Buenas noches a todos.

Es un verdadero honor para mí compartir este momento de gozo y celebración con ustedes y, a la vez, una enorme responsabilidad ser el encargado de dirigir estas palabras en representación de todos los egresados.

Ante todo, me gustaría resaltar el hecho de que nuestra casa de altos estudios se caracteriza por la calidez humana, el buen trato, la buena voluntad y predisposición de todos los integrantes de la comunidad educativa. Comunidad que nos forma académica y humanamente en los más nobles ideales y principios morales.

Hemos concluido una etapa importante en nuestras vidas y quisiera dirigir unas palabras a quienes nos han acompañado a lo largo de este camino.

Autoridades:

La palabra autoridad posee la misma raíz etimológica que la palabra “autor” y significa “aumentar”, “promover”, “hacer progresar”. Autoridad es, entonces, una cualidad creadora y de progreso, cualidad que han puesto de manifiesto al impulsar la creación de una universidad propia. Universidad que hoy es realidad, gracias al trabajo de quienes han sabido interpretar las necesidades de nuestra comunidad.

Docentes:

No bastan las palabras para agradecer lo que ustedes han hecho por nosotros. Ustedes nos han formado, moldeado, instruido. Nosotros podemos tener imaginación, curiosidad, entusiasmo; pero todo ello requiere de instrucción. Instrucción que ustedes nos han brindado.

Ustedes han podido motivarnos, inspirarnos, y poner en funcionamiento los engranajes del proceso de aprendizaje. Con

su creatividad han logrado inquietarnos, movilizarnos, y hacer nacer en nosotros un deseo enorme de aprender. Deseo que solo puede mitigarse a través del estudio.

No docentes:

Quiero felicitarlos hoy, en su día, y agradecerles por habernos tendido la mano cuando lo necesitamos, por solucionar los problemas que estén a su alcance y por brindarnos siempre su apoyo silencioso y sincero.

Investigadores:

No puedo dejar este atril sin antes dedicar unas líneas a los docentes investigadores, en especial a aquellos que me han permitido integrar sus grupos de investigación y me han dado de comer del árbol del conocimiento, como escribió Marcelino Cereijido en su libro “la nuca de Houssay”.

Con ustedes he aprendido que los conceptos de la ciencia no son más que invenciones del espíritu y debemos dejar volar nuestra imaginación para alcanzar la plenitud.

Hoy quiero regalarles una frase de Louis Pasteur que dice: "En el campo de la investigación el azar no favorece más que a los espíritus preparados".

Egresados:

A mis colegas farmacéuticos y a los egresados de las distintas carreras quiero decirles, que solo alcanzaremos nuestra madurez profesional cuando nos preocupemos más por el bienestar de los demás que por nuestros propios intereses.

No se equivoquen al pensar que hoy termina nuestro compromiso con esta institución. Esta casa de altos estudios, al entregarnos un título, nos convierte en portadores de la antorcha del conocimiento y es nuestra obligación llevar luz a

aquellos lugares de la sociedad en los que hoy reina la oscuridad.

Debemos considerarnos representantes, embajadores de esta institución en donde sea que estemos y comportarnos como tales. Somos guardianes del saber que hemos heredado. Somos guerreros, centinelas, y nuestras armas no son convencionales. Nuestras armas se forjaron en el calor de esta institución y son el conocimiento y la palabra.

Esta universidad nos ha dado todo, sin pedirnos nada a cambio. Nos ha dado un título, que nos servirá como herramienta para progresar personal, cultural y económicamente.

Egresados 2011, el futuro no es más que la plataforma sobre la que debemos trabajar para cumplir nuestros sueños y realizarnos como personas, llegando a ser, a través de nuestra profesión, hombres y mujeres de bien.

Alumnos:

Déjense maravillar, conducir, guiar por los docentes, ellos conocen el camino. Albert Einstein dijo: “nunca consideres al estudio como una obligación, sino como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber”. Recuerden que sus logros no son fruto de la casualidad, sino fruto de su propia voluntad.

Familiares y amigos:

Si estamos hoy aquí, es por el sacrificio conjunto, por el esfuerzo mancomunado. Ustedes nos han ayudado a no desesperar, a superar obstáculos, a levantarnos de toda caída. Gracias por estar hoy, aquí, compartiendo este momento inolvidable. Gracias por disfrutar de nuestros logros y ser parte de nuestras vidas.

¡MUCHAS GRACIAS!