EL VENADO

Los mayas cuentan que hubo una época en la que los venados tenían la piel más clara, por eso

podían verse con mayor facilidad y eran presa fácil de los cazadores, que gustaban de su carne y

utilizaban la piel para sus escudos, esto causó que estuvieran a punto de desaparecer.

Un día un cervatillo vio a un grupo de cazadores, al correr asustado cayó en una cueva en la que

vivían tres genios buenos que lo ayudaron al escuchar sus lamentos, curaron sus heridas y le

ofrecieron concederle un don. El ciervo les dijo que lo que más deseaba era estar protegido de los

hombres. Entonces uno de los genios le echó tierra encima, otro pidió al sol que con sus rayos le

cambiara el color y darle el mismo de la tierra del Mayab y por último el tercero le dijo que de esa

manera podría ocultarse de los cazadores y si estaba en peligro le daba manchas más oscuras que

semejaban entradas de cuevas.

Aun hoy los venados siguen agradeciendo a los genios pues por ellos aun habitan la tierra del

mayab.

EL MAYAB LA TIERRA DEL FAISAN Y EL VENADO

Hace mucho tiempo el señor Itzamná decidió crea una tierra tan hermosa que todo el que la

conociera quisiera vivir ahí. Así que creó El Mayab colocando en ella las flores más bellas, cenotes

cristalinos, se la entregó a los mayas y escogió a tres animales para que la representaran y ahí

vivieran por siempre: el faisán que volaba por los aires y su canto era escuchado en toda la tierra,

el venado que corría ligero como el viento, y la serpiente de cascabel que alegraba su música a su

paso.

Un día los chilam, adivinos, dieron la mala noticia de que llegarían extranjeros que invadirían el

mayab y harían sufrir a los mayas, entonces el faisán dejó de volar y se escondió entre las yerbas

para no ser visto por los invasores, el venado lloró tanto que sus lágrimas formaron aguadas y

desde entonces tiene los ojos húmedos y la serpiente decidió olvidar su música y atacar a los

enemigos.

Como dijeron los chilam el mayab fue conquistado, pero también predijeron que los tres animales

elegidos cumplirían una importante misión. Mientras las ceibas sigan en pie y las cavernas sigan

abiertas habrá esperanza, los mayas se reunirán para combatir sabrán que la fecha ha llegado

cuando vean volar al faisán, al venado lo verán atravesar la tierra de un solo salto y la serpiente

volverá a hacer música, el día aún no llega pero seguimos esperando para recobrar el mayab.