Voces de Esperanza28 de junio de 2015

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- EN INTERIORES - “¿Cómo me siento en mi perso- na estos 70 años?”, repite el Obispo Diocesano de Saltillo ante la pre- gunta inicial… “Hay dos sentimien- tos principales: uno de agradeci- miento a Dios por la riqueza que me ha permitido adquirir a lo largo de este período de vida… y que no me siento satisfecho creyendo que yo he hecho muchas cosas en 70 años, creo que debí haber hecho mucho más”… RIQUEZA FAMILIAR Los fundamentos a su vida los aportó su familia “que tenía una gran riqueza humana de parte de mis padres, mi hermano y herma- nas, y la podíamos compartir por- que éramos de clase media baja”. El joven Raúl logró tener una for- mación en escuelas públicas; “en ese tiempo México ofrecía mayo- res oportunidades, había un es- tándar de vida más austero para todos, era más amplio el número de personas que podíamos acce- der a una formación universitaria o conseguir beca”. Existía un respeto notable a la per- sona: “No había desprecio hacia nadie porque todos teníamos limitaciones económicas y no teniamos lujos” . DECISIÓN DE VIDA Disfrutó su tiempo universitario: “Yo tenía una beca para vivir, un lugar dónde dormir y la comida; pero había que colaborar para que se conserva- ra en orden, limpieza, compartir los tiempos para lavar la ropa y el aseo personal”. Semanario católico de la Diócesis de Saltillo 28 de junio de 2015 Año 4 No. 205 “Construyamos la comunidad... valorando nuestra dignidad” LA FAMILIA CON EL PAPA œ Atisbos œ NUESTRO OBISPO RAUL Luferni El padre trata de enseñarle lo que el hijo aún no sabe, corregir los errores que aún no ve, orientar su corazón, protegerlo en el desáni- mo y la dificultad. Todo ello con cercanía, con dulzura y con una firmeza que no humilla Son setenta años de vida, cuarenta de sacerdote. ¡Del Evangelio un Quijote! Y a los pobres nunca olvida. - SECCIONES - Niños y jóvenes dan su punto de vista sobre su pastor Comisiones diocesanas expresan su gratitud hacia el obispo El padre orienta, no humilla PÁGS. 6 Y 7 PÁG. 5 PÁGS. 11 Y 12 Comparte cuál es su sentir al arribar a los 70 años de vida y 40 de sacerdocio, y la expectativa a cinco años de presentar la renuncia obligatoria por Derecho Canónico al Vaticano Atender el grito de las y los pobres. El seguimiento del Señor Jesús en cada mártir Fray Raúl Vera López: vocación y vida de servicio PÁG. 9 En esta edición se incluyen el devocionario y escapulario de Nuestra Señora del Carmen

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Semanario Católico de la Diócesis de Saltillo. Edición Especial por el 40 aniversario sacerdotal de Fr. Raúl Vera López O.P.

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  • - EN INTERIORES -

    Cmo me siento en mi perso-na estos 70 aos?, repite el Obispo Diocesano de Saltillo ante la pre-gunta inicial Hay dos sentimien-tos principales: uno de agradeci-miento a Dios por la riqueza que me ha permitido adquirir a lo largo de este perodo de vida y que no me siento satisfecho creyendo que yo he hecho muchas cosas en 70 aos, creo que deb haber hecho mucho ms

    RIQUEZA FAMILIARLos fundamentos a su vida los

    aport su familia que tena una gran riqueza humana de parte de mis padres, mi hermano y herma-nas, y la podamos compartir por-que ramos de clase media baja. El joven Ral logr tener una for-

    macin en escuelas pblicas; en ese tiempo Mxico ofreca mayo-res oportunidades, haba un es-tndar de vida ms austero para todos, era ms amplio el nmero de personas que podamos acce-

    der a una formacin universitaria o conseguir beca.

    Exista un respeto notable a la per-sona: No haba desprecio hacia nadie porque todos tenamos limitaciones econmicas y no teniamos lujos .

    DECISIN DE VIDADisfrut su tiempo universitario:

    Yo tena una beca para vivir, un lugar dnde dormir y la comida; pero haba que colaborar para que se conserva-ra en orden, limpieza, compartir los tiempos para lavar la ropa y el aseo personal.

    Semanario catlico de la Dicesis de Saltillo28 de junio de 2015 Ao 4 No. 205

    Construyamos la comunidad... valorando

    nuestra dignidad

    LA FAMILIA CON EL PAPA Atisbos

    NUESTRO OBISPO RAUL

    Luferni El padre trata de ensearle lo que el hijo an no sabe, corregir los errores que an no ve, orientar su corazn, protegerlo en el desni-mo y la dificultad. Todo ello con cercana, con dulzura y con una firmeza que no humilla

    Son setenta aos de vida,

    cuarenta de sacerdote.

    Del Evangelio un Quijote!

    Y a los pobres nunca olvida.

    - SECCIONES -

    Nios y jvenes dan su punto de vista sobre su pastor

    Comisiones diocesanas expresan su gratitud hacia el obispo

    El padre orienta, no humilla

    PGS. 6 Y 7

    PG. 5

    PGS. 11 Y 12

    Comparte cul es su sentir al arribar a los 70 aos de vida y 40 de sacerdocio,

    y la expectativa a cinco aos de presentar la renuncia obligatoria por Derecho Cannico al Vaticano

    Atender el grito de las y los pobres. El seguimiento del Seor Jess en cada mrtir

    Fray Ral Vera Lpez: vocacin y vida de servicio

    PG. 9

    En esta edicinse incluyen

    el devocionario y escapulario de Nuestra Seora

    del Carmen

  • 28 de junio del 2015 No. 205 Voces de Esperanza2

    - Especial -

    SUS ORGENESFray Jos Ral Vera Lpez naci

    en Acmbaro, Guanajuato, el 21

    de junio de 1945; es Ingeniero Qu-

    mico por la Universidad Nacional

    Autnoma de Mxico donde fun-

    gi como capelln de estudiantes

    aos despus. En 1968 ingres en

    la Orden de Predicadores (Frailes

    Dominicos), Provincia Mxico, don-

    de lleg a ser maestro de novicios

    y predic a grupos de la Casa de

    Agua Viva, anexa al convento; du-

    rante ese tiempo realiz trabajo

    pastoral con universitarios y con

    campesinos. Aos despus integr

    el Consejo Provincial de los Domi-

    nicos en Mxico y se desempe

    como Socio del Prior Provincial y

    Coordinador de la Familia Domi-

    nicana en el pas. Estudi Filosofa

    en Mxico y Teologa en Bolonia,

    Italia; y se gradu como Licenciado

    en Teologa por la Pontificia Univer-

    sidad de Santo Toms de Roma. El

    Papa Paulo VI lo ordena sacerdote

    el 29 de junio de 1975.

    INICIA LA LUCHA POR

    LOS DERECHOS HUMANOS

    En 1987 Juan Pablo II lo nombr

    Obispo de Ciudad Altamirano, Gue-

    rrero, y fue ordenado en Roma el 6

    de enero de 1988; asumi su traba-

    jo en la Dicesis el 21 de enero de

    1988. Aqu atendi a los campesi-

    nos y habitantes de las zonas margi-

    nadas y fund el Centro Social Juan

    Navarro para atender a los pobres;

    con lo que inici su defensa de los

    derechos humanos. El 14 de agosto de 1995 fue

    nombrado Obispo Coadjutor de

    San Cristbal de Las Casas, Chiapas,

    para trabajar junto a Don Samuel

    Ruiz, Obispo Diocesano. Lleg a la

    Dicesis el 4 de octubre. Trabaj

    en la realizacin del Tercer Snodo

    Diocesano y en la formacin de los

    Diconos Permanentes; colabor

    en la elaboracin del Directorio para

    el Diaconado Permanente Indgena.

    Apoy el Proceso de Paz y Re-

    conciliacin entre los pueblos ind-

    genas de Chiapas y el Gobierno Fe-

    deral, junto con Monseor Samuel

    Ruiz, la Dicesis de San Cristbal y

    la Comisin de Obispos para la Paz

    en Chiapas. Contribuy a crear con-

    diciones de dilogo entre el Ejrcito

    Zapatista de Liberacin Nacional

    y el gobierno mexicano, para que

    fueran garantizadas condiciones de

    vida ms justas para los pueblos in-

    dgenas mayas de la regin. Desde

    su estancia en San Cristbal hasta el

    da de hoy es miembro del Consejo

    Directivo del Centro de Derechos

    Humanos Fray Bartolom de Las

    Casas, Chiapas. Hasta la muerte del

    fundador don Samuel Ruiz, funga

    como co-presidente del mismo, y

    actualmente preside la direccin. En la Conferencia del Episcopa-

    do Mexicano fungi como miem-

    bro del Consejo Permanente en

    dos perodos, Presidente de la Co-

    misin para la Vida Consagrada,

    Miembro de la Comisin de Pasto-

    ral Social y de la Comisin Episco-

    pal para la Paz en Chiapas.

    HISTORIA EN SALTILLOFue nombrado Obispo de Saltillo

    por el Papa Juan Pablo II, el 30 de di-

    ciembre de 1999, e inici su servicio

    pastoral el 20 de marzo del 2000.

    Ha trabajado por la implantacin

    de un Plan Orgnico de Pastoral

    que promueva una evangeliza-

    cin integral de hombres y muje-

    res; y anime al clero y al pueblo a

    integrarse en un proceso de Iglesia

    que incida en lograr un cambio

    profundo de la realidad social ha-

    cia la justicia y la paz.En esta ciudad fund el Centro

    Diocesano para los Derechos Hu-

    manos Fray Juan de Larios. Acom-

    pa a los mineros del carbn en la

    defensa de sus derechos laborales,

    especialmente de las condiciones

    de seguridad para su trabajo, la justi-

    cia a viudas, hurfanos y familias; en

    relacin a los accidentes antes y des-

    pus del siniestro del 19 de febrero

    del 2006, en que murieron 65 mine-

    ros en la mina Pasta de Conchos.Coahuila es territorio de paso de

    migrantes, especialmente centroa-

    mericanos y sudamericanos, por lo

    que promovi la fundacin de dos

    casas del migrante: en Ciudad Acu-

    a, Casa Emas y en Saltillo, Beln

    Posada del Migrante. La primera

    est ahora bajo la responsabilidad

    de la Dicesis de Piedras Negras.

    Con el equipo de Beln Casa del

    Migrante y el Centro Fray Juan de

    Larios, realiza una defensa de los

    derechos humanos de los migran-

    tes, con incidencia a nivel nacional

    e internacional. En marzo del 2010

    asisti a la Comisin Interamericana

    de Derechos Humanos, junto con

    otros defensores, a denunciar la tra-

    gedia humanitaria del secuestro de

    migrantes en Mxico.En el 2002 se fund la comunidad

    San Elredo, para acompaar pas-

    toralmente a jvenes integrantes

    del colectivo de diversidad sexual

    buscando la promocin de la dig-

    nidad y defensa de los derechos

    humanos de esa comunidad, as

    como su integracin plena a la so-

    ciedad y a la Iglesia. Desde el 2005

    Fray Ral facilita el desarrollo de un

    proyecto de promocin de digni-

    dad de nios, nias y adolescentes

    de colonias marginales en Saltillo,

    llamado Los Grafitos. Y en julio de

    2006 asumi la denuncia y apoyo

    de mujeres prostitutas violadas por

    elementos del Ejrcito Militar Mexi-

    cano en Castaos; en su demanda

    contra el Ejrcito y el Estado. En di-

    ciembre de 2014, brind asesora

    legal y acompaamiento a los aho-

    ra ex obreros de la fbrica La Estre-

    lla en Parras, con el trmino de su

    huelga.

    En defensa de los pobresTrabajo pastoral incansable, creacin de

    organismos de atencin a grupos vulnerables, activismo social...

    esta es la vida de Ral Vera Lpez, Obispo de Saltillo

  • Voces de Esperanza No. 205 28 de junio del 2015 3

    ACOMPAAMIENTO A OTRAS CAUSAS

    Son de su inters las luchas por los derechos humanos de los movi-mientos sociales. Con su presencia en diferentes ciudades anima las cau-sas justas como el caso de los presos polticos de Oaxaca, de San Salvador Atenco, y de Ayutla de los Libres, Guerrero. Form parte de la Campa-a Nacional e Internacional Libertad y Justicia para Atenco; participa en movimientos en defensa de la biodi-versidad. Impulsa el dilogo y la soli-daridad ecumnica con los pueblos del Mundo y es miembro del Comit Internacional para el Consejo de Paz. Fue invitado por los Movimientos Po-pulares del Mundo, en Roma, Italia en 2014, lo mismo que ha sido solidario con el Movimento dos Trabalhado-res Rurais Sem Terra, junto con frailes dominicos, en la provincia de Goia-nia, Brasil, y asiste casi sin falta, a las ceremonias de aniversario luctuoso de la Masacre de Acteal, Chiapas.

    PONENTE Y CONFERENCISTAEn su defensa de los Derechos Hu-

    manos ha participado como ponente conferencista o panelista en diversas Universidades e Instituciones de Estu-dios Superiores, como la Universidad Nacional Autnoma de Mxico; Uni-versidad Autnoma de Coahuila, Insti-tuto Tecnolgico de Estudios Superio-res de Monterrey, Campus Monterrey, Universidad Autnoma de Sinaloa, Universidad de Oregon, Universidad de Chicago, Universidad de Santo To-ms de Minneapolis, Universidad de Costa Rica, Universidad Javeriana de Bogot, Universidad de Viena y otras.

    Fue invitado por la Asociacin Na-cional de Ministerios Catlicos Dioce-sanos Lsbicos y Gays de Estados Uni-dos (NACDLGM) a su XV Conferencia Nacional, realizada en Long Beach en 2008, en la que habl del Trabajo Pastoral con la Comunidad Lsbico Gay. La Arquidicesis de los ngeles lo invit a participar en su Congreso Misionero en 2010, para ser panelista sobre el mismo tema.

    Particip como panelista en el 25 aniversario de la Fundacin Rafto en Bergen, Noruega en noviembre del 2011 con la conferencia titulada Desa-fos del futuro de los Derechos Huma-nos, ello despus de ser reconocido por dicha fundacin en noviembre del 2010. Particip en la audiencia espe-cial de la Comisin Interamericana de Derechos Humanos en Washington, Estados Unidos, en Agosto de 2013, y lo ha hecho desde entonces en otras

    ocasiones, adems de participar en audiencias en la Corte Interamericana.

    Present la conferencia Iglesia de los Pobres en Amrica Latina, en el Congreso de Teologa de Madrid, Es-paa, en septiembre de 2013. Junto con la Fundacin Rafto, organiz los Foros de Migracin y la exposicin de posters diseados por estudian-tes de artes noruegos, en las ciuda-des de Saltillo, Monclova, y Distrito Federal; en eventos paralelos en M-xico y Noruega.

    En el Congreso del Estado de Coahuila, y como parte de los even-tos que organiz en Mxico junto con la Fundacin Rafto, en noviem-bre de 2013 present la Conferencia La Voz de los Migrantes, y ese mis-mo ao la Conferencia Aporte de Paulo Suess al sentido de la misin en la iglesia universal y latinoamericana, en el Cenami, Distrito Federal. En di-ciembre del 2014 fue ponente de las conferencias Construccin de Paz, Evangelio y Derechos Humanos en la Escuela de Paz en Guadalupe, Nue-vo Len; y sobre Migracin en el Da del Migrante Michoacano, en la capi-tal de Michoacn. En enero de 2015 present una conferencia en el foro El corazn creyente de la iglesia en la Universidad Pontificia de Mxico y en ese mismo mes es ponente en el evento Dilogos de Militarizacin y Criminalizacin de la Lucha Social en Mxico, en la Universidad Autnoma de Mxico. Realiz adems la presen-tacin del libro Tres Ocanos, de la Universidad Autnoma de Coahuila.

    ORGANISMOS CIVILES QUE PRESIDE Y APOYA

    Es presidente del Centro Diocesa-no para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios y del Centro Nacional de Ayuda a las Misiones Indgenas (CENAMI). Adems preside el Servicio Internacional Cristiano de Solidaridad con los Pueblos de Amrica Latina scar Romero (SICSAL). Respecto a las organizaciones de la sociedad ci-vil, es Presidente Honorario de la Red Solidaria Dcada Contra la Impuni-dad; Presidente del Centro de Dere-

    chos Humanos Fray Bartolom de las Casas; miembro de tres tribunales de la sociedad civil, los dos primeros crea-dos en Mxico: el Tribunal Internacio-nal de Conciencia de los Pueblos en Movimiento, el Tribunal Internacional de Libertad Sindical y el Tribunal Per-manente de los Pueblos. En febrero del 2015, presenta la Nueva Constitu-yente Ciudadana en Saltillo, Coahuila, con un nutrido grupo de la sociedad civil, acadmica y artstica.

    - Especial -

    2000: Premio Nacional de Derechos Humanos Don Sergio Mndez Arceo2000: Medalla Roque Dalton, otorgada por el Consejo de Cooperacin con la Cultura y la Ciencia en El Salvador, A.C.2007: Medalla al Mrito en la Ciudad de Mxico por su trabajo en la de-fensa de los Derechos Humanos, otorgada por el Observatorio Eclesial y la Red Nacional de Derechos Humanos. 2009: Reconocimiento Hijo predilecto de Acmbaro por parte del Ayuntamiento de Acmbaro, Guanajuato

    2009: Reconocimiento Samuel Ruiz en Coahuila, por la defensa y pro-mocin de los Derechos Humanos en Mxico2010: Recibi el Premio Rafto 2010 por la Fundacin Rafto en Bergen, Noruega en la sede nacional del teatro (den Nationale Scene) en Ber-gen, Noruega.2011: Reconocimiento por el Centro de Derechos Humanos de las Mu-jeres en Chihuahua, Chihuahua. 2011: Reconocimiento titulado Voz por la Justicia, por su valiente de-fensa del migrante, otorgado por Casa Anunciacin en abril en El Paso, Texas.2012: Reconocimiento por el Sistema Universitario Jesuita (SUJ) en el Auditorio San Ignacio de Loyola en la Universidad Iberoamericana de Torren.2012: Candidato al Premio Nobel de la Paz 2012, por su trabajo a fa-vor de los derechos humanos en Mxico.2012: Galardn Corazn de Len por su trabajo en la defensa de los Derechos Humanos, otorgado por la Federacin de Estudiantes Uni-versitarios (FEU), de la Universidad de Guadalajara.2013: Reconocimiento Casa Tiyahui por su compromiso con la socie-dad, la inclusin y la igualdad.

    2013: Premio Internacional Hugo Gutirrez Vega de las artes y las hu-manidad, otorgado por el poeta y Doctor Honoris Causa Hugo Guti-rrez Vega y la Universidad Autnoma de Quertaro, por su compromi-so con los mexicanos ms vulnerables y dedicar su vida a la lucha de las causas ms nobles, en pro del respeto y del valor del ser humano sin importar su condicin, sin mermar en la bsqueda constante de la paz y la democracia.

    Reconocimientos

  • 28 de junio del 2015 No. 205 Voces de Esperanza4

    - Especial -

    Voces de Esperanza es una publicacin semanal de la Dicesis de Saltillo. Impreso en la ciudad de Quertaro, Qro. Es editado en las oficinas del Obispado de Saltillo. Direccin: Hidalgo 166 Sur, Zona Centro, C. P. 25000. Telfono: (844) 4123717 ext. 112 y 113 de 9:00am a 5:00pm. Se permite la reproduccin del material indicando su procedencia. Los artculos publicados en El Observador y los comentarios publicados en Voces de Esperanza no reflejan necesariamente la opinin de la direccin de este peridico diocesano. Correo electrnico: [email protected]; facebook y twitter: diocesisaltillo

    Un sacerdote bajo el signo del Vaticano II

    El signo mayor del paso del Espritu Santo por el seno de la Iglesia en el si-glo XX ha sido, sin duda al-guna, el Concilio Vaticano II. La huella de la presencia del Espritu est en la vita-lidad que precedi y pre-par esta gran Asamblea, en la amplia y abundante riqueza de las ideas y pers-pectivas de renovacin que se manifest durante los tres aos de su realiza-cin, y en los documentos conclusivos que trazan la ruta de la Iglesia para los tiempos actuales.

    La riqueza conciliar, profundamente transfor-madora de la vida eclesial, busc inmediatamente, y con entusiasmo, cami-nos de aplicacin pasto-ral para toda la Iglesia, y

    una de las realidades que mayor exigencia de reno-vacin ha experimentado desde entonces es el sa-cerdocio ministerial, uno de los servicios principa-les en la vida de las comu-nidades.

    En ese agitado clima de adaptaciones de la Iglesia a las nuevas reali-dades, apenas a tres aos de concluido el Concilio, Ral Vera inicia su camino al sacerdocio. Durante el tiempo de su preparacin, fray Ral fue asimilando las lneas pastorales con-ciliares que han distingui-do su ministerio a lo largo de 40 aos; su experiencia universitaria y su forma-cin de dominico le han dado caractersticas es-peciales a su vida sacer-

    dotal y le han ayudado a proyectar los rasgos que el Concilio acentu para toda la Iglesia, y que para los ministros representan las nuevas formas de pre-sencia eclesial en el mun-do: profetismo, apertura a los signos de los tiempos, servicio a la sociedad.

    Sabiendo que el mensa-je del Evangelio debe pe-netrar en la sociedad y en la cultura, Monseor Vera no ha rehuido los espacios de la denuncia cuando ha visto amenazada la digni-dad de personas o grupos, y siempre ha tomado en serio la responsabilidad de hacer or su voz de pastor y de profeta. En el mbi-to de la apertura y de la inclusin comunitaria, ha traspasado fronteras faci-

    litando y encabezando el acercamiento pastoral a realidades emergentes, en ocasiones conflictivas, a fin de darle sentido al Concilio, que proclama: Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hom-bres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discpulos de Cristo (Gau-dium et spes, 1).

    En este largo tiempo de servicio pastoral, don Ral ha guiado su vida tenien-do muy presente que la Iglesia, con sus ministros, es, como lo deca Paulo VI, servidora de la humanidad (7-dic-65); en su mente y en su corazn siguen re-sonando las palabras que

    han inspirado su sacerdo-cio y que escuch del mis-mo Papa Paulo VI el 29 de junio de 1975, da de su Ordenacin como presb-tero, en la Baslica Vaticana: El sacerdocio no es para el beneficio propio, no es una dignidad solo perso-nal; no es fin en s mismo. El sacerdocio es ministerio, es servicio, es mediacin entre Dios y el pueblo. El sacerdocio est destinado a la Iglesia, a la comunidad, a los hermanos; est desti-nado al mundo.

    En el 40 aniversario de su ministerio, deseamos que don Ral siga dando pasos con toda la comuni-dad diocesana en el cami-no hacia el Reino de Dios, que continuamente viene a nuestro encuentro.

    Presbtero Gerardo EscareoVicario general

    Me la pasaba los vera-nos en Chiapas lo mismo que Semana Santa en Ta-rahumara, entonces eso creo hizo que me contrata-ran. All se haca un traba-jo verdadero con la gente verdadera, y aqu don Ral lo quiso hacer: trabajar con la gente, no trabajar en los templos.

    As fue tocando: y se qued con el comedor en Acua; toc en las expe-riencias de los mineros y por desgracia toc las tra-gedias de la carbonfera. El inicio fue muy intenso, pero se mantuvo, pis fir-me, lento, y se esper a que los de aqu le dijeran qu hacer; las decisiones que an toma el Obispo, las toma en el Consejo Presbiteral. Don Ral es

    bastante precavido. Se po-nen cimientos al Centro de Derechos Humanos; el tema era poner bases. For-talecer la Casa del Migran-te ac, hasta que se logra consolidar el proyecto.

    No le puedes mencio-nar a don Ral que alguien est en desgracia para que no se est levantando y moviendo a ver qu, o una llamada, o se est ponien-do el hbito. Un da que estaba l sirvindole ta-quito y caf al buen Too que llegaba a su casa a pe-dir algo de comer y tenas que ser muy preciso en darle frijolitos, sopita; por-que si no le dabas tortilla te deca y no tendrs unas tortillitas? En eso estaba don Ral cuando le llaman de lo de las enfermeras del

    Hospital Universitario, se pone el hbito y se va con don Too; todava en el ca-mino este bendito del Se-or le dice que se pare por un litro de leche.

    Ese es don Ral: no pue-de estarse quieto, no en-tiende; lleg a los 55 bas-tante fuerte, y ahora en sus 70 sigue igual. Siente una gran responsabilidad de sacar adelante, pues yo no dira hoy el pas como con la Constituyente Ciu-dadana Popular; sino que se crey el ser un bautiza-do catlico.

    Se crey que ac todos somos hermanos y tene-mos que jalar: es una de sus mximas. l s le pone rostros a los compaeros del Camino de Emas, s se encuentra con alguien, y

    le toca a l. Cuando enten-damos eso vamos a enten-der a don Ral, porqu no se queda callado. Porque l cree que le toca, no exa-gera cuando se va detrs de alguien que est en ne-cesidad, nunca.

    Temas fuertes le hicie-ron merecedor de llama-das amenazantes, de co-ches afuera de su casa, que alguien le siguiera en carretera. Porque no se es-tilaba meter las manos al fuego por una persona en la crcel que est siendo torturada, por un migran-te que est siendo aven-tado a las vas y mutilado, mucho menos por una prostituta que acaba de ser violada por un elemen-to del ejrcito. Hoy creo que ya quizs la gente

    comprendi por el tiempo que tienen de escucharle, pero tambin por el Plan Pastoral.

    Con don Ral, sin don Ral, los siguientes aos de vida que le toca segui-r impulsando. Porque est en l estar ah, pron-to. Apoyando un camino, caminando con la gente, motivando a que la gen-te despierte, a que sea su propio sujeto.

    Ya no va a haber un re-troceso para la Dicesis de Saltillo. Haber tenido y te-ner ahora la presencia de Don Ral es sper especial y ese es el ejemplo que da Ciudad Altamirano en Guerrero: que lo siguen re-cibiendo como un padre, que sigue acompaado sus procesos.

    As es Don RalJaqueline Campbell

  • Voces de Esperanza No. 205 28 de junio del 2015 5

    Aquellos que apenas estn formando su vida significan un tesoro muy valioso

    para la Dicesis de Saltillo y para su obispo Fray Ral Vera.

    Esta vez, ellos dan su punto de vista sobre su pastor

    -Especial -

    Fray Ral Vera es nuestro ejemplo: nios y jvenes

    Creo que es una persona que ha dedicado casi toda su vida a servir, no slo a Dios, tambin a las personas y pienso que hay mucha gente que a lo

    mejor lo quiere hacer y tiene te-mor de que le hagan alguna burla y el Obispo pues no es as. Quisiera decirle que hay mucha gente que a veces a estas alturas se retira o se rinde; que l no hi-ciera eso, que siga luchando y que siga haciendo un esfuerzo.Luis Manuel Garca Tapia Instituto Valle ArizpePrimaria

    Considero que su labor en la iglesia es muy importante para todos, es un obispo que ha marcado demasiado, ha sido una persona muy importante porque ayud a los mineros y ayu-d a las personas migrantes para darles apoyo. Considero que es una persona muy honesta y

    muy solidaria, y que es uno de los mejores obispos de la provincia en la que est la Dicesis de Saltillo.Elizabeth Rodrguez VersteguiInstituto Valle ArizpeSecundaria

    Estoy muy feliz porque hace un buen trabajo para la sociedad, siempre se pre-ocupa porque todos ten-gamos igualdad; se preocu-pa mucho por lo poltico y la gente en s y gracias a l podemos tener igualdad y podemos ayudar mucho a la gente que est necesitada.Ftima Galindo FloresInstituto Valle ArizpePreparatoria

    Es una persona que durante sus 40

    aos de sacerdote a hecho cosas que

    otras personas no, y creo que l es un

    ejemplo para la sociedad. Cuando le

    escuch por primera vez, me di idea

    a seguir luchando por mis ideales, sa-

    ber hacer valer mis derechos y mis

    convicciones, me inspir a contribuir

    en convertir a mi ciudad con caracte-

    res cristianos y de buena fe. Gracias

    padre por hacer de esta ciudad una

    comunidad catlica.

    Josu Hernndez Valds.

    Colegio Mxico de Saltillo

    3 de Secundaria

    El trabajo de fray Ral es de compromiso

    y trascendencia. En una visita al colegio, nos

    salud a cada uno con un apretn de manos

    sincero, nos habl de nuestra dignidad de hi-

    jos de Dios y de cmo debemos responderle

    a Dios para construir su Reino aqu en la tie-

    rra. Habl de temas difciles pero actuales y de

    las problemticas que como jvenes tenemos.

    Nos invit a vivir de forma coherente, a respe-

    tar a nuestro prjimo, el entorno y a ser agen-

    tes del Evangelio.Melissa Morton Faras

    PreparatoriaColegio Ignacio Zaragoza

    El obispo me hace pen-sar en cmo, desde mi lu-gar, puedo ayudarle a mi ciudad a resolver todas las necesidades al ser ms fra-terno y solidario. Ricardo Ramrez RodrguezPrimariaColegio Ignacio Zaragoza

  • 28 de junio del 2015 No. 205 Voces de Esperanza6

    Nosotros estamos muy contentos

    con el Plan Diocesano de Pastoral

    que ha impulsado el obispo fray Ral

    Vera; ya que en l se nos reconoce

    como un sector de la poblacin. En la

    comisin hemos enseado a los sor-

    dos a reconocer su dignidad, tambin

    el derecho a participar en la iglesia

    activamente, como nunca antes. Te-

    nemos el Da Diocesano del Sordo,

    mismo que fue decretado hace dos

    aos. Adems ha motivado a los sor-

    dos a luchar por nuestra dignidad

    y nuestros derechos y a los oyentes

    para que sean mas incluyentes y sen-

    sibles a este sector de la poblacin.

    El equipo de Obras Misionales Pon-

    tificio Episcopales (OMPE Saltillo) fue

    invitado por primera vez a formar

    parte del Plan Orgnico de Pastoral

    de nuestra Dicesis; nos sentimos

    acogidos y animados por nuestro

    obispo don Ral, a quien agradece-

    mos la confianza para trabajar en esta

    importante comisin. Agradecemos

    tambin el impulso a la participa-

    cin de los laicos en tareas de nuestra

    amada iglesia diocesana. Nuestro res-

    peto, cario y ejemplo a seguir para el

    seor Ral Vera.

    A nombre de todos los que conforma-mos el equipo de Pastoral de Oracin y Valores Espirituales, reiteramos nuestra gratitud y felicitacin a usted don Ral Vera, por ser nuestro pastor y gua en esta dicesis y de manera especial por-que en la experiencia de vivir el Plan Pastoral, hemos re-afirmado la iden-tidad de los primeros cristianos, por-

    que al criticarnos en la POVE, todos los hermanos y hermanas que realizamos nuestro apostolado en la lnea de la ora-cin y en la diversidad de nuestros caris-mas, cada da caminamos en la misma direccin en una Iglesia que nos abraza a todos los hermanos y hermanas de las diversas pastorales que como pueblo de Dios, buscamos la santidad.

    La vitalidad del ministerio episcopal de don Ral se

    plasma en este Plan Diocesano de Pastoral que unifica

    los esfuerzos de vivir el Evangelio reconociendo nuestra

    dignidad, con sentido fraterno y al construir la gran fami-

    lia de Dios que peregrina en esta dicesis con el nimo

    de convertir la fe en vida.

    A raz de la implementacin del Plan

    Pastoral, principalmente hemos aprendi-

    do a programar, a soar, a trabajar con

    amor a Dios para lograr nuestras metas;

    a descartar el desaliento; a realizar eva-

    luaciones para obtener crecimiento de

    los resultados y hemos logrado afian-

    zarnos como equipo. Opinamos que

    fray Ral con su presencia nos hace ver

    que apoya, nos motiva con su convi-

    vencia fraterna, y a travs de sus mensa-

    jes en cada evento nos une en un solo cora

    zn a todos los

    que colaboramos en el desarrollo del Plan

    Pastoral.

    En el contexto del 40 aniversario sacerdotal del obispo Jos Ral Vera Lpez, de la Orden de Pre-dicadores, considerado como un obispo que de-

    fiende las causas sociales de los ms necesitados, las comisiones diocesanas de la Dicesis de Salti-llo externan cmo han sentido el apoyo del pastor

    de esta porcin de la iglesia.Mostramos algunas fotografas del trabajo pas-

    toral que realizan las comisiones.

    - Especial -

    Comisin Diocesana de Pastoral de Sordos

    Obras Misionales Pontificio Episcopales (OMPE Saltillo)

    Comisin Diocesana de Pastoral Social Escuela para la Familia

    Promocin de Oracin y Valores Espirituales

    Expresaron sentimiento...

  • Voces de Esperanza No. 205 28 de junio del 2015 7

    Se ha escrito un Plan Pastoral para la vida consagrada y estamos tratando de irlo siguiendo, ya casi estamos termi-nando este semestre. He visto que los consagrados, las consagradas, s han respondido de una manera muy eficaz. Las acciones de quienes integran la vida

    consagrada para organizar y participar en la elaboracin del Plan Pastoral, son la respuesta de apoyo a que ste se siga cumpliendo. De esta manera la vida consagrada est atendida y creo se est respondiendo a los objetivos del Plan Pastoral.

    El Plan de Pastoral ha venido a fu-sionar a los grupos apostlicos que participan en las parroquias, de esa manera se busca vivir en comuni-dad fraterna. Ha logrado que haya ms participacin de la gente, al in-tegrar a ms personas a los servicios parroquiales. El objetivo de llegar a

    los mas alejados se lleva a cabo, se dan pasos da a da con el trabajo de sacerdotes, laicos comprometi-dos y los diferentes servidores. Con el impulso de don Ral se esta in-corporando el Plan de Pastoral en el conocimiento de la verdad a travs del Evangelio.

    Es una gran alegra, para m y para el monasterio tener un obispo Dominico, ya que es nuestra familia, siempre nos ha apoyado en cual-quier circunstancia, nos sentimos cobijadas por l. No nada ms noso-tras, a los seglares tambin, siempre cuentan con su apoyo. Sor Mercedes Garca, Priora del convento Mara Estrella de la Evangelizacin

    Tuve la oportunidad de tenerlo como maestro en mi etapa de for-macin en la Orden de Predicadores, nos habl sobre la vida dominica-na y los votos. Un gran maestro. Su ejemplo y su constancia, como de-ca: una gota de agua puede perforar una piedra pero no por la fuerza sino por la constancia. Siempre ha luchado por los derechos humanos, por ayudar a la gente humilde y a todo tipo de persona.Sor Catalina Ramrez Pea, Subpriora del monasterio Mara Estrella de la Evangelizacin.

    l siempre habla con la verdad sobre los polticos y la situacin del pas, me gusta su forma de expresarse.Catalina Garay, Dominica Seglar

    Me llam mucho la atencin cuando empezaron los secuestros en la regin, se uni a una marcha en protesta para el gobierno, exigiendo la seguridad y solucin a los problemas. A los mineros nunca los desampar. Lucha por los ideales y como Santo Domin-go no se cansa de evangelizar. Y as recibe los frutos como el pre-mio que recibi en Europa.Idalia Daz, Dominica Seglar.

    Para m el seor obispo es un gua espiritual que nos ayuda bastante como laicos y como Iglesia. Se preocupa mucho por las viudas, los desamparados, los migrantes e indgenas.Dora Elena Daz, Dominica Seglar

    Don Ral es un ser humano con gran espiritualidad, lleno de amor. A todos escucha y da consejo, consuelo; muy carioso y alegre. Un sabio de nuestros tiempos. Siempre con la verdad, gran Dominico.Tony Buitrn Orden de Predicadores

    La familia Dominica externa su sentir ante este obispo que tiene el carisma de Santo Domingo de Guzmn

    - Especial -

    Comisin DiocesanaVida Consagrada

    Comisin Diocesana de Pastoral Penitenciaria

    ...de gratitud hacia el obispo

  • 28 de junio del 2015 No. 205 Voces de Esperanza8

    Es el lema del escudo episcopal de Monseor Raul Vera Lopez, de la Orden de Predicadores. Un hombre incansable, defensor de los derechos hu-manos, pastor de la Iglesia, inteligente, de ideas claras; que es clave en mi vocacin.

    Llam mi atencin la valenta y entrega de ste obispo. Asist a algunas de sus conferencias y me motiv mucho el espritu renovador de don Ral, que hablaba sobre este pas, el derecho y la obli-gacin de ejercer la democracia, as como la liber-tad, que debemos ser partcipes de la construc-cin del Reino de Dios en la tierra, colaboradores de Jesucristo Seor de la Historia. Monseor cita-ba al Beato Pablo VI, que lo orden sacerdote el 29 de Junio de 1975; y quien les pronunci: vayan que el mundo los espera. Esa misin que el Santo Padre les dijo, ha sido un motivo muy poderoso para su vida pastoral como religioso, como sacer-dote y como sucesor de los apstoles.

    Cuando decid ingresar al seminario, el ejemplo de este obispo me motiv a dejar atrs muchas cosas y comenzar a seguir a Cristo. En mi bsque-da asist a su aniversario episcopal numero XXV y me acerqu a saludarle. Un hombre muy cercano y agradable; le coment de mis deseos de ingre-sar al seminario, estaba de acuerdo.

    La impresin que me dej fue de un hombre que no tiene reservas en su trato. La personalidad

    del obispo de Saltillo, su inteligencia y la sabidu-ra que posee, me hizo darme cuenta que es el profeta del siglo XXI; el que anuncia y denuncia en el nombre del Seor. Basta presenciar sus ce-lebraciones eucarsticas para conocer la situacin actual del mundo, y su preocupacin por ayudar al gnero humano, sobre todo a los pequeos. l quiere ser la voz de aqullos que no tienen voz, ante esta sociedad que discrimina, que tal pare-ce ignora a quienes piden auxilio, a los migrantes como a las personas que exigen justicia.

    Un compaero le pregunt: Monseor, qu lo motiva a seguir en defensa de los derechos huma-nos y de los migrantes?; y contest: Creo que al Seor se le olvid una bienaventuranza; bienaven-turados los tercos, entonces hay que ser tercos para seguir apoyando a estos hijos de Dios.

    Para mi vocacin, mi vida apostlica y espiri-tual, don Ral me ha inspirado a ser un hombre de Dios, l sin duda ha descubierto la misin que le ha encomendado. Es un hombre con-templativo que defiende como los profetas al pueblo a lo largo de la historia de la salvacin. Tomar todos estos aspectos positivos del obispo me han dado una gran enseanza, que hay que ser discpulos, para anunciar la buena noticia en el nombre del Seor.Cristian Sevilla

    Bendito el que viene en el nombre del seor, in Nomine Domini

    Apasionado de las vocaciones

    - C O L U M N A -

    Es evidente el grande com-promiso de parte nuestra de se-cundar el trabajo de don Ral, ex-pres el Rector del Seminario de Saltillo David Garca Rosales al ha-blar sobre las modificaciones que se han hecho en este centro de formacin para responder, princi-palmente, al Concilio Vaticano II: la base del pensamiento espiritual del Obispo de Saltillo.

    No se trata slo de decir que est bien lo que hace don Ral, sino estar atentos a las pautas de trabajo que va marcando, para sa-ber lo que nosotros tenemos que trabajar, expuso.

    Afirm que es un hecho la con-tinuidad, y el objetivo es que a futuro los nuevos sacerdotes res-pondan a la realidad que les toque atender; l nos va marcando la pauta, el da de maana va a ha-ber mas sacerdotes comprome-tidos con el trabajo por la justicia, la paz y reconciliacin; como don Ral propone.

    La manera en como se reitera a los jvenes estos valores consiste en colocarlos donde se les requie-re y puedan palpar su realidad. Que se hagan presentes en luga-res donde se puede suscitar la sen-sibilidad de ellos mismos, abrirse a tomar conciencia de las necesi-dades de las gentes, en el sentido pastoral y humano. Y que adquie-ran herramientas para visualizarlas y transformarlas.

    Ah donde vemos que no hay mucho qu aprender no los man-damos; y donde s aunque no haya estructura, que vayan y se acerquen, y conozcan, y aprendan en la cuestin humana y pastoral; y en la espiritual y acadmica los programas van buscando precisa-mente que tengan una conciencia crtica y comprometida, con herra-mientas acadmicas.

    Aclar que si bien se trata de una congruencia con el pastor de esta Iglesia Diocesana, tambin es insertar el Plan Diocesano de Pas-

    toral, que sigue a su vez las lneas del Concilio Vaticano II. Estamos perfectamente claros que no es slo su iniciativa, sino que son las lneas del Concilio, y como que-remos sacerdotes como lo dice el Concilio, en los programas de for-macin lo vamos buscando.

    Garca Rosales destac que se trata de un compromiso real por parte de los jvenes, que vayan buscando no acomodarse, no un lugar de privilegios; sino una oportunidad para servir. Vamos estableciendo criterios que nos permitan eso: que no lo hagan por satisfacer proyectos personales, (y es que) hay muchos condiciona-mientos para que el muchacho quiera hacerse cura, por muchas cosas que no van de acuerdo. Te-nemos que estar siempre atentos a que no nos gane, claro que le apostamos a que el ideal de don Ral sea una de las grandes pau-tas; se debe aplicar la espirituali-dad de la comunin.

    A don Ral no le interesa la Pastoral Vocacio-nal! Claro que fue una expresin que me toc en lo profundo de mi persona y de mi ser sa-cerdotal escuchar tremenda informacin. Era el ao 2009 cuando integrndome al trabajo pas-toral diocesano, el obispo me habia pedido le ayudara en la Comision Diocesana de la Pasto-ral Vocacional y en la Promocion Vocacional del Seminario. Alguien puede pensar que es el mis-mo trabajo pero son dos vertientes no ajenas.

    Para don Ral la Iglesia en s es un misterio de vocacin; en las diversas reuniones con la Comi-sin Diocesana o con los jvenes de los procesos vocacionales, nos ha compartido su historia vo-cacional desde la vivencia inquieta de su ser uni-versitario y con el grande compromiso por trans-formar la historia del pas. Afirma que la Iglesia es la comunidad de los llamados por Dios.

    La vocacin, llamada de Dios, surge en una ex-periencia de comunidad y genera un compromi-so con la Iglesia Universal y con una determina-da comunidad. Puesto que ninguna comunidad cristiana se constituye si no tiene como base y meta la Eucarista, hemos de reconocer que no habr vocaciones ni perseverancia sin Eucarista.

    Por ello, he entendido y comprendido que la Pastoral Vocacional involucra en la promocion a todos los sectores del Pueblo de Dios: sacer-dotes, vida consagrada y laicos. Mantiene a las comunidades con los brazos en alto para rogar al dueo de la mies que enve obreros. No pue-do olvidar y agradecer el tiempo que le dedica a cada uno de los chavos en el retiro-misin de semana santa y en el preseminario saludando uno por uno, escuchndolos y tomndose la foto de manera individual con quien lo solicita o bien en la grupal.

    Es de la Orden de Predicadores y siempre dice al mencionar a los santos de la orden, que debe pagar su cuota con la promocin vocacio-nal, de su comunidad original; por ello me ani-ma a decir: a don Ral no le interesa la pastoral vocacional; le apasiona. Ha creado un nuevo centro vocacional, ha buscado diferentes sacer-dotes y carismas para coordinar esta pastoral y ha querido responder a la voz urgente de esta amada iglesia diocesana de Saltillo.

    Jess, Buen Pastor, bendice a nuestro Obispo que respeta a cada persona, que la invita a vivir una verdadera experiencia de amistad, le sana las heridas, la asume, la escucha y la renueva, en una palabra, le da la vida, es maestro y modelo de todo acompaamiento vocacional. La Vir-gen Mara, la de Guadalupe, interceda por cada uno de nosotros y nos ilumine para escuchar el llamado del Seor y darle una respuesta gene-rosa como pueblo de Dios junto al Obispo.

    Responde el Seminario al pensamiento espiritual de Ral Vera

    Pbro. Adolfo Fermn Parra Gonzlez.Promotor VocacionalSeminario de Saltillo

    - Especial -

  • Voces de Esperanza No. 205 28 de junio del 2015 9

    Viene de portada La camaradera entre 150 mu-

    chachos me cre un ambiente hu-mano muy rico; ser una persona sin grandes ambiciones o pretenciones; pero s con deseos de progresar. Me llev a tomar la decisin de ser frai-le dominico. El ingreso a la orden provoc un cambio muy radical en mi vida; yo creo que esto es lo que experimenta alguien que se casa: forma una nueva familia ya con otras obligaciones, eso requiere de l compromisos especficos.

    Va adquiriendo entonces la res-ponsabilidad de esa familia religio-sa, una exigencia muy fuerte por-que me empiezo a ver de parte de los feligreses; con una responsabi-lidad moral ante ellos. Y aunque yo no ejercit la paternidad y el amor esponsal en una familia; en ese am-biente empec a vivir el compromi-so con seres humanos de distintas edades, y a experimentar una pa-ternidad porque eran personas que necesitaban una ayuda, un apoyo, un consejo.

    Experimenta all que desde una posicin sencilla y de humildad te-na mucho ms xito. Capt que es el ejemplo el que arrastra a la gen-te, no el ser mandn o autoritario; presentar un modelo de vida no artificial, con espritu de servicio y capacidad de comprensin, de cer-cana ante el dolor y la pena; ante la afliccin.

    Ser fraile y llegar luego al sacer-docio, le hizo entender que toda mi vida era la que hablaba. Deba unifi-car mi vida en Dios y si algo ha sido exigente en m hasta el da de hoy es eso, qu debo ser ante Dios; eso le ha dado sentido a lo que debo ser

    ante los dems. sta ha sido mi bs-queda ms intensa durante todos estos aos: una bsqueda de Dios, un conocimiento de Jess, un com-prender del Evangelio en la vida.

    LA EXPERIENCIA DEL PASTORCiudad Altamirano reforz la ne-

    cesidad de hacer equipo, el verme necesitado de una multitud de co-laboradores para servir a la evange-lizacin de ese pueblo, me llev a sentir la mayor necesidad de valo-rarlos y hacerles sentir mi cercana. Eso ha sido la fundamental expe-riencia del pastor. Deberia darle co-herencia, cohesin y organizacin a todo el trabajo pastoral de una Di-cesis. Sent la urgencia de estar muy cercano y delegar confianza.

    En Chiapas, se encontr con una Iglesia organizada en el espritu del Conciliio; yo quera caminar hacia all cuando estuve en Ciudad Alta-mirano, pero en San Cristbal lo ha-ba hecho ya Don Samuel. All des-cubr la Iglesia como la describe San Pablo en sus cartas: en la que todos colaboran para hacer un solo cuer-po.

    Ms del 80 por ciento de los habi-tantes procedan del mundo indge-na, y eran activos en la construccin de su Iglesia. Una Iglesia muy evan-gelizada ella misma y toda ella evan-gelizadora; fue algo que marc mi existencia. Cuando vengo a Saltillo es lo primero que me preocup de hacer: que todos los laicos se convir-tieran en gestores, que les diramos voz y los escuchramos ms; que perdamos nuestra mentalidad cleri-cal porque nos lleva a cerrar muchas fuentes de participacin entre laicos

    y religiosas. Creer que somos casi los dueos de la Iglesia, los dirigentes, nos lleva a empobrecer mucho a la comunidad.

    Se agrand su visin y preocupa-cin porque la Iglesia ayude a ge-nerar procesos sociales que le den dignidad a las personas; hagan flo-recer la justicia para la paz. Que las estructuras polticas y sociales, sean animadas por personas que tienen una conciencia tica y humana muy desarrollada.

    Agradeci a la Orden de los Do-minicos, me han dado mucho; a los sacerdotes diocesanos con los que me ha tocado compartir mi vida en estas tres dicesis, y a la vida consagrada donde he descubierto la sobreabundancia de dones. Doy gracias a Dios de no haber perdido la alegra an en las situaciones ms difciles.

    Confa mucho en el ser humano porque el hombre es imgen de Dios. Cuando estoy predicando es-toy seguro que las personas que es-tn ah son capaces de hacer el bien, por eso estn ah, y por eso no me canso, por eso soy largo predicando. Yo s que son personas de bien y les quiero, por eso les hablo, porque les quiero.

    Hoy se ve en deuda con Dios por todo lo que me ha dado; con mis fie-les, ya en concreto con los que ten-go aqu en la Dicesis y con muchas personas a las que ayudo a travs del trabajo con organizaciones de Derechos Humanos.

    Me preocupa que (la Iglesia) est abierta al fenmeno humano con todos sus dramas, me agobia ver que todava seamos muchos

    los pastores que tenemos una vi-sin muy reducida a los templos, me siento angustiado.

    EL SUCESORY contina: Yo llegar pidin-

    dole a Dios perdn, que no vaya a ser tan cruel conmigo; porque hay muchas cosas que reconozco no he logrado hacer caminar. As veo los cinco aos que me quedan antes de presentar mi renuncia: me gustara que este proyecto pastoral estuviera ms avanzado cuando yo me fuera de aqu, por lo menos llegramos a la segunda etapa.

    l mismo fue discpulo de Don Samuel Ruiz, pero al preguntarle por la posible sucesin afirma: A quien les va tocar prepararlo y ha-cerlo obispo es a la gente de aqu, y los sacerdotes aunque digan que no; ellos me han hecho ser un obis-po norteo. Me gustara que tuvie-ran alguien mejor que yo, que les quisiera todo y ms de lo que yo les quiero. Le pido a Dios que el proyec-to pastoral no se pare, que la gente comprometida y de quien depende mucho esta Iglesia no sea desecha-da, sera un absurdo. Que venga alguien que entienda que la Iglesia son todos y no somos los obispos.

    Acepta que debe pulir an mu-cho: Paso por momentos de mal humor cuando estoy en situaciones lmite, sobrepasado del tiempo; s que a veces hago esperar a la gente, pero tambin me detengo en cosas que creo que son indispensables. A lo mejor la gente cree que la trato mal cuando llego un poco tarde a mis compromisos. A ver si no llego tarde al cielo.

    Desde su llegada a Saltillo, don Ral ha sembra-do una simiente de renovada esperanza al inte-rior y al exterior de la Dicesis.Bajo la premisa de que Dios entra en la historia para asumirla y actuar en su interior, ha impul-sado la necesidad de conocer, de acercarse, de comprender, de penetrar, de servir, de evange-lizar la sociedad circundante y de acogerla, casi de perseguirla en su rpido y continuo cambio, para de esta manera, ligar su misin pastoral con una irrestricta defensa del derecho a la vida en su expresin ms profunda, ante un sistema neoliberal que atenta contra ese derecho de manera metdica e inmisericorde.Para ello, fortaleci la relacin de la Iglesia con la

    comunidad a partir de un Plan Pastoral que en el servicio al amor de Dios se manifiesta en condi-ciones concretas de espacio y tiempo; para cum-plir tres objetivos pastorales:a) Fusionar la Iglesia con el Pueblo, y enfatizar queLa parroquia tiene que estar en contacto con los hogares y con la vida del pueblo, y no puede convertirse en una prolija estructura se-parada de la gente o en un grupo de selectos que se miran a s mismos.b) Estrechar la misin universal de la Iglesia con la defensa de los marginados del sistema: las mujeres, los obreros, las prostitutas, los mineros, los campesinos, los presos y los homosexuales, entre otros.

    c) Denunciar la injusticia y la impiedad del sis-tema neoliberal que se ha constituido enuna versin nueva y despiadada del fetichismo del dinero y de la dictadura de laeconoma sin un rostro y sin un objetivo verdaderamente hu-mano.De esta manera, don Ral est a veces delante para indicar el camino y cuidar la esperanza del pueblo, otras veces est simplemente en medio de todos con su cercana sencilla y misericordio-sa, y en ocasiones camina detrs del pueblo para ayudar a los rezagados. Y por ello, agradecemos a Dios Nuestro Seor, la presencia de Don Ral, entre y con nosotros. Luis Garcia-Abusaid

    Fray Ral Vera Lpez...

    Presencia de esperanza- Especial -

  • 28 de junio del 2015 No. 205 Voces de Esperanza10

    - Especial -

    Aporte a dos vas en Plan PastoralDe Fray Ral Vera y del pueblo diocesano

    El proceso de evangeliza-cion desde el contexto del plan de pastoral en la Dicesis de Saltillo con el pastoreo del Obispo Raul Vera, ha tenido una linea que ha sido marca-da por la dignificacion de los hijos e hijas de Dios, yo veo que es su gran pasin; esa es la pasin de su vida: hacer que su pueblo sea un pueblo que conozca a Dios en verdad y le sirva santamente, expre-s el presbtero Fernando Jos Zapata Vzquez, asesor del Plan Pastoral.

    El Plan Pastoral de la Di-cesis de Saltillo ha tenido la influencia de Ral Vera en la defensa de los derechos hu-manos, en parte la de la digni-ficacin a la persona, ha he-cho aporte, pero tambin veo que la Dicesis le ha aportado a l muchas cosas. Agreg: tambin sirve para dar ma-durez y para confirmar en las convicciones y creo que cada da l est ms convencido de

    su condicin de anunciador de una buena noticia que nos est dando.

    El plan de pastoral con-siste en llegar a ser un pue-blo que conozca a Dios en verdad y le sirva santamen-te esto en el contexto del Concilio Vaticano II donde se dice que Dios quiso salvar a los seres humanos, no aisla-damente, sin conexin algu-na de unos con otros; sino

    formando un pueblo que lo conociera en verdad y le sir-viera santamente.

    Zapata Velzquez resalt que para llegar a esta meta se tienen que lograr los obje-tivos del plan de Pastoral con itinerarios, procedimientos, tcnicas para que la gente se sienta perteneciente, prime-ro asumiendo su condicin de persona, porque a veces nos suceden tantas cosas en

    la vida que las personas no tienen la oportunidad de sen-tirse personas y despus ha-cer que se sientan hermanos y hermanas, somos hijos de Dios pues somos hermanos. Y despus de eso hacer que se sientan familia, que este-mos todos y todas unidos.

    Aunque faltan an reas de oportunidad en las cuales se debe de trabajar, el Plan de Pastoral sigue su marcha,

    En realidad la resistencia no es al plan sino a lo comunita-rio, depende de la condicin econmica, a veces depende del grado de desarrollo de las personas y tambin de-pende del grado de liberalis-mo, del sistema econmico y poltico que est vigente en el pas y en el mundo, mien-tras ms neoliberal, pienso que estoy ms lejos de Je-ss, finaliz.

    El impulso que ha dado el Obispo Fray Raul Vera Lopez en la Dicesis de Saltillo, al implementar un Plan Org-nico de Pastoral donde todos y todas sean recibidos, ha he-cho un cambio en el proceso evangalizador de esta por-cion de la iglesia.

    El Vicario de Pastoral Fran-cisco Xavier Rodriguez Trejo expres que la Dicesis de Saltillo ha tenido un cambio que se ha visto desde la lle-gada de Fray Raul Vera Lpez hasta la implementacin del Plan Orgnico de Pastoral; debo de decir en primer lugar que la dicesis no es la misma que hace 15 aos, que cuando lleg don Ral, ha habido una transforma-cin muy visible que nadie puede negar.

    Aadi que desde la llega-da del obispo dominico hace 15 aos, se dio a la tarea de implementar el proyecto del

    plan organico de pastoral, mismo que ya conoca desde la Dicesis de Ciudad Altami-rano, donde tambin tuvo una experiencia similar.

    Record que en el ao 2002, en el Congreso Euca-rstico, se sentaron las bases iniciales de lo que sera pos-teriormente el plan de pas-toral. Cuando lleg don Ral pues l ya traa la experiencia de un plan orgnico mucho ms amplio, que abarca to-das las realidades de la vida

    diocesana, y el conjunto de todos los fieles bautizados.

    Agreg que en la Dicesis de Saltillo se llevaba un plan de prioridades o estratgico, que se compona prctica-mente de tres tareas funda-mentales: la pastoral profti-ca, litrgica y social, adems del plan de tareas prioritarias que era la familia, la juventud y la formacin de agentes.

    El plan de astoral fue pro-mulgado en marzo de 2011, que tiene como objetivo la

    espiritualidad de la comu-nin y pretende lograr una iglesia bien organizada don-de todos y todas participen; donde exista espacio para todos los ministerios, ca-rismas, vocaciones; con un itinerario evangelizador de corto, mediano y largo plazo y que abarca a todos los bau-tizados sin descuidar absolu-tamente a nadie.

    Coment que las bases del plan de pastoral son tres. Pri-mero: el marco comunitario de las parroquias; segundo: la elaboracin de los mode-los prospectivos y tercero: la adhesin de los agentes al plan orgnico de pastoral. Agreg que implica una pla-nificacin pastoral, itinerarios evangelizadores que no sean rfagas, o momentos o even-tos aislados, sino un proceso formativo de evangelizacin.

    Hasta este momento el Plan de Pastoral ha realiza-

    do cuatro programaciones, y se trabaja en la quinta pro-gramacin; en este contexto el bispo Vera ha estado al pendiente de las comisiones diocesanas y motivado a los miembros del Consejo Pres-biteral, adems de las visitas pastorales a las parroquias para conocer el grado de avance de cada una de las parroquias.

    Agreg que don Ral tie-ne una visin muy clara de lo que es el Concilio Vaticano II, a veces la visin que noso-tros los sacerdotes o los lai-cos tenemos de iglesia, no es una visin que coincida ple-namente; nosotros no siem-pre la tenemos tan clara o cuando la tenemos clara no hay como la voluntad expl-cita de hacer aplicable este modelo de iglesia que nos ha dado el Vaticano II a la vida, a la pastoral prctica de nues-tras parroquias.

    Impulso de Ral Vera, propici un cambio evangelizador

  • Voces de Esperanza No. 205 28 de junio del 2015 11

    Anlisis personal sobre las situaciones que nos gri-tan y nos hacen reaccionar en torno a la fidelidad del evangelio, los valores uni-versales y los derechos hu-manos, para construir una sociedad justa, libre y recon-ciliada, y en ello encontrar el motor de nuestra vida, lo que a algunas personas, les ha llevado a la muerte.

    Para comprender las palabras del Seor Jess en la ltima Cena: Esto es mi sangre, la sangre de la Alianza, que ser derramada por una mu-chedumbre, hay que mencionar a los profe-tas antiguos, pero tam-bin a los actuales, pues la Iglesia es el pueblo de Dios, somos los que he-mos bebido y abreviado el Evangelio. Entre los contemporneos estn mujeres y hombres que buscan la verdad y la jus-ticia, y que al enfrentarse al poder y buscar la vida, sus derechos, el derecho de la madre tierra, u otros, se les insulta y descalifica, son levantados, desapa-recidos, torturados, y ase-sinados, donando su vida para que sta sea multi-plicada. La muerte violen-ta de los profetas, puede ser un marco referencial para interpretar la de Je-ss, pero no su muerte, sino su vida, para moti-varnos -no a exponer-nos y entregarnos para atemorizarnos y dejar de trabajar-, sino para actuar valiente y decididamente, y hacer lo que Romero en estas tierras, establecer el Reino de Dios en el aqu y el ahora.

    LAS CONSECUENCIAS PARA DANIEL, AMS Y JEREMAS

    En los primeros captu-los del libro de Daniel, ni histrico ni proftico, sino de enseanza religiosa, encontramos cmo Sidrac, Misac y Abdnago, junto con el propio Daniel, ani-maron a resistir espiritual-mente al pueblo, e hicieron enfurecer al rey Nabuco-donosor, quien orden a sus hombres a torturarles y arrojarles al horno.

    Qu pas con Ams? Uno de los profetas me-nores, que era un hombre sencillo de campo, muy directo para hablar. l condenaba la corrupcin de las lites, la injusticia social y la falta de compro-miso de los ritos religio-sos, pues la generalidad del pueblo estaba sumer-gido en la miseria.

    Qu pas con Jere-mas? Apedreado en Taf-ne de Egipto, parece que termin aquel carioso hombre con tiernos sen-timientos. l no quera denunciar, ni dar fuertes mensajes de parte de Dios, pero fue seducido por la justicia y la fuerza de la verdad de su Dios.

    Tanto en el antiguo como en el nuevo tes-tamento se menciona a los lderes que pedan al pueblo tener una actitud crtica frente a su vida, y a tener en cuenta las con-secuencias sociales de sus actos, y les solicitaban po-ner en manos de Dios sus vidas, por lo que tanto las autoridades, como la jerar-qua sacerdotal reinante, les combati, persigui y asesin. Archivos de la

    Verdad escritos con letras de sangre, dice la Iglesia para hablar del extremo de quienes dieron testimonio de su fe.

    EL PROFETA JESS A QUIEN SEGUIMOS

    Y qu pas con el Seor Jess, con quien todas es-tas personas y muchsimas ms, caminaban? El sumo sacerdote abiertamente dijo que a raz de la resu-rreccin de Lzaro, toda la gente estaba siguiendo a Jess, por lo que tenan que acabar con l, pues los romanos iran a atacar al pueblo. Mejor que muriera uno y no todo el pueblo.

    El profeta no siempre dice lo que es agradable para escuchar, anuncia la verdad y sta suele ser in-tolerable. Dado que no se puede eliminar la verdad, se elimina a quien la trans-mite. Matando al profeta, se creera que se redime de la incomodidad que la ver-dad desafa.

    La bsqueda de la justi-cia para que los hombres sean libres, para que las viudas no sean explotadas, para que las y los hurfa-nos no sean engaados, es sobre lo que los profetas hablan claramente. El cesar el abuso contra las perso-nas vulnerables y la protec-cin de stas, les molesta a las autoridades del mundo, del antes o del hoy.

    Al mismo tiempo que los profetas son personas de denuncia y de conflicto, dan un horizonte diferente y ofrecen esperanza pues proclaman el cambio pro-fundo de la historia que Dios quiere, y lo propician por medio de quienes les

    escuchan y se ponen en accin para cambiar las condiciones actuales, y hacer un mundo diferente donde reine la verdad y la justicia.

    NUEVAS REACCIONES EN LA SANTA SEDE

    Es un cambio muy sig-nificativo el hecho de que el Papa Francisco reconoz-ca los motivos por los que Monseor Romero se mo-vi a defender la vida de su pueblo, contra los abusos de un poder poltico colu-dido con el poder econmi-co, que lanzaba al ejrcito y a la polica contra la ciuda-dana que exiga el respeto a los derechos inherentes a su dignidad como per-sonas y como pueblo. No eran motivos polticos los que movan a don Oscar, sino las entraas de com-pasin que lo impulsaban a defender la vida de las y los salvadoreos.

    Por eso el paso que hoy da la Iglesia es un avance muy amplio -el pueblo de Dios le llamaba ya extrao-ficialmente San Romero de Amrica-, y que 35 aos despus de haber sido ase-sinado un 24 de marzo, el Papa lo haya proclamado mrtir in odium fidei a ini-cio de este ao, y que ce-lebramos su beatificacin, es que en esta tierra de El Salvador, estamos ante un hito, pues aqu va a cambiar la historia, y la comprensin de lo que es el martirio.

    MISERIA Y ABANDONO

    El proceso de explota-cin, de opresin y exclu-sin al que son sometidas las personas por muchos

    aos, acaban por conven-cerlas de que para ellas no existe otra posibilidad, que no son merecedoras de un trato diferente al que son sometidas.

    Existe tambin la mani-pulacin de la pobreza que realizan los partidos polti-cos, que se mantienen en el poder con programas de ayuda paliativa a estas mujeres y hombres en total desgracia, cuya desgracia ellos mismos promueven y mantienen- desde su for-ma corrupta de gobernar. A travs de polticas pblicas basadas en programas so-ciales clientelares, se auto erigen en protectores de las personas que viven en la pe-riferia y el campo, que ellos multiplican mediante polti-cas pblicas, con las que ins-titucionalizan la inequidad y desigualdad social, que no solamente aumentan rpi-damente el nmero de po-bres, sino que los convierten cada da en personas ms miserables. Las personas favorecidas con eso pro-gramas paliativos, sern opositoras de quienes promueven procesos de liberacin, por el hecho de que se estn oponiendo al poder establecido que les da de comer de vez en cuando, y que les mantie-ne tambin en la ignoran-cia para que con mala in-formacin meditica sean fcilmente manipulables.

    Otras razones por las que los pobres se oponen a liberacin de los pobres, son los miedos a la dife-rente y a la otredad, como por ejemplo: la xenofobia, la homofobia, el racismo, la misoginia, etc. Contna pg. 12

    Atender el grito de las y los pobres.El seguimiento del Seor Jess que hay en cada mrtir

    Extracto del III Congreso de Teologa El legado de los mrtires de cara al futuroUniversidad Centroamericana Jos Simen Caas, El Salvador

    - Especial -

  • 28 de junio del 2015 No. 205 Voces de Esperanza12

    Diocesis de Saltillo diocesisaltillowww.diocesisdesaltillo.org.mx [email protected]

    Nosotras y nosotros entendemos el martirio como la entrega de la vida para que se realice el proyecto de Dios en el mundo, eso es lo que esta-ban buscando los profetas antes. Seguir a Cristo y proclamar su evangelio y luchar para que se viva, denunciando los abusos de un poder poltico cri-minal y de una manera de gobernar que promue-ve la desigualdad y la miseria, y que aplasta con la fuerza militar a quien lucha por defender la justicia

    y el respeto a la dignidad de la persona humana, como lo manifiesta el libro de la Sabidura al decir que les sometern al ultraje y al tormento para co-nocer el temple de los justos, y probar su entereza.

    Como los antiguos profetas, que dieron origen a escuelas y procesos formadores de profetas, as tambin el legado de los profetas de nuestro tiem-po, continan siendo procesos organizativos de la Iglesia y de la sociedad, que siguen alimentando

    la esperanza del pueblo, y continan formando protagonistas de una historia donde la dignidad humana es valorada con el respeto profundo a los derechos fundamentales que le son propios.

    En Amrica Latina podramos enumerar una larga lista de estas mujeres y hombres profetas. Ellos estn abiertos a escuchar el grito de quien sufre y padece las consecuencias de las injusti-cias que les victimizan.

    PASTA DE CONCHOS

    En nuestra experiencia en la Dicesis

    de Saltillo, escuchando el grito de los mi-

    neros del Carbn, con la ayuda del Equipo

    Nacional de Pastoral Laboral, de un grupo

    de religiosas, de mineros y familiares de

    las vctimas, empezamos a organizar el

    Grupo, Familia Pasta de Conchos, que se

    ocupa de crear en la regin carbonfera

    del estado, una cultura de seguridad para

    las minas y tajos, y monitorea los sinies-

    tros en la zona.

    COMUNIDAD LGBTTI

    Escuchando el grito de la Comu-

    nidad LGBTTTI, y junto con las per-

    sonas discriminadas, insultadas,

    golpeadas y asesinadas, iniciamos

    la pastoral, con todas las contrarie-

    dades que eso conlleva. Las circuns-

    tancias dividieron al grupo, y nos ha

    costado mucho trabajo reconstituir-

    lo, an cuando no dejamos de aten-

    derles. Hemos logrado bastante para

    incidir en la mentalidad homofbica

    de una cultura que desea rechazar al

    ser humano.MIGRANTES

    Ante el grito de los migrantes especialment

    e

    centroamericanos, a raz de tres asesinatos,

    per-

    sonas mutiladas, la muerte de algunos arrolla

    dos

    por los trenes o porque son arrojados de e

    stos

    en movimiento. A raz de las extorsiones, rob

    os y

    violaciones sexuales sufridas por mujeres y

    varo-

    nes, y el sufrimiento que padecen en su cam

    inar,

    hemos organizado una pastoral migratoria

    que

    tiene acogida para restaurar sus fuerzas, aten

    cin

    psicolgica y mdica, y apoyo espiritual. Tene

    mos

    defensa de sus derechos y trabajo de inciden

    cia,

    para tocar y remover las causas de la Migra

    cin

    Forzada. La Dicesis de Saltillo ha montado

    dos

    casas para migrantes, una de ellas qued en

    otra

    dicesis, al norte del estado.

    A LA ESCUCHA DE OTROS Y SU ATENCIN

    Ante el caso de la desaparicin de los 43 estu-diantes de la normal rural Isidro Burgos de Ayotzina-pa, en el estado de Guerrero, desde finales de sep-tiembre de 2014 los familiares de los desaparecidos, (y tres asesinados), junto con miles de mexicanos, gritamos por todos los medios para que el gobier-no que los captur, los presente vivos. El Gobierno

    mexicano no tiene corazn ni odos para escuchar. Qu diferencia de actitud ante figuras tan extraor-dinarias como la de Don Oscar, la de Don Samuel, la de Don Angelelli, la de Don Lenidas, la de las Her-manas de Maryknoll y sus compaeras, la de los Pa-dres Rutilio el Grande, Ellacura y sus compaeros, y miles y miles de personas que junto con ellas y ellos supieron escuchar el grito de los hermanos que necesitan recuperar su dignidad, y que entregaron

    su vida, por defender la vida de ellos! Qu torpeza tan grande de quienes, para justificar el sufrimien-to que padecieron, siguen utilizando el mote los persiguieron y los mataron porque se metieron en poltica!. Quienes se atreven a manifestarse de esa manera, pertenecen al grupo de aquellos califica-dos por los profetas como los que convierten al mal en bien y al bien en mal.Por: Fray Ral Vera Lpez

    DESAPARICIN FORZADAEscuchando el Grito de las personas afecta-das por la desaparicin forzada, hemos creado una red de familiares que buscan a sus desapa-recidos que se llama FUNDEC, familias unidas por sus desaparecidos en Coahuila. El trabajo de la Red se realiza con una organizacin au-tnoma, pero est integrado el Centro Dioce-sano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios, que se fund en la Dicesis. Han incidi-do en el gobierno estatal y federal, para que se creen o se modifiquen leyes, en torno a la localizacin. Se ha puesto a caminar un proce-so de bsqueda de vctimas de desaparicin forzada, y nos hemos organizado para luchar contra la impunidad en la que se dejan los de-litos relacionados con esta violencia social.

    COMPROMISO DE TODOSEn este trabajo estn com-prometidas muchas personas, quienes desde la base organi-zacional, soportan el peso del funcionamiento de cada uno de ellos y lo hacen con un es-pritu de servicio ejemplar, y en muchas ocasiones realizan su trabajo en medio de riesgos tre-mendos y con un bajo salario.

    Atender el grito de las personas

    Odos atentos en la Dicesis de Saltillo

    - Especial -

    Viene de pg. 11