles se hablaba de la situación mísera en la que se encontraban, las masas se

enardecieron lo que provocó la represión de manera violenta. Estos actos por parte

del gobierno, en vez de intimidar a los sectores populares, acrecentaron el malestar

social. El grupo de Babeuf y él mismo, empezaron a ver con gran optimismo el enojo

de las masas y deciden adelantarse a la insurrección, en una reunión del 10 de mayo

son descubiertos y detenidos,78 Grisel había traicionado a los conspiracionistas.

“Todos los implicados son detenidos y juzgados en un proceso de tres meses.

Babeuf y Darthé, tan radical que ni mira al jurado al que desprecia, son ejecutados.

Los demás salvan la vida: son deportados y pronto vuelven a la lucha, todos, hasta el

final de sus días”.79 Esta acción por parte de los revolucionarios, sería uno de los

primeros ejercicios socialistas verdaderamente y en los que se pensaba a las clases

populares como contrapuestas a las clases dominantes. Además de dejar sus bases

socialistas en personajes como Barbés, Blanqui, Teste, Voyer d’Argenson, Bernard,

76 Cappelletti, “Babeuf”, 2007. 77 Ibid. 78 Ibid. 79 Marin, Anarquismo, 2015, p. 36.

37

Meillard y Nettré que mostrarían sus tendencias autócratas en asociaciones como La

Sociedad de las Familias y La Sociedad de las Estaciones.80

Lo que hizo la Revolución Francesa no fue crear el socialismo como

movimiento social vivo y continuo, sino, más bien, convertir por primera vez

en una lucha política el antagonismo entre ricos y pobres, y sustituir con este

antagonismo los anteriores entre las clases privilegiadas y las no privilegiadas,

preparando el terreno para las prolongadas luchas sociales de la Europa del

siglo XIX, de las cuales nació el movimiento socialista moderno.81

De esta experiencia aprenderán los luchadores a saber esperar y tener en

cuenta que para un ejercicio de tal magnitud, sería necesaria la unión total de los

pueblos. En 1798 se realizaron nuevas elecciones, en las cuales resultaron

vencedores los jacobinos y al siguiente año (1799), los jacobinos vuelven a vencer, a

esta serie de hechos se les denomina: “Golpe de Estado Floreal”, el primero, y “Golpe

de Estado Pradial” el segundo, constatando la fuerza de los jacobinos, éstos

emprendieron una serie de persecuciones en contra de los emigrados, quienes habían

vuelto tras el ascenso de Bonaparte, al igual que en contra de los acaparadores y

dando un gran golpe a la burguesía decretando una ley de impuestos en su contra.82

El regreso de Napoleón Bonaparte significó un gran beneficio para la burguesía

que necesitaba que se restableciera el orden. Sieyès buscaba el poder y el control y

trató de encontrarlo por medio de Bonaparte. So pretexto de un complot, las Cámaras

decidieron trasladarse a la región de Saint-Cloud, éstas al cuidado de Bonaparte. El

19 de noviembre se suscitaron arengas en una de las Cámaras por lo que los militares

hicieron su intervención, así fueron sacados los diputados. El plan que pareciese

fracasar en un momento, logró concretarse al juntar a una cantidad de diputados que

80 Rocker, Influencia, 1945, p. 74. 81 Cole, Historia, 1964, t. I, pp. 26-27. 82Goubert, Historia, 1987.

38

formaron un triunvirato con el fin de dominar a Bonaparte.83 Finalmente, el gran asenso

de Napoleón Bonaparte se dio por unos cuantos personajes.

Napoleón Bonaparte es una leyenda per se, debido a las circunstancias en las

que se encontraba Francia a principios del siglo XIX. Fue un personaje muy acogido

por la burguesía que confiaba en su capacidad de mantener el control de los

movimientos insurreccionales que con más frecuencia comenzaban a darse, pero lo

que más se esperaba de éste, era que pudiese aumentar el capital monetario de

aquellos dueños de tierras y fábricas. Este fue uno de los aspectos importantes en el

personaje de Bonaparte y tal vez una de las críticas más fuertes hacia su figura como

líder, fue la de estar sujeto a los mandatos de la clase burguesa, puesto que no solo

reprimió movimientos sociales, como ya lo he descrito, sino que protegió e hizo crecer

los negocios capitalistas, muchas veces bajo el cobijo de su fama como militar,

engañando a los sectores populares.84

Durante su mandato, continuó la idea de seguir con la venta de las tierras y

propiedades que durante la fase revolucionaria y posrevolucionaria consiguieron

aumentar el capital y que impulsó el sector manufacturero de vestido y armamentístico.

La venta de estas propiedades le ganó la fidelidad burguesa y apoyo incondicional,85

por lo menos, hasta que esta clase lo necesitase. Otro aspecto de gran relevancia a

tomar, fue en la cuestión gubernamental, Bonaparte, para 1800, fue quien asignó

administradores, jueces, recaudadores e incluso a los representantes de la Iglesia,

eligiendo de igual manera a los regentes de las municipalidades, claramente todos

representantes de la clase burguesa, dejando a un lado a los sectores más

desfavorecidos que se encontraron a merced de los acaparadores.

Para 1804 es nombrado emperador. Este nuevo gobernante, a comparación de

la nobleza feudal, trajo consigo la idea de una nobleza totalmente capitalista, realizó

un bloqueo comercial a Inglaterra en la búsqueda de favorecer a los capitalistas galos.

83 Ibid. 84 Ribard, Historia, 1941. 85 Goubert, Historia, 1987.

39

Lo logró llevando a cabo una centralización estatal y distribuyendo el poder del imperio

entre sus hermanos José y Luis, dando al primero el territorio de Nápoles y al segundo

Holanda.86 Se decretó el cierre total en contra de los ingleses y sus productos, pero

Prusia y Rusia se resistirían, por lo que son atacados y vencidos. El zar Alejandro

decidió crear una alianza junto a Napoleón y así concretar el bloqueo en contra de

Inglaterra de manera continental. De este modo, Inglaterra sólo contaría con los

Estados Unidos como su principal cliente, mientras que en Francia los negocios se

acrecentaron de manera formidable. Napoleón consolidaba al Estado francés.

“La agricultura fue favorecida por el bloqueo. Los cultivos recientes fueron

intensificados y la patata sirvió para alimentar a los pobres y al ganado. Aparecen

productos que sustituyen a aquellos que venían antes de ultramar, vía Londres”.87 De

este modo, se lograba impulsar al agro quien se vio beneficiado con el aumento de los

rebaños, lo que a su vez generaba el alimento al igual que se apoyó el establecimiento

de fábricas.

Pero era más que claro que todos estos beneficios no serían para toda la

población. Mientras en las calles parisinas la nueva nobleza se paseaba con gran

ostentosidad, la vida diaria de los trabajadores no era mejor. La prosperidad estatal se

basaba en una jerarquización social en la que en la base estaban los obreros

sometidos a un sistema de dominio, el cual ejercía el control sobre los mismos,

nuevamente prohibiéndoles coaligarse y menos aún, ejercer el derecho de huelga.

En 1806, el emperador crea consejos arbitrales para juzgar los conflictos del

trabajo; pero los trabajadores están representados en ellos por sus jefes de

taller y la mayoría les está asegurada a los patronos. A la elevación de los

precios estaba lejos de corresponder la elevación de los salarios y la vida

obrera siguió siendo miserable. En su profunda miseria, los trabajadores

iniciaron la ayuda mutua. Sus sociedades de beneficencia se denominarán

86 Ribard, Historia, 1941. 87 Ibid.

40

mutualidades, y adoptarán esta divisa: “Rechazados en todas partes, se

ayudan a sí mismos”.88

Las mutualidades fueron suprimidas y desaparecieron paulatinamente

agravando la situación de los trabajadores. Pero esto no fue el único motivo por el que

comenzaría el declive del gobierno napoleónico. “La creación de la corte imperial, con

su fasto y sus melindres imitados de los borbones, disgustó por tanto, a aquellos a los

que no seducía. Desde 1809, el conflicto con el papa indispuso evidentemente al clero,

a muchos católicos y a los realistas que se habían unido a él”.89 No sólo eso, sino que

además, las contradicciones europeas comenzaron a minarse. La caída de Inglaterra

no llegaba y los países aliados a Francia no soportaron más. Las exportaciones

francesas cejaron lentamente y el emperador tuvo que recurrir a reglamentaciones que

contrariaban totalmente el espíritu burgués-capitalista. El mercado se le fue cerrando

y los países sometidos o aliados comenzaron a protestar. “Además, reaparecieron las

viejas crisis cerealistas como reminiscencias típicas del Antiguo Régimen. Hubo una

primera alerta en 1805; una segunda, mucho más grave, en 1811-1812, se dobló el

precio del trigo, hubo agitación en los mercados, saqueo, revueltas (en Caen se fusiló

a varios obreros) e incluso una verdadera escasez”.90 Fuera, Portugal y Roma se

resistieron al bloqueo, Napoleón decidió atacar para imponerse de nueva cuenta.

Camino a Portugal, se encontró con la resistencia española, los campesinos asestaron

un duro golpe venciendo al gran ejército imperial, Bonaparte se vio obligado a dirigirse

personalmente para reinstalar a su hermano en el trono. Después hubo que dar

marcha atrás y dirigirse hacia Austria quien reanudó la guerra; los españoles vuelven

a sublevarse.

Mientras tanto, Rusia decidió no esperar más y terminó con el bloqueo en contra

de Inglaterra. Si bien el bloqueo favoreció el crecimiento de la industria, especialmente

la textil, el comercio con la gran isla era más favorecedor.91 Poco a poco, el poder fue

88 Ibid., pp. 186-187. 89 Goubert, Historia, 1987, p. 236. 90 Ibid., p. 237. 91 Ribard, Historia, 1941.

41

consumiéndolo, haciéndole incapaz de mirar que la grandeza a la que creía estaba

destinado se iba a derrumbar. Bonaparte intentaría dar un último golpe a Rusia,

invadiéndola y lográndolo. Entró en Moscú y decidió mostrar su poder incendiándola,

pero el invierno se adelantó dos meses, el ejército empezó a carecer de provisiones

por lo que debió de retirarse derrotado y perseguido por los cosacos.92

Prusia se había levantado también, y, a pesar de ser derrotada en Lutzen,

Bautzen y Dresde, no sucumbió, por lo que Austria se alió a los prusianos venciendo

a los franceses en Leipzig. Más tarde, Bélgica y Holanda decidieron seguir por el

camino de los demás países, pero Bonaparte vencería en 1814 a la orilla del Aube.93

Las victorias dan ánimos a su ejército y el emperador buscaba firmar la paz con los

países aliados, pero apareció en escena uno de los actores principales y que estuvo

sigilosamente preparando la caída del país francés. “La coalición que Inglaterra había

levantado contra él encontraba su mejor aliado en la burguesía francesa, cansada de

un régimen que no favorecía ya sus intereses”.94

Napoleón tuvo que abdicar y se vio obligado a exiliarse en la isla de Elba.

Francia redujo su territorio, perdiendo todas sus colonias, volvió a los límites con los

que contaba en 1789. Pese a que es indiscutible que Napoleón dejó de servir a la

burguesía francesa, la cual estaba dispuesta a todo con tal de adquirir beneficios, ésta

tuvo un gran crecimiento durante los primeros años del siglo XIX. Para mal de males,

dio comienzo a el periodo llamado Restauración, época no solo en la que vuelve al

trono un Borbón, sino que significó la etapa del “restablecimiento” del orden social. La

nueva aristocracia estaría formada por banqueros, soldados y un cierto número de

nobles. Esta nueva gente en el poder, sumada a los grandes capitalistas que se

encontraron detrás, vieron en Luis XVIII, el instrumento necesario para concluir su

consolidación como clase dominante.

92 Ibid. 93 Ibid. 94 Ibid., p. 190.

42

“En Francia solamente los ricos tenían voto y se servían desvergonzadamente del

mismo para reforzar sus privilegios”,95 es decir, el Estado se convirtió en uno de los

mejores instrumentos de las clases burguesas para mantener el poder y conservarlo.

En esta misma tónica, los nuevos gobernantes vieron en la Iglesia el aliado que les

permitiría legitimarse, por lo que restituyeron a ésta todos sus derechos, declarando

así la religión católica como la única y cobijada por el Estado. El Estado moderno va a

encontrar en la religión, nuevamente el mejor aliado en la supresión de los derechos

humanos y el control social por medio del mismo miedo hacia lo desconocido. Esto,

frente a las agitaciones que comenzaban a sucederse nuevamente.

Vemos en todas partes y siempre que, cuando la masa de los trabajadores se

mueve, los liberales burgueses más exaltados se vuelven inmediatamente

partidarios tenaces de la omnipotencia del Estado. Y como la agitación de las

masas populares se hace de día en día un mal creciente y crónico, vemos a

los burgueses liberales, aún en los países más libres, convertirse más y más

al culto del poder absoluto.96

La burguesía centrada en el poder estatal dejó a un lado los preceptos de la

revolución: “Libertad, igualdad y fraternidad”, centrándose en el control y el aumento

de poder vía capital. Se arrasó con la comunalidad, como se ha descrito en este texto

y se optó por la propiedad privada como derecho inalienable y natural del hombre.

Siendo éste salvaguardado por el Estado, quien bajo la idea de contrato social “se

convirtió en un arma poderosa para combatir a la realeza de derecho divino”.97

Este periodo, denominado Restauración, en realidad podemos decir que fue el

momento de restablecimiento de los antiguos derechos burgueses y la consolidación

de un Estado fuerte, pero a la vez minimizado debido a la implantación del sistema

liberal.

95 Guérard, Breve, 1966, p. 143. 96 Bakunin, Dios, 2009, p. 110. 97 Kropotkin, “Estado”, 2013, p. 54.

43

Sin embargo, esta revolución, según hoy tenemos ocasión de ver, no

emancipó a todos los hombres, sino a una porción solamente; los derechos

del hombre no pasaron del estado de teoría: la garantía de la propiedad

individual que se proclamó al mismo tiempo convirtió en ilusorios tales

derechos. Una nueva clase de poseedores avaros empezó la obra de

acaparamiento; la burguesía sustituyó a la clase gastada, escéptica y

pesimista de la vieja nobleza, y con una ciencia y un entusiasmo que jamás

habían tenido las antiguas clases directoras, se ocupó en explotar a la multitud

desheredada. En nombre de la libertad, la igualdad y la fraternidad cometieron

desde entonces toda clase de iniquidades.98

Y ante esta clase de desigualdades, comenzaron a surgir elementos

subversivos a los que se les denominó “carbonarios”, en los cuales destacaron las

figuras de Buonarroti, amigo y seguidor de Babeuf, quién intentó restablecer la

Conjura de los Iguales y Blanqui, que trató de mantener viva la memoria del Amigo

del Pueblo de Marat.99 La burguesía continuó representándose a sí misma durante

los siguientes años, la lucha de las clases medias -intelectuales y pequeños

empresarios- emprendieron una nueva batalla por el voto universal, mientras los

grandes capitalistas no les cederían el paso. En tanto, la vida en los estratos sociales

no mejoraba:

Esta angustia llega al extremo de un sufrimiento sin precedentes: el

maquinismo ha penetrado en Francia y las atrocidades que Inglaterra ha

conocido se abatirán sobre nuestra población obrera. Sus condiciones de

existencia se habían vuelto peores que el presidio: se empleaba a niños de

seis años que se levantaban a las cinco de la mañana para marcharse al

trabajo; las jornadas de dieciséis horas eran cosa corriente y a menudo

llegaba a dieciocho horas de pie en el taller, sin aire y sin ver jamás la luz del

día; no había seguro, ni médico, ni medicinas, y los salarios bastaban apenas

98 Reclus, Evolución, 2015, p. 25. 99 Ribard, Historia, 1941.

44

para no morir si todos en la familia trabajaban […] A consecuencia de este

tormento, estallan rudas huelgas de la miseria y del hambre.100

No fue posible seguir soportando la miseria, la desesperación era más que

evidente y el pueblo estaba contra la espada y la pared. Los grupos demócratas más

radicales comenzaron a complotar, mientras la represión estatal era llevada al sector

popular. Las matanzas y las persecuciones se hicieron presentes cada vez más y fue

necesario tomar una decisión. “La rebelión en mucho más fácil contra el Estado,

porque hay en la naturaleza misma del Estado, algo que provoca la rebelión. El Estado

es la autoridad, es la fuerza, es la ostentación y la infatuación de la fuerza. No se

insinúa, no procura convertir: y siempre que interviene lo hace de muy mala gana;

porque su naturaleza no es persuadir, sino imponer, obligar”.101

Comenzaron las huelgas y éstas a su vez se transformaban en motines, las

consignas a favor de la lucha se hacen presentes “vivir trabajando o morir

combatiendo”. Recién había iniciado el sistema capitalista y éste comenzó a dar

muestras de que no era algo factible.

Con la revolución iniciada hace algunos años, los franceses perdieron ventajas

que ofrecían las instituciones monárquicas según Burke. “Bajo una piadosa veneración

de los antepasados vuestra imaginación habría alcanzado un alto nivel de virtud y

sabiduría, lejos de las vulgaridades del presente, y os habrías elevado merced al

ejemplo de aquellos a los que deseabais imitar”.102 El movimiento popular, obrero y

campesino encontró en el pacto asociativo libre y en el apoyo mutuo, la salida a las

precariedades y opresiones que devinieron del mismo sistema y que tuvieron su

culminación en la Comuna de París y su trágica derrota años más tarde.

La Gran Revolución, en su forma burguesa, si bien trajo consigo las ideas y la

práctica del pensamiento liberal e ilustrado en la tónica de transformación social,

100 Ibid., p. 200. 101 Bakunin, Dios, 2009, p. 128. 102 Burke, Reflexiones, 1978, p. 99.

45

política y económica, de tal forma que conllevó beneficios a un solo sector -aquel

mismo de derribó al feudalismo- los beneficios no hubiesen sido posibles sin la ayuda

de los sectores más pobres, desde la ciudad hasta los lejanos campos en donde las

ilusiones que prometía la revolución de una vida digna y una mejora económica y su

consecutiva desilusión, permitió mostrar a este sector desheredado el camino de la

lucha solidaria y que la liberación del pueblo debía de ser obra del pueblo mismo,

análisis y visión que tuvieron los pensadores socialistas a lo largo del siglo XIX.

Demostrando así, que el camino hacia una mejor sociedad estaba en el trabajo

colectivo, el apoyo mutuo y la lucha frente a los Estados fuesen o no democráticos.

1.2 El debate: ¿socialismo utópico o socialismo libertario?

El socialismo, específicamente el francés, surge como doctrina durante el siglo XIX.

Dicho concepto no existía hasta ese siglo, el cual surge de la necesidad de combatir

los ideales individualistas que traería consigo la revolución del 89.

Suele confundirse la mayoría de las veces el término socialista con las ideas

que preconizaran Marx y Engels, éste último denominando a los primeros socialistas

como utópicos:

Tratábase por eso de descubrir un sistema nuevo y más perfecto de orden

social, para implantarlo en la sociedad desde fuera, por medio de la

propaganda, y a ser posible, con el ejemplo, mediante experimentos que

sirviesen de modelo. Estos nuevos sistemas sociales nacían condenados a

moverse en el reino de la utopía; cuanto más detallados y minuciosos fueran,

más tenían que degenerar en puras fantasías.103

103 Engels, Socialismo, 2007, p. 45.

46

Pero sería Jeróme Blanqui el primero en definir a estos pensadores como utópicos

mediante su texto: Historia de la Economía Política104 y más tarde, retomado por el

propio Engels.

Frederick Engels, el amigo de Marx, quién divulgaría el concepto de utópicos

en su folleto Del socialismo utópico al socialismo científico (1881), que

condicionó en el futuro la interpretación marxista de estos autores sin

matizaciones sobre cada uno. Señaló que los utópicos partían de una

concepción previa de la naturaleza humana sin tener en cuenta la evolución

histórica que había desembocado en el capitalismo, en contraposición al

socialismo marxista o científico, basado, según él, en la investigación de los

procesos sociales. En todo caso, sus obras o acciones forman parte de la

preocupación europea por solucionar los desequilibrios y desigualdades de la

sociedad industrial emergente.105

Dichos autores -los socialistas utópicos- encontraron sus bases políticas en las

críticas al capitalismo primitivo y reinante en aquellos momentos y en sus

concepciones de las nuevas formas de organización de las sociedades a fin de

contrarrestar el avance del mismo capitalismo, la individualización de las sociedades

por medio de la competencia y la desigualdad. Es ahí donde encontraremos la primera

distinción y definición. El socialismo que divulgaban Saint-Simon, Fourier y Owen106

no encontraba, ni concebía la idea de una lucha de clases, ni siquiera se podía hablar

de una vanguardia proletaria que buscara la abolición del capital por medio de la lucha.

Esto se debió a su propia experiencia pues tanto Fourier como Saint-Simon, vivieron

en carne propia la lucha en las calles de la Francia revolucionaria. Se dieron cuenta

104 Cole, Historia, 1964, t. I. 105 Paniagua, Breve, 2012, p. 27. 106 Mencionamos a estos tres autores como los principales en la teoría socialista y quienes trascendieron gracias a sus trabajos y propuestas, pero no olvidamos que existieron otras tendencias o continuaciones a las corrientes de estos tres autores tales como Victor Considerant, seguidor de Fourier, el mismo Pierre Leroux, Etienne Cabet o las primeras manifestaciones como la que encabezó Babeuf de quien se habló en el texto o William Godwin. Pero tampoco las mujeres se quedan atrás, tenemos a quien fuese la compañera de Godwin, Mary Wollstonecraft o Flora Tristán, seguidora de las ideas de Saint-Simon y Fourier.

47

de que “las raíces del mal social se hallaban a demasiada profundidad para que fuera

posible eliminarlas simplemente mediante medidas violentas; además, no se podía

esperar en aquel entonces, apoyo alguno de las masas agotadas por largas guerras y

sus consecuencias secundarias”.107 El socialismo propugnaba un cambio pacífico de

las sociedades por medio de la organización de las mismas.

Saint-Simon, Fourier y Robert Owen coincidían, a pesar de sus muchas

diferencias, en el punto de vista esencialmente social. Esto era verdad por lo

menos en tres sentidos diferentes, aunque relacionados. En primer lugar, los

tres consideraban la “cuestión social”, con mucho, la más importante de todas,

e insistían en que, por encima de todo, la tarea de los hombres de bien era

promover la felicidad y el bienestar generales. En segundo término, los tres

consideraban esta tarea completamente incompatible con la continuación de

cualquier orden social que se basara en una lucha de competencia entre los

hombres por obtener los medios de vida, o que la fomentase. En tercer lugar,

los tres desconfiaban mucho de la “política” y de los políticos, y creían que la

dirección futura de los asuntos sociales deberían ejercerla principalmente no

los parlamentos o los ministros, sino los “productores”, y que si el aspecto

económico y el social de los asuntos humanos pudieran organizarse de

manera adecuada, las formas tradicionales del gobierno y de la organización

política serían pronto invalidadas, y un mundo nuevo de paz y colaboración

internacional reemplazaría el antiguo de los conflictos dinásticos e

imperialistas.108

En su estudio sobre el Romanticismo Social, Roger Picard hace alusión a esta

corriente de pensamiento, hasta cierto punto devenida del propio Rousseau y algunos

iluministas franceses. A diferencia del romanticismo alemán, el romanticismo francés

fue criticado por su excesivo uso de la imaginación y la desmedida pasión con que los

107 Rocker, Influencia, 1945, p. 49. 108 Cole, Historia, 1964, t. I, p. 11.

48

textos eran elaborados,109 arguyendo su poco uso del racionalismo y más influenciado

por el sensualismo. En un primer momento, este romanticismo tan característico,

enarboló la unidad entre máquina y trabajador creyendo que estos serían compañeros

en la lucha por la liberación social. El contexto descrito en la primera parte de este

capítulo desmintió de manera paulatina a estos románticos, iniciando una segunda

etapa de crítica social.

Los objetivos sociales por parte de los autores mencionados, les valdría el

nombre de utópicos. “Ante todo, es necesario rechazar por inadecuada y tendenciosa

la interpretación de Engels, según el cual todo socialismo premarxista es ‘utópico’, por

oposición al marxismo, que sería el único socialismo ‘científico’. De hecho el primero

que concibió el socialismo como ciencia fue Proudhon, del cual Marx tomó

probablemente la idea”.110

Sin embargo, dichos autores llamados utópicos, además de centrar su análisis

en la cuestión social y específicamente el caso de Saint-Simon y Fourier, fueron ellos

quienes realizarían los primeros estudios y críticas al sistema capitalista. Así como la

crítica a la mecanización del trabajo y cómo éste fungiría de una forma mejor

contrarrestando el esfuerzo humano y no sustituyéndolo, dando espacio al

esparcimiento y al gozo de la vida y las relaciones sociales.111 En otras palabras, sus

estudios, se basan en análisis sociales, económicos y políticos varios años antes que

el mismo Marx, quién retomaría estas ideas para sus posteriores trabajos.

Estas concepciones y trabajos les valen más la definición de libertarios. El lector

se preguntará ¿por qué no anarquistas o ácratas? Esto se debe a que en ciertos

aspectos, los socialistas no optan por una abolición total del Estado o a la destrucción

de éste, en cierto modo, de manera revolucionaria. “Comprendían que era imposible

querer, por medio de la violencia, llevar las cosas a su madurez, puesto que se

encontraban en la primera fase de su desarrollo natural y que, por el momento, solo

109 Picard, Romanticismo, 2005, pp. 34-35. 110 Cappelletti, Prehistoria, 2006, p. 124. 111 Marin, Anarquismo, 2015.

49

habían encontrado un eco espiritual en una pequeña minoría”.112 Propugnaban por la

libertad social de manera pacífica, por el mejoramiento económico y político en pos de

la misma sociedad mediante una nueva organización. Por eso su postura se inclina

más por lo libertario que lo utópico. Y es menester hacer mención que en algunos

casos, estos autores mostraron una posición contraria no definiéndose como

anarquistas e incluso definiendo a esta concepción como caos y desorden. Incluso,

desde la etimología podemos decir que utópico es considerado aquello que es

irrealizable,113 sin embargo, en el caso de los tres autores, ambos llevaron a la práctica

sus ideales, funcionasen éstos o no, no es correcto hablar de utopismo cuando algo

ha sido llevado a la práctica.

La crítica que Engels hacía a estas corrientes considerándolas como “una

mezcolanza extraordinariamente abigarrada y llena de matices, compuesta de los

desahogos críticos, las doctrinas económicas y las imágenes sociales del porvenir

menos discutibles de los diversos fundadores de sectas […]”.114 Y no entendía como

estudios sociales y económicos que sentaron las bases para la comprensión de la

relación capital-sociedad, trabajo-trabajador y opresión-libertad. Pero, es real que

estos autores hacen lo posible por describir cómo han de ser las sociedades, pero

dentro de las mismas están implícitas esas críticas al sistema contemporáneo; tales

como las condiciones laborales en las que se encontraban los trabajadores, los

campesinos y las relaciones que se fomentan a través de la compleja red en que se

basa el capitalismo.

Pero así como existieron grandes parecidos entre las teorías de los socialistas,

también existieron diferencias, pongamos un ejemplo: Henri de Saint-Simon fue un

teórico de las generalidades, es decir, su pensamiento se basaba en los grandes

cambios, de escala mundial y, sus planes eran de gran envergadura, pues los mismos

cambios traerían consigo producción en gran abundancia, una organización global que

112 Rocker, Influencia, 1945, pp. 59-60. 113 U=No y Topos=Lugar es decir, no lugar o algo que no ha de tener cabida. 114 Engels, Socialismo, 2007, p. 53.

50

culminaría con un gran avance científico, tecnológico y de conocimiento,115 pues

recordemos que Saint-Simon es precursor de la filosofía positivista que retomaría más

tarde Augusto Comte, y de manera paradójica, filosofía con la que tendría que

debatirse Plotino Rhodakanaty seguidor de las ideas de Fourier. En cambio, Fourier,

quien por sus posturas sociales y políticas, es considerado desde una visión más

libertaria,116 partiría de la unidad; del hombre como individuo, de lo que es, lo que le

agrada y le desagrada. Siempre el hombre en busca de la felicidad. Por ello, Charles

Fourier realizó una crítica severa al creciente sistema capitalista, el cual se centraba

en la mecanización de las sociedades y de los medios de trabajo, estaba en contra de

la tecnología y el cientificismo. Y debido a que partía de la individualidad, despreciaba

la producción a gran escala. Optó siempre por comunidades pequeñas pues las

consideraba como las más adecuadas para satisfacer las necesidades verdaderas de

los hombres.117

Si partimos de la unidad, como lo hizo Fourier, no solo da el sentido de

autenticidad a las personas, sino que las involucra en el proceso de colectivización y

por ende de humanización, es por ello que considera que la sociedad industrial

centraliza y mecaniza las relaciones sociales de aquellos momentos. “En sus escritos

intentó diseñar el modo de organización social partiendo de una crítica radical de las

condiciones de vida de la época: la pobreza era la causa principal de los desórdenes

sociales y tenía su raíz en el fraccionamiento de la propiedad individual de la tierra”.118

Aquí encontramos una de las grandes diferencias entre socialistas y

anarquistas. Mientras que Saint-Simon era -hasta cierto punto, pues una de sus

propuestas era fundar un nuevo sistema capitalista- de la idea de abolir la propiedad

privada, Fourier consideraba como de orden natural la idea de la propiedad y su

herencia. Mientras que por su lado Proudhon consideraba a la misma propiedad como

la causa fundamental de las desigualdades sociales y como la idea legitimadora del

115 Cole, Historia, 1964, t. I., p. 69. 116 Cappelletti, Prehistoria, 2006, p. 112. 117 Cole, Historia, 1964, t. I., p. 69. 118 Paniagua, Breve, 2012, p. 27.

51

Estado y sus instituciones, la religión y el poder, que abordaremos más a profundidad

en los siguientes párrafos.

El socialismo francés trajo consigo diversas visiones sociales -principalmente la

de los pobres- en una vasta y rica literatura, ya fuere por los poetas-socialistas (Víctor

Hugo, Honoré de Balzac o Alfred Vigny), o por sociólogos-socialistas (Saint-Simón y

Fourier) y que llevaban de forma inherente el cambio, no sólo la crítica o la descripción

de los diferentes procesos que permitieron el avance del nuevo Estado-nación y del

capitalismo, sino que serían la base de las nuevas ideas revolucionarias119 de corte

materialista invocadas por anarquistas y marxistas en la segunda mitad del siglo XIX y

principios del XX.

Tanto el socialismo llamado “utópico” (libertario) como el anarquismo, han

tratado de ser borrados de la historia y hasta cierto punto, desprestigiados por sus

métodos, sus propuestas y sus visiones del mundo. Desde aquellos estudiosos

intelectuales que han legitimado los sistemas económicos por medio de una

historiografía estatista, hasta intelectuales de “izquierda”. Pero a través de este texto

mostraremos la importancia de conocer y recuperar tales ideales, pues su estudio no

solo nos permite conocer las condiciones en que se encontraban las sociedades del

siglo XIX, sino que nos llevan a la comprensión de las nuevas constituciones de

relaciones intra y extra sociales.

1.3 Charles Fourier: la civilización vs la vida societaria

François Marie Charles Fourier (1772-1837), es uno de los pensadores más seguidos

y estudiados durante y después de su muerte. El punto culminante en su pensamiento

se dio durante las jornadas revolucionarias que se vivieron durante el año de 1968 en

París. Esto debido a la situación mundial, tanto de guerra como económico-social. Las

ideas de Fourier tienen tras de sí la esperanza de una vida social armónica con el

119 Picar, Romanticismo, 2005.

52

mundo en busca de una mejor situación para todos los desheredados de la Tierra, esto

es a lo que llamamos, la felicidad.

Amante de las matemáticas y de las leyes de gravitación descubiertas por

Newton, Fourier funda una teoría llamada a ser el complemento de las mismas leyes

gravitacionales, denominada: Teoría de los cuatro movimientos y los destinos

generales. Esta teoría está basada en que Newton sólo desarrolló la ley de atracción

de los cuerpos, pero Fourier consideraba que Dios120 había creado una ley general,

encontrando éste la teoría complementaria: la atracción de las almas.121

Concluía que nada en este mundo estaba por casualidad, bajo un Movimiento

Universal, las almas estaban predestinadas a la mejora tanto material como espiritual.

Dicho movimiento universal estaba a su vez dividido en cuatro movimientos: a) el

social; b) el animal; c) el orgánico y d) el material.122 En estos movimientos se

encuentran establecidas las ideas que Dios tiene ya realizadas para los cuerpos tanto

materiales como espirituales, esto quiere decir, que la teoría abarcaba no sólo la idea

de humanidad, sino que conformaba la idea de una armonía universal que contaba

entre ellos a los cuerpos celestes.

Pero este tipo de teorías le valdrían las críticas como elucubraciones

“psicóticas” debido a las ideas tan abstractas con las que trabajó. Sin embargo, este

tipo de pensamiento, además de acarrearle estas críticas, le permitió adelantarse en

muchas ocasiones a los propios anarquistas y marxistas respecto a las posturas

pedagógicas, económicas y sociales trayendo consigo una revolución en el

pensamiento y en los paradigmas sociales. “Fourier, crítico agudo del comercio, del

120 Es preciso mencionar que tanto Fourier, como Rhodakanaty pensadores de índole racionalista, no

conciben a Dios como un ser metafísico todo poderoso. Lo conciben como sustancia infinita, es decir, que se encuentra en todo lo que conforma el universo. De este modo, observamos la clara influencia del filósofo Baruch Spinoza en los postulados teóricos del francés y el griego. 121 Cappelletti, Pensamiento, 1990. 122 Fourier, Armonía, 1973, pp. 71-72

53

lucro mercantil, del interés y de la usura, se propone reivindicar las pasiones y

utilizarlas para edificar una sociedad justa y un nuevo hombre feliz”123.

La idea de felicidad en Fourier es uno de sus postulados más importantes, ya

que la considera como uno de los objetivos finales de la humanidad al alcanzar la

armonía universal. “Aquí van a conocer una verdad de máxima importancia: que las

épocas de felicidad durarán más que las de infortunio, como la que vivimos desde hace

varios miles de años”,124 ya que consideraba a la civilización actual como un estado

en que reinaban “la mentira y la industria repugnante”125 pues según él, la civilización

había sido corrompida, negando el desenvolvimiento de las pasiones y oprimiendo de

esa forma la plenitud de las almas atentando contra el estado de armonía al que se

está predestinado.

Según el francés, la humanidad está destinada a una duración de felicidad de

35 mil años y 10 mil de infortunio, esto a lo largo de una evolución humana formada

por periodos en los que es peculiar, pues a pesar de las ideas en que se basa, su

jerarquización de la evolución humana está justificada en la industria:

Periodos anteriores a la industria:

1) Caos, sin el hombre;

2) Primitiva o edénica;

3) Salvaje o de inercia.

Industria fragmentaria o grosera:

4) Patriarcal, pequeña industria;

5) Bárbara, mediana industria;

6) Civilizada, grande industria.

Industria social atractiva:

123 Cappelletti, “Socialismo”, 2006, p. 111. 124 Fourier, Armonía, 1973, p. 75. 125 Fourier, Nuevo, 1995, p. 38.

54

7) Garante, media asociación;

8) Social, asociación sencilla;

9) Armónico, asociación completa.126

Esta crítica hacia la industria se debía, en parte, y como se menciona líneas

arriba, debido a que la civilización estaba corrompida y encaminada a la explotación y

opresión de las sociedades, causa principal del estancamiento hacia el estadio

societario. Además, Fourier provenía de Besançon, una pequeña ciudad muy cercana

a Dijon al oeste, en la frontera con Suiza al este, Nancy al norte y Lyon al sur. Por sus

características naturales, Besançon fue considerada por el gobierno francés de vital

importancia en las guerras, pues es una fortificación natural debido al río Doubs que

lo atraviesa y desembocando en el río Saona, formando de este modo una separación

natural entre Francia y Suiza.

Rodeada, además de cerros, la ciudad fue fortificada con murallas y una

ciudadela que le permitieron resistir los embates de ejércitos de ocupación. A la vez

que la cercanía con las grandes ciudades y los ríos, Besançon se convertía en una

ciudad propicia para el comercio. Como tal, hijo de comerciante, Fourier dedicó gran

parte de su juventud al mismo. Este tipo de trabajo le permitió dos cosas: 1) el viajar y

conocer los contextos diversos que se suscitaron en Europa a fines del siglo XVIII y

principios del XIX que lo llevaron a formular sus teorías societarias y 2) su

aborrecimiento del comercio y la industria, lo que dio pie a la idea de una sociedad

falansteriana que explicaré en líneas subsecuentes.

Al siguiente año de la Revolución francesa (1793), es enlistado por la fuerza en

los ejércitos revolucionarios.127 Esto sería suficiente para realizar sus críticas no sólo

hacia la revolución y su sistema económico, también al sistema de enseñanza. “En sus

escritos intentó diseñar el modo de organización social partiendo de una crítica radical

de las condiciones de vida de la época: la pobreza era la causa principal de los

126 Fourier, Doctrina, s. a., p. 14 127 Rama, Ideas, 1976, p. 45.

55

desórdenes sociales y tenía su raíz en el fraccionamiento de la propiedad individual de

la tierra”.128

Los postulados de Fourier, le valieron, por parte de sus mayores críticos, el

llamarlo “mesías”, pues sus ideas se concentraban en el paternalismo, en la protección

de los sectores más desposeídos y de la humanidad por completo, pues como Engels

lo hacía ver: “El proletariado, que apenas empezaba a destacarse en el seno de estas

masas desposeídas, como tronco de una clase nueva, totalmente incapaz todavía para

desarrollar una acción política propia, no representaba más que un estamento

oprimido, castigado, incapaz de valerse por sí mismo. La ayuda en el mejor de los

casos, tenía que venirle de fuera, de lo alto”.129 Lo que Engels no vio y es la crítica

hacia todos los movimientos socialistas, es que todas las teorías provienen siempre

de un sector burgués o pequeño burgués, la diferencia surge en el método y en la

teoría per se que pretende el cambio social. Desde los teóricos como Fourier u Owen

que pretendieron la creación de organizaciones sociales fuera del Estado, hasta

aquellos que proclamaban la idea de una revolución armada, desde la toma del poder

y el mismo Estado (marxismo) con el liderazgo de una vanguardia proletaria, hasta la

abolición total de estos últimos y la toma de los medios de producción optando por la

autoorganización y autogestión popular (anarquismo).

En esta tónica, por llamarlo de cierto modo “paternalista”, Charles Fourier fundó

su idea del Falansterio que debía adaptarse a las teorías anteriores relacionadas con

el desarrollo de las pasiones humanas que implicaban los aspectos materiales y

espirituales y a la construcción del mundo societario como contrapeso hacia el

liberalismo, sistema que solo se basó en el enriquecimiento de un pequeño sector

social.130 El Falansterio debía basarse casi en su totalidad en la agricultura, de ahí su

crítica hacia la industrialización de las sociedades del siglo XIX. “Fourier rechaza todo

autoritarismo […] no contempla para nada el salario, y cree, como después Kropotkin,

128 Paniagua, Breve, 2012, p. 27. 129 Engels, Socialismo, 2007, p. 44. 130 Fourier, Doctrina, s. a., p. 18.

56

que la agricultura debe constituir el fundamento de todo el sistema económico, pero

no sin integrarse con la manufactura y la industria”,131 pues esta debía considerarse

como la ocupación principal de los hombres, además de integrar el cuidado de ganado

y algunas aves de corral. Pero esta idea de una organización autosuficiente e

individualizada, no le daba para concebir el intercambio con otras organizaciones, por

lo que pasaba a convertirse en una sociedad autonómica y de autoconsumo.

Con este pequeño modelo social-individual, dejaba de lado las ideas magnas

de Saint-Simon, basándose -Fourier- en el pequeño trabajo colectivo dejando atrás a

la gran industria que se dedicaba a generar una clase inmóvil, tales como los

especuladores, los banqueros, los comerciantes (intermediarios), que lejos de ser una

clase productiva, se transformaba en parasitismo132 que afectaba el desarrollo social

hacia la armonía universal.

En sus propias experiencias, sobre todo en una que vivió en uno de sus viajes

a París,133 notó que la gente debía pagar más por una manzana de lo que ganaba,

cuando en sus propias ciudades podía producirse y consumirse una manzana/s de

mejor calidad a un precio más accesible. Así, dentro del falansterio, la producción y el

autoconsumo destruyen la idea liberal de competencia individual y de intermediarios

quienes son los grandes beneficiarios del comercio civil.

Las brutales condiciones de trabajo a las que estaban sometidos los obreros

franceses del siglo XIX, llevaron a Fourier a formular una propuesta diferente de éste,

por lo que los hombres debían ser felices con el trabajo que desarrollaban, pues

estaban acostumbrados a producir cosas que no necesitaban en trabajos que no les

gustaban y es por ello que el trabajo debía brindarles todas las satisfacciones y

alegrías posibles y que solo lograrían trabajando en la falange. De hecho, el francés

consideraba que dentro de la falange, el trabajo debía ser participe en el desarrollo de

las pasiones, por lo que éste se concentraría en el trabajo rolado, por ende se abatía

131 Cappelletti, “Socialismo”, 2006, p. 112. 132 Cappelletti, Pensamiento, 1990. 133 Ibid.

57

el aburrimiento y el tedio, cosa que en la civilización los trabajadores buscan el menor

pretexto para distraerse y descansar de la pesada jornada laboral. Con el trabajo

rolado y variado, además de no ser un trabajo cansado, la Falange ofrecía a los

habitantes o “armonianos” el pleno desarrollo de sus facultades físicas e intelectuales

dando paso al impulso de todos sus placeres. Con esto, las personas no tendrían que

dormir más que cinco horas al día,134 por lo que la falange produciría lo necesario para

la subsistencia debido a que descansados y entregados a sus placeres, las personas

producirían con mejor y mayor capacidad.

Sin embargo, y a pesar de todas estas teorías sociales, seguía considerando la

existencia de las clases sociales como forma de mantenimiento del orden universal.

Además, “no era partidario de la abolición de la propiedad privada, sino de

generalizarla de modo que incluyese a los asalariados. Se eliminaría así el antiguo

antagonismo de amo y criado, deudor y acreedor, productor y consumidor”.135 Pero

Fourier fue un revolucionario, no en el aspecto común, sino que involucró en el proceso

de avance social hacia la liberación a la mujer. “La mujer es tratada igual que el hombre

y Fourier explicita la necesidad de la educación igualitaria, así como el respeto a todas

sus acciones”.136

En ese momento la mujer se encontraba sujeta a la servidumbre ante el hombre,

por lo que la sociedad civilizada no estaba alejada de la barbarie: “Los progresos

sociales y cambios de periodo, se operan en razón del progreso de las mujeres hacia

la libertad; y las decadencias de orden social, se operan en razón del amenguamiento

de libertad de las mujeres”.137 Esta máxima libertaria coincide mucho con otra muy

conocida dentro del anarquismo: “No me hago libre verdaderamente más que por la

libertad de los otros, de suerte que cuanto más numerosos son los hombres libres que

me rodean y más vasta es su libertad, más extensa, más profunda y más amplia se

134 Fourier, Nuevo, 1995, p. 104. 135 Rama, Ideas, 1976, p. 48. 136 Marin, Anarquismo, 2015, p. 60. 137 Fourier, Doctrina, s. a., p. 55.

58

vuelve mi libertad”.138 Mientras, como seres humanos y animales, no reconozcamos

en nuestra libertad la libertad de los demás, no podemos ser libres totalmente y de

manera inversa, pues, ¿cómo puede existir la libertad en tanto que existe gente

sometida a sistemas que oprimen su esencia, su naturaleza?

No es posible la negación del Otro, es la negación de uno mismo como ser y

como libertado. Ahí donde existe opresión, no puede haber libertad. Concordamos con

Engels en su análisis al decir que Fourier “es el primero que proclama que el grado de

emancipación de la mujer en una sociedad es el barómetro natural por el que se mide

la emancipación general”.139 Pero, desafortunadamente, Fourier consideraba dicha

emancipación femenina según la evolución social, pues como recordaremos, párrafos

arriba, señalaba que la sociedad debía pasar por una serie de procesos que

culminarían en la fase armónica, y que según su teoría de los movimientos y atracción

de las almas, Dios tendría previsto los destinos de todos los seres, por lo cual, la

emancipación de las mujeres se daría hasta un proceso evolutivo ya avanzado, pues

al adelantarse a dichos destinos predeterminados era atentar contra las leyes

universales:

No pretendo hacer aquí la crítica de la educación civilizada, ni insinuar que se

debe inspirar a las mujeres un espíritu de libertad. Ciertamente, es necesario

que cada periodo social prepare a la juventud a digerir las ridiculeces

dominantes, […] del mismo modo censuraría a un civilizado que educara a

sus hijas en un espíritu de libertad y de razón propios del sexto y séptimo

períodos, al que no hemos llegado.140

El error que no podemos cometer es juzgar las ideas de manera anticipada, por

lo que es necesario colocar a toda persona desde su posición ideológica, política,

económica y social, es decir, comprenderla desde el contexto en el que estaba situado,

de no ser así, corremos el riesgo de no comprender y juzgar de forma errada. No

138 Bakunin, Dios, 2009, p. 122. 139 Engels, Socialismo, 2007, p. 48. 140 Fourier, Doctrina, s. a., pp. 56-57.

59

podemos quitar el mérito de Fourier al incluir a las mujeres en la lucha por la

emancipación, aunque debiendo adecuarse a la evolución social, su idea es inclusiva,

tal y como aconteció con los niños. Las condiciones de la educación en el siglo XIX y

pese a lo que puedan decir algunos autores, era peor que precaria; existía una gran

diferencia entre los postulados que había tomado la Revolución a través de Condorcet

y Pestalozzi y lo que realmente acontecía. El primero propuso la necesidad de que

debiera ser el Estado el encargado de la instrucción, una instrucción pública y gratuita,

que debía ser arrebatada a la monarquía, pues mientras se mantuviese en las manos

de ésta última, las formas de pensamiento monárquico continuarían reproduciéndose.

El Estado tenía que enfocarse en la acción educativa, pues los regímenes

anteriores habían descuidado un factor de suma importancia. La sociedad estaba

sumida en el analfabetismo, y los pocos que tenían una instrucción, se limitaban a la

lectura y escritura básica, generalmente bajo el auspicio de la Iglesia y el método

catequista.141 Esto se lograría una vez que el Gobierno republicano tuviese en sus

manos la maquinaria estatal, esto en todas las instituciones que la conformasen,142

después de ello, sería el propio Estado el encargado de la vigilancia, la dirección y la

elección de docentes en la formación básica.

Por su parte, Pestalozzi, alumno de Rousseau y, éste último fuertemente

criticado por Fourier, pues consideraba que ni siquiera había tenido el valor de educar

a sus propios hijos143 y con ello tener el valor de escribir un tratado pedagógico. “Más

que ningún otro pedagogo de su tiempo, Pestalozzi se interesó por los paisanos; pero

aunque ese sentimiento fue en él generoso y auténtico, no es menos cierto que pasó

la vida educando a niños ricos. Las veces que recogió en su casa a niños pobres, con

la intención de educarlos, actuó como filántropo y como industrial”.144 Es innegable que

este pedagogo, a diferencia de Condorcet, llevó a la práctica sus postulados teóricos,

141 Larroyo, “Pedagogía”, 1950. 142 Ibid. 143 Tomassi, Breviario, 1988. 144 Ponce, “Educación”, s. a., p. 147.

60

mientras que muchas otras quedaron en la palabra y en los buenos sentimientos e

ideales.

Y, aunque los postulados de Fourier quedan, también en la teoría, fundamenta

muchas de las ideas contemporáneas de la pedagogía. “Fourier se preocupa de la

programación minuciosa hasta llegar a la pedantería de una sociedad no industrial

como la indicada por Saint-Simon, campesina y artesana, pero ni simple ni virtuosa

por lo menos en el sentido tradicional”.145 Recuerda que la palabra del niño ha sido

olvidada tanto en el régimen socialista como en el civilizado, por lo que debe tener

acceso a la razón como es en el caso de los adultos.146

Siendo de esta forma, Los niños “recibirían una formación igualitaria, orientada

a descubrir las habilidades y las tendencias de cada uno, para utilizarlas de la mejor

manera posible, dedicándose el 75% a la agricultura y el resto a otras actividades”,147

es decir, vinculaba la educación con el trabajo, aprender haciendo era su postura

educativa y pedagógica. “Dejándoles que eligiesen libremente, decía, adquirirían con

bastante facilidad la clase de conocimiento hacia la cual se sintiesen naturalmente

atraídos”,148 puesto que los niños sentían un placer natural al momento de realizar las

cosas, qué mejor manera de vincular la vida, la escuela y el trabajo que dejando a los

niños desarrollarse en los mismos ámbitos que los adultos, teniendo la libre elección

según sus necesidades, gustos y pasiones. De esta forma, el trabajo era visto no como

tal, sino como una ocupación recreativa.

De igual forma, Fourier retoma la idea del Gimnasio, práctica llevada a cabo en

la Grecia antigua, pues el trabajo manual realizado por los niños y jóvenes no solo

desarrollaba su agilidad motriz, sino que ejercitaba el cuerpo y el intelecto. Según las

edades de los niños, éstos se categorizaban a partir de un nivel de aprendizaje, “de

cuatro a seis años y medio los niños eran ‘querubines’, de los seis y medio a los nueve.

145 Tomassi, Breviario, 1988, p. 56. 146 Fourier, Doctrina, s. a., p. 40. 147 Paniagua, Breve, 2012, pp. 28-29 148 Cole, Historia, 1964, p. 72

61

‘serafines’, ‘liceales’ de los nueve a los doce; ‘gimnasiales’, de los doce a los quince y

medio; después ‘jovencitos’ hasta los veinte; en fin, hermanos adultos”.149

Al existir esta educación colectiva e igualitaria, se dejaban atrás las

desigualdades sociales, pues desaparecía la formación para ricos, acomodados y

pobres al tiempo que el individualismo era borrado del trabajo.150 Además de la

enseñanza práctica, la educación debería dar un peso y promover el aprendizaje de la

escritura, así como difundir el goce de la estética, promover las artes, las letras y las

ciencias.151 Puesto que la educación civilizada se concentraba en la instrucción

enciclopédica, fastidiosa y que coartaba y reprimía las pasiones de los niños que

deformaba los cuerpos y resultaba traumatizante.152 Se encuentra en los párrafos

anteriores una acepción peculiar dentro de las ideas pedagógicas, la coeducación de

clases, Fourier no solo encontraba interesante la educación de sexos, sino que

tampoco debiera existir distinción entre clases sociales, puesto que el desarrollo de las

pasiones infantiles en cualquier clase social podía estar encaminada a los trabajos

manuales o sucios sin distinción de otros más cómodos, por llamarlos de alguna

manera.

Mientras tanto, la educación civilizada estaba enfocada en las ciencias

especializadas y en el estudio del comercio, la jurisdicción, en fin, formas de educación

que jerarquizaban los estratos y mantenían el statu quo. Los pocos trabajadores o

niños que llegaban a la adquisición de una “buena educación”, eran muy escasos y en

muchas de las ocasiones se debía a la necesidad del capitalismo para desarrollar

trabajadores especializados en el manejo de cierta maquinaria.

En condiciones desiguales, volvía a aparecer esa misma diferencia entre

trabajadores del montón, es decir, no adiestrados, capaces de las tareas más

groseras, y trabajadores adiestrados, capaces de las faenas que requieren un

149 Santoni, Historia, 1995, p. 248. 150 Ibid. 151 Ibid. 152 Fourier, Nuevo, 1995, p. 109.

62

nivel mediano de cultura. Pero al lado de los obreros con un mínimo de

educación -obreros no adiestrados-, y de obreros con una cultura mediana -

calificados-, el capitalismo requería además la presencia de verdaderos

especialistas, de una excepcional. Cada progreso de la química, por ejemplo,

no solo multiplicaba el número de las materias útiles y aplicaciones de las ya

conocidas, sino que extendía las esferas de aplicación del capital.153

En ese contexto aparecen las escuelas politécnicas en Europa, encargadas de

la enseñanza especializada en el manejo de maquinaria que requería un nivel alto de

intelecto y enfatizada hacia el desarrollo de las ciencias, mientras que en el falansterio

debía haber una escuela, con una sola educación que destruyera la idea liberal de la

competencia, basada, la segunda, en la solidaridad.

Charles Fourier sigue siendo un pensador enigmático, con delirio de mesías

para algunos, filántropo en busca de una mejor sociedad, precursor de las ideas

anarquistas las cuales no se pueden dudar. Y aunque hoy en día muchas de esas

ideas se tomen por obsoletas, no podemos negar que la comprensión de las ideas

libertarias se debe en gran parte a los socialistas “utópicos-libertarios”.

1.4 Pierre-Joseph Proudhon, padre del anarquismo moderno

Sin dudarlo, muchos de los pensadores y practicantes del anarquismo del siglo XXI,

tienden a considerar a Joseph Proudhon (1809-1865) como el padre del denominado

anarquismo moderno.154

Una de las peculiaridades de este pensador francés, en contraparte a los

socialistas utópicos o los socialistas-marxistas, es su procedencia social, ya que

153 Ponce, “Educación”, s. a., pp. 157-158. 154 En su trabajo llamado “La prehistoria del anarquismo”, Ángel Cappelletti menciona que anteriormente

existieron sociedades que trabajaron y se organizaron bajo el anarquismo práctico, por llamarlo de alguna forma, desde la antigua Grecia, hasta regiones Chinas, sin llamarse meramente anarquistas. Se les denomina libertarias por sus tendencias hacia el mismo anarquismo y su forma organizativa. Esto tampoco implica que no contaran con una teoría propia, por el contrario, tanto las prácticas como las teorías fundadas, permitieron cimentar las bases de lo que se denominaría anarquismo como concepto y definición. Vid. Capítulo 1: “Oriente, Grecia y Roma”, pp. 13-47.

63

provenía de las masas desheredadas al ser hijo de un cervecero y tonelero; y su madre

perteneciente a una familia aldeana.155 Cosa curiosa, Proudhon es vecino de Fourier,

pues perteneció a la región de Besançon en el Franco Condado. Sin embargo, y como

el lector observará en las líneas dedicadas a Fourier, Proudhon correspondió a una

clase baja puesto que su padre, hombre de buenas intenciones, vendía la cerveza que

producía al precio de costo incluyendo en éste el salario. Al no conocer la maliciosa

idea de una ganancia extra, la familia vivió pobre, por lo que le impidió a Pierre-Joseph

llevar a cabo estudios elementales y a los 12 años abandonó la escuela y comenzó a

laborar “primero como tonelero, junto a su padre; después como mozo de labranza,

luego, como tipógrafo”156 e impresor, trabajo que a la vez le permitiría avanzar en sus

estudios autodidactas.

Cosa poco conocida en este pensador, es que gracias al trabajo de corrector y

tipógrafo, no solo se acercó a las ideas socialistas con la lectura de Fourier, sino que

a través de leer la biblia, fue adquiriendo su pensamiento antireligioso y que a la vez

le llevó a conocer la lengua latina y hebrea,157 lo que le hacía notable en cuanto al

amplio bagaje cultural con el que contaba.

“[…] es ya un hombre formado cuando la Academia de Besançon le concede la

beca Smart, que le permitirá proseguir sus estudios superiores en París”,158

presentando su texto La celebración del domingo en 1838, esta obra para muchos

pasa desapercibida, pero Proudhon comienza a sentar las bases de lo que es su

pensamiento político, pues ataca a los saint-simonianos y fourieristas en tanto que

tratan de reivindicar a la sociedad tan fuertemente criticada por éstos, reprochándoles

por su postura mesiánica ante las situaciones sociales.

La diferencia entre los trabajos de Proudhon y los mal llamados utópicos, es

que parte de la realidad social y se mantiene en la crítica sobre ésta, por el contrario

155 Cuevas, “Marco”, 2003, p 4. 156 Cappelletti, Ideología, 2010, pp. 64-65. 157 Tomassi, Breviario, 1988. 158 Gurvitch, Fundadores, 1970, p. 117.

64

de Fourier, Owen o Saint-Simon, que a la vez que atacan a la sociedad

contemporánea, proclaman la necesidad de una sociedad ideal. De igual manera, es

en este primer trabajo en donde comienza a esbozar su dialéctica filosófica, dialéctica

de las contradicciones o mejor conocida como antinomias.159

Esta fue una de las razones del rompimiento con Marx, pues éste último

entendió mal la dialéctica proudhoniana contrapuesta a la dialéctica de Hegel. “¿Por

qué el señor Proudhon recurre a un hegelianismo superficial para darse tono de

pensador profundo?”. Pero, la dialéctica antinómica de Proudhon se encontraba en la

lectura de la Crítica de la razón pura de Kant en donde desarrolló en su última parte la

idea de las contradicciones, dialéctica que el mismo Proudhon despliega años antes

de conocer la filosofía hegeliana.

Proudhon, sin embargo, va más allá de esta crítica, y no solo pretende

transformar la abstracta dialéctica hegeliana en un estudio de los movimientos

reales de la acción humana en la sociedad y en la historia, sino que cuestiona

además, como no la hace Marx, la estructura misma del movimiento dialéctico,

según Hegel lo propone. Para Proudhon, la estructura triádica (tesis-antítesis-

síntesis) es una estructura totalitaria. En realidad -dice- no hay síntesis

ninguna. El movimiento plantea sólo antinomias, es decir, tesis y antítesis. Se

trata de lograr un equilibrio entre ambos términos contrarios, nunca de

anularlo o «superarlos» definitivamente en una síntesis.160

Se trata al fin, de encontrar un equilibrio entre contrarios, muchas veces

inestables y otras, armónicas, pero en una dialéctica abierta en contraposición a la

dialéctica marxista, doctrinaria que pugna siempre por sintetizar las antinomias a fin

de que desaparezcan.

159 Esta dialéctica ha sido mal comprendida por muchos pensadores e historiadores, pues se pensaba

que Proudhon había realizado una lectura errónea de Hegel, sin embargo, es años después de desarrollar las antinomias que el francés se introduce en la lectura del filósofo alemán y esto por influencia de Bakunin, lo que lo llevaría a desarrollar una dialéctica original. Por ello es necesario conocer esta posición dentro de su vasta obra para la comprensión de su dialéctica. 160 Cappelletti, Ideología, 2010, pp. 71

65

El trabajo de Proudhon tendría su máxime tras uno de sus textos más polémicos: El

sistema de las contradicciones económicas o filosofía de la miseria. “Esta es una de

las obras más célebres y difíciles de Proudhon. Sus dos tomos salieron a la venta el

15 de octubre de 1846 y, hasta el momento en que Proudhon comenzó a desempeñar

un papel político en la revolución de 1848, pasaron casi inadvertidos, con la única

excepción de los ataques de Marx en Miseria de la filosofía, 1847”.161 Estas disputas

continuarían aún después de la muerte del francés, al entablarse en pleno debate

contra sus seguidores en la Primera Internacional.

Esta dialéctica tan particular, como lo mencioné, se verá reflejada en la mayor

parte de sus trabajos, destacándose por sus escritos polémicos, en el año de 1840 se

pública ¿Qué es la propiedad? Texto base en la comprensión del pensamiento

anarquista y en el cuál Proudhon definirá su línea política “soy anarquista” precisaría

el polémico francés durante sus estudios de la propiedad. A ello no solo se suma esta

clara posición, sino que dentro del estudio, fijó las bases de la desigualdad social162

que se engendran en el nacimiento de la propiedad privada. “Proudhon rebate desde

la lógica, el principio de la propiedad se destruye a sí misma, y que realmente sólo se

sostiene por la autoridad del Estado”.163

Proudhon debatirá en contra de los postulados de la Revolución francesa y la

propiedad como derecho natural e inalienable del hombre:

Una de dos: o el impuesto proporcional garantiza y consagra un privilegio a

favor de los grandes contribuyentes, o significa en sí mismo una iniquidad.

Porque si la propiedad es de derecho natural, como afirma la Declaración de

los derechos del hombre, todo lo que me pertenece en virtud de ese derecho

161 Gurvitch, Fundadores, 1970, p. 139. 162 Cabe mencionar que en “¿Qué es la propiedad?” Proudhon analiza esta situación desde la posición

jurídica, sería hasta la publicación de “El sistema de las contradicciones económicas” que analizaría la cuestión de la propiedad desde un punto económico. 163 Cuevas, “Marco”, 2003, p. 50.

66

es tan sagrado como mi propia persona; es mi sangre, es mi vida, soy yo

mismo. Quien perturbe mi propiedad atenta a mi vida.164

En este caso, no es válida la función de la propiedad, puesto que es función

extrínseca del hombre. “En una palabra, tuyo y mío son expresiones de derechos

personales idénticos, y aplicados a las cosas que están fuera de nosotros, indican

posesión, función, uso, pero no propiedad”.165 Podemos decir que la propiedad es un

concepto natural en cuanto es intrínseco de a quién pertenece, por ejemplo, existen

plantas con propiedades curativas, pero no podemos decir: ese jardín es mío, puesto

que naturalmente no es adherente a mi ser físico, psíquico o moral, por tanto tendrá

un concepto funcional ¿para qué? O de uso ¿por qué?, por tanto, hay nulidad en la

idea de la propiedad como natural al humano. Sin embargo, la propiedad ha de adquirir

dicha naturaleza bajo el auspicio del Estado, que para muchos pensadores, es su

única razón de existir.

Pese a la idea mutualista de Proudhon, encontramos en él y en sus escritos,

una confrontación con el comunismo -comunismo al de Cabet o Blanqui, es decir,

autoritario- puesto que consideraba a éste como centralizador, lo que implica la pérdida

de libertad del individuo en la búsqueda constante por la misma libertad, pues el

individuo debía someterse a las reglas de la mayoría, por lo que existía un ejercicio de

poder y sometimiento, entonces debe mediar la posición de los contrarios, más no

sintetizarse,166 puesto que es generadora de desigualdad.

Encontraremos dentro de sus textos, no sólo la influencia de la filosofía alemana

y francesa “utopista”, sino, especialmente en los trabajos referentes a la propiedad y

la economía, las ideas de Ricardo, Smith, Brisot, de Warville, Bray, Hodgkins,

Burlamaqui o de Vatel. Proudhon no sólo debatió con grandes teóricos

contemporáneos, sino que también con viejos autores conocidos, tales como

164 Proudhon, Propiedad, 2010, p. 49. 165 Ibid., p. 62. 166 Cappelletti, Ideología, 2010, p. 71.

67

Montesquieu o Rousseau, especialmente en su idea de contrato social y; Estado y

Federación que veremos más adelante.

Sus trabajos le acarrearían muchos problemas, por lo que Proudhon pisaría la

prisión en más de una ocasión y el exilio. Y esto se debió a que Proudhon fue “de los

socialistas más viejos, quizá el único que declaró la guerra a todo sistema cerrado, ya

que había advertido que las condiciones de la vida social son demasiado múltiples y

heterogéneas para poder ser apresadas dentro de un determinado molde, sin que se

cometa violencia contra la sociedad sustituyéndose una vieja forma de tiranía por otra

nueva”.167 Por ejemplo, en el año de 1841 es culpado de propaganda revolucionaria,

pero el tribunal de Besançon lo absuelve, o en el año de 1849 cuando a través de su

periódico Le voix du peuple se dedica a lanzar ataques en contra de Luis Napoleón es

condenado a prisión y se exilia en Bélgica en donde trabajará como maestro de

matemáticas.

Es en estos devenires, entre los viajes y los exilios, es que Proudhon comenzó

a codearse con los máximos representantes del socialismo del siglo XIX, por ejemplo

Aleksandr Herzen, o Mijaíl Bakunin, ambos provenientes de Rusia; Arnold Ruge y Karl

Marx, ambos alemanes exiliados que provenían de la corriente de izquierda

hegeliana168 y como ya lo mencionamos, con éste último tendría un gran acercamiento

que sería roto tras las diferencias ideológicas. En el año de 1848, fecha de mucha

turbulencia para Francia, pues se sucedieron insurrecciones nuevamente y desde dos

vertientes:

Uno procedía del mundo político, por tanto esencialmente de la burguesía,

claramente reformadora, moderadamente republicana y raramente afectada

por una sensiblería romántica respecto al «pueblo». El otro procedía como de

costumbre, del pueblo bajo parisiense que ahora estaba formado por

verdaderos obreros, con una élite procedente de los oficios «artísticos»

167 Rocker, Influencia, 1945, p. 25. 168 Tomassi, Breviario, 1988.

68

(ebanistas, doradores, impresores…), y no sólo por empleados de tiendas,

trabajadores de los oficios y parados […].169

Las circunstancias devenían ya desde el año 1845, pues Francia intentó

implementar un sistema económico de libre comercio internacional, intentando copiar

la fórmula a Inglaterra a quién le habría traído grandes beneficios. Aunado a la lucha

de liberación de algunos países aplaudidos por Inglaterra. “La revuelta contra la

opresión estaba por todas partes en Europa y la burguesía intelectual, herida por las

terquedades de Luis Felipe y Guizot, se entusiasmó con estos movimientos de

liberación nacional”.170

Al año siguiente, una serie de malas cosechas, sumado a una plaga que bajó

considerablemente la producción de la patata, hizo que el precio del pan y los cereales

comenzase a elevarse. Comenzaron las emigraciones hacia América171 debido a la

crisis por la que pasaba el país y no menor a esto, las políticas de Guizot se centraron

en la represión de los trabajadores franceses. Comenzaron así una serie de saqueos

en tiendas, mercados, panaderías y almacenes de las ciudades, se suscitaron

incendios y asesinatos por parte de bandas armadas172 y la toma de algunos castillos

y zonas altas de Francia. Es en este clima que Proudhon fue elegido diputado a la

Asamblea Nacional apoyado por el poeta Charles Baudeliere que en ese momento

fungía como director de un periódico de tendencia izquierdista. Ya estando en el seno

de la política francesa, Proudhon debate en contra de las posiciones reformistas de

Luis Blanc. Discutió en contra de los diputados que se encontraban a favor de las

políticas del gobierno, sintiéndose así fuera de lugar dentro de una política dogmática

y que privilegiaba a los estratos más altos de la sociedad.

Mientras tanto, en las calles, los obreros que gracias al trabajo de los diversos

socialistas, comenzaban a adquirir conciencia de sí mismos y de su capacidad como

169 Goubert, Historia, 1987, p. 254. 170 Ribard, Historia, 1941, p. 205. 171 Goubert, Historia, 1987, p. 255. 172 Ibid.

69

clase. Por su lado, Blanc manipulaba a las masas rebeldes por mediación de un obrero

llamado Albert, mientras que a espaldas del mismo sector popular, Blanc maniobró a

fin de beneficiar a la burguesía. Los trabajadores reclamaban trabajo, pues debido a

la situación nacional, hubo cierres de empresas, y aquellos pocos que contaban con

un trabajo, solicitaban la jornada de diez horas. Fue nombrada así una comisión

encargada de estudiar la situación. Instalada en Luxemburgo y con la destacada figura

de Luis Blanc,173 se propuso la creación de talleres nacionales y que más tarde

Proudhon rebatiría al decir que “los talleres nacionales adormecen a los proletarios sin

concederles nada de lo esencial”.174

El 23 de junio, las revueltas en las calles fueron suprimidas por el general

Cavaignac, por lo que la Asamblea aprobó y aplaudió la acometida en contra del

pueblo. Proudhon será uno de los pocos en pronunciarse en contra de dicha acción,

pronunciando el mismo día un discurso en el que el pensamiento de Proudhon se vio

altamente radicalizado pues consideró la liquidación de la burguesía por parte del

proletariado y negó la posibilidad de llegar de forma pacífica a la abolición de las

clases, considerándola una utopía.175

Años más tarde, sobre la situación en Francia en el año de 1848, el mismo

Proudhon comenta:

[…] el sufragio universal es ya ley del Estado; más por lo mismo, habiendo

crecido en proporción al peligro de la agitación democrática, ha sido forzoso

aumentar el ejército y dar más nervio a la acción militar. De suerte que, para

precaverse contra las insurrecciones populares, ha sido necesario, el sistema

de los fundadores de 1789, aumentar la fuerza del poder, en el momento

mismo en que por otro lado se tomaban contra él las precauciones.176

173 Ribard, Historia, 1941, pp. 209-210. 174 Proudhon citado en Cappelletti, Ideología, 2010, p. 69. 175Ibid. 176 Proudhon, Principio, 1985, p. 130.

70

El año de 1848, no sólo fue un momento de gran movimiento y agitación popular, fue

de gran trabajo para el francés, pues a la vez que participaba en la Asamblea, puso en

práctica sus ideas mutualistas al tratar de poner un Banco del Pueblo, a través de las

influencias de una asociación de trabajadores en la región de Lyon, en la que éstos

llevaban sus prácticas por medio del cooperativismo. “El mutualismo proudhoniano se

basa en la asociación de productores-consumidores. Restablece como norma el

cambio mutuo, es decir, el trueque de un objeto por otro equivalente,177 esto es, por

otro cuya producción represente el mismo trabajo”,178 de esta forma se rompía con la

tónica del capitalismo, puesto que se rompe con la especulación.

A su vez, el mutualismo encontraba su raíz en la negación de la propiedad,

como se comentó de manera somera líneas arriba, pero sí pugna por la posesión

individual de la tierra, la condición para que sea puesto en práctica el mutualismo, es

que la posesión debe ser equitativa. La posesión, es pues, reglamentada -por medio

de los pactos o contratos libres-, convirtiéndose en posesión humanizada con un

carácter de función social179 y en la que todos tendrán derecho al producto, según lo

que cada uno haya producido. Todo esto a través de la libre asociación de los

productores manteniendo la igualdad en cuanto a la posesión de los instrumentos de

producción, desapareciendo así el gobierno del hombre por el hombre.180

Pues bien, Proudhon aseguraba que todo trabajo útil genera valor y por ende

este merece una retribución. A diferencia de Marx quien pone como eje de valor y

cambio al dinero:

La primera función del oro consiste en proporcionar al mundo de las

mercancías el material para la expresión de su valor, o bien representar los

177 Aunque esto no es del todo cierto, puesto que Proudhon no se oponía a la venta de los productos

siempre y cuando la venta o el cambio de dicho producto sea lo más equivalente posible. Debía existir necesariamente esta equivalencia, puesto que el valor de uso y el valor de cambio, así como la oferta y la demanda oscilan, esto es, que no puede haber un valor fijo. 178 Cappelletti, Ideología, 2010, p. 26. 179 Gurvitch, Fundadores, 1970, pp. 128-131. 180 Ibid.

71

valores mercantiles como magnitudes de igual denominación,

cualitativamente iguales y cuantitativamente comparables. Funciona así como

medida general de los valores, y solo en virtud de esta función el oro, la

mercancía equivalente específica deviene en primer lugar dinero.181

Mientras que para el francés, el mercado oscila por diferentes periodos, por lo

que no hay forma de determinar el valor del producto, entonces un mercado realmente

libre182 puede asegurar a cada hombre “el equivalente del valor que haya creado”.183

Por tanto, el dinero no puede ser considerado el parámetro de valor entre mercancías.

De esta forma, “Proudhon otorga al proletariado la capacidad para conseguir su

emancipación con sus propias fuerzas, y la vía para la liberación pasa, antes que por

una revolución, por una serie de cambios paulatinos fundamentalmente económicos a

través de la construcción de una organización mutualista”.184

En 1849, Luis Napoleón es proclamado presidente por la Asamblea Nacional,

por lo que el primero será criticado fuertemente por Proudhon a través de su periódico

La voz del pueblo, considerándolo “el peor enemigo del proletariado y del

socialismo”.185 Siendo así, perseguido y condenado a prisión, teniéndose que exiliar

en Bélgica. A su regreso, es detenido y llevado a prisión en Sainte-Pélagie. Estando

en presidio, dedica toda su energía a la escritura, ahí redacta Confesiones de un

revolucionario186 y La idea general de la revolución, a la vez que mantenía una fluida

correspondencia con la oposición a Luis Napoleón. Pero aquí se suscitaría una

diferencia entre los socialistas contemporáneos a Proudhon, pues éste en algún

momento propuso una alianza entre el proletariado y la clase media para derrocar al

emperador.

181 Marx, “Dinero”, 2011, p. 115. 182 Refiérase, desde la idea proudhoniana, a la posibilidad de vender e intercambiar productos sin

coacción, evitando la especulación y la centralización de éstos o de la propiedad. 183 Cole, Historia, 1964, p. 214. 184 Cuevas, “Marco”, 2003, p. 51 185 Ibid., p. 69. 186 Cuvillier, Proudhon, 1986.

72

Hacia el año de 1858, Proudhon escribe uno de los textos considerados más

importantes en su vasta obra: Sobre la Justicia en la Revolución y en la Iglesia en la

que a modo de contestación, responde a las calumnias hechas por Eugenio de

Mirecourt, un publicista que elaboraría una biografía del pensador francés en la que lo

difama. En el trabajo de más 5000 páginas, Proudhon continúa bajo su lógica de la

justicia como derecho humano puro y social, contrapuesto a la idea de justicia

sustentada por la Iglesia,187 contraponiéndose así a los socialistas como Saint-Simon

quienes apelaban a la necesidad de fundar una nueva doctrina religiosa, así se basase

en la ciencia.

Casi a finales de su vida, escribe una de los trabajos clave dentro del

pensamiento libertario: El Principio Federativo, donde lleva a cabo sus ideales y

propuestas de la organización social a nivel micro y macro. La idea de la Federación

nace de la lógica de los contrarios o antinomias, las cuales se han intentado describir

de manera simple y somera en este texto. De forma contraria a la dialéctica de Hegel,

Proudhon analiza las concepciones de Libertad y Autoridad. Conceptos de gran

diferencia y que sin embargo, de forma dialéctica son irreductibles entre sí en un juego

constante de cambios.

“La autoridad supone indefectiblemente una libertad que la reconoce o la niega;

y a su vez la libertad, en el sentido político de la palabra, una autoridad que trata con

ella y la refrena o la tolera. Suprimida una de las dos, nada significa la otra: la autoridad

sin una libertad que discute, resiste o se somete, es una palabra vana; la libertad sin

una autoridad que le sirva de contrapeso, carece de sentido”.188 Es necesario que

exista un equilibrio entre ambas categorías, puesto que al momento que una excede

a la otra, hay una probabilidad de que se transforme en forma de opresión. Este caso

en particular, niega la dialéctica de Hegel, puesto que no hay modo de que la libertad

y la autoridad puedan sintetizarse al ser opuestas y la reducción de una por la otra las

transforma en categorías negativas. ¿Cómo? Proudhon lleva las categorías a las

187 Cole, Historia, 1964, p. 215 y Cuvillier, Proudhon, 1986, pp. 319-328. 188 Proudhon, Principio, 1985, p. 29.

73

definiciones de regímenes o formas de gobierno A) monarquía o gobierno patriarcal,

a) comunismo. Recordemos que para el filósofo francés, el comunismo es una forma

de gobierno en la que el individuo a de someterse a la voluntad de la mayoría, siendo

así coartado de todas sus libertades individuales, propuesta hecha por Blanqui o

Babeuf y en la que ejemplifica las dos vertientes de sus categorías, una basada en la

autoridad absoluta que niega la libertad y, la otra basada en la libertad que termina por

negarse a sí misma al negar la libertad del individuo.

Los otros dos regímenes son: B) democracia y b) la anarquía o el gobierno de

sí mismo. A diferencia de otros pensadores, Proudhon es el primero que sienta las

nuevas bases de la definición política, filosófica y económica de la anarquía, sacándola

de su acepción negativa y redirigiéndola. Sin embargo, como toda organización

política, la anarquía, a la vez que es la mejor de las posibilidades de régimen, cuenta,

a su vez, con diversas contradicciones. Concluye finalmente, que ninguno de los

regímenes ha tenido la posibilidad de desarrollarse de forma plena, ni gobiernos con

autoridad total, ni con libertad absoluta.189

Los Estados se transforman en entes voraces, contrarios a la posición de

Thomas Hobbes, en la que el Estado es quien regulará las relaciones sociales, que

busca, a través de la violencia y el sometimiento, la anexión de territorios que le

permitan ser cada vez más grande y poderoso. El absolutismo estatal es la forma en

que el Estado mismo se reafirma frente a sus gobernados con la conjura de “las leyes

del hombre”, llevando así a la limitación de la libertad. Por tanto, los insurrectos no han

de revelarse contra la autoridad, sino contra la libertad misma disfrazada de justicia,

de leyes, contra la libertad que gozan los grandes señores y que se le es negada al

pueblo.190

A todas estas razones, Proudhon antepondrá la idea de Federación, colocando

todo el poder en la capacidad popular. El humano tiene en sí la capacidad de la

189 Ibid. 190 Ibid.

74

autoorganización, pero la ignorancia y enajenación a la que ha sido sometido lo inclina

a delegar esa gran capacidad y poder en dirigentes, que más ilustrados, se aprovechan

de las masas. “El pueblo, por su inferioridad y su constante estado de apuro, formará

siempre el ejercito de la libertad y del progreso el trabajo es por naturaleza

republicano,191 lo contrario implicaría contradicciones”.192

El postulado federativo de Proudhon ha de contrariarse, no sólo en la dialéctica

alemana de Hegel, sino que ha de contraponerse en las formas políticas de Hobbes,

Montesquieu, Malthus y Rousseau, puesto que optan por un ente regulador que a su

vez estará concentrado en una forma de gobierno, al mismo tiempo dividido en tres

poderes que contrarresten el poder de la corona, pero centrados en un gobierno

estatal. Para Proudhon, el federalismo es la máxima forma organizativa social basada

en la libertad y no en la delegación de ésta, el pacto, o contrato que realiza el individuo,

no lo esclaviza ni lo perpetúa a la sociedad, sino que le permite deshacer el contrato

en el momento en que los beneficios no satisfacen ya a los pactantes.

La federación significa la disgregación del poder que se atomiza en municipios

y comunas relacionados entre ellos por estructuras horizontales. La tierra, los animales

e incluso las industrias son gestionados por la colectividad que establece relaciones

de intercambio con otras municipalidades. Así, se ve inevitable o incuestionable la

supresión del Estado porque no tiene ninguna función.193 Efectivamente, por medio de

la federación, los actores principales han de ser los mismos pobladores actuando e

interactuando en las decisiones que les afectan, por decirlo así, es aceptada la idea

de la democracia directa. El mismo Proudhon concluye que en la idea de Federación

han de concentrarse los tres aspectos más importantes de su pensamiento:

economía/Federación agrícola industrial; política/Federación política o

191 Tomando el concepto de republicano no desde su origen político, sino etimológico, Res-Pública, la

cosa pública. 192 Ibid., p. 67. 193 Marin, Anarquismo, 2015, p. 85.

75

Descentralización y la Federación progresista.194 Arrebatando de este modo, todo

monopolio estatal, basándose en el trabajo mutuo concentrado en la justicia.

El 19 de enero de 1865 Proudhon moriría en Passy, dejando tras de sí una vasta

obra póstuma, tal vez la más importante como testamento de su pensamiento el texto

De la capacidad política de las clases obreras y dejando inconcluso su trabajo: Teoría

sobre la propiedad.

Pierre-Joseph Proudhon fue un hombre antes que nada, que cometió errores y

que en este siglo XXI se le siguen reprochando, sin embargo, es necesario situarlo en

su momento histórico, pues en muchas ocasiones solemos descontextualizar las ideas

al intentar forzarlas a nuestro tiempo, y a la vez es necesario hacer notar que los

trabajos de muchos socialistas, en toda la extensión del significado, así como sus

ideas, tienen una gran vigencia que sería necesario volver a estudiar con detenimiento.

Finalmente, podemos notar que las ideas de la Revolución de 1789, y todo lo

que contrajo con ella: un sistema económico, político y social contrapuesto al

feudalismo que abarcó la edad media, sus ideas pedagógicas basadas en la tónica del

capitalismo, fueron factores que permitieron el nacimiento de las ideas socialistas.

Todo este proceso tuvo grandes afectaciones en el mundo moderno y particularmente

en México. Francia tuvo una influencia excesiva en nuestro país y que serán

analizadas en el segundo capítulo de este estudio, las ideas de la Revolución y el

liberalismo, el pensamiento socialista utópico estarán presentes en las relaciones y

formas organizativas de las sociedades urbanas y agrícolas de México.

194 Proudhon, Principio, 1985.

76

Capítulo 2

Historias paralelas

En el primer capítulo se pudo analizar de manera somera la influencia de la Revolución

francesa de 1789 en los nuevos ideales de hombre, sociedad, política, economía e

incluyendo las formas culturales de organización en algunos casos.

En México, la Francia revolucionaria y pos-revolucionaria tuvo un gran influjo,

podemos decir hasta cierto punto excesivo, pues muchos de los ideales proclamados

por ésta tuvieron un gran auge y aceptación por los sectores políticos, educativos,

filosóficos y económicos, como es el caso de los liberales encabezados por Benito

Juárez en la ya conocida Guerra de Reforma o de los Tres Años. Pero cabe destacar

que las leyes constitucionales que fueron el centro de la encarnizada guerra, tuvieron

antecedentes próximos, tal es el caso de la Reforma llevada a cabo por Valentín

Gómez Farías en los primeros años de la década de 1830. En primera instancia, se

secularizaron los bienes de los duques de Monteleone, quienes eran descendientes

de Cortés y dichos bienes fueron poseídos por la nación, lo que trajo un debate entre

aquellos que defendían la propiedad heredada y los liberales radicales. Así, en el año

de 1834, también secularizó las misiones establecidas en el territorio empezando con

las de la Alta California, aunque en el mismo año volverían a ser restablecidas.195

Estas medidas atraerían problemas con las vertientes pro-clero y su posterior

desconocimiento como vicepresidente:

Un clamor general se escucha por todos los ángulos de la república mexicana

contra la autoridad del vice-presidente D. Valentín Gomez [sic] Farías, y esta

universalidad unida con los votos públicos, emitidos libre y francamente en el

artículo 4.º del plan de Cuernavaca, ha llamado la atención de la guarnición

de esta capital. ¿Quién creyera, que el segundo magistrado de la república,

había de sostener injusta guerra, que solo pretende establecer una

195 Hale, Liberalismo, 1999.

77

administración degradada, que proscriba, ocupe las propiedades, aten, y

rompe en finte contra nuestro sagrado culto religioso y rompa en fin, todos los

vínculos que nos unen á la sociedad?196

Después, se le restó poder político a la Iglesia, así como la prohibición de sus

bienes mientras éstos no generasen beneficios públicos. La venta de los bienes

eclesiásticos se intentó llevar a cabo en el año de 1847, pues el gobierno de Gómez

Farías intentaría “obtener quince millones de pesos hipotecando o vendiendo en

subasta pública propiedades clericales. Tomada en amortización”.197 Estas intentonas

serían concretadas más tarde por la Ley Lerdo de la que ahondaremos más en los

párrafos siguientes y en parte del tercer capítulo.

Al tiempo que esto se suscitaba en México, las problemáticas en el Estado

francés no eran muy diferentes, la guerra y la crisis, especialmente por las que

pasaban los trabajadores galos orilló al pueblo a reorganizarse y llevando a la

formación de la llamada Comuna de París. Esto bajo los preceptos que nacieron a raíz

de la necesidad de llevar a cabo una nueva forma de organización social.

Mientras que México continuaba constituyéndose como nación independiente,

Francia se proclamaba como la nación cuna del Estado moderno. Por tanto, ambos

países fueron participes de una transformación y crecimiento, sino simultáneo e igual,

sí muy similar en el caso de sus ideas liberales.

Se cree que son los pensamientos vencedores los que escriben la historia, en

el caso de México, la historia proclamada por los liberales es la que generalmente

conocemos y con la que crecemos y somos educados. En menor medida la historia de

los vencidos, los conservadores. Pero aún de forma más desconocida, el primer

socialismo en México. Este tema llega a ser poco conocido por historiadores,

investigadores o por el público en general.

196 “Acta que ha celebrado la guarnición de esta capital, para desconocer al vice-presidente D. Valentín

Gomez Farías”, El Mosquito Mexicano, 2 de septiembre de 1834. 197 Hale, Liberalismo, 1999, p. 35.

78

La tradición socialista se remonta a la segunda mitad del siglo XIX y no a las ideas

marxistas de la posrevolución mexicana o a las liberales de los clubes que se formaron

entre los años de 1890 a 1910 y otros radicalizados como fue el caso del Partido Liberal

Mexicano de corte netamente anarquista. Incluso, muchos desconocen que

pensadores y políticos como Melchor Ocampo, fueron de los primeros en realizar las

traducciones de algunos fragmentos de capítulos de textos en francés como el Sistema

de contradicciones económicas o filosofía de la miseria de Pierre-Joseph Proudhon,

de quién hemos dado un breve esbozo de su pensamiento en la primera parte de este

trabajo.198

Además de estos trabajos, a México arribaron personajes que son poco

conocidos, pero relevantes para el movimiento socialista, ya sea por su posición

política, contrapuesta a los regímenes que predominaban o simplemente porque existe

poca información y documentos referentes a estos personajes. Pocos como la figura

de un pensador nacido en Grecia y de ascendencia noble, Plotino Constantino

Rhodakanaty nacido el 14 de octubre de 1828 y al cual me referiré más adelante.

2.1 Guerra de Reforma ¿y la educación dónde queda?

El siglo XIX, es un siglo de muchos contrastes, de retrocesos y de avances; de análisis

y devenires. Recordemos que a principios de este siglo se llevó a cabo la lucha por la

liberación del imperio español. Hasta ese momento, la Nueva España era una tierra

de gran riqueza, en donde se desarrollaba la agricultura, el comercio y la minería.199

Es necesario decir, que la mayoría del desarrollo se asentaba en las ciudades.

Es en el año de 1810, cuando se llevó a cabo el primer levantamiento

insurreccionalista por parte del pueblo mexicano “cuando empezaba a alborear la

198 “Una mañana -domingo 19 de abril- Ocampo tradujo del francés fragmentos del capítulo VIII del

Sistema de las contradicciones económicas o Filosofía de la miseria, de Proudhon. Escribió sin tachaduras; en papel azul con tinta sepia. Los rasgos son precisos, bien dibujadas las letras; unidas las preposiciones y artículos por breves semicírculos; es la escritura de alguien a quien complacía su tarea”, vid. Gastón García Cantú, El socialismo en México. Siglo XIX, 1984, p. 146. 199 Miranda, Evolución, 2008. Aunque hay que tener en cuenta que esta idea de una región sumamente

próspera deviene del trabajo realizado por Alexander von Humboldt a principios del siglo XIX.

79

mañana del 16 de septiembre de 1810, Hidalgo se dirigió a la iglesia parroquial donde

hizo llamar a misa, a la que acudieron muchos fieles por ser domingo. Allí el cura les

habló de la opresión del gobierno y de los españoles y de las ventajas de la

independencia para el pueblo […]”.200 Por lo que la Revolución de Independencia tuvo

muchas facetas hasta su conclusión en el año de 1821. A partir de esos momentos, la

vida del país sufrió diversos cambios, desde movimientos armados en desacorde con

los gobiernos; hasta guerras de invasión, tal vez una de las más importantes o que

causó más impacto en nuestro país, es la intervención por parte de los Estados Unidos

entre 1845 y 1848, en la cual el gobierno mexicano cede cerca de dos millones de

kilómetros cuadrados de tierra.201

A raíz de la separación que se da entre México y el Imperio español, la lucha

ideológica entre dos sectores políticos se tornó más grande, entre los conservadores

que optaban por el restablecimiento de una monarquía y los liberales que se inclinaron

por una república federalista, en otras palabras, en el proceso de construcción de un

país hubo “un continuo forcejeo entre ‘liberales’ y ‘conservadores’: de un lado los

herederos ideológicos de los insurgentes que aspiraban a una renovación política,

económica y social que borrara los estigmas de la Colonia; y por el otro, los

terratenientes, la aristocracia, la milicia y el clero empeñados en mantener sus antiguos

privilegios”.202

Sin embargo, como lo dice Erika Pani Bano, me limito a decir que los

conservadores eran una élite, cuasi sectaria sería caer en un error. “Al lado de

Maximiliano acudieron varios adictos al plan de Ayutla, diputados al congreso de 1856,

destacados liberales de provincia, y miembros de los gabinetes de Comonfort y

Mariano Arista”,203 por lo que podemos decir que tanto los grupos liberales y

conservadores no eran homogéneos, sino todo lo contrario, y esa diversidad es lo que

amplió el panorama de la lucha ideológica en ambos bandos. Otro aspecto que es

200 Ibid., p. 19. 201 Ibid. 202 Ibid., p. 185. 203 Pani Bano, “Nacionalizar”, 1998, p. 26.

80

necesario resaltar, es el argumento de que muchos hombres de ambas tendencias

hacia 1857 y 1864, eran mayores de cuarenta años con una carrera política

generalmente consolidada y que a pesar de esto, sus posiciones políticas e ideológicas

variaron y se ajustaron a las circunstancias,204 por lo que podemos hablar de un

liberalismo y conservadurismo influenciado por las ideas provenientes de Europa, pero

a la vez, dos posiciones que intentaban insertarse en un modelo propio y nacional.

La lucha de los liberales mexicanos devenía ya de las ideas de la Revolución

francesa, del “liberalismo de la Edad de la Razón y las herejías de los philosophes.

Las tensiones sociales resultantes se vieron pronto exacerbadas por un movimiento

liberal propio, cuyo principal dogma económico perduraría en todo el siglo XIX: el

laissez-faire económico y el libre comercio de Adam Smith”.205 Esto sumado a la lucha

en contra del ya conocido dictador Santa Anna y que a raíz de la revolución de Ayutla,

dio cabida a los factores necesarios que fortalecieron a los liberales. Dichas ideas

devenían de la necesidad del progreso y desarrollo, conceptos y tareas que argüían

tanto europeos como norteamericanos206 y que los mexicanos contextualizarían. Pero

el camino estaba fijo en los métodos utilizados por los galos, las luchas, los ideales y

las problemáticas, muchas veces tan similares a las de México, permitieron iniciar el

camino, siempre guiado por los ideales de la gran revolución y sus posteriores

problemáticas económicas, políticas, históricas y culturales.

A la renuncia del presidente Juan Álvarez, debido a la presión social y

contrarrevolucionaria, principalmente por Manuel Doblado, gobernador del estado de

Guanajuato, Álvarez declinó a la presidencia y el 18 de diciembre de 1855 fue

proclamado Ignacio Comonfort como presidente de México. El gobierno de Comonfort

fue más moderado y conciliador con los rebeldes de los estados, esto con el fin de

terminar con el descontento que se suscitaba específicamente en el clero y en la milicia

mexicana. Sin embargo, los indígenas de Puebla en las regiones de Zacapoaxtla y

204 Ibid. 205 Hart, Anarquistas, 1974, p. 21. 206 Pani Bano, “Nacionalizar”, 1998.

81

Zapotitlán se levantaron en armas influenciadas por un vicario que da órdenes de

“suspender la administración de los sacramentos hasta que el pueblo jure morir en

defensa de la religión”207 y al grito de Religión y fueros, se lanzaron a la lucha. También

en el estado de Veracruz se suscitaron alzamientos. Sin embargo, Comonfort logró

reunir un ejército de 15 000 hombres aproximadamente y se lanzó a la toma de Puebla

indultando a los militares alzados degradándolos de jefes y oficiales a soldados y

castigando al clero embargando los bienes del obispado del estado.

Comonfort decidió continuar con el trabajo que ya había comenzado Álvarez

con la otrora Ley Juárez promulgada en noviembre de 1855 que subordinaba los

privilegios militares y suprimía las cortes especiales del clero por las autoridades

seculares civiles.208 Por lo que en 1856 promulgaba reformas como la que extinguía a

la Compañía de Jesús; o aquella que abolía la coacción civil para el cumplimiento de

los votos monásticos, pero la que tuvo más trascendencia fue la llamada Ley Lerdo,

redactada por Miguel Lerdo de Tejada, considerándola una ley benéfica y progresista

que echaría a andar la economía del país sacándolo de la bancarrota, daría frutos al

agro tan abandonado en ese entonces y principalmente, permitiría que el gobierno “se

dedique eficazmente á introducir mejoras materiales, entre ellas la apertura de vías de

comunicación, tal vez líneas férreas que tanto reclama nuestra situación y la época

actual […]”,209 ya que dicha ley obligaba al clero a vender los bienes a sus

arrendatarios, sin embargo, dentro de esta medida que esperaba abrir las “mil fuentes

de la riqueza pública, que va á [sic] dar el ser á la agricultura, á las artes, á la industria

y al comercio nacionales […]”,210 obligó también a las comunidades indígenas a

fraccionar las tierras comunales que poseían desde hace ya varios años, legado de

207 Francisco Zarco, “La Reacción”, El Siglo Diez y Nueve, 4 de enero de 1856. 208 Hart, Anarquistas, 1974. 209 Juan Tames, “Desamortización de las fincas rústicas y urbanas de las corporaciones civiles y

religiosas de la República”, El Republicano, 1 de julio de 1856. 210 Ibid. también publicado en el Diario Oficial del Supremo Gobierno de la República Mexicana el 2 de

julio de 1856.

82

sus antepasados y a los gremios,211 herencia de los españoles tema que abordaremos

en el tercer capítulo.

La ley trajo beneficios a los latifundistas, quienes aprovecharon la oportunidad

para comenzar el despojo de tierras a las comunidades indígenas. Estas reformas,

además de intentar tomar nuevamente el poder en manos del Estado y despojar de

todo privilegio a la Iglesia, pretendieron contrarrestar poder económico acumulado

durante más de doscientos años, de hecho se calcula que entre 1861 y 1863 el

gobierno logró recaudar entre 60 y 70 millones de pesos212 a partir de la venta de

inmuebles eclesiásticos. Tan solo en el Distrito Federal se recuperaron $16 256 036.32

pesos entre fincas, casas, haciendas, ranchos y huertas.213 En cinco años, entre los

años 1856-1861, se recaudaron 67 millones de pesos, permitiendo reducir la deuda

interna.

La venta de bienes eclesiásticos, además de atraer grandes sumas de dinero,

como se mencionó en el párrafo anterior, conllevó a la división de las tierras comunales

y no sólo trajo consigo el despojo, sino que a la par de lo que sucedió en Francia

durante los primeros años de la revolución, los sectores del campo se vieron ante dos

posibilidades: 1) quedarse en lo que eran sus antiguas tierras, ahora de los

latifundistas y hacendados y someterse a este régimen o, 2) migrar a las ciudades

industrializadas y convertirse en la nueva clase trabajadora, proletarios urbanos.214 Lo

que evidentemente trajo el descontento y la necesidad de crear nuevas

organizaciones, tales como las Sociedades de Socorros Mutuos, tema que

abordaremos brevemente en la tercera parte de este capítulo.

211 De hecho, esta labor de despojo por parte del Estado tiene antecedentes desde la época de la

conquista y la Colonia, sin embargo, debido a la ideología venida de la Revolución francesa y la de propiedad privada, los gobiernos pos-independentistas aceleraron este proceso de despojo por vía de las reformas. Para una mejor información acerca de los gremios, así como del despojo hacia el campesinado se pueden consultar los textos de Luis Chávez Orozco “Agonía del artesanado” y “Páginas de historia económica de México” ambos editados por el Centro de Estudios Históricos Sobre el Movimiento Obrero. 212 Bazant, citado en Martínez, Estado, 2012, p. 88. 213 Bazant, Bienes, 1977. 214 Mancisidor, Síntesis, 1976.

83

Finalmente en el año de 1856 se organizó un Congreso Constituyente de carácter

liberal. Este se realizaría con el fin de lograr la estabilidad que necesitaba el país a fin

de concretar los sueños y esperanzas de la independencia así como las promesas

hechas por la Revolución de Ayutla. Uno de los aspectos a resaltar, es que el Congreso

estaba conformado casi en su totalidad por diputados de ideas liberales, lo que

constituía una gran fuerza regeneradora para la política de aquel momento. De todos

estos liberales, resaltaban los nombres de Francisco Zarco (1829-1869); Ignacio

Ramírez (1818-1879); Melchor Ocampo (1814-1861); Valentín Gómez Farías (1781-

1858), entre otros.

Los constituyentes llevaban consigo las ideas promulgadas por la ya

mencionada Revolución francesa, así como el ejemplo de los gobiernos de los Estados

Unidos, lo que permitió a los participantes llevar a cabo un proyecto de nación

conforme a las ideas liberales. Sin embargo, algunas de las propuestas realizadas por

ambos lados eran más parecidas de lo que se puede pensar, por ejemplo y más

evidente es la adopción del capitalismo liberal teorizado por Adam Smith o su afán en

la implantación de leyes que modificaran los comportamientos sociales.215

Uno de los temas fundamentales y que provocaron el debate entre los

constituyentes, fue el de la educación, puesto que en la última ley educativa realizada

en el año de 1854 se obligaba a seguir los dictados de la Iglesia,216 por lo que hasta

1857 la Iglesia controlaba el monopolio de la instrucción popular en la cual era evidente

la fuerte influencia religiosa a través de la lectura y la memorización del catecismo de

Jerónimo de Ripalda. Se intentó abolir de igual forma, los castigos corporales a los que

eran sometidos los niños. Lo que el Congreso buscaba era la creación de un nuevo

plan de estudios “que proclame la libertad de enseñanza y no monopolice para unos

cuantos la instrucción pública”.217

215 Meneses, et. al. Tendencias, 1983. 216 Staples, “Entusiasmo”, 2011. 217 Francisco Zarco, “La Reforma Administrativa”, El Siglo Diez y Nueve, 11 de enero de 1856.

84

Sin embargo, como se menciona algunas líneas más arriba, el punto central del debate

entre liberales y conservadores era el de instaurar un proyecto de nación propio,

sabemos cuál fue el lado vencedor, no obstante, una de esas proyecciones liberales

era la de retirar no solo privilegios a la ya poderosa Iglesia, sino acabar desde raíz con

esa fuerza que se encontraba en la legitimidad hecha por la educación, la cual fungía

como un gran aparato de reproducción socio-cultural.

En esa tónica, es menester mencionar, que los proyectos educativos de ambos

lados tenían discrepancias en ocasiones muy sutiles que a simple vista o deducción

no es posible observar. Los conservadores lucharon por preservar el estudio de las

letras clásicas tales como el latín y el griego, así como las materias humanísticas, los

cuales lograron mantenerse debido, no solo al estudio en las instituciones educativas

primarias, sino al trabajo que se realizó en los seminarios y al trabajo de traducciones

de los clásicos en estos mismos lugares.218 Al contrario de los liberales que optaban

por una educación desarraigada de la iglesia, con miras al progreso basado en la

ciencia y la racionalidad venidas de la Francia revolucionaria.

La idea oficial, es que esta educación realizada por la Iglesia estaba totalmente

en manos de la misma, que su control era absoluto, pero, Ernesto Meneses asevera

que durante el periodo de la dictadura de Santa Anna se realizó un decreto -el mismo

de 1854- en el que los planteles de instrucción debían estar bajo vigilancia

gubernamental, e incluso, algunos de los cuales eran apoyados económicamente. Se

buscó reformar la enseñanza elemental, secundaria y preparatoria219 en los que es

posible observar ambas corrientes en las materias enseñadas, como es el caso del

francés o historia moderna y a su vez religión y gramática latina.220

El debate durante el Congreso Constituyente se originó principalmente entre los

propios liberales, puesto que había diputados como Manuel Fernando Soto que

proclamó la toma total de la educación por parte del Estado, cuando ni la familia o la

218 Ortiz, “Humanismo”, 2014. 219 Meneses, et. al. Tendencias, 1983. 220 Ibid.

85

municipalidad fuesen capaces de dotar este derecho, conservando así el control total

educativo, su vigilancia y estructuración. Otros liberales como Ponciano Arriaga

afirmaban que el gobierno no podía fungir como policía de la educación, puesto que la

educación no se encontraba solamente en los establecimientos de instrucción.221 El

proclamar la enseñanza libre dentro de la Constitución implicaba muchas dificultades

puesto que al dejar una enseñanza de tal índole, los liberales pensaban que se podía

correr el riesgo de que no sólo la Iglesia retomara el poder y monopolio de la

educación, sino que también los conservadores estarían a la espera con la finalidad

de posicionarse en la lucha por el proyecto de nación. Algunos otros diputados como

García Granados manifestaron “su temor de que, al aprobarse la libertad de

enseñanza, los jesuitas y el clero impartieran una educación fanática”.222 Por lo que

finalmente se crearía un nuevo plan de estudios en los que se introdujeron las materias

de historia patria e instrucción cívica, con el claro toque de la posición liberal en

enarbolar los sentimientos patriotas en los ciudadanos mexicanos y un sentido de

pertenencia a la nación de corte liberal, republicana y democrática.

Así, el 5 de febrero de 1857, se aprueba la Constitución Política, en la cual, se

declaró a la nación como una República representativa, democrática y federal que se

dividía en tres poderes: “El poder público se dividió en Legislativo, depositado en la

Cámara de Diputados, pues el Senado quedó suprimido; el Ejecutivo, desempeñado

por el Presidente de la República, asistido por cinco Secretarios de Estado, y el

Judicial, que se encomendó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación […]”.223 En

cuestión educativa, el artículo 3º proclamó la educación libre, aunque en cierto aspecto

pudiese ser poco, en su interior contenía el alejamiento total de la doctrina religiosa,

además establecía que sólo la ley podría determinar qué profesiones necesitarían de

un título para poder llevar a la práctica sus labores. A diferencia de las leyes de 1854,

221 Martínez, Estado, 2012. 222 Talavera, Liberalismo, 1973, t. II, p. 37. 223 Miranda, Evolución, 2008, p. 187.

86

que todavía toleraron y apoyaron hasta cierto punto la enseñanza por vía religiosa, la

Constitución de 1857 fue un parteaguas entre Estado e Iglesia.

Las leyes promulgadas en la Constitución del 57, provocaron y devinieron en un

gran conflicto, pues entre éstas, se derogaba la abolición y desamortización de los

bienes eclesiásticos, así como el golpe contundente, el cual hace a la educación libre

y laica, por lo que fueron retirados los poderes de la iglesia sobre la educación

mexicana. Este fue un duro golpe, pues por más de 300 años, la iglesia católica estuvo

al frente de la educación. Este fue uno de los grandes pasos que pudo dar la república,

pues permitía una enseñanza libre, fuera de todo dogma que evitaría el retroceso de

la sociedad que estaba en proceso de construcción. “Los liberales juraron que no

dejarían a sus enemigos envenenar el corazón de los jóvenes con máximas contrarias

a la buena marcha de la República”.224

Con la promulgación de estas leyes, la iglesia inmediatamente las

desconocería, por lo que el Papa Pio IX lanzó una misiva para dar comienzo a una

campaña de rechazo hacia la Constitución. Debido a la gran tradición religiosa que fue

implantada en los ciudadanos, la campaña de la Iglesia promovía la excomulgación de

todos aquellos que juraron bajo el mandato de la Carta Magna, lo que generó varios

conflictos identitarios entre los creyentes y a la vez trabajadores del nuevo Estado

liberal.

Pese a la situación en la que se encontraba el país, se llevaron a cabo

elecciones en las cuales resultaría vencedor bajo un clima de poca participación

electoral y descontento político y social, Ignacio Comonfort quien fue declarado

presidente y Benito Juárez como presidente de la Suprema Corte de Justicia,

haciéndose girar una misiva el día 24 de noviembre225 en la que solicita a los

224 Ibid., p. 118. 225 Agustín Alcérreca a los habitantes del Distrito, México, 24 de noviembre de 1857, en AHCM,

Ayuntamiento, Historia en general, vol. 2257, exp. 239, fs. 3.

87

gobernadores dar a conocer a los habitantes los puestos de elección, tomando su

cargo el día primero de diciembre del mismo año.

A pesar de todo el largo proceso que se llevó a cabo en los últimos años,

Comonfort consideró a la Constitución un tanto radical por lo que dio comienzo a

pláticas con los conservadores a fin de derogarla y hacer el llamamiento a un nuevo

Congreso Constituyente. El general Zuloaga miró viable la condición, mientras los

liberales más radicales como Juárez, estaban “dispuesto[s] a jugarse todo por la ley

fundamental”.226 Estos problemas fueron acrecentándose, pues en principio, la Ley

Lerdo no generó el capital que se esperaba, puesto que se facilitaron pagos a la Iglesia,

se hicieron descuentos y por si fuese poco, el gobierno aceptó bonos de pago que

carecían de valor, por lo que la dichosa ley terminó por ampliar el poder de unos

cuantos especuladores,227 sumando a esto el descontento con los conservadores

respecto a las leyes contenidas en la Constitución y los liberales que consideraron a

la misma como moderada fortalecían a la reacción, mientras los liberales se

fraccionaban y alejaban cada vez más de la presidencia.

Zuloaga vertió las ambiciones de los conservadores en el llamado Plan de

Tacubaya el cual desconoció a la Constitución cesándola hasta la formación de un

nuevo Congreso aunque dejaba como presidente aún a Ignacio Comonfort228 (aunque

más tarde lo desconocería) y el cual sería aceptado por Comonfort, sin embargo, al

mostrarse de acuerdo con el Plan, Comonfort desconocía la Constitución perdiendo el

título de presidente y asumiendo el cargo de manera automática el presidente de la

Suprema Corte, Benito Juárez que fue encarcelado y más tarde liberado por el mismo

Comonfort al momento de exiliarse éste último a los Estados Unidos. Esto acarreó

problemas y Comonfort fue desconocido como presidente por una fracción del partido

conservador y nombrando al líder del movimiento, el mismo Zuloaga quién se

apoderaría de la Ciudad de México y el movimiento fue secundado en Puebla y

226 Vázquez, “Independencia”, 2008, p. 303. 227 Ibid. 228 Félix Zuloaga “Plan Político”, La Sociedad, 26 de diciembre de 1857.

88

Veracruz donde días antes se había pactado ya el apoyo al Plan.229 Había comenzado

la Guerra de Reforma.

Una vez liberado, Juárez vio la necesidad de trasladar su gobierno al estado de

Guanajuato bajo el amparo del gobernador de aquella entidad Manuel Doblado,230 con

el establecimiento del poder conservador en la Ciudad de México, Zuloaga obtuvo el

reconocimiento de los europeos, por lo que dio inicio a su avance por la República.

Con el avance de los conservadores, Juárez se vio en la necesidad de trasladar

su gobierno a Guadalajara el día 13 de febrero. La mayoría de las luchas encabezadas

por Juárez se realizaron desde aquel estado y en el que incluso se aseveraba la

victoria constitucionalista, pero el contundente avance conservador lo hizo repensar y

trasladar su gobierno al estado de Veracruz. Los conservadores comenzaron a

derogar leyes que consideraron contrarias a los intereses de éstos y por supuesto, del

clero y de la milicia, por lo que echaron atrás las leyes de desamortización de los

bienes eclesiásticos.231

La lucha por el poder entre liberales y conservadores fue sanguinaria, los

combates se extendieron a lo largo del país, en donde los conservadores eran

liderados por los caudillos Miguel Miramón y Leonardo Márquez. Debido a las victorias

de Miramón sobre los liberales, crearon el Plan de Navidad, en donde desconocían a

Zuloaga como presidente y proclamaban a Miramón como presidente interino por el

lado de los conservadores.232 Miramón, en el año de 1859 decidió atacar Veracruz

como forma de acabar con el gobierno de Juárez, pero sin tomar en cuenta el terreno

y sin contar con el armamento necesario, se lanzó al ataque, pero el mismo terreno y

las enfermedades de aquellos lugares, frustraron sus planes y se vio en la necesidad

de emprender la retirada. Ambos bandos se encontraban debilitados, por lo que el

229 “Política del general Comonfort durante su gobierno en México”, La Sociedad, 16 de septiembre de

1858. 230 Miranda, Evolución, 2008. 231 Ibid. 232 Ibid.

89

gobierno de Juárez buscó el apoyo de los Estados Unidos.233 El país del norte

desconoció al gobierno de Miramón al no aceptar ceder más territorio y de igual forma

“trató de tantear a los liberales y envió un agente a Veracruz”.234 Ocampo se encargaría

de la diplomacia con el representante extranjero que se vio obligado a aceptar una

alianza en defensa de las “instituciones republicanas”.235

Juárez, a mediados de 1859, decidió hacer públicas las Leyes de Reforma236

restantes, en donde reiteraba la nacionalización de los bienes eclesiásticos, así como

la separación de la iglesia del Estado. “A través del enfrentamiento armado y de la

promulgación de una serie de leyes y decretos, los liberales intentan destruir todo el

conjunto de relaciones sociales precapitalistas que obstaculizan y frenan el desarrollo

del capitalismo en México”,237 las victorias de los liberales a lo largo del país,

principalmente la que se dio en Veracruz, donde el General Tomás Marín fue detenido

por buques del gobierno de los Estados Unidos so pretexto de piratería y que

realmente era un plan fraguado por Juárez, debilitó a los conservadores, por lo que el

presidente interino Miramón se vio forzado a replegar sus fuerzas e intentar robustecer

territorios ya tomados, como es el caso de Oaxaca, Toluca, Querétaro y

Guadalajara,238 que fueron recuperados al mando de Jesús González Ortega, y

Zaragoza.

Miramón trató de fortalecer su mandato bajo políticas en extremo duras y

violentas, lo que le causó el desconocimiento de algunos sectores y la enemistad con

los territorios sometidos a su régimen; buscó préstamos y reorganizó un pequeño

ejército de 8 000 hombres. Finalmente, “la victoria liberal fue sellada por la victoria de

Calpulalpan, el 22 de noviembre, que permitió a González Ortega festejar la Navidad

233 Periódicos conservadores como La Sociedad, en su número 149, con fecha del 29 de mayo de 1858,

acusa al gobierno de Juárez, no solo de solicitar ayuda al gobierno de los Estados Unidos, sino de invitar a los extranjeros a participar en las filas liberales, pues varios de éstos son aprehendidos o encontrados muertos en los campamentos liberales. 234 Vázquez, “Partidos”, 2007, p. 25. 235 Ibid. 236 Ibid. 237 Martínez, Estado, 2012, p. 79. 238 Miranda, Evolución, 2008.

90

y el fin de la Guerra de Tres Años, al ocupar la Ciudad de México el 25 de ese mes”.239

Por lo que Juárez entraría a la Ciudad el día 11 de noviembre de 1861.

2.2 Más cerca de lo que pensamos. El segundo imperio y su propuesta educativa

Al fin, tras años de encarnizada lucha entre los partidos, el año de 1861 ve finalizar la

Guerra de Reforma, siendo los vencedores los históricamente conocidos como

liberales encabezados por Juárez quien “convocó a elecciones de poderes federales,

y él mismo resultó favorecido por el sufragio popular para ocupar la Presidencia

[…]”.240 Dicho puesto sería ocupado en el periodo 1861-1865. Sin embargo, la Guerra

de Reforma trajo consigo inestabilidad económica, por lo que en ese mismo año Juárez

decidió suspender la deuda por dos años a las naciones extranjeras241 con la idea de

restablecer la economía del país. Pero los conservadores no admitirían una derrota

tajante, por lo que recurrieron a conspiraciones realizadas en Europa.

Por lo tanto Juárez promulgó e hizo válidas las Leyes de Reforma, estas

circunstancias serían aprovechadas por los “monarquistas mexicanos residentes en

Europa para interesar al emperador de Francia Napoleón III, en el proyecto de instaurar

una monarquía en México”.242 Mientras esto sucedía, el gobierno mexicano necesitaba

consolidar las leyes, especialmente la referente a la educación, pues además de

contribuir ésta en el fortalecimiento del Estado, también permitiría su legitimación en

la victoria frente a los conservadores.

El 15 de abril de 1861, Ignacio Ramírez, liberal juarista y eterno defensor de las

Leyes de Reforma, estando en el gabinete de Juárez, llevó a cabo una ley que

reformula nuevamente la educación encaminada al proyecto liberal-federalista. Dicha

ley se destacó por varias cosas, entre ellas el total auspicio por parte del gobierno

federal, es decir, el gobierno estaba comprometido a coadyuvar con los municipios, o

239 Vázquez, “Partidos”, 2007, p. 27. 240 Miranda, Evolución, 2008, p. 203. 241 Ibid. 242 Vázquez, “Independencia”, 2008, p. 308.

91

sociedades de beneficencia en la labor educativa, siempre y cuando se sujetaran al

plan de estudios declarado por la ley el cual estaba constituido por las materias de:

lectura, escritura, gramática, aritmética, costura y bordado (en el caso de las niñas),

moral, lectura de leyes fundamentales, canto y sistema de pesas y medidas.243 En esta

última materia, se giró la circular sobre la adopción del sistema métrico decimal como

medida oficial en toda la República.244

Otro aspecto de gran importancia es el establecimiento de escuelas para ambos

sexos. Los padres estaban obligados a enviar a los niños desde los diez hasta los

catorce años y a las niñas desde los cinco hasta los doce años. Esta ley debía aplicar

a todos los sectores de la sociedad,245 desde los hijos de los trabajadores en las

ciudades, hasta aquellos que trabajaban las tierras en las haciendas. También se daba

la apertura a la escuela para sordomudos. De gran importancia fue la ley de abril, pues

hubo la creación de “un establecimiento de una instrucción primaria elemental y

perfecta (escuela normal), dedicado a proporcionar profesores de primeras letras”.246

La educación debía ser restablecida de todo vicio y para ello era importante la labor

de las y los educadores, su trabajo es que:

[…] penetren en las poblaciones semi-bárbaras, las llamen y las atraigan

como unción é [sic] interés afectuoso á las fuentes de la ciencia y neutralicen

con el amor sincero de la niñez, con las formas simpáticas de la enseñanza,

con lo ingenioso de los métodos y lo espeditivo [sic] de los procedimientos, la

repugnancia que inspira la instrucción á nuestras clases ignorantes y aun el

interés que tienen en enviar á sus hijos, mejor que á la escuela, al taller ó á

los trabajos del campo.247

243 Meneses, et. al. Tendencias, 1983. 244 “Parte oficial”, La Independencia, 5 de abril de 1861. 245 “Proyecto de ley para reglamentar la instrucción primaria gratuita y obligatoria á [sic] todos los estados

de la República”, El Constitucional, 12 de abril de 1861. 246 Meneses, et. al. Tendencias, 1983, p. 154. 247 Manuel M. de Zamacona, “Educación Pública. Escuela Normal”, El Siglo Diez y Nueve, 13 de abril

de 1861.

92

Debe de entenderse que pese a las grandes innovaciones que postuló la Revolución

de 1789, las luchas por la igualdad de género tuvieron que irse concretando hasta ya

entrado el siglo XX, al menos en México, salvo por contadas excepciones; y esto es

claro al momento de observar el currículum propuesto para la Normal de mujeres, en

las que destacan materias como Dibujo de animales, flores y paisajes en comparativa

con los hombres que tenían Dibujo lineal y de ornato; Jardinería, Construcción de flores

artificiales, Costura y bordado, Música y baile para las mujeres248 entre otros ejemplos

claros de la todavía limitación social de las mujeres.

También se estableció un nuevo plan de estudios a nivel Preparatoria en el cual

obviamente desaparecieron las cátedras que tenían que ver con la religión. Por lo que,

como se mencionó en los primeros párrafos de este trabajo, los liberales impusieron

su tónica educativa conforme al modelo francés, dejando de lado, en su mayoría, las

disciplinas humanísticas. Se puede encontrar, en el caso de la preparatoria, elementos

como el Latín, Griego y Metafísica, legado de los conservadores,249 y entraban

materias como Geografía, Economía política estadística y la Historia sagrada era

suplida por Historia general y del país.250 El proyecto de ley quedó trunco en algunas

disposiciones debido a la intervención de los países europeos y específicamente a la

llegada de los franceses.

Inglaterra, España y Francia fueron los países más interesados en realizar una

intervención en nuestro país, puesto que tenían miras a disfrutar de los beneficios de

un comercio en el continente americano,251 ya que los Estados Unidos se encontraban

en expansión y avance industrial, aunque de momento detenidos ya que dicha nación

se encontraba en medio de una guerra civil. El 31 de octubre de 1861, los tres

gobiernos acordaron “bloquear los puertos mexicanos del Golfo para presionar la

248 Meneses, et. al. Tendencias, 1983. 249 Debe quedar claro que aún para el siglo XIX, mucha de la literatura científica internacional se

encontraba en los idiomas clásicos. 250 Meneses, et. al. Tendencias, 1983. 251 Miranda, Evolución, 2008.

93

reanudación de pagos, sin intervenir en la política interna”.252 Por lo que en diciembre

del mismo año llegaron al puerto de Veracruz embarcaciones de los tres países.

Con la finalidad de poner fin a las hostilidades y al ultimátum de los países

extranjeros, Juárez decidió derogar las leyes antes mencionadas respecto a los pagos

de la deuda e invitó a los aliados a realizar una conferencia con el ministro de

Relaciones de México, Manuel Doblado. En el año de 1862 el ministro Doblado lograba

persuadir a los representantes de España e Inglaterra, sin embargo, los franceses

dieron una rotunda negativa puesto que Napoleón III tenía más intereses en expandir

su imperio a la vez que detenía el propio por parte de los Estados Unidos. El conde de

Lorencez decidió iniciar el avance hacia la capital con un ejército de 6 000 hombres

por lo que “Juárez decretó una amnistía a los militares conservadores y autorizó la

formación de Guerrillas”.253 El general Ignacio Zaragoza fue derrotado en Orizaba al

tratar de impedir el avance de las tropas intervencionistas y se vio obligado a

replegarse hacia el estado de Puebla con el fin de preparar una nueva defensa.

Arribando al estado de Puebla, el conde Lorencez se confió de su superioridad

militar, por lo que avanzó sobre el estado, pero la misma geografía del estado y la gran

capacidad de análisis de Zaragoza le dieron el triunfo ante los franceses el cinco de

mayo de 1862. Pero la “humillación sólo sirvió para que Napoleón enviara 30 000

soldados más con un nuevo mando”.254 Este nuevo ejército comandado por Elías

Federico Forey fue contundente, pues declaró al territorio mexicano como conquistado.

Juárez decidió retirarse en el año de 1863 y mudó su gobierno hacia el estado de San

Luis Potosí. El 7 de junio de ese año, el ejército francés hacía su entrada a la capital.

Una vez instalado el ejército invasor, Forey hizo proclama sobre el

mantenimiento de las leyes decretadas por el gobierno liberal255 lo que generó gran

confusión entre los conservadores. Forey fue sustituido por el general Aquiles Bazaine

252 Vázquez, “Independencia”, 2008, p. 308. 253 Ibid., p. 309. 254 Ibid., p. 309. 255 Miranda, Evolución, 2008.

94

quién ordenó el avance del ejército hacia el norte, por lo que Juárez volvía a trasladarse

encontrando refugio en Coahuila, pero, el avance de los intervencionistas lo obligó a

replegarse hacia Monterrey. En este punto, existió una decisión tomada por Juárez y

que afectaría sobre manera los años posteriores, puesto que debido a la lucha contra

la intervención, los liberales “se ven obligados a revender urgentemente las tierras a

quienes puedan pagarlas inmediatamente”256 con la idea de conseguir recursos

económicos que les permitiesen seguir combatiendo. La venta de estas tierras llevaría

a la instauración y reinstauración de una clase poderosa y terrateniente, aquella contra

la que se combatiría a principios del siglo XX.

Mientras tanto los franceses y conservadores mexicanos convocaron a una

asamblea de notables, quienes el 19 de julio proclamaron el imperio, invitando a

Maximiliano de Habsburgo a ocupar el nuevo trono mexicano.257 En principio,

Maximiliano declinó la invitación ya que “cree que estando tísica la emperatriz su

cuñada, y adoleciendo sus hijas de la misma enfermedad podrá llegar á ser

emperador”.258 Finalmente la invitación es aceptada y el 28 de mayo de 1864,

Maximiliano y su esposa Carlota arribaban al puerto de Veracruz, dando inicio a la fase

de la historia de México conocida como el Segundo Imperio.

2.2.1 Educación durante el Imperio, un corto periodo

En realidad, el periodo de la llegada del imperio hasta su derrota es relativamente

corto, sobre todo en lo referente a las ideas educativas, propuestas y reformas que

lograsen llevarse a cabo. Fue Bazaine quien mantuvo la proclama de las Leyes de

Reforma y Maximiliano fue consolidándolas a su llegada lo que generó el disgusto con

el ala conservadora al momento de ser aplicadas y, esto se debe a que tanto Fernando

Maximiliano, así como su hermano Francisco José, recibieron una educación europea

liberal a cargo de su instructor el alemán Conde Bombelles. Sus estudios básicos

256 Martínez, Estado, 2012, p. 88. 257 Vázquez, “Independencia”, 2008. 258 Francisco Zarco, “La monarquía en México”, El Siglo Diez y Nueve, 3 de marzo de 1862.

95

estuvieron centrados en la enseñanza de las lenguas, tales como el alemán, el

húngaro, francés y bohemio, sumando a esto la geografía y la historia259 y esto es

evidente, ya que desde niños, como toda la educación burguesa puede dar, fue casi

obligación los viajes a distintos países, desde Grecia y pasando por todo el

Mediterráneo, recorriendo Asia y hasta llegar al Cairo260. Más tarde, su educación sería

complementada con leyes, contaduría, italiano, polaco, estudios militares y diplomacia.

Tal vez la visión de otros mundos abrió el panorama de pensamiento e ideas

educativas en el gobernante de México y que trataron de ser plasmadas en la Ley de

instrucción pública de 1865. Es curioso saber, para aquellos quienes hoy en día

estudian y aborrecen la “tarea”, fue el propio Maximiliano quien la introdujo dentro de

la ya mencionada ley: “Todos los alumnos deberán hacer por escrito, fuera de las horas

de clase, trabajos relativos a las materias que estudien, ora traducciones en el caso

de lenguas, ora composiciones libres con temas asignados por el profesor, oras

solución de problemas matemáticos […]”.261

En una carta al entonces ministro de Instrucción Pública y Cultos Manuel Siliceo,

Maximiliano hizo notar la necesidad de organizar la instrucción pública, la cual debía

ser accesible, gratuita y pública, lo más alejada de la Iglesia, que debía limitarse a los

seminarios y a la enseñanza de los fieles. Esto debía aplicarse por lo menos a la

instrucción elemental.262

Una serie de desacuerdos entre Siliceo y los conservadores, ya que el primero

consideraba a la educación colonial española con el objetivo de mantener ignorante a

la masa mexicana, lo que suscitó la polémica siendo el defensor de la educación

española, Manuel Castellanos puesto que desde la idea de los conservadores, la

educación venida de los españoles había contribuido al avance de la sociedad

mexicana. Maximiliano, al enterarse de las polémicas entre Siliceo, decidió nombrar

259 Meneses, et. al. Tendencias, 1983. 260 José María Gutiérrez de Estrada “Noticia biográfica del Archiduque Fernando Maximiliano de

Austria”, La Sociedad, 21 de noviembre de 1863. 261 Meneses, et. al. Tendencias, 1983, p. 162. 262 Ibid.

96

como nuevo ministro a Francisco Artigas quien llevaría a cabo el encargo de la Ley de

instrucción.

Antes de proclamar la ley y del lanzamiento de un plan, el gobierno envió una

proclama en la cual se hablaba de la obligatoriedad de la educación primaria. “La

legislación del Segundo Imperio invitó a los padres a cooperar más estrechamente en

la educación de sus hijos y a estar en contacto con los maestros”.263 De igual forma se

solicitaba que los padres debían enviar a sus hijos a los institutos de instrucción de los

cinco a los quince años y en caso de descuido, los primeros debían pagar una multa,

ya fuese de un real o un peso según la circunstancia económica.

Desde estas fechas se puede encontrar ya la idea de la vigilancia por parte de

las autoridades hacia los maestros, ya que los subprefectos y alcaldes debían de

encargarse de visitar y vigilar a los preceptores “para cerciorarse de los adelantos de

los alumnos, de la regularidad de la distribución y del trato que los preceptores den a

los discípulos con dulzura y buenas maneras propias de su delicado ministerio”264.

Hemos notado dos cosas curiosas respecto a la ley de 1865. La primera es que

dicha ley se encaminó a reformar, principalmente, los estudios secundarios,

preparatorios y superiores, por lo que se piensa que la instrucción primaria trabajó bajo

el plan de Ignacio Ramírez,265 sin embrago se abrieron otros institutos de educación

como fue el Colegio Mexicano, el Hispano-Americano de Jesús, o el Franco-Mexicano,

de este último se encontraron varios documentos en el que se plasma el plan de

estudios el cuál reproducimos para su análisis:

Plan del Colegio Franco-Mexicano

Lectura Gramática castellana

Doctrina cristiana Caligrafía en general

Urbanidad Matemáticas

263 Staples, “Entusiasmo”, 2011, p. 119. 264 Meneses, et. al. Tendencias, 1983, p. 158. 265 Ibid. y Staples, “Entusiasmo”, 2011.

97

Ortografía Teneduría de libros

Aritmética Idioma francés

Historia universal Idioma inglés

Geografía Idioma latino

Música Dibujo y pintura

Asignaturas en las escuelas Franco-mexicanas de la Ciudad de México durante el Segundo imperio,

México, 1866, en AHCM, Ayuntamiento, Segundo Imperio: Maximiliano documentos diversos, vol. 2314,

exp. 14, fs. 61. (elaboración propia).

En primera instancia, podemos observar la inserción de la doctrina cristiana, al

igual que en el plan de preparatoria se encuentran la Metafísica y la Filosofía moral,

por lo que a pesar de lo que se pueda decir, encontramos una gran influencia en

asignaturas defendidas por los conservadores, es decir, dirigidas a las humanidades.

Sin embargo, los planes son similares a diferencia también, de Dibujo y pintura que en

el caso de la ley de 1861, estaba reservada para los maestros y maestras normalistas

y que acorde a la pedagogía francesa del siglo XIX, era de gran importancia para el

desarrollo sentimental humano.

Se dio apertura al Liceo Franco-Mexicano, que estaba encaminado a los

conocimientos prácticos, científicos y al acatamiento de las doctrinas cristianas266 y en

donde se podían llevar cursos de instrucción primaria y secundaria con la idea de

preparación hacia las carreras profesionales. En algunos casos, muchas de estas

escuelas tenían como requisito el viajar por Europa con la finalidad de continuar

estudiando, así como tomar cursos en Francia, lo que evidentemente lleva a la

imposibilidad de sostener una educación así por parte de las clases trabajadoras.

Los establecimientos privados debían estar incorporados a los públicos y al

igual que los liceos, se daba la apertura a colegios literarios los cuales se encaminaban

a los estudios en facultades como medicina, derecho o filosofía y las escuelas de artes

266 Staples, “Entusiasmo”, 2011.

98

las cuales iban dirigidas a carreras prácticas y especialidades.267 Por otro lado, dichos

establecimientos podían ser apoyados por el gobierno o auto-sustentarse con rentas

que estuviesen destinadas a la misma enseñanza.

Paradójicamente, existía un apartado especial referente al profesorado, el cual

describía las aptitudes que éste debía tener, como: buena conducta, un amplio

conocimiento en las ciencias, pero lo paradójico a que hacemos referencia es que los

profesores que ingresaban, debían acceder por medio de un “riguroso examen

determinado en ley especial”.268 Los profesores con mayor aprovechamiento seguirían

sirviendo en los liceos y colegios mientras los que no tenían un aprovechamiento

satisfactorio, servirían tres años y después deberían sustentar un examen con la

finalidad de continuar o no con su labor docente.

Pero la guerra sostenida entre el gobierno de Juárez en contra del de

Maximiliano impidió llevar a cabo muchas de las propuestas vertidas en la ley de 1865,

por lo que muchas de éstas quedaron en el papel. A pesar de contar con un vasto

ejército de casi 63 000 hombres entre franceses, austriacos, belgas y mexicanos269 y

de ocupar casi todo el territorio mexicano, el ejército del oaxaqueño con Porfirio Díaz,

Ramón Corona y Mariano Escobedo en el frente, le proporcionaron victorias

importantes con la finalidad de expulsar a los invasores. Aunado a esto, se sumaron

las problemáticas que Maximiliano comenzó a tener con Bazaine y las circunstancias

nacionales como la impopularidad de Napoleón III y el crecimiento de Prusia al mando

de Bizmarck, así como el término de la guerra civil en los Estados Unidos y su posterior

desaprobación al imperio mexicano, obligaron a Maximiliano a replegarse hacia el

estado de Querétaro y siendo detenido con 8 000 hombres entre ellos Tomás Mejía y

Miguel Miramón, según El Monitor Republicano ambos sostenían “una grave

responsabilidad, por haber sostenido durante muchos años la guerra civil, sin

detenerse ante los actos más culpables, y siendo siempre un obstáculo y una

267 Meneses, et. al. Tendencias, 1983. 268 Ibid., p. 163. 269 Miranda, Evolución, 2008.

99

constante amenaza contra la paz y la consolidación de las instituciones de la

República”.270 Finalmente los tres serían fusilados el 19 de junio en el Cerro de las

Campanas, Querétaro.271 Fue gracias a este contexto de crisis e inestabilidad dentro

del territorio, que pudo abrir la brecha que posibilitó la llegada de extranjeros a México

y a otras partes de América.

2.3 Los motivos y las circunstancias. Plotino Rhodakanaty, un griego socialista

Plotino Constantino Rhodakanaty (1828-¿?),272 es un personaje conocido en algunos

sectores obreros, libertarios y hasta agrarios, debido a su gran influencia político-

ideológica, pero al mismo tiempo es escurridizo y desconocido.

Uno de los primeros historiadores en hacer referencia a este personaje fue José

Cayetano Valadés quien menciona: “Cuando el partido liberal regresó triunfante a la

capital de la República, después de la derrota del general conservador Miguel

Miramón, en Calpulalpan, llegó a puerto de Veracruz y por primera vez a México, un

socialista: Plotino C. Rhodakanaty”.273 Por algunos momentos se llegó a creer que era

el disfraz de un médico mexicano quien se hizo pasar por griego con la finalidad de

hacer propaganda filosófica spinozista.274

Se sabe que nació en Atenas, Grecia, procedente de una estirpe de nobles

bizantinos denominados Rhodakanakes. La familia se diseminó en ramas que a la vez

se distribuyeron en Europa huyendo de los turcos.275 Su padre fue un destacado

médico y escritor que terminaría participando en la lucha de liberación griega en contra

270 Mariano Escobedo, Documentos publicados en El Monitor Republicano, 6 de julio de 1867. 271 Ibid. 272 Hasta el momento, no hay ninguna referencia sobre su muerte. Se tiene la creencia que tras algunos

fracasos y otros aciertos como la participación en la organización obrera, Rhodakanaty fue legando su trabajo a los más jóvenes y prominentes actores del movimiento anarquista como fue su alumno Francisco Zalacosta, hasta que el primero desapareció de la escena. Se piensa que regresó a Europa en el año de 1886, año de sus últimas participaciones públicas y escritas. Vid, Hart, (1974); Valadés, (1984) y Nettlau, (2008). 273 Valadés, Socialismo, 1984, p. 17. 274 Cappelletti y Rama, Anarquismo, 1990. 275 Illades, Rhodakanaty, 2002.

100

del imperio turco. Desafortunadamente perecería en los últimos momentos antes de

lograr la independencia griega con el apoyo de Rusia, Francia e Inglaterra. Tras el

deceso de su padre, la madre del joven griego decidió trasladarse a Viena “al lado de

sus abuelos maternos, que, según parece, disfrutaban de ciertas posibilidades

económicas”.276 No se tienen datos sobre su infancia y adolescencia, las pistas llegan

a su juventud en donde comienza a realizar estudios de medicina en la Universidad de

Viena. Sin embargo el joven Plotino se dio cuenta de que su pasión por la filosofía lo

llenaba de satisfacciones a lo que la familia decidió trasladarse a Berlín en donde

podría seguir con su preparación filosófica, pero antes de arribar a dicha ciudad,

Rhodakanaty llegó a Budapest en donde sería participe de las revueltas campesinas

y artesanas.277 Se unió a los luchadores que encabezados por Lajos Kossuth,

declararon la abolición del feudalismo, se decretaron reformas agrarias, políticas y se

enunció la independencia de Austria.278

Pero pese a los intentos insurreccionales, y a la proclama de 1849 de Kossuth

emitiendo la República, los movimientos revolucionarios serían brutalmente reprimidos

por el zar Nicolás I. Se persiguió, se atrapó y se fusiló a todos aquellos que participaron

en los levantamientos y el propio zar se encargaría de echar atrás las proclamas

revolucionarias y dividiendo al país por provincias, todas bajo el control del gobierno

austriaco.

Tras estos acontecimientos y con la idea de la lucha por parte de los

desheredados, continuó su viaje hacia Berlín en donde comenzaría sus estudios de

filosofía, y como muchos de los jóvenes del siglo XIX, es seducido por las ideas de

Hegel, de Schelling, de Krause y Spinoza279. Radicó en aquella ciudad hasta el año de

276 Valadés, Socialismo, 1984, p. 18. 277 Illades, Rhodakanaty, 2002. 278 Ibid. 279 Para mayores referencias sobre el pensamiento filosófico de Rhodakanaty, el lector puede consultar

la tesis de licenciatura titulada “La filosofía política de Plotino C. Rhodakanaty”, 2015, de Juan Carlos García Fonseca, en donde el autor revisa todas las influencias del griego y como éste a su vez influyó en la práctica política de sus alumnos y seguidores.

101

1857.280 Es sobresaliente la comparativa que realiza Ángel Cappelletti entre el joven

griego y el revolucionario por excelencia, Mijaíl Bakunin en sus andanzas por Europa:

En todos estos hechos no puede pasar inadvertida la semejanza con la

biografía del joven Bakunin, catorce años más viejo que Rhodakanaty. Ambos

pertenecían a familias nobles, ambos se interesaron por la filosofía y

admiraron a Hegel, ambos se comprometieron pronto en las luchas de los

pueblos sujetos al yugo imperial por lograr su independencia. Más aún, ambos

viajaron a París y quedaron definitivamente determinados por el pensamiento

de Proudhon.281

Paradójicamente, los dos llegaron al continente americano en el año de 1861,

el ruso escapando de la persecución por parte de los países europeos y el griego con

la finalidad de llevar a cabo sus ideas socialistas.

En Berlín también realizaría la lectura del socialista Charles Fourier y ¿Qué es

la propiedad? de Joseph Proudhon, a quien efectivamente, según Rhodakanaty, en el

año de 1850 realizaría un viaje a la ciudad de París para conocer al teórico anarquista:

“La emoción que me embarga sólo es comparable con la sentida en 1850, cuando

satisfecho con la lectura de las obras de Proudhon, llegué París a conocer al maestro.

Era yo entonces un mocetón, robusto y satisfecho y con inclinaciones burguesas, pero

sin embargo, el espíritu revolucionario me atraía y estaba por perder mis estudios”.282

Hacia el año de 1857, Plotino Rhodakanaty decidió viajar a París nuevamente

con la idea de continuar sus estudios filosóficos, además de continuar con estos

últimos “comenzó a militar en las filas socialistas […]”.283 Sería en la ciudad gala en

donde publicaría su primer texto llamado De la Naturaleza en donde comenzaría a ser

conocido entre los círculos socialistas.

280 Valadés, Socialismo, 1984. 281 Cappelletti y Rama, Anarquismo, 1990, p. 117. 282 Carta de Rhodakanaty a Francisco Zalacosta reproducida en Valadés, Socialismo, 1984, pp. 27-28. 283 Illades, Rhodakanaty, 2002, p. 23.

102

Ya en el año de 1860, se enteró de un decreto hecho por Ignacio Comonfort durante

el año de 1856284 en el que se alentaba a los extranjeros a formar colonias agrícolas

otorgándoseles la naturalización al comprobar la propiedad de los territorios.285 Decidió

viajar a México, pero también se enteraría de la guerra civil en la que se encontraba el

país y suspendió el viaje trasladándose a España, específicamente a Barcelona en

donde estudiaría y perfeccionaría el idioma. Al saber de la victoria liberal viaja a México

arribando en los últimos días del mes de febrero de 1861 a fin de llevar a cabo la

organización de falansterios fourieristas y comenzar a divulgar sus doctrinas

socialistas. Para ello redactó un folleto titulado: Cartilla Socialista o sea el Catecismo

Elemental de la Escuela de Carlos Fourier. El Falansterio.

2.3.1 La Cartilla Socialista, educación y organización obrera y campesina

México fue un contexto propicio para el establecimiento de las colonias, congruentes

con las ideas preconizadas por Fourier y Proudhon en cuanto a la necesidad de una

organización eminentemente más agrícola que industrializada.

Tras su arribo a Veracruz, y durante el viaje a la Ciudad de México, el joven

griego se dio cuenta de que los campesinos mexicanos contaban ya con una

organización similar a la que hacían alusión los dos pensadores franceses, “aunque

en su opinión seguían siendo oprimidos por el cerco de los hacendados y la

indiferencia de un gobierno hostil”.286 Solo hacía falta ese pequeño empuje que las

ideas socialistas podían ofrecer a los trabajadores de México. Desafortunadamente,

Rhodakanaty notó que el decreto hecho por Comonfort cinco años atrás había sido

olvidado, tal vez por el poco interés en una nación que con esfuerzo comenzaba a

construirse, o quizá por la situación política de belicosidad entre los liberales y los

conservadores. El caso es que Plotino Rhodakanaty no se daría por vencido y no

284 Realmente no existe una versión oficial en la que Rhodakanaty supo de dicho decreto, Illades, Acri y

Cácerez solo mencionan que el griego conoce tal información, mientras que Cappelletti, Valadés y Hart mencionan que se enteró por vía de unos amigos mexicanos radicados en París, pero no hay mención a la identidad de éstos. 285 Illades, Rhodakanaty, 2002. 286 Hart, Anarquismo, 1980, p. 30.

103

descansaría hasta cumplir con su objetivo de organizar a la sociedad bajo las ideas

del socialismo.

En el mismo año de 1861, Rhodakanaty redactó la obra con la que pretendía

insertarse en los círculos sociales de México: La Cartilla Socialista o sea el Catecismo

Elemental de la Escuela de Carlos Fourier. El Falansterio. En ésta se reflejan todos los

ideales del griego y la influencia de los pensadores franceses a consecuencia del

desencanto de la revolución de 1789. En sus primeras páginas podemos leer: “Plotino

Rhodakanaty, fundador de La Social, quien le dedica al uso, instrucción y práctica de

la clase obrera y agrícola de la República”, en donde se comienza a demostrar la

importancia que el griego otorgaba a la instrucción de las clases explotadas.

Como se describió en el primer tema de este capítulo, las ideas de los liberales

basadas en los postulados franceses e ingleses de la Europa decimonónica, afectaron

grandemente las formas organizativas de los residentes en México. La Ley Lerdo,

como se mencionó con antelación, trajo dificultades con la Iglesia y posteriormente con

el sector campesino e indígena de México. No era la primera vez que este sector se

encontraba en problemáticas referentes a la tierra, sino que ya había antecedentes de

bastante tiempo atrás. Las Leyes de Reforma, específicamente las de Lerdo y Juárez,

no solo retiraron las posesiones de las tierras comunales a los campesinos, sino que

fue la puerta de entrada a una nueva élite de terratenientes apoyados no solo por el

poder gubernamental sino por las propias leyes.

“El resultado último de este proceso fue la parcial consolidación económica de

algunos nuevos industriales urbanos y de los grandes latifundistas tradicionales dentro

de una reconstituida élite amalgamada que gobernó México hasta la Revolución de

1910”.287 Proceso complejo pero muy similar al que se suscitó en la Francia

revolucionaria. La necesidad de sostener un gobierno económicamente débil y que

estaba en conflicto con otro sector social -en el caso de México, los conservadores-

orilló al propio gobierno a tener que vender las tierras expropiadas y dar paso a cúpulas

287 Hart, Anarquistas, 1974, p. 24.

104

que contaban con el capital necesario para aplastar a los pequeños propietarios,

fuesen estos artesanos individuales o gremios que obviamente no pudieron competir

con los dueños de industrias o de latifundios.

Los que no estuvieron dispuestos a quedarse y servir a dueños de la tierra, que

además de poderosos eran déspotas y despreciativos, tuvieron que migrar a las

grandes ciudades transformándose en la clase obrera mexicana naciente carente de

ideologías que fuesen políticas y explícitas. Esto se debía a la falta de instrucción de

las mismas clases. Si bien los gobiernos se esforzaron por dar instrucción pública y

obligatoria a las nuevas generaciones de mexicanos basados en la ideología liberal,

de identidad nacionalista, las generaciones anteriores pocas oportunidades tenían

para educarse, exceptuando la versión conservadora y religiosa del mundo que la

Iglesia tenía para brindarles. El trabajador nativo de las ciudades no era la excepción

pues desde pequeño

se ha criado en los talleres, obteniendo, por obedecer á [sic] la imperiosa ley

de la necesidad, un oficio, debía, en lugar de acudir a las tabernas ó [sic]

garitos en las horas de descanso que sus ocupaciones le permiten, á donde

va en busca de asquerosos vicios, frecuentar las Escuelas Nocturnas que el

Gobierno ha establecido y también algunas sociedades mutualistas, dignas

por eso del mayor encomio.288

Aunado al problema de la instrucción, como lo relata Félix Delvaille, los obreros

eran orillados a caer en el vicio debido a las complicadas y duras jornadas laborales a

las que eran sometidos, siendo así embrutecidos y sin objetivos como clase

emergente. El problema es que la situación tanto para el trabajador migrado del

campo, como para el nativo de la ciudad se dificultaba, puesto que los artesanos de la

ciudad comenzaron a entrar en competencia, no ya solamente contra las industrias,

sino que se verían afectados por los mismos migrados del campo. Los artesanos de la

ciudad constituían una parte importante, no solo poblacional, sino productiva en la vida

288 Román Félix Delvaille, “La situación del obrero en México”, El Obrero Mexicano, 29 de abril de 1894.

105

del país, sin embargo, en la estructura social, éstos estaban en la parte más baja solo

por encima de los mendigos y los léperos.289

Entre los trabajos de artesanos más ocupados estaban los de herreros,

carpinteros, hojalateros, impresores, pintores, plateros, sastres, sombrereros,

talabarteros, tejedores y zapateros.290 Se entiende el por qué las sociedades de

sastres, sombrereros y tipógrafos serían las más fuertes y las que encabezarían las

huelgas obreras entre 1860 y 1880. La situación de los trabajadores era paupérrima,

sus salarios eran de hambre y si en algún momento tanto el trabajador como su

compañera e hijos lograban comer una vez al día se consideraban satisfechos por ello.

“Si se visitan los empeños, allí se verá que no solamente hay objetos que constituyen

el lujo del obrero, sino herramientas y hasta las prendas más indispensables para

cubrir el cuerpo”.291

Debemos tener en cuenta que antes de la llegada de Rhodakanaty, existieron

sociedades de apoyo mutuo y cooperativas puesto que su declive frente al proceso

político-industrial de los gobiernos liberales obligó a los trabajadores a organizarse.

“Su posición de debilidad en relación con otros grupos sociales, junto con los factores

ya mencionados, llevó a estos trabajadores a agruparse para defenderse y fortalecer

su presencia dentro del entramado social y urbano”.292 Y esto se debe a que muchos

de los maestros artesanos llegados delas afueras de la ciudad comenzaron a

organizarse de manera gremial en los círculos obreros de la ciudad.

Las sociedades mutualistas, de manera específica, estaban encaminadas en

ayudar a sus miembros. “Los socios debían pagar por lo general una cuota mensual

que les daba derecho a un salario los primeros cuarentena días de enfermedad y una

ayuda más pequeña en los días subsiguientes, recibiendo además atención médica

gratuita y, en caso de fallecimiento, los gastos del sepelio habrían de correr por cuenta

289 Illades, “República”, 1993. 290 Ibid. 291 González. Artesanado, 1974, p. 51. 292 Illades, “República”, 1993, pp. 114-115.

106

de la mutualidad”.293 De esta manera se crearon diversas sociedades de trabajadores

e lo largo y ancho de la ciudad como: La Gran Familia Artística, la Sociedad Mutua del

Ramo de Sastrería –organizada por Santiago Villanueva, alumno de Rhodakanaty-, La

Sociedad Artística Industrial, La Sociedad Fraternal, La Unión de Tejedores de

Miraflores, La Unión Mutua de Tejedores del Distrito de Tlalpan que abarcaba las

fábricas de La Abeja, Contreras, Tizapán y La Fama Montañesa; además de las

sociedades mutualistas de San Ildefonso y La Colmena”.294 A lo que el trabajo del

griego y La Social -alumnos y adeptos a las ideas socialistas- fue el de ayudar a

articular y dar coherencia a la lucha y organización obrera y campesina proveyéndola

de una ideología consecuente ya con la misma organización.295 En esa lógica estaba

formada la Cartilla de 1861.

Pese a los postulados de Fourier y Proudhon los cuales, a pesar de la influencia

del primero sobre el segundo, en ocasiones discrepaban y se distanciaban,

Rhodakanaty logró articular las dos posiciones y mezclarlas en el contexto mexicano,

ganó el amalgamiento de posiciones filosóficas europeas y consiguió crear un

socialismo mexicano emergente y que en ocasiones, a pesar de su particularidad, tuvo

bastante fuerza en los años posteriores a 1865.

Para Rhodakanaty, el socialismo era la única forma en que se podía desarrollar

una sociedad solidaria, puesto que en él, se ven vertidas las necesidades del hombre

y por ende de lo que denomina la gran familia humana.296 Sería dentro del socialismo

(anarquismo), que los humanos lograrían un pleno desarrollo, pues este tipo de

sociedad les brindaría a los mismos una vida segura en cuanto a subsistencia, salud

y desarrollo intelectual. Miraba en la revolución social, no la lucha de clases, sino la

lucha por la conservación y la existencia de la clase opresora, quien abusaba de todos

aquellos oprimidos víctimas de las condiciones del sistema.

293 Basurto, “Organizaciones”, 1975, p. 60. 294 Ibid., p. 61-62. 295 Hart, Anarquistas, 1974. 296 Rhodakanaty, Obras, 1998.

107

Como se menciona con antelación, Plotino Rhodakanaty retoma las ideas del

pensador Charles Fourier, en donde se puede analizar dentro de la Cartilla Socialista

principalmente, la organización falansteriana. Además de Joseph Proudhon retoma la

idea de solidaridad y federalismo, considerándolas las únicas fuentes inagotables del

socialismo, y en donde sería posible encontrar las bases para llevar a cabo la liberación

del pueblo.297

En el siguiente fragmento podemos encontrar la influencia de los dos franceses

y su descripción de la organización social:

Será aquel cuya hipótesis pueda concebirse como un orden en el cual

individuos, familias y pueblos asociarán libremente su actividad, para producir

el bien de todos y cada uno, por oposición al estado actual en que individuos,

familias, pueblos y clases, atrincherados en la estrecha ciudadela de sus

intereses egoístas, se oprimen y luchan miserablemente unos contra otros,

con grave detrimento de todos y cada uno, de la sociedad y del individuo.298

En este breve fragmento es fácil encontrar las ideas de Fourier y Proudhon,

sobre todo del segundo, mediante la libre asociación de los individuos, “el federalismo

anarquista se refiere, ante todo, a la organización económica: la toma de los medios

de producción por parte de los productores libremente asociados”.299 Pero a pesar de

la fuerte influencia de Proudhon en sus escritos respecto a la organización de la

sociedad, la idea del falansterio de Fourier es más fuerte y evidente en otros textos,

por ende, Rhodakanaty habla del federalismo como modo de organización

internacional, mientras la idea del falansterio refiere a las pequeñas organizaciones

campesinas y obreras; y que finalmente, buscan una estructura u organización similar.

La idea del falansterio se funda, en efecto, en una concepción del trabajo libre

como fuente de goce y alegría, y supone una comunidad cooperativa y

297 Valadés, Socialismo, 1984. 298 Rhodakanaty, Escritos, 1976, p. 22. 299 Cappelletti, Ideología, 2010, p. 34.

108

solidaria, así como el ideal de la personalidad humana integrada y de la

sociedad estructurada sabiamente sobre la armonía de los instintos. El Estado

no desempeña papel alguno; no hay gobernantes propiamente dichos. Se

trata de sustituir el principio del lucro por el del placer y la meta del dominio

por la de la creación.300

Mientras que Proudhon dice del federalismo:

Según estos principios, como el contrato de federación tiene por objeto, en

términos generales, el garantizar a los estados confederados su soberanía,

su territorio y la libertad de sus ciudadanos; el arreglo de sus desavenencias;

la provisión por medidas generales, de todo lo que interese a la seguridad y a

la prosperidad comunes, este contrato, digo, a pesar de la magnitud de los

intereses comprometidos, es necesariamente restringido. La autoridad

encargada de su ejecución no puede nunca prevalecer sobre sus

constituyentes, quiero decir que las atribuciones federales no pueden jamás

exceder, en número y en realidad, a las de las autoridades comunales o

provinciales, del mismo modo que éstas no pueden ir más allá de los derechos

y prerrogativas del hombre y del ciudadano. Si fuese de otro modo el consejo

sería una comunidad: la federación volvería a ser una centralización

monárquica; la autoridad federal, de simple mandataria y función subordinada

que debe ser, sería considerada como preponderante […] El cuerpo político

así transformado, podría llamarse República, democracia o lo que queráis; no

sería ya un Estado constituido en la plenitud de sus autonomías, no sería ya

una confederación.301

Haciendo la comparativa entre los tres textos presentados, podemos encontrar

ciertas similitudes, puesto que Rhodakanaty logra conjuntar y sintetizar ambas

filosofías en una sola y que buscó adaptar al contexto mexicano. Y analizando los tres

300 Ibid. p. 56. 301 Cuvillier, Proudhon, 1986, pp. 308-309.

109

cuerpos literarios, encontramos esa búsqueda de una nueva organización social sin la

mediatización de un aparato estatal, que como observamos, limita y divide las

opciones de desarrollo tanto de los individuos como de las mismas sociedades.

Los gobiernos, esos tiranos disfrazados de los pueblos, que so pretesto [sic]

del órden [sic] y estabilidad de la sociedad, se han abrogado la facultad de

dirigir á [sic] las masas por medio de la ley, no son sino unos cuerpos

oligárquicos y ambiciosos de su propio bienestar, que se denominan á sí

mismos democráticos para tener algunos visos de legalidad y poder explotar

á mansalva á los infelices pueblos sobre los cuales hacen gravitar su

execrable poder y autoridad.302

Por lo tanto existe la necesidad de un pacto asociativo libre y voluntario

(federalismo proudhoniano) contrapuesta totalmente al federalismo liberal:

Los que se dicen liberales y admiten un gobierno, carecen de sentido racional

y pertenecen á la raza maldecida de los falsos apóstoles de la democracia.303

Y continúa:

El pueblo no necesita de ellos, ni de sus leyes arbitrarias para ser feliz;

necesita sí de que se organice el trabajo, de que se reparta equitativamente

la propiedad, hoy acumulada monstruosamente entre algunos esplotadores

[sic] de la clase proletaria; necesita de que al industrial y el jornalero se le

remuneren debidamente sus obras para tener con que [sic] hacer consumo al

comercio; de que á este se le ponga una balanza de equidad en sus artículos,

y de que la agricultura que es el ramo mas [sic] esencial para la subsistencia

del hombre, se eleve al rango que le corresponde, quitándole las trabas que

impiden su desarrollo y que tiene por base principal La ley Agraria para dividir

302 Plotino Rhodakanaty, “El estado es el padrastro del pueblo”, La Internacional, 18 de agosto de 1878. 303 Ibid.

110

la propiedad territorial y sacar del mayor número de cultivadores, la mayor

suma posible de productos agrícolas.304

De esta manera se inserta la invalidez de la organización jerarquizada basada

en el contrato social rousseauniano y la división de poderes proclamada por

Montesquieu. Al igual que lo hizo Fourier, pensó que los cambios sociales se darían

de forma natural y que una vez cambiando los modos asociativos cambiarían los

regímenes políticos.305

Como Fourier, Rhodakanaty consideraba que en ese proceso natural de

evolución histórica, la humanidad se encontraba en una fase corrompida por la

propiedad privada, la explotación y la violencia, conllevando un desequilibrio

universal306 por lo que las pasiones -la felicidad y el equilibrio universal- quedaron fuera

de la sociedad corrompida. Por tanto, el socialismo era

[…] la doctrina santa y regeneradora, este sistema sublime y consolador para

el porvenir de los pueblos todos de la Tierra, y cuyo lema grande y filosófico

es el “amor por principio, la justicia por base y el progreso por fin”, a pesar de

sus inmensos progresos y de la saludable influencia que ha ejercido sobre las

masas de las naciones, es generalmente calumniado por los que no lo

conocen, sino por las insulsas y virulentas detracciones con que apostrofan

sus antagonistas, atribuyéndole maliciosamente un origen poco digno de su

noble y elevada misión, cual es la de la regeneración social del mundo.307

Llevando así su propaganda del socialismo como única doctrina social y

redentora de la sociedad corrompida a la que aludía Fourier. Una cosa que hay que

destacar es que, a pesar de que el griego, además de contar con la influencia de

Proudhon y de Fourier como lo he resaltado ya, tenía la influencia panteísta de Baruch

Spinoza en donde consideraba que “Dios es por esencia el sér [sic], el sér infinito, el

304 Ibid. 305 Illades, “Plotino”, 2001. 306 Rhodakanaty, Escritos, 1976. 307 Rhodakanaty y de Mata, Pensamiento, 2001, p. 29

111

sér perfecto. Es pues necesario, que Dios contenga en sí todas las formas de la

perfección. Dios encierra en sí toda la existencia; si el pensamiento es una perfección,

Dios encierra en él el pensamiento; si la existencia es también una perfección, Dios

encierra en sí la extensión; y lo mismo sucede con todas las perfecciones posibles”.308

Conjugando así dos posiciones que pareciesen ser contradictorias, pero que como se

mencionó, Rhodakanaty logró conjugar, su visón teológica proveniente de Spinoza y

Fourier y la posición anarquista de las leyes naturales (Iusnaturalismo) como las únicas

a las que debe responder el ser humano.

Hay muchas leyes que gobiernan la sociedad sin que el legislador sea

consciente de su presencia; pero se trata de leyes naturales, inmanentes al

cuerpo social, al igual que las leyes físicas son inmanentes a los cuerpos

materiales. […] Por eso mismo, tales leyes no deben confundirse con las leyes

jurídicas que, promulgadas por algún poder legislativo, están destinadas a ser,

según la teoría del contrato social, deducciones lógicas a partir del primer

pacto contraído a sabiendas por los hombres.309

De manera que, inconsciente o conscientemente, las dos posiciones

encuentran un punto en común, las leyes humanas (políticas) son impuestas bajo

ciertos regímenes que se escudan bajo la idea del contrato social y, la necesidad

humana de encontrar una armonía con las leyes universales o naturales sea desde

una posición teológica o antiteológica, como es el caso de Bakunin.

Este aspecto es importante, puesto que las ideas de Rhodakanaty, al llegar a

México, se centraron en las cuestiones agrarias. Si bien tuvo la necesidad de viajar a

la Ciudad de México por cuestiones de trabajo y al llegar a ésta se empapó del contexto

y las necesidades del proletariado urbano y su organización, la cuestión campesina

tuvo mucho peso al momento de redactar su Cartilla Socialista, pues la idea de los

falansterios encajaba con el México agrario, y no olvidemos, que tanto Fourier, como

308 Plotino Rhodakanaty, “Médula panteística del sistema filosófico de Spinoza I”, El Socialista, 27 de

marzo de 1885. 309 Bakunin, Escritos, 1990, p. 144.

112

Proudhon, sentaban sus ideas en la organización agrícola, dando importancia a los

trabajadores del campo.

Esto se debe a que éstos últimos, se encontraron, de cierta manera, más

conectados con la Tierra y con la naturaleza, no están bajo la alienación del capitalismo

como es el caso del trabajador de la ciudad, por tanto, los campesinos han de

responder de mejor manera a las ideas y necesidades de las leyes universales

contenidas en la naturaleza y en la cual Rhodakanaty encontrará su justificación en la

organización social campesina en Chalco a mediados de 1865.

El movimiento obrero contaba ya con una organización y cierta conciencia de

clase (bastante decadente), pero el campesinado contaba con la fuerza y la lucha

inherente a éstos y que tal vez, debido a las posiciones teórico-filosóficas de

Rhodakanaty, aceptarían con mayor facilidad al socialismo como doctrina.

2.3.2 El socialismo mexicano basado en la educación

Tras la publicación de la Cartilla Socialista, Rhodakanaty comenzaría a ser conocido

entre algunos círculos estudiantiles de índole progresista. Pero tuvo la necesidad de

trabajar por lo que buscó un puesto en el Colegio de San Ildefonso, al ser rechazado

de éste tuvo que dar clases en una escuela preparatoria.310 Sería en esta institución

en la que Rhodakanaty daría sus primeros pasos serios hacia la formación y

organización de obreros y campesinos.

Las ideas vertidas en la Cartilla llamaron la atención de un grupo de jóvenes

quienes conocieron a Rhodakanaty y terminarían por convertirse en la práctica que el

griego intentó lograr. Fueron tres quienes destacaron en este grupo, Santiago

Villanueva quién según José C. Valadés, que con la idea de no entorpecer sus labores

310 Es claro que desde la llegada de Rhodakanaty al país, sus ideas, tanto filosóficas, políticas, teológicas

y educativas se verían rechazadas por un sistema liberal que trataba de instaurarse en un Estado-nación relativamente nuevo. Se ve reflejado en la negativa de su inserción al Colegio de San Ildefonso y años después al intentar integrar una cátedra en la Escuela Nacional Preparatoria y su debate contra el positivismo mediante su revista El Craneoscopio.

113

comunes, usaba el nombre de Juan Villarreal, pero aun así, fue uno de los primeros

personajes en organizar movimientos obreros en la Ciudad de México, dándole un

rumbo y un objetivo a la lucha proletaria; Hermenegildo Villavicencio, que

desafortunadamente moriría antes de concluir la década de 1860 y el más activo

militante y seguidor de las ideas de Bakunin, Francisco Zalacosta311 quien abandonó

su intención de estudiar medicina para dedicarse a la organización y agitación de las

masas desheredadas. Fue necesario comenzar con el trabajo, pues en palabras de

Rhodakanaty:

[…] recibir diferente educación, encontrarse rodeado de circunstancias

favorables al armónico movimiento de sus facultades nativas, que le hubieren

impulsado a buscar la satisfacción de sus pasiones por la vía del bien, como

medio más fácil de alcanzarla, que por la del mal, son causas que determinan

la diferencia de conducta en el hombre, y que prueban hasta qué punto la

organización social ejerce sobre él acción moral y materialmente.312

Podemos encontrar en la cita pasada, totalmente las ideas fourieristas,

remontándonos al primer capítulo de este texto, en el que según el pensador francés,

la idea de los falansterios no sólo era la de organizar social y económicamente a los

grupos humanos, sino que éstos permitiesen el desarrollo pleno y armónico de las

pasiones humanas, por ende, desde la concepción del griego, el contexto influye

sobremanera en los comportamientos individuales y sociales. Entonces, es menester

desarrollar espacios propicios para la educación de las masas, estos contextos deben

ser libres ya que las pasiones humanas son nativas, son inherentes a los seres, son

“las fuerzas vivas que determinan, nuestros deseos, nuestras voluntades y nuestros

311 Sobre Zalacosta hay un dato curioso, puesto que Max Nettlau en su texto “Actividad anarquista en

México”, 2008, relata que Tom Bell durante el Congreso Obrero de 1875 atacó a los extranjeros debido a sus ideas agitadoras: Plotino Rhodakanaty y el español Francisco Zalacosta. cfr. Valadés, Socialismo, 1984. 312 Rhodakanaty, Escritos, 1976, p. 19.

114

actos, en todos los estados de la sociedad”,313 por lo tanto, contexto y pasiones deben

ser libres para generar mundos armónicos y equitativos.

El grupo encabezado por Rhodakanaty, Villanueva, Villavicencio y Zalacosta

formarían una organización llamada La Social, que en su primera faceta sería

totalmente clandestina, la cual se disolvería al poco tiempo y en el año de 1871 volvería

a ser fundada. Con su reglamento editado en el año de 1876, es posible deducir que

no habría variado mucho el comportamiento entre La Social de los años 60 a la de los

de la siguiente década. Su finalidad era la de centrarse en la vía filantrópica y hacia la

liberación de las masas oprimidas, llevando a cabo una labor pedagógica sin dejar a

un lado la idea de las colonias agrícolas.314

El trabajo de este grupo, no estaba centrado solamente en la liberación de los

trabajadores de la ciudad o de los campesinos explotados por el yugo del capitalismo

primigenio mexicano, sino que su labor se abocaba en la lucha emancipadora de los

sexos (del hombre sobre la mujer) y en la lucha de la liberación animal. En el primer

caso, a diferencia de sus maestros franceses, Rhodakanaty consideraba la

emancipación de la mujer como de orden primordial en la búsqueda de la sociedad

justa y armónica.

Nadie ignora que la rehabilitación y emancipación de la mujer es uno de los

problemas sociológicos más importantes y trascendentales para la civilización

del género humano, por la gran influencia que la mujer ejerce sobre el hombre

en todos los actos de la vida. Nosotros, pues, que consecuentes con nuestro

sistema combatimos enérgicamente la explotación del hombre por el hombre

bajo cualquiera forma, no podemos tampoco admitir ni tolerar el que un sexo

sea explotado por el otro.315

313 Rhodakanaty y de Mata, Pensamiento, 2001, p. 111. 314 “Reglamento de La Social” en Rhodakanaty y de Mata, Pensamiento, 2001. 315 Ibid., p. 55.

115

Por lo que la educación debía abarcar todos los sectores sociales, desde el trabajador,

hasta la mujer, sin dejar de lado a los niños. Sin embargo, Rhodakanaty es depositario

de la fe en la mujer, pues ha de considerarla como la única propicia para la lucha

emancipadora: “Sí, queridas niñas, hermanas de los ángeles, vosotras estáis llamadas

por el estudio a ser las que revindiquéis [sic] a vuestro sexo ultrajado por la injusta

sociedad en que vivimos” y llamándolas a “saborear los goces de la emancipación

ejerciendo las profesiones, practicando las artes, desempeñando con cuidadosa y con

esmerado afán los cargos públicos […]”.316 Rompiendo de este modo con los estigmas

en contra de la mujer decimonónica.

El método rhodakanatyano está basado, como su propia escuela debía

llamarse, en el racionalismo,317 el cual está constituido en la comparación de ideas o

silogismos que de forma dialéctica constituyen un juicio que es “la comparación de dos

ideas, de la cual resulta la afirmación o negación de su verdad o falsedad”,318 el juicio

está determinado por la experiencia de la persona, por ende es importante que para

que exista un desarrollo adecuado en las personas haya un vínculo con su contexto

pues los sentidos cumplen un papel importante como experiencia. Cuestión esta de

gran importancia, pues como Fourier, Rhodakanaty encontraría en la organización

campesina el espacio propicio para el desarrollo íntegro humano, pero que era limitado

y sometido por las condiciones adversas en el país, puesto que la política, el sistema

económico e incluso a religión católica, sojuzgaban las premisas hechas por el griego.

Con la firme convicción de llevar a cabo sus ideales, Rhodakanaty y Zalacosta

partieron en noviembre con rumbo hacia Chalco, mientras la otra parte del grupo -

316 Rhodakanaty, Obras, 1998, pp. 31-32. 317 Podemos aventurarnos a decir que la propuesta de praxis pedagógico-racionalista planteada por

Rhodakanaty se anticipa incluso a una de las primeras propuestas libertarias del siglo XIX, nos referimos al orfanato de Cempuis llevado a cabo por el amigo de Bakunin y pedagogo anarquista Paul Robin (1837-1912), quien tomaría de éste último el concepto de educación integral y del positivismo la idea de educación racionalista proveniente de Saint-Simon y que más tarde sería retomado por la escuela más influyente y conocida en el ámbito libertario: La Escuela Moderna de Francisco Ferrer i Guardia en España. Para mayor información sobre la propuesta de Robin, pueden consultarse los textos aparecidos en la bibliografía al final de este trabajo: “Anarquismo y educación” de José Francisco Cuevas Noa y “Breviario del pensamiento educativo libertario” de Tina Tomassi. 318 Rhodakanaty y de Mata, Pensamiento, 2001, p. 150.

116

Villanueva y Villavicencio- decidió quedarse en la Ciudad de México para comenzar la

organización de los trabajadores urbanos319 y poner en práctica la propuesta de un

socialismo mexicano, peculiar pero que de todas formas causaría gran repercusión en

los círculos obreros, campesinos e incluso burgueses, rompiendo con el modelo liberal

implantado primero por Juárez y después seguido por Maximiliano.

Las propuestas estaban echadas al aire, una, basada en la educación científico-

positivista, buscaba implantar ideas progresistas y cientificistas que coadyuvaran en la

creación de una nación prácticamente nueva y con tintes nacionalistas que estaba

mirando como punto de atención las nuevas generaciones de mexicanos y, por otro

lado, una visión humanitarista evocada principalmente a la educación de las masas

oprimidas que intentaba reformar a la sociedad instaurando las ideas nacientes que

provenían de la revolución y posrevolución francesa y que discordaban con el

pensamiento liberal. Enfocándose sí, en las generaciones venideras, pero a la vez

viendo la transformación del presente como objetivo principal para la búsqueda de una

sociedad libre y poniendo en las manos de los trabajadores la posibilidad de construir

su propia historia, siendo ellas y ellos protagonistas de la misma.

319 En el caso de Villanueva y Villavicencio, ambos personajes tuvieron una gran relevancia y

participación en la organización de los trabajadores de la ciudad. Como se mencionó en el subtema 2.3.1, estos dos alumnos de Rhodakanaty, reorganizaron La Sociedad Artística Industrial del Colegio de San Pedro y San Pablo, debido a una huelga brutalmente reprimida en el año de 1865 por el gobierno de Maximiliano en las fábricas de San Ildefonso y La Colmena. Años más tarde, formarían La Unión Mutua de Tejedores del Distrito de Tlalpan que también se iría a huelga bajo el liderazgo de Villanueva y Villavicencio. Vid. Basurto, Jorge, El proletariado industrial en México (1850-1930), México, Universidad Autónoma de México, 1975. Díaz, Manuel, Apuntes sobre el movimiento obrero y campesino de México, México, Ediciones Cultura Popular, 1974. Hernández Luna, Juan, Movimiento anrco-fourierista entre el Imperio y la Reforma, México, Partido de la Revolución Institucional, 1956.

117

Capítulo 3

La Escuela Libre de la Razón y del Socialismo. Educación campesina bajo la

bandera de la libertad

El territorio mexicano sufrió varios cambios en poco menos de 50 años a partir de la

fecha de su independencia. Las estructuras políticas, económicas, sociales y culturales

se vieron afectadas y los gobiernos tuvieron la necesidad de consolidar el Estado

naciente. Fueron a encontrar en la educación uno de los engranajes principales en la

tarea de esa consolidación -recorrido breve que hicimos en el segundo capítulo.

Debate que se abrió y llevó hasta sus últimas consecuencias la lucha por el

fortalecimiento de un proyecto nacional.

Sin embargo, pese a los esfuerzos y encarnizadas luchas entre los

conservadores y liberales, la educación encontraría su afianzamiento ya casi al término

de los años 60 del siglo XIX. Esto se debió, en gran parte, a que el endeble poder

político del Estado y la “autonomía” con que contaban los municipios impedía el

establecimiento de escuelas, de una propuesta educativa propicia o del sustento de

las escuelas que existían para ese entonces, todo esto aunado a los conflictos que se

han analizado a lo largo de este trabajo.

Particularmente, el estado de México tiene y cobra una gran relevancia durante

el siglo XIX al transformarse en el centro político del país y cobra aún más su

importancia al convertirse en uno de los lugares con mayor tradición de lucha

campesina especialmente en la región de Chalco cuna de la Escuela que llevará a

cabo Plotino Rhodakanaty.

El griego llegó a esta comarca debido a la cercanía con la capital del país, por

su relevancia geográfica y económica, y en mayor escala, por la situación de su

contexto social, predominantemente campesino. Halló en este estado las condiciones

ideales que permitirían la formación de la Escuela, un estrato social explotado y

desheredado, una masa hasta cierto punto homogénea en la lucha por la tierra,

118

antecedentes de comunalidad acordes a los pensamientos de sus maestros teóricos y

la necesidad de una instrucción que permitiese un cambio.

3.1 Antecedentes y contextualizaciones. Cambios y despojo de tierras

Cuando la Ley Lerdo fue llevada a cabo, las afectaciones fueron contundentes, no solo

propiciaron terminar con el monopolio de la Iglesia, sino que terminó con siglos de

organización campesina comunal. “Los liberales deseaban promover la creación de

fincas de tamaño mediano: ni grandes latifundios, ni pequeñas parcelas”,320 sin

embargo, esta táctica no funcionó del todo, pues como mencionamos en el segundo

capítulo, las consecuencias fueron el incremento de propietarios de tierras, así como

un poderío de una pequeña cúpula de personas que duraría, al menos, hasta la

revolución de 1910. El estado de México fue un actor principal en estos cambios.

El estado de México se transformó en el principal abastecedor de productos

como los cereales, el maíz, la cebada o el frijol, lo que terminaba por convertirlo en un

punto central de comercio entre la capital y el mismo estado ya que el lago de Chalco

le proporcionaba la facilidad para el transporte de insumos. La región chalca estaba

entre uno de los distritos más productivos durante las décadas de 1860 a 1910. La

producción se centró en las haciendas ocupando un 40% del territorio del estado, las

más grandes entre las que se encontraban Chalco, Cuautitlán, Lerma, Otumba,321

entre otras. Muchas de estas haciendas tuvieron como actividad principal el corte de

madera que se utilizaba para la construcción y durante la primera mitad del siglo se

encontraban haciendas como La Compañía, El Moral, Miraflores o La Archicofradía

que se dedicaban a la siembra y destilación de aguardiente de caña, de pulque o a la

elaboración de ladrillos,322 también para la construcción como fue el caso de las

maderas.

320 Jarquín, Miño y Cadena, Historia, 2011, p. 112. 321 Ibid. 322 Anaya, Rebelión, 1997.

119

La idea de las Leyes de Reforma era no solo la desamortización de bienes

eclesiásticos, sino restar poder a las corporaciones puesto que las tierras estaban bajo

control de éstas últimas. So pretexto de desequilibrar las fuerzas entre los estados que

conformaban la República, comenzaron a darse las separaciones territoriales en las

diversas entidades, siendo el estado de México uno de los más afectados, por ejemplo

Tlalpan,323 sería retirado como territorio del estado de México y cedido al Valle de

México, capital de la República.

Las reformas liberales encontraron cobijo en los ideales progresistas de

personajes como Joseph María Servín de la Mora Díaz Madrid (1794-1850) hacia los

inicios de México como país independiente. Desde este momento se demostraba la

idea de los políticos, según los ideales del liberalismo -el individuo y la propiedad

privada- que organizaciones como las indígenas eran incompatibles con el progreso.

Según Charles Hale, Mora tenía las influencias de las Cortes españolas y del régimen

de Carlos III en cuanto a la necesidad de restar poder a la Iglesia, y en especial a los

jesuitas, pero a su vez, culpaba a las misiones y a los gobiernos de mantener un

paternalismo sobre los indígenas.324

En la tónica de integrar a los indígenas hacia los ideales liberales, puesto que

éstos tenían conciencia de su condición, intentaron llevar a cabo esa inclusión a base

de leyes pragmáticas en las que habían de encontrar la igualdad ante la ley. Si bien

podemos hablar de “buenas intenciones” por parte de los liberales en la necedad y

necesidad de subir al tren progresista a las comunidades y “aun cuando negase

explícitamente creer en la existencia de razas superiores, Mora dejó traslucir una

convicción más profunda de que el indio era inferior al blanco y de que no se podían

tener mayores esperanzas de que mejorase su posición”.325 Ahora bien, las tierras

323 Es Importante destacar la labor realizada por los socialistas durante la segunda mitad del siglo XIX en

esta región, pues en el año de 1831 comenzó su fase de industrialización al fundarse las fábricas de hilos y tejidos en la Fama Montañesa, lugar que sería testigo de las primeras luchas obreras en el México capitalista. 324 Hale, Liberalismo, 1999. 325 Ibid., p. 329.

120

eran amenazadas por los liberales y los conceptos devenidos de Europa. Se intentó

quitar el adjetivo de “indio” en la idea de convertirlo en ciudadano, aún y pese a las

circunstancias en las que se encontraba. Teniendo así como antecedente directo de

este despojo, las propuestas de Mora y Gómez Farías. “Y vosotros que habéis

despojado al indígena de su territorio, convirtiéndolo en propiedad particular,

ábrogandos [sic] hasta el derecho de legarlo á vuestros hijos, mientras vuestros

esclavos los indios tienen hasta la obligación de heredar las deudas de sus padres

[…]”.326

Durante la guerra de intervención francesa, Juárez decidió separar al estado

con la idea de recuperar terreno frente al avance de los imperialistas constituyendo

tres distritos militares (véase anexo 1). Chalco, Texcoco, Otumba, Zumpango de la

Laguna y Tlalnepantla se agregaron a la capital.327 Pero de cierto modo, cada una de

estas decisiones tuvo severas afectaciones en los campesinos y que fueron centrando

el poder en una pequeña élite que estaría controlando la producción, incrementando

el poder monetario y acumulándolo en una pequeña región.

Gracias a este trabajo de despojo por parte de los gobiernos liberales, los

campesinos terminaron en condiciones similares o peores, pues los procesos y

técnicas de producción como mencionan Cardoso y Hermosillo, “permanecieron casi

idénticas a las que existían en décadas anteriores, siendo muy lenta la incorporación

de la maquinaria, implementos y procedimientos más avanzados”.328 La hacienda

tradicional cobró fuerza y el peón de hacienda terminó por convertirse en casi un

esclavo, pues sus ganancias no eran las suficientes para la existencia humana mínima.

Este tipo de problemáticas trajo fuertes lazos de comunión entre los sectores

desposeídos y una gran idea de lucha en contra de los agravios a las tierras

comunales, por ello es complicado hablar de teorías reduccionistas enfocadas en los

procesos de producción y sus contradicciones como las principales formas de

326 Francisco Riquelme, “Indigenas y hacendados”, La Internacional, 11 de agosto de 1878. 327 Herrejón, Historia, 1985. 328 Cardoso y Hermosillo, “Clases”, 1985, p. 9.

121

transformación hacia el capitalismo, puesto que se vieron involucrados procesos

geográficos, sociales y culturales que conllevaron a dichas afectaciones. Más aún,

porque el trabajo de expropiar las tierras a los propietarios deviene ya desde la llegada

de los españoles329, desde ese momento las luchas por la conservación de las tierras

comenzaría y culminaría en el México decimonónico con la creación de sociedades,

en la mayoría de índole mutualista como la Sociedad Filantrópica de Auxilios Mutuos

en el año de 1862 o la Sociedad Artística de Protección Mutua en 1867 y más tarde,

para 1871 la Sociedad Progresista de Artesanos de Toluca.330

Solo hasta este momento es posible hablar de una conciencia de clase (1864

en adelante), la cual sigue siendo una visión muy reducida y, menos aún mencionar la

lucha entre las mismas, pues para ese entonces era difícil distinguir las diferentes

clases que comenzaban a surgir. Por eso coincidimos con Tortolero cuando dice que

las acciones de los sectores sociales son más motivos de “hambre y la causa última

de la revuelta es el despojo económico […]”331 y según la tesis del mismo Tortolero, la

lucha por la preservación del ambiente -ríos, bosques, etc.- pertenecen a esta idea

combativa contenida en los pueblos, especialmente Chalco; aunado esto a la cultura

comunal prehispánica y de una cosmogonía que involucra al ser humano con la

naturaleza, idea que retomaría el socialismo y que por ello habría de encontrar campo

fértil en los campesinos e indígenas de la región. La tesis de Tortolero la confirma

Marco Antonio Anaya, pues hacia 1850, las haciendas en la región de Chalco

comenzaron a insertarse en la cría de ganado, especialmente el bovino para la

producción de leche, por lo que dieron paso a la construcción de pozos, presas,

canales y cisternas. “Estas innovaciones generaron un nuevo conflicto en las

comunidades indígenas de la región, pues los hacendados tendían cada vez más a

329 Es menester saber que existía un fondo legal para los pueblos indígenas devenido también de la

corona española. Esto impidió expropiar de tajo las tierras comunales a las corporaciones que combatían las Leyes de Reforma, pero que a su vez permitieron el incremento de la hacienda y la concentración del poder capital. 330 Jarquín, et.al., Historia, 2011. 331 Tortolero, “Anarquistas”, 2009, p. 16.

122

acaparar agua y tierra para satisfacer la demanda de sus haciendas y los indígenas

no aceptaron pasivamente la usurpación de esos recursos”.332

Por tanto, como el estado de México, y particularmente Chalco, se volvieron una

región clave en los sectores políticos, económicos y revolucionarios. La idea de los

gobiernos liberales por llevar el progreso a la nación motivó al proyecto de los

ferrocarriles, y aunque estas ideas terminaron por concretarse durante la dictadura de

Díaz, fue necesario poner manos a la obra. Este ha de ser un motivo más en el proceso

de aceleración en cuanto a migración campesina se refiere333 ya fuese del campo a la

ciudad o dentro del mismo agro.

Las demandas de los campesinos llegaban desde las vías legales (a través de

solicitudes al Prefecto Político del ayuntamiento de México), como es el caso de las

reclamaciones por parte de propietarios de tierras en Amecameca en el distrito de

Chalco, pues debido a las corrupciones que se suscitaban la gente miraba peligrar sus

tierras.334

Se encontraba que desde 1862 las disputas del pueblo de Amecameca son

indudables, ello se puede evidenciar en la solicitud en contra de la retención de

maderas como el ocote, cedro y oyamel. Esta petición se postuló en contra del cambio

del representante de las tierras comunales. Firmando este documento 59 personas,

entre ellas Juan Flores quien rubricaba por 6 de sus compañeros que no sabían

escribir.335 Por lo que podemos analizar es que los campesinos contaban con bases

organizativas de aspecto jurídico y en casos más radicales, las organizaciones se

tornaron más violentas.

Dentro del Valle de México, Chalco era ya un centro de comercio importante,

siendo la tercera ciudad con más población e importancia política, estando debajo de

332 Anaya, Rebelión, 1997, p. 76. 333 Cardoso y Hermosillo, “Clases”, 1985. 334 Antonio Juan Zenovio al Prefecto político del Ayuntamiento de México, 21 de enero de 1864, en AGN,

México Independiente/Gobernación: legajos, caja 1441, legajo 1190. 335 Ibid.

123

Tenochtitlan y Texcoco.336 Ya durante la colonia los indígenas reclamaban a los

virreyes las propiedades comunales que desde hacía años les pertenecían. Pero para

el siglo XIX, la hacienda fue por fuerza una de las mejores ideas en cuanto a las formas

de trabajo y producción se habla, habiendo en Chalco, durante la segunda mitad de

este siglo, un aproximado de 40 000 hectáreas que eran ocupadas por 25

haciendas.337 Este tipo de ideas y necesidades, principalmente de los pueblos

indígenas y su necesidad de repartir las tierras encontraron su clímax en la revolución

de independencia,338 en donde pasaba de una cuestión social a un actor político

importante; por lo que la semilla había sido sembrada ya desde hacía varias decenas

de años.

El estado de México fue proclive a cambios políticos, sociales mayormente, al

igual que en la capital, los cambios geográficos y económicos fomentaron cambios en

las relaciones de convivencia entre campesinos y hacendados, las condiciones de

trabajo y de vida a las que eran sometidos los primeros provocaron inconformidades

que fueron combatidas por la vía legal o “ilegal” y en otras hubo migraciones a las

ciudades acrecentando la población obrera y disminuyendo la mano de obra agraria.

Estas situaciones permitieron el arribo y el cobijo de ideales que enarbolaban una

nueva estructura social, el cambio radical del sistema de explotación y sobre todo, la

instauración de la tierra comunal como forma básica de dicha organización.

Los socialistas, tanto radicales como pacifistas, encontraron en las tierras

agrarias el cobijo de su pensamiento y acción, el campesino había de convertirse en

la fuerza revolucionaria que buscaban los socialistas:

Los campesinos son una clase revolucionaria en potencia. Sin embargo a

pesar de todo, los campesinos pueden ser excitados a la acción, y más pronto

o más tarde así lo hará la Revolución Social. Esto es cierto por tres razones:

1. Debido a su civilización retrógrada o relativamente bárbara, han retenido

336 Espinoza, Julio, 1978. 337 Ibid. 338 Hart, Anarquistas, 1974.

124

en su integridad el temperamento simple y robusto y la energía afín a la

naturaleza popular. 2. Viven del trabajo de sus manos y están moralmente

condicionados por ello, lo cual engendra en su interior un odio instintivo hacia

todos los parásitos privilegiados el Estado y todos los explotadores del trabajo.

3. Por último, por ser trabajadores, tienen intereses comunes con los

trabajadores urbanos, de quienes sólo están separados por sus prejuicios.339

3.2 Julio López sembrando el camino hacia la Escuela de la Razón

Julio López, estandarte de los movimientos campesinos durante el siglo XIX y

referente del socialismo-anarquista, es un personaje paradójico, ya que existen

trabajos sobre su movimiento insurreccional después de la instauración de la Escuela

Libre de la Razón y del Socialismo de Plotino Rhodakanaty, esto es, entre los años de

1865-1868, pero poco o casi nada se sabe de los antecedentes a estos años. El mismo

Rhodakanaty lo veía como un campesino que recién comenzaba a leer y escribir y que

poseía gran capacidad oratoria,340 sin embargo, dicho revolucionario tuvo

antecedentes dentro del ejército liberal combatiendo bajo la bandera juarista siendo

parte de una guerrilla entre los años 1863 y 1865 –en este último año se realiza la

llegada de Rhodakanaty y Zalacosta al distrito de Chalco. Ya Marco Antonio Anaya y

Carlos Illades se anticipan en la aseveración de que López fue militar, e incluso

alcanzando el grado de coronel.341 En parte lo que nos ayuda a constatar dicha

afirmación es el fragmento que encontramos en El Monitor Republicano referente al

alzamiento de López: “Ha tenido lugar en este Distrito, un movimiento revolucionario,

339 Bakunin Escritos, 1990, p. 182. Aquí debemos ser cuidadosos con estos conceptos, Bakunin se

refiere al modo de vida que los trabajadores han tenido desde su aparición y la explotación a la que han sido sometidos. Debido al despojo y a esa misma explotación, la forma de mantener sus lazos comunitarios ha sido a través de la cultura ancestral, la cual, como muchos pueblos, se basa en la cercanía con la naturaleza y la lucha por su preservación, cosa de la que han sido despojados los trabajadores de la ciudad y es ahí donde los anarquistas encuentran la fuerza y la riqueza de los campesinos. 340 Valadés. Socialismo, 1984. 341 Anaya, Rebelión, 1997.

125

acaudillado por Julio López, individuo que ha prestado algunos servicios en el ejército

republicano en la época de la reforma y en la guerra estranjera [sic]”.342

Este personaje tiene tras de sí una leyenda, sobre todo lo respectivo a su

nombre, ya muchos autores como el mismo Marco Antonio Anaya Pérez, Gastón

García Cantú, Leticia Reina, John Hart y José Piña Delgado parten de diferentes

suposiciones referentes a su nombre y esto se debe, como precisa éste último, a que

muchos autores se dejaron guiar por la información otorgada por José C. Valadés

quien dice: “Un joven campesino, Julio Chávez López, se encargó de la escuela en

Chalco, con la ayuda de Zalacosta, quien en distintas ocasiones estuvo en esa villa”.343

Piña hace un análisis respecto al nombre del revolucionario, dando peso a las

aportaciones de Leticia Reina, de Antonio Anaya y su propio trabajo pues parten

directamente de las fuentes al encontrar documentos firmados por el propio López bajo

ese nombre: Julio López, ofreciendo más peso a estas hipótesis las cartas y periódicos

de la época que así lo identificaban.344 García Cantú lo identifica como Julio López

Chávez argumentando que tal vez este suprimiera su segundo apellido, pues ya

mencionado con antelación, quienes lo perseguían lo identificaban como Julio

López.345 Sin embargo, podemos encontrar que Cantú afirma que el propio Valadés

en su trabajo referente a la insurrección de Chalco, el mexiquense firma su conocido

Manifiesto a todos los oprimidos y pobres de México y el universo como Julio Chávez.

Sin embargo, se han encontrado fuentes en el Archivo General de la Nación

referentes a Julio López, especialmente una carta dirigida al ministro de Justicia y que

tiene como fin llegar a manos del Mariscal Bazaine en el año de 1865. Lo peculiar de

esta carta es que quien la suscribe es la madre de Julio López, Jacinta López. Dicha

carta proviene del pueblo de San Gregorio Cuauzingo (hoy San Gregorio Cuautzingo).

En ella solicita el indulto por parte de Bazaine, pues menciona que su hijo Julio López

“fue juzgado en la Corte marcial de México el 5 de febrero de 1864 por haber sido

342 El Monitor Republicano, 7 de marzo de 1868. 343 Valadés. Socialismo, 1984, p. 37. 344 Piña, “Movimiento”, 2009. 345 García, Socialismo, 1984.

126

acusado de haber [sic] tomado parte en un combate que tuvo lugar entre la guardia

rural de Tlalmanalco y una guerrilla […]”.346 Por lo que aquí se puede encontrar

información referente a dos cuestiones. La primera concerniente a su nombre, pues si

Jacinta López es su madre, por ende su segundo apellido ha de ser López, lo que

terminaría de constatar que el nombre completo fue Julio Chávez López347

inclinándose la balanza hacia el nombre que Valadés había escrito en sus trabajos.

Solo nos quedaría reflexionar el por qué Julio López habría de suprimir su primer

apellido; y la segunda referente a su lugar de origen. Mientras el propio Valadés

comenta que éste provenía de Texcoco por trabajar en una hacienda de dicha región,

Anaya Pérez supone que pudo ser oriundo de Acuautla, Coatepec o Zoquiapan,

pertenecientes a la región de Ixtapaluca, esto debido a que en las mencionadas

regiones comenzaron los levantamientos, pero con la carta de Jacinta López se da

apertura a que el propio Julio López pudo ser de San Gregorio Cuautzingo, en el mismo

distrito de Chalco.

Retornemos a los antecedentes de Julio López. Según Anaya Pérez, el primero

contaba ya con antecedentes de bandidaje, pues se vio implicado en un asalto a un

coche de caballos en la región de Río Frío348 y que posteriormente se uniría a la

guerrilla comandada por Rafael Cuéllar. Recordemos que para 1862, Juárez decretó

y permitió la creación de guerrillas que combatieran al ejército invasor: “Mexicanos: el

Supremo magistrado de la Nación, libremente elegido por vuestros sufragios, os invita

a secundar sus esfuerzos en la defensa de la independencia (…) Espero que

preferiréis todo género de infortunios y desastres al vilipendio y al oprobio de perder la

independencia…”.349 Las fuerzas en el territorio de Chalco mermaban debido a que los

conservadores realizaban un trabajo propagandístico en contra de los liberales

346 Jacinta López al ministro de Justicia relativo a la libertad de su hijo Julio López, México, 31 de agosto

de 1865, en AGN, Justicia y Negocios Eclesiásticos, Justicia Imperio, vol. 214, exp, 7. 347 Una hipótesis más que se puede hacer respecto al nombre de Julio López, es que su madre, Jacinta

López, pudo haber tomado los apellidos de su esposo, por lo que ambos apellidos, Chávez López, pertenecieron al padre del revolucionario Julio López. Dejo al aire estas hipótesis con la finalidad de entender que no hay verdad absoluta, sino interpretaciones del pasado. 348 Anaya, Rebelión, 1997. 349 Manifiesto de Juárez citado en Moloeznick, “Insurgencia”, 2008, p. 122.

127

acusándolos de atacar y usurpar las tierras, agrediendo así las formas de vida; y su

mayor crimen, el haber atacado y perseguido a la religión y sus ministros. Pese a los

esfuerzos de los conservadores, las guerrillas continuaron, siendo la de Cuéllar una

de las más famosas y perseguidas por el imperio. Dicha guerrilla se movía por los

distritos de Chalco y Tlalpan, como lo constatan las victorias en Río Frío350 y los

enfrentamientos entre Trinidad Colín junto a Julio López al mando de una división de

la guerrilla de Cuéllar en Churubusco y la Hacienda de San Antonio, pues su intención

era asaltar la diligencia de aquel lugar por lo que la fuerza rural intentó detenerlos,

sufriendo tres bajas por parte de los rurales,351 sin embargo López y Colín serían

aprehendidos, liberándolos casi inmediatamente y vueltos a ser detenidos por

acusaciones de robo por parte de vecinos en Ayozingo [sic], Chalco.352

Al parecer, Julio López se habría integrado a la guerrilla de Cuéllar hacia el

mismo año de 1861, pues según la correspondencia proveniente de Chalco, Julio

López y Trinidad Colín contaban ya con un pasado de robos a familias francesas y

hacendados. Sin embargo, según éstas notificaciones y como se dijo, la mayoría de

estos asaltos se realizaron a personas con un estatus alto dentro de la sociedad de

Chalco, tales como el asalto a Diego Parres, dueño de la Hacienda de Buenavista;

Antonio Campillo, comerciante o Eduardo Sozaya quien fungía como administrador de

la Hacienda de Zoquiapan, así como robos en haciendas de Tlalmanalco.353 Pero

López trataría de evadir su detención por medio de una solicitud de indulto al distrito

de Chalco, la cual estuvo a punto de ser concedida de no haber sido por acusaciones

de vecinos de diversas partes en el mismo distrito. Por lo que puedo concluir que Julio

López contaba ya con cierto pensamiento revolucionario, pues en la misma carta es

350 Anaya, Rebelión, 1997. 351 Ventura García al Señor Prefecto Político de Tlalpan Ignacio de la G. Falcón, México, 13 de octubre

de 1863, en AGN, Justicia y Negocios Eclesiásticos, Justicia Imperio, vol. 214, exp, 6. 352 Ibid. 353 Ignacio Falcón al ministro de Justicia, México, 4 de diciembre de 1863, en AGN, Justicia y Negocios

Eclesiásticos, Justicia Imperio, vol. 214, exp, 6.

128

tildado de tener “guerra abierta contra la sociedad” a pesar de que su grupo no contó

con un fin político según el documento.

Pero tanto López como Colín serían acusados de pertenecer a la guerrilla de

Cuéllar y más tarde a la de Jacinto Martínez, claramente en un juego político usando

la táctica de acusaciones de robo para poder ser inculpados y detenidos. Fueron

remitidos a la cárcel de Belem por orden del Juez Jesús G. del Villar.

La guerra de guerrillas era una de las mejores tácticas que podía usar el

gobierno de Juárez frente a uno de los ejércitos más poderosos del mundo junto a la

que denomina Moloeznick de esquemas clásicos, esto es el ejército regular, la defensa

de plazas o la guerra de posiciones.354 Chalco se convirtió en un lugar estratégico para

ambos gobiernos, no solo por su importancia económica como ya lo hemos

mencionado sino por su posición territorial al colindar con otros estados del centro, sur

y norte. Pero las guerrillas proporcionaron caos al ejército francés pues una de sus

tácticas de guerra es el ataque cuidadoso y sorpresivo que solo puede brindar el

conocimiento del territorio, de esta manera era posible ahorrar esfuerzos, tiempo y

bajas humanas. Las derrotas que sufrieron los franceses, una de las más conocidas

es la Batalla de Camarón en el estado de Veracruz o en Guerrero y Michoacán,

permitieron que el gobierno francés decretase la ley marcial a todo aquel que fuese

detenido con armas en la mano.355 Pero el caso de López fue peculiar, pues a pesar

de estar al frente de una célula comandada por Cuellar, el primero no fue pasado por

las armas al momento de su detención, sino que pasó por un proceso de acusaciones,

cuyo final engorroso era ser fusilado.

Las fuentes encontradas refieren al proceso que pasaron Colín y López desde

su detención. Las cartas enviadas de la Corte Marcial al distrito de Chalco y viceversa

aluden a las acusaciones de residentes de la prefectura, pero en la mayoría de éstas

no dejan de mencionar a la guerrilla de Cuéllar. Tal vez el gobierno francés mantuvo a

354 Moloeznick, “Insurgencia”, 2008. 355 Ibid.

129

la guerrilla bajo el estatus de banda de asaltantes con la finalidad de no alarmar a la

población hacendada de Chalco y no hacer públicas sus derrotas al frente de los

liberales, tales como una derrota más sufrida por los franceses en la que Rafael Cuéllar

“informó a sus superiores que en la población de Río Frío derrotó e hizo prisionero al

español Ángel Peláez, a quien fusiló y colgó en esta villa”.356

Tras unos meses de investigación por parte del gobierno francés, el 5 de febrero

de 1864 Trinidad Colín fue declarado inocente y se decretó su liberación inmediata,

mientras que López fue condenado a la pena de muerte y posteriormente el 11 de abril

del mismo año, indultado pero debía ser deportado a la Isla de Martinica.357 El indulto

vino de órdenes directas del Mariscal Bazaine quien consideró exagerada e injusta la

decisión de la Corte Marcial. Una vez arribado a la Martinica, López “quedó en libertad

para procurarse los medios de subsistir con su trabajo, y en efecto dedicándose á su

oficio de carpintero, ganaba su vida honradamente lejos de su patria, es verdad, pero

ganado del bien precioso de la libertad [sic]”.358 Pero tras un año en la isla, López fue

devuelto a suelo mexicano junto a otros prisioneros, llegando al puerto de Veracruz

povrísimo [sic] y parado; pero mientras los otros prisioneros fueron puestos

en libertad inmediatamente, á él se le ha detenido y se le detiene aún en la

Carcel [sic] llamada de la Galera en Veracruz, sin que sepa de donde a

provenido este cámbio [sic] que aumenta sus padecimientos, y que lo expone

á perecer del vómito ó de cualquiera otra enfermedad en clima mortífero de la

Costa, siendo él nativo de la mesa central.359

356 Anaya, Rebelión, 1997, p. 93. 357 Jugement renclu par la cour martiale de Mexico, México, 11 de abril de 1864, en AGN, Justicia y

Negocios Eclesiásticos, Justicia Imperio, vol. 214, exp, 7. 358 Jacinta López al ministro de Justicia relativo a la libertad de su hijo Julio López, México, 31 de agosto

de 1865, en AGN, Justicia y Negocios Eclesiásticos, Justicia Imperio, vol. 214, exp, 7. 359 Ibid.

130

Anaya propone dos facetas en Julio López, la de bandido360 y la de liberal combatiente

contra el ejército francés. Más bien, considero que fueron tres facetas con un mismo

fin, la de bandido social, desde su inicio en estas acciones y hacia 1861; de liberal, de

1861 a 1868; y la de anarquista en el mismo 1868 dirigiendo las insurrecciones agrarias

en contra del gobierno. Considero que este concepto de bandidaje social al que hace

alusión la historiografía agraria particularmente, contenía en Julio López una finalidad

u objetivo. Los asaltos a los hacendados o a las familias aristocráticas francesas de

las comarcas antes de 1863 y después de unirse a Cuellar nos llevan a considerar

cierta conciencia, tal vez no de clase, pero sí de lucha frente a este despojo que ya se

trabajó en la primera parte de este capítulo. López contaba con un objetivo que se

concretó hacia el año de 1868 y que posiblemente su estancia y posterior dirección de

la Escuela Libre de la Razón y del Socialismo le brindó el carácter socialista-anarquista

que infundiría en su lucha; pero al mismo tiempo, las acciones realizadas por el

revolucionario antes de 1865 permitieron dejar sembrado el camino hacia la instalación

de la escuela, pues las ideas socialistas de Rhodakanaty y Zalacosta fueron bien

recibidas durante su estadía en la región de Chalco por los trabajadores.

3.3 La Escuela Libre de la Razón y del Socialismo

Hablar de la escuela de Chalco no sólo es emocionante, sino que nos permite llevar a

cabo un análisis sobre una propuesta educativa diferente a la oficial llevada a cabo por

dos gobiernos, esto es, en el periodo comprendido por la estancia del imperio francés

en México y parte del gobierno encabezado por Juárez. Y es que desde el propio

nombre podemos encontrarnos ya con un problema, puesto que no pocos autores361

han llegado a identificar a ésta como la Escuela Libre del Rayo y del Socialismo. Aquí

existe una palabra extraña y a la cual los autores no ofrecen referencias: “Rayo”. No

se sabe de dónde ha provenido esta palabra o concepto. Algunos compañeros con los

360 Julo López es considerado como el bandido social, esto es, que no se refiere al asaltante común que

busca un beneficio individual, sino más bien considerado al tipo de Robin Hood, o como Francisco Calderón lo denomina el “John Brown” de los indios. Citado en Anaya, Rebelión, 1997. 361 Acri y Cacerez, 2011; Espinoza, 1978; Hart, 1974; Quintanilla, 1985 por mencionar algunos.

131

que he tenido la oportunidad de dialogar arguyen sin mucho fundamento -afirmándolo

ellos mimos- que tal vez la palabra Rayo provenga al hecho de que la escuela estuvo

situada en el campo y sin embargo, no podemos encontrar más referencias. ¿En qué

parte de la historia se suscita esta distorsión sobre el nombre de la escuela?

Por el contrario, el precursor de estos estudios, José C. Valadés nos ofrece dos

nombres más y los cuales podemos considerar de más coherencia respecto a la forma

de identificar a la escuela. Menciona el historiador mexicano: “En 1863, un joven

austriaco, Plotino Rhodakanaty se estableció en Chalco (un centro agrícola de

importancia, en aquella época), una escuela a la que llamó Escuela moderna y libre”.362

Sobre las fechas ahondaremos un poco más en los siguientes párrafos. En su célebre

texto El socialismo libertario en México, el propio Valadés reproduce una carta de

Rhodakanaty a Francisco Zalacosta, en la que el griego escribe: “Mi escuela, habrá

usted comprendido mi emoción, ha principiado a dar sus frutos; es la escuela de la

razón y del socialismo, y me conformo con pequeños progresos”.363 Otros han de

identificarla como la Escuela Moderna y Libre (Anaya Pérez). Cabe mencionar por

último, que el nombre de la escuela de Chalco no debe ser confundida con la Escuela

Libre que fundara el propio Rhodakanaty en el año de 1863 y que sería la base teórico-

práctica del socialismo que preconizó y que guió la fundación posterior de un grupo de

afinidad denominado La Social.

Después, nos volvemos a encontrar con una serie de problemas referentes a

las fechas. Encontramos en los propios pasajes de Valadés una serie de elementos

que en ciertos momentos llegan a ser confusos. Volvemos a mencionar su texto sobre

el socialismo en México, donde señala que Zalacosta y Rhodakanaty parten en los

últimos días de noviembre de 1865 hacia la prefectura de Chalco, que por las

condiciones de la época no debió haber tardado más de un día y medio en llegar a

dicho lugar y sin embargo, en el periódico La Protesta de Buenos Aires, menciona la

362 Carta de José C. Valadés a Max Nettlau, 26 de abril de 1924, Archivo Max Nettlau, Correspondencia,

1203, International Institute of Social History, Ámterdam. 363 Valadés. Socialismo, 1984, p. 28.

132

instauración de la escuela hacia el año de 1866.364 Aunque podemos partir de que no

hay mucha diferencia entre los últimos días de noviembre de 1865 a 1866, no hay

especificaciones sobre el trabajo realizado por ambos durante ese mes, por lo que es

probable que la escuela haya comenzado sus labores a mediados o fines de diciembre

del propio año de 1865. Pero no mayor información proporciona el periódico El

Socialista que menciona:

Las doctrinas filosófico-populares que así inculcaba á las masas del pueblo

en esta capital le pareció que tenían extrecho [sic] espacio y buscándolo más

ámplio [sic] se estableció enseguida en un pueblo del Distrito de Chalco donde

fundó en 1868 aquel famoso “Club Socialista” que difundiendo sus doctrinas

humanitarias y de redencion [sic] para la raza indíjena [sic], causó una

“revolución agraria” acaudillada por el infortunado Julio López, víctima de la

perfidia de los hacendados.365

Sin embargo, es difícil poder constatar que la escuela haya podido ser creada

en dicho año, puesto que según Anaya y García Cantú, Julio López comenzaba la

organización campesina ya desde el año de 1867. Lo significativo en el párrafo citado

es el nombre de “Club Socialista” y que sin duda hay quienes lo contemplan más como

un círculo de estudios que como una escuela, cosa que a continuación analizaremos.

En la misma carta ya citada por Valadés, Rhodakanaty escribe a Francisco

Zalacosta: “En el día, tengo infinidad de niños semi-desnudos, temblando de frío y de

hambre, aprenden no solamente las primeras letras del castellano, sino también las

primeras nociones de la libertad. Por la tarde, después de terminar sus pesadas

faenas, concurren algunos peones. ¡Cómo se aplican estos buenos hermanos!”366 El

hecho de que en este momento se estudiasen las primeras letras del castellano,

implicaba ya en sí un trabajo educativo, tanto para los pequeños como para los

364 José C. Valadés, “De la historia del anarquismo en Méjico. La insurrección de Chalco (Mayo 1869)”,

La Protesta, 1 de mayo de 1924. 365 “Plotino C. Rhodakanati”, El Socialista, 28 de octubre de 1877. 366 Valadés. Socialismo, 1984, p. 28.

133

trabajadores de las haciendas. Este tipo de experiencias tendrían mucha importancia,

ya que para mediados del siglo XIX, los gobiernos no contaban ni con la economía, ni

con la infraestructura para poder dar cabida a la intensa campaña de educación.

Debido a la búsqueda de la autonomía de las municipalidades, éstas tenían la

obligación de proporcionar a las entidades y a quienes ahí vivían, educación, pero la

realidad era otra debido a los acontecimientos que se estaban llevando a cabo. Tras

la lucha de Independencia, el Estado de México brindó educación elemental, pero la

educación se centró en la capital del estado, en las cabeceras municipales y de distrito,

lo que, en el caso de Chalco, al ser una región bastante amplia, imposibilitaba dicho

trabajo, lo que evidentemente marginaba a los hijos de campesinos quienes se

encontraban en haciendas alejadas de dichas cabeceras. Al mismo tiempo que este

tipo de educación privilegió la enseñanza a los varones cuando las instituciones

educativas no contaban con la posibilidad de separar la escuela y aceptar niñas.367

Más tarde, para resolver esta situación, se crearon las Escuelas Amigas.368

Para inicios de 1861, el gobierno del Estado de México pretendió dar un giro en

la cuestión educativa. Si bien las escuelas elementales siguieron concentrándose en

la capital y en las cabeceras, se dio apertura a escuelas en otras regiones del estado,

se amplió el currículum de lectura, escritura, aritmética común y los catecismos

religioso y político, sumándose la enseñanza de la geografía y obligaciones del hombre

y bordado en el caso de las escuelas amigas para las mujeres.

Pese a no contar con el currículum de la escuela, al no hallarse en los archivos,

hemos podido encontrar varias coincidencias en textos como es el de 150 años de la

educación en el Estado de México, en el que se puede leer: “Una vez aceptados, los

preceptores abrían las escuelas de niños de ocho a doce de la mañana y de dos a

cinco de la tarde. Los que laboraban con adultos debían abrir sus establecimientos

367 Años, 1974. 368 Este tipo de escuelas tuvieron gran relevancia al ser de las primeras instituciones en México al

intentar atender la necesidad de formar a las mujeres. Esta escuela nace en el siglo XVIII y su método se basaba en la enseñanza de las mujeres mayores a las menores en las nociones de religión, escritura, lectura y principalmente la cuestión de las labores domésticas.

134

todas las noches de siete a nueve y de dos a cinco los domingos y días festivos”.369 Y

si volvemos a la carta de Rhodakanaty a Zalacosta, recordamos que el griego

mencionaba que durante las mañanas los pequeños eran educados, mientras que por

las tardes, algunos peones eran los que llegaban a la escuela. Además, en aquellos

momentos, para los gobiernos la educación comenzó a volverse una prioridad, por lo

que las municipalidades comenzaron a tener una estricta vigilancia hacia los

establecimientos de instrucción fuesen públicos o privados, los cuales debían

apegarse a las leyes, pero en algunos casos “las mismas autoridades estaban de

acuerdo con los directores para establecer un tipo de enseñanza diferente a la

autorizada”.370

Rhodakanaty, siendo hombre pasivo y contrario a las ideas violentas,371 procuró

siempre seguir las normativas establecidas por los gobiernos, no sabemos con certeza

si por temor a ser expulsado o por tratar de no resaltar entre los círculos en que solía

moverse. De ello da cuenta una carta enviada en el año de 1880 al Ayuntamiento de

México en el que solicita apoyo para sostener el plantel de la escuela elemental que

había creado. “He deseado sinceramente contribuir de alguna manera á [sic] la

ilustración y moralidad de las masas del pueblo, he establecido una Escuela Popular

en esta su casa callejón de la Santa Veracruz No. 1”.372 En el mismo documento,

Rhodakanaty adjunta el recorte de un periódico en el que es posible ver el programa

educativo llevado a cabo en dicha escuela. Materias como lógica, ideología, moral,

sociología, física, química, historia natural, retórica, historia universal y aunado a éstas

la enseñanza de las lenguas tales como el español, francés, inglés, alemán, italiano o,

lenguas clásicas como griego y latín.373

369 Años, 1974, p. 86. 370 Ibid., p. 87. 371 Al menos hasta el momento en que intentó colaborar en el movimiento campesino liderado por Julio

López y fue aprehendido. De ese momento hasta su desaparición no se sabe de otro acto “violento” en el que haya intentado participar. 372 Carta de Plotino Rhodakanaty al Ayuntamiento de México, México, 22 de octubre de 1880, en AHCM,

Instrucción Pública en General, vol. 2490, exp. 1480. 373 Ibid.

135

La escuela, al igual que su pensamiento, estaba vinculado a la práctica, nos referimos

a que en esta Escuela Popular se dio la educación de ambos sexos, tanto a jóvenes

como adultos con la finalidad de “proporcionarse una posición muy distinguida y

ventajosa en la sociedad, y de consiguiente, ser mejor remunerados en sus laboriosos

trabajos, por medio del conocimiento de la ciencia”.374 Consideraba de vital importancia

la educación de las masas pues consideraba que las naciones se encontrarían a la par

en la tónica del conocimiento humano, al tiempo que conocían sus derechos y evitaban

el abuso y sometimiento de los gobiernos. Con ello, podemos darnos cuenta que

Rhodakanaty cumplía siempre con un plan, así como las coincidencias entre los textos

nos abre un panorama más amplio a saber que la escuela, por las condiciones

geográficas y económicas de la región, pudo no cumplir cabalmente con las

condiciones de infraestructura, pero contaba con un currículum educativo al cual se le

sumaba la enseñanza de las doctrinas socialistas, enfocadas en el pensamiento de

Fourier y Proudhon.

Según John M. Hart, la escuela estuvo alojada en el extremo sudeste de la

prefectura de Chalco, sin embargo, en la topología del mismo distrito es posible

observar que si nos dirigimos al sudeste, la escuela se encontraría en la zona

colindante con en el estado de Puebla. Pero debido a las revueltas de Julio López

donde los primeros levantamientos y su influencia fueron en las regiones de Acuautla,

Coatepec, Tlalmanalco, Amecameca, Tlalpan y a lo referente por los historiadores de

que éste provenía de una hacienda en Texcoco, sería más viable que la escuela

estuviese situada en el extremo sudoeste del distrito (véase anexo 2), puesto que

también en esta misma región podemos encontrar el pueblo de San Gregorio

Cuautzingo, región en donde vivió la madre de Julio López.

Rhodakanaty arribó a la región con la idea de crear y organizar las colonias

agrícolas con las que había soñado desde su estadía en Europa y que la Guerra de

Reforma frustró. Su intención fue “el rompimiento de las relaciones entre el Estado y

374 Ibid.

136

el sistema económico, la reorganización de la propiedad, la abolición de la política y la

expedición de las leyes de reforma agraria”.375 Pero esta organización debía ser

reestablecida, puesto que las condiciones políticas y económicas del país habían

afectado las relaciones sociales de las regiones, sobre todo las haciendas modificaron

aspectos de vital importancia como fue el caso de la tierra. Como pudimos ver en el

tema anterior y a lo largo de este capítulo, la organización campesina y la lucha han

sido dos aspectos inherentes a quienes habitaban las regiones agrícolas del país y las

luchas previas por demanda de la devolución de las tierras, los atracos a personas de

estratos sociales altos, fueron sembrando el camino para la instauración de una

escuela de corte netamente socialista-libertario. El cariño y apego que Rhodakanaty

sintió por los trabajadores campesinos evocó una simpatía mutua lo que permitió que

los peones recibieran sin trabas las doctrinas preconizadas por el griego.

Es claro que la escuela llevó a estas regiones tan marginadas y sometidas la

alfabetización, primordial en la lucha por la recuperación de sus legítimas tierras. Y

aunque la educación estuvo dirigida hacia los pequeños hijos de los trabajadores, el

ejercicio y experiencia central de la escuela estuvo enfocado en los adultos, en los

peones de hacienda y en todo aquel que estuvo en contacto con dicha escuela Esta

educación fue el medio más importante para llevar a cabo la organización popular. Los

campesinos y peones aceptaron dichas ideas puesto que Rhodakanaty expuso que “la

raíz del conflicto social estaba en la organización de la propiedad, proponiendo por

tanto distribuirla entre el conjunto de la población […]”.376 Rhodakanaty era hombre de

paz, por lo que sus doctrinas libertarias sustentadas en la filosofía de Fourier y

Proudhon se encaminaban no a la organización violenta o a la formación de grupos

insurreccionales, afirmando la necesidad de una ley agraria que distribuyese las tierras

y aboliera las haciendas y enfatizándose en el fracaso del proyecto liberal. A pesar de

intentar esta organización por la vía pacífica, Rhodakanaty no era ajeno a que las

375 Rhodakanaty citado por Hart, Anarquistas, 1974, p. 54. 376 Illades, “Socialismo”, 2014, p. 112.

137

condiciones en las que se encontraban sometidos los trabajadores podían

desencadenar la violencia.377

Francisco Zalacosta estuvo una temporada en la región y después regresó a la

capital. Más tarde se encontraría en un ir y venir junto a Santiago Villanueva. Al

momento de estar juntos los tres, realizaban una serie de expediciones a otras

regiones cercanas con la finalidad de difundir las ideas socialistas entre los lugareños

y posiblemente con el objetivo de invitarlos a participar en la escuela.

Según Valadés, Francisco Zalacosta tuvo que abandonar sus estudios debido

a dificultades económicas por las que su familia pasaba, por lo cual se dedicó al oficio

de la ebanistería y tiempo después habría de incorporarse al gremio de

sombrereros.378 Al dedicarse a este trabajo, Zalacosta tendría el tiempo suficiente para

ir y venir a Chalco, lo que implicaba facilidad de realizar propaganda en la región. En

muchas de estas ocasiones, el alumno de Rhodakanaty quedó al frente de la escuela

cuando éste último debía ausentarse, lo que permitía que tuviese un acercamiento

tanto con los niños como con los trabajadores que asistían por las tardes. Pero la tarea

propagandística de Zalacosta se centró en los lugares aledaños lo que evidentemente

acrecentó las bases ideológicas e insurreccionales.

Los peones se encontraron con dos posiciones diferentes dentro de la escuela.

Mientras Rhodakanaty se encontraba al frente, las discusiones, además de la

enseñanza de las primeras letras, se enfocaban en estudiar las ideas de Fourier y

Proudhon, sobre la necesidad del socialismo y del mutualismo como formas

organizativas, políticas y económicas. El griego “señalaba a Fourier como un precursor

de la obra de Proudhon y se limitaba a exponer que el mutualismo era necesariamente

un complemento del socialismo”.379 Pero su alumno, Francisco Zalacosta no pensaba

de la misma manera, él, joven y ferviente seguidor del socialismo más radical,

consideraba que, para que en verdad se diera un cambio en este sistema de

377 Ibid. 378 Valadés. Socialismo, 1984. 379 Ibid., p. 29.

138

explotación era necesaria la revolución. Era claro que estas ideas fueron causando

mayores simpatías debido a que la historia de la región avalaba la lucha natural en los

pueblos campesinos. “Este contexto de trabajo, las ideas de construcción de una

comunidad rural prospera y pacífica, donde los campesinos alfabetizados, poco a

poco, comenzaron a asimilar los conocimientos educativos y organizativos

socialistas”.380

Es en estos momentos en que uno de los personajes principales en la historia

libertaria del siglo XIX se hace presente con mayor fuerza: Julio López comenzó a

asistir a la Escuela Libre de la Razón y del Socialismo. Decía Rhodakanaty a Zalacosta

sobre el propio López: “entre ellos está un muchacho; trabaja en una hacienda cercana

a Texcoco. Ya aprendió a escribir, sabe también hablar regularmente. Me ha dicho que

pronto dará una conferencia socialista”.381 Posiblemente López haya llegado a la

escuela por invitación de Rhodakanaty en uno de sus tantos viajes por el distrito de

Chalco o al haberse enterado de dicha escuela por parte de los peones que asistían,

lo que es innegable es que hasta ese momento López contaba ya con un pasado de

lucha armada y nociones sobre la desigualdad social, lo que adquirió entonces, fue la

formación ideológica que solo la escuela podía brindar. Se ha hecho mucho énfasis en

la cuestión de si López sabía escribir o si realmente aprendió durante su estancia en

la escuela, puesto que al leer y analizar sus textos, estos tienen una carácter superior,

tal vez para un campesino que recién comenzaba a aprender las primeras letras, aquí

reproducimos un extracto de una proclama el 23 de febrero de 1868:

Hace muchos años, ciudadanos que hemos trabajado por la vía judicial, no

hemos conseguido más que puros prometimientos que nunca han tenido

efecto; porque siempre nos han hecho perder el tiempo y el dinero en balde,

no hay otro remedio más que el propuesto para que vosotros y vuestros hijos

disfruten de sus verdaderos derechos y tanto las haciendas como las

poblaciones quedarán en sus legítimas posesiones; tengamos fe en el

380 Acri y Cácerez, Educación, 2011, p. 234. 381 Valadés, Socialismo, 1984, p. 37.

139

porvenir y desaparecerá toda dificultad y conservará la verdadera paz.

Independencia, libertad y patria.382

Si realmente perteneció al ejército, pues recordemos que páginas atrás se habló

un poco sobre sus antecedentes, es posible que Julio López haya contado ya con una

instrucción lo cual es más viable y, posiblemente Rhodakanaty al afirmar que éste era

un peón de hacienda no contaba con educación elemental al desconocer los

antecedentes del mismo López. Volvemos a hacer énfasis en que lo que adquirió

dentro de esta escuela fue la ideologización en la concepción de la lucha campesina,

lo que habría de darle una dirección y un objetivo a las insurrecciones posteriores.

Al ser López uno de los alumnos más avanzados dentro de la escuela, en los

momentos en que Rhodakanaty dejaba el lugar por tener que salir a realizar

propaganda o al viajar a la capital, era el propio López quien se quedaba al frente de

la escuela y más tarde Zalacosta le ayudaría en la responsabilidad de la misma. Al

parecer Rhodakanaty abandonó Chalco hacia finales del año de 1867 o principios de

1868 considerando su trabajo concluido con los campesinos de la región; dejando tras

de sí la idea de cooperación y organización comunal que tanto enfatizaron los

pensadores franceses.383 Tras la marcha del griego, Julio López quedó al frente de la

escuela dándole cabida para organizar de manera diferente a todos aquellos que

pertenecían a la escuela.

Se ha dicho que Francisco Zalacosta y los grupos que comenzó a formar se

consideraron el ala bakuninista en las luchas obreras y campesinas del México

decimonónico, lo cual será evidente y efectivo al momento en que La Social comenzó

su contacto y adhesión a la AIT (Asociación Internacional de los Trabajadores) a

mediados de 1870 al estar agremiados a la Federación del Jura. Hasta aquí no

podemos encontrar cuestionamiento, el propio Zalacosta se consideraba anarquista:

“La anarquía sistematizada, es decir, la descentralización de los poderes políticos

382 Reina, Rebeliones, 1998, p. 72. 383 Valadés. Socialismo, 1984.

140

reemplazada por la organización de las fuerzas económicas es el dogma

revolucionario-filosófico de nuestra institucion [sic] societaria”.384 Cosa contraria a

Rhodakanaty quien no despreció las ideas libertarias pero nunca se pronunció como

tal, consideró al socialismo un concepto más amplio. Esto se debe a que autores como

Susana Quintanilla consideran que la escuela además de la enseñanza socialista

proudhoniana-fourierista, en tiempos de López y Zalacosta, las ideas de Bakunin

predominaron en los debates entre alumnos. Sin embargo no hay referencias al

posicionamiento ideológico de Francisco Zalacosta durante la década de 1860 y quién

seguramente influiría en la radicalización del pensamiento de Julio López.

Sabemos que la llegada del pensamiento bukuninista a México se da a

principios de la década de 1870. “Desde los primeros meses de 1873, entre los

libertarios, fue muy activo Carlos Sanz, llegado a Méjico [sic] desde Barcelona; se dice

que en una reunión el 20 de marzo, en conmemoración de la Comuna, leyó una carta

de ‘Farga Pellicer y de Bakunin’; ningún otro testimonio lo liga con Bakunin […]”.385

Hasta este momento, no hay ninguna otra referencia sobre la llegada de estas ideas

revolucionarias a territorio mexicano, sobre todo, porque para la década de 1860-1870

fue la más activa política y revolucionariamente en la vida de Bakunin. En junio de

1861 huyendo de su exilio en Siberia, el revolucionario ruso viajó hacia América,

recorriendo Panamá, Nueva York y San Francisco con el objetivo de dirigirse a

Londres. Entre su trabajo de organización y agitación, en sus viajes por Francia,

Dinamarca, Suecia, Italia, Alemania y demás países europeos, es dudoso que el propio

Bakunin tuviese conocimiento de lo que en México se organizaba. Posiblemente por

conocimiento de sus actividades en Europa es que Zalacosta pudiese saber sobre el

ruso, pero sobre el conocimiento de sus ideas escritas es más difícil que se haya

podido llevar a cabo.

384 Francisco Zalacosta, “La Internacional”, El Socialista, 14 de julio de 1878. 385 Max Nettlau, “Contribución a la bibliografía anarquista de la América Latina hasta 1914”, La Protesta,

13 de junio de 1927.

141

Lo que sí es equiparable entre estos tres personajes (Bakunin, Zalacosta y López), es

la táctica revolucionaria empleada específicamente hacia los trabajadores del campo

pues, como pudimos ver en el segundo capítulo, el revolucionario ruso conocía la

fuerza intrínseca de éstos y su importante participación en la revolución social:

Hay que enviar agitadores al campo, como voceros de la revolución. La regla

general al respecto es que quien quiera propagar la revolución debe comenzar

por ser él mismo un revolucionario. Uno debe tener el anarquismo dentro para

ser capaz de sublevar a las masas, de otra manera, sólo se hacen discursos

huecos y ruidos estériles, pero no actos revolucionarios. Por consiguiente, los

agitadores deben estar revolucionariamente inspirados y organizados; deben

llevar la revolución en su mente y en su corazón si quieren promoverla y

suscitarla. Luego deben elaborar un plan, una línea de conducta acorde con

el propósito que se formularon a sí mismos.386

Tarea que llevaron a cabo durante el periodo en que Rhodakanaty abandonó

su labor en la escuela. Por lo cual, la escuela dejó de funcionar como un centro

educativo y terminó por transformarse en un círculo de organización revolucionaria

entre los campesinos y promoviendo la agitación que culminaría en las insurrecciones

lideradas por Julio López.

3.3.1 Insurrecciones en Chalco. La lucha cobijada por el socialismo

Al momento de analizar los textos de Valadés y Anaya, se observan dos discrepancias

respecto a Julio López. Según Valadés, López asistiría a la Escuela Libre en 1866,

según una carta enviada a Francisco Zalacosta, mientras que Anaya afirma que López

asistiría a dicha institución entre marzo y mayo de 1868. Por lo tanto hay aquí dos

diferencias temporales. Si nos centramos en el texto de José C. Valadés y como

menciona, hacia finales de 1867 y 1868 cuando Rhodakanaty abandona la escuela, es

el revolucionario quien se quedaría a cargo de la escuela dejando así campo libre para

386 Bakunin, Tácticas, 2013, p. 103.

142

la organización campesina y la ideologización de los levantamientos insurreccionales

junto a Zalacosta, como ya lo he mencionado con antelación. Pero si nos enfocamos

ahora en lo que Anaya relata y un texto clave para entender esto es Rebeliones

campesinas en México de Leticia Reina, es el carácter revolucionario de López, puesto

que hasta la aparición de su Manifiesto a todos los oprimidos y pobres de México y del

universo del chalca, su posicionamiento no es de enfrentamiento directo contra el

gobierno juarista e incluso ha de seguirse proclamando como liberal, defensor de la

patria y de la Constitución.387

De hecho, las acciones siempre estuvieron secundadas por cartas en las que

se aseveraba estar en guerra contra los hacendados. Esto complicaría el análisis,

puesto que de ser así encontramos varias situaciones: a) Rhodakanaty no

abandonaría la Escuela Libre de la Razón y del Socialismo sino hasta marzo de 1868

y Julio López habría comenzado su propaganda organizativa no socialista una vez

liberado de la prisión de la Galera en el estado de Veracruz y llegado a Chalco, a su

vez dificulta la idea de que éste haya estado al frente de la escuela pues durante los

años 67 y 68 estaba en campaña insurreccional; b) Francisco Zalacosta estuvo al

frente de la escuela una vez que el griego partió nuevamente a la capital, lo que sería

más viable, sin embargo, según Valadés, Zalacosta no estaría en Chalco al momento

de las insurrecciones y trataría, posteriormente de apoyar a su amigo junto con

Rhodakanaty pero el primero tendría que huir y el segundo sería aprehendido por el

gobierno; c) López quedaría al frente de la escuela y como táctica se proclamaría

liberal hasta el momento de la represión por parte de los gobiernos del estado y del

gobierno federal, tal vez esta situación lo llevaría a proclamarse socialista-comunista

en el Manifiesto y d) igual que en el punto “b”, Zalacosta estaría al frente de la escuela

e incluso ayudaría en la redacción del manifiesto, puesto que en este podemos

encontrar un posicionamiento netamente anarquista, cosa que ya analizamos. Este

último punto nos brinda un paradigma diferente, ya que Anaya ha de referirse a las

cartas entre Zalacosta y López a las que hace alusión Hart, rastreadas en el Archivo

387 Reina, Rebeliones, 1998.

143

Histórico de Querétaro, sin embargo esos documentos no han sido encontrados lo que

supone el robo o la inexistencia de éstos.

Por lo cual, se reafirman las tres facetas de Julio López, la de bandolerismo-

social; la de liberal y la de socialista-comunista. El 2 de febrero de 1868, Julio López

da a conocer un pequeño texto en el que habla sobre su movimiento, de su lucha frente

a los hacendados y no contra el gobierno -parte de este texto lo hemos citado líneas

arriba- debido a la opresión que los primeros han sometido a los pueblos.388 Estas

proclamas tienen ya sus antecedentes y los he expuesto en el primer tema de este

capítulo. Antes de las llamadas Leyes de Reforma y después reforzadas por éstas, los

campesinos indígenas se vieron afectados no solo en sus tierras, sino en sus formas

organizativas de manera comunal, en el despojo de aguas de riego, por lo que “buena

parte de indígenas del valle y de la montaña de Chalco pidieron constantemente la

revisión de sus linderos y la restitución de sus tierras”,389 pero el gobierno hizo caso

omiso a las peticiones por lo que hubo la necesidad de organizarse y recuperar tierras

que desde hace años legítimamente pertenecían a las comunidades.

Desde 1867 esta organización había dado comienzo en las regiones de

Coatepec, San Francisco Acuautla y San Vicente Chicoloapan y en la que se

comenzaron los preparativos para atacar las haciendas cercanas390 puesto que el

gobierno juarista no ofreció soluciones, los pueblos fueron poco a poco buscando

formas alternativas en la recuperación de sus tierras. Los gobiernos y los partidos

veían a conveniencia de sus círculos, unos más que otros, había un partido que

intentaba mantener la situación de explotación evitando así la igualdad entre los

humanos y otro partido que buscaba la “casi” igualdad, manteniendo aun así el statu

quo.

Esta es la causa de que viven muchos pueblos en la mayor miseria, sus

habitantes en la mayor parte es la clase más pobre que siempre está en un

388 Ibid. 389 Anaya, Rebelión, 1997, p. 99. 390 Ibid.

144

continuo perecer y es la gente indígena como nosotros, y que por último hoy

arrojamos este partido inercia [sic] y solo nos atenemos á reclamar nuestros

derechos, nuestras propiedades antiguas que tantos años há [sic] nos tienen

usurpadas los hacendados, haciendo con ellas inmensos capitales sin más

título que el hecho material de la ocupación sucesiva […].391

Por lo que se hace un llamamiento al gobierno a que “dicte las providencias

oportunas, para que lo mas [sic] pronto posible sean devueltos á los pueblos sus

terrenos que tienen usurpados los hacendados”392 y de no ser así y que el gobierno

siga permitiendo la adjudicación de las propiedades “los pueblos todos estamos á

levantarnos prontos á levantarnos en masa [sic], apropiarnos de nuestros terrenos á

la viva fuerza y hacerles la guerra á muerte á los verdaderos opresores, á los tiranos

hacendados y no se atribuya a guerra de castas como luego le dan ese color estos

viles […]”.393 A partir del 18 de febrero de 1868, los campesinos e indígenas

comenzaron con López al frente, iniciaron su deambular por diversos pueblos y

haciendas de Chalco y haciendas. El objetivo de estas primeras manifestaciones fue

el de la propaganda, considerándolo como un mitin intrascendente, pero que debía ser

atendido, por lo que el jefe político de Chalco se vio obligado a solicitar el apoyo de 50

dragones.394 A partir de estas fechas, el trabajo de López al mando de entre 60 y 70

hombres fue el de asaltar haciendas para hacerse de armamento y caballos tratando

siempre de evitar el enfrentamiento con las fuerzas gubernamentales, además de

propagar la necesidad de luchar por la restitución de las tierras a los campesinos e

indígenas.

Debido a la situación en la que se encontraba el país, estos hechos fueron

inmediatamente vinculados a otros levantamientos armados o a personajes

importantes de aquellas fechas, tal es el caso del vínculo entre Julio López y Miguel

391 “Chalco”, El Monitor Republicano, 10 de marzo de 1868. 392 Ibid. 393 Ibid. 394 Telegrama del jefe político de Chalco al Ministerio de la Guerra, México, 18 de febrero de 1868, en

AHSDN, siglo XIX, clas. XI/481.4/9750.

145

Negrete (alzado contra el gobierno de Juárez), sin embargo es García Cantú quien

menciona no haber documentos que los vinculen. Y, a partir de ciertos rumores, se

llegó a pensar que detrás de los levantamientos de López se encontraba el nombre de

Porfirio Díaz, por lo que el general Cuéllar le envía una misiva fechada en 13 de marzo

de 1868 preguntando por el revolucionario: “Como en la línea de mi mando se ha

insinuado una revolución con el nombre de usted y la acaudilla Julio López, espero me

diga si es cierto para basar mis operaciones porque yo me encuentro sin ninguna luz

en este negocio”.395 Díaz contestaría con una rotunda negativa respecto al

conocimiento y acercamiento con los sublevados.

Pese a no contar con apoyo o tener detrás a un poderoso general, López se

ganó las simpatías de pobladores por lo que el prefecto de Texcoco organizó a la

Guardia Nacional y un grupo de fuerzas de seguridad que hicieran frente y

persiguiesen al grupo de López y evitaran que los pobladores los apoyasen pues la

fuerza de éste último se centraba en los alimentos y algunos elementos que se

sumaban a los alzados. Debido a estas precauciones, es detenido el hombre al que

conocen como “Beltrán”, por lo que Julio López se trasladaría a aquella región con la

finalidad de liberarlo, esto causaría un enfrentamiento con las fuerzas

gubernamentales siendo detenidos cuatro alzados, lo que es peculiar en estas

aprehensiones es que fueron dos comandantes y un soldado de infantería, lo que

demostraba evidentemente el apoyo de ex militares.396

El movimiento comenzó a tomar fuerza no solo en Chalco, también en San

Vicente Chicoloapan y en Tepetlaoxtoc, pronunciándose alrededor de 300 personas.

Ante la inminente llegada de fuerzas del gobierno, los residentes de Chalco

enviaron a Juárez una carta solicitando el indulto a Julio López y a sus acompañantes

puesto que éste “no ha recurrido a medios violentos para proporcionarse recursos”,397

tratando así de evitar un derramamiento de sangre innecesario e invitan al supremo

395 García, Socialismo, 1984, p. 56. 396 Anaya, Rebelión, 1997. 397 Reina, Rebeliones, 1998, p. 76.

146

gobierno la intervención amistosa hacia el coronel Julio López para que “deponga las

armas retirándose al hogar doméstico sin ser molestado”.398 Esta petición fue firmada

por personajes como Mauricio Basoco, Vicente Rayón y José María Morales, los tres

hombres cercanos a Mariano Riva Palacio principalmente referidos a los trabajos en

las haciendas de este último.399 Tras peticiones a Juárez y al propio Riva Palacio, el

13 de marzo el gobierno concede el indulto con la condicionante de deponer las armas.

El 15 del mismo mes se anuncia el término de las rebeliones en Tlalmanalco e

Ixtapaluca y dos días después López se presentaría ante el jefe político de Chalco,

Cristóbal Reyes, arguyendo acogerse a la clemencia del gobierno. López fue indultado

junto a 92 personas más quienes regresaron a las labores del campo

En este punto de la historia encontramos nuevamente dos discrepancias,

Tortolero, en su estudio sobre el movimiento de Julio López, mediante el análisis de

los textos que aquí hemos citado Hart; Reina; Valadés y García Cantú, pone en duda

la existencia de la Escuela Libre de la Razón y del Socialismo, así como el Manifiesto

a todos los oprimidos y pobres de México y del universo y el carácter anarquista de su

movimiento, debido a la nula información y archivos sobre ambos temas y hace énfasis

en que el movimiento “lopizta” tenía un perfil más político debido al incesante ataque

a las haciendas de Mariano Riva Palacio, sin embargo, Marco Antonio Anaya centra a

López en la escuela entre los meses de marzo a mayo, puesto que no se conocía

actividad insurreccional entre aquellos meses donde las cosechas se acrecentaron. En

el mes de abril, el propio Anaya considera la publicación del Manifiesto,

específicamente el día 20 de abril de 1868 (véase anexo 3), discrepando con la fecha

que proporciona Valadés el mismo día y mes pero de 1869, pero Julio López ya habría

muerto para ese año. Es posible que mientras asistía a la escuela, López y Zalacosta

redactasen el Manifiesto, debido a su posicionamiento libertario aunque es posible

notar la influencia de las ideas del propio Rhodakanaty. Con el manifiesto se da una

dirección y posicionamiento ideológico a la lucha, pero a su vez, se da un rompimiento

398 Ibid. 399 Tortolero, “Anarquistas”, 2009.

147

con los medios impresos, puesto que hasta el momento del indulto, el movimiento

contaba con cierta simpatía y de ello dan cuenta algunos periódicos como El Monitor

Republicano o El Constitucional: “Según veo, estos pueblos están en la mejor

disposición en favor del gobierno, y lo único que necesitan es un apoyo moral de él

[Julio López], no armada, porque están cansados de guerra, quieren paz y nada

más”,400 y menciona sobre el propio López más adelante: “Este es un hombre, que

según [sic] me han informado personas muy acomodadas, se conduce muy bien;

persigue sin tregua á los verdaderos ladrones, y proteje [sic] y da garantía al hombre

honrado y trabajador […]”.401

Sin embargo, tras la publicación del Manifiesto, los periódicos han de calificarlo

como un “rabioso comunista”, lo que evidentemente indica la influencia anarquista de

la escuela. En el mes de mayo de 1868, López junto a un grupo de entre 60402 y 80

hombres en la región de Coatepec comenzaría los asaltos a diferentes haciendas

como la de Buenavista en donde se llevaron a todos los caballos403 y asaltando los

caminos como el que se dirige hacia Ayotla. El día 10 de mayo de ese mismo año, El

Siglo Diez y Nueve anexa un suplemento a ese número -301-, en el que da cuenta con

una serie de cartas la posición de los hacendados afectados en la población de San

Pedro Mártir en Amecameca:

En el año de 65, los que suscribimos, fuimos provocados á dar á luz, por medio

de la prensa, algunos documentos referentes al juicio que hemos seguido en

el juzgado de 1.ª instancia de este distrito de Chalco contra el comun [sic] de

la municipalidad de Ameca, por el violento despojo que nos hizo del monte de

la hacienda de San Pedro Mártir, propiedad de nuestra casa. Publicamos

entonces el alegato en derecho y la sentencia restitutoria que se pronunció á

400 “Noticias de Chalco”, El Constitucional, 7 de junio de 1868. 401 Ibid. 402 El Constitucional, 2 de junio de 1868. 403 El Siglo Diez y Nueve, 2 de junio de 1868.

148

nuestro favor, y á ello nos obligó la publicación que tambien [sic] de su alegato

se adelantaron á hacer los despojadores.404

El texto va dando cuenta sobre el despojo de tierras a las haciendas por parte

del jefe político Cristóbal Reyes quien pretendía amainar los levantamientos por parte

de los campesinos y que según los resultados en los tribunales, éstos daban razón a

las haciendas considerándose víctimas tanto de las autoridades como de los alzados

encabezados por Julio López.

Comenta la Revista Universal: “Este individuo capitanea una partida de gente

armada en el distrito de Chalco, y días pasados saqueó la hacienda de Buenavista,

propiedad del Sr. D. Mariano Riva Palacio. Dícese, según el Monitor, que López

reparte los terrenos de aquella jurisdicción á los indígenas que le auxilian”.405 El

conflicto fue agravándose y Julio López comenzó a contar cada vez más con el apoyo

de los campesinos y los indígenas de las regiones por las que pasaba, enarbolando la

bandera la de lucha socialista, invitando a sus hermanos a “despejar el campo, de

pedir cuentas a los que siempre nos las han exigido; es el día de imponer deberes a

quienes solo han querido tener derechos” y redondea: “Se nos desprecia como

liberales, se nos mancilla como socialistas y se nos condena como hombres. Es

indispensable salvar el momento, y levantar nuestros esfuerzos en torno de esa

sacrosanta bandera de la revolución socialista, que dice desde lo más alto de la

República: ‘Abolición del gobierno y de la explotación’”.406 Pronto López habría de

anunciar a todos los propietarios de las haciendas el término de sus “derechos” y el

cese de los trabajos en tierras ilegítimas.

La reacción por parte de los medios no se hace esperar:

Hará unos quince días que el cabecilla comunista Julio López,

correspondiendo al indulto que hace poco le concedió, como suelen los

404 “Suplemento al número 301”, El Siglo Diez y Nueve, 10 de mayo de 1868. 405 “Julio López”, La Revista Universal, 4 de junio de 1868. 406 “Manifiesto a todos los oprimidos y pobres de México y del Universo” en García, Socialismo, 1984,

pp. 58-61 y Anaya, Rebelión, 1997, pp. 161-163.

149

revolucionarios de oficio á vuelto a aparecer con su gavilla en el distrito de

Chalco […] Dispone á su arbitrio de las personas y propiedades, y lo peor es

que no hay tropas que lo persigan y goza de completa impunidad. […] parece

que es tiempo de combinar un plan que tenga por objeto librar á las

poblaciones de lo mucho que las están haciendo sufrir las gavillas de

malhechores.407

Nuevamente es enviado a la región el general Rafael Cuéllar -con quien

combatió López en los primeros años de 1860- junto a José María Vargas para intentar

detener el avance y ataque a las haciendas. So pretexto de detener a López, el general

Cuéllar implementó una política de tierra quemada408 y junto al prefecto de Texcoco

Antonio Flores, comenzaron una serie de arbitrariedades en los pueblos de Acuautla,

Coatepec y San Pablo, en donde realizaron una serie de cateos y hurtaron a los

campesinos e indígenas los papeles que los acreditaban como dueños legítimos de

las tierras y posteriormente los hombres fueron obligados a la leva, siendo llevados a

Tlalpan, Texcoco y Puebla.409 La estrategia de Cuéllar era crear un cerco alrededor de

López, por lo que fue colocando exploradores y centinelas en las distintas regiones

con la finalidad de obtener información, de esta forma, diferentes líderes militares y

jefes políticos cerraron los pasos hacia Milpa Alta, Morelos y Puebla. López comenzó

a tener enfrentamientos con los destacamentos militares y a sufrir derrotas y bajas

como fue el caso de Río Frío.410 Y es debido a este clima de violencia que el

gobernador del estado de México lanza una proclama en la búsqueda de “restituir la

paz y el orden público” puesto que los pobladores estaban mal influenciados por

“hombres perversos, acostumbrados á vivir de las revoluciones y á especular con la

sangre y desgracias de los pueblos, os han hecho salir del sendero que las leyes

407 “Chalco”, El Siglo Diez y Nueve, 8 de junio de 1868. 408 Táctica militar que consiste en destruir con todo aquello que posibilita el apoyo del enemigo

incluyendo los económico, político o alimenticio no solo con la finalidad de obstruir el acrecentamiento del enemigo, sino que busca mermarlo de forma psicológica. 409 Reina, Rebeliones, 1998; Hart, Anarquistas, 1974 y La Revista Universal, 29 de junio de 1868. 410 Anaya, Rebelión, 1997.

150

marcan para hacer valer vuestros derechos, convirtiéndolos en facciosos y

exponiéndoos á ser víctimas de la justicia”.411

Debido a la refriega en Río Frío, López junto a los insurrectos se replegaron

hacia la hacienda de Azalco en donde abrían de batirse contra Cuéllar y tras el

enfrentamiento, el grupo de campesinos, indígenas y ex militares se dividió, siendo

perseguidos por el general Eguiluz en Ayotzingo y otra parte por Cuéllar hacia rumbos

de Acuautla y Coatepec. La hacienda de Azalco quedaría en manos de los militares lo

que terminaba con la base de los insurrectos.412 El cerco fue cerrándose cada vez más

y Julio López junto a sus 200 seguidores comenzaron a replegarse. Las derrotas

consecutivas dieron merma al movimiento socialista.

El 15 de junio lo generales Cuéllar y Eguiluz acordaron llevar a cabo un plan

armado para derrotar a los 200 “sublevados”. Mientras el primero persiguió a Julio, el

segundo cubriría la línea de Ayotzingo-Milpa Alta, de la siguiente forma: en la zona de

Xochimilco estarían 100 hombres al mando del teniente coronel Jaramillo. El coronel

Leyva quedó con sus fuerzas en Juljiahualco y el comandante Quiñones, con 10

hombres, se situó en Ayotzingo; 50 hombres del general Cuéllar resguardaron la

hacienda de Azalco y las fuerzas del distrito de Xochimilco se ubicaron en Milpa Alta.413

Las labores insurreccionales de los socialistas estaban ya comprometidas, en

dos movimientos expropiaron algunos costales de maíz y cebada y algunas sillas de

montar de las haciendas de La Compañía y Acuautla. Finalmente, tras una serie de

persecuciones el 7 de julio de 1868 Julio López es detenido: “[…] después de muchas

y penosas expediciones he logrado, a las doce y media del día de hoy, la aprehensión

de Julio López, en el pueblo de San Nicolás del Monte […]”.414 Según José C. Valdes,

al saber la noticia de los levantamientos dirigidos por su alumno y amigo, Plotino

Rhodakanaty y Francisco Zalacosta intentaron internarse por el estado de Tlaxcala

411 “Proclama”, El Siglo Diez y Nueve, 19 de junio de 1868. 412 Anaya, Rebelión, 1997. 413 Ibid., p. 127. 414 Reina, Rebeliones, 1998, p. 79.

151

para poder integrarse a la lucha, a sabiendas de que el griego se proclamaba pacifista,

pero debido a los cercos realizados por los militares Zalacosta tuvo que huir disfrazado

de campesino, pero Rhodakanaty no contaría con la misma suerte y sería aprehendido

y condenado a muerte. Pero no ofrece referencias a un indulto por parte del gobierno

y solo le valdría el destierro de las tierras insurrectas.

El 9 de julio se comenta: “Parece que este comunista de Chalco ha sido

aprehendido por el prefecto de Texcoco”.415 Pero en el transcurso del 7 al 9 de julio,

López sería trasladado del distrito de Yautepec, Morelos, lugar de su -aprehensión- y

trasladado a Chalco. El 8 Ignacio Mejía enviaba a Antonio Flores prefecto, la

identificación y posterior orden de ejecución de Julio López debido a su reincidencia y

finalmente, al día siguiente, Julio López sería fusilado. Algunos medios se regocijarían

de aquella muerte y otros sólo la informarían: “El día 9 del actual ha sido pasado por

las armas, en Chalco este cabecilla”416, mientras que La Iberia complementaba la

información: “En consecuencia, Julio López fue fusilado en Chalco el día 9 del corriente

á las diez y media de la mañana”.417

Pero tras la muerte del líder socialista, la lucha continuaba por lo que Cuéllar

decidió reprimir de una vez por todas los focos insurreccionales restantes,

principalmente en San Francisco Acuautla, en donde el grupo de López habría

conseguido mayor fuerza. Al parecer, tras la muerte y las seguidas aprehensiones de

los insurrectos se habría ofrecido un festejo al prefecto Antonio Flores con motivo de

la derrota en contra de los primeros, lo que despertó el descontento entre la población

arguyendo que “Julio López habrá muerto condenado como trastornador del órden

[sic], como caudillo de una revolución mal iniciada y peor desarrollada, pero sobre su

memoria no pesará la nota infamante de traidor…”.418 El día 11 de julio enviarían

diversas misivas solicitando el indulto a todos aquellos quienes habrían participado en

415 “Julio López”, La Iberia, 9 de julio de 1868. También puede verse en El Siglo Diez y Nueve del 8 de

julio de 1868. 416 La Revista Universal, 15 de julio de 1868. 417 La iberia, 14 de julio de 1868. 418 “Un remitido de Chalco”, El Constitucional, 9 de septiembre de 1868.

152

los levantamientos y que serían sentenciados a la deportación en Yucatán. Entre los

firmantes se encontraban Filomeno Rendón, José Anaya y Bernardo Miranda.419 Pero

la respuesta no sería positiva debido a que los detenidos se encontraban ya en camino

a la prisión.

Finalmente, a lo largo de los meses de agosto y septiembre, los militares se

encargarían de apagar los mermados focos de resistencia que había en Chalco.

Algunos líderes consiguieron escapar y otros solicitaron el indulto al gobierno de

Juárez y al del estado de México. El gobernador aceptaría el perdón con la

condicionante de quedar bajo la vigilancia del gobierno terminando así con el breve

lapso de una insurrección que en principio evocaba los derechos legítimos de las

tierras comunales y que terminaría enarbolando la bandera socialista en pos de la

reestructuración de la sociedad y la abolición del gobierno y todas las instituciones

opresoras.

3.4 Los años posteriores

Desterrado del estado de México y con una experiencia, hasta cierto punto, fallida de

la Escuela Libre de la Razón y del Socialismo, Rhodakanaty, tras el indulto comenzó

un deambular por la zona de tierra caliente en el estado de Morelos. Allí continuaría

con su trabajo de propaganda en favor del socialismo. Pero durante este recorrido, el

griego se toparía y cooperaría con diversas congregaciones evangélicas.420 La

influencia de la filosofía spinozista, aunado al trabajo con estos grupos, comenzó a

influir en el pensamiento moral y religioso del griego, participando en el periódico La

República entre los años 1872 y 1873, precedente del que sería su periódico filosófico-

pedagógico, El Craneoscopio en el cuál expondría todas sus doctrinas y comenzaría

un debate paradójico con los positivistas421 de la época:

419 Instancia elevada al Gobierno General de la República por los ciudadanos de Chalco, México, 11 de

julio de 1868, en AHSDN, siglo XIX, clas. XI/481.4/9736. 420 Illades, Rhodakanaty, 2002, p. 78 421 Es bien conocido que el positivismo tuvo mucha fuerza durante la segunda mitad del siglo XIX y hasta

inicios del XX en México y esto se debió a la idea que esta filosofía tenía tras de sí, el progreso como

153

Respetando debidamente la ilustración del Señor Villamar, Director de la

Escuela de Jurisprudencia, á quien no tengo el honor de conocer, no puedo

menos de contestar el artículo inserto en su apreciado periódico y que lleva

por título «Otro metafísico en campaña», en razón de que dicho artículo se

propone, aunque en vano, justificar el dictamen emitido por el Sr. D. Alfonso

Herrera, Director de la Escuela N. Preparatoria y cuyo dictamen me tomé la

libertad de impugnar en el número 5 de este periódico El Socialista […].422

Este debate se suscitó cuando por vía de Ignacio Mariscal, quien fungía como

ministro de Relaciones Exteriores, recomendó a Rhodakanaty con Ezequiel Montes,

pues este último se encargaba de la cartera de Justicia e Instrucción Pública por lo

que solicitó al propio Rhodakanaty realizara una propuesta académica que pudiese ser

insertada en el currículum de la escuela. Tras un debate entre los profesores de la

Escuela Nacional Preparatoria, se decidió negar la inserción. Esto se debió a que la

propuesta del filósofo griego pretendía adherir la enseñanza de la psicología junto a la

cátedra de lógica423, esto haciéndolo con un posicionamiento de la filosofía de

Guillaume Tiberghien (1819-1901).424 El corte de dicha catedra que proponía

Rhodakanaty era racionalista, contraponiéndose a las doctrinas positivistas de la

época.

objetivo. Para un país devastado por guerras internas y externas, con ciertas dudas de legitimación por los sectores campesinos específicamente, las ideas traídas por Barreda permitieron comenzar con una nueva fase en la necesidad de consolidar el proyecto de nación. La idea de Barreda cautivó a los liberales pues este primero consideraba que el México actual se encontraba en su fase Positiva, es decir, que había superado los dos estados anteriores: La Colonia como etapa Teológica y la Independiente como Metafísica. Consideró que el país había pasado por una situación de liberación que había traído orden hasta cierto punto, pero no el progreso deseado por los liberales y aunque el positivismo difería de las ideas liberales, en México se logró amalgamar de manera peculiar permitiendo reforzar económica, política e ideológicamente al Estado-nación. Hale, Transformación, 2002 y Cardoso, “Oración”, 2005. 422 Plotino Rhodakanaty, “Otro positivista en la Lid”, El Socialista, 28 de febrero de 1881. 423 Sobre este proceso y el análisis de la piscología rhodakanatiana es posible leer la tesis de licenciatura

titulada “Plotino Rhodakanaty. La propuesta de un hombre olvidado”, 2000, de Olivier Toledo Carlos, en la cual se centra en tres momentos del pensamiento psicológico del griego 1) 1874, donde explica la fenología; 2) 1880, donde analiza la filosofía trascendental y 3) 1881 donde propone la psicología de Tiberghien a la ENP. 424 Illades, “Pizarro”, 1999.

154

Y es que la Lógica pasó a tener un posicionamiento importante dentro del currículum

de la Escuela Nacional Preparatoria, puesto que desde la aparición de la Escuela,

dicha materia se encontraba al principio del plan de estudios, pues el propio Gabino

Barreda la consideró como introductoria al estudio de la filosofía, sin embargo, al poco

tiempo fue removida hacia los últimos años del mismo plan, se consideraba ahora, una

síntesis de las ciencias.425 Esta materia de manera específica, tenía un significado

importante dentro de la ENP, puesto que había sido impartida por el propio Barreda

bajo la influencia de la filosofía de Stuart Mill y su Sistema de Lógica.

Alfonso Herrera daría la negativa a Rhodakanaty bajo el pretexto de que dicha

cátedra tendría tras de sí muchos trámites burocráticos: “1) la creación de una cátedra

de psicología implicaba reformar la Ley Orgánica de Instrucción Pública; 2) se saturaría

la currícula con el consecuente desgaste de los estudiantes; 3) la nueva disciplina se

podría enseñar en el curso de lógica, lo cual, además, permitiría ahorrar el sueldo de

un profesor”.426 Rhodakanaty se enfrentó a un sistema filosófico que además de ser

totalmente contrario a su posicionamiento era dogmático. Desde la creación de la

misma Escuela en 1867, el propio Barreda no permitiría que todo lo que había logrado

construir se derrumbara y pese a cierta oposición de la sociedad debido al plan de

estudios, la escuela inició su ciclo escolar en 1868 con una fuerte disciplina que

evocaba la firmeza del positivismo frente a las discrepancias.427 Es por ello que

Rhodakanaty conocía el trasfondo ideológico-político de la institución, por lo que se

abocó a la defensa de su propuesta.

Insistiendo el Sr. Villamar en su vana pretensión de Justificar el procedimiento

de la negativa verdaderamente inconveniente del Sr. Herrera respecto á la

formación de una nueva cátedra de Psicología, que debía haberse establecido

en la Escuela Nacional Preparatoria, á vuelto a publicar otro artículo en su

periódico La Escuela de Jurisprudencia y cuyo artículo lleva el rubro de “El

425 Hale, Transformación, 2002. 426 Illades, “Pizarro”, 1999, p. 393. 427 Hale, Transformación, 2002.

155

Positivismo y la Psicología”. Ahí comienza el Sr. Villamar indicando, por un

rasgo de modestia que le es característica, que él no trata de sentar plaza de

positivista, al haberse ocupado días pasados en refutar la impugnación que

hice del dictamen emitido por el Sr. Herrera […].428

Evidentemente, esta sería una batalla la cual no ganaría Rhodakanaty, pues los

círculos que ahí se concentraban (docentes de la ENP, intelectuales, ministros, etc.)

siempre contaron con el apoyo total de Juárez y Lerdo de Tejada posteriormente, hasta

inicios del gobierno de Díaz. Sin embargo le permitió sentar las bases de propuestas

diversas de filosofía y psicología que usaría en sus posteriores ensayos educativos.

Aunado a este debate, Rhodakanaty junto a sus alumnos, amigos y compañeros

de lucha, comenzarían nuevamente con un proyecto de organización obrera en la

ciudad de México, el trabajo a lo largo de casi diez años seguía rindiendo frutos. En

1871 se reorganizó La Social integrada por el propio Plotino Rhodakanaty, Francisco

Zalacosta, Ricardo Velatti y Pedro Ordoñez, Hermenegildo Villavicencio había muerto

para esas fechas. En estos momentos, La Social comenzaría con una propaganda

mucho más radical, influenciada sí por las doctrinas socialistas de Rhodakanaty, pero

Velatti y Zalacosta principalmente, se encargarían de dotarla de un carácter netamente

anarquista-bakuninista y es a finales del mismo 1871 cuando esta organización

comenzaría un acercamiento con la sección uruguaya de la Asociación Internacional

de los Trabajadores (AIT) y su posterior adhesión a la Federación del Jura. Comenzó,

entonces, una nueva etapa para el movimiento obrero y campesino organizado, con

nuevos bríos en la lucha por la emancipación humana, el anarquismo no estaba

extinto.

428 Plotino Rhodakanaty, “Racionalismo y positivismo”, El Socialista, 17 de marzo de 1881.

156

Conclusiones

El trabajo que acabo de describir y analizar, es solo una ínfima parte de la historia del

socialismo en México y de la historia de la humanidad. La experiencia de la Escuela

de la Razón y del Socialismo fue de breve duración y pese a la extensa búsqueda de

documentos primarios en archivos, no es posible tener una visión más específica de

lo que ahí se vivió. Quedan huecos en esta historia y que espero sea un punto de

partida para futuros investigadores e interesados en el tema, puesto que, aunque casi

desconocidos, estos capítulos nos permiten comprender el entramado de la historia y

sus repercusiones sociales e individuales.

Desde el primer capítulo pudimos observar estos escenarios, las situaciones

contextuales, sumadas a las decisiones de un grupo o varios, así como de una sola

persona, han tenido afectaciones que dieron giros de gran importancia a lo largo del

siglo XIX y finales del XVIII en el caso de la Revolución francesa. En la mayoría de los

casos, los cambios y disposiciones se suscitaron y se encontraron en un pequeño

grupo de poder, el cual contó con la fuerza suficiente para dar un giro importante en la

situación de la población común y esto fue posible observarlo a lo largo de los tres

capítulos presentados en este trabajo.

La Revolución de 1789 sentó precedentes de suma importancia en la historia

universal. Críticas se pueden hacer varias, así como diversas suposiciones frente a las

actuaciones de los participantes en este complejo proceso de cambio. Sin embargo,

su influencia tuvo de manera inherente un constante devenir en las formas de relación

tanto sociales, económicas, culturales y filosóficas. Aunque de manera más habitual,

es conocido el cambio del feudalismo al capitalismo (no olvidando lo acontecido en

Inglaterra), este proceso dio pasó a nuevas formas de pensamiento devenidas del

iluminismo francés.

Estos pensadores, que de manera específica fueron Proudhon, Saint-Simón y

Fourier, en Francia y, Owen y Godwin en Inglaterra, fundamentaron las bases de una

nueva visión de las sociedades contemporáneas. Sobre todo en su dura crítica a las

157

relaciones establecidas por el capitalismo primigenio, junto al establecimiento de

nuevas leyes intrínsecas a la naturaleza humana y que fueron reflejadas en la

“Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano”, sustentando así la idea

de la propiedad individual y la necesidad de crear un Estado protector de dichas leyes.

Los constantes cambios políticos y sociales impidieron llevar a cabo las

promesas de la Revolución. La lucha entre facciones liberales y el intento de

restablecimiento de la monarquía, la guerra, la situación de pobreza y junto a ello el

descontento de las masas, complicó una situación demasiado frágil. Era latente el

peligro de rebeliones en diversos sectores lo que fue propiciando el endurecimiento de

las leyes. Poco a poco se permearon y complicaron las relaciones y estos pensadores

advirtieron sobre la necesidad de crear nuevos lazos sociales basados en el apoyo, en

el cambio de la legislación, en la reestructuración del propio sistema y en la necesidad

de abolir la propiedad privada, pues era considerada un factor importante en la

desigualdad social.

Los cambios organizativos orillaron a estos pensadores a buscar formas

alternativas a las que fueron impuestas. La búsqueda de éstas originó en los

socialistas posicionamientos histórico-filosóficos diversos, desde una forma moral y

ética distinta, hasta la transformación completa de la sociedad, caso ocurrido con

Fourier y Proudhon específicamente. Estas propuestas y ejercicios organizativos

tuvieron consigo una visión completamente diferente y, junto a ellas formas alternativas

de educación. Lo que es una constante en los métodos pedagógicos de cualquier

etapa histórica, fue la ligadura entre el trabajo y la escuela, la diferencia radicó en la

búsqueda de integrarlos de manera factible y que permitiera el desarrollo holístico de

las personas. El caso de Fourier es peculiar, puesto que él añadió el juego en conjunto

con el desarrollo de las pasiones, esto es, los gustos sin restricción alguna, en las y

los niños. También pensó en implementar la noción de educación sexual. Arguye que

los niños y jóvenes habían de estar en contacto con los diferentes trabajos que

llevaban a cabo en el Falansterio y que de manera natural ellos sentirían atracción

hacia el de su preferencia, esto resultaría en el desarrollo de un trabajo pleno y feliz

158

que satisficiera las necesidades de las individualidades al tiempo que generaría

beneficios sociales.

Fourier fue un acérrimo crítico de la sociedad industrial a la que suponía

totalmente corrompida y junto a ella la noción y definición de la educación, cuestión de

importancia en el proceso de regeneración social. Es por ello que no es posible

otorgárseles el adjetivo de utópicos o utopistas, pues pese a sus escritos en los cuales

mostraron su preocupación por las clases desposeídas y las condiciones de existencia

y trabajo a la que eran sometidas, sus esfuerzos y colaboraciones los dejan fuera de

dicho adjetivo, pues podría valerles más el de “reconstruccionistas sociales”.

Por otro lado, Proudhon creó las bases económicas, jurídicas y filosóficas del

anarquismo actual basado en la búsqueda de la libertad social. Brindó una nueva

definición y la contrapuso a las formas de pensamiento de su época. La idea de

Federación en el pensamiento del francés, brindó la necesidad de reestructurar la

organización social de forma horizontal y no verticalmente como lo proponía el

liberalismo del siglo XIX. Este autor ha sido incomprendido por estudiosos del

socialismo y anarquismo, sobre todo en su visión filosófica más kantiana que

hegeliana, pero que brindó una visión yuxtapuesta en la noción de propiedad y los

devenires constantes entre el sistema económico y los cambios sociales de la época.

Los estudios y análisis realizados por estos autores, cimentaron las bases del

socialismo de Plotino Rhodakanaty, quien de manera particular, logró amalgamar

ambas visiones y llevarlas al terreno práctico que dio forma a un socialismo muy

peculiar en nuestro país. Esto se debió a su “panteosofía” influenciada por Spinoza y

la filosofía de Krause, que también contribuyeron en la construcción de este

socialismo.

Sin embargo, podemos encontrar ciertas contradicciones en los

posicionamientos de Fourier, a diferencia de su “alumno” Plotino Rhodakanaty. El

segundo se centró en la necesidad del racionalismo y la experiencia como formas de

aprendizaje basándose en las ideas de Krause y Spinoza -antes mencionados-, y

159

como se describió en la tercera parte del capítulo tres, se sumó la enseñanza de las

doctrinas socialistas-anarquistas del propio Fourier y de Pierre-Joseph Proudhon.

Rhodakanaty, con dichas ideas contribuyó en la organización de los grupos

campesinos proveyéndolos de una ideología y un objetivo, así como la lucha por un

cambio social que beneficiaría a las masas explotadas.

Estos preceptos fueron aplicados en la Escuela Libre de la Razón y del

Socialismo, partiendo de la experiencia vivida por los indígenas, campesinos y

trabajadores de hacienda y que logró llevar a cabo un proceso de reflexión de las

condiciones en las que se encontraban, la miseria y la explotación a la que eran

sometidos, así como el fracaso que tenían tras de sí los proyectos liberales de los

gobiernos de Maximiliano de Habsburgo y más tarde el de Juárez. Sumado a ello, la

labor que se hizo en la alfabetización y enseñanza del español hacia estos sectores

con la finalidad de otorgarles armas que dieran pie a la defensa de sus derechos y

sobre todo de sus tierras.

Habrá quienes no consideren a la Escuela Libre de la Razón y del Socialismo

como una institución escolar, pero hay que verla como una experiencia educativa

diferente y alternativa a las que se encontraban implementadas en el México

decimonónico. El carácter de la educación de los liberales se centró en la educación

elemental, en dar paso a una identificación e inclusión nacionalista debido a las

fragmentaciones políticas, mientras que en las escuelas de estudios superiores se

intentó reforzar esta idea nacionalista incluyendo el factor “progreso”, invitando a la

población a sumarse a dicho esfuerzo y de esto daría cuenta la llegada del

pensamiento positivista con Gabino Barreda. Mientras que a la llegada de los

franceses, la educación se centró prácticamente en reformar la educación secundaria,

dando seguimiento al proyecto educativo liberal pero con la introducción de una

educación más cultural, en otras palabras, se enfocó en el retorno de la enseñanza de

las lenguas clásicas, en la necesidad de viajar para empaparse de los conocimientos

de otros países, pero la situación de guerra impidió casi por completo llevar a cabo la

realización de dicho proyecto.

160

Rhodakanaty, al conocer la situación que se vivía en México, creyó viable la

instauración de organizaciones falansterianas y su primer experimento lo realizaría en

Chalco. Al igual que sus maestros, pensó que la mejor forma de comenzar la

cimentación de formas alternativas de organización se encontraría en la educación. Se

llegó a tener la creencia de que la escuela brindó las armas organizativas que

concluirían en las rebeliones comandadas por Julio López, pero como pudimos

analizar, estas formas organizativas de los pueblos campesinos e indígenas estaban

ya establecidas, pues los modos comunales de trabajo y convivencia inspiraron las

ideas anarquistas. Esto sumado a la lucha centenaria que tendrían que realizar estos

mismos pueblos por mantener su forma de vida. Tenemos, una vez más, que la

escuela brindó a las personas que asistían a ésta, una ideologización y politización de

su lucha rompiendo así con el esquema gubernamental de educación.

La Escuela de la Razón y del Socialismo se enfocó en la educación de los hijos

de los trabajadores de hacienda, pero su fuerza radicó en éstos últimos, en los

campesinos e indígenas que aceptaron la ideología socialista que preconizó Plotino

Rhodakanaty y más tarde los preceptos radicales de Zalacosta y López. Esta labor

permitió llevar a cabo una organización estructurada de las demandas realizadas por

los habitantes de la región de Chalco.

Las discusiones realizadas en esta escuela, reforzaron y permitieron el análisis

de las condiciones en las que se encontraban los lugareños, rompiendo de manera

tajante con la forma organizacional que pretendieron los gobiernos de Maximiliano y

Juárez, logrando de este modo uno de los objetivos del pensamiento libertario, la

liberación del pensamiento alienado por parte del aparato estatal y que diera origen a

nuevas formas de organización social coherentes a los ideales de los pensadores

franceses -Fourier y Proudhon.

El proyecto de Rhodakanaty, si bien no culminó con la organización de los

falansterios fourieristas, permitió llevar más allá las teorías de sus maestros, pues la

educación racionalista y politizada que brindó a los alumnos que asistieron sentó las

161

bases de la defensa de la tierra, de sus derechos y tal vez más importante, de su

capacidad como fuerza transformadora de la historia y de ello darían cuenta los

movimientos insurreccionales que se suscitaron en Chalco y sus alrededores, teniendo

influencia en los límites con el Valle de México. Así mismo, este trabajo me permitió

analizar a un personaje el cual estaba lleno de leyendas, me refiero a Julio López. El

trabajo realizado en archivo me permitió encontrar una faceta casi desconocida en la

vida de este líder agrario que fue antes de estos movimientos campesinos e indígenas.

No deseo aventurar en decir que fueron desmentidas dichas leyendas, pero sí que

algunos pasajes fueron esclarecidos, como fue el caso de que éste no fue un simple

peón bandolero y analfabeta, sino que perteneció a un grupo comandado por Rafael

Cuéllar y con un pasado de asaltos y expropiaciones a las familias hacendadas de la

región de Chalco y zonas aledañas.

Pese al fracaso de la escuela, Rhodakanaty intentaría volver años más tarde a

la región y continuar con la tarea que habría quedado pendiente en la década de 1860,

pero el gobierno liberal se lo impediría por los antecedentes con los que contaba el

griego como organizador y agitador de campesinos y obreros. Y más tarde, continuaría

con su labor pedagógica intentando ingresar a la Escuela Nacional Preparatoria

integrando una cátedra de psicología fuera de los límites de la filosofía positivista de

la época. Esta idea intentada por Rhodakanaty, tiene gran relevancia, pues fue hasta

el año de 1896, cuando se inauguró el primer curso de psicología como asignatura

independiente de la filosofía, dejando un antecedente de suma importancia a esta

institución y que pocas veces es conocida.

Más tarde fundaría una revista filosófica en la que difundiría su pensamiento,

especialmente el spinozista y fourierista, “El Craneoscopio”, sumando a este las

labores de organización obrera en la capital. Aunque poco a poco dejaría esta labor a

las generaciones más jóvenes

Aunque breve esta experiencia, nos da un ejemplo de las diversas propuestas

realizadas por personas que, en búsqueda de la felicidad humana, intentaron romper

162

paradigmas y demostrar que existen alternativas, solo es necesario ampliar nuestra

visión del mundo y que somos un entramado de acciones y pensamientos, sin darnos

cuenta, esas acciones tienen repercusiones grandes o pequeñas. Nuestras vidas

están íntimamente ligadas a la de los demás, a la vida de las instituciones, de las

organizaciones y de individualidades que poco a poco tejen ese concepto al cual

denominamos Historia.

163

ANEXOS

164

Anexo 1

Mapa del estado de México antes de ser dividido a causa de la intervención francesa. Podemos

observar lo que hoy es la delegación de Tlalpan, parte del estado de Morelos, Hidalgo y Tlaxcala eran

pertenecientes a este estado, por lo que se posicionaba entre uno de los estados con mayor extensión

territorial del México decimonónico.

Fuente: Jarquín, María, et.al., Historia Breve del estado de México, México, El Colegio de

México/Fondo de Cultura Económica, 2013.

165

Anexo 2

En el mapa (círculos), es viable observar la posible localización de la Escuela Libre de la Razón y del

Socialismo. Siguiendo el trayecto y la influencia de los levantamientos posteriores, es más factible

esta localización, la cercanía con el estado de Morelos, con la Ciudad de México y más aún con las

delegaciones de Xochimilco, Tlalpan y Milpa Alta.

Fuente: Jarquín, María, et.al., Historia Breve del estado de México, México, El Colegio de

México/Fondo de Cultura Económica, 2013.

166

Anexo 3

“Manifiesto a todos los Oprimidos y pobres de México y del Universo

Ciudadanos mexicanos:

Ha llegado la hora de conocer a los hombres con el corazón bien puesto; ha

llegado el día en que los esclavos se levanten como un solo hombre reclamando sus

derechos pisoteados por los poderosos. Hermanos: ha llegado el momento de

despejar el campo, de pedir cuentas a los que siempre nos las han exigido; es el día

de imponer deberes a quienes solo han querido tener derechos.

Vamos a una contienda de sangre. ¿Pero qué importa si esta sangre es

generosa? Fertilizará nuestros campos; dará exuberancia a las plantas y dejará un

rastro a la humanidad del futuro.

Infinidad de años y de siglos hemos caminado penosamente agobiados por el

cansancio, por la miseria, por la ignorancia y por la tiranía, y el día de la venganza

sagrada es con nosotros.

¿Qué poseemos sobre la superficie del universo, los que vivimos clavados en

el trabajo? ¿A quién deja beneficio el sudor de nuestras frentes, las lágrimas de

nuestros ojos, el dolor de nuestras espaldas, el cansancio en nuestros brazos, la fatiga

en nuestros pies y la angustia en nuestros corazones? ¿Quién ha pensado alguna vez

en recoger lo que siembra, cuando todo se nos arrebata?

Los que se han aprovechado de nuestra debilidad física, moral e intelectual, se

llaman latifundistas o terratenientes o hacendados. Los que pacientemente nos hemos

dejado arrebatar lo que nos corresponde, nos llamamos trabajadores, proletarios o

peones. Los peones hemos entregado nuestras vidas e intereses a los hacendados y

esto nos ha sometido a los mayores abusos; han establecido un régimen de

explotación por el que estamos condenados a no disfrutar de la vida.

167

¿En qué consiste el régimen de explotación establecido? Es un sistema que

exclusivamente se dirige a mancillar la existencia de un peón. Nuestros padres fueron

comprados por la hacienda, al precio de un REAL, porque en los mercados

establecidos en las haciendas se compraban los artículos a los precios más

exagerados, aún aquellos artículos que nosotros hacemos producir con nuestra mano,

mes por mes y año por año, se iba haciendo una deuda a cargo de nuestros padres.

¿Quién podría solventar aquella deuda, cuando el jornal no pasaba de ser el misérrimo

real? ¿Quién habría de prestar a nuestros padres para cubrir sus adeudos? ¿Quién

les había de abrir crédito, cuando el crédito siempre está en manos de los detentadores

de la producción?

Cuando nosotros venimos a este mundo, nos encontramos con que las deudas

de nuestros padres, pasaban a nuestro cargo, y que por lo visto, habíamos nacido

esclavos y con la obligación de seguir trabajando en el mismo lugar, bajo el mismo

sistema, a título de cubrir la famosa deuda. Pero nuestro jornal tampoco aumentaba;

nuestro crédito tampoco se habría y teníamos que conformarnos con la misma

situación.

¿Y quién ha cooperado a mantenernos en el silencio, en la humillación, en la

ignorancia y en la esclavitud? La iglesia y solamente la iglesia que por medio de sus

hipócritas misiones, ha tejido la mentira de la salvación espiritual en un lugar que no

es la tierra. Nuestras madres, nuestras hermanas, nuestras esposas y nuestras hijas,

rezan con fervor pidiendo a todos los santos que nos salven de esta situación horrenda.

Más todo ha sido en vano, porque según ellos, los frailes, hemos venido a

padecer a este valle de lágrimas y tenemos que esperar para que en el cielo nos

premien la resignación. Lo más curioso del caso, es que los que nos piden resignación

son los menos que se resignan a una existencia penosa, ya que han adquirido

propiedades inmensas, las han explotado a sus anchas y con grandes beneficios y

también con toda paciencia nos han explotado: HAN COMIDO OPIPARAMENTE DEL

SUDOR DE NUESTRA FRENTE.

168

Los curas nos han engañado profanando la doctrina del gran Cristo, a quien hay que

reivindicar, ya que sus promesas de caridad, de paz y de concordia siempre han

sonado en nuestros corazones con inmensa alegría. Por desgracia, no se ha llegado

el momento de hacerlas efectivas porque sus llamados representantes desempeñan

el papel de judas, que el Cristo bondadoso siempre condenó por ser el mal frente a la

razón que predicaba.

Que reine la religión pero nunca la Iglesia y menos los curas. Por eso las Leyes

de Reforma, a las que nosotros apoyamos desde hoy y para siempre, son tan grandes,

lástima que no se practiquen en todo su rigor, debido a que los mismos gobiernos que

las proclaman hacen al fin causa común con los enemigos del pueblo víctima de

traiciones.

En el Estado libre y soberano de Puebla, se ha visto que los curas han

acarreado con todo para los altares y después para sus casas. Han llevado grano por

grano de nuestras cosechas, diciéndonos que cada grano era una indulgencia que se

concedería a nuestros pecados en la otra vida, y así, de acuerdo con los hacendados

nos han dejado en la ruina más espantosa.

Si los curas son malos, también lo son todos los hombres que mandan. ¿Qué

diremos de eso que hemos dado en llamar gobierno y es tiranía? ¿Dónde está el

gobierno bueno?

Juárez a pesar de llamarse republicano y enemigo de la Iglesia, es un mocho y

déspota: es que todos los gobiernos son malos.

Por eso, ahora nos pronunciamos contra todas las formas de gobierno:

queremos la paz y el orden.

Hemos pedido tierras y Juárez nos ha traicionado. ¿Por qué no tener el pedacito

de tierra que labramos? ¿Con qué derecho se han apropiado algunos individuos, unos

cuantos, de las tierras que deberían ser de todos?

169

¿Quién ha sido ese atrevido que con lujo se hizo señalar sus propiedades, cuando

estas no tenías más dueño que la naturaleza?

Los hacendados han sido los hombres fuertes, que validos del ejército que ellos

mismos sostienen para asegurar sus propiedades, han señalado sus posesiones en

los lugares que han deseado, sin que el pueblo proteste.

Habíamos creído que el triunfo de la república sería el verdadero triunfo del

pueblo, ya que todos los hacendados se habían refugiado en los faldones del imperio,

pero con suma tristeza hemos visto, que estos mismos hacendados han tenido refugio

en los faldones republicanos, lastimándose así los intereses que deberían ser

inviolables; los de los pobres. Esto indica que es menester emprender una lucha más

justa y más racional, que venga asegurar lo que nosotros queremos.

¿Qué queremos?

Hermanos nuestros:

Queremos el socialismo, que es la forma más perfecta de convivencia social;

que es la filosofía de la verdad y de la justicia, que se encierra en esa triada

inconmovible: Libertad, Igualdad y Fraternidad.

Queremos destruir radicalmente el vicioso estado actual de explotación, que

condena a unos a ser pobres y a otros a disfrutar de las riquezas y del bienestar; que

hace a unos miserables a pesar de que trabajan con todas sus energías y a otros les

proporciona la felicidad en plena holganza.

Queremos la tierra para sembrar en ella pacíficamente y recoger

tranquilamente, quitando desde luego el sistema de explotación; dando libertad a

todos, para que siembren en el lugar que más les acomode, sin tener que pagar tributo

alguno; dando libertad para reunirse en la forma que más crean conveniente, formando

grandes o pequeñas sociedades agrícolas que se vigilen en defensa común, sin

necesidad de un grupo de hombres que les ordene o les castigue.

170

Queremos abolir todo lo que sea señal de tiranía entre los mismos hombres viviendo

en sociedades de fraternidad y mutualismo, estableciendo la República Universal de

la Armonía.

¡Pueblo Mexicano!

Este es nuestro plan sencillo, que haremos triunfar en alguna forma y en pos

del verdadero triunfo de la libertad.

Seremos perseguidos; tal vez acribillados ¡no importa! Cuando en nuestro

pecho laten esperanzas. Que más tenemos en nuestra vida sino en morir antes que

seguir perpetuando el agobio de la miseria y de los padecimientos. Se nos desprecia

como liberales, se nos mancilla como socialistas y se nos condena como hombres. Es

indispensable salvar el momento, y levantar nuestros esfuerzos en torno a esa

sacrosanta bandera de la revolución socialista, que dice desde lo más alto de la

República: ¡Abolición del gobierno y de la explotación!

Alcemos nuestra cara buscando con serenidad nuestra salvación que radica en

nosotros mismos.

Queremos tierras, queremos trabajo, queremos libertad. Necesitamos salvarnos

de todos los padecimientos, necesitamos salvar el orden, en fin, lo que necesitamos

es el establecimiento de un pacto social entre los hombres, a base de respeto mutuo.

¡VIVA EL SOCIALISMO! ¡VIVA LA LIBERTAD!

Dado en Chalco, el día 20 del mes de abril del año de 1869 [1868]”.429

429 Tomado de Anaya, Rebelión, 1997, pp. 161-163 y García Cantú, Socialismo, 1984, pp. 58-61.

171

Anexo 4

Glosario

Con la finalidad de que el texto pueda ser más accesible para el lector, a continuación

se insertan una serie de conceptos y sus definiciones. Especialmente es necesario

hacer énfasis en aquellos que pueden ser confundidos como es el caso de

anarquía/anarquismo; anarquismo/marxismo; y comunismo autoritario/comunismo

libertario. En algunos casos, se sugerirán textos para que el propio lector pueda

ahondar de manera más específica y reflexiva respecto a los conceptos aquí

enumerados. Algunos otros conceptos no están insertos al texto, sino que le son

inherentes, tales como clase, lucha de clases, contrato social o pedagogía libertaria,

pero que creemos que es necesario insertar en este apartado.

Además de la definición de los conceptos, en algunos de ellos se trata de

insertar datos históricos o reflexiones del autor con la finalidad de hacer comprensible

la lectura del texto.

Anarquía: Esta palabra proviene de la etimología griega, en el cuál el prefijo an evoca

negación; archi, que es la raíz, implica mandar o ser el primero e ia, que es el sufijo y

que refiere la condición. Por tanto, la palabra anarquía es la negación de toda

autoridad, fuerza o poder. Los defensores del poder han intentado ligar a este concepto

al caos y la confusión, haciendo pensar que una sociedad sin gobiernos llevaría a los

individuos a destruirse a sí mismos, legitimando de esta manera la existencia del

Estado y las instituciones que lo conforman.

Este concepto cobra fuerza y una definición diferente en el año de 1840, cuando

Pierre-Joseph Proudhon se define como anarquista en un sentido político, filosófico,

económico y jurídico. En esta idea, la anarquía es un modo de vida pleno que opta por

la realización plena y efectiva de los individuos y las colectividades, invitando a la razón

y a la conciencia de los individuos para el desarrollo fecundo bajo el pacto libre

asociativo. A diferencia de lo que se pueda decir de la anarquía en su sinónimo de

caos, ésta pugna por la autoorganización de las colectividades de manera autonómica

y de forma totalmente horizontal en la que nadie ordena ni es ordenado, rompiendo

172

así las relaciones de poder que terminan por suprimir aspiraciones y empoderan a

pequeños grupos.430

Anarquismo: Podemos considerar a la anarquía como el fin y al anarquismo como el

medio, esto es, el principio de vida y conducta que se tiene en una sociedad sin

gobierno. Es aquí donde se pone en práctica toda la teoría anarquista, su factibilidad

y su coherencia.431

Antinomias: Proudhon retomó de Immanuel Kant el concepto de antinomias, las

cuales, a diferencia de la dialéctica de Hegel y Marx, no terminan por constituirse en

la triada tesis-antítesis-síntesis. Las antinomias son contradicciones irresolubles y en

la concepción de Proudhon irreductibles entre sí. Lo que impera en ellas es un equilibro

universal y que al momento de una ruptura, una termina por someter a la otra.

Pongamos un ejemplo: Libertad/autoridad, éstas conviven de manera armónica, no

pueden reducirse la una a la otra puesto que si se rompe dicha armonía, la libertad

termina en convertirse en autoridad y la autoridad en autoritarismo, por ende, no puede

haber una síntesis de ambos conceptos.432

Clase: De manera sociológica, esta concepción la utilizamos para distinguir los

distintos rubros en los que suelen organizarse los individuos. Pero existe otra forma de

clasificación que es la categorización de clases según su posicionamiento económico,

sin embargo puede ser ampliado en una forma cultural e histórica.433

Colectivismo: Desde la idea bakuninista, el colectivismo habla sobre que, tanto la

tierra, como los medios de producción deben pertenecer a toda la sociedad, es decir,

deben ser comunes. Pero al igual que el mutualismo, se sostiene la idea de salario, en

430 Cano, “Anarquía”, 1979 y Malatesta, Anarquia, 2015. Así mismo se recomiendan estos textos para

un análisis más profundo. 431 Kropotkin, Pensamiento, 2013 y Kropotkin, Moral, 2015. 432 Cappelletti, Ideología, 2010. 433 Cano, “Anarquía”, 1979.

173

la cual, este será repartido según el esfuerzo realizado y la calidad del trabajo

individua.434

Comunismo libertario: Doctrina económica cuyos principales representantes son

Piotr Kropotkin, Errico Malatesta, Luigi Fabbri, Pietro Gori, entre otros. A diferencia del

colectivismo y el mutualismo, el comunismo opta por la abolición total del salario, del

Estado, la religión, la propiedad privada, el sistema capitalista y toda forma de poder

que coarta la libertad de los individuos y las sociedades. Además de los otros dos

conceptos que pugnan por la colectivización de los medios de producción y la tierra

(colectivismo y mutualismo), la forma de distribución del comunismo libertario se

resume en esta máxima: “De cada uno según su capacidad, a cada uno según sus

necesidades”. Esto se debe a que no es posible determinar el valor del trabajo

realizado por una persona, ya que el producto final pertenece a un esfuerzo colectivo.

Si por el contrario, se paga según el esfuerzo de cada individuo, mientras más se

trabaja más se gana y existe la posibilidad de acumulación lo que generaría

desigualdad entre las personas, por ello el comunismo libertario se inclina hacia la

repartición de los bienes según las necesidades específicas de las personas.435

Comunismo autoritario: La definición de este concepto se debe a sus propios rasgos

elaborados dentro del Manifiesto del Partido Comunista en donde Marx y Engels

sintetizan el comunismo en la toma de los medios de producción por parte de los

trabajadores; centralización de los instrumentos por parte del Estado -entiéndase una

organización obrera o vanguardia proletaria- que incremente las fuerzas productivas.

Durante la década de 1860 y hasta 1872, se suscitaron debates entre las dos alas de

la Asociación Internacional de los Trabajadores o Primera Internacional, entre los

anarquistas encabezados por los franceses proudhonianos primero y por Bakunin

después y los marxistas o comunistas autoritarios dirigidos por Marx.436 El programa

de los comunistas se resumen en diez puntos: 1) expropiación de la propiedad de la

434 Cappelletti, Ideología, 2010. 435 Ibid.; Marin, Anarquismo, 2015. 436 Para una lectura sobre los acontecimientos en los congresos de la AIT, se recomiendan los textos “La

Internacional Obrera” de Víctor García y “El proletariado militante” de Anselmo Lorenzo.

174

tierra y empleo de la renta de la misma para los gastos estatales; 2) fuertes impuestos

progresivos; 3) supresión del derecho de herencia; 4) confiscación de la propiedad de

todos los emigrantes y rebeldes; 5) centralización de crédito en manos del Estado por

medio de un banco nacional con capital estatal y monopolio exclusivo; 6) centralización

de los transportes en manos del Estado; 7) multiplicación de las fábricas nacionales,

instrumentos de producción, roturación de los terrenos incultos y mejoramiento de los

campos según un plan general; 8) trabajo obligatorio igual para todos, instauración de

ejércitos industriales, en especial para la agricultura; 9) unificación de la explotación

de la agricultura y la industria en pro de la eliminación de diferencia entre campo y

ciudad y 10) educación pública y gratuita de todos los niños. Abolición del trabajo fabril

de los niños en su forma actual.437

Conservadurismo: En realidad es difícil llegar a una definición sobre el

conservadurismo, ya que la historiografía tanto de la época, como la actual, tiende

hasta cierto punto a desprestigiar la labor del lado conservador. Sí, si nos remontamos

a la historia, el conservadurismo ha sido siempre la oposición al propio liberalismo,

desde la Revolución francesa y todo el siglo XIX. Podemos decir que su idea fue la

defensa del orden y los valores, y en algunas ocasiones anteponiendo la fe sobre la

razón. Tanto en México como en Francia, intentaron restablecer la monarquía, aunque

ello no constituía un retroceso. Durante la década de 1870 en la capital, el partido

conservador apoyo el establecimiento de las mutualidades y la manifestación de

obreros y artesanos, aunque con una finalidad política, hubo apertura a las formas

organizativas.438

Contrato social: Pacto que se establece entre los ciudadanos de un territorio y el

Estado a fin de establecer obligaciones y derechos. Sin embargo, este “pacto” es

considerado arbitrario e impuesto pues todo aquel que nace y crece en dicho territorio

437 Marx y Engels, Manifiesto, 1970. 438 Vid. Basurto, Jorge, “Organizaciones obreras” en El proletariado industrial en México (1850-1930),

México, Universidad Autónoma de México, 1975.

175

debe someterse a estos derechos y obligaciones sin tomar en cuenta si el individuo

acepta o no dicho pacto, elaborando un ejercicio de poder en el que se ven sometidos

la voluntad, la autonomía y la autoorganización.

Derecho natural o Iusnaturalismo: Entiéndase como todo derecho humano

inherente a su naturaleza, en otras palabras, el hecho de pertenecer al género humano

y al provenir de la naturaleza misma, existen derechos de orden natural, como es el

caso del derecho a la vida. A ello se suma el derecho a ser dueño de sí puesto que

tiene la capacidad de autodominio, por tanto, todas sus capacidades son derechos.

Existen derechos primarios u originarios y derechos subsiguientes. Sigamos con el

ejemplo del derecho a la vida que es un derecho primario y el derecho subsiguiente

sería el de preservar la vida por vía de la alimentación. Por ende, el humano tiene

derecho a ciertos bienes naturales los cuales se constituyen a partir del trabajo

realizado por el propio humano que ha de proveer la naturaleza, por tanto, el trabajo

como los medios y los productos son derechos naturales.439

Educación integral: Desde la concepción libertaria del siglo XIX, la educación integral

estaba formada por la unión del trabajo intelectual y el trabajo manual; vinculando

siempre la escuela con el trabajo con la finalidad de que tanto niños como trabajadores

adquirieran capacidades manuales así como la de reflexión u discernimiento en la

lucha por la liberación. Además, dicha educación debería ser racionalista y científica.

Estado: Ente abstracto materializado en las instituciones que han de representarlo,

milicia, policía, organismos de salud, entre otros. La finalidad de éste no es la de

mediar por vía de un contrato social las relaciones humanas, sino la de proteger la

propiedad privada por medio del monopolio de la violencia, ambos objetivos le

permiten auto-legitimarse440 por el acceso a relaciones de poder vertidas en leyes

jurídicas, sociales o “naturales”.

439 Hervada, Introducción, 1994. 440 Kropotkin, Pensamiento, 2013.

176

Federación: A diferencia de la definición liberal, la Federación desde la concepción

anarquista parte del núcleo social, el individuo. El individuo ha de asociarse, por medio

del pacto libre con otros individuos afines, éstos forman colectividades, las

colectividades pueden constituirse en sindicatos pertenecientes a municipios libres,

dando forma a federaciones libres. La diferencia radica en la abolición de barreras

territoriales y su base es la libre asociación de personas que pueden o no seguir

colaborando para la obtención de los objetivos individuales y colectivos.441

Guerra: Las guerras son hechos bélicos en los que generalmente intervienen intereses

políticos, económicos o geográficos. En estos acontecimientos generalmente se

suscita el ejercicio de poder de un Estado fuerte hacia otro más débil o más pequeño.

Los interesados en que las guerras se lleven a cabo son los “grandes señores” que

tras un discurso de nacionalismo incitan a las masas a encarnarse en una lucha

fratricida. Por ende, la guerra es un acontecimiento de sometimiento a otros

territorios.442

Insurrección: Son levantamientos armados a veces espontáneos y otras veces

organizados en regiones específicas bajo condiciones particulares.443

Liberalismo: De manera general es la filosofía económica que tiene sus antecedentes

en Europa entre los siglos XVII-XIX. Inglaterra es el país cuna del liberalismo económico

por medio de teóricos como Adam Smith, David Ricardo o Thomas Malthus que en sus

postulados ven la necesidad del libre mercado entre países industrializados para el

desarrollo económico, con la participación nula o casi inexistente del Estado,

permitiendo la competencia entre sectores productores. Sin embargo, en la Francia del

siglo XVIII también se desarrollan postulados liberales de corte político encabezados

por los llamados iluministas, Rousseau, Montesquieu, Voltaire y que culminarían en la

revolución de 1789 y la creación del Estado moderno.444

441 Cappelletti, Ideología, 2010 y Proudhon, Principio, 1985. 442 Reclus, Evolución, 2015 y Cappelletti, Bakunin, 1986. 443 Cappelletti, Bakunin, 1986. 444 Vid. Capítulo uno de este trabajo.

177

Lucha de clases: Se parte de la idea de lucha de los contrarios que estableciera

Platón, en la cual, las cosas contrarias surgen a partir de sus propios contrarios donde

se pone como ejemplo la naturaleza y la ley del hombre. En este caso, al surgimiento

de una clase poseedora a de nacer su contrario, la clase desposeída. A diferencia del

marxismo que contrapone al capitalista y al obrero, en la lucha libertaria se amplía la

definición como ya bien se mencionó, el que tiene todo y los que no tienen nada.445

Marxismo: De modo general, es la doctrina económica, filosófica, histórica y política

generada por el alemán Karl Marx en la que se rechaza el sistema capitalista y se

busca el cambio de las estructuras sociales por medio del empoderamiento de la clase

trabajadora. La lucha de clases es considerada el motor de la historia y el análisis de

la misma se lleva a cabo por el denominado materialismo histórico en el cuál, una serie

de contradicciones, generalmente económicas, suscitan coyunturas históricas que

culminan en cambios sociales.446

Mutualismo: Desde la concepción proudhoniana, el mutualismo ha de partir de la

negación absoluta de la propiedad privada optando por la posesión de la tierra447 de

forma colectiva o individual, sin que nadie sea dueño de nada. Uno de los aspectos

importantes, es que el pensador francés opta por el derecho a lo producido, esto es,

según el trabajo realizado toca la parte equivalente en cuanto a ganancia. A diferencia

del comunismo libertario, Proudhon no despreciaba la idea de salario siempre y

cuando este fuese equivalente a lo producido.

El mutualismo ha de basarse en la libre asociación de productores y

consumidores partiendo, además de la libre asociación, de la creación de un Banco

del Pueblo que fomente el crédito gratuito a los trabajadores.448

445 Platón, “Gorgias”, 2000 y Platón, “Fedón”, 2008. 446 Marx y Engels, Manifiesto, 1970. 447 En el cuarto subtema del primer capítulo, es posible encontrar un análisis al concepto de mutualismo.

De igual forma, se puede consultar el texto “La ideología anarquista” de Ángel Cappelletti. 448 Cappelletti, Ideología, 2010 y Cuvillier, Proudhon, 1986.

178

Pacto asociativo: El pacto asociativo a diferencia del contrato social, se refiere a la

capacidad de cada individuo o colectividad de unirse por iniciativa propia según sus

objetivos y afinidades. No existe un documento legal que avale dicho pacto, sino que

la asociación se lleva a cabo por acuerdo mutuo y que al momento en que se cumplen

los objetivos o se está en desacuerdo el individuo o colectivo tiene plena facultad de

disolver el pacto, rompiendo así con la tónica de jerarquizaciones, clasificaciones y

principalmente la idea de territorio, puesto que el pacto se extiende a lo largo y ancho

de la Tierra.449

Pedagogía libertaria: Concepto amplio en cuanto a experiencias educativas. La

pedagogía anarquista se cierra a ciertas formas de enseñanza, mientras que por

pedagogía libertaria podemos entender: la pedagogía antiautoritaria, pedagogía

revolucionaria, pedagogía anarquista, pedagogía no directiva, pedagogía popular,

pedagogía neutral,450 entre muchas otras.

Propiedad: Desde el punto libertario, la propiedad se considera como el mal de todos

los males, puesto que en su base radica la desigualdad y perpetúa el sistema de

explotación, legitima la existencia del Estado y con él, el uso de la fuerza o monopolio

de la violencia.451

Revolución: A diferencia de la guerra, la revolución es un acontecimiento consciente

y organizado cuyo objetivo es cambiar las estructuras socio-económicas. Las

revoluciones están dirigidas por una serie de ideologías que brindan fuerza en la

búsqueda de los fines. Son movimientos populares generalmente integrados por las

449 Proudhon, Principio, 1985. 450 Se recomiendan los siguientes textos: “Breviario del pensamiento libertario” de Tina Tomassi;

“Anarquismo y educación. La propuesta sociopolítica de la pedagogía libertaria” de José Cuevas Noa; “Historia de la ideas pedagógicas” de Moacir Gadotti; “”La cuestión escolar” de Jesús Palacios y “La A en la pizarra”, varios autores. Algunos de estos textos se encontrarán en la bibliografía al final de este trabajo. 451 Se sugiere la lectura del subcapítulo cuatro de este trabajo referente al pensamiento de Proudhon, o

las lecturas de sus textos, especialmente “Qué es la propiedad?”, “El sistema de las contradicciones económicas o filosofía de la miseria”, “El principio federativo” o “La ideología anarquista” de Ángel Cappelletti.

179

clases desposeídas.452 Podemos encontrar diversas formas de revolución, social,

política, económica, etc.

Socialismo: Doctrina filosófico-política que surge en el siglo XIX y que los primeros en

cobijar dicho concepto serían los owenianos y saint-simonianos. La aparición de esta

doctrina se debió a diversos factores, tales como el surgimiento del Estado moderno

en Francia así como las ideas liberales en cuestión política, económica y social venida

de la revolución de 1789. Sin embargo, en su estudio sobre el romanticismo social en

Francia, Roger Picard asegura que esta literatura socialista proviene del propio

romanticismo particularmente afrancesado, pues se caracteriza por el análisis y crítica

a los sistemas políticos y sociales del propio siglo XIX y por la necesidad de crear

cambios positivos y humanistas que permitan regenerar el tejido social tan permeado

para aquellos momentos453. El socialismo se caracterizó por varias cosas, su

desconfianza en la política, la necesidad de un nuevo orden social que terminara con

el individualismo liberal y lo más importante, partir de la propia organización social.454

Socialismo utópico: Esta concepción nació de igual forma en el siglo XIX y lo que sus

detractores le rebaten es su idealismo, mesianismo y fantasía en cuanto a la

descripción de una sociedad futura.455 De aquí se desprende la concepción de utópica,

puesto que en su etimología ou-no y topos-lugar significa no lugar o lugar que no

existe. Esta definición fue comparada al socialismo científico que preconizaban Marx

y Engels debido a sus trabajos basados en el materialismo y en yuxtaposición al

idealismo hegeliano. Pero los aportes de los socialistas utópicos son de gran

relevancia, no solo por su carácter literario, sino por su aguda crítica a los sistemas

sociales del XIX y su análisis en las propuestas de regeneración social. Si bien muchos

de los textos insertan ese carácter utópico, no podemos olvidar tampoco que existieron

452 Reclus, Evolución, 2015 y Cappelletti, Bakunin, 1986 453 Picard, Romanticismo, 2005. 454 Cole, Historia, 1964, vol. I; Picard, Romanticismo, 2005 y Marin, Anarquismo, 2015. 455 Vid. El Manifiesto del Partido Comunista.

180

ejercicios de establecer sociedades basadas en las descripciones de estos autores y

que América fue el lugar propicio para éstas.456

456 Cole, Historia, 1964, vol. I; Picard, Romanticismo, 2005, así como la lectura del capítulo uno en los

subtemas dos y tres; y el capítulo tres de este trabajo.

181

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