Periodismo católico: “En la verdad y desde la

universalidad”

Fe on line

Cristianos en Oriente Medio

nº 156 enero-marzo 2011- 2,75 euros

Resina, 1 • 28021 Madrid • Tel. : 917 987 426 / 427 • Fax: 915 052 050 • ventas@sanpablo.es • www.sanpablo.es

Cantad a Dios con salmos, himnos y cánticos inspiradosPablo Cervera y Ángela Pérez (eds.)

Esta antología de poesía recoge 1.300 meditaciones, breves

y sencillas, que toman su referencia del texto bíblico, especialmente

de aquellos textos que son leídos, escuchados, meditados y orados en las

celebraciones litúrgicas.

Su estructura recorre los tres momentos principales de la jornada (la mañana, la tarde

y la noche), el Año litúrgico y dirige la mirada al Señor en sus misterios y a la Virgen María Inmaculada y a los santos. Con este libro el lector, el orante, podrá desmenuzar cientos de poemas que elevarán su corazón hacia el

mundo trascendente.

Jesús, hijo y hermanoFrancisco Martínez Fresneda

La doctrina de Jesús, su misión salvadora y la interpretación nacida cuando se contempla desde Dios.

En este libro se ha intentado enlazar la historia de Jesús y de la confesión de fe en él como Hijo de Dios y Hermano nuestro que nos revela el verdadero rostro y voluntad salvadora del Padre.

1.792 págs. 32 € 720 págs. 30 €

Contenido:� Parte I. La narración de los dichos y he-

chos de Jesús según el Nuevo Testamento.� Partes II-III. Las interpretaciones de las comunidades cristianas primitivas y

de los concilios. � Parte IV. La función salvadora que incluye toda la vida de Jesús.� Parte V. La espiritualidad cristológica.

Invitación a creerUnos sacramentos creíbles y deseables

Bernard Sesboüé

Una invitación a creer y a practi-car los sacramentos. El objetivo de este libro es proponer, con atina-das refl exiones de orden pastoral, unos sacramentos «con gancho», a la vez que creíbles y deseables, en un mundo en el que la práctica sacramental no sólo ha descendido de manera signifi cativa, sino que suscita críticas directas. Para ello, Bernard Sesboüé parte del sentido antropológico del rito, y a conti-nuación desgrana cada uno de los sacramentos prestando especial atención a las difi cultades que su práctica suscita en la actualidad, y por último, examina el contenido doctrinal de cada uno de ellos a la luz de la historia.

NOVEDADES

472 págs. 20 €

Coop 155 1 pag libros2 .indd 1 13/12/2010 15:57:19

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EDITORIAL

PUBLICACIÓN TRIMESTRALDE LA FAMILIA PAULINA

Presidente: Antonio Maroño.Director: José Ignacio Pedregosa.Redactor-Jefe: Francisco Ares. Consejo de redacción: Teresa Córdoba, Isabel García, Concepción López, Vicente A. Guillamón.Corrección: Agapito Aliende.Maquetación: V.L.V., Mario Herrera.Publicidad: Victoria Luque.Colaboradores: José Mª Fernández y Alvaro Santos.Asesoría informática: Tomás Pastor y Arturo Guzmán.Edita: SOCIEDAD DE SAn PAbLO.n.I.F.: Q 2800254 A.

Dirección:Protasio Gómez, 15 - 28027 MADRID. Tel.: 917 425 113. Fax: 917 425 723. E-mail: cooperador@sanpablo.esWeb: www.sanpablo.es

Delegaciones: 08010 bARCELOnA. Ronda S. Pedro, 19-2108003 bARCELOnA. Via Laietana, 46 A48001 bILbAO. Alameda Mazarredo, 348001 bILbAO. Colón de Larreátegui, 1718010 GRAnADA. Cárcel baja, 1428012 MADRID. Pl. Jacinto benavente, 228015 MADRID. San bernardo, 11428013 MADRID. bordadores, 1128021 MADRID. Resina, 128027 MADRID. Alcalá, 38730001 MURCIA. Apóstoles, 633009 OVIEDO. Magdalena, 1531003 PAMPLOnA. Pl. de las Merindades,307002 PALMA DE MALLORCA. Sant Miquel, 6615705 SAnTIAGO DE C. Rúa do Vilar, 3741004 SEVILLA. Sierpes, 5745005 TOLEDO. Rda. buenavista, 37, 10-1º-CD46003 VALEnCIA. Pl. de la Reina, 247003 VALLADOLID. Angustias, 550003 ZARAGOZA. Avda. César Augusto,105Suscripción anual: 10 euros. Enviar por giro postal o talón a: COOPERADOR PAULInOProtasio Gómez, 15 - 28027 MADRIDO por transferencia bancaria a: bAnCO SAnTAnDER CEnTRAL HISPAnOAlcalá, 445 nacional: CCC 0049 5134 37 2116915646Internac.: IbAn ES71 0049 5134 3721 1691 5646

bIC bSCHESMMXXX Cooperador Paulino - 28027 MADRIDImprime: Rivadeneyra.Depósito legal: bI. 1872-1960.

Año nuevo, vida nueva, es un dicho al que solemos recurrir cuando comenzamos una nueva etapa. Eso podría ocurrir también con Cooperador Paulino, pues de algún modo pode-

mos decir que iniciamos una nueva etapa. O al menos una etapa de cambio. Sin embargo, queremos iniciarla desde la continui-dad creativa. no queremos hacer grandes cambios en la revista, pero sí, en la medida de lo posible, y dentro de lo que siempre ha sido su línea editorial, que la encuentres más atractiva, más cercana, más preocupada por los acontecimientos eclesiales de actualidad, siempre desde nuestra perspectiva de comunicación social y pastoral.

Iniciamos esta nueva etapa con un equipo renovado. El P. José Antonio Pérez, hasta ahora Director de esta publicación nos ha tenido que dejar para asumir nuevas responsabilidades al ser-vicio de la Familia Paulina como Postulador de nuestros beatos, venerables y siervos de Dios. Le deseamos abundantes frutos apostólicos y que el Maestro Divino derrame sobre él muchas bendiciones en su nueva andadura. Al P. José Antonio y a todos los que hasta ahora han colaborado incansablemente con la revista queremos agradecerles públicamente su buen hacer. nosotros, el nuevo equipo, asumimos nuestro compromiso con todos vo-sotros, amigos lectores, desde nuestra pobreza, incapacidad y limitaciones. Pero a la vez, con ilusión y con la mirada puesta en el futuro. nuestra intención no es otra que la de ser compañeros de camino, ayudándoos en vuestras tareas pastorales. Por eso os manifestamos nuestra disponibilidad. Y por ello queremos que continuéis comunicándoos con nosotros bien por carta o por correo electrónico.

Eso sí, una de las novedades con las que os vais a encontrar es que ya estamos en la red de redes. Es inevitable, hay que abrirse a los nuevos tiempos y hay que evangelizar en los nue-vos areópagos. Aquellos que lo deseen pueden descargarse ya el número anterior, y por supuesto éste mismo, en el siguiente link de nuestra página web: http://www.paulinos.sanpablo.es/publicaciones_cooperador.php.

Por otra parte, el cuadernillo central que elaboraba Pedro I. Fraile ha concluido. Estamos trabajando en un nuevo proyec-to que pueda ser de ayuda para todos. Mientras tanto, como el mundo de la biblia ha estado siempre presente en nuestra revista y no puede faltar, en este número nos acercaremos a la lectura orante de la Palabra. Igualmente el taller de medios ha concluido, en su lugar iniciamos una nueva serie sobre Cine y Valores humanos. Como veis no nos hemos parado y continua-mos caminando. Esperamos seguir prestando nuestro servicio apostólico a todos. Os deseamos un feliz Año nuevo.

Continuamos caminando

SAN PABLO

COMUnICACIÓn Y DIÁLOGO

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Universo, Dios y Hawking

Me preocupa como creyente e ingeniero agrónomo, la inmersión de científicos como Hawking que extrapolan la Física hacia Dios, como si éste necesitara extrapolación.

Dios es el Ser por antonomasia, alfa y omega, principio y fin, y sobre todo Amor. San Pablo lo expresó de forma hermosa; Santa Teresa y San Juan de la Cruz lo llevaron a las cotas más altas, y nosotros ¿qué podemos hacer? Repe-tir al unísono Sea Loado, un día y otro día... y de paso, también nuestra Madre común, María.

Marcial Ramiro. Madrid.

Por qué me hice sacerdote

Cuando me preguntan por qué me hice sacerdote, sólo tengo una respuesta: Por la gracia de Dios. Soy el 19 de 21 hermanos, y nací por pura gracia de Dios. A mi padre le acababan de liberar del penal de Ocaña, donde le habían encerrado con uno de mis hermanos por no ser afecto a los desmanes de la República. Nací terminada la guerra. Mi madre era una mujer valiente y no se avergonzaba de tener hijos. Siendo niño, escuché a una vecina, que le afea-ba el haber tenido tantos. Mi familia no era religiosa, pero Dios tiene sus propios caminos. Me enseñó a rezar un amigo, dos años mayor que yo, que tuvo el gran acierto de hablarme de Dios y de corre-girme cuando era necesario. ¡Curioso, porque él era hijo de un republicano!.

Me enseñó a rezar y me aconsejó las tres Avemarías cada noche. Hice la primera comunión con más años de lo que era habitual. Y es evidente que soy cristiano por la gracia de Dios. Por la gracia de Dios, el cardenal de Toledo me envió a Roma al terminar los estudios de Filosofía. Y en los tiempos del Vaticano II, dediqué ocho años a profundizar en la Filosofía y en la Teolo-gía; y me inicié en periodismo en Radio Vaticana. Fui el último sacerdote que ordenó el cardenal Pla y Deniel, en su capilla privada. Todo es gracia.

Cuando miro atrás, veo que la vocación se fragua día a día, porque todos los días tienes que responder a Dios, en-tre ilusiones y miedos, entre aciertos y tropiezos. Si dejas de escuchar su voz, tu fe y tu alegría se marchitan. Y ser sacerdote sólo vale la pena si se

intenta vivir el Evangelio con hondura y sin cálculos. Juan XXIII, a quien ayudé a misa en ocasiones, me dejó un regalo muy útil. Fui a visitarle con el cardenal de Toledo, y al hacernos la foto, alguien dijo que me pusiera de rodillas. Pero el Papa bueno se me quedó mirando y dijo: «¡No! Soy un hombre, y sólo tenemos que arrodillarnos ante Dios. ¡Y siempre, por la gracia de Dios!». Juan Antonio Paredes. Málaga.

Feliz Año nuevo

Aprovecho la oportunidad para felicitar-les por los artículos tan interesantes que publican, así mismo desería felicitarles el nuevo año, a todos los que elaboran la revista Cooperador Paulino así como a la Familia Paulina en general. Que Dios les bendiga a todos y que podamos dis-frutar de esta ayuda para nuestra fe, durante muchos años. Un fuerte abrazo. Margarita Segura. Valencia.

Cristianos en Pakistán

El caso de la católica Asia Bibi, conde-nada a muerte en Pakistán por haber defendido su fe, es sólo uno de tantos en los que los cristianos allí son acusa-dos falsamente, golpeados, expulsados. Samuel John, un profesor cristiano de psicología en la universidad de Pes-hawar fue golpeado recientemente por unos veinte estudiantes porque rehusó convertirse al Islam. Tres niños cris-tianos, estudiantes en una escuela de Punjab, fueron obligados por su maestro a convertirse al Islam, y cuando sus padres protestaron, la escuela expulsó a los tres alumnos; las familias tuvieron que emigrar.

El líder cristiano Ashfaq Fateh ha seña-lado que cada vez son más las mujeres cristianas en Pakistán que se suicidan debido a su situación desesperante de pobreza, discriminación, maltrato, falta de justicia y de oportunidades para sus hijos. Ana Coronado. Barcelona.

Harry Potter y el ocultismo

Una nueva película de Harry Potter ha entrado en las carteleras. Sin embar-go, las historias del joven mago no son mera fantasía. Ex-practicantes del ocul-tismo han advertido que éstas contienen hechizos, conjuros y pociones reales, además de utilizar el poder mental o la escritura automática que existen la

Nº 156 - Enero-Marzo 2011

SUMARIO

3 Editorial 4 Comunicación y diálogo

6 Sínodo de Oriente Pedro Langa

12 La España del diseño artificial Javier Barraca

16 Trabajando en la Iglesia Pedro Moreno

18 Fe on line Jorge Enrique Mújica

22 Las flechas de mi aljaba Victoria Luque

24 Lectio Divina José Ignacio Pedregosa

28 Rudy: Cine y valores Equipo de pastoral

32 En la verdad y desde la universalidad María Gómez

36 Las manos encallecidas van al cielo Rosario F. Esposito

40 Entrevista a Agapito Aliende: “Dejaos ena- morar por Cristo” Mario Herrera

44 Santos de nuestro siglo: Gianna beretta Rogelio Cabado

46 Vida Paulina

48 Reseñas

En este número nos acercamos al Sínodo de Oriente Medio, celebrado en Roma reciente-mente. También nos hacemos eco de las inquie-tudes recogidas en el Congreso de Periodistas Católicos, sobre la era digital.

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COMUnICACIÓn

En la novena, ya en la vigilia de Navidad, se lee: «Crástina die delébitur iníquitas terræ». Mañana quedará borrado el pecado; y como la vigi-

lia terminará con la función de la tarde: «Hodie scietis quia véniet Dóminus et salvabit nos et crástina vidébitis gloriam eius»: sabed que hoy vendrá el Señor a salvarnos y mañana veréis su gloria. Hemos de alegrarnos porque el Hijo de Dios, que «ilumina a todo hombre llegado al mundo» [Jn 1,9], viene a traernos del cielo su doctrina santísima y altísima, constituyéndose así Maestro único de la humanidad. «Novíssime locutus est nobis in Filio suo». La primera revelación es la que hizo Dios creando el mundo según el diseño de su Hijo. La segunda revelación es la que hizo Dios ilumi-nando la mente del hombre, encendiendo en él la luz de la inteli-gencia. Luego tenemos la revelación de los profetas, y finalmen-te la revelación del Hijo de Dios encarnado, «aguardando –como dice san Pablo– la manifestación de nuestro Señor Jesucristo» [cf. 1Cor 1,7] en el cielo, donde se confirmará toda la revelación, por-que «en la luz de Dios le veremos como es» [cf. 1Jn 3,2]. ¡Gloria al divino Maestro, y que los hombres salgan finalmente de sus tinieblas, ya que despunta el día iluminado por el Sol de justicia! Alégrense los hombres porque el Padre celeste que había engen-drado a su Hijo desde la eternidad –«hodie ego genui te»– ahora lo engendra también en la sagrada Humanidad, y por ello en la misa se cita el texto: «Filius meus es tu: ego hodie genui te».Alégrense los hombres porque el Hijo de Dios se hizo nuestro ali-mento y nosotros, viniendo a la iglesia, lo encontramos en el san-to sagrario: Dios con nosotros. «Mirad, la virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrán de nombre Emmanuel, que significa Dios con nosotros» [cf. Mt 1,23].

Alégrense los hombres porque se reabre el cielo, cerrado por el pecado de Adán; alégrense los hombres porque el Hijo de Dios encarnado se ha hecho nuestro guía y nos ha enseñado el camino para llegar al cielo, reabierto por él, donde nos ha precedido y nos ha invitado: «Qui vult post me venire...». ¡Venid conmigo! «Se-guidme» [cf. Mc 8,34]. «Haced como he hecho yo» [cf. Jn 13,15]. Alégrense los hombres porque el Hijo de Dios encarnado ha muer-to por ellos, dando el máximo signo de amor: «Majorem caritatem nemo habet» que quien entrega su vida por el amado. Alégrense los hombres porque el Hijo de Dios encarnado ha instituido los sacramentos, particularmente el bautismo con el que nos hacemos hijos de Dios, y la Eucaristía, que nos alimenta con el cuerpo y sangre de Jesucristo mismo.

Alégrense los hombres porque el Hijo de Dios encarnado ha dejado a la humanidad la Iglesia, maestra, para continuar su magisterio infalible. Ha encendido, antes de subir al cielo, una lámpara que no se extinguirá: la Iglesia indefectible. Esta maestra no cesará de enseñar de modo seguro la vía de la salvación. Alégrense los hom-bres porque el Hijo de Dios, antes de subir al cielo, casi para dar-nos la última señal, la última prueba de amor, nos dejó a María por madre: «Mira a tu madre» [Jn 19,26]. Y la humanidad desorien-tada, como una familia desconcertada, cada día puede recogerse alrededor de la Madre y tener luz, consuelo y salvación.

magia satanista (la magia blanca y la negra tienen un mismo trasfondo). Cla-re McGrath, ex-curandera New Age, manifestó su preocupación al reconocer en esta saga muchas de las artes que ella antes practicaba. Jacqui Komschlies afirmó: “Tenemos que recordarnos que la brujería en la vida real puede llevar, y de hecho lleva, a la muerte, a la muerte eternal”. Muchos niños después de leer Harry Potter se encuentran fascinados por el ocultismo, incitándoles a infor-marse en profundidad sobre la brujería, la magia y el espiritismo.

Potter contiene guiños al satanismo.Voldemort (Satanás) toma posesión del cuerpo de Quirrell y dice: “Tengo forma sólo cuando puedo compartir el cuerpo de otro... pero siempre ha ha-bido seres deseosos de dejarme entrar en sus corazones y en sus mentes”. El personaje más generoso y noble de toda la novela está representado por el 666 (Nicolas Flamel): a la edad de 666 años decide dar su vida por la salvación del mundo. Es decir, el símbolo de la bestia en el Apocalipsis es presentado como el salvador de la humanidad. Decía Amor-th, el exorcista de Roma, que desacon-sejaba Harry Potter. Nosotros, padres, deberíamos tomar nota. Clara Jiménez. Murcia.

El Consejo de Europa les da la razón

Profesionales por la Ética había pedido a los españoles del Consejo de Europa que protegieran la libertad de concien-cia. Pues pensaba que en caso de ser aprobado el Informe McCafferty, la obje-ción de conciencia sufriría un importante recorte en su ejercicio. El derecho a la objeción de conciencia es reconocido en el artículo 9 de la Convención Europea de Derechos Humanos, en el art. 18 de la Declaración Universal de Derechos Humanos y en el art. 18 del Convenio Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos.

En efecto, con el pretexto de garantizar un inexistente derecho a la salud sexual y reproductiva, entendido como derecho al aborto, el Informe McCafferty invitaba a los Estados europeos a restringir, a través de diferentes medidas, el ejercicio del derecho a la objeción de conciencia de los profesionales de la salud. Final-mente, el Consejo de Europa ha dado la razón a Profesionales por la ética. José Morales. Palafrugell (Girona).

La PaLabra deLbeato aLberione

Alégrense los hombres

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«¡Queridos hermanos y hermanas de Oriente

Medio! Que la experiencia de estos días os asegure

que no estáis nunca solos, que os acompañan siempre la Santa Sede y toda la Iglesia, la cual, nacida en Jerusalén, se

ha extendido por Oriente Medio y después por el

mundo entero» (Benedicto XVi, homilía de clausura:

24-10-2010)

1Preparativos

La Asamblea Especial para Oriente Medio del Sínodo de los Obispos, convocada y abierta por Benedicto XVI en Nicosia, Chipre, durante la Visita Apostólica del 4 al 7 de junio de 2010 salió al encuen-tro de las alegrías y los dolores, las esperanzas y las preocupaciones de los cristianos y personas de buena voluntad de Oriente Medio.

Es la cuarta asamblea de un Pontificado con tres viajes a la región: Turquía; Jordania, Is-rael, Palestina; y Chipre. Fue en Nicosia, donde se hizo entrega del Instrumentum Laboris con el lema sinodal La Iglesia Católica en Oriente Medio: comunión y testimonio. «La multitud de los

EL SÍnODO DE ORIEnTE MEDIO

creyentes tenía un solo corazón y una sola alma» (Hch 4, 32). Los Lineamenta fijaban como retos los conflictos políticos, la libertad de religión y de conciencia, y la comunión eclesial entre los diver-sos ritos orientales, unidos por los pilares de la celebración eucarís-tica y la comunión con el obispo de Roma. De 185 sinodales, 101 eran de las circunscripciones ecle-siásticas del Medio Oriente y 23 de los fieles emigrados a países como Francia, Italia, Canadá, Es-tados Unidos y Brasil, entre otros. La convocatoria partió de un doble dinamismo pastoral: por un lado, de la petición de algunos obispos de la zona, cardenales y prelados curiales con mucho que ver allí; por otro, de los citados viajes de Benedicto XVI que le permitieron

hacerse cargo de aquellos proble-mas. El anuncio se hizo en comu-nión con la Jerarquía medio-orien-tal en Castel Gandolfo, a raíz de la Audiencia del 13 de junio de 2009 al Secretario General del Sínodo y del encuentro del 8 de julio de 2009 con los responsables de los cuatro Dicasterios más relaciona-dos con el lugar más un represen-tante de la Secretaría de Estado. Por primera vez iban a reunirse junto al Obispo de Roma casi todos los ordinarios del Medio Oriente, la lengua oficial sería el árabe, y los participantes podrían interve-nir también en inglés, francés e italiano. El objetivo pastoral no iba a ser otro que reavivar la comunión entre los católicos de Oriente Medio, donde «la presen-cia cristiana es un don de Dios».

Pedro Langa Aguilar

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deExperiencia unidad y comunión

2Datos estadísticos

Los Lineamenta e Instru-mentum laboris entienden por Oriente Medio, además de Jeru-salén y los territorios palestinos, estos 16 Estados: Arabia Saudí, Bahrein, Chipre, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Jordania, Israel, Irán, Iraq, Kuwait, Líbano, Omán, Qatar, Siria, Turquía y Yemen. Vas-ta zona extendida sobre 7.180.912

km2, con 356.174.000 personas, de las que 5.707.000 son católi-cos, o sea el 1,60% de la pobla-ción, lo que supone la presencia de minorías cristianas en una región mayormente musulmana; excep-tuando Israel, donde los judíos serían el 75,6%, los musulmanes el 16,7%, y los cristianos el 2,1%. Se distinguen dos regiones: la cristiana, tradicionalmente pre-sente, y hoy por desdicha en

fuerte declive; y la de los países cuya presencia cristiana ha subido gracias a inmigrantes en busca de mejoras laborales. La Iglesia Católica administra 686 escuelas maternas con 92.661 alumnos, 869 primarias con 343.705, y 548 de segunda enseñanza con 183.995. De 13 Institutos Supe-riores, 4 son Universidades. Unos 2.443 alumnos frecuentan los Institutos superiores, 1.654 los

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estudios eclesiásticos y 34.506 reciben otros estudios univer-sitarios. También acuden a sus aulas alumnos de otras religio-nes, sobre todo, musulmanes. Los católicos van a la vanguar-dia en el apostolado de la cari-dad con enfermos, ancianos, discapacitados y pobres. Tienen 544 centros sanitarios: 76 hos-pitales y sanatorios, 113 centros de ancianos, 331 consultorios y dispensarios, 24 centros para discapacitados y de rehabilita-ción que son administrados por Institutos de Vida consagrada. El Vademécum salió en árabe, francés, italiano e inglés, y el Kalendarium en latín, lengua ofi-cial del Sínodo, que contó con 14 Congregaciones generales y 6 Se-siones de Círculos menores. Para facilitar el trabajo, se utilizaron los medios electrónicos. Hubo De-legados fraternos, praxis común, pero esta vez además, supuso un dato significativo por su presencia en Tierra Santa y Oriente Medio.

También estuvieron el rabino David Rosen, director del Departamen-to para los Asuntos Intereligiosos del American Jewish Committee y Heilbrunn Institute for Internatio-nal Interreligious Understanding, Israel, y los señores Muhammad al-Sammak, consejero político del gran Muftí de Líbano, para el Islam suní, y el Ayatolá Dr. Seyed Mos-tafa Mohaqhegh Ahmadabadi, Ph. D., profesor en la Facultad de De-recho en la Shahid Beheshti Uni-versity de Teherán y miembro de la Academia Iraniana de las Ciencias, para el Islam chií. Gesto católico en pro del judaísmo y del Islam. La Asamblea –según los primeros- fue un signo de unidad ecuménica y de que las Iglesias deben actuar siempre juntas. Como pasos de unidad cristiana propusieron uni-ficar la fecha de la Pascua, adoptar «una fiesta única para los márti-res cristianos a nivel universal» y aclarar la relación entre Eucaristía y comunión con el Papa. El Secre-tario general del CMI sugirió «em-prender juntos acciones basadas en tres imperativos fundamenta-les: ético y teológico para una paz justa; ecuménico para la unidad en la acción; y evangélico para

una valiosa solidaridad y amor por todos nuestros cercanos». En cuanto a la unión de ortodoxos y católicos no es sólo mandato de Cristo, según el representante patriarcal de Constantinopla, sino también el método el más eficaz para garantizar la presencia cristiana en aquella región.

3 Los temas centrales

El 11 de octubre de 1962, fiesta entonces de la Maternidad divina de María, Juan XXIII inauguraba el Vaticano II confiando así el Concilio al corazón maternal de Nuestra Señora. También el Sínodo comenzó el 11 de octubre de 2010 llevando problemas, desafíos y esperanzas al corazón de la Madre de Dios. Abierto el primero con el icono de la Theo-tokos, Pablo VI lo concluyó con el título de Mater Ecclesiae. Benedicto XVI los unió al capítulo 12 del Apocalipsis, donde el misterio mariano es el de Belén extendido al misterio cósmico: Cristo nace siempre de nuevo en todas las generaciones y así recoge a la humanidad en sí mismo. Su nacimiento cósmico se advera en el dolor de la Pasión, gri-to de la Cruz al que pertenece la sangre de los mártires.

El doble objetivo sinodal no fue sino confirmar y reforzar a los cristianos en su identidad por la Palabra de Dios y los Sacra-mentos, y reanimar la comunión eclesial, contexto de la dimen-sión ecuménica, el diálogo intereligioso y el aspecto misionero.Entre los desafíos, el Sínodo destacó la libertad de religión y de concien-cia, la evolución del Islam contemporáneo y la emigración que, según el sunní Muhammad al-Sammak-, hasta para el Islam es una catástrofe.

Arriba, cristianas en

el conven-to de San Miguel en Peshawar, Pakistán.

Debajo, re-presentante

musulmán durante la

consagración de la nueva iglesia de la Inmaculada Concepción

en Baku, Azerbaián.

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La paz, don de Dios, resulta igual-mente de la buena voluntad de los hombres, y de cuya falta nunca nos debemos resignar: es posible la paz, urgente, indispensable para una vida digna de la persona y de la sociedad. También para resolver la emigración.Salió a relucir la comunión inte-reclesial, entre cuyos principales signos están el Bautismo, la Euca-ristía y la comunión con el Obispo de Roma. De ahí que la catequesis no haya de limitarse hoy a la sola transmisión oral. Son indispensa-bles también los medios activos para consolidar a los fieles en la fe y formarlos en el mandamiento del amor, de suerte que los haga artí-fices de paz, justicia y perdón. Al hilo de lo cual se precisa la Litur-gia, renovada y fiel a la Tradición, pues centra toda la vida religiosa. Capítulo básico es el de la misión y el ecumenismo, estrechamente ligados. La acción ecuménica re-quiere oración, conversión, san-tificación e intercambio recíproco de dones en un espíritu de res-peto, amistad, caridad recípro-ca, solidaridad y colaboración. El diálogo, su instrumento esen-cial, exige actitud comprensiva, escucha y apertura al otro. Si la «purificación de la memoria» es imprescindible en la búsqueda de la unidad plena, también lo es la cooperación en los estudios bíblicos, teológicos, patrísticos y culturales. En el anuncio y la mi-sión habrá que evitar todo pro-selitismo y cualquier medio que se oponga al Evangelio, y habrá que hacer esfuerzos por unificar las fiestas de Navidad y Pascua.

El Sínodo, claro está, tampoco podía prescindir del diálogo inte-rreligioso con el judaísmo (Nos-tra aetate, Lumen Gentium, y Dei Verbum) que Benedicto XVI subrayó cuando visitó Tierra San-ta en 2009 al afirmar el derecho de los Palestinos a una patria so-berana, segura y en paz con sus vecinos, igual que los israelíes. De ahí su no al antisemitismo y antijudaísmo, requisito necesrio para la reconciliación y la paz en la justicia para ambas partes. El diálogo interreligioso entraña también (partiendo de Nostra

Arriba, una celebración eucarística en un monasterio sirio; junto a estas líneas, Be-nedicto XVI saluda efusivamente a Elio Toaff, jefe rabino de Roma, durante su visita

a la sinagoga de la comunidad hebrea en Roma, el año pasado.

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aetate)que se fomenten las re-laciones católico-musulmanas. Después del Concilio han sido nu-merosos los encuentros entre re-presentantes de las dos religiones. Al inicio de su pontificado, Bene-dicto XVI dijo de este diálogo que «es una necesidad vital de la que depende nuestro futuro en gran medida». Luego vendrían sus visi-tas a la Mezquita Azul de Estambul (30.05.2006) y la de Al-Hussein Bin Talal en Ammán (11.05.2009).

Las razones para relacionarse cris-tianos y musulmanes son múlti-ples. Dificultades hay, ciertamen-te, derivadas de que, en general, los musulmanes no distinguen entre religión y política. He aquí la fuente del malestar de los cris-tianos, pues se sienten como no ciudadanos aunque vivan en sus países desde mucho antes que el Islam. Urge, pues, un reconoci-miento que pase de la tolerancia a la justicia y la igualdad; basado en la ciudadanía, la libertad reli-giosa y los derechos humanos, ga-rantía de una buena convivencia.

También afrontó el Sínodo los grandes desafíos de la paz y la violencia. Los gobiernos medio-orientales son actualmente lai-cos y cada vez más opuestos a los principios de la fe cristiana. El influjo de la modernización, globalización y laicismo tie-ne allí hondas repercusiones.

Musulmanes y cristianos deben, entonces, trabajar juntos por el bien común, pues la igualdad de los ciudadanos está afirma-da en todas las Constituciones. Pero en los Estados de mayoría musulmana el Islam es, excep-to en pocos casos, la religión de Estado, y la sharia, su fuen-te legislación principalmente. Se reconoce la libertad de culto, es cierto, pero no la de conciencia. Con la expansión del integrismo, los ataques anticristianos se mul-tiplican, aunque haya numero-sos valores que sean comunes.

4 Mensaje al Pueblo de Dios

El nuevo Pentecostés sinodal pretendió mostrar la firmeza en la fe basada en la Palabra de Dios, y la colaboración en la unidad y en

la comunión. Cifró su primer desa-fío en aceptar y vivir la propia fe. Y el segundo, en las condiciones políticas y el pluralismo religioso. Respecto a la situación social, el Mensaje reflexiona sobre la inse-guridad de los israelíes, los san-grientos avatares del pueblo iraquí, el asesinato de cristianos en Iraq y sus hijos dispersos por el mundo. Afirma que el plan de Dios es que musulmanes y cristianos convi-van, toda vez que la misión de dichas Iglesias no es sino ser en aquellas sociedades, como la «sal» que da sabor y sentido a la vida, como la «luz» que ilumina las tinieblas con la verdad, y como la «levadura» que transforma los corazones y las inteligencias. Prodiga igualmente el Mensaje simpatía y gratitud a sacerdotes, religiosos, religiosas, fieles laicos, jóvenes, jefes de los centros de educación católica, trabajadores, medios de comunicación escrita

y audiovisual, sin olvidarse de la diáspora, donde la emigra-ción es hoy un grave problema. Apuesta por la comunión y el tes-timonio con las Iglesias Ortodoxas y las comunidades Evangélicas de Oriente Medio, y recuerda que se debe dialogar con judíos y mu-sulmanes. Interpela también a la comunidad internacional, la O.N.U. sobre todo, en pro de una paz justa y definitiva en la región.

El pueblo palestino, así, podrá tener una patria independiente y soberana y vivir allí con plena dignidad y estabilidad. El Estado de Israel, podría gozar de la paz y de la seguridad dentro de fron-teras internacionalmente recono-cidas. La Ciudad Santa de Jeru-salén, obtendría el estatuto justo que respete su carácter particular. Iraq, pondría fin a las funestas consecuencias de la guerra y se establecerá una seguridad que proteja a todos los ciudadanos.

Arriba, el patriarca

ortodoxo de Kiev, durante una ceremo-nia religiosa al aire libre. Debajo, sin-

gular imagen del comienzo

del Sínodo.En la página 11, el Papa

con el rabino Di Segni en el templo mayor de la sinagoga

de Roma.

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Líbano, gozaría de su soberanía sobre todo el territorio, fortificaría su unidad nacional y continuaría su vocación de modelo de buena convivencia cristiano-musulmana. El Mensaje, por último, condena la violencia y el terrorismo, cual-quier extremismo religioso, y toda forma de racismo, antisemitismo, anticristianismo e islamofobia.

5 Las 44 Propuestas

Las tres primeras confor-man la introducción: documentos presentados al Papa, Palabra de Dios y Pastoral bíblica. De la 4 a la 15 se afrontan la identidad de las Iglesias católicas en la zona, las persecuciones como forma de compartir la cruz y el derecho ciu-dadano a la propiedad; anteponen peregrinación, paz y esperanza a miedo y violencia, y propugnan la necesidad de proyectos que li-miten el fenómeno migratorio y refuercen el sentido de solidaridad en los emigrantes así como las relaciones entre Iglesias de pro-cedencia y de acogida.

De la 16 a la 29 se contempla la comunión eclesial, ya en el seno de la Iglesia católica (ad intra), donde figuran argumentos como los nuevos movimientos eclesiales, la jurisdicción de los Patriarcas, la situación de los fieles católicos en los Países del Golfo, pastoral vo-cacional, lengua árabe, subsisten-cia del clero, sacerdotes casados, formación de los seminaristas y laicos, vida consagrada, mujeres y niños; ya en la comunión con las Iglesias y comunidades eclesiales

(ad extra), reaparecen la causa del ecumenismo y una fiesta anual común de los mártires. Las pro-puestas encaminadas al testimonio cristiano tienen tres apartados: A. La formación cristiana, donde están las relativas a la formación, agentes pastorales, escuelas e instituciones católicas, medios de comunicación, misión, familia, jóvenes, Nueva Evangelización y doctrina social (30-38). B. La Liturgia, con la riqueza bíbli-ca y teológica que ésta supone en el Oriente (39). C. Diálogo intereligioso, que acer-ca los espíritus y los corazones, a cuyo reforzamiento se invita me-diante la purificación de la memo-ria, el perdón recíproco del pasado y la búsqueda de un mejor futuro común (40): desde la Nostra Aeta-te se propone dialogar con los ju-díos profundizando en los valores humanos y religiosos, la libertad, la justicia, la paz y la fraternidad. La lectura del Antiguo Testamento ayuda a conocer mejor la religión judía y a rechazar el anti-semitis-mo y el anti-judaísmo (41).

Con la Nostra Aetate y las cartas pastorales de los Patriarcas católi-cos de Oriente, el Sìnodo apoya el diálogo intereligioso e intercultural entre cristianos y musulmanes.

Reclama en con-creto un fecundo diálogo vital con los musulmanes, a quienes se pide una mirada de estima y amor (42). A la Virgen María, Theotokos, modelo perfecto de escucha de la Palabra de Dios e hija bendita de aquella tierra, invocada como Ma-

dre de la Iglesia desde el Vaticano II, todo el Oriente Medio es confia-do a su protección. Magnífico rega-lo, pues, el de Benedicto XVI a las Iglesias medio-orientales. Cuánto de lo debatido se quedará en letra impresa y cuánto pasará a fruta madura de los hechos, el tiempo lo dirá. ¡Lástima que el gravísimo atentado terrorista perpetrado sólo una semana después de la Cumbre dentro de la catedral siro-católica de Bagdad haya querido echar por tierra tanta esperanza!

Abajo, el obispo maronita de Biblos y el patriarca de Alejandría de los Coptos.

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La reingeniería social es la construcción ideológica y sectarista de una sociedad opuesta a la que existe, sobre bases doctrinarias

y parciales que obedecen a intere-ses particulares de determinados grupos de influencia. Conlleva la trasmutación de unos principios, asentados en la realidad, por otros artificialmente inventados. Con-duce al vaciamiento de valores de nuestra convivencia, y al acoso de aquellos que se resisten a abando-nar sus convicciones, tradiciones y raíces más hondas. Finalmente, nos precipita individual y colecti-vamente en la pérdida del sentido de la realidad del ser humano, y la angustia del absurdo. Sólo como sencilla ilustración o ejemplo de su destructiva lógica, hemos ela-borado aquí un diálogo en clave de humor e ironía, que esperamos sirva para mostrar algunos de los interrogantes y preocupaciones que este afán, por desgracia tan agudo hoy, nos plantea.

—¿Es la sociedad?

LA ESPAÑA DEL DISEÑO ARTIFICIALJavier Barraca

—¿Qué sociedad?—La sociedad española.—Sí. Pero aquí no andamos

ya muy seguros… ¿Cuál exacta-mente?

—¿Cómo que cuál? La real o la oficial.

—Ah, bueno. La oficial. Ya sabe que aquí la otra no interesa. ¿Con quién hablamos?

—Con un individuo de los su-yos.

—Bien, ¿y qué le apetece?—Casarme.—Pues nosotros lo que facili-

tamos más en estos momentos es lo contrario: divorciarse. Pero si quiere ir en contra de su propia sociedad, usted verá. Adiós.

—No, esperen. Hay algo más.—¿Qué?—Es que quiero comunicarlo.

Porque dicen que el matrimonio tiene una dimensión social, y que hay que comunicárselo a la socie-dad. Pero, claro, esto lo hago sólo por las ventajas que me pueda reportar, ya que me sacrifico y lo

digo. ¿Entiende?—Sí. Pues ya está. Muchas gra-

cias.—¿Nada más?—Hoy en día, nada más. Y que

sean muy felices, de nuestra parte.—Es que no podemos ser fe-

lices.—Ya. Eso dicen muchos y lla-

man para quejarse. Paro, violencia, crisis de valores. Pero la culpa no es nuestra.

—No, si es que no podemos ser felices (en plural) porque no somos dos.

—Cómo que no son dos. ¿No dice que va a casarse? Pues se casará con alguien, ¿no?

—No. Yo quiero casarme con-migo.

—A ver si le entendemos. ¿Lo que dice es que quiere casarse consigo mismo? ¿Solamente con usted?

“Ha pronunciado ustedla palabra mágica”

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¿Qué es la reingenie-ría social? ¿Realmente nos damos cuenta del cambio que nuestra

sociedad está vivien-do? ¿Es esto fruto de la casualidad? Vienen a estas páginas hoy, en

clave de humor, las pe-ripecias de un individuo cualquiera que preten-de seguir los cánones actualmente al uso en materia moral. El diá-logo con un represen-tante de la “sociedad

oficial” no tiene desperdicio

—Sí, casarme sin nadie más, yo solito.

—Pero por qué.—Porque me quiero muchísimo;

estoy enamorado de mí mismo. Y porque no me fío de nadie.

—Bueno, en estos tiempos, lo primero le pasa a mucha gente. En cuanto a lo de no tener fe en nada, eso sí coincide con la pos-tura oficial. Pero no se empeñe en casarse consigo mismo. Tenga en cuenta que usted es uno, no dos.

—Pues yo quiero ser dos. Dos como poco, si no tres, cuatro o más. Infinito incluso...

—Eso va contra la lógica.—Y a mí qué si va contra la

lógica. Hay muchas lógicas, y yo tengo la mía. Son ustedes unos fachas en el fondo, unos déspotas. Ya lo sabía.

—Cuidado, individuo, que no-

sotros somos más.—Pues yo lo exijo. Es mi de-

recho.—Atención: ha pronunciado

usted las palabras mágicas. Si lo exige y afirma que es un derecho suyo, es diferente. No se preocupe. Ustedes tienen derecho a exigir. Para eso somos una sociedad de-mocrática. No hay problema. Cáse-se con quien quiera. Enhorabuena.

—Hay otra cosa. También exijo que me llamen matrimonio.

—¿Qué llamemos matrimonio a qué?

—A mí.—¿A usted solo?—Sí, ya se lo he dicho.—Pues vale. Le llamaremos

como usted prefiera. Adiós.—Espere, no tan deprisa. Y qué

pasa con los hijos.—¿Cómo que qué pasa con los

hijos?

—Pues que los exijo como un derecho mío también. No faltaba más.

—Vale. Aunque la línea oficial no es exactamente pro-vida. De hecho, si se tratara de abortar, hasta podríamos crear un nuevo derecho para hombres casados consigo mismos, con tal que al-guien lo pida.

—No, a mí que me den uno en adopción experimental.

—De acuerdo. Le meteremos en un programa de adopción de hijos para matrimonios de un solo individuo. Aunque a los niños lo que les gusta es tener dos pro-genitores, por eso de la unión y compañía, y que se complemen-

“Ha pronunciado ustedla palabra mágica”

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—Desde luego que sí. —¿Cómo? —Pues con un poco de com-

prensión. Que somos humanos.—Claro. Aquí estamos a su ser-

vicio.—¿Al servicio de quién?—De todos.—Y también de las minorías. No

se olviden de las minorías.—No, claro. Y de las minorías.

Somos una democracia.—Por muy minoritarias que

sean.—Por muy minoritarias. Tran-

quilo.—Aunque sean tan minoritarias

que sean sólo uno. Como yo. Un único individuo.

—Desde luego.—Entonces, le recuerdo que

exijo un poco de comprensión. Comprensión con el doloroso proceso del que he sido víctima. Primero, un matrimonio lleno de soledad. Y, finalmente, la siempre

desagradable ruptura.—Cuenta usted con toda nues-

tra comprensión. Lo sentimos mu-cho.

—Eso no basta. Exijo un poco de interés personal.

—Muy bien. ¿Qué ha sucedido? Cuéntenos. ¿Por qué se ha divor-ciado usted de sí mismo?

—Es que la vida matrimonial es muy difícil. Más: es completamente imposible.

—Sobre todo en su propio caso. A veces, se agrava mucho la difi-cultad de la convivencia por culpa de la deriva personal que toma nuestro cónyuge, ¿verdad? Sin que uno mismo tenga ninguna culpa ni responsabilidad en ello. Toda la culpa puede ser del otro.

—Así es. Yo no he tenido nada que ver. Toda la culpa ha sido del otro. En mi caso, no cabe la menor duda. Estoy absolutamente seguro de eso.

—Un momento. Eso no pode-mos consentírselo. Aquí, amigo, ha metido la pata hasta el fondo. A partir de ahora, se invierten los papeles. Somos nosotros, su so-ciedad, los que exigimos.

—Pero qué he dicho.—Que no tiene usted ninguna

duda.—Y qué pasa por no tenerla.—Pues que somos una demo-

cracia. Se lo repetimos bien clarito: una democracia. Y, aquí, todos te-nemos que ser tolerantes. Y ser to-lerantes no admite frases ni actitu-des como las suyas. Las personas que no tienen ninguna duda o que están absolutamente seguras de algo resultan peligrosas, muy pe-ligrosas. Esas personas consideran que tienen la razón. Y eso va con-tra la forma de ser y de vivir de los

ten lo más posible. Pero eso de complementarse los cónyuges lo estamos modificando rápidamente. No se inquiete, aunque usted sea sólo uno también diremos que es complementario.

—Lo exijo todo. Es mi derecho.—Ya, ya. No se preocupe. Se

hará lo que usted manda. Somos una sociedad democrática.

—Pero es que no me conformo con que me dejen hacerlo o con que lo hagan por mí. Quiero que lo legislen, que legislen todo, que me legislen a mí mismo.

—¿Que le legislemos?—Claro. Que aprueben una ley

en mi favor con todo esto, y la ha-gan cumplir severamente. Y, ade-más, me divorcio inmediatamente, ahora mismo. Exijo divorciarme en este preciso momento. Más: exijo estar divorciado ya.

—De acuerdo. Hecho. Ya sabe que no hace falta dar ninguna ra-zón para eso tampoco.

—Faltaría más. Panda de re-trógrados...

—Bien. Pues todo resuelto. ¿Po-demos ayudarle en algo más?

“-Hay otra cosa. Tam-bién exijo que me

llamen matrimonio.-¿Que llamemos ma-

trimonio a qué?-A mí.

-¿A usted solo?-Sí, ya se lo he dicho. -Pues vale. Le llama-

remos como usted prefiera. Adiós”

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Un nuevo CD de Antonio Alcalde, interpretado por la Coral Isidoriana de León, dedicado a los himnos de la Liturgia de las Horas. Incluye textos nuevos de himnos que se incorporan al himnario español.

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demás, de quienes no son como ellas.

—Per- dón. No sé cómo he podido. Ya empiezo a dudar de todo. En especial, de mí mis- mo. ¿Lo ven?

— E x - c e l en t e . Pero no basta con e so . L e exigimos una dis- c u l p a expresa, formal y p ú b l i c a por pensar que tenía razón.

—Siento, en el corazón, haber pensado que tenía razón.

—Ya. No crea que se va a ir de rositas con eso sólo. Además, le observaremos y le mantendremos vigilado. Es usted un germen de totalitarismo e integrismo. Quizás un terrorista.

—Si no puedo estar seguro de nada, tal vez sí sea un terrorista. Pero, según su lógica, ni ustedes ni yo podemos estar seguros de que ser un terrorista resulte algo malo.

—Eso es un problema, en efec-to. Como sociedad democrática y tolerante, no debemos oponernos al terrorismo tan drásticamente. Eso resulta muy intolerante.

—Entonces, estamos perdidos.—Nosotros preferimos decir

que estamos algo desorientados, si no le importa.

—No, qué va, no me importa. A mí no me importa nada.

—Perfecto. Como a nosotros.

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La viña del Señor, como decimos, es la Igle-sia, el mundo mismo. La viña del Señor son-todas las personas llamadas a vivir según la vo-luntad y el plan de Dios para cada una de ellas.Ahora bien, para trabajar en esta viña, que es del Señor, con las debidas condiciones y las mejores garantías de éxito, con el debido espíritu, hace falta iluminar el corazón y el empeño de los tra-bajadores con determinadas actitudes. Conviene recordar algunas. De eso vamos a hablar ahora.

Amar la viña como algo propio

Es lo primero y fundamental: amar la viña. Si re-negamos de la viña, es decir, del trabajo concreto y particular que se nos encomienda en la Iglesia, mal lo vamos a hacer. Si no va por delante el afecto y el amor a la Iglesia, a la parroquia, a la comunidad, al grupo de catequesis, a la tarea particular que tene-mos encomendada, es imposible que la realicemos debidamente. Esta viña, que es la Iglesia, que es nuestra Madre la Iglesia, tiene que ser cada día más y mejor conocida, más y mejor amada. Sólo entonces, cuando la llevemos en el corazón, como se lleva un tesoro bien apreciado y querido, estaremos en con-diciones de trabajar, gozosa y eficazmente, en ella.

Saber que en el trabajo no estamos solos. Es también básico y fundamental. En la Iglesia nadie va por libre, nadie debe ir por libre, y nadie está nunca solo. Ni la viña es nuestra ni tampoco el fruto. La viña y el fruto son del Señor. Si perdemos de vista esta realidad, pronto cundirá en nosotros el desánimo y la tibieza. Nosotros somos trabajadores, pero en las manos del

Lo he recordado mil veces y he hablado de ello otras tantas. Me refiero ahora a aquel momento solemne e inolvidable para mu-chos en que el actual Papa, Benedicto XVI, apareció por primera vez, en el balcón de la

Basílica de San Pedro, para saludar al mundo como Papa. Aquella tarde, con toda la grandeza y toda la sencillez que le caracterizan, nos dijo a todos: “soy un humilde trabajador en la viña del Señor”. Ni más ni menos. ¡Cuánta grandeza y compromiso se esconden en esas sencillas palabras! Grandeza y compromiso del ser y quehacer del Papa y grandeza y quehacer para los que queramos vivir comprometidos en la Iglesia y en el mundo.

La frase del Papa evoca, casi sin querer, la parábo-la del Evangelio. Una parábola, bien conocida por cierto, que nos habla de aquel amo de una viña que salió varias veces, a lo largo del día, a la plaza del pueblo y fue invitando a trabajar a su viña a los que veía parados. Para todos tenía la misma palabra-invitación: Id también vosotros a mi viña.

En la parábola nos sentimos reflejados, de alguna manera, todos. Cada uno nos sentimos y nos sa-bemos un obrero más de los que el Señor invita a trabajar en su viña, es decir, en la viña de la Iglesia y del mundo. La vida, verdadero e inestimable regalo de Dios, no es para pasarla de brazos cruzados y sin hacer nada. La vida es una llamada o vocación a construir un mundo mejor y a construirnos como personas a la medida de Jesucristo, a la medida del que es santo. Para eso es la vida, para traba-jar y no para quedarnos en la plaza todo el día.

YO SOY EL ALFA Y LA OMEGAPedro Moreno

Trabajando en la Iglesia

“Id también vosotros a mi viña” (Mt.20, 3-4)

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podemos olvidar en nuestro trabajo en la Iglesia, nos confirma un hermoso y acertado texto de la exhortación post-sinodal “Christifideles Laici”. Dice el documento:

“Embriagado por las prodigiosas conquistas de un irre-frenable desarrollo científico-técnico, y fascinado sobre todo por la más antigua y siempre nueva tentación de querer llegar a ser como Dios (cf. Gén 3,5) mediante el uso de una libertad sin límites, el hombre arranca las raíces religiosas que están en su corazón: se olvida de Dios, lo considera sin significado para su existencia, lo rechaza poniéndose a adorar los más diversos ídolos.

Y sin embargo, la aspiración y la necesidad de lo religio-so no pueden ser suprimidas totalmente. La conciencia de cada hombre (….) no puede dejar de hacer propia aquella palabra de verdad proclamada a voces por san Agustín: “Nos has hecho, Señor, para Ti, y nuestro co-razón está inquieto hasta que no descanse en Ti” (n 4).

Cierto, estamos ante un mundo tremendamente se-cularizado, un mundo que no quiere sino arribar a es-pacios y playas donde se ahogue toda voz y eco que vengan a hablar de Dios y de la religión, que vengan a hablar de la Iglesia, la viña del Señor. Pero estos mis-mos hombres, que configuran nuestro mundo de hoy, llevan en su corazón gérmenes y semillas de transcen-dencia, de amor por la verdad y de amor por el amor; llevan gérmenes de Dios y de ansia por volver a Dios.

Señor. Él es quien, de verdad, cuida de la viña y lleva adelante la obra: la obra de la evan-gelización y la obra de la santificación de los hombres. Lo dice, con belleza, la Escritura: “Si el Señor no construye la casa, en vano se cansan los albañiles; si el Señor no guar-da la ciudad, en vano vigilan los centinelas”¡Cómo ayuda y cómo anima esta conciencia de saberse en sus manos, acompañados por Él y la fuerza de su Espíritu! ¡Cómo anima…!

Reconocer que la viña es tan grande

como el mundo

En ella están todos los hombres: los pobres y los menos pobres, los ricos y los deshe-redados, los del primer mundo y los del úl-timo mundo… En ella están los niños y los jóvenes, los hombres y las mujeres, los laicos, los consagrados y los sacerdotes… El Reino de Dios, que es reino de justi-cia y verdad, de esperanza y consuelo, es para todos y tiene que llegar a todos. La viña y sus frutos no son para un solo pue-blo o unos pocos pueblos de la tierra; La viña y sus frutos son para toda la huma-nidad, para todos los pueblos de la tierra.

No olvidar que en la viña viven hombres muy secularizados, pero con un corazón hecho para el bien y el amor, hecho en definiti-va para Dios. De esta doble verdad, que no

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Jorge Enrique MújicaInFLUJO DE LOS MEDIOS DE COMUnICACIÓn

Quizá los primeros evangelizadores jamás pensaron que un día el “Id a todo el mundo y predicad el Evan-gelio” sería tan fácil. Ahora, en cuestión de segundos, se puede acceder a la última encíclica del Papa en el portal del Vaticano, ver y escuchar la más reciente homilía de un obispo en YouTube o recibir asesoría espiritual en Catholic.net. Todo al alcance de un clic.

Benedicto XVI fue el primer Papa en usar el sistema SMS de telefonía móvil (mensaje de texto) para

comunicarse con miles de jóve-nes. Lo hizo en la pasada Jornada Mundial de la Juventud, en Syd-ney, para transmitirles brevísimas catequesis sobre el Espíritu Santo.

Meses más tarde, el pasado 8 de septiembre de 2008, también sería el primer Papa en enviar un men-saje a través de la red social www.Xt3.com (“Xt3” significa Cristo en el tercer milenio), portal oficial de la Jornada Mundial de la Juventud de este mismo año.

Xt3.com funciona como otras re-des sociales: se pueden compar-tir fotos, páginas personales, hay foros de discusión, etc. ¿En qué se diferencia de Facebook, MyS-

pace, Hi5 o Tuenti? En su dimen-sión espiritual, pues también ofre-ce intenciones de oración y hasta asesorías espirituales en línea por parte de sacerdotes. Y por si fuera poco, las diócesis también pueden crear las propias redes sociales. ¿Está teniendo éxito? Al presente hay más de 35.000 usuarios sus-critos de 170 países.

¿Un blog para el Papa?

Al menos ésta fue una de las pro-puestas que le hicieron en el pasa-do Sínodo de los obispos en Roma a Benedicto XVI. De momento va-rios obispos ya están siguiendo el ejemplo del Papa en el uso de la world wide web para evangelizar y continuar su misión catequética. Es el caso del arzobispo de Cas-cavel, Brasil, Mons. Mauro Apa-recida do Santos, quien en www.

dommauro.com.br ha puesto en marcha un curso de catecismo on line para facilitar a estudiantes universitarios, profesores y em-pleados, concluir sus estudios de catecismo y acceder al sacramento de la confirmación.

El 28 de octubre la agencia ANSA informó que el arzobispo de Nápo-les, cardenal Crescenzio Sepe, ha-bía creado su perfil en Facebook. “Tienes que ir a donde está la gen-te y, si la gente está en Facebook, tienes que ir allí también”, declaró el cardenal. ¿Los frutos? 200 nue-vos amigos, depromedio, al día.

La fe en internet también es cultura

En julio de 2008 se dio inicio a un proyecto para reunir todas las partes del “Códice Sinaiticus”

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fe on line que contiene el texto más anti-guo sobre el Nuevo Testamento. La iniciativa reúne los esfuerzos de varios organismos internacio-nales como la British Library, el Monasterio de santa Catalina del Sinaí, la Biblioteca Nacional de San Petesburgo y la Biblioteca Univer-sitaria de Leipzig. Se espera que este proyecto sea finalizado en 2010, cuando se haya digitalizado todo el Códice y se ponga a dis-posición del público. El manuscrito es de gran relevancia dado que es de los pocos que están en la base de todas nuestras ediciones de la Biblia en griego. Junto al Códice Vaticanus y el Alejandrino, per-mite un acercamiento a la fecha de traducción del hebreo al griego antiguo. La web donde será posi-ble consultar el Códice Sinaiticus es www.e-manuscripts.org. Hace unos meses, Caritas Italia y

la asociación Pax Christi pusieron en marcha www.conflittidimentica-ti.it, un portal en italiano dedicado a conflictos bélicos olvidados, con el fin de ofrecer un instrumento de educación en la paz. Además de información histórica sobre guerras existentes actualmente, ahonda en el motivo del conflicto y sensibiliza sobre este tema.

En Chile la asociación familiar “To-dos los Santos” dio paso a la web www.todoslossantos.com a fina-les del pasado mes de octubre. La iniciativa consiste en reivindicar la fiesta de Todos los Santos ani-mando, a través de internet, a que los niños salgan a la calle con dis-fraces de santos y sean ellos quie-nes regalen en lugar de pedir. El portal ofrece consejos y recursos sobre la manera de recristianizar el sentido de las celebraciones del

1 y 2 de noviembre, cómo elaborar disfraces inspirados en los santos, qué dar a las personas, etc. De esta manera, ha quedado como referente para los años venideros.

Muchos ya conocen a la activa plataforma española HazteOir.org (www.hazteoir.org) que coordi-na el ingenioso y emprendedor Ignacio Arzuaga. De cariz cristia-no-católico, recientemente han puesto en marcha dos iniciativas: “Derecho a Vivir” y el “Proyecto Feliz Navidad”. A través de http://derechoavivir.org se pretende crear consciencia sobre el valor de la vida e impedir que la ley del aborto libre sea realidad. ¿Cómo lo hacen? Informan, sensibilizan y movilizan a la sociedad. Arzuaga lo resumen así: “Se trata de gritar tan fuerte que no puedan ignorar-nos”. En www.balconeras.org se ofrece, por una módica cantidad, un trozo de tela loneta con una imagen llamativa de la Sagrada Familia y la leyenda “¡Feliz Navi-dad!”, para anunciar la buena no-ticia del nacimiento del Salvador. Con un gesto tan sencillo, quieren poner su granito de arena en la recuperación del espacio social por parte de los símbolos cristianos en los adornos navideños.

Televisión, i-Breviary, de todo un poco

El Proyecto Trimilenio (www.tri-milenio.com) de VE Multimedios cumplió su cuarto aniversario el 15 de agosto de 2010. La particulari-dad de esta iniciativa, impulsada por el Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales y al ser-vicio de la Red Informática de la Iglesia en América Latina (RIIAL), es loable: ofrece la posibilidad de crear sitios web de manera gra-tuita para incrementar la presen-cia católica en internet. De esta forma, Trimilenio ha logrado que numerosas estaciones de radio, publicaciones, parroquias y movi-mientos, se estén dando a conocer en la red.

La Unión Apostólica del Clero se ha valido del servicio que presta Trimilenio y ha lanzado una ma-cro encuesta dirigida a sacerdotes para conocer qué es lo que más les interesa hallar en internet. La

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personal, donde creo que está la mano de Dios; lo que partió sien-do un trabajo, se convirtió en un apostolado”.A propósito del Sínodo sobre la Palabra de Dios tenido reciente-mente en el Vaticano, el Centro Franciscano Multimedia, Cançao Nova, H2Onews.tv y otras tele-visoras católicas, han colaborado juntos para producir una serie de capítulos que responden a pregun-tas como qué es la Biblia, cómo entra en la historia y en la historia personal de cada uno de los seres humanos y qué significa decir que Dios habla.

Padres para siempre

“La paternidad es un don, un pri-vilegio y una responsabilidad”;lo declaró el líder de los Caballeros de Colón, la organización laical católica más grande del mundo, quien también se ha valido de in-ternet para ayudar a la sociedad. El proyecto “Padres para siem-pre” se está valiendo de www.fathersforgood.org para ayudar a los varones que viven o van a vivir la experiencia de la paternidad. El portal contiene interesantes recursos como consejería de ex-pertos, vídeos, podcast, así como la posibilidad de enviar preguntas sobre temas relacionados con la

iniciativa cobró forma en el we-bsite http://encuesta.clero.org.Dependiendo de los resultados, se pondrán en marcha proyectos que ofrezcan recursos para satisfacer esas necesidades.

Por lo pronto muchos sacerdo-tes, religiosos y laicos ya cuen-tan con iBreviary www.dimix.it/ibreviary), el primer Breviario que puede usarse en iPhone y iPod Touch o, lo que es lo mismo, el primer Breviario que se puede usar a través de dispositivos de última generación. iBreviary busca ampliar a otros idiomas este medio que ayuda a la oración, así como extenderse a otras oraciones como el Rosario e incluso insertar audio para poder escuchar canto grego-riano u otras oraciones recitadas.

Una de las publicaciones de pres-tigio en Latinoamérica que ya ha migrado a internet, es la revista cubana Espacio Laical. En su portal www.espaciolaical.org está ofre-ciendo periódicamente los conte-nidos que distribuye en su forma impresa.

En otra parte del mundo más cercana a nosotros, en España, se ha relanzado el periódico de inspiración católica “Diario Ya” (www.diarioya.es). Fundado en plena segunda república (cuan-do los católicos eran perseguidos por su fe), en su versión impresa, allá por 1975, llegó a ser el diario más leído en Madrid, con más de 177.000 ejemplares.

Goya Producciones (www.goya-producciones.es) ha lanzado nue-ve documentales que presentan sucintamente los principios de la Doctrina Social de la Iglesia. La originalidad de esta iniciativa ra-dica en que es la primera vez que se pone en pantalla una versión viva y fiel del Magisterio en este campo. Otro lanzamiento, aunque éste radial, es el de www.jesusde-nazaret.cl. Se trata de una pro-ducción de teatro radial en ocho cedés con el relato de cada uno de los pasajes evangélicos. Para esta iniciativa han prestado su voz re-conocidos locutores chilenos cuyo resultado, en palabras del director de sonido de la producción, ha re-sultado también “una conversión

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paternidad y el matrimonio, reco-mendación de libros, etc.

En septiembre pasado se celebró el IV centenario de la aparición de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, y los obispos de la Conferencia Epis-copal no han querido dejar de ofrecer un medio para que los devotos de esta advocación mariana se unan al festejo. Por este motivo han puesto

en marcha la página www.virgen-delacaridaddelcobre.org, un espa-cio de “encuentro, oración y diálo-go”, como declaró el arzobispo de Santiago de Cuba. Con esta ini-ciativa “la Virgen de la Caridad del Cobre utiliza los medios modernos de comunicación para ponerse en contacto con todos sus hijos, en cualquier parte del mundo donde estén, dentro o fuera de Cuba”.

Con el lema “Que tu voto sea ca-tólico, como tú”, nació www.Vo-toCatolico.com, un portal puesto en marcha por hispanos católicos de Colorado, en Estados Unidos, durante los meses previos a las elecciones generales de inicios de noviembre de 2008 en aquel país. El sitio web continúa ofre-ciendo videos, documentos y ora-ciones para ejercitarse e instruir-se adecuadamente sobre cómo debe orientar su derecho al voto

un católico. Abiertamente apar-tidista, en una de sus secciones (Enseñanzas de la Iglesia) ofrece la palabra de los Papas sobre la responsabilidad de un cristiano al elegir a sus gobernantes.En el segundo portal católico más visitado del mundo, Catholic.net, las iniciativas no han dejado de suscitarse. Precisamente una de ellas tiene relación con los gober-nantes. En una carta de la direc-tora del portal, dirigida a todos los suscriptores de la agencia de noticias gratuita, Lucrecia Rego de Planas dio a conocer la campaña “Adopta un Gobernante” (http://es.catholic.net/oraciongobernan-tes). ¿En qué consiste? En algo tan sencillo y tan necesario como orar por los que nos gobiernan: “El poder de la oración es enorme. Nuestras plegarias pueden cam-biar asuntos de importancia en el mundo. Debemos orar por los go-bernantes de todas las naciones, para que el Señor les ilumine y les dé sabiduría y discernimiento y se conviertan en instrumentos para promover la dignidad del ser humano, la libertad, la justicia, la paz y el bien común”, escribió Lucrecia.

No es la única campaña que ha impulsado con éxito Catholic.net. Hace ya tiempo lanzó “No lo ma-tes, dámelo a mí”, una iniciativa

que brinda apoyo y ayuda a aque-llas mujeres que quieren abortar. Entrando en http://nolomates.catholic.net pueden leerse los nu-merosos testimonios de mujeres que por diversos motivos piensan dar a su hijo en adopción antes que matarlo. Ya son 53 centros de ayuda a la mujer los que se han sumado a esta iniciativa, 1859 matrimonios deseosos de adoptar y 94 mujeres que han registrado a sus bebés para entregarlos en adopción.

www.madrina.org es la web de la Fundación Madrina, una entidad benéfica que ayuda a madres ges-tantes en situación de dificultad, en España. El fundador, Conrado Giménez Agrela, se vale del portal para ofrecer apoyo a mujeres que atraviesan dificultad porque, como él mismo dice, las mujeres son engendradoras de futuro.

Una de las instituciones que en el ámbito de lengua española más defienden el derecho natural, es Profesionales por la Ética. Muy afín a lo que defiende y promueve la Iglesia católica, recientemen-te han lanzado http://profesio-nalescomunica.wordpress.com, “un espacio virtual al servicio de periodistas y comunicadores en general” en el que ofrecen notas de prensa, vídeos, artículos de opinión publicados en otros me-dios, archivo fotográfico y muchos otros recursos de formación e in-formación.

Cirilus, el proyecto de educación virtual a distancia, ha puesto en marcha un curso virtual sobre info-ética en www.cirilus.net/in-foetica. En el plano académico, es el primer medio de comunicación que responde con hechos a la lla-mada que en la pasada Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales hiciera Benedicto XVI so-bre este tema.No es una opción, la fe ya no busca, sino que tiene su espacio en la red. El hombre, también en internet, experimenta esa nostalgia de Dios. La necesi-dad de comunicación también lo es de oración con Cristo, de sed de fe y, para el cristiano, la comu-nicación es misión. Ya lo decía san Pablo: “¡Ay de mí si no anunciara el Evangelio!”.

En Internet, y dentro del ámbito cristiano, han surgido campañas tan curiosas como la de «adop-ta a un gobernante», realizada por Catolic.net

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TODO LO HAGO nUEVOVictoria Luque

Hay una frase en la Escritura que cada vez que la oigo, o la leo, me conmueve: Quien acoge a un niño, acoge a Dios mismo. Es de una profundidad absoluta, porque es verdad.

En la pequeñez, en lo sencillo, en lo humilde, en lo débil, se manifiesta el Señor de la Historia con toda su grandeza. Los niños son los preferidos de Dios, y todos los que le buscan como un niño, también. Por eso muchas veces al día los cristianos, yo misma sin ir más lejos, tengo que cuestionarme con qué ojos miro las cosas. Y me invito continuamente a dejar el hombre viejo para revestirme del hombre nuevo. Este cambio de actitud es prioritario para acercar-me al Señor de mi vida. Dice el salmo 127: La herencia de Ya-veh son los hi-jos,/recompen-sa, el fruto de las entrañas;/ como flechas en la mano del héroe, / así los hijos de la juventud. / Dichoso el hombre que ha llenado de ellas su aljaba;/ no quedará confuso cuando tenga pleito /con sus enemigos a la puerta.

Y recuerdo que, cuando nació nuestro quinto hijo (ahora tenemos nueve), un amigo nuestro nos dijo: Ya tenéis cinco flechas en la aljaba. Y es ver-dad. Los hijos me protegen de mí misma, de mi egoísmo, de mi orgullo, de mi deseo de destacar y que todos me alaben. Los hijos me dan serenidad, acrecientan mi paciencia (aunque parezca mentira) porque la ejercito más, me han dado una capacidad para valorar lo importante y lo trivial, y ellos, sin saberlo, me conducen cada día por un camino de santidad que, sin ellos, quizá no sabría cómo andarlo.

Quizá suene fuerte lo que voy a decir, pero también es verdad. El cristiano está llamado a dar la vida, está llamado al martirio. Somos cuerpo de Cristo resucita-do, y tenemos que desgastarnos en el de al lado, sin condiciones. Pero hay un quid importante: en esa en-trega encuentras la felicidad. Quien pierda su vida por Mí, la encontrará, dice el Señor. Y una forma de dar la vida, de entregarla generosamente, es con los hijos.

Quizá la persecución que hoy día se da contra el cristiano no sea tan evidente como en tiempos de Ne-rón, cuando los empalaban y los untaban de brea, y así se iluminaba Roma de noche, pero la persona que hoy seriamente se plantea seguir a Jesucristo tiene

que ir muchas veces contracorriente. Y el número de hijos, hoy, es un motivo de persecución, en tu familia, en tu trabajo, entre tus conocidos, entre tus vecinos/as, etc. Estás alzando una bandera que muy pocos comprenden, pero que a todos les cuestiona. De alguna manera, una familia numerosa hoy da qué pensar. A mí, no hay día que no me pregunten el porqué. No se entiende que habiendo posibilidad de restringir —bastante— el número de hijos, una pareja joven se decida a apostar por la vida, casi con chulería. Nadie nos lo ha dicho a la cara, pero seguro que más de uno piensa que somos unos fanáticos.Sin embargo, los hijos son una ocasión privilegiada para

dar razón de tu fe. Yo, por mí misma, sin el Señor en el centro de nuestras vidas, habría tenido uno, quizá dos hijos, y ni uno más. Él es el que está hacien-do la obra; nosotros

sólo le dejamos hacer, y nos apoyamos en Él para no mandarlo todo al garete. ¿Qué mejor regalo puedo darle a mis hijos que la posibilidad de vivir aquí y ahora una vida, ya de por sí maravillosa —incluidos todos los pesares—, y tener en prenda la Vida Plena?

Me enseñarás el camino de la vida,/ me sacia-rás de gozo en tu Presencia,/ de alegría perpe-tua a tu derecha. Eso dice el salmo, y es verdad. La verdadera libertad y la verdadera alegría es-tán en conocer la voluntad del Señor, y en seguir-la, a pesar, muchas veces, de nosotros mismos.

El Señor es mi heredad y mi copa, mi vida está en sus manos. Me ha dado en suerte un lote hermoso, me encanta mi heredad, continúa el salmo. Y es ver-dad, aunque el lote incluya una enfermedad grave, o un hijo paralítico, o un marido alcohólico. Me encanta mi heredad. Con Él todo es nuevo, y Él llevará ese peso, esa carga que a nosotros tanto nos atosiga.

Por eso muchas veces la tacañería para con el núme-ro de hijos, me parece a mí, viene acompañada de falta de fe. Es como si todo dependiera de nosotros mismos. Soy yo la que tengo que darles de comer, vestirlos, darles una educación, estar a su lado y cuidarles cuando enfermen… Y me olvido de que el Señor está con nosotros, que no estamos solos. Que Él no nos deja de su mano. Esto lo digo, porque lo he vivido, y lo sigo viviendo. Quizá con oración, y con la gracia de la fe, podríamos dar el salto.

Las flechas de mi aljaba

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Próximo cuadernillo sobreLA CATEQUESIS

Resina, 1 • 28021 MadridTel.: 917 987 426 / 427 • Fax: 915 052 050

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A lo largo de los próximos números de la revista “Cooperador paulino” presentaremos a los

lectores una serie de entregas sobre La Catequesis. Juan Pablo II decía en la encíclica Ecclesia in Europa: “Pero cuando el Hijo del hombre venga, ¿encontrará la fe sobre la tierra?” (Lc 18,8). ¿La encontrará en estas tierras de nuestra Europa de antigua tradición cristiana? Es una pregunta abierta que indica con lucidez la profundidad y el dramatismo de uno de los retos más serios que nuestra Iglesia ha de afrontar. Se puede decir – como se ha subrayado en el Sínodo – que tal desafío consiste frecuentemente no tanto en bautizar a los nuevos convertidos, sino en guiar a los bautizados a convertirse a Cristo y a su Evangelio”. (EE 47)

No vivimos una época de cambios sino que vivimos un cambio de época, y no podemos anclarnos en ofrecer una formación cristiana o transmisión de la fe de otros tiempos. A lo largo de estos artículos intentaremos comunicar los nuevos planteamientos que en el mundo de la catequesis se están realizando y que son comunes a los países donde los procesos de secularización son más fuertes. Los temas sobre los que profundizaremos serán los siguientes:

1 La situación y la problemática de la catequesis, hoy.

2 Importancia de la catequesis en el proceso evangelizador.

3 Tendencias actuales en catequesis: El nuevo paradigma.

4 La primera evangelización, período a privilegiar.

5 Catequesis en la primera infancia: el despertar religioso.

6 La iniciación cristiana de los hijos. La catequesis familiar.

7 La difícil catequesis en la adolescencia y la juventud.

8 La catequesis de adultos.

9Nuevos tiempos, nuevos catequistas.

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Lectura orante con la Palabra de Dios

Las palabras anteriores son la proposición número 22 presentada al Papa Benedicto XVI por el Sínodo de la Palabra, celebrado

en Roma del 5 al 26 de octubre de 2008. No sé si en todos los ámbitos de nuestra querida Iglesia hemos acogido esta invitación. Por otro lado nada novedosa, pues ya la Dei Verbum nos invitaba a ello: “Todos los fieles... acudan de buena gana al texto mismo: en la liturgia, tan llena del lenguaje de Dios; en la lectura espiritual, o bien en otras instituciones u otros medios, que para dicho fin se organizan hoy y por todas partes con aprobación o por iniciativa de los Pastores de la Iglesia. Recuerden que a la lectura de la Sagrada Escritura debe acompañar la oración” (DV 25). Nosotros, en las páginas de nuestra revista nos hemos querido hacer eco de todo lo anterior, y os queremos ofrecer un método de lectura orante con la Palabra Dios. O si lo preferís queremos explicaros desde la espiritualidad de la Familia Paulina una forma de leer y orar con la Escritura que, casi podríamos decir, hunde sus raíces en la tradición judía: la Lectio Divina.

Un Poco de historia

Tal como apuntábamos más arriba, la lectura orante de la Palabra de Dios hunde sus raíces en la religión judía, en la oración en la sinagoga y en la meditación (haga) o relectura de la Biblia propia de los rabinos y sus discípulos.Del pueblo judío pasará a los primeros cristia-nos y a los Santos Padres, aunque habrá que esperar hasta el siglo III para una explicitación. No sabemos mucho de este período con respec-to a la lectura orante de la Biblia... recordemos que los cristianos están perseguidos.

Será Orígenes el primero en acuñar la expresión Lectio Divina (literalmente escribió: Theia anagnosis). El primer testimonio escrito de esta expresión se encuentra en la obra “Carta de Orígenes a Gregorio” (238 d.C.).La Lectio Divina se convirtió más tarde en la columna vertebral de la vida religiosa. En torno a la Palabra de Dios, escuchada, meditada y rezada surge y se organiza el monacato del desierto. Y está prescrita y organizada en las diversas Reglas del monacato occidental.La sistematización de la Lectio Divina en cuatro peldaños tuvo lugar en el siglo XII. Alrededor del año 1150 Guido II, abad de la Gran Cartuja, escribió una obra titulada ”La Scala Claustralium” (La escalera de los monjes). Esta obra, en realidad una larga carta, está dirigida al hermano Gervasio. Es allí donde aparece el primer iti-nerario sistemático de Lectio Divina, dividido en cuatro peldaños: lectura, meditación, oración y contemplación. A los cuales el autor le asigna una ilustración comestible: masticar, saborear y digerir la comida.

LECTIO DIVInAJOSE IGNACIO PEDREGOSA

25

“Exhórtese a todos los fieles, inc luidos los jóvenes , a acercarse a las Escrituras por medio de una “lectura orante” y asidua (cf. DV 25), en modo tal que el diálogo con Dios llegue a ser una realidad cotidiana del pueblo de Dios”

nuevo incremento y vigor a la Biblia dejando atrás los recelos antimodernistas.Pero el verdadero y definitivo retorno a la Biblia y a la práctica de la Lectio Divina aconteció, sobre todo, gracias a la celebración del Concilio Vaticano II. Hoy podemos decir que la lectura orante de la Palabra de Dios tiene plena carta de ciudadanía en nuestra Iglesia y es practicada por muchas co-munidades, aunque no todas las que quisiéramos.Una de las personas que vivió intensamente esos momentos de cambio y que bebió directamente del movimiento bíblico, fue sin duda el beato Santiago Alberione, fundador de la Familia Paulina.Ya en la noche que dividía el siglo XIX del XX, tuvo la intuición, siendo joven seminarista, de hacer algo por los hombres y mujeres del siglo XX. Se había empapado totalmente de la doctrina del Papa León XIII, que impulsaba a la lectura y al estudio de la Biblia. Conocía perfectamente la preocupa-ción de Pío X acerca de la falta de una base firme entre los creyentes católicos, pues les faltaba el alimento primordial de la eucaristía y la Biblia. Todo esto le llevó a fundar en 1914, la Familia Paulina, que tiene en el centro de su misión la Biblia.

Pero no quedó ahí la cosa, en 1924 funda la So-ciedad Bíblica Católica Internacional (SOBICAIN). Su anhelo no fue otro sino el que en cada familia hubiese un texto de la Sagrada Escritura.Aunque su amor por la Biblia no se limitó a su edición y difusión; a sus hijos e hijas nos quiso dejar un gran regalo, enraizado en una honda es-piritualidad bíblica: la hora diaria de adoración ante el Santísimo Sacramento, conocida comúnmente en la Familia Paulina como la Visita Eucarística. La cual está articulada en tres partes: lectura bíblica, revisión de vida y diálogo oracional. Al fin y al cabo, un método de lectura orante de la Palabra de Dios.

eL método verdad, camino y vida

Cuando comenzamos a caminar necesitamos de algún tipo de apoyo, la mano de nuestro padre o nuestra madre, gatear, el andador... Lo mismo nos ocurre al comenzar nuestro itinerario oracional con la Palabra de Dios: necesitamos de un método que nos ayude a caminar por esta senda de la oración.El método que queremos compartir con vosotros se llama verdad, camino y vida. No es algo nuevo, hunde sus raíces en la Lectio Divina, practicada en el seno de la Iglesia desde los primeros tiem-pos, como hemos podido apreciar en el recorrido histórico. Tanto es así que las tres partes de este método se corresponden con las tres partes tra-dicionales de la Lectio: Lectura, meditación, ora-

Es difícil precisar el momento concreto, pero acon-teció que en un determinado período de la historia se produjo una gran paradoja (algo fuera de lo normal), sucedió lo que Enzo Bianchi ha designado ya con expresión proverbial, como «el destierro de la Palabra de Dios». No vamos a entrar aquí en detalles, basta por ahora con que conozcamos el dato. Esta situación se prolongó prácticamente hasta el siglo XX.Podríamos decir que un discreto retorno a la Palabra comenzó con la Encíclica “Providentissimus Deus” (1893), de Leon XIII. A comienzos del siglo XX sur-gen nuevos brotes de amor a la Biblia y la liturgia. Ambos movimientos, el bíblico y el litúrgico, a partir de ahora irán de la mano. En Italia comienzan a brotar en 1902; en los años 30, en Alemania, apa-rece la Katolische Bibelwek de Stuttgart, después seguirán otros. Con la publicación de la Encíclica de Pío XII, “Divino Afflante Spiritu”, en 1943 se da un

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2 Verdad. Lectura

La pregunta a la que tenemos que responder en este primer momento es: ¿Qué dice el texto? Para ello es necesario una lectu-ra atenta, pausada, sin prisas, de la Palabra de Dios. Podemos leer el texto en voz alta de modo que participen más sentidos. Es el momento de «masticar» len-tamente la Palabra, de trillarla, desmenuzarla. Se hace impres-cindible que conozcamos lo me-jor posible el pasaje con el que estamos orando.

Por tanto, lo primero que ha-remos será enmarcar el pasaje dentro de su contexto; para ello leeremos la introducción al Libro correspondiente. En dicha intro-ducción, fíjate en el ambiente en el que se desarrolla, sobre todo el tiempo y lugar en que fue es-crito el Libro en cuestión, y a qué necesidad concreta del Pueblo de Israel o de la Iglesia hace frente. Lee también las notas a pie de página, te ayudarán a entender mejor el texto; por último, lee los textos paralelos. Todo ello te dará una visión global del pasaje bíblico. Vamos a continuar des-menuzando el texto, sin ninguna otra ayuda, mas que la de nues-tra Biblia. Yo aconsejo a partir de ahora contar con un lapiz, si es posible bicolor, para ir señalando o subrayando algunas palabras o frases del texto.

¿Es posible estructurar o dividir el pasaje en partes? Inténtalo.Si conoces algo acerca de los géneros literarios, piensa: ¿Den-tro de que género podemos en-marcarlo? ¿De qué modo debe-mos leerlo? ¿Cómo debemos entenderlo?¿Hay palabras o expresiones que se repitan? ¿Cuáles? Es posible que no haya palabras que se re-pitan, pero, ¿encontramos algún sinónimo?.

Si es que aparecen, ¿qué person-ajes intervienen? ¿qué hacen? ¿hablan? ¿permanecen calla-dos? ¿son destinatarios de una acción? ¿quién o quiénes son los protagonistas?

ción. Pero antes de comenzar a orar con la Palabra, a nuestro parecer son necesarios algunos preparativos: Busca un lugar tranquilo, donde nadie te mo-leste. Es importante hacer si-lencio. También es importante el ambiente. Puedes colocar una Biblia abierta, adornada con flo-res, acompañada por la luz de una vela, un icono... Es decir, prepara el lugar de modo que te invite y ayude a orar. Tómate tu tiempo, te aconsejo que dediques a la lectura oran-te una hora, pero si te resulta demasiado, puedes emplear media hora. Desde un punto de vista pedagógico y, sobre todo al principio, vamos a dividir cada momento de la Lectura orante en períodos de tiempo de veinte minutos cada uno, si es que le dedicamos una hora; si no es así, la mitad.

El paso de un momento a otro, sobre todo en la Lectura orante comunitaria, lo podemos seña-lar con un canto, una oración, una invocación... Nos podemos ayudar de una música de fondo, una canción, una imagen... si lo vemos conveniente.

Comienza invocando al Espíritu Santo. Que sea Él quien guíe tu itinerario. Recuerda que la Sagrada Escritura es Escritura inspirada. El Espíritu Santo es quien abre nuestro oídos, nues-tro entendimiento y nuestro co-razón a la Palabra que hoy se cumple ante nosotros. Él es el único que nos puede ayudar a entender el texto sagrado.

1 Invocación al Espíritu Santo

Esto puede hacerse de diversas maneras: un canto, una ora-ción, un momento de silencio. Lo importante es que nosotros seamos conscientes de su Pre-sencia y lo invoquemos para que nos haga comprender el pasaje que vamos a leer, y sepamos actualizarlo al hoy que estamos viviendo, a nuestras necesida-des concretas, a nuestro vivir cotidiano.

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Os recordamos que el Equipo de Pastoral y Formación de la Sociedad de San Pablo está dipuesto a ayudar a las comunidades, grupos, centros de animación, parroquias, etc, a través de las Jornadas Bíblicas en las que se profundiza, sobre todo, en el conocimiento de la Sagrada Escritura desde la Lectura Orante.

Si estás interesado, puedes ponerte en contacto con nosotros: vocaciones@sanpablo.es

Algunos lugares interesantes en la web, que os pueden ayudar son: http://www.discipulasdm.org/lectio_metodo.htmhttp://lectionautas.com/aprendiendo-lectio-divinahttp://www.celam.org/cebipal/index.php?name=lectioDivinahttp://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/biblia/lectio_divina.htmhttp://www.ocarm.org/es/

Además, todos los jueves, a las 17,30 horas, en la capilla de la Sede de la Universidad Pontificia Comillas, de Madrid, calle Alberto Aguilera 25, se comparte lectio divina, este año en torno al libro del Apocalipsis.

Y además, en Barcelona existen diversos grupos que también se reúnen para orar con la Palabra: puedes dirigirte a la Escuela de Formación Bíblica, Parroquia de la Madre de Dios de la Medalla Milagrosa, Concejo del Ciento, 110-118.

Intenta relacionar el pasaje con el resto del libro al que pertenece o con el resto de la Sagrada Escritura. Por úl-timo, pregúntate: ¿Cuál es la palabra o palabras funda-mentales del texto? Subráy-ala, acógela, tómala contigo.

3 Camino. Meditación

Pasamos a la segunda parte de nuestro itinerario. Ahora la pregunta sería: ¿Qué me dice el texto? En este mo-mento concreto de mi vida,

en las circunstancias per-sonales que estoy viviendo, en mi propio contexto parti-cular. Ha llegado la hora de «saborear» la Palabra. Tal vez alguna de estas pregun-tas te puedan ayudar en el desarrollo de esta segunda parte:

¿Qué me dice el texto acer-ca de mi situación actual? ¿Tiene algo que ver con mi vida? ¿Qué quiere decirme Dios con este pasaje?

¿Qué me dice el texto acer-ca del comportamiento de Jesús? ¿Qué tengo que cam-biar en mi vida para que ésta se asemeje más a la de Jesús?

¿Qué me exige, en concreto, esta Palabra? ¿Qué me pide hoy? Y luego, para que la Palabra te acompañe duran-te todo el día, puedes utilizar la llamada rumia. Es decir, toma esa palabra o frase fundamental del texto que tocó tu corazón en la prime-ra parte de nuestro itinera-rio, y ve repitiéndola durante tu jornada: mientras espe-ras el autobús, cuando vas caminando por la calle, en un atasco...

4 Vida. Oración

¿Qué le digo a Dios a partir del texto? De la escucha y la meditación de la Palabra es muy posible que surja de forma espontánea la oración de petición, súplica, alaban-za, acción de gracias, ofre-cimiento, adoración… Esa es tu respuesta a Dios desde la experiencia vivida en este momento de oración. Pero la respuesta a Dios no puede quedarse ahí únicamente, la oración ha de llevarnos al compromiso. Por ello es ne-cesario que asumas un com-promiso concreto enfavor de los hermanos y para que el Reino de Dios y su justicia sea cada vez más una reali-dad en nuestro mundo.

Jornadas bíbLicas

Sinopsis

Toda la vida la gente le ha di-cho a Rudy que no era lo sufi-

cientemente bueno, lo suficiente-mente listo ni lo suficientemente grande. Pero a pesar de ello, nada puede parar su sueño ¿imposible? de jugar en el equipo de Nôtre Dame. Desde que era niño, Rudy está determinado a ingresar en los “Fighting Irish”, pero su familia se ríe de sus ambiciones, ellos saben que Rudy acabará trabajando en la fábrica de acero como su pa-dre y el resto de sus hermanos... Y después de cuatro años en el Instituto, acaba haciendo exac-tamente eso. Pero algunos sue-ños no mueren; y Rudy luchará para conseguir el suyo cueste lo que cueste. Una historia increíble

basada en hechos reales que se convierte en un testamento inol-vidable del poder de los sueños y del triunfo del hombre común.

Ficha técnica

Año de producción: 1993. Este año fue el de películas

como “La lista de Schindler”, “El piano”, “Philadelphia”, “En el nombre del padre”, “El fugitivo” o “Señora Doubfire”. El Oscar a la mejor película fue para “La lista de Schindler” y también a la me-jor banda sonora, que es lo que a nosotros nos ocupa hoy.Duración: 116 minutos.Nacionalidad: Estados Unidos.Productora: TriStar Pictures.Género: Drama, deporte.Director: David Anspaugh. Naci-

do en Decatur, Indiana, el 24 de septiembre de 1946, trabajó como productor asociado en películas para televisión, lo que le permi-tió producir y dirigir la serie “Hill Street Blues” (Canción triste de Hill Street) ganando dos premios Emmy. Continuó realizando series como “Corrupción en Miami”, antes de acometer su primer largome-traje “Hoosiers”, en 1986 por el cual obtuvo dos nominaciones a los Oscar (por el mejor actor de reparto y por la banda sonora). Otras películas suyas son: “Jóve-nes ardientes” (1988), “Mujeres bajo la luna” (1995), “El partido de sus vidas” (2005).

Guión: Angelo Pizzo. Colabora-dor habitual de David Anspaugh después de conocerse en la uni-

Rudy, el espíritu de latenacidad

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CInE Y VALORES HUMAnOSEQUIPO DE PASTORAL Y FORMACIÓN

versidad de Indiana, se ha espe-cializado en guiones adaptados de historias deportivas reales. Su-yos son los guiones de “Hoosiers” (1986) y “El partido de sus vidas” (2005).

Música: Jerry Goldsmith. Naci-do en Pasadena el 10 de febrero de 1929 y fallecido el 21 de julio de 2004 en Beverly Hills, es uno de los mejores compositores de música para cine que ha existido nunca. Goldsmith aprendió a tocar el piano a la edad de seis años.A los catorce estudió composi-ción, teoría y contrapunto con los maestros Jakob Gimpel y Mario Castelnuovo-Tedesco. Goldsmi-th, ingresó en la Universidad del Sur de California, con el maestro Miklós Rózsa. Su música no se queda estancada en ningún estilo, sino que se adapta a las exigencias de la película. Solamente ha con-seguido un Oscar, por “La Profecía” (1976), de las 17 nominaciones que ha obtenido.

Otras películas para las que ha realizado la banda sonora son: “El planeta de los simios” (1967), “Patton” (1970), “Alien, el octavo pasajero” (1979), “Acorralado” (1982), “Gremlins” (1983), “Ho-osiers” (1986), “La Confidential” (1997) o “La Momia” (1999), entre otras muchas.

Fotografía: Oliver Wood. Director de fotografía, de películas como “Sister Act 2, de vuelta al con-vento” (1993), “El caso Bourne” (2002) o “Los cuatro fantásticos” (2005).

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En la foto, Sean Astin, el actor que en-carnó en su día al personaje de Rudy.

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TE ENSEÑARÉ ELFERVORXavier Quinzà LleóEl autor nos conduce al sentido originaldel fervor, que es fruto de un profundoacontecimiento interior que, la mayo-ría de las veces, es imposible traduciren palabras. La renovación espiritualde nuestro tiempo debe venir de un ma-yor fervor, para alcanzar la experien-cia apasionada por Dios, que es el cora-zón del mundo.160 páginas - P.V.P. 10,20

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Ficha de Preguntas

Durante el visionado

Mira la película con visión crítica para descifrar lo que el director, el guionista y los actores quieren transmitir con la historia.

Cómo se presentan los personajes en la película.

Fíjate en los sitios y escenarios que aparecen.

Presta atención a la música, cómo inunda la película y realza aquellos momentos interesantes de la historia.

Observa el personaje de Rudy, cómo afronta sus limita-ciones para luchar por su sueño.

Después del visionado

¿Qué aportan los personajes secundarios al protagonista, y a quien destacarías?

¿Qué decorado o paisaje te ha llamado la atención?

¿Qué momento de la historia destacarías, en virtud de la música?

¿Qué escena te ha gustado más y por qué?

¿Qué valores aporta el personaje de Rudy?

Reparto:- Sean Astin/ Rudy. Ha interpre-tado, entre otras, las siguientes películas: “Los Goonies” (1985”, “En honor a la verdad” (1996) y la trilogía de “El Señor de los anillos” (2001, 2002, 2003), interpretando al hobbit Sam.

- Ned Beatty/ padre. Ha trabaja-do en los siguientes films: “Su-perman” (1978), “Superman II” (1980) y “Causa justa” (1995).- Charles S. Dutton/ conserje. Como actor, ha interpretado, entre

otras, las películas que a continua-ción se citan: “Alien 3” (1992), “Tiempo de matar” (1996), “D-Tox” (2002) y “Gothika” (2003).- Robert Prosky/ sacerdote. Apa-rece como actor en las siguientes películas: “Gremlins 2” (1990), “El último gran héroe” (1993), “Sra.Doubfire” (1993), “Pena de muer-te” (1995) y “D-Tox” (2002).- Jon Favreau/ amigo. Como ac-tor, ha trabajado en los siguientes largos: “Daredevil” (2003), “Wim-bledon, el amor está en juego” (2005) y “Iron Man 2” (2010).- Jason Miller/ entrenador. Ha in-terpretado entre otras, las siguien-tes películas: “El exorcista” (1973) y “Operación soldados de juguete” (1991).

Valores humanos

Los valores humanos que podría-mos destacar en esta historia se-rían la perseverancia, la supera-ción personal y la constancia que tiene Rudy para vencer sus limita-ciones y la falta de apoyo de sus familiares y amigos.

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«San Pablo vivo hoy»La Familia Paulina

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En la verdad

Si Facebook fuera un país, sería el tercero del mundo. Los más de 500 millones de usuarios que a día de hoy tiene la red social más importante (en número y en influencia) acuden a esta nueva plaza

pública, que está a medio camino entre lo real y lo virtual, para encontrarse, charlar, contarse unos a otros ‘qué están haciendo’ o ‘qué están pensan-do’, compartir imágenes, vídeos, recursos… e in-formación. La demandan y la ofertan, elevando al extremo el concepto de Internet como el medio de comunicación de masas más democrático (donde cualquiera puede ser emisor y receptor) y dando lugar a la segunda etapa de Internet, la Web 2.0, definida por la participación y la reciprocidad en la

María Gómez

universalidady desde la

LA PREnSA CATÓLICA En LA ERA DIGITAL

generación de los contenidos de la Red. En realidad, esos 500 millones de internautas no de-jan de ser poco más del 8% del total de la población mundial y la mitad de ésta ni siquiera tiene acceso a un ordenador… Y es cierto: las nuevas tecnologías, por el hecho de serlo, no garantizan que seamos más sabios. Pero así se está configurando el ámbito de la comunicación. Empieza a corregirse la máxima “Lo que no sale en los medios no existe” con una nueva formulación: “Lo que no está en Internet no existe”. ¿Están sabiendo aprovechar los medios de comuni-cación estas nuevas posibilidades, estas nuevas vías de llegar a la audiencia? Y, más interesante en este momento: ¿cómo están enfrentando esta situación los medios de comunicación católicos? ¿Cómo se está

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¿Qué es lo que define la catolicidad de un medio de co-municación, que dice o pretende serlo? A esta pregunta ha intentado responder un reciente Congreso celebra-do en Roma, con la asistencia de más de doscientos pe-riodistas, directores de medios, sacerdotes y obispos

comportando la prensa católica en el panorama digital? ¿Qué retos principales se le presenta, y qué respuestas está adoptando?

¿qué es la catolicidad?

Para abordar esta situación, más de 200 periodistas, directores de medios, obispos, sacerdotes, religiosos, laicos, profesores y expertos de 85 países se dieron cita el pasado mes de octubre en Roma para participar en el primer Congreso Mundial de Prensa Ca-tólica, organizado por el Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales (PCCS), en el marco de la estrategia vaticana para trazar una serie de pautas comunes para la comunicación católica. Desde hace años, el dicasterio ha reflejado su preocupación en forma de diver-sos encuentros: representantes de cadenas de televisión (2006), delegados de emisoras de radio (2008), facultades de Comunica-ción de universidades católicas (2008) y obispos presidentes de las comisiones episcopales de Co-municación (2009). En este más

reciente de Roma, se convocaba a la prensa escrita, pero con un interés especial por la prensa di-gital. El denominador común de todas estas citas es encontrar una respuesta para una pregunta previa y de fondo: qué es lo que define la “catolicidad” de un medio de comunicación que dice o pre-tende serlo. Intentó sintetizarlo en siete puntos el obispo francés de Coutances y Avranches, Sta-nislas Lalanne, hombre de amplia experiencia en los medios (entre otros cargos, director del centro de prensa de la JMJ París 1997, portavoz de la Conferencia de Obispos de Francia entre 1999 y 2001 y secretario general entre 2001 y 2007). Éste manifestó su deseo de que la prensa católica sea “signo de esperanza” y “ple-namente libre”, que “muestre su diferencia”, “nos haga pensar” y “abra y construya debate”, que “sea católica al 100%” (“por una parte, católica en el sentido de fi-delidad a la fe católica recibida de los apóstoles, y por otra, universal, es decir, que se dirija a todos y se abra al mundo, más allá del círculo

de los católicos”) y que “aproveche la oportunidad de Internet”.

solidaridad y ética

La intervención de Lalanne destaca por su claridad y su concreción. El obispo apuesta por una pren-sa que “ponga en relieve lo que otros medios muestran poco: la solidaridad, la ética y la moral, los valores educativos o la atención a las soledades de nuestro tiem-po”, desempeñando un papel de “formadora permanente sobre la actualidad”, atenta a la opinión pública, sus evoluciones y sínto-mas… Como ejemplo, el prelado citó al diario ‘La Croix’, “un perió-dico de referencia para un buen número de cristianos y también de no cristianos. Constituye una referencia esencial, día tras día para desentrañar la actualidad. Creo que también así los valores del Evangelio pueden hacerse en-tender en el vasto concierto de voces múltiples e indiferenciadas de nuestros países europeos”.

En el último punto, Lalanne puso

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En las imágenes, los partici-pantes del Congreso de Periodistas católi-cos; a la izquierda, Monseñor Claudio M. Celli quien hizo una en-riquecedora aportación a este En-cuentro.

el dedo en una de las llagas más preocupantes: “¿Internet va a con-tribuir al declive de la prensa escri-ta? ¿Va a desanimar a los lectores que permanecen fieles a la pren-sa católica y los va a enviar a los blogs y las redes sociales?”. “Es-pero –continuaba– que la prensa católica aproveche esta capacidad de despliegue extraordinario para la difusión del pensamiento y de la cultura cristiana. El papel de la prensa es esencial para la cultura: ¡los habitantes de los países occi-dentales se han convertido en las últimas décadas en ‘analfabetos’ religiosos!”.

comunión y verdad

A través de las distintas ponencias, mesas redondas y grupos de tra-bajo, los congresistas expresaron sus inquietudes e impresiones y presentaron las distintas iniciativas que llevan a cabo. En el mundo de habla hispana, sin duda es un modelo el de Zenit (www.zenit.org), agencia de noticias sin ánimo de lucro, nacida en 1997 y forma-da por profesionales y voluntarios que tienen como objetivo informar, “con la máxima profesionalidad y fidelidad a la verdad” y a través de las nuevas tecnologías, sobre “el mundo visto desde Roma”, es decir, la actualidad a través de las actividades y mensajes del Papa y de la Santa Sede. Su director editorial, el laico español Jesús Colina, tituló su ponencia con el sugerente “¿Iglesia 2.0?”.

“Internet ha cambiado radicalmen-te en los últimos seis años y quizá en la prensa católica no nos hemos enterado”, comenzó, lamentando la falta de interactividad en los sitios web de la Santa Sede, dió-cesis, semanarios y agencias (“la mía es el peor ejemplo”, bromeó). Colina intentó explicar que el mo-delo de producción de contenidos que propicia esa interactividad en-tre el medio de comunicación y el usuario se basa en “un concepto implícito: el relativismo. (…) Dado que no hay una verdad, entonces lo que diga uno u otro es indife-rente. Lo único que cuenta es, en-tonces, que cada quien tenga su espacio para contar sus problemas (como una válvula de escape) y un editor que se enriquece sin tener

que pagar periodistas o producto-res de contenidos”.

Como solución para adoptar el modelo de interactividad, a pesar de este “margen de riesgo relati-vista”, el periodista propone su-perar el “pecado original”, que es “hablar mucho y escuchar poco a la Red”; de lo contrario, “la evan-gelización misma quedará grave-mente condicionada”. Porque, más allá de los medios de comunica-ción, Colina establece una relación directa entre Internet y la propia Iglesia: “Si la Iglesia, al comu-nicar en Internet, lo hace como Iglesia-comunión, si su vida de ‘comunidad’ se refleja en la web, entonces también será capaz de hacer ‘comunidad’ en Internet.Para el navegante que visite sus servicios, se convertirá en algo casi evidente entrar en contacto con la realidad más cercana de la diócesis o que más le interese, que puede ser su misma parroquia, o el servicio de Cáritas, o el coro interdiocesano, si es apasionado de la música. Cuando una Iglesia comunica en Internet como comu-nión, en comunidad, la realidad deja de convertirse en virtual para hacerse algo muy real, pues pone en contacto al navegante con la vida real de la diócesis, parroquia o comunidad. Y entonces es cuan-do se logra la mayor interactivi-

dad, cuando de la realidad virtual se pasa al ‘encuentro’, que es lo que al fin y al cabo cambia la vida de las personas”.

A modo de conclusiones, el presi-dente del PCCS, el arzobispo ita-liano Claudio M. Celli, recogió las principales ideas expresadas en esas cuatro jornadas de trabajo. Como primera reflexión, una “pre-gunta fundamental: ¿qué visión tenemos de la Iglesia?”. De ella derivará el modo en que la Igle-sia comunica: “[Ésta] no es una Iglesia monolítica, cerrada en sí misma, dedicada a defenderse a sí misma, sino una Iglesia que, como su Señor, ama al hombre; una Iglesia que se sitúa en el ca-mino del hombre para compren-der, para acompañar”.“Es necesario un esfuerzo de aprendizaje sobre la forma en que la Iglesia se sitúa en el mundo. Se deberá ayudar a la sociedad a entender que el anuncio de la verdad es un servicio que la Igle-sia ofrece a la sociedad abriendo nuevos horizontes de futuro, de grandeza y de dignidad”, siguió Celli, quien, retomando las pala-bras del obispo Lalanne sobre la fidelidad, apuntó: “Tal misión de verdad es fundamental”. Bajando más al terreno de lo tratado por los congresistas, Celli reconoce que la Iglesia se mueve a “distin-

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“Ésta no es una Iglesia monolíti-ca, cerrada en sí misma, dedicada a defenderse a sí misma, sino una Iglesia que, como su Señor, ama al hombre; que se sitúa en el cami-no del hombre para comprender, para acompañar” (Claudio M. Celli)

ta velocidad” en el campo de las comunicaciones, pero exhortó: “La Iglesia no puede retrasarse”. Uno de los desafíos es el del lenguaje y cómo adaptar el específico y cada vez menos comprensible para la sociedad lenguaje de la Iglesia a los ritmos y recursos de los nue-vos tiempos. Hasta tal punto pre-ocupa, que el arzobispo anunció que será el tema de la Plenaria del PCCS del año que viene. “Por-que es innegable: es uno de los aspectos más delicados, nuestro hablar con el hombre y la mujer de hoy”, insistió.

suscitar esperanza

Otro desafío: “Para hablar, debo conocer, comprender lo que está en el corazón del hombre de hoy”. Y, de nuevo, el deseo: “Nuestra prensa debe suscitar esperanza. Éste es uno de los temas fuertes para nuestra reflexión. Creo que ésta es una grave enfermedad que todos sufrimos hoy, y es que no sabemos esperar. La Iglesia, en su caminar con el hombre, debe ayudarle a esperar”. Por último, ¿cómo será el futuro de la prensa en la era digital? Para Celli, “sin duda la dimensión digi-tal crecerá todavía más, pero las nuevas tecnologías no eliminarán la prensa escrita. Debemos ver cómo podremos evitar tensiones y en qué medidas se llegará a una complementariedad entre los dos aspectos”, enunció. Formar e in-formar. Son dos finalidades irre-nunciables de cualquier tipo de

zación e indiferencia hacia lo re-ligioso por parte de la sociedad; hacerse un hueco en un periodis-mo donde crecen la frivolización de los contenidos, el amarillismo, el análisis rápido y superfluo, el aquí y ahora, el usar y tirar… El periodismo católico tiene mu-chos frentes abiertos y carece del tiempo necesario para pararse a reflexionar y adoptar las “mejores directrices”; como les ocurre a los demás, se ve arrastrado por un progreso tecnológico que no se detiene y que está modificando incluso el modo de relacionarse entre las personas. Son muchas las iniciativas eclesiales que están intentando actualizarse, si bien, como reconoce Celli, todos no van a la misma velocidad. Como sue-le ocurrir, las pautas están deter-minadas, en gran medida, por el interés y el ritmo que marquen los jerarcas, la Santa Sede y los obispos de cada país y diócesis. Pero sobre todos los laicos tienen ante sí una oportunidad maravi-llosa de seguir respondiendo a su vocación de ser sal y luz.

prensa, y de modo particular, de una prensa decididamen-te católica que, además, ha de conjugar lo anterior con el anuncio de Cristo y con-tribuir a que la sociedad se abra a Dios.

dejarle espacio a Dios

Lo dijo el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Esta-do vaticano, quien invitó a los profesionales a mostrar “la relación entre fe y razón en una relación respetuosa y clara con las diferentes posiciones presentes en el debate público”. “Sin caer en la tentación de dar espacio a intere-ses partidistas, políticos, econó-micos o incluso religiosos, para servir únicamente a la verdad”. Lo cual es una gran tarea, “si se tiene en cuenta la pobreza de recursos disponibles. Pero precisamente esta condición forma parte del estilo con el que el Reino de Dios se abre camino. Vuestra rique-za y fuerza está en el Evangelio que comunicáis, vuestro apoyo es Dios. Dejadle espacio”.

Benedicto XVI, al recibir a los con-gresistas al término del encuentro, les indicó: “Vuestra tarea es ayu-dar al hombre contemporáneo a orientarse a Cristo” y “mantener encendida en el mundo la llama de la esperanza”. Profesionalidad, recursos (humanos y técnicos), formación; el rol de las empresas editoras, la progresiva seculari-

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Rosario F. EspositoEL P. ALbERIOnE Y EL TRAbAJO

La genial innovación del P. Alberione con-siste en la puesta al día del “Ora et labora”,que se amplía efectivamente al “ora per la-borem”. El trabajo, en sus diversas manifes-taciones se eleva de este modo a la digni-dad de oración, realizado con la mente, con los brazos e incluso con callos en las manos.

En los primeros 44 años de la historia paulina la identificación entre el tí-tulo de Jesús Maestro y el misterio de la Transfi-

guración era consagrada también en el plano jurídico y litúrgico: la fiesta del Divino Maestro se cele-braba el 6 de agosto, el día de la Transfiguración de Jesús.

El P. Alberione aplicó institucional-mente la «Ley de la Transfigura-ción» a la actividad trabajadora. En la Familia Paulina el trabajo ocupa un lugar relevante, tanto desde el punto de vista teórico como desde el estadístico, es de-cir, en relación con las horas que se dedican explícitamente. A este asunto, en 1954 el beato Alberio-ne ha dedicado el escrito Il lavoro nelle famiglie paoline que en la sección «opúsculos» de Carissi-mi in san Paolo (CISP) ocupa las páginas 1025-1096. Fundamen-tado en la Biblia, el Magisterio y

la sociología, desde su punto de vista, cualquier expresión de la actividad humana se modela se-gún el ejemplo de Jesús artesano de Nazaret, y según san Pablo que fabricaba tiendas. El trabajo constituye así un camino privile-giado para la santificación, para la independencia personal y para la promoción humana.

El trabajo realiza positivamente el voto de pobreza porque procura el mantenimiento de las perso-nas y de las obras apostólicas. El recurrir a la beneficencia se considera un hecho extremo, al que hay que acudir sólo cuando se llevan a cabo obras extraordi-narias. Ninguno de los argumen-tos aportados por el P. Alberione es tan actual e innovador como este. Ha tratado este tema en la obra La teologia della pubblicistica secondo l´insegnamento di d. G. Alberione (Roma, EP, 19722, pp. 84-105ss.

Para ofrecer una idea completa del asunto que nos ocupa, parto de dos perlas del P. Alberione. Estas dos perlas pertenecen al área de la psicología y no harían un mal papel junto a las más inspiradas páginas de Prudhon, Marx Engels, y menos aún, de León XIII, José Toniolo y Giorgio La Pira, pues conservan siempre una calurosa dimensión espiritual. Se toman del opúsculo citado.

el misterio de Cristo obrero

La primera se encuentra en el CISP (p. 1079). Salta a la vista su fuerza y su originalidad: «El Padre Celestial, teniendo com-pasión de la humanidad errante, quiso restaurar todo en Cristo. Comenzó por la familia y el tra-bajo. El misterio de Cristo-obrero me parece más profundo que el misterio de la Pasión y Muerte. ¡Cuántos años trabajando como carpintero! ¿Nonne hic est fabri

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filius? ¿Nonne hic est faber? ¿No es este el hijo del carpintero? ¿No es él un carpintero?. El sudor de su frente en Nazaret no era menos redentor que el sudor de sangre en Getsemaní. Lo que Jesús hizo es una enseñanza más clara que lo que predicó».

La otra perla (CISP, 1083-1084) ofrece a la pastoral un apoyo de inestimable valor, porque lleva triunfalmente las manos enca-llecidas al paraíso. Dice el Primer Maestro: «Jesucristo muestra en el cielo al Padre sus manos no sólo traspasadas por los clavos, sino también encallecidas a causa de los instrumentos del trabajo que ha usado asiduamente con aque-llas intenciones sublimes (reden-toras). Y nosotros acogemos sus intenciones: en un divinae illius intentionis, qua ipse in terris lau-des Deo persolvisti , o sea, (la divi-na intención con la que tú cuando estabas en la tierra dirigiste las

alabanzas a Dios), cada vez que vamos al apostolado» (cf también Prediche, vol. I, 1953, p. 120).Las horas de trabajo manual en la Familia Paulina se llaman «horas de apostolado». Esta realidad se inspira en el Ora et labora (reza y trabaja) de la Regla de san Beni-to, pero el beato Alberione aplica al trabajo las categorías de co-municación y la Ley de la Trans-figuración, hasta el punto que la Regla benedictina efectivamente se modifica y se prolonga; y puede leerse Ora per laborem, esto es: Reza a través del trabajo, porque el trabajo es ya oración.

Bajo esta perspectiva, el Fundador insistía en las tres modalidades de oración. La primera es la que se hace con los labios (oración oral o vocal), la segunda es la que se hace mediante la reflexión con-templativa (oración mental), y la tercera, que él llama oración vital, es la que se hace con los brazos,

con el endurecimiento de las ye-mas de los dedos de las manos. No se trata de una piadosa exagera-ción, sino de una conexión riguro-sa, fundada en la teoría dogmática de la «communicatio idiomatum» (reciprocidad de los lenguajes), de modo que las obras que realiza Jesús verdadero hombre asumen el mismo valor que las realizadas por Jesús verdadero Dios. Las dos naturalezas de Cristo no se pue-den separar, porque confluyen en la misma y única persona.

Por consiguiente: se reza en la iglesia, en la habitación, y también en la actividad, en las naves in-dustriales, en los aeropuertos, en medio del tráfico ensordecedor de las autopistas. Dios está omnipre-sente y nos escucha en cualquier lugar. El P. Alberione aplica conti-nuamente esta estructura teológi-ca: coloca la actividad manual en relación con la desarrollada por Jesús en la carpintería de Nazaret

Las manos encallecidas

van al cielo

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todas las 24 horas de la jorna-da, orientando hacia el Sagrario –como solía decir él– la jornada desde por la mañana:

“El apostolado técnico es adorar a Jesucristo niño, joven y hombre hecho en la carpintería en su tra-bajo, cuando cepillaba, serraba, clavaba los clavos, hacía pequeños muebles y pequeños aperos, que vendían después y servían para la pequeña Familia. Adorarlo, porque allí Jesús daba una gran lección: la del ejemplo.

Adorarlo porque es el Hijo de Dios encarnado, que a pesar de haber creado todas las riquezas que existen, se ganaba el pan y hacía un trabajo útil. Adorarlo porque Jesús redimía el mundo tanto en aquel trabajo de carpintero, como cuando predicaba el Evangelio, o cuando moría en la cruz, escuela de ejemplo y al mismo tiempo de redención. Y el apóstol hace su apostolado cuando usa la pluma igual que cuando pone en marcha la máquina para imprimir lo que ha sido compuesto. Adorar a Jesús que ha querido dar a los hombres ejemplo de trabajo y ha querido, con el trabajo, redimir a la huma-nidad, especialmente redimir al mismo trabajo” (Id, vol. III, 1955, pp. 117-118).

el trabajo como obra de redención

Observado desde esta perspectiva, el trabajo material-industrial, el redaccional-cultural y el propagan-dístico-comercial, todas las veces que las circunstancias lo permi-tían, se intercalaba de jaculatorias e incluso con el rezo del Rosario. Si las máquinas hacían más ruido era necesario alzar más la voz, pero el impedimento se supera-ba. Además todos saben que las máquinas de escribir metían más ruido que los ordenadores de hoy.

En otra ocasión el Fundador desa-rrolló el concepto de trabajo como obra de redención, siempre en unión con la obra de Jesús: «No-sotros, dice él en una plática, no hemos entendido lo que significa la redención. No hemos entendido que nuestro oficio, o sea, nuestro apostolado es predicar a Jesucristo

y de este modo acompañar a la Iglesia, más aún, ser parte de la Iglesia, que nos ha confiado esta misión. No hemos entendido bien qué méritos sacamos cada día de aquellas horas de apostolado, del trabajo técnico” (Id, vol. I, 119).

Y refiriéndose a la obra específica de la propaganda individual de libros, remachaba esta doctrina: «Es una obra de contacto con las almas. Es un trabajo que os hará sentir cada vez más que no sois vendedores de libros sino que sois almas de apostolado, que miráis a las almas, que el fruto al que as-piráis es doble: la gloria de Dios y la paz de los hombres» (Prediche, vol. V, p. 6).

Otras veces la actividad comuni-cativa se relaciona con la realidad del martirio, del testimonio de una vida totalmente consagrada al Se-ñor: «Existe el martirio por la fe y existe el martirio por la caridad. Ahora bien, el trabajo de aposto-lado es ejercicio de dar caridad. Fuerzas vírgenes, consumadas para dar la verdad a las almas, merecen la corona del mártir, la aureola del doctor. Es ofrecer nuestro cuerpo a Dios en el sen-tido de san Pablo... (Rom 12,1).

El trabajo de apostolado es un re-galo de adoración, es una acción que nace de la oración y forma parte de ella; es un dar a Dios también las fuerzas físicas e inte-lectuales como adoración y cum-plimiento de su voluntad para el apostolado. Es bueno agotarse en ayunos, pero mejor agotarse en el trabajo apostólico, en el apos-tolado... El trabajo es medio de redención y santificación: como penitencia y como preservación ante las tentaciones y el pecado. A quien es tentado, mejor que la disciplina se le aconseja el traba-jo de apostolado... El trabajo es redentor para los hermanos, pero redime también al mismo trabaja-dor. El trabajo nos acerca a Dios...

Cuantas más potencias se ponen en acción rectamente, tanto mejor corresponde a la voluntad de Dios quien las ha puesto, tanto mejor sirve al Señor... Es por tanto, el trabajo, parte del primer manda-miento” (CISP, pp.1081; cf. tam-

(momento histórico-sociológico), con su obra de anunciador de la Buena Nueva (momento kerig-mático), y con su sacrificio en la pasión, muerte y resurrección (momento soteriológico). al servicio de Dios, todaslas facultades humanas

En la enseñanza del P. Alberione la actividad del trabajo constituye un excelente criterio interpretativo del misterio de la Encarnación y de la Redención. En una de sus pláticas decía: “La vida de Jesús fue una vida de trabajo... Lo que nos hace más semejantes a Dios es ser activos. Dios es acto purísimo; los que han estudiado pueden también con su estudio referirse a esto, pero quien no ha estudiado puede ser ilumi-nado por Dios y entenderlo incluso mejor.

Si Dios nos ha dado las facultades: la inteligencia, las fuerzas corpo-rales, la voluntad, el sentimien-to, él espera que las pongamos a trabajar. Es decir, que nosotros nos comprometamos en conocerlo, amarlo, servirlo y ejerzamos las fuerzas del cuerpo: todo. El peca-do más común es el de no poner al servicio de Dios todas las facul-tades, especialmente la mente. Tenemos, por tanto, que pensar que si queremos seguir a Jesús y ser cristianos, tenemos que amar el trabajo. El ser cristianos no nos dispensa de la obligación que tie-nen todos los hombres de trabajar. Más aún, nuestro Señor Jesucristo ha ennoblecido el trabajo y lo ha convertido en medio de apostolado y de redención... No tiene más mérito el que usa la pala que el que usa la pluma. Es el compromiso que cada uno pone en las cosas que se hacen por voluntad de Dios y que son determinadas por los superiores. Pero que cada uno empeñe todas sus fuerzas, incluso físicas, porque el Señor no nos ha dado sólo el alma...” (Prediche del Rev. Primo Maestro, Roma, vol IV, 1957, pp. 21-22).

El Fundador identifica, además, el trabajo del apostolado con la ado-ración eucarística, de modo que se pueden transformar en adoración

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al servicio de la liturgia

PíAs DIsCíPuLAs DEL DIVINO MAEsTRO

El espíritu pastoral consiste en comunicar a las almas a Jesucristo, tal como él mismo se definió: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida». Hay, pues, que elevar y santificar al hombre entero: mente, sentimiento y voluntad, con el dogma, la moral y el culto.

(Beato S. Alberione)

bién R. Galimberti, La povertà e la religiosa d́´oggi, Alba, 1959, pp. 104-105). Colocar al trabajo en la base de la Redención, preserva a la Familia Paulina del peligro de caer en la dimensión industrial y comercial. Dijo el beato Alberione en una conferencia en 1960 a las Hijas de San Pablo:

“Para vivir vuestra vocación, es necesario que os integréis en la Iglesia y a través de la Iglesia, en Jesucristo. Entonces vuestra vocación se ennoblece. Pero si os alejáis del camino trazado, corréis el peligro de convertiros en co-merciantes. Jesucristo trabajaba como carpintero, pero hacía sobre todo de Redentor. Y tanto redi-mía cuando cepillaba (la madera), como cuando estaba en la cruz. Es necesario hacer que el trabajo apostólico sea redentor y, de este modo, mantenerse en el verdade-ro espíritu, no degradarse. Existe a veces la tentación de querer hacer lo mejor, pero queriendo lo mejor se pierde lo esencial” (Primer con-greso catequístico paulino, Roma, 1960, p. 6).

El P. Alberione durante un cur-so de ejercicios, predicados a los miembros de la Sociedad de San Pablo en la Casa del Divino Maestro de Ariccia (abril de 1960) acentuó fuertemente la excelencia de esta realidad: “El trabajo de los paulinos, sacerdote o discí-pulo (hermano laico) tiene una característica: Jesucristo traba-jando hacía pequeñas cosas, san Pablo fabricaba tiendas militares llamadas cilicios; por el contrario los paulinos ejercen directamente el apostolado ofreciendo con su trabajo la verdad, ejerciendo el oficio de predicador, convertido en misionero y aprobado por la Iglesia. San Pablo alaba maxime qui laborant in verbo et doctrina (1Tim 5,17). Con el apostolado se incrementan las vocaciones, se pagan las casas y más máquinas, se consigue el paraíso” (Ut per-fectus sit homo Dei, vol. I, Roma, 1960, p. 457). Frecuentemente en las predicaciones y en las con-versaciones espirituales repetía un eslogan muy querido por su paisano, san José Benito Cotto-lengo: –Trabajemos, trabajemos. Descansaremos en el Paraíso.

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Mario Herrera RamírezTESTIGOS DE LA PRIMERA HORA

“A los jóvenes les diría que se enamoren de Cristo”

Agapito Aliende

El P. Agapito Aliende Palma nació en Barcina de los Montes, Burgos, el 5 de febrero de 1940. Hizo su primera profesión en 1961 y se ordenó en 1967. Actualmente tiene como misión dar estabilidad y apoyo a la

comunidad de Protasio Gómez de Madrid; colaborar en la Secretaría de Pastoral y Formación, en la revista “Cooperador Paulino”, en la revista interna “Alégrate” y acompañar el grupo de “cooperadores paulinos”.

En la comunidad donde se encuentra actual-mente, ¿cuál es su cometido?

En primer lugar, trato de prestar mi colaboración con el fin de que la comunidad se afiance en sí mis-ma, forme un núcleo unido, familiar, responsable... Creo que mi trabajo fundamental es mi presencia, pondré para ello todos los medios a mi alcance y procuraré llevar a la práctica aquello en lo que creo.

¿Dónde ingresó y cómo fueron sus inicios en la congregación?

Ingresé en Zalla, pero primeramente estuve en Bujedo (Burgos), como estudiante externo, en San Juan Bautista, con los Hermanos de La Salle. Ellos daban clase gratuita a los adolescentes y jóvenes de los pueblos. Mis padres se dieron cuenta de que el maestro que teníamos en Barcina de los Montes (Burgos) no nos formaba bien y decidieron llevarme a Bujedo. Como no pertenecíamos al colegio, me fui a una pensión, donde hacía mi vida fuera de las horas de clase. Estuve tres años. Transcurrido ese tiempo, me preguntaron si quería ser hermano de la Salle; yo dije que sí, de modo que me llevaron a examinar a Burgos. Y decidieron que sí, que estaba preparado para ingresar en septiembre.

Pero durante las vacaciones de verano llegó un ejemplar de la revista “Cooperador paulino” al sa-cerdote del pueblo, que les dijo a mis padres que en Zalla (Vizcaya) había unos religiosos de Hermanos y Sacerdotes que se dedicaban a los medios de comu-nicación social. Entonces mis padres me preguntaron: ¿Tú, adónde quieres ir? “Bueno, pues adonde ustedes

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En esta entrevis-ta, el P. Agapito Aliende, paulino ya veterano, nos cuenta cómo fue-ron sus comienzos en San Pablo y cómo ha transcu-rrido su vida en un mano a mano entre tipos de le-tras, máquinas offset, películas, libros... Y Dios.

quieran, a mí me da lo mismo”, les contesté. Ellos prefirieron lle-varme a Zalla. Estuve hablando un rato con el P. Carmelo (que en paz descanse), después él habló con mis padres, y concluyeron que a finales de septiembre ingresaría con los Paulinos. Entonces tenía once años.

Toda una vida con los Pauli-nos. Decidió ser paulino, en un principio, porque sus padres estaban convencidos de que…

Sí, bueno, a mí me gustaba la parroquia, la catequesis... Me acuerdo que iba a jugar con los amigos, o estaba trabajando con mis padres en el campo, y cuando oía la campana para la Eucaristía de la mañana o el rosario por la tarde, dejaba de jugar o de tra-bajar para asistir a los actos reli-giosos mientras la mayor parte de los chavales se quedaban jugando.

¿Qué ha significado para usted esta entrega, todo este tiem-po dentro de la Congregación, desde los once años?

Para mí lo ha significado todo; siempre he dicho que si volviese a nacer -teniendo el conocimiento que tengo de la Sociedad de San Pablo-, volvería a hacerme pau-lino. Así como al principio podría haber entrado tanto en un sitio

como en otro, ahora me decidiría nuevamente por los Paulinos.

Hablemos de la consagración, de decir “sí” a Dios, de esa do-nación… ¿Qué sentido tiene para usted hoy la consagra-ción?

En primer lugar, creo que estoy en una congregación de mucha actualidad, incluso más actual que cuando la fundó el beato Santiago Alberione. Así como él, en un prin-cipio, dudaba por dónde tirar, hoy en día yo tengo unos conocimien-tos mayores, una experiencia de muchos años, y veo una sociedad que ha cambiado totalmente… En conclusión, creo que hoy tengo más conciencia de la importancia de esta congregación que el P. Al-berione en sus comienzos.

Cuando ingresó en la Congre-gación, ¿cuáles fueron sus ac-tividades apostólicas?

En primer lugar estudiar y tra-bajar en la imprenta que tenía-mos en Zalla, componiendo las páginas de los libros que saldrían después; trabajé en las máquinas de coser, en las máquinas planas y después estuve varios años es-cribiendo cartas. Me dieron este cargo de escribir a gente pudiente para que nos pudiesen ayudar a pagar el hábito y la carrera, pues éramos jóvenes de familias sen-cillas y humildes (los llamábamos bienhechores o padrinos).

Realmente respondieron mu-chos y generosamente, sobre todo en el País Vasco. La mayor parte de los chicos teníamos nuestro bienhechor. Después empecé a estudiar filosofía: Hice el novicia-do en San Fernando de Henares (Madrid) y en las horas de trabajo fui secretario del ecónomo de la comunidad. Me quedé un año más con el encargo de asistente de los jóvenes, siendo maestro el P. José María Fernández; esto fue el año anterior de ir a Roma en 1963. En Roma estuve cuatro años es-tudiando teología en el Colegio Internacional y trabajando en la máquina Offset con mi compa-ñero de curso Antonio Maroño, que actualmente es el superior Provincial de España.

De arriba a abajo: En Roma, tras su Ordenación; en el monasterio cartujo de

“Porta caeli”, en Serra (Valencia) y en una procesión del Corpus Christi, en Sevilla.

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“En una ocasión colaboré en la película de Ana Mariscal, “El Paseíllo”. Ella quería un sacerdote joven

que conociese bien el rito matrimonial, pues

tenía que “casar” al Puri, un torero de aquel

entonces”

Así que estudió Teología en Roma...

Sí, después de los cuatro años de teología me ordené de sacer-dote en 1967 (recién acabado el concilio Vaticano II). Vine a Madrid para hacer un año de catequesis y a continuación me dieron la res-ponsabilidad de ser maestro de los jóvenes durante cinco años. Des-pués me enviaron a Zalla (Vizcaya) para hacerme cargo nuevamente del grupo de jóvenes durante cua-tro años. El nuevo destino fue la librería de Oviedo durante cinco años. Nuevamente a Madrid para trabajar en la pastoral vocacional con el P. Julio Bayón.

De Madrid di un gran salto hasta Sevilla para trabajar en la librería y como encargado de la pastoral vocacional durante nue-ve años. Salí a muchos colegios e institutos para hablar a los jóve-nes de la Sociedad de San Pablo y de nuestra misión en la Iglesia. Tenía un numeroso grupo de “co-operadores paulinos” con los que trabajé mucho en las parroquias, presentando y vendiendo la Bi-blia y las encíclicas del papa Juan Pablo II. Uno de los párrocos me invitó a formar un grupo de jóve-nes que semanalmente hacíamos oración y de dicho grupo salieron dos vocaciones: una religiosa y un sacerdote diocesano. De nuevo me destinaron a Madrid, donde estu-ve otros tres años en la pastoral

vocacional con el P. Julio Bayón, recorrimos pueblos y ciudades y llegamos a formar un buen núme-ro de jóvenes.

Un nuevo traslado, que fue a Barcelona. Solamente estuve tres años trabajando en la librería. Hice también de capellán de los Her-manos Maristas, y frecuentaba bastante a las Hijas de San Pablo, las Pías Discípulas y ayudaba en una parroquia donde había mucha vida y movimiento de personas que acudían al templo. Me encon-traba muy bien y al comienzo del cuarto año le dije al Párroco que en lo sucesivo haría la homilía en catalán; pero se ve que esa no era la voluntad de mis superiores o del Señor y me mandaron a Bilbao.

En esta ciudad vasca perma-necí cinco años, trabajando en la librería, en la pastoral vocacional, con el grupo de “cooperadores paulinos” y ayudando en varias parroquias. En este período de tiempo, siendo provincial el P. José Antonio Pérez, me llamó desde Madrid para que viniese a la ca-pital a ayudarle durante los dos últimos años de su mandato. Con-cluido su mandato de Provincial seguí con él y con el Hno. Vicente Hernández ayudándole en sus mu-chos y delicados deberes, entre ellos el de la pastoral vocacional. En un determinado momento lo dejó el Hno. Vicente y se integró el Hno. Pepe Pedregosa. Después

de dos años me vino la propuesta de integrarme en la comunidad de Resina, de Madrid, donde pasé dos años colaborando en la expedición de pedidos y otros apostolados. Y, finalmente, he cambiado de comu-nidad de Resina a la de Protasio Gómez para ayudar en el Equi-po de Pastoral y Formación, en la revista “Cooperador paulino”, en la revista interna “Alégrate”, apo-yar los “Cooperadores paulinos” y prestar otros servicios.

Es toda una vida consagrada a Dios y dedicada a la Congre-gación. ¿Qué experiencias le han marcado a lo largo de todo este tiempo?

Lo que me ha marcado ha sido toda la vida en su conjunto con toda esa riqueza de circunstancias que he tenido en todas nuestras Comunidades de España, y por alguna de ellas he pasado hasta cinco veces; pero señalo alguna experiencia que más mella ha dejado en mi persona: Estando trabajando con el P. Miguel Fer-nández, recuerdo que hicimos el primer disco en la Sociedad de San Pablo como también el Evangelio concordado en cuatro cassettes, en lo que participó también el P. Pedro Teodosio, y que tuvieron buena acogida. Otra anécdota a destacar fue que la cineasta Ana Mariscal tenía que hacer una pe-lícula sobre El Puri, un torero que no estaba casado pero que espe-raba un hijo; y que durante una corrida de toros, tras una cogida, y a punto de morir, decidió casarse con la novia. Entonces Ana Maris-cal me dijo que para grabar dicha escena quería que fuese un sacer-dote paulino y joven para grabar la escena del matrimonio. Acepté, y tuve que pasar casi todo el día

El P. Agapito junto a los tres primeros cooperadores paulinos de Valencia, en la Agencia de Cine. En la página de la derecha, foto de arriba: en Bilbao

con varios paulinos (Julio Bayón, José Larrea y Angel Rey).

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para desarrollar dicho trabajo en la plaza de Vista Alegre de Madrid. Después nos hicimos con los dere-chos y la alquilamos muchísimas veces en pueblos y cines parro-quiales. La película se titula “El paseíllo”. Otra experiencia bonita fue cuando estuve de capellán en Barcelona con los Maristas; me invitaron tres días a unos encuen-tros de oración y discernimiento vocacional con unos 500 jóvenes. Viví con ellos una segunda juven-tud. Otra más se realizó cuando, estando de capellán en Sevilla, en la casa Provincial, el Superior me invitó a dar una tanda de ejercicios espirituales a unos 80 hermanos de Congregación ya mayores en Benalmádena (Málaga). Muchos estaban en silla de ruedas. En los tiempos libres tuve la ocasión de hablar bastante con ellos y espe-cialmente escuchándoles las peri-pecias de toda una vida. Personal-mente recibí mucha riqueza de sus palabras y experiencias.

También marcaron mi vida los 14 años en que durante 15 días de vacaciones iba al “Cottolengo” de Las Hurdes (Cáceres) para ayudar a unas religiosas fundadas por el jesuita P. Alegre. Se encontraba en la parte más pobre y recibían sólo a la gente más necesitada, más inválida, que no eran admiti-dos en sus hogares. Los Jesuitas enviaban allí a algunos de sus no-vicios para que hicieran una buena experiencia.

A esta casa del “Cottolengo” iban las mujeres embarazadas de la zona a “dar a luz”; los necesita-dos, a arreglarse la dentadura; a visitar al médico, etc. No admitían a nadie que pudiese mantener-se por sí mismo y lo hacían todo gratuitamente. Comían después de haber servido la comida a los enfermos. Allí hice trabajos que no los habría hecho con mi propia familia. Buena parte de la gen-te vivían en chabolas y sin luz. Se subía al “Cottolengo” por un camino que apenas podía subir un coche y, para ir a celebrar a algunos de los poblados, había que hacerlo por caminos, como se suele decir, de cabras. En un momento dado decidí no ir a Las Hurdes, por motivos del trabajo vocacional, y decidí acudir, durante

18 años en tiempo de vacaciones y por 15 días al campamento de Santo Domingo de Silos con los jóvenes y familias de “Cristianos sin fronteras”. Recuerdo que el Año Mariano de 1988 nos juntamos unos cinco mil jóvenes en el mis-mo campamento. Este movimiento católico fue fundado por el sacer-dote José Valdavida y la Hija de la Caridad sor Carmela Suances. Fueron años de mucha ilusión y también de trabajo pastoral. Esto lo saben bien otros compañeros paulinos y alguna Hija de San Pa-blo que fueron antes que yo.

Después de tantos años de consagración, de dedicación a la misión paulina, ¿qué les diría hoy a los jóvenes que tie-nen inquietud religiosa, sobre esta entrega a Dios?

Que estemos convencidos no-sotros los mayores de vivir bien nuestra propia vocación de Pau-linos. Que no perdamos nunca la esperanza, porque el Señor llama y seguirá llamando. Estamos pa-sando por un túnel, pero se divisa la salida, no es un túnel cerra-do. No debemos desanimarnos ni desanimar a los futuros jóvenes que vaya llamando el Señor para trabajar en su viña. También les diría a los jóvenes que se ena-moren de Cristo, porque quien no se enamora no ama, y el que no ama no puede vivir bien la vida consagrada ni el matrimonio. Que tengamos ese contacto con Dios hasta el punto de enamorarnos. Siempre he tenido la ilusión de llevar a todas partes mis inquie-tudes, y para esto no hay fecha de caducidad. Esta misión se hace donde Dios quiere.

Junto a estas

líneas, el P. Agapito

Aliende en el balcón

del piso de Barcelona, foto toma-

da por el P. Miguel

Rojo.

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SAnTOS DE nUESTRO SIGLO

GiannaBeretta

Molla

No hay amor más grande que dar la vida por un ser humano, máxime por un ser pequeño, insigni-ficante, en el seno materno. Gianna Beretta Molla, es un ejemplo de vida entregada, ofrecida para dar vida, la propia vida. Su donación cobra hoy una fuerza especial. En pocos momentos la vida en el seno de la madre se ha visto más amenazada que en el momento actual, donde la legalidad de la palabra preembrión se traduce para algunos en un ser que todavía no es persona, donde el niño no

nacido es una expresión muda de un ser no conocido, sin nombre, ni figura aparente… En una civilización que olvida la paternidad de Dios que nos crea por amor y con amor, aparece una figura modélica, esbelta, moderna y atrayente. Juan Pablo II en aquella bonita y soleada mañana en la plaza de San Pedro, el 16 de mayo de 2004, proclamó a Gianna, santa. Ella era modelo de vida para nuestro mundo, modelo de madre, de médico pediatra, de creyente. Su fe elevó a la máxima expresión los pequeños detalles de cada día, en su entrega a la tarea realizada con el máximo amor. Los santos que hoy necesita el mundo y la Iglesia son los santos sencillos de cada momento, conscientes de su pequeñez y su miseria, pero también convencidos del inmenso amor que Dios les tiene. Así brota espontáneamente el deseo de transparentar en sus vidas ese mismo Amor. Gianna Beretta nace en Magenta (provincia de Milán) el 4 de octubre de 1922. Recibe una esmerada educación cristiana que, siendo madre, transmite a sus hijos. En sus años de universidad entrega su vida en la Acción católica. Gianna es una gran educadora de la juventud, con ilusión y abnegación. Muchas de aquellas jóvenes la recuerdan con entrañable cariño, jovial, dinámica, alegre, deportista y emprendedora. No era un estereotipo de “mujer perfecta”, nos cuenta su esposo, sino una “mujer normal que amaba la vida”.

Es consciente de que la medicina será un campo estupendo para ser los brazos largos de Jesús, y elige este camino como misión. Su ilusión de llevar sus inquietudes más allá de sus fronteras, al Amazonas, no se vería cumplida, pero es consciente de que la misión consiste en estar donde Dios quiere. Obtenido el título de Doctora en Medicina y Cirugía en 1949, abre desde la caridad, un ambulatorio de consulta en Mesero, cerca de Magenta. Se especializa en Pediatría atendiendo particularmente a madres, niños, ancianos y pobres. Encuentra tiempo también para acercarse al Creador desde la naturaleza; su pasión por la montaña, el alpinismo, el esquí, el tenis, son ocasión para expresar su alegría y ganas de vivir.Conoce a Pietro Molla, con quien vive un periodo de noviazgo y discernimiento. Descubre que Dios la llama al matrimonio y crece en ambos la ilusión de formar una familia fecunda y llena de vida, desde la savia de su fe. El día 24 de septiembre de 1955 contraen matrimonio. Gianna da a luz en 1956 a Pierluigi, su primer hijo; se-guirían alegrando a aquella familia, Mariolina y Laura. Gianna armoniza ese difícil equilibrio de madre, esposa y médico. Al cumplirse en 1961 el segundo mes de un nuevo embarazo, comienza una etapa de sufrimiento para Gianna y su familia. El diagnóstico: tumor en el útero, cáncer que exige una intervención quirúrgica. Suplica al cirujano que a toda costa salve la vida que lleva en su seno. Es consciente de que su cuerpo es el templo de una criatura maravillosa que Dios le ha regalado. Se deja en manos de la providencia. Había que decidir entre la vida de la niña o la suya propia. Ella como especialista, era consciente del riesgo que corría. A pesar del consejo de

Rogelio Cabado

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Los santos que hoy necesita el mundo y

la Iglesia son los santos

sencillos de cada momento,

conscientes de su

pequeñez y su

miseria, pero también

convencidos del inmenso amor

que Dios les tiene

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sus colegas en la profesión, no duda en afirmar: «Si hay que decidir entre mi vida y la del niño, no dudéis; elegid -lo exijo- la suya. Salvadlo», como así sucedió. Pide al Se-ñor que nada malo suceda a su hija. El 21 de abril de 1962 da a luz a Gianna Emmanue-la. Ocho días más tarde entre indecibles dolores, repite la jaculatoria: “Jesús, te amo; Jesús, te amo”. Fueron sus últimas palabras. Tenía 39 años. Su vida así entregada, fue y sigue siendo modelo y fortaleza para muchos padres y madres de familia.

Fue beatificada por Juan Pa-blo II el 24 de abril de 1994, Año Internacional de la Fa-milia. Diez años más tarde, el 12 de mayo de 2004, es presentada como modelo de santidad. En el día de su canonización, estaban pre-sentes su marido y sus hijos, entre ellos Gianna Emmanue-la, cuyo testimonio emocionó a cuantos allí estaban. Hoy continúa los pasos de su ma-dre, entregada a una huma-nidad sufriente, a la que se dedica con pasión.

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CIDEP: Clausura de la VIII Asamblea General

VIDA PAULInA

Los trabajos de la VIII Asamblea General del CIDEP (Centro Iberoamericano de Editores Paulinos), celebrada en Apelaçao (Lisboa, Portugal) han llegado a su fin. La clausura oficial

tuvo lugar el 14 de noviembre pasado, en la Capilla de las Apariciones del “Santuario Nuestra Señora de Fátima”, con una eucarística presidida por el P. Silvio Sassi, Superior General de la SSP, que se pudo seguir on line. Los Superiores Mayores (SM) de Iberoaméri-ca y los Directores Generales (DG) de Aposto-lado de las siete Circunscripciones del CIDEP aprobaron el “Documento final” para el próxi-mo trienio, que pronto será puesto a disposi-ción de todos los Paulinos de Iberoamérica. Por otra parte, los miembros de la VIII Asamblea General del CIDEP han creído oportuno pro-seguir con los mismo Estatutos, introduciendo pequeñas modificaciones, que serán sometidas a la aprobación definitiva del Gobierno General.Antes de cerrar las sesiones de trabajo el Supe-rior General tomó la palabra para agradecer la participación de todos. Finalmente, a propuesta de la Junta de Supe-riores Mayores (JSM) de Iberoamérica, el P. Silvio Sassi ha nombrado Administrador Delegado del CIDEP para el próximo trienio (2010-

2013) al P. Salva-dor Ruiz Armas (mexicano, de 37 años), fijando la Sede operativa del Centro Iberoame-ricano de Editores Paulinos (CIDEP) en la Casa Provin-cial de los Paulinos brasileños, en São Paulo.Asimismo, teniendo en cuen-ta las Visitas canó-nicas actualmente

en curso a algunas Circunscripcio-nes del CIDEP, el P. Valdir José de Castro continuará como Presidente del CIDEP hasta la celebración de

la próxima Junta de Superiores Mayores de Iberoamérica, que po-dría celebrarse en mayo de 2011.

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ESPAÑA

Inaugurada en Murcia una librería San Pablo

Más de 170 personas acudieron en la tarde del miércoles, 20 de oc-tubre de 2010, a la inauguración y bendición de la librería San Pa-blo de Murcia, ceremonia presidida por el obispo de Cartagena-Murcia, monseñor José Manuel Lorca Pla-nas, que contó con la presencia de importantes autoridades eclesiásti-cas y civiles, respectivamente de la diócesis de Cartagena-Murcia y de la Comunidad Autónoma de Murcia. Por parte de San Pablo asistieron los principales responsables: El P. Antonio Maroño, Superior Provincial; el P. Juan Antonio Carrera, Director General; el Diácono Octavio Figueredo, Director Editorial; el P. Lázaro García, Direc-tor Comercial y el P. Benito Pérez, Director Administrativo, entre otros Paulinos y colaboradores laicos que participaron en el solemne acto. Ter-minada la ceremonia de bendición, se sirvió un cóctel en el recientemen-te restaurado Casino de la ciudad. La inauguración de la librería, ubicada en la calle Apóstoles, 6, frente a la Ca-tedral murciana, es para la Sociedad de San Pablo un reto y a la vez la con-solidación de un proyecto, que definie-ra el beato Santiago Alberione: “Lle-var la Palabra de Dios a los hombres de hoy con los medios de hoy”.

Encuentro Europeo de Coordinadores de Formación y P.V.

Del 20 al 23 de Octubre pasado tuvo lugar en Madrid (España) el Encuentro Europeo de Coordina-dores Generales de Formación y P.V. En ella, los representantes de las provincias de Italia, Polonia, Portugal y España pudieron com-partir sus inquietudes y proyec-tos a nivel vocacional y formativo.

ITALIA

Eucaristía en memoria del beato Timoteo Giaccardo

El 22 de octubre pasado tuvo lugar una solemne eucaristía en memoria del beato Timoteo Giaccardo, en la cripta del Santuario Reina de los Apóstoles

ESPAÑA

Nuevo equipo directivo de Cooperador Paulino

Como ya es sabido, el hasta ahora director de Cooperador Paulino (Es-paña), P. José Antonio Pérez, SSP, ha sido destinado a Roma con el encargo de agilizar las causas pau-linas pendientes de beatificación así como otros asuntos de interés para la Familia Paulino. En todo ello, des-de aquí lo acompañamos en la ora-ción. Por otra par-te, ha sido nom-brado un nuevo equipo de trabajo encargado de la publicación de Co-operador Paulino, continuando como Presidente el P. Antonio Maroño, Provincial de la SSP; y siendo elegido director de la revista en España, el Hno paulino José Ignacio Pedregosa (en la foto); redactor-jefe, el P. Francisco Ares, SSP; y miembros del Consejo de Redacción, entre otros, V. L. Vega, Teresa Córdoba, Isabel García, Vi-cente A. Guillamón y Concepción López.De la maquetación se encargará Mario Herrera, paulino. Esta reno-vación de la revista, tanto en con-tenidos como en maquetación, está concebida para favorecer un nuevo impulso evangelizador.

Los miembros de la VIII Asam-blea General del CIDEP agrade-cemos a los Paulinos portugue-ses su hospitalidad y a todos los Paulinos de Iberoamérica (jó-venes, adultos y ancianos), sus oraciones por el éxito de nues-tros trabajos, cuyas conclusiones encomendamos a nuestro beato Fundador, el P. Santiago Alberione.

(Roma), presidida por el P. José Anto-nio Pérez Sánchez, postulador paulino para la Causa y Canonización de los santos. Desde esta página enviamos un fraternal abrazo al P. José Anto-nio Pérez, SSP, quien durante mu-chos años dirigió, con acierto, nues-tra revista Cooperador Paulino.

Encuentro Anual en Sevilla de Anunciatinas y Santa Familia

Los miembros de los Institutos Paulinos Virgen de la Anunciación y Santa Familia han tenido su En-cuentro Anual en Sevilla, del 5 al 8 de diciembre. Los acompañaron el P. Agapito Aliende, nuevo Delega-do de los Institutos, y los herma-nos Jose Ignacio Pedregosa y Khris Llacer, coordinador general de Pas-toral y Formación y Delegado Pro-vincial de Pastoral Vocacional, res-pectivamente. El encuentro ha sido de una gran riqueza para todos.

Recomendamos

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RESEÑAS

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En las obras de T.Merton encontramos su deseo de «no ser nada» para que Cristo lo sea todo en él; su crítica ayuda a cam-biar el mundo y el deseo de llegar a ser un contemplativo; la vida de fe y la duda; su inmenso deseo de soledad y silencio, y su necesidad de vivir para los «otros»; la presencia de Dios y su ausencia; la justicia social y la pobreza evangélica.

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Thérèse NéelENCUENTROS CON JESÚS

Paulinas, Madrid. 152 pág. 14 euros

La autora da la palabra a los testigos que han conocido a Jesús. La manera en que se relatan estos encuentros logra que el lector se sienta implicado y activo en los hechos que se narran. Este libro ha lo-grado recrear bellamente y comunicar en sus páginas, con bastante credibilidad, el impacto personal que pudo suponer para los personajes que aparecen en el texto, el encuentro personal con Jesús.

Keith BeaumontEL CARDENAL NEWMANCiudad Nueva, Madrid. 128 pág. 10 euros

Roger LloydCARTAS DE LA IGLESIA PRIMITIVA

Buenanueva, Madrid. 226 pág. 20 euros. Pedidos:91-759 79 68

Tras el Calvario, ¿cuál era el estado de áni-mo de los que siguieron a Jesús? Y tras la resurrección y la venida del Espíritu Santo, ¿cuál fue la actitud de los primeros jerar-cas de la iglesia incipiente? A través de la pluma de Roger Lloyd, y mediante una supuesta correspondencia cruzada entre diversos miembros de la iglesia primitiva, reales unos, imaginarios otros, siguiendo con fidelidad el curso de los hechos, nos adentramos en este tiempo apasionante.

Fernando RivasDICCIONARIO DE LITERATURA

PATRÍSTICASAN PABLO, Madrid. 1472 pág. 70 euros

Con más de 160 voces, este diccionario permite componer un panorama orgáni-co de la historia literaria del cristianismo antiguo presentado en los hechos y per-sonajes de particular relieve. Se ha tenido en cuenta el carácter peculiar de la historia del cristianismo antiguo, que no siempre se desarrolló de forma uniforme, sino con especificaciones regionales. Y se ha puesto especial cuidado en el aspecto literario.

Consuelo SantamaríaEL DUELO Y LOS NIÑOSSal Terrae, Santander. 197 pág. 12 euros

Con frecuencia los adultos no saben qué decir y alejan al niño de cualquier es-cenario de dolor, para evitar que sufra. Es en este momento cuando empieza a activarse la fantasía infantil y se hacen muchas preguntas para las que, en ge-neral, no reciben respuesta: ¿Por qué llora papá y mamá? ¿Cuándo volverá el abuelito? ¿Hace daño morirse? El libro trata de ayudar a los adultos a contestar a estas preguntas «sin respuesta».

PABLO CERVERA BARRANCO-ÁNGELA PÉREZ GARCÍA (Eds.), CANtAd A diOs CON sALmOs, himNOs y CÁNtiCOs iNsPiRAdOs, sAN PABLO, mAdRid 2010. 1792 PÁGs. 32 EuROs.

ENSALZADLO CON CANTOS

Pastor anglicano y jefe de filas del Movi-miento de Oxford, corriente de renova-ción teológica, litúrgica y espiritual del anglicanismo. Su esfuerzo renovador lo llevó por caminos imprevistos y en 1845 es recibido en la Iglesia Católica. León XIII lo nombra cardenal por su leal apor-tación a la Iglesia Católica durante más de 30 años. Se le llamó «el pensador in-visible del Vaticano II». Fue proclamado beato el 19 de septiembre de 2010.

El libro que presentamos en esta ocasión trae consigo el aval del abad de Silos, el P. Clemente de la Serna, que considera que esta es «la mejor antología de poemas para orar», y que está «llamada ciertamente a enriquecer mente y corazón en las almas de los lectores». En efecto, esta nueva entrega de la colección Magnificat, que recopila más de 1.300 de los poemas y oraciones que han ido apareciendo a lo largo del tiempo en la excelente revista del mismo nombre, es, desde su aparición, la más completa y exhaustiva antología no de poesía religiosa, sino de poesía hecha oración. Un gran acierto, sin duda, de sus editores, Pablo Cervera y Ángela Pérez, director y redactora jefe, respectivamente, de la revista Magnificat. ÁLVARO sANtOs

Gianluigi Pasquale365 DÍAS CON EL PADRE PÍO

San Pablo, Madrid. 384 pág. 14 euros

Esta obra ofrece un pensamiento para cada día del año del Padre capuchino, uno de los santos más conocidos y queridos del siglo XX. Todos los pensamientos del P. Pío se han obtenido del Epistolario, es decir, de las cartas escritas por el santo a sus directores espirituales, los padres Benedetto y Agostino da San Marco de Lamis, y a las personas a las que él dirigía personalmente.

Enrique Eguiarte BendímezCUENTOS PARA LA CATEQUESIS

CCS, Madrid. 192 pág. 10,30 euros

Juan José BartoloméPABLO DE TARSO

CCS, Madrid. 575 pág. 29,70 euros

Ignacio IglesiasMISIONERO

Sal Terrae, Santander. 213 pág. 11 euros

A través de las propias palabras de Pedro Arrupe, podemos, asomarnos al itinerario vital de un hombre que consagró su vida a proclamar el evangelio. General de los jesuitas, hombre de Iglesia, testigo abru-mado por los efectos de la bomba atómica en una población vulnerable, líder de los tiempos intensos del posconcilio, profeta de la fe y la justicia. Fue un hombre con una misión.

Este libro está pensado para que sirva a la docencia como una primera aproximación sistemática al Apóstol de los gentiles. El autor advierte: «no ha de buscarse en este texto ni el relato auténtico del Pablo histórico ni una nueva versión de él; se ha querido tan sólo presentar al Pablo que hoy conocemos» situar a Pablo dentro del cristianismo primitivo; comprender sus cartas como parte de su vida y presentar una síntesis de su pensamiento.

Cada cuento va acompañado de una lista de valores como una ayuda para su aplicación en la catequesis. Se ha incluido un texto bíblico y alguna cita de san Agustín. Se añade también un bre-ve recuadro en el que se ofrecen pistas y orientaciones para el catequista. Los destinatarios son adolescentes-jóvenes de confirmación y postconfirmación.

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Himno a la Virgen de la Almudena

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RESEÑAS

La revista Cooperador Paulino no tiene ánimo de lucro, está concebida como un medio al servicio de la difusión de la Palabra de Dios. No obstante, animamos a los lectores a participar en los gastos

generales de la revista y agradecemos su colaboración mediante una aportación voluntaria.

SAN PABLO

Ejercicios Espirituales PROFUNDIZACIÓN EN LA

EXPERIENCIA DE DIOSSal Terrae, Santander. 20 euros

Los materiales que ofrecemos son lo que san Ignacio denomina «Ejercicios de Pri-mera Semana». Aquí van a cobrar más importancia la oración y el examen como herramientas típicamente ignacianas. Este tercer itinerario ha sido pensado para ser utilizado en grupo o individual-mente, con la ayuda de un guía que vaya acompañando el proceso.

Los santos, maestros de oración ESCUELA DE GRANDES

ORANTESSan Pablo, Madrid. 384 págs. 16,50 euros

Este libro, de la Colección de Espi-ritualidad Magnificat, recoge lo más significativo de la oración ejercitada por los grandes maestros orantes. A modo de ejemplo, diremos que aborda la oración de Teresa de Lisieux, el Cántico del hermano Francisco, la oración de Ignacio de Loyola, la ex-periencia de oración de Santa Teresa de Jesús, etc.

Libro-entrevista a BenedictoXVI LUZ DEL MUNDO

Herder, Barcelona. 227 pág. 14,95 euros

¿Imitará Benedicto XVI a Juan XXIII, convocando un concilio? ¿Qué diferencia a la Iglesia de un imperio multinacional de negocios? ¿No se podría partir de la base de que después de 2000 años el cristianismo simplemente, se ha agota-do? Estas son algunas de las preguntas que el periodista Peter Seewald plantea a Benedicto XVI en el nuevo libro-entre-vista Luz del Mundo, presentado en la Santa Sede el 23 de noviembre pasado.

“Para Dios todo creyente es un místico por el hecho de tejer una fidelidad en su alma. Con esto quiero decir -afirma el autor- que los creyentes en Dios son hombres y mu-jeres que confían tanto en su Voz, en su Palabra, que han aprendido a descansar en Él”. Este libro nos habla desde la expe-riencia del pueblo santo de Israel, llamado a ofrecer al munco al Mesías de Dios, “la Luz incorruptible de su Palabra” (Sb 18,4).

Antonio PavíaDÉJAME OIR TU VOZ

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Su contenido está sistematizado en dos ejes: las parábolas de la montaña y una metodología en forma de talleres que responde muy bien a la edad de los destinatarios. Su finalidad: preparar los corazones para que no estén cegados y sea derramado en ellos, plenamente, el Espíritu Santo. Su reto: entrenarse para convertirse en colaborador activo en la tarea que Jesús nos dejó.

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LAIMAGEN SE HACE PARÁBOLARelatos que dan vidaPaulette Boudet - 120 páginas - P.V.P. con IVA: 10,00 €

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JOY y la búsqueda de la felicidadFrançois Garagnon - 304 páginas - P.V.P. 15,00 €

Los de libros François Garagnon nos muestran a un testigo en ardientebúsqueda de la dimensión espiritual.Joy

Joy

es una niña muy especial, que hace de guía a su amigo Sagamore conun místico y jovial entusiasmo. es un torrente de vida que provocaafablemente a todo el que se encuentra. La búsqueda de seconvierte en un relato apasionante, que llega hasta lo más profundo delcorazón.

Sagamore

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NOVEDADES

Hacia el Nuevo ConcilioEl paradigma de la modernidad en la Era de la Ciencia

Un riguroso razonamiento construido desde la ciencia, la fi losofía, la fi losofía de la historia y la teología.

Javier Monserrat, jesuita y profesor en la Universidad Autónoma de Madrid, aborda en este ensayo de alto nivel una tarea muchas veces enunciada, pero en pocas ocasiones expuesta con orden sistemático: proponer en qué debe consistir la adaptación pendiente de la Iglesia al mundo moderno.

DiosSí, pero, ¿qué Dios?

¿Cómo hablar de alguien a quien no hemos visto, ni oído, ni tocado con nuestras manos? ¿Cuál es su nombre?

¿Cuáles son sus rasgos característicos?

Este libro trata de responder a estos interrogantes partiendo de un análisis profundo de la propia palabra, Dios y recoge una serie

de refl exiones sobre los distintos nombres de Dios, sus rasgos, atributos... y una interesante propuesta de imagen de Dios para el

futuro.

Testigos de un Evangelio obrero¿Cómo experimentan hoy los militantes de la Juventud Obrera Cristiana el gran acontecimiento liberador de Jesús de Nazaret?

Este libro, a través de los testimonios de los jóvenes cristianos afi liados a la Juventud Obrera Cristiana (JOC), nos habla de la sencillez y de la grandeza de cada joven, de las posibilidades siempre abiertas, por Dios, para cada vida humana.

El «espíritu de Asís»Una contribución a la historia de la paz

Una invitación a contribuir a la historia de la paz y a superar nuestras divisiones históricas.

En 1986, Juan Pablo II convocó el primer Encuentro de las grandes religiones mundiales en la ciudad de Asís. Este libro

recoge los mensajes que Juan Pablo II, y posteriormente Benedicto XVI, han escrito con motivo de estos encuentros

celebrados en las principales ciudades europeas y en Jerusalén.

Javier Monserrat

J.O.C

Vicente Borragán Mata

Jean- Dominique Durand

768 págs. 32 €

288 págs. 12 €

224 págs. 12 €

260 págs. 14 €

+8 págs. extra de fotografías

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